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 E – 27-050-A-80

Esguince del tobillo del niño


y del adolescente
V. Vacquerie

Durante mucho tiempo, los esguinces del tobillo del niño se han subestimado y no se han
tenido en cuenta lo suficiente, considerando únicamente los desprendimientos epifisarios
de los cartílagos de conjugación afectados. La realidad es más compleja. En la actualidad,
los niños crecen con rapidez y practican actividades deportivas intensamente. Debido a
esta demanda funcional cada vez más importante, no dejan de crecer las solicitudes de
consulta por esguince de repetición. Para poder realizar un mejor tratamiento de estos
niños y atender a sus familias es fundamental que el médico tenga en mente un esquema
diagnóstico preciso.
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Palabras clave: Esguince del tobillo; Crecimiento del tobillo; Inestabilidad crónica del tobillo;
Falsos esguinces

Plan intensivas, pero también debido a un crecimiento puberal


más precoz, con un aumento de la obesidad infantil.
■ Introducción 1 El término de esguince se utiliza a menudo para un
dolor del tobillo y/o del pie sin establecer realmente una
■ Generalidades 1 relación con la lesión traumática subyacente.
Anatomía y crecimiento del tobillo del niño 1 Así, parece esencial definir el esguince en el sentido
Epidemiología 2 patológico del término, establecer la conducta práctica
Fisiopatología 2 cuando acaba de producirse el accidente y, sobre todo,
■ Conducta práctica en urgencias 2 separar los diferentes cuadros nosológicos que se escon-
Tratamiento inmediato en urgencias o en la consulta 2 den detrás del término «esguince de repetición».
Pruebas complementarias 3
Principios terapéuticos del esguince agudo del tobillo 4
■ Conducta práctica en caso de esguince recidivante 4  Generalidades
Anamnesis 4
Exploración física 4 Anatomía y crecimiento del tobillo
Entidades fisiopatológicas 4 del niño (Fig. 1)
■ Conclusión 7
El tobillo es una zona de crecimiento activa en el niño.
Está formado por dos cartílagos de crecimiento (también
denominados fisis) que representan alrededor del 40-45%
 Introducción del crecimiento esquelético de la pierna. Las epífisis son
inicialmente cartilaginosas y se osifican por lo general
El esguince del tobillo es el primer motivo de consulta entre los 6 meses y los 3 años. Los maléolos aparecen hacia
en los servicios de urgencia pediátricos. la edad de 6 años [1] .
En su tratamiento están involucrados los médicos de Entre los 7 y los 11 años, se puede ver aparecer un punto
urgencias, los pediatras, los cirujanos ortopédicos, los de osificación secundario a nivel de la tibia que a menudo
radiólogos, los fisioterapeutas y los podólogos. En un se confunde con un arrancamiento óseo. Es más raro a la
centro hospitalario de tamaño medio, esto representa altura del peroné [2] .
1.150 niños en promedio, es decir, 10-15 al día. Se trata de El cierre de la fisis distal de la tibia se inicia en su
un auténtico problema de salud pública, cuyo tratamiento centro para a continuación extenderse hacia medial y pos-
no está aún perfectamente estandarizado. Se asiste a un teriormente se cierra en lateral con el cierre último del
aumento constante de su incidencia debido al hecho de cuadrante anterolateral. Esta fusión tarda entre 18 meses
que las prácticas deportivas son cada vez más precoces e y 2 años.

EMC - Podología 1
Volume 17 > n◦ 1 > febrero 2015
http://dx.doi.org/10.1016/S1762-827X(14)69753-4
E – 27-050-A-80  Esguince del tobillo del niño y del adolescente

Figura 1. Anatomía y crecimiento del


tobillo en el niño.
A. Anteroposterior. 1. Tipo de crecimiento
(flechas rojas); 2. ligamento tibioperoneo
anteroinferior; 3. cartílagos de crecimiento
(en verde); 4. hueso peroneo accesorio;
5, ligamento peroneoastragalino anterior;
1
6. ligamento peroneocalcáneo; 7. hueso tibial
2
accesorio.
3 1 B. Lateral. 1. Cartílagos de crecimiento
2
(en verde); 2. tipo de crecimiento (flechas
4
rojas); 3. ligamento tibioperoneo posterior;
7 4. ligamento peroneocalcáneo; 5. núcleo
5 6
3 de osificación secundario del calcáneo;
6. ligamento peroneoastragalino anterior.
4
6 5

A B

El astrágalo y el calcáneo tienen un crecimiento endo- lo tanto, los esguinces laterales son dominantes respecto
condral, cada uno de ellos con un núcleo de osificación a las lesiones mediales. Este artículo se limitará a precisar
secundario. En el caso del astrágalo, aparece entre los 8 y estos últimos.
los 12 años y no se fusiona con el resto del hueso en cerca Estos accidentes se producen tanto en las actividades
del 13% de los casos, lo que da lugar al hueso trígono [3, 4] . de la vida cotidiana como en la práctica de determina-
Los ligamentos colaterales se insertan por debajo de las dos deportes. Algunos autores han intentado relacionar
estructuras de crecimiento y tienen una resistencia mecá- las diferentes lesiones traumáticas en función de los tipos
nica superior a la del hueso. de deportes [7] .
El ligamento colateral lateral está formado por tres fas-
cículos: Lesiones observadas
• el fascículo peroneoastragalino anterior;
• el fascículo calcaneoperoneo; En la formación de las lesiones se observa un verdadero
• el fascículo peroneoastragalino posterior. continuum:
En medial, el ligamento está formado por dos fascículos: • en el niño pequeño, el cartílago de crecimiento es más
• uno superficial o ligamento deltoideo, que se inserta frágil que los ligamentos. Por lo tanto, se observan sobre
desde la tibia hasta el borde superior del astrágalo todo desprendimientos epifisarios del maléolo lateral
por delante, sobre el ligamento calcaneoplantar en su más o menos desplazados;
región media y sobre el borde libre del sustentaculum • en el niño con mucha laxitud, se produce una simple
tali del calcáneo; elongación de las estructuras ligamentarias cuya evolu-
• uno profundo, tibioastragalino, con algunas fibras ante- ción suele ser rápidamente favorable sin secuelas;
riores y otras posteriores. • en los otros casos, los ligamentos pueden sufrir una
La cápsula articular, a su vez, se inserta en el contorno auténtica solución de continuidad;
de la articulación, pero no se confunde con las fisis. Sin • en el niño que no ha alcanzado la pubertad, se trata
embargo, sí presenta continuidad con el periostio. más a menudo de una desinserción ósea del ligamento,
con más frecuencia de su techo (inserción peronea) o
del piso (inserción astragalina o calcánea);
Epidemiología • en el niño con madurez esquelética, se puede produ-
cir una ruptura del ligamento en pleno cuerpo; en este
Un reciente estudio estadounidense determinó la inci- caso, el tratamiento es similar al del adulto.
dencia de lesiones del tobillo entre 2002 y 2006: el pico de
incidencia máximo estaba en el grupo de 15-19 años (7,2
por cada 1.000 personas por año) con una gran mayoría
de varones. El traumatismo aparecía casi en el 50% de los
 Conducta práctica
casos durante actividades deportivas [5, 6] . en urgencias
Tratamiento inmediato en urgencias
Fisiopatología o en la consulta
Mecanismos de lesión La acogida del niño se debe realizar en las mejores
La articulación del tobillo funciona según tres ejes de condiciones, en una sala tranquila, acompañado de sus
trabajo que están combinados y rara vez disociados: padres. Es importante conocer la fecha del traumatismo
• flexión dorsal/flexión plantar en el plano anteroposte- de forma precisa, las circunstancias de aparición, en par-
rior; ticular si ha sido en varo forzado o inversión forzada. La
• aducción/abducción en el plano frontal; noción de crujido y dolor en tres tiempos (dolor, sedación
• pronación/supinación en el plano horizontal. y vuelta progresiva del dolor) son los criterios clásicos de
La mayoría de la veces se trata de un traumatismo esguince grave. Para poder orientar mejor el tratamiento,
en inversión forzada (flexión plantar, aducción y supina- es importante tener en cuenta los antecedentes traumáti-
ción). El traumatismo en eversión forzada es más raro. Por cos del niño.

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A B
Figura 2. Radiografías estándar del tobillo en las que se objetiva un arrancamiento óseo del plano ligamentario lateral a nivel de su
inserción peronea (A, B).

Se debe aliviar y tranquilar rápidamente al niño. Es


importante inmovilizar de inmediato el tobillo del niño
con una férula, asociando analgésicos por vía oral o intra-
venosa (en función de la posible intervención quirúrgica)
y crioterapia.
En la exploración física se suele observar la limitación
debida al dolor y a la aprehensión del niño. Un buen
signo de gravedad es la impotencia funcional total. La
inspección se centra en buscar un hematoma y en locali-
zarlo. En este sentido, cuando está situado en la zona del
peroné, asociado a un dolor exquisito, orienta hacia un
desprendimiento epifisario, mientras que un hematoma
inframaleolar es el estigma de una lesión del sistema del
ligamento colateral. La realización de una prueba diná-
mica (testing) del tobillo en la fase aguda es difícil.

Pruebas complementarias
Figura 3. Fractura triplana. Se observa la asociación del trazo
Radiografías estándar epifisario, del desprendimiento epifisario y del trazo a nivel de la
Indicaciones metáfisis tibial.
En la actualidad, en la mayoría de los centros se realiza
La radiografía en proyección lateral permite buscar
de forma sistemática el estudio radiológico. Los criterios
anomalías similares, pero, sobre todo, signos a favor de
de Ottawa [8] se aplican a los pacientes de más de 18 años.
afecciones crónicas que puedan explicar patologías cróni-
Como recordatorio, el paciente con dolor a la palpación
cas como sinostosis, conflictos posteriores, etc.
de ambos maléolos, del escafoides y/o de la base del
En algunas ocasiones, la proyección en tres cuartos
5.◦ metatarsiano asociado a incapacidad para caminar más
puede evidenciar arrancamientos óseos ocultos.
de cuatro pasos puede beneficiarse de una radiografía del
tobillo. Estos criterios tienen una sensibilidad próxima al
100% en el adulto y permiten reducir un 28% el número Ecografía
de radiografías prescritas. La ecografía continúa siendo un examen atractivo para
Un equipo canadiense evaluó estos criterios en una el tratamiento de los traumatismos agudos del tobillo en el
población pediátrica de edades comprendidas entre los 2 niño cuando las radiografías son normales. Su inocuidad
y los 16 años [9] . La sensibilidad fue realmente de alrededor facilita su prescripción, aunque en algunas ocasiones es
del 95-100% para las fracturas del tobillo con un tamaño difícil disponer de un radiólogo con experiencia para que
de fragmentos de 3 mm o más. la realice.
En la práctica, es difícil no realizar este examen para no Permite confirmar la localización del esguince, elimi-
pasar por alto una fractura estrictamente no desplazada; nando los esguinces del mediopié. Define el tipo de
los criterios de Ottawa deberían aplicarse a los adolescen- lesión ligamentaria: distención simple, ruptura completa,
tes con esqueleto maduro cuyas lesiones sean idénticas a número de fascículos afectados. Este examen permite dife-
las de los adultos. renciar también la patología de los tendones peroneos,
en su corredera, que puede ser la ubicación de una teno-
Análisis de las radiografías (Fig. 2)
sinovitis, de un síndrome fisurario o una inestabilidad.
La radiografía en proyección anteroposterior permite Además, la ecografía permite diagnosticar las fracturas
descartar una fractura. Es preciso detenerse para buscar mínimas o los arrancamientos óseos no detectados por
un posible rechazo de los tejidos blandos, lo cual puede las radiografías estándar [10] .
ser una señal indirecta de un desprendimiento epifisario
estrictamente no desplazado.
Los huesecillos, especialmente inframaleolares, atesti-
Tomografía computarizada (TC)
guan una lesión de ligamentos. Es útil en caso de duda sobre una fractura, sobre todo
De forma excepcional, puede estar visible la diastasis las fracturas triplanas (Fig. 3) y las fracturas de Tillaux,
intertibioperonea, lo que confirmaría el carácter crónico que representan el principal diagnóstico diferencial del
de las lesiones. esguince del tobillo del adolescente.

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La afectación de la fisis distal de la tibia es la segunda en Es fundamental distinguir el dolor de la inestabilidad,


número después del radio. Estas fracturas aparecen prefe- ya que sobre esta noción se basa la reflexión diagnóstica,
rentemente después de que se ha cerrado el cartílago de ayudada por una exploración física completa.
crecimiento [11, 12] .

Resonancia magnética (RM) Exploración física


En este contexto, es difícil conseguir una RM. No obs- La exploración física debe ser minuciosa y estandari-
tante, puede ser útil para precisar la localización de la zada, para poder conseguir orientar la localización de la
lesión en urgencia y permite diagnosticar las contusiones inestabilidad.
óseas (bone bruise) que no se pueden objetivar en la radio- La inspección es un tiempo importante; debe buscarse
grafías e incluso con la TC y que en algunas ocasiones un edema persistente o un hematoma residual.
explican dolores de larga evolución. De fácil realización en Hay que hacer que el niño camine con el pie plano
el adolescente, en los niños pequeños no se puede obviar y a continuación sobre la punta de los pies y sobre los
la necesidad de una anestesia general para que el examen talones. De este modo se puede poner de manifiesto una
pueda aportar datos. Estudios recientes han demostrado posible retracción de los tendones calcáneos (toe walking
que el interés de la RM no es superior al del conjunto syndrome) o una cojera de evitación que manifiesta el
clínica-radiografía-ecografía. De hecho, las lesiones des- carácter doloroso con disminución del tiempo de apoyo.
critas no corresponden necesariamente a la exploración Se coloca al niño de espaldas al examinador para explo-
física inicial, con evoluciones más bien favorables [13, 14] . rar el retropié. El niño presenta un valgo importante, de
Por otra parte, sin inyección intraarticular (artrografía) casi 15◦ en el bebé, que se corrige progresivamente con el
no permite definir la estabilidad de la lesión. crecimiento. Al ponerse de puntillas se reduce el valgo del
retropié, lo que también pone de manifiesto la flexibilidad
de la articulación subastragalina.
Principios terapéuticos del esguince Se debe realizar la evaluación de la movilidad pasiva del
agudo del tobillo tobillo: hay que observar la flexión dorsal con la rodilla
extendida y a continuación con la rodilla flexionada, lo
La comunidad de cirujanos ortopédicos pediátricos que podría así desenmascarar una posible retracción del
reconoce la necesidad de inmovilizar el tobillo con una sistema sural-aquiliano-plantar.
bota de yeso durante una media de 3 semanas, con una La comprobación (testing) de la estabilidad del tobillo
descarga estricta. Algunos prefieren inmovilizarlos de se debe realizar con el niño relajado:
forma transitoria con una férula posterior de yeso y reeva- • el varo forzado prueba el fascículo peroneocalcáneo;
luar al paciente después de unos 8 días, con el objetivo de • la maniobra de cajón anterior prueba el fascículo pero-
reevaluar la semiología y realizar la inmovilización defi- neoastragalino anterior. Parece ser más específica del
nitiva. esguince del niño pequeño.
Lo ideal es que la consulta del día 8 se acompañe de una
ecografía. En la práctica, el número de niños afectados es
tal que dicho enfoque precisa mucha organización y una Entidades fisiopatológicas
gran disponibilidad por parte de los cirujanos ortopédicos
«Falsos esguinces» del tobillo del niño
y de los radiólogos.
Los niños que han pasado la pubertad pueden benefi- Apuntan a otras causas mecánicas. A menudo subesti-
ciarse de una prevención tromboembólica como la de los madas y por lo tanto no tratadas, explican el gran número
adultos. de episodios importantes registrados por la familia.
Las férulas destinadas a limitar los movimientos dife- Hiperlaxitud constitucional
rentes a la flexión no parecen estar indicadas, ya que el
En algunas ocasiones su diagnóstico es difícil, ya que
niño, que rápidamente deja de tener dolor, rechazará lle-
el límite entre lo normal y lo patológico no es muy pre-
varla durante el tiempo prescrito.
ciso. Es importante realizar una exploración simétrica y
Después de la retirada del yeso, el niño podrá volver a
comparativa y utilizar los criterios de Brighton.
caminar de forma autónoma, sin necesidad de fisioterapia,
salvo que el contexto lo haga necesario. Trastornos de la propiocepción y/o de la coordinación
La vuelta a las actividades deportivas se podrá autorizar También son difíciles de diagnosticar. En el niño, se
a las 3-4 semanas tras retomar la marcha. debe investigar de forma sistemática la posible presencia
de una neuropatía periférica o central. El uso de una reha-
bilitación apropiada permitirá mejorar la semiología, pero
 Conducta práctica en caso necesita la cooperación y la asistencia del niño y de su
familia.
de esguince recidivante Retracción de las cadenas posteriores
Anamnesis Se trata fundamentalmente de la retracción del tendón
calcáneo. El niño camina con un equino dinámico. La
Al inicio de la consulta, el médico se debe interesar inestabilidad es secundaria al acortamiento de las fases de
en identificar el primer episodio y las circunstancias del ataque y de apoyo, que pueden ser incluso inexistentes, lo
traumatismo. Es necesario establecer el número real de que pone al tobillo en una posición de riesgo de torcerse.
esguinces, evaluando correctamente la duración del dolor. Trastornos de la estática del pie
También se deberán precisar las actividades deportivas del
Los niños y adolescentes describen una auténtica inse-
niño, ya que ciertos deportes como el ballet clásico o el
guridad funcional que se diferencia de la inestabilidad real
futbol pueden orientar hacia patologías precisas, respon-
por el miedo al esguince. La aprehensión está en el pri-
sables de conflictos posteriores a nivel de la articulación
mer plano, mientras que el tobillo en sí es estable en la
tibioastragalina.
exploración física.
La dificultad fundamental estriba en hacer precisar al
niño su queja funcional:
• ¿lo que le molesta es el dolor día a día?; Secuelas de los esguinces del tobillo
• ¿ya no puede practicar su deporte porque el tobillo está Inestabilidad lateral crónica (Fig. 4, 5)
«flojo», entendiendo así que es inestable?; Es secundaria a una ruptura o una distensión demasiado
• ¿tiene miedo a caminar por un terreno accidentado? importante del sistema ligamentario lateral. El niño no

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Figura 4. Pruebas (testing) dinámicas del


tobillo en varo forzado y cajón anterior en
un adolescente de 14 años remitido por
inestabilidad crónica (A, B). Se observa
la diastasis tibioastragalina en la proyec-
ción anteroposterior como manifestación
de una lesión del fascículo peroneocalcá-
neo.

A B

Figura 5. En la imagen de resonancia


magnética se confirma la ruptura de liga-
mentos (A, B).

A B

llega a realizar sus actividades deportivas, ya que el tobi-


llo no las soporta. Entre los episodios de inestabilidad, el
tobillo no es particularmente doloroso.
En la exploración física, se observa una clara asimetría
durante las maniobras de varo forzado y/o de cajón ante-
rior. En el caso de una distensión, esta prueba puede estar
marcada por un tope blando.
En la evaluación complementaria se utilizan radiogra-
fías dinámicas que exploran y miden la laxitud diferencial
en varo y cajón anterior forzados. Las cifras están bien
definidas en el adulto, con una diastasis tibioastragalina
de más de 10◦ en la proyección anteroposterior y más de
8 mm en la radiografía lateral. En el niño inmaduro no
se ha definido ninguna cifra, por lo que en este caso es
donde toma su importancia la comparación con el lado Figura 6. Artrotomografía computarizada (artro-TC) en una
contralateral. niña de 13 años que acude a la consulta por dolores anterola-
El examen de referencia es la artro-TC: permite con- terales del tobillo secundarios a esguinces no diagnosticados, lo
firmar la ruptura de los ligamentos y también evaluar el que objetiva un conflicto tisular anterolateral con protrusión de
cartílago articular, cuya afectación puede agravar el pro- la hipertrofia sinovial cicatricial en la interlínea articular.
nóstico a largo plazo.
En el niño que aún no ha terminado su crecimiento,
estaría indicada la reinserción del plano ligamentario late-
ral asociada a un refuerzo con una estructura vecina, como Síndrome de pinzamiento anterolateral (Fig. 6)
un colgajo perióstico, con la condición de respetar la abra- Esta entidad, bien descrita en el adulto, es poco cono-
zadera pericondral o el retináculo de los extensores. En el cida en el niño y, sobre todo, en el adolescente.
adolescente maduro, se pueden utilizar todas las técnicas Se define por una cicatrización patológica del ligamento
empleadas en los adultos. lateral externo, con hipertrofia sinovial, que produce un

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A B
Figura 7. Aspectos radiológico y en tomografía computarizada de una sinostosis subtotal de la articulación subastragalina (A, B).

A B
Figura 8. Aspectos radiológico y en tomografía computarizada de un conflicto posterior secundario a un proceso posterior del astrágalo
hipertrófico (A, B).

conflicto en la interlínea tibioastragalina. El diagnóstico anormal entre dos huesos. El pico calcáneo (TLAP) es
se basa en los criterios de Liu [15] (son necesarios cinco de una forma rudimentaria a menudo subestimada que
los seis descritos): es responsable de un conflicto calcaneonavicular. Estas
• dolor premaleolar lateral a la palpación; malformaciones dan lugar a un antepié rígido, lo que
• tumefacción premaleolar lateral; explicaría los dolores mecánicos situados a menudo a
• dolor reproducible en la exploración mediante una fle- nivel del seno del tarso. El aspecto del pie es plano, rígido
xión dorsal y eversión forzadas; y contracturado [17] .
• dolor premaleolar lateral durante las cuclillas en mono- El tratamiento se basa en la extirpación de la sinostosis
podal; o en la artrodesis de la articulación afectada.
• dolor durante las actividades deportivas;
• ausencia de laxitud tibiotarsiana.
Esta patología responde bien al tratamiento artroscó- Síndrome del conflicto posterior (Fig. 8)
pico, con resultados similares tanto en el niño como en el Aunque responsables de dolores posteriores del tobi-
adulto. En este último consiste en extirpar todo el tejido llo, los pacientes refirieren con frecuencia episodios de
patológico hasta ver aparecer el ligamento colateral lateral esguince. Hace referencia a múltiples entidades nosoló-
y la cápsula articular [16] . gicas:
• el síndrome de la cola del astrágalo: en este sentido, la
Sinostosis e hipertrofia del proceso anterior apófisis posterior del astrágalo puede ser hipertrófica y
entrar en conflicto con el margen posterior de la tibia;
(TLAP, too long anterior process) (Fig. 7) • el síndrome del hueso trígono, que es un equivalente;
Son anomalías del desarrollo de las articulaciones del • el conflicto tisular posterior, que puede ser secundario o
retropié. La mayoría de las veces se trata de la presencia estar favorecido por una laxitud exagerada del astrágalo
de un punto de unión óseo, en ocasiones cartilaginoso, o del calcáneo en el plano anteroposterior [18] .

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• en algunas ocasiones, se pueden realizar técnicas de


conservación cartilaginosa abiertas (cuando la pérdida
de sustancia es importante). Se tratas de mosaicoplastias
o de injertos (autotransplantes) de condrocitos.

 Conclusión
El esguince del tobillo del niño ya no es la entidad
benigna como durante mucho tiempo se ha considerado.
Su tratamiento precisa tanto de atención como de rigor
en su análisis. Este extenso capítulo deberá matizarse en
función del estado de maduración del niño. El esguince
grave existe en el niño que aún no ha llegado a la pubertad
y debe tratarse como tal, con, incluso a veces, la necesi-
dad de una reconstrucción quirúrgica si la inestabilidad
pone en peligro el futuro de la articulación del tobillo.
Cuando el adolescente ha terminado su desarrollo pube-
ral, no escapa a las inestabilidades auténticas descritas en
el adulto e igualmente a las otras patologías demasiado a
menudo ignoradas.
Figura 9. Radiografía estándar anteroposterior del tobillo de
un niño de 10 años portador de una lesión osteocondral de la
cúpula astragalina inestable.

El dolor mecánico posterior, e incluso lateral, se


“ Puntos esenciales
relaciona con el deporte y posteriormente se hace perma-
nente. La hiperflexión plantar desencadena el dolor de • Conocer las modalidades de crecimiento del
forma exquisita. La RM es la técnica de exploración de tobillo del niño.
referencia y permite estudiar los tejidos blandos así como • Saber buscar y descartar una lesión ósea en caso
el edema intraóseo.
de traumatismo por inversión forzada en el niño.
Inicialmente se instaura un tratamiento médico, con
• Conocer que el tratamiento inicial de un dolor
reposo, fisioterapia e infiltraciones locales. En caso de fra-
caso, la artroscopia posterior del tobillo, cuando se ha postraumático del tobillo en el niño es por lo gene-
conseguido un dominio de la técnica, permite la resolu- ral ortopédico.
ción de los fenómenos dolorosos con una simplificación • Analizar minuciosamente la semiología en caso
de los cuidados postoperatorios. de esguince de repetición.
• La exploración física en el niño debe ser impera-
tivamente bilateral y comparativa, buscando una
Lesiones osteocondrales de la cúpula posible laxitud patológica.
astragalina (Fig. 9) • La exploración de referencia sigue siendo la
Habitualmente denominadas lesiones osteocondrales artro-TC, para la búsqueda y análisis de las afec-
de la cúpula astragalina (LOCA), afectan con preferen- taciones articulares y/o ligamentarias en el niño.
cia a niños y adultos jóvenes. Se han ensayado muchos
intentos de clasificación, aunque parece que la de Doré
y Rosset [19] es de uso fácil y más fiel a la realidad. Así,
describen:
• la forma F, por fractura, cuando la lesión es reciente sin  Bibliografía
modificación del hueso subcondral;
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V. Vacquerie (v.vacquerie@hotmail.fr).
Service de chirurgie pédiatrique, Hôpital de la Mère et de l’Enfant, 8, avenue Dominique-Larrey, 87042 Limoges, France.

Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Vacquerie V. Esguince del tobillo del niño y del adolescente.
EMC - Podología 2015;17(1):1-8 [Artículo E – 27-050-A-80].

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complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico

8 EMC - Podología

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