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El montaje
Montar hace referencia a la acción de armar y/o ajustar las piezas o
elementos de algo. El mismo engloba, por un lado, la disposición del
equipo y recursos técnicos, humanos y materiales que se utilizan en el
lugar donde se realizara el evento. Por otro lado, constituye las bases
estéticas, estructurales, y funcionales sobre las que se desarrolla el
evento.
Tipos de montaje
Montajes casuales: esta configuración requiere de vajilla, cristalería
y cubiertos mínimos y deja bastante espacio en la mesa para artículos
personales de los invitados como bolsas o teléfonos celulares. Por lo
general incluye una ensalada y un tenedor para cenar a la derecha del
plato individual para la cena, con el tenedor de la ensalada hasta la
izquierda y un cuchillo y cuchara de te a la derecha, con la cuchara hasta la
derecha. Una copa grande de vino va justo arriba de la punta del cuchillo
con una copa para agua inmediatamente a su izquierda. Las servilletas de
papel son aceptables y deberían ser dobladas y colocadas a la izquierda de
los tenedores. Unas servilletas de tela dobladas se pueden colocar a la
mitad del plato o junto a los tenedores.
Montaje para buffet: las mesas para buffet se montan para que
sea fácil para los invitados moverse a lo largo de la línea y ser servidos por
el personal o servirse ellos mismos. Los platos de cena y de ensaladas se
colocan al principio del buffet y la comida se distribuye comenzando con
los complementos seguidos por el platillo principal, vegetales, ensaladas,
panes y condimentos. Los cubiertos están disponibles al final del buffet y a
menudo están envueltos en servilletas. Para mantener la línea en
movimiento y evitar la congestión, acomoda las bebidas, vasos, copas, y
opciones de postres en una mesa separada.
Colores: según las tonalidades que se les brinden a las paredes o a los
muebles que llenen el espacio, el ambiente será uno u otro. Los colores
determinan en gran medida muchos aspectos de la ambientación en un
espacio, ya que pueden despertar sensaciones muy diferentes. Mientras
que los colores cálidos como el amarillo o el rojo se relacionan con
ambientes festivos, optimismo y transmiten pasión, calidez y diversión,
otros como los tonos negros y grises, son mas sobrios, elegantes y
transmiten seriedad y sofisticación. Por otra parte, los tonos azules
irradian tranquilidad y equilibrio.
Telas en paredes y techos: las telas son un recurso muy interesante para
utilizar en la ambientación de un espacio para un evento. Se pueden usar
diferentes texturas y colores y cumplen la función de vestir paredes
vacías, separando espacios y realzando ambientes. Es bueno recordar que
las telas más livianas pueden tener mas variedad de formas de colocarlas
ya que le pueden hacer pliegues, pinzados y drapeados.
Luz: la luz es otro de los elementos mas importantes que influyen en la
creación de un ambiente y, siempre se debe tener en cuenta, ya que, es
importante no olvidar que tan solo con la luz se pueden crear climas muy
diferentes en un mismo espacio. Una luz cálida aporta tranquilidad y se
utiliza para crear atmosferas acogedoras, intimas y relajantes, mientras
que una luz fría mejora las condiciones de visibilidad e incentiva la
concentración en tareas concretas, por lo que, mientras que la primera se
relaciona con la relajación, la segunda esta mas unida a lugares de trabajo.
Música: la música y los sonidos también pueden aportar aspectos muy
importantes a la ambientación de un espacio. Además, en este caso
demuestra que la ambientación va más allá de la decoración, ya que el
tipo de música escogido y lo que transmita, puede ser clave para crear una
atmosfera.
Otros elementos:
Flores: siempre brindan un toque especial en mesas y estrados, las utilizan
también para decorar escaleras o en los alrededores del salón.
Velas: utilizándolas con sumo cuidado, ayudan a dar un clima romántico o
tenue, y se complementan muy bien en las mesas ratones de los livings.
Manteles y fundas para sillas: cumplen la función de vestir a los muebles,
pero hay muchas texturas o colores para utilizar, siempre incluyéndolo
dentro de la ambientación. Su amplia gama de texturas y colores nos
permite hacerlos parte de la ambientación.
Centros de mesa: pueden hacerse de infinitos materiales. Si el evento es
temático, el centro de mesa va a resaltar la idea que queremos comunicar.
Tecnología: se pueden proyectar imágenes o un video en pantallas
gigantes no solo para que la gente le preste atención todo el tiempo, sino
unificarlo como parte de la ambientación. Se puede utilizar las luces
robotizadas y bolas de espejos.
Zen: forma parte del estilo oriental pero mucho mas simple y sencillo,
busca la armonía y se utilizan colores neutros, objetos de bambú, telas
rusticas y cascadas.
Loft: se utilizan materiales como el metal, el plástico y la goma. Se trata
de un estilo que aunque aporta tranquilidad, no pierde las líneas rectas ni
la elegancia, se trata de aprovechar al máximo los espacios y suprimir
todos los elementos que delimiten pilares o paredes. El espacio constituye
el elemento más importante. Para centros de mesa jarrón con rosas, los
centros de mesa deben tener holgura e interés visual fuerte.
Rustico: predominan en este estilo las maderas, para los complementos
suele optarse en todo momento por las telas bastas como las de lino y
colores en tonalidades neutras y colores beige. Se utilizan vajillas de
madera o barro cocido mate o brillante. Los centros de mesa pueden ser
vasijas de barro adornadas con frutas o canastas con flores silvestres.
Mesas rusticas sin manteles o utilizar mantelería en tonos ocres.
Pop art: es uno de los estilos mas llamativos y atrevidos del momento
que combina colores estridentes como verde manzana, rosa chicle o azul
eléctrico con elementos antiestéticos y chillones. Se utiliza serigrafia,
colores intensos. Para hacer contraste colores neutros con toques de
colores fuertes.
Kitsch: sus características distintivas son los colores fuertes, la mezcla
indiscreta de texturas y materiales, la utilización de elementos que
muchos podrían catalogar de “feos”, elementos decorativos antiguos
refaccionados grotescamente, o bien elementos fuera de su contexto. El
estilo busca lo inadecuado, lo extravagante.
Clásico: predominan los colores cálidos y acogedores. Suelen estar
recargados con colores fuertes como el rojo, verde botella o marrón. En
los estampados predomina acabados en rayas, motivos florales y frutales.
MELISSA BRIOSO
NÚMERO 2, 6to G.