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CEPM Sap Manejo PDF
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diferentes contextos"
Juan Ignacio Bustos1, Iván Capponi2, Rodrigo Ferrante3, María José Frausin4,
Bernabé Ibañez5
1 Médico Residente en Psiquiatría Adultos, Cátedra de Psiquiatría Adultos, Facultad de Ciencias Médicas,
Universidad Nacional de Rosario. Suipacha 667, Rosario, CP 2000. Tel: (0054)-341-156403356.
juanibustos23@hotmail.com
2 Médico Residente en Psiquiatría Adultos, Cátedra de Psiquiatría Adultos, Facultad de Ciencias Médicas,
Universidad Nacional de Rosario. Suipacha 667, Rosario, CP 2000. ivancapponi@hotmail.com
3 Médico Psiquiatra. Comité de Admisión a internación, CRSM "Dr. Agudo Ávila". Suipacha 667, Rosario, CP
2000. ferranterodrigo@yahoo.com.ar
4 Médico Residente en Psiquiatría Adultos, Cátedra de Psiquiatría Adultos, Facultad de Ciencias Médicas,
Universidad Nacional de Rosario. Suipacha 667, Rosario, CP 2000. mariajosefrausin@hotmail.com
5 Médico Residente en Psiquiatría Adultos, Cátedra de Psiquiatría Adultos, Facultad de Ciencias Médicas,
Universidad Nacional de Rosario. Suipacha 667, Rosario, CP 2000. bernabeibanez@yahoo.com.ar
as well as medical conditions, and is one of so, y generalmente demandante u hostil, sue-
the most common features in general and le generar profundas reacciones en el perso-
psychiatric emergency rooms. nal sanitario que puede, por esto, ver compro-
The aim of this article is to review the cli- metido su accionar. Existe una tendencia (al
nical aspects of the syndrome and its mana- menos en nuestro medio) a menospreciar el
gement in the different fields of clinical prac- enfoque diagnóstico de estos cuadros y a atri-
tice, with particular reference to pharmacolo- buirle inmediatamente un origen psiquiátrico.
gical treatment. Sin embargo, a su origen pueden contribuir
Possible etiologies are enumerated and también, muy frecuentemente, trastornos or-
classified into three groups (delirium, psycho- gánicos que pueden representar en lo inme-
tic disorders, both primary and secondary to a diato un peligro para la vida del paciente(9).
medical condition, and non-psychotic psychia- La agitación ocurre en el 10 % de los pa-
tric disorders). General guidelines for diagnos- cientes que acuden a las instituciones psiquiá-
tic evaluation of the syndrome and its possi- tricas de urgencia (TREC Collaborative Group,
ble etiologies are described, along with the 2003), en el 11 al 50 % de los pacientes con
assessment of the risk for imminent violence lesiones craneoencefálicas traumáticas, has-
and security measures. Therapeutic options ta en el 67 % de los pacientes con Delirium, y
are considered, both non-pharmacological en el 93% de los pacientes con Demencia
(verbal interventions, physical restraint) and (Haskell, 1997). En las Unidades de Cuida-
pharmacological, mentioning the administra- dos Intensivos, hasta el 71 % de los pacientes
tion routes, drug choices and dosages accor- puede presentar agitación (Siegel, 2003) (12).
ding to the presumed diagnosis. Finally, parti- El síndrome de agitación psicomotriz no
cular aspects of care are noted, concerning constituye en sí mismo una enfermedad, sino
psychomotor agitation in special populations una conducta que puede ser manifestación de
(patients with dementia, pregnant women) and gran variedad de trastornos, tanto psiquiátri-
specific contexts (ICU, emergency room, ge- cos como orgánicos(4).
neral ward). En la aparición de una conducta de violen-
cia o agitación, en general, se imbrican gran
Palabras claves variedad de factores, tanto innatos como exó-
genos o ambientales, que interactúan entre sí
Agitación psicomotriz, violencia, delirium, y que deben ser identificados por el clínico en
seguridad, contención, antipsicóticos, benzo- la evaluación del paciente, entre otras razo-
diazepinas. nes porque pueden tener implicaciones tera-
péuticas(4).
