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BOGOTÁ
2021
CASO PRACTICO CLASE 6
Enunciado
¿Es admisible un desvío de más del 70% en el coste de un submarino? Los expertos coinciden
en que, dado el alto componente de Investigación y Desarrollo (I+D) que incorpora el
proyecto, tiene mucha más justificación que los abultados sobrecostes de las grandes obras
públicas y se remiten a los frecuentes sobrecostes de los sistemas de armas de países de la
OTAN.
Tras sucesivos retrasos, el gran fiasco vino en diciembre de 2012, con el reconocimiento de
que se había producido un desvío de 125 toneladas en el peso del submarino, lo que afectaba
a su flotabilidad y obligaba a rediseñarlo totalmente. Un error de este calibre no se hubiera
producido si Navantia no hubiera roto su asociación con el astillero francés DCNS, con el
que cofabricaba el submarino Scorpène. La empresa española había construido antes
submarino pero nunca se había enfrentado al reto de diseñarlos en solitario. Además, el plan
de prejubilaciones de 1999 descapitalizó la compañía, al prescindir de muchos ingenieros
mayores de 50 años, precisamente los que tenían más experiencia.
Para sacar a flote el proyecto tras la ruptura traumática con los franceses, el Ministerio de
Defensa tuvo que recurrir al apoyo técnico de EEUU: la firma Electric Boat, el mayor
fabricante mundial de submarinos, supervisó la revisión crítica del proyecto que, en julio de
2016, superó su examen. Electric Boat cobró 14 millones de euros por su asesoramiento.
El Ministerio de Defensa ha renunciado a penalizar a Navantia por los retrasos. Alega que,
al tratarse de una empresa pública, el dinero que entra por un bolsillo sale por el otro, ambos
del mismo pantalón.
Los 1.550 millones de sobre precio suponen un techo de gasto que no tiene por qué agotarse.
Esta cantidad incluye 16 millones de euros para adaptar los muelles de atraque de la base
naval de Cartagena, que deben dragarse y alargarse.
Cuestiones
Sobrecostos del más del doble de lo que inicialmente se tenía presupuestado para el
proyecto.
El ministerio de defensa no podrá penalizar a Navantia al tratarse de una empresa
pública.
Navantia demostró que no cuenta con personal calificado para la gestión de este tipo
de proyectos.