Está en la página 1de 4

CASO PHILLIP

La ansiedad de Phillip parece agravarse, ya que la frecuencia e intensidad de sus


sentimientos ansiosos parecen aumentar durante el día. Cuando llegó a su cita con la
doctora Miller, de lo único que estaba seguro era que quería tranquilizarse y sentirse
menos ansioso. La oficina de la doctora Miller se sentía cálida y acogedora. Phillip se
sentó en un cómodo sofá repleto de cojines de colores. La habitación tenía una
iluminación suave y estaba llena de plantas; las paredes estaban decoradas con cuadros
en agradables tonos pastel. La sesión inició cuando la doctora Miller simplemente pidió
a Phillip que empezara por explicar la razón por la que vino a terapia. Phillip comenzó a
exponer su historia, contando acerca de su reciente episodio de angustia y describiendo
luego su abrumadora ansiedad relacionada con hablar en público. Descargar era en
realidad el mejor término para describir el proceso, porque sus sentimientos se revelaron
mientras la doctora Miller escuchaba con atención y lo animaba a describir sus
sentimientos en detalle. La doctora Miller practica la psicoterapia de proceso
experiencia, la versión contemporánea de la terapia humanista existencial, basada en el
trabajo original de Carl Rogers y el más reciente de Greenberg, Elliott y otros
psicólogos contemporáneos. Su visión sobre la ansiedad de Phillip se concentraba en la
importancia de la experiencia de Phillip sobre sí mismo, o dicho de manera más precisa,
de la dificultad de Phillip en enfocarse en su propia experiencia (Wolfe y Sigl, 1998).
La ansiedad, de acuerdo con Greenberg y Paivio (1997) es "una respuesta a situaciones
simbólicas, psicológicas o sociales más que a un peligro físico inmediatamente
presente" (p. 194). El propósito de la terapia era ayudar a Phillip a ser cada vez más
consciente de sus propias emociones y experiencias en el momento.

Esta conciencia permitiría a Phillip preocuparse menos por lo que otros pensaran de él y
por lo que él pensaba que los otros querían de él. La doctora Miller seguiría esas metas
mediante el uso de técnicas enfocadas en la emoción (véase tabla 13.l) que implican la
empatía y la promoción de la expresión emocional.

Durante la terapia Phillip adquiere cada vez más conciencia de cómo se siente en la
sesión. Pasa menos tiempo tratando de recordar cómo se sentía en la vida diaria y se
concentra más en sus emociones presentes. Con esto, advierte lo frustrado que se sentía
en su trabajo y que, si bien tenía éxito en su empleo, éste. lo dejaba sintiéndose vacío e
insatisfecho. Empezó a explorar lo que deseaba de la vida, tanto en su trabajo como en
sus relaciones con su familia y sus amigos.
Phillip llegó a reconocer las maneras, a veces sutiles, en que la doctora Miller le ayudó a
reconocer sus sentimientos señalando algo que Phillip estuviera haciendo físicamente
(apretar los puños mientras hablaba, un temblor en su voz, tensión en su quijada).
Conforme Phillip se concentraba en esas sensaciones, a mendo reconocía una emoción
de la que no era consciente antes. A lo largo de las sesiones, la doctora Miller transmitía
un genuino sentido de interés y comprensión por lo que Phillip estaba pasando. Phillip
nunca se sintió juzgado ni presionado por la doctora, sino que se sintió entendido.
Gracias al empleo cuidadoso de las reflexiones de los sentimientos, preguntas abiertas y
de animarlo a explorar niveles más profundos de emoción, la doctora Miller ayudó a
Phillip a confiar más en sus sentimientos y a establecer nuevas y diferentes prioridades
en su vida. Phillip se sintió afortunado de encontrar una terapeuta que él sentía como
una "gran escucha", algo que Phillip no había encontrado antes.

La doctora Miller guio a Phillip a recordar experiencias de su pasado en las cuales se


había sentido ansioso como una forma de auxiliado a entender la intensidad completa de
sus sentimientos y su significado. Al explorar su pasado, Phillip llegó a percatarse de
que sus sentimientos tenían raíces profundas en el temor a ser rechazado por los demás.
¡La terapia de proceso experiencia! ayuda a los clientes a entender el significado de
sentimientos antiguos y a traerlos al presente dé: modo '' que puedan ser experimentados
y luego resueltos.

Motivo de consulta: Paciente refiere “quiero tranquilizarme y sentirme menos ansioso”

Problema: angustia y ansiedad relacionada con hablar en público.

l. El cliente y el terapeuta deben estar en "contacto psicológico". Rogers suponía que el cambio
significativo y positivo de personalidad sólo procede en el contexto de una relación
interpersonal cercana.

Dentro del caso, encontramos la primera condición en los siguientes apartados, “ Su visión
sobre la ansiedad de Phillip se concentraba en la importancia de la experiencia de
Phillip sobre sí mismo, o dicho de manera más precisa, de la dificultad de Phillip en
enfocarse en su propia experiencia (Wolfe y Sigl, 1998).” “El propósito de la terapia era
ayudar a Phillip a ser cada vez más consciente de sus propias emociones y experiencias
en el momento.”
2. El cliente se encuentra en un estado de incongruencia psicológica o emocional, que los
convierte en alguien vulnerable y ansioso. Rogers definía la incongruencia como una
discrepancia entre la experiencia real del cliente (es decir, sus emociones y sentimientos) y la
visión del cliente de sí mismo. En consecuencia, la incongruencia describe en esencia la
discrepancia entre el yo verdadero y el yo ideal.

Dentro del caso, encontramos la segunda condición en el siguiente apartado, “ Durante la


terapia Phillip adquiere cada vez más conciencia de cómo se siente en la sesión. Pasa
menos tiempo tratando de recordar cómo se sentía en la vida diaria y se concentra más
en sus emociones presentes. Con esto, advierte lo frustrado que se sentía en su trabajo y
que, si bien tenía éxito en su empleo, éste. lo dejaba sintiéndose vacío e insatisfecho.”

3. El terapeuta es congruente, integrado o genuino en la relación. Dentro del contexto de la


relación con el cliente, el terapeuta tiene conciencia precisa, y momento a momento, de su
propia experiencia. El énfasis está en la habilidad del terapeuta para estar al tanto de lo que
siente durante las sesiones con el cliente y para comportarse de formas que no contradigan
esos sentimientos.

Dentro del caso, encontramos la tercera condición en el siguiente apartado, “ Phillip llegó a
reconocer las maneras, a veces sutiles, en que la doctora Miller le ayudó a reconocer sus
sentimientos señalando algo que Phillip estuviera haciendo físicamente (apretar los
puños mientras hablaba, un temblor en su voz, tensión en su quijada).”

4. El terapeuta experimenta consideración positiva incondicional hacia el cliente. Rogers


definió la consideración positiva incondicional como una aceptación cálida de la experiencia
del cliente, sin importar cuál sea ésta. No hay condiciones o requisitos en la aceptación del
terapeuta hacia el cliente. La consideración positiva incondicional supone aceptar las
características buenas y malas del cliente. El terapeuta se preocupa por el cliente de manera
no posesiva o de una forma que se concentra en las necesidades del cliente y no en las
necesidades del terapeuta.

Dentro del caso, encontramos la cuarta condición en el siguiente apartado, “ A lo largo de las
sesiones, la doctora Miller transmitía un genuino sentido de interés y comprensión por
lo que Phillip estaba pasando. Phillip nunca se sintió juzgado ni presionado por la
doctora, sino que se sintió entendido.”

5. El terapeuta adquiere una comprensión empática de la experiencia interna del cliente y se


esfuerza por comunicarle esta comprensión. La comprensión exacta y empática de la
experiencia del cliente incluye la capacidad del terapeuta para sentir el mundo privado del
cliente como si fuera su propio mundo. El terapeuta permanece con un pie en el marco de
referencia del cliente y con el otro fuera de él. Esta visión permite al terapeuta sentir las
emociones del cliente (por ejemplo, ira, temor, confusión) sin que sus propios sentimientos
sean alcanzados en el momento. Rogers pensaba que la empatía precisa y profunda ayuda a
los terapeutas a comunicar su comprensión de la experiencia del cliente y, de manera
optimista, identificar los aspectos de la experiencia del cliente de los cuales éste no es
consciente. De este modo, Rogers creía que la empatía precisa va más allá de la conciencia
actual del cliente y refleja aspectos de su experiencia que están fuera de la conciencia en ese
momento.

Dentro del caso, encontramos la quinta condición en el siguiente apartado, “ Gracias al


empleo cuidadoso de las reflexiones de los sentimientos, preguntas abiertas y de
animarlo a explorar niveles más profundos de emoción, la doctora Miller ayudó a
Phillip a confiar más en sus sentimientos y a establecer nuevas y diferentes prioridades
en su vida. Phillip se sintió afortunado de encontrar una terapeuta que él sentía como
una "gran escucha", algo que Phillip no había encontrado antes.”

6. Por último, debe lograrse, al menos de manera mínima, la comunicación al cliente de la


comprensión empática y la consideración positiva incondicional del terapeuta.

Dentro del caso, encontramos la sexta condición en el siguiente apartado, “ La doctora Miller
guio a Phillip a recordar experiencias de su pasado en las cuales se había sentido
ansioso como una forma de auxiliado a entender la intensidad completa de sus
sentimientos y su significado. Al explorar su pasado, Phillip llegó a percatarse de que
sus sentimientos tenían raíces profundas en el temor a ser rechazado por los demás. ¡La
terapia de proceso experiencia! ayuda a los clientes a entender el significado de
sentimientos antiguos y a traerlos al presente dé: modo '' que puedan ser experimentados
y luego resueltos.”

También podría gustarte