REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD ALONSO DE OJEDA

FACULTAD DE INGENIERIA
VICERRECTORADO ACADEMICO

ANÁLISIS DEL ESPIRÍTU

EMPRESARIAL EN LAS
ORGANIZACIONES

Nombre: Brusco, Héctor Manuel.

C.I:30.086.124
 INTRODUCCIÓN

En el presente trabajo, se desarrollará un análisis profundo referente al

espíritu empresarial, el cual se constituye como una característica de gran
importancia en toda organización, ya que permite el desarrollo y progreso en un
determinado negocio.

Debe destacarse que el espíritu dependerá siempre de aquella persona

que tomé el rumbo de una organización o empresa, bien sea el director o
gerente, el cual se encargará de llevar las nuevas ideas, proyectos y
conocimientos que constituyen en sí, el espíritu empresarial.

Asimismo, se conocerán los pasos y valores que debe tener todo

empresario para obtener excelentes resultados en materia empresarial, y que
le permitirán lograr una mejora no solo económica, sino también social.
 DESARROLLO

1. Concepto de Espíritu

El espíritu no es más que la parte inmaterial que constituye al ser

humano, es decir, aquella que no es tangible o que se puede percibir a simple
vista, ya que depende de la capacidad de sentir y pensar, conociéndose como
una perspectiva emocional e intelectual.

2. Concepto del Espíritu Empresarial

El espíritu empresarial se conoce como aquella capacidad o habilidad del

hombre para hacer realidad una oportunidad en un determinado negocio. La
materialización de esta oportunidad dependerá en su totalidad de la cualidad y
habilidad social y directiva que disponga el empresario para obtener un
resultado favorable en una organización.

El espíritu empresarial ha sido conceptualizado por la Comisión Europea

(1998), como “un proceso por el que las personas descubren continuamente
las ocasiones de negocio y actúan en consecuencia, inventando, produciendo y
vendiendo bienes y servicios”

Asimismo, puede decirse que el espíritu empresarial se constituye por una

manera de pensar, razonar y actuar, que se encuentra vinculada y suscitada
por la búsqueda de oportunidades en un negocio. El resultado es la creación,
mejora, realización y renovación del valor de la empresa; no sólo el valor
económico, sino también el social, y que además no solo busca beneficios para
los propietarios (empresarios), sino también para todos los grupos de interés
que hay vinculados, como los empleados, clientes, proveedores, entre otros.

Atendiendo a esta definición podemos concretar que se trata de una

actitud en la cual se aprecia la motivación y la capacidad de las personas para
identificar, seguir y explorar una oportunidad de negocio, obteniendo algún
producto o servicio que agrega un valor extra a los ya existentes.
 También puede decirse que, el espíritu empresarial constituye el conjunto
de actitudes y competencias que le permiten a un profesional desempeñarse
eficientemente en las organizaciones, ya sean públicas o privadas, según lo
expuesto por Borjas.2001.

3. Enfoques de Espíritu Empresarial.

El espíritu empresarial tiene un amplio desarrollo socio-económico en la

creación de empresas y en la formación de profesionales. Entre los enfoques
que se presentan están: el de la Comisión Europea (1998), Romero García
(2000), Borjas (2001, 2002, 2004) y Varela (2008).

El espíritu empresarial está marcando pauta en la formación y

consolidación de una cultura empresarial creando un entorno económico
favorable a la generación, crecimiento y transmisión de empresas productivas y
altamente rentables.

 Enfoque de la Comisión Europea sobre Espíritu Empresarial: En

la última década, el espíritu empresarial ha venido tomando gran relevancia
en Europa, su gobierno ha formulado una política para el fomento del
espíritu empresarial y la creación de empresas, dándole el impulso
necesario para tomar acciones concretas para su aplicación y desarrollo en
el ámbito nacional y regional en materia de educación en cooperación con
las organizaciones empresariales. Para la Comisión Europea (1998), “la
importancia del espíritu empresarial está basado en un proceso dinámico
por el que las personas descubren continuamente las ocasiones de negocio
y actúan en consecuencia, inventando, produciendo y vendiendo bienes y
servicios” (p.3). Se puede

 Enfoque de Romero García sobre Espíritu Empresarial: Considera

que el espíritu empresarial “está orientado a pensar en personas con
capacidad de iniciar comportamientos dirigidos a crear nuevas empresas”.
Señala también que, “la columna vertebral del espíritu empresarial es la
motivación al logro”. La motivación es aquella que impulsa a las personas a
tomar riesgos y a fortalecer sus estrategias, para enfrentar con seguridad y
 confianza en sí mismo, las adversidades propias, para luego posteriormente
ser los poseedores del éxito esperado; desarrollar profesionales con
capacidad de espíritu empresarial, con valores fundamentales de visión,
flexibilidad y responsabilidad, para enfrentar retos y desafíos del mundo
globalizado y competitivo.

 Enfoque de Borjas sobre el Espíritu Empresarial: Define al

“Espíritu Empresarial como el conjunto de actitudes y competencias que le
permiten a un profesional desempeñarse eficientemente en las
organizaciones públicas o privadas, permitiendo su Desarrollo”. En opinión
del autor, no existe una definición única y absoluta de lo que es Espíritu
Empresarial, esta depende del enfoque del autor, el momento del
desarrollo del tópico y los aspectos variables o criterios que el investigador
ha decidido utilizar de acuerdo a su estilo de pensamiento.

4. Impacto del Espíritu Empresarial

Se debe destacar que en la actualidad el espíritu empresarial tiene gran

impacto en materia de ocupación, competitividad, desarrollo personal y
bienestar social, los cuales se verán a continuación:

Ocupación: En los países con mayor índice de iniciativa

empresarial existe mayor tendencia a la reducción de las tasa de
desempleo.
Competitividad: A mayor número de empresas mayor
competitividad, mayor estímulo de eficacia y de innovación, mejora de la
productividad y la competitividad.
Desarrollo personal: El espíritu empresarial cubre necesidades
como la realización personal y la independencia.
Bienestar social: Las nuevas iniciativas pueden implicar la
prestación de servicios de interés para la comunidad en áreas de
sanidad, educación o bienestar.

5. Valores que deben rigen la mente de un emprendedor

 Los emprendedores suelen modular su comportamiento siguiendo
convicciones acerca de cómo deben relacionarse, desde el punto de vista
personal y social. En general, los valores contienen un elemento de juicio que
incorporan ideas personales sobre el bien y lo que no es correcto.

Un dato a tener en cuenta es que los valores suelen caracterizarse por

ser estables y duraderos, complicando su modificación, ya que adquieren a lo
largo de la vida, sobre todo en etapas primerizas de socialización y en el
entorno más cercano, como lo es el familiar.

Por lo tanto, los valores que tenga una persona, no siempre serán los
mismos que otras tengan, por lo que, es de vital importancia que la persona
encargada de la directiva posea los valores correctos para llevar las riendas de
una empresa, los cuales son los siguientes, según Rodrigo Valera V.:

Tener iniciativa y convicción en la toma de decisiones

Liderazgo
Autonomía
Capacidad de control y soluciones de problemas
El deseo de superación y progreso
Capacidad de identificar oportunidades
Amplia visión al futuro
Habilidades creativas e innovadoras
Aceptar los cambios

6. Importancia del espíritu empresarial

El espíritu empresarial es una actitud en la que se refleja la motivación y

la capacidad del individuo, independientemente o dentro de una organización a
la hora de identificar una oportunidad y luchar por ella para producir nuevo
valor o éxito económico.

7. Metas del espíritu empresarial

 Las metas o los deseos de un empresario algunas veces pueden ser
excesivos, ya que no conocen los límites en sus capacidades, es por ello que
las metas más recomendables o apropiadas son las moderadas, porque ellas
retan las capacidades y al ser obtenidas, potencian a las personas para fijarse
objetivos de mayor dificultad.

Asimismo, debe recordar el empresario que sus rivales ya están

establecidos, y que es él quien tiene que ganarse su puesto en el mercado,
exigirse más es la vía para lograr mejores desempeños, los cuales permiten
ganar nuevos clientes y asegurar la lealtad de los ya existentes.
 CONCLUSIÓN

En conclusión puede decirse que, el espíritu es una actitud del ser

humano, que se refleja en la motivación y la capacidad de éste, de forma
independiente o dentro de una organización, a la hora de identificar una
oportunidad y luchar por ella para producir un nuevo valor o éxito económico o
social.

Ahora bien, el espíritu empresarial, es aquel utilizado en las empresas u

organizaciones para alcanzar fines que ya han sido propuestos para
incrementar el tamaño exponencial de la misma, lo cual dependerá de los
valores que le hayan sido inculcados al director o gerente, debido a que será él
el encargado de llevar las riendas de los próximos proyectos, y de emplear sus
ideales y cualidades.