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Explique los Conceptos de Ética y Moral Aplicados en la Gestión de los Procesos y Políticas
Públicas.
MARCO CONCEPTUAL
Ética
Moral
Relativo a la moral. Ciencia que trata del bien de las acciones humanas en su bondad o malicia.
CONCEPTO DE ÉTICA.
La ética es un concepto filosófico que se ocupa de la moral y de las obligaciones subjetivas del
hombre. Por ser un principio meta-político está sobre la esfera de las leyes de la naturaleza y de la
ley de los hombres, pero cuya violación acarrea sanciones de orden legal o administrativo, dentro
de un régimen jurídico concebido con criterios eminentemente éticos.
La ética está formada por un acto de conciencia voluntaria del hombre, conciencia que es derivada
de la formación moral, social, religiosa, política o académica de cada uno. Dentro de esta
concepción individual, la ética trasciende la esfera de lo personal para alcanzar la ética colectiva y
se crea así lo que podríamos denominar la ética o la moral pública.
El fin del Estado es la búsqueda del bien común, entendido como el conjunto de condiciones
concretas que se imponen a la sociedad para que el individuo logre el pleno desarrollo de su
personalidad, igualmente que existe una jerarquía de valores en la conciencia individual, también
existe una primacía de valores en los entes colectivos que permite la aplicación preferente de unos
sobre otros o la primacía del bien común sobre los bienes individuales.
Entendida así la ética como estado de conciencia individual pero también como condición de la
existencia de la sociedad del Estado, debemos analizar al individuo en el ejercicio de una función
pública, es decir, cuando participa en forma personal efectiva, directa y concreta como titular de
un órgano del Poder Público, cuando adquiere la categoría de funcionado.
Ética Gubernamental
Si nos ponemos a mirar la historia de los pueblos, comparando aquellos que triunfaron con los que
no son ejemplares, vemos que la ética o el carácter, diseminado entre sus gentes e inculcado
profundamente en su cultura, es el factor que separa al triunfo del fracaso, y no tenemos que
hablar sólo de gobiernos o culturas, hagámoslo de las personas, nos gusta estar cerca, trabajar y
asociarnos con personas de una sola palabra, de una ética intachable, de un carácter irreprochable
y le huimos al falso, al doble cara, al tramposo, al que no tiene carácter. La ética se inculca, se
planta en la conciencia y al ser de un individuo, hombre o mujer, se abona con razonamientos y
con educación, para que se asiente, penetre profundamente y se convierta en algo natural e
inherente a la persona.
Por eso, aquel que mal utiliza los recursos del pueblo, le falta a la confianza de ese mismo pueblo y
cuando esas personas que dieron su confianza y el poder para hacer las cosas, ven que algo o
alguien falla en su encomienda, que no produce lo que promete, que no cumple con su juramento,
que su carácter le falla, que no tiene ética, le quitan su respaldo y lo castiga en elecciones futuras.
Esta tendencia hacia la defensa y protección de los administrados, ante la actuación del poder
público, ha traído consigo la ampliación de las garantías legales y hasta el establecimiento de
normas constitucionales a efectos de amparar a los administrados de esta facultad amplia que a
pretexto del bienestar común se ha conferido a la Administración Pública.
Interpretación: Se puede decir que la ética es nuestro actuar a nivel moral y de responsabilidad
para con nuestras obligaciones individuales y colectivas en el entendido que nos debemos a una
sociedad a fin de mantener el orden público y el bien común.
Al llevarlo a la gestión pública se puede definir como el manejo adecuado de las políticas y
estrategias establecidas para el bien común ,esto con el fin de satisfacer las necesidades del
colectivo y no solo del individuo, así como también establecer las sanciones a lugar si no se
cumplen con dichas políticas y estrategias.
Moral
La moral se basa en los valores que dicta la conciencia, que a su vez, están basados en costumbres
aprendidas. Dicho punto de vista dice que la moral no es absoluta o universal, ya que su vigencia
depende de las costumbres de una región, de aquí vendría el relativismo cultural. El valor es, pues,
el núcleo de toda moral. Cada persona tiene unos valores determinados, igualmente como tiene
una cultura que lo identifica.
Por otra parte, la universalidad de algún sistema moral es uno de los objetivos de la ética-objetiva
cuyo contenido o efecto no se considera relativo ni subjetivo, sino efectivo y aplicable para todo
hombre racional bajo un contexto determinado, siempre y cuando el agente capaz de
comportamiento pueda actuar de manera racional, entendido como aquello en lo que todos los
seres humanos puedan estar de acuerdo cuando decidan buscar un comportamiento moral
específico que se juzgó "de bien" o "correcto", que mantenga o cause aceptable calidad de vida o
evite alguna consecuencia inconveniente, y que surja a causa de la repetición de ciertos
comportamientos probables para la humanidad.
Cortina (2008) relaciona la ética, la filosofía y moral, refiriéndose a las tareas de la ética como
filosofía de la moral atribuyendo a la ética las siguientes tareas esenciales:
1. Dilucidar en qué consiste lo moral, que no se identifica con los restantes saberes prácticos (con
lo jurídico, lo político o lo religioso) aunque esté estrechamente conectado con ellos.
2. Intentar fundamentar lo moral, es decir, inquirir las razones para que haya moral o, bien
denunciar valiéndose de métodos específicos; ofrecen respuestas diversas, que van desde afirmar
la imposibilidad o incluso la inestabilidad de fundamentar racionalmente lo moral hasta ofrecer un
fundamento.
3. Intentar la aplicación de los principios éticos descubiertos a los distintos ámbitos de la vida
cotidiana. (Cortina, 2008, p. 164).
Ahora bien, lo contrario sería simplemente cumplir con la acción por razones egoístas o de
conveniencia esto sucede cuando no se tiene claro si cumplir por el deber de cumplir u omitir por
el mismo deber, o si simplemente no hacerlo, lo que en ambos casos es contrario a la moral. La
moral, entonces, es hacer por conformidad, de manera que la voluntad sea la razón práctica y la
expresión del interés propio y no el ajeno (Kant, 2007).
Otras acepciones de la moral la han llevado a utilizarse como la de moralidad en los actos
humanos, también la legalidad o la religiosidad hacen ver las dimensiones de la vida humana como
sinónimo de la vida moral. Toda moral deja ver el resultado de una buena conducta que,
convertida en moralidad, es, además un fenómeno en las estructuras jurídicas, religiosas o
simplemente cortesía social que permite hacer algunos juicios sobre determinada conducta.
Todas las concepciones morales-cada una de ellas -contiene algunos elementos fundamentales
(mandatos, prohibiciones, permisos, pautas de conducta) que pueden entrar en contradicción o al
menos en aparentemente contradicción con las de otras concepciones morales diferentes.
Algunos pueblos han permitido la antropofagia, mientras que en otros prohíben tajantemente el
sacrificio humano (López Aranguren, 1994, p. 30).
La moral es vista entonces como el modelo ideal de buena conducta socialmente establecida y así
ha sido estudiada por la sociología, la historia y la antropología social. Por ello, el término puede
ser usado como un código de conducta personal del cual a nivel social se hacen juicios. Esas
valoraciones de la conducta dependerán entonces de lo que se considere el deber, o de lo que sea
contrario al deber en un grupo social determinado.
Respecto de la administración pública, Bonnin (1772-1834), citado por Sarquís Ramírez y Solís
Alemán (2013) cuando dice que la administración encuentra sus raíces en la sociabilidad natural
del hombre quien mantiene una relación con estos, cooperando en asuntos que son de interés
común, manteniendo así una sociedad; que Bonnin fue el primero en darle estatus de ciencia al
que hacer administrativo.
El servicio público es una condición sinequanon para la gobernanza. Su ausencia incluso puede
hacer imposible la conciliación entre la función pública y la gestión pública, la cual tiene
encomendada en la actualidad los valores que debemos preservar. Los instrumentos para la
prevención reglamentaria de las conductas indeseables y la promoción de las buenas conductas
deberían configurar una especie de infraestructura ética. “El objetivo de la ética lo constituye la
aplicación de una serie de normas morales tomando como base la lealtad, la honradez, la cortesía
y el honor, mismas que van a contribuir al fortalecimiento de las estructuras institucionales”
(Cedillo Osorio, 2008, párr. 13).
Interpretación: Moral se define como los códigos de comportamiento de los valores que dicta la
sociedad y que cada individuo acatara respecto a las normas establecidas, basados en las
costumbres y la cultura de cada región.
En el contexto de nuestro país se puede observar que hoy en día se ha perdido un poco la ética y
la moral en el ejercicio de la gestión pública ya que no importa mucho el bien colectivo, si se
satisfacen las necesidades individuales, rompiendo todo esquema de trasparencia, siendo muy
frecuente los actos de corrupción, enriquecimiento ilícito, tráfico de influencias.
Aun cuando se han implementado muchas políticas en cuanto al ámbito social las misma no han
logrado tener su máxima eficacia y eficiencia ya que no hay un evaluó constante de las gestiones
que tiene a cargo los funcionarios y empleados públicos a fin de que dichas políticas logren el
objetivo que no es más que satisfacer las grandes necesidades que tenemos todos como
ciudadanos de este país que día a día lo arropa la hiperinflación y la poca eficacia de algunos
funcionarios públicos que tiene como responsabilidad asignada cumplir y hacer cumplir una
política pública determinada.