Introducción Pretendemos en este trabajo hacer una
descripción de los aspectos clínicos que invo-
La agitación o excitación psicomotriz sue- lucran estas situaciones, y su manejo en los
le ser uno de los cuadros de presentación más diferentes terrenos de la práctica clínica (guar-
frecuente en los diversos ámbitos profesiona- dia, sala general, consultorio, etcétera), para
les, y a su vez uno de los más exigentes tanto luego dar paso a una revisión acerca de las
a nivel institucional como profesional. La pre- innovaciones terapéuticas y los protocolos
sencia de un paciente agitado, a veces confu-
Conceptos Etiología
No hay que olvidarse que todo cuadro de - Trastornos Adaptativos: bajo ciertas cir-
Delirium se produce por una o varias causas cunstancias estresantes o de gran demanda
orgánicas subyacentes (entidades "no psiquiá- emocional, pueden presentarse episodios de
tricas", abstinencia o intoxicación por drogas), agitación en personas vulnerables, sin psico-
por lo cual, para que el paciente recupere su patología de base(9).
lucidez, deberemos atender dichas causas(8).
2- Trastornos psicóticos no asociados a Abordaje general del paciente
Delirium: en estos cuadros la conciencia no agitado
se ve afectada, caracterizándose la clínica
principalmente por la presencia de vivencias Como hemos visto, hay una amplia varie-
delirantes, alucinatorias o conductas desorga- dad de circunstancias en las que los pacien-
nizadas. Los delirios suelen tener contenido tes pueden presentar agitación, es por esto
más extraño que en el Delirium, y las alucina- que se torna difícil determinar reglas estrictas
ciones son predominantemente auditivas. Los o conductas fijas para la atención de estos
trastornos afectivos, incluyendo los cuadros casos. Sin embargo, es necesario contar con
de manía, se vinculan en menor medida a epi- una protocolización mínima que permita dis-
sodios de agitación, aunque pueden ocurrir. minuir el impacto institucional y profesional
Algunas enfermedades pueden producir que estos pacientes presentan, y a la vez re-
cuadros psicóticos con agitación sin Delirium, ducir el riesgo de demandas de responsabili-
por ejemplo la cerebritis lúpica, la psicosis dad profesional(9). Es necesario que el lector
corticoidea, el hipertiroidismo o la porfiria agu- tenga en cuenta que la secuencia que se ex-
da intermitente, entre otras. Por otra parte, pondrá a continuación no debe cumplirse es-
tanto accidentes cerebrovasculares como trictamente, sino que se tendrán presentes las
traumatismos de cráneo, tumores cerebrales particularidades clínicas del caso específico.
y epilepsias parciales complejas, pueden pre- 1- Control de la conducta/medidas de se-
sentar agitación sin Delirium. Lo mismo ocu- guridad: como primera medida hay que tener
rre con el consumo de algunas sustancias, en cuenta la seguridad, tanto la del personal
ejemplo alcohol, inhalantes, marihuana, barbi- interviniente como la del entrevistado. Este
túricos y benzodiazepinas, entre otras(9). afianzamiento de la seguridad debe ser inicia-
3- Trastornos no psicóticos con agitación, do (siempre que fuese posible) por el ambien-
no asociados a Delirium: te donde la atención se llevará cabo. El con-
- Trastornos de Ansiedad: los pacientes con sultorio debe contar con muebles sólidos y
crisis de angustia, con cierta frecuencia, pue- pesados, estando despejados de objetos de
den presentar episodios de agitación. Entre vidrios y decoración, que puedan resultar ap-
los otros trastornos de ansiedad, se puede tos como proyectiles. Asimismo se deberá
observar que algunos pacientes con trastorno cuidar la presencia de elementos de curación,
por estrés agudo/postraumático pueden sufrir cables o equipo quirúrgico, puertas y venta-
agitación. nas de vidrio, etcétera. Idealmente debería
- Trastornos de Personalidad: especialmen- contar con dos puertas sin traba. En caso de
te el antisocial y el límite pueden presentar una puerta, el/los entrevistador/es, deberá/n
episodios de agitación y violencia. tener acceso a ella. También, es importante
tener un sistema de llamada al exterior para
2- Intervención para el control de la con- personas para realizarla. Es mejor utilizar co-
ducta (contención): las medidas de conten- rreas comercializadas de cuero o material tex-
ción son el elemento básico inicial para inten- til, que vendas, sabanas o similares. De no
tar controlar la agitación, se deberá tener en disponer de un dispositivo especifico, es ne-
cuenta que son un medio y no un fin en sí cesario utilizar materiales que por su contex-
mismas, ya que deben ayudar a posibilitar la tura y dimensiones no lastimen la piel ni com-
evaluación, diagnóstico y tratamiento. Se su- prometan la circulación. Los nudos utilizados
giere la siguiente secuencia: deben ser de fácil remoción, y la contención
- Contención verbal: si fuese posible, se debe ser realizada en un ámbito separado de
constituye en el primer paso. Debe transmi- otros pacientes o familiares.
