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Todas las parejas tienen momentos que pueden ser críticos, es normal encontrar
parejas en crisis a partir de los 3 años de estar juntas, o incluso antes.
Contenidos [Mostrar]
1. Establecer Objetivos
Lo primero que deben hacer antes de empezar la consejería de parejas, es tener
un objetivo. Deben comprometerse en seguir los siguientes pasos para salvar la
relación.
Posteriormente, vamos a trazar objetivos más concretos. Para esto, cada uno
tendrá que escribir en un folio 4 categorías:
Sentimental
Económica
Física
Social
Una vez determinados los objetivos, vamos a trabajar por separado. Es probable
que ahora mismo únicamente te estés fijando en lo negativo de tu pareja, así que
vamos a establecer objetivamente los puntos positivos y negativos de la relación.
Es muy importante que el excel sea individual, no deben compartirlo el uno con
el otro.
3. Comunicación asertiva
Teniendo en cuenta que hemos dejado por escrito todo lo que sentimos,
tendremos un panorama un poco más claro de lo que esperamos de la relación.
Con esta idea, se van a comunicar de una forma productiva a través del siguiente
ejercicio:
Con esta práctica sentirán que se pueden expresar libremente, con respeto, y sin
llenarse de «malas energías».
Pueden realizar este ejercicio cada día. Es importante que al día no se aborden
más 2 problemas, 1 por cada parte.
Te aseguro que sentirán un gran alivio, y les servirá más adelante para tomar
mejores decisiones.
4. Intercambio de Roles
Se trata de una técnica para mejorar la empatía con tu pareja.
Una vez que hayan discutido 4 o 5 temas del punto 3, estarán en capacidad de
realizar el intercambio de roles. No obstante, si quieren asumir el rol sobre un
tema que no hayan hablado previamente, pueden hacerlo siempre y cuando se
comunique previamente a la otra parte.
Haz una lista de cosas que podrías hacer para mejorar la relación.
Tómate el tiempo necesario, varios días si así lo requieres.
Una vez terminada la lista, coméntala a solas en voz alta.
Una vez terminada. Entrégale el papel a tu pareja.
En los días posteriores, toma un elemento de la lista y lo llevas a cabo.
Por ejemplo: «dedicarle un sábado entero a mi mujer». Lo implementas sin
decirle nada. Y tomas nota de:
o El detalle de lo que hiciste.
o La dificultad que encontraste (si la hubiera).
o El resultado obtenido.
Después de un par de días, comenta los apuntes con tu pareja y, de forma
consensuada, establezcan lo que se podría haber mejorado por ambas
partes.
Tu pareja deberás realizar el ejercicio también.
Se pueden establecer este tipo de acciones durante un mes, o incluso más,
dependiendo de las necesidades que tengan.
7. Compartir en silencio
Este ejercicio de pareja es muy útil y sencillo. Mírenlo como un paréntesis a todo
lo realizado anteriormente, pero que a su vez ayudará a reforzar las acciones
positivas a futuro.
A diferencia del punto 6, en este ejercicio vas a pedirle a tu pareja que realice
ciertas acciones que te harían feliz, y que crees que podrían mejorar la relación.
Toma una hoja en blanco, y escribe una lista de cosas que te gustaría que
tu pareja realice. Algo que te haga mucha ilusión, incluso cosas que nunca
te habías atrevido a pedir, o simplemente cualquier «bobería» que te
gustaría hacer. Lo que sea!.
Corta la hoja de manera que cada deseo sea un papelito por separado.
Dobla cada papelito e introdúcelo en una caja cualquiera: la del móvil,
zapatos, etc.
A su vez, tu pareja deberá hacer exactamente lo mismo: una lista de sus
deseos en una caja.
Se intercambiarán las cajas y la ubicarán en algún lugar donde no sea tan
accesible para la otra persona.
Tomarás un papelito de la caja solo una vez a la semana, y darás lo mejor
de ti para complacer aquel deseo.
Durante la semana, ni tu ni tu pareja sabrán lo que va a suceder, pero
estarán a la expectativa de que algún deseo se cumpla.
El juego continuará durante varios meses, y se podrá extender tanto como
ustedes deseen.
Una vez realizados todos los ejercicios anteriores, después de unos 6 meses o
incluso más, deben plantearte esta pregunta: ¿Vale la pena seguir con la
relación o no?
Vuelve a revisar el excel del punto 2, haz una introspección y verifica como te
sientes ahora mismo respecto a los puntos que detallas hace unos meses.
Toma nota de todas las cosas que se te pasan por la cabeza, especifica las
situaciones que puedas aguantar más y las cosas que te motiven a seguir
adelante con la relación. Es un ejercicio individual, no hay que compartirlo con la
pareja, hasta estar seguro de la decisión que vas a tomar.
Si pones en práctica todos estos ejercicios, les aseguro que van a mejorar
sustancialmente la manera en que ambos afronten los nuevos desafíos. Los
problemas siempre van a existir, lo importante es aprender a responder a ellos de
manera asertiva, bajo un marco de respeto mutuo y cariño.