Neoclacismo

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La antigüedad como modelo del neoclasicismo francés

Jacques-Louis David (1748-1825). La muerte de Sócrates (1787). Óleo sobre tela (129,5
x 196,2 cm). Museo Metropolitano, Nueva York. 2
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La antigüedad como modelo del neoclasicismo francés

El neoclasicismo es un estilo artístico que se desarrolló principalmente en Francia desde finales del siglo XVIII y
principios del siglo XIX. Sus primeras expresiones se pueden ubicar en Roma hacia 1720, pero su gran desarrollo
se dio en París en torno a 1770. Tuvo una influencia muy amplia y no se limitó a la pintura y la escultura sino que
también se extiende a la arquitectura y las artes decorativas (conocido popularmente como “estilo Luis XVI” y
“estilo Imperio”).

Iglesia de la Madeleine (1763-1842), París. Salón Luis XVI en el Museo Grobet-Labadié en Marsella. 3
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Como su nombre lo indica, este estilo tiene una

referencia inequívoca en la Antigüedad Clásica.
Clásica
Los estudios que el arqueólogo e historiador del
arte Johann Joachim Winckelmann (1717 - 1768)
1768
hizo de las ruinas en Roma sirvieron de modelo
para los artistas, quienes además atendieron a su
llamado para imitar la “noble sencillez” y la
“serena grandeza” de las esculturas de los
antiguos.
Anton Raphael Mengs. Retrato de Johann
Joachim Winckelmann. c. 1777. Óleo sobre
tela. 63,5 x 49,2 cm. Metropolitan Museum of
Art (Nueva York).
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A esta situación se suma el descubrimiento de las ruinas de las antiguas ciudades

de Herculano y Pompeya, en 1738 y 1748 respectivamente.
respectivamente El mundo europeo
obtuvo restos muy bien conservados de la vida cotidiana durante el Imperio
Romano, que habían quedado ocultas bajo las cenizas del volcán Vesubio desde
el año 79 d. C. A partir de las excavaciones se conocieron no solo las verdaderas
características de la arquitectura, sino también ejemplos de pintura, escultura,
muebles y otros objetos. Estos nuevos descubrimientos circularon a partir de
grabados despertando un renovado interés por la antigüedad clásica.

Grabados sobre Pompeya. Siglo XVIII.

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Si bien el primer centro donde comenzó a gestarse este movimiento

puede situarse en Roma, es en Francia donde se establecen los
desarrollos más importantes. A partir de esta época, Italia comienza a
decaer como centro artístico y ese protagonismo es absorbido por
París. En la Ciudad Luz, gracias al interés del Estado, se crean
instituciones específicamente artísticas destinadas a la formación, la
consagración y la circulación de los artistas y sus obras. La Academia
de Bellas Artes, los Salones y el Museo son instituciones que habilitan
la construcción de un sistema moderno del arte donde circulan los
artistas y las obras de arte. Por su parte Italia paulatinamente se
retrae en los avances artísticos deviniendo en un “país-museo” al que
los artistas viajan para conocer el arte del pasado. Para estar al tanto
de los avances y del arte del presente los artistas se dirigen a París,
ombligo del mundo hasta mediados del siglo XX. Pietro Antonio Martini (1738-1797). Exposición en el Salón del Louvre de
1787 (1787). Grabado sobre papel.

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El neoclásico busca su inspiración temática en la historia, la literatura y la mitología, orientado hacia

la creación de una nueva imagen de Francia hacia el mundo. Las obras neoclásicas apuntan a
principios elevados con un ánimo severo. Desde las imágenes se imparten ideas para el Estado y los
ciudadanos, invocándolos hacia el deber como máximo valor. El pensamiento iluminista basado en lo
racional propio del siglo XVIII también influye en las composiciones que buscan hacer una
reconstrucción arqueológica y erudita del pasado antiguo para brindar lecciones para el presente.

Las composiciones neoclásicas se caracterizan por ser composiciones sobrias y rigurosas, donde
prima la sobriedad del dibujo. Los artistas neoclásicos se encaminan hacia el perfecto dominio de la
técnica orientado a representar la naturaleza de una forma precisa. El dibujo es la base de todas las
composiciones, donde se busca la expresión justa, ordenada y clara. Las anatomías son idealizadas,
proporcionadas y armoniosas orientadas hacia la perfección.
perfección

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 Joseph-Marie
Marie Vien.

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 Antoine-Jean
Jean Gros.

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El artista más importante de este periodo es, sin lugar a dudas, Jacques Louis David (París, 1748 - Bruselas,
1825), quien fue gran admirador de Poussin. El neoclasicismo puede entenderse como una reacción de rechazo
hacia las composiciones desmesuradas del Barroco y las escenas galantes e intrascendentes del Rococó. Sin
embargo, en algunos artistas neoclásicos, como es el caso de Marie-Louise-Élisabeth Vigée-Lebrun (París, 1755 -
Louveciennes, 1842) puede verse un bello equilibrio entre la pureza neoclásica y la delicadeza y ligereza del
Rococó.

Jacques Louis David.

David
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 Elisabeth-Louise
Louise Vigée Le Brun.

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Jacques Louis David fue maestro de más de 400

artistas, a quienes se los conoce como la Escuela de
David. Mientras algunos de ellos siguieron los
lineamientos impartidos por el maestro sin demasiado
aporte creativo, otros como es el caso de Jean-
Jean
Auguste-Dominique Ingres (Montauban, 1780 – París,
1867) llevaron las enseñanzas del neoclasicismo
hasta un nuevo nivel de perfección.

Jean-Auguste-Dominique Ingres. 12
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Jean-Auguste--Dominique Ingres.
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