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Universidad Autónoma de Chihuahua

Facultad de Contaduría y Administración

Sesión 2.

Conceptos Generales de la Ética.

1er. Trimestre Materia: Ética Empresarial Grupo: IA1

Presenta: Araceli Hernández Sánchez - 376049

Docente: Isidro Morales Villanueva

Fecha de entrega: 28 de Mayo del 2023


Desde nuestros primeros años como estudiantes las instituciones educativas nos
han presentado los conceptos de ética y moral, relacionándolos estrechamente con
los valores y el ser un buen ciudadano. Gracias a ello, estas han sido tomadas por
el colectivo como sinónimos pues sus definiciones difícilmente disciernen la una de
la otra, creando confusión entre los significados de ambos.
Siendo así, la definición de ética con la que comúnmente nos encontramos
es aquella que la considera un conjunto de normas que ayudan a valuar las
conductas de una persona dentro de un grupo o comunidad, mientras que la moral
son las costumbres y normas que dirigen el comportamiento de un individuo. Ambas
juzgando las acciones de los particulares desde lo que es bueno y lo que es malo y
diferenciándose en que la ética es pensada y la moral es vivida.
Sin embargo, estos conceptos están construidos por diferentes factores, que
los enriquecen y los vuelven más amplios y complejos, llevándonos así a su mayor
entendimiento, así como a la utilización de estos como herramientas en la vida
diaria.
Así pues, más allá de simplemente evaluar las acciones del ser humano, la
Ética es una ciencia, que además de juzgar lo bueno y lo malo explica la causa o
razón de su juicio, con ello la ética adquiere un carácter racional lo que significa que
no es producto de una emoción o en dado caso la intuición. A diferencia de otras
ciencias, la ética es una ciencia práctica, pues tiene como fin no solo la producción
de conocimientos si no también su realización, es decir, esta hecha para aplicarse
a la vida diaria.
De igual manera, la ética tiene carácter normativo, debido a que genera
normas que ayudan a dar dirección a las decisiones libres de los individuos, desde
esta perspectiva, la ética estudia lo que es normal, pero no lo normal establecido
por los sucesos o lo que comúnmente pasa, se refiere mas bien a lo que se conoce
como normal de derecho o mejor dicho lo que debería su ser según lo establecido
como correcto desde la racionalidad.
Otros aspectos que aportan a ampliar la definición de ética como ciencia son
el objeto material y el objeto formal. El objeto material es la cosa que estudia,
mientras que el formal, es el aspecto de la cosa que se estudia.
En la ética él se considera como objeto material a los actos humanos y el
objeto formal serian la bondad o maldad que exista en estos. Desde esta
perspectiva la ética no se relaciona ni se interesa en la conducta o el
comportamiento humano, puesto que, mas bien, se orienta a dar normas de derecho
para desempeñar actos humanos conforme a la razón. Con esta visión podemos
concluir que la ética es una ciencia practica y normativa que estudia racionalmente
la bondad y maldad de los actos humanos (Gutiérrez, 1978).
Pero ¿qué son los actos humanos? Es importante aclarar esta pregunta no
solo para comprender de mejor manera el concepto de ética si no también por que
los actos humanos pueden ser confundidos con actos del hombre. Los actos
humanos son aquellos que se llevan a cabo de forma libre y consciente, es decir,
aquellos que se realizan desde el raciocinio y en sus facultades especificas tales
como la inteligencia y la voluntad. Por su contra parte, los actos del hombre, tal
como lo dice su nombre son aquellos que pertenecen al hombre pues estos no se
originan en el hombre como hombre si no como animal, siendo así carentes de
conocimiento y voluntad.
Los actos humanos son morales, percibiendo la moral o moralidad como el
conjunto de creencias y normas de una persona o colectivo que fungen como guía
para su actuar, es decir, orientan acerca del bien o del mal, lo correcto o incorrecto,
de dicha acción (Palacios, 2009). Lo moral de un hecho va más allá del hecho en
sí, pues se expande a la manera en la que este se realizó, si se hizo de forma
racional y voluntaria, desde el conocimiento del individuo.
Este entendimiento donde las normas y actos son principalmente guiados por
la razón nos introduce al termino Ley Moral, esta podemos definirla como el
mandato originado desde la razón estipulada para la búsqueda del bien común por
las autoridades. Si una ley no tiene raíz en la razón ni tiene como fin el bien común,
no es una Ley Moral. Estas normas que surgen desde la moralidad se encuentran
bajo un marco de referencia analítico formado por principios éticos, los cuales son
guías generales para la formulación de reglas específicas. Estos principios según
Beauchamp y Childress (2013) son el Respeto por la Autonomía, Beneficencia, No
Maleficencia y Justicia.
Para estos autores el Respeto por la Autonomía hace referencia a reconocer
el derecho del resto de los individuos a tener su propio de vista, tomar decisiones y
actuar conforme su experiencia social. Por otro lado, el principio de la Beneficencia
se basa en todas las formas de acción profesional que buscan el beneficio de los
demás, similar a este, la No Maleficencia habla sobre la obligación de no generar
daño a otros, buscando que las acciones de un individuo no lastimen ni pongan en
riesgo. Finalmente tenemos el principio de Justicia, este hace énfasis principalmente
en la distribución equitativa y apropiada de los beneficios y las cargas, describiendo
estos como la propiedad, los recursos, los impuestos, los privilegios y las
oportunidades.
Una vez analizadas estas perspectivas podemos concluir que los aspectos
primordiales entre los conceptos desarrollados en el presente escrito son la razón,
la voluntad y el bien común. Los actos de los individuos no pueden ser juzgados por
el mero acto, una acción es una consecuencia, es el resultado de una idea generada
por un deseo y necesidad. Estas conductas o comportamientos son juzgados desde
antes de ejecutarse por el criterio del individuo y una vez llevados a la realidad son
juzgados por la sociedad.
Por ello, es importante tener un común acuerdo de que es lo que se percibe
como bueno o malo, siendo así importante determinar dentro de este pacto que lo
normal no son los comportamientos comunes, las conductas que vemos a diario, lo
que todo el mundo está acostumbrando a hacer, sino que lo normal es aquello que
debe de ser a pesar de que esto no se esté realizando, destacando así que lo bueno
o correcto, es cuando el acto de un individuo coincide con el uso natural de las
cosas.
Esto resulta nuevamente en la visión de la Ética como ciencia, pues el
conocimiento que se genera desde su objeto de estudio, desde el enjuiciamiento de
las acciones humanas y la explicación del porque de su juicio, no es simplemente
para la elaboración de teorías, sino, como se vio anteriormente, para fundamentar
normas, leyes y ordenamientos que ayuden a dirigir la conducta, es decir, elabora
contenido que el ser humano pueda llevar a la practica en su vida diaria.
Bibliografía.
Gutiérrez Sáenz, R. (1978), Introducción a la Ética [11va. Ed.], México. Editorial
Esfinge, S.A.

Palacios de Torres, C.: La moral: un concepto, muchas interpretaciones, en


Contribuciones a las Ciencias Sociales, Febrero 2009.

Beauchamp, T. y J. Childress (2013), Principles of biomedical ethics [7a. ed.], Nueva


York, Oxford University Press.

Hortal, A. (2002), Ética general de las profesiones, Bilbao, España, Desclée de


Brouwer

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