tirse al enfermo que se lo está tratando de - Técnica: el jefe del equipo, que ocupará
ayudar frente a su enfermedad, evitando mos- la cabeza del enfermo, indicará al paciente de
trar miedo para lo que se torna esencial dis- modo claro, firme y asertivo que se va a pro-
poner de las medidas de seguridad ya enun- ceder a su inmovilización, el equipo contará
ciadas, mostrándose permanentemente en con una persona por cada extremidad y otro
control de la situación. Presentarse siempre para el control de la cabeza. El sujeto será
como médico, sin mirar fijo a los ojos, usando colocado de espalda, las extremidades se de-
un tono de voz calmo y neutro, escuchando y ben sujetar con ambas manos proximalmente
dejando hablar al paciente, utilizando pregun- a las dos articulaciones distales (codo y mu-
tas cortas y directas, sin confrontar, discutir o ñeca). Se podrá sujetar con correas entre dos
desafiar al paciente. En caso de actitudes puntos (brazos y piernas contralaterales) o
generadoras de miedo en el profesional, pue- cinco puntos (extremidades y cintura) según
de ser de utilidad comentarle al paciente que la intensidad del cuadro. La cabeza se colo-
su conducta inadecuada genera temor. cará ligeramente incorporada para evitar as-
Este tipo de contención puede ser efecti- piraciones, dejando descubierto parte del tó-
va en pacientes con agitación no psicótica y rax para supervisar respiración. Los sujeta-
no asociada a Delirium. Es poco útil en di- dores de cuero se deben aflojar cada 15 mi-
chos casos, en las cuales es necesario tomar nutos para prevenir complicaciones vascula-
las medidas que se presentarán a continua- res.
ción. Es imprescindible registrar minuciosamen-
- Contención física/mecánica: es un pro- te en la historia clínica todos los motivos y
cedimiento que permite limitar los movimien- circunstancias que motivaron el procedimien-
tos mediante sistema de inmovilización física. to de contención. Ante un cuadro de violencia
Se aplica ante fracaso de la medida anterior, extrema, la inmovilización debe ser realizada
o por seguridad, tanto del paciente como el por personal de seguridad o policial. Para el
entorno. Debe ser siempre temporal hasta lo- seguimiento del paciente inmovilizado se de-
grar el control conductual o el resultado far- ber aflojar periódica o rotatoriamente las ata-
macológico esperado. En ancianos puede ser duras, controlar signos vitales, al menos cada
más efectiva y más segura que la sedación 30 minutos, asegurar correcta hidratación, vi-
farmacológica. Jamás debe ser aplicado como gilar vía aérea e higiene, y si va a ser prolon-
castigo o medida de coerción. Es necesario gada, consultar con clínica médica sobre ne-
contar con un equipo de no menos de cinco cesidad de anticoagulación.
3- Evaluación del paciente: el proceso debe mática limita la posibilidad de arribar a un diag-
ir encaminado a encuadrarlo en uno de los nóstico etiológico previamente a la interven-
tres grupos etiológicos citados, y en especial, ción (Elenitza, 2004), con los consiguientes
a descartar lo más rápido y eficazmente posi- riesgos de prescribir en un contexto clínico
ble las causas que puedan suponer un riesgo incierto. En segundo término, el ámbito de la
vital para el paciente. emergencia dificulta las investigaciones clíni-
El proceso está conformado por: cas, lo cual nos enfrenta ante la relativa esca-
- Historia clínica: intensiva anamnesis, sez de evidencia empírica que guíe nuestra
recopilación de información de todas las fuen- práctica. Las conductas terapéuticas para el
tes disponibles, meticulosa y detallada enfer- manejo de la EPM, por lo tanto, presentan una
medad actual, consignando los diversos acon- gran variabilidad. Consideraremos dos aspec-
tecimientos en el tratamiento, los fundamen- tos fundamentales que inciden en la decisión
tos de las decisiones adoptadas y el tratamiento del abordaje terapéutico: la vía de administra-
instituido. ción a utilizar; y la elección de la/s droga/s de
- Examen del estado mental: prestando acuerdo a la presunción diagnóstica y perfil
especial atención a los trastornos de la con- de efectos adversos.
ciencia, evaluando para ello apertura ocular, - Vías de administración:
habla y movimientos, tanto espontáneos, como · La vía endovenosa es sin dudas la de más
respuestas a estímulos. rápida acción, pero su uso depende de que el
- Examen físico y neurológico: esencia- estado del paciente permita su aplicación, y
les en pacientes con trastornos psiquiátricos de que se cuente en la sala con el personal
agudos, y en especial, en el debut. entrenado y el instrumental necesario para
- Laboratorio y otras pruebas diagnós- implementarla y monitorear sus posibles com-
ticas: si bien la sospecha clínica orienta de plicaciones (Elenitza, 2004; Rodríguez
alguna manera el pedido de exámenes com- Marañón y col, 2004).
plementarios, parece razonable solicitar de ru- · La vía intramuscular combina los benefi-
tina: hemograma completo, glucosa, urea, cios de una fácil aplicación y un relativamen-
creatinina, electrolitos, calcio iónico, hepato- te rápido inicio de su acción terapéutica, por
grama, análisis de orina completa, y de acuerdo lo cual continúa siendo en nuestra práctica la
a las circunstancias, tóxicos en sangre u ori- vía más utilizada.
na, niveles séricos de fármacos, serología, · Si bien los consensos actuales aconsejan
estudios por imágenes, etcétera. siempre ofrecer en primer lugar una medica-
4- Tratamiento farmacológico: se utiliza en ción por vía oral (Allen y col, 2005; Lukens y
la mayoría de las situaciones, más allá de las col, 2006), es muy frecuente que esto se vea
medidas citadas anteriormente. En general se imposibilitado por la falta de cooperación del
inicia cuando los abordajes anteriores no son paciente. Asimismo, estas recomendaciones
posibles o son dificultosos (por ejemplo agita- se apoyan principalmente en la existencia de
ción en el paciente confuso o psicótico), o formulaciones orales de inicio de acción más
cuando resultan insuficientes. rápido (soluciones, comprimidos sublinguales
El tratamiento farmacológico del paciente o comprimidos orales de desintegración rápi-
agitado resulta complejo. En primer lugar, la da), no siempre disponibles en nuestro medio
necesidad de una rápida estabilización sinto- hospitalario. Por último, en el estudio de Pas-
cual y col (2006), es notable que si bien el 52 nos autores han señalado que puede aumen-
% de los pacientes aceptó la medicación oral, tar la duración del cuadro y su mortalidad
una segunda intervención fue necesaria en el (Mayo-Smith y col, 2004).
44 % de los casos, contra un 19 % de los que - EPM secundaria a enfermedad médica:
recibieron medicación intramuscular. Por lo El AT haloperidol es considerado el trata-
tanto, la elección de esta vía para el trata- miento de elección por varios autores, por su
miento de la EPM debería considerar estas probada efectividad en los casos de delirium,
limitaciones y los riesgos inherentes a la se- la escasa afectación del umbral convulsivo en
veridad de la agitación en cada caso particu- los casos de daño cerebral, y su relativa se-
lar. guridad en enfermos severos como insuficien-
- Elección de la/s droga/s: tes cardíacos o renales, o EPOCs (Rodríguez
Con pocas excepciones, los grupos farma- Marañón y col, 2004; Allen y col, 2005; Che-
cológicos habitualmente prescriptos para el vrolet y Jolliet, 2007). Las benzodiazepinas
tratamiento de la EPM son las benzodiazepi- serían la opción más adecuada si hay un diag-
nas (BZD) y los antipsicóticos típicos (AT) y nóstico previo de epilepsia, si bien el uso de
atípicos (AA). No obstante, tanto en la prác- haloperidol en esos casos no está contraindi-
tica diaria como en las publicaciones, no exis- cado (Rodríguez Marañón y col, 2004).
te un consenso unánime sobre las drogas es- - EPM en trastornos psiquiátricos primarios:
pecíficas o su dosificación. Para la agitación en el contexto de un tras-
Distinguiremos, a los fines de la elección torno psiquiátrico primario, en ausencia de sín-
de las drogas, tres tipos de EPM, en base a la tomas psicóticos, las benzodiazepinas serán
presunción diagnóstica realizada con las limi- suficientes, por vía oral o intramuscular (Ro-
taciones de la evaluación en urgencias: la EPM dríguez Marañón y col, 2004; Allen y col,
relacionada con sustancias