Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
bagaje psicológico, es
decir aporta al conjunto organizacional sus habilidades, destrezas, valores, percepciones,
actitudes, motivaciones, expectativas y metas que tiene, junto con otros aspectos
inherentes a su temperamento y personalidad, asimismo dentro de ella despliega sus
actitudes, inteligencia, conocimientos y competencias, las cuales pueden ser congruentes
con los objetivos de la organización o también pueden ir en contra de los objetivos de la
misma. Desde otra perspectiva el individuo ingresa a la organización como un todo único e
indivisible y lleva en si toda su contribución psicológica.
Se puede decir, que cada persona es única y responde de una manera particular a las
polítcas, los procedimientos, las normas, los programas, las órdenes y las tecnologías
utililzadas en el ámbito organizacional, entre otras. De esta manera, existen personas
amantes del trabajo rutinario, mientras que otras prefieren tareas retadoras; algunas gustan
de una autonomía total y de la posibilidad de tomar decisiones, mientras que otras se
muestran temerosas en cuanto tienen que tomar una decisión: hay quienes prefieren
oportunidades de ascenso mientras las hay que anhelan aumentos de sueldo o salario.
Lo indicado facilita deducir que la conducta de los individuos es causada, pues, responde a
un conjunto de estímulos externos que hacen que actúe de una manera particular. Es decir,
las personas poseen conocimientos, destrezas, necesidades, metas, experiencias... que
influyen en su conducta y desempeño particular. Por ello se hace necesario describir y
relacionar algunos factores específicos que justifican las diferencias individuales, como
son: las actitudes, la percepción, la personalidad y el aprendizaje.
Actitudes
- Las actitudes constituyen las predisposiciones hacia los aspectos del mundo. Por
consiguiente, los miembros de una institución asumen actitudes respecto a sus jefes, los
sistemas de control, las normas establecidas, las políticas implementadas y los demás
factores organizacionales pertinentes.
- Las actitudes proporcionan la base emocional de las relaciones y la identificación de
una persona hacia los demás. Por tanto, de las actitudes positivas o negativas (favorables o
desfavorables) dependen en gran medida un ambiente cordial o de mucha hostilidad entre
los miembros.
- Las actitudes están organizadas y están cerca del núcleo de la personalidad, es decir,
ciertas actitudes son persistentes y duraderas, sin embargo, están sujetas a cambios.
Relacionando lo expuesto con el propósito de este estudio, se infiere que los miembros de
una organización, pueden conocer los objetivos, estrategias, políticas, procedimientos,
cadenas de mando, tecnologías, entre otros aspectos formales y llegar a tener afecto, apego,
integración o desacuerdo con estos aspectos, lo que podría llevar a comportarse acorde con
lo establecido formalmente o por el contrario mostrarse rebeldes o indisciplinados y generar
de esta manera, conflictos internos.
De esta manera, los individuos pueden asumir conductas particulares hacia su trabajo y
hacia la institución, como consecuencia de sentir satisfacción por la labor desempeñada, lo
cual puede manifestarse en un determinado grado de identificación y participación activa
con la institución, así como también, compromiso, lealtad y defensa.
El nuevo paradigma interpela al docente en infinitos aspectos, entre los cuales su actitud ocupa un
rol central. Abusando del uso ya tan repetido del “2.0” podríamos decir que el docente debe asumir
una ACTITUD 2.0 que implica:
Vídeo de YouTube
Una Actitud 2.0 significa entender los beneficios que representa para uno mismo
compartir el conocimiento y aprender de los otros escuchando qué dicen.
Cuantas más personas apuesten por la Actitud 2.0, más organizaciones apostarán por esta
opción y de manera más rápida se permitirá el desarrollo de la Educación 2.0, la Empresa
2.0, el Gobierno 2.0, la Administración 2.0.
Percepción
La percepción es concebida como el proceso mediante el cual los individuos organizan e
interpretan sus impresiones sensoriales con el propósito de dar significado a su ambiente.
Implica la interpretación de objetos, símbolos y personas, a la luz de las experiencias
pertinentes. En otras palabras, facilita la organización de los estímulos y la traducción o
interpretación de estos en una forma que influya en la conducta.
Tal como lo expresa Robbins (1996: 132), existen distintos factores que operan para
modelar y, algunas veces, distorsionar la percepción. Estos factores pueden residir en el
perceptor (actitudes, motivos, intereses...), en las características del objeto o blanco que se
percibe (movimiento, novedad, sonido, tamaño...), o en el contexto en el que la percepción
tiene lugar (lugar, entorno social o de trabajo...etc)
Tenemos varias herramientas que nos pueden servir para contestar a esta pregunta, pero
sería especialmente interesante reflexionar a nivel individual sobre nuestra propia
percepción, así como sobre los medios de los que disponemos como docentes o empleados
públicos en general, para mejorarla.
En primer lugar, y desde el punto de vista del ciudadano, nos remitimos al Barómetro del
Observatoria para la Mejora de los Servicios Públicos, a través del cual se pone de
manifiesto qué es lo que se demanda a la Administración Pública por parte del ciudadano
en términos generales, así como los compromisos adoptados para satisfacer dicha
demanda.
En segundo lugar, y desde el punto de vista del empleado público en relación directa con su
formación, disponemos del Plan Anual de Formación. Para su elaboración, se aplica un
sistema de detección de necesidades formativas que muestra de forma clara cuál es la
percepción del sistema de formación del IAAP.
Por último, desde el punto de vista del profesorado, si bien a nivel de Administración
General podemos considerar la percepción descrita en el Plan Anual de Formación,
centrándonos en la Consejería de Educación, la Agencia de Evaluación Educativa ha
realizado un Estudio de la Percepción del Profesorado sobre la Formación Permanente,
bastante esclarecedor en cuanto a las motivaciones y recomendaciones necesarias en el
comportamiento organizacional deseable dentro de la Administración en materia de
Formación Continua.
Personalidad
Estructura Piramidal Estructura
Participativa
Sin embargo, hoy, es preciso que la estructura organizacional sea menos piramidal y sus
empleados más participativos, dinámicos, creativos e ingeniosos para poder adaptarse a
esos cambios. Es decir, en este tipo de estructura sus miembros pueden mostrar su
verdadera personalidad.
Aprendizaje
El aprendizaje involucra cambios. Esto puede ser bueno o malo desde un punto de
vista organizacional:
1. La gente puede aprender comportamientos desfavorables (por ejemplo,
tener prejuicios o restringir su producción) así como comportamientos
favorables.
2. El cambio debe ser relativamente permanente. Los cambios temporales
pueden ser sólo reflejos y no representar ningún aprendizaje. Por tanto,
este requisito elimina los cambios conductuales ocasionados por la fatiga o
las adaptaciones temporales.
3. Nuestra definición se ocupa del comportamiento. Existe aprendizaje cuando
hay un cambio en las acciones. Un cambio en los procesos del
pensamiento o en las actitudes de un individuo, si no está acompañado de
algún cambio en el comportamiento, no es aprendizaje
Ese cambio conductual hace suponer que deben existir procesos que ayuden a realizarlo. Al
efecto existen distintas teorías que refieren variadas técnicas y procedimientos para
aprender.