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[Aprendizajes] Autocontrol de Kelly McGonigal

Según diversos estudios, las personas citan la falta de fuerza de voluntad como el mayor obstáculo para alcanzar sus
metas. Algunos mencionan que pueden estar en control de la misma un momento, pero al siguiente se agobian y la
pierden fácilmente. También hay quienes dicen que se esfuerzan y logran mantenerla gran parte del día, pero
terminan muy agotados y preguntándose si vale la pena el esfuerzo. ¿Existirá alguna solución para esto?

LA CIENCIA DE LA FUERZA DE VOLUNTAD


Con el fin de solucionar este problema, Kelly McGonigal realizó diversas investigaciones científicas para descubrir
cómo los seres humanos podemos desarrollar una mayor fuerza de voluntad en nuestro día a día. Estos estudios
revelaron que en su gran mayoría perdemos el control debido no a factores externos que no controlamos sino a
funcionamientos internos de nuestra mente que desconocemos. A continuación, veremos cinco aprendizajes de
estas investigaciones que si los ponemos en práctica nos permitirán solucionar esta situación.

Aprendizaje N°1: Practica a diario


La fuerza de voluntad es como un musculo. Cuando la usamos en exceso se desgasta, pero si la
usamos regularmente se fortalece. En base a esto, debemos buscar espacios en nuestro día a día
para practicar su uso con algo que no requiera mucho autocontrol de nuestra parte. Mejorar la
postura corporal, hacer 5 planchas o registrar gastos del día son buenas opciones para empezar.

Aprendizaje N°2: Haz ejercicio


Normalmente, los seres humanos nos enfrentamos a cierta cantidad de estrés en el día. El problema
con esto es que toda la energía empieza a concentrarse en el cuerpo, dejando al cerebro con una
mínima reserva que no le permite resistirse a las tentaciones que puedan aparecer. Hacer ejercicio o
mantenernos en constante movimiento a lo largo del día ayudará a regresar la energía al cerebro.

Aprendizaje N°3: Define metas a largo plazo


Estudios de imágenes cerebrales han revelado que usamos dos zonas distintas de nuestro cerebro
para pensar en nuestro yo presente y nuestro yo futuro. Esto hace que para él sean como dos
personas distintas y priorice siempre la gratificación instantánea. Establecer metas a largo plazo y
visualizarlas recurrentemente hará que el cerebro vea nuestros dos yo como una sola persona.

Aprendizaje N°4: Deja de prohibirte cosas


Nuestro cerebro tiene un proceso interno que anda monitoreando lo que queramos buscar o evitar.
Cuando decimos “¡Prohibido esto!”, nuestro cerebro se pone alerta ante posibles amenazas, pero si
no tenemos energía suficiente, estaremos por el contrario promoviéndolas ya que no nos podremos
resistir. Debemos cambiar a “¡Haré esto!”, así el cerebro buscará lo que queremos hacer.

Aprendizaje N°5: Aplica “La Regla de los 10 Minutos”


Cuando hacemos algo bueno, los seres humanos solemos relajarnos, dejarnos llevar por nuestros
impulsos y darnos ciertas licencias. Por ejemplo, cuando las personas van al gimnasio suelen relajarse
y romper su alimentación balanceada durante la semana. Cada vez que sintamos alguna tentación,
debemos esperar por lo menos diez minutos y recién luego hacerlo si seguimos motivados.

Bonus: Cuidado con “El Efecto Aureola”


De vez en cuando, las cosas que queremos evitar tienen alguna virtud colocada para justificarlas. Los
descuentos en los precios de las ropas o la denominación “Light” en algunas comidas de altas calorías
son ejemplos muy comunes de la aplicación de este sesgo. Darnos un intervalo de tiempo antes de
tomar acción dará tiempo a nuestro cerebro a pensar si en verdad necesitamos hacerlo.

EL GRAN SECRETO PARA AUMENTAR NUESTRA FUERZA DE VOLUNTAD


Una vez que empezamos a practicar estos nuevos conocimientos podemos desarrollar la creencia de que la vida es
una lucha constante por controlarnos a nosotros mismos, pero no es así. Las personas con mayor fuerza de voluntad
no viven en lucha consigo mismas. Han aprendido a aceptar cada una de sus partes y a ser conscientes de las
mismas. Podemos un día dejar el trabajo para mañana o ceder ante una rica hamburguesa pero siendo conscientes de
la decisión que vamos a tomar y pensando cómo luego iremos trabajando para que no afecte nuestras metas a futuro.

© 2022 | Daniel Rosan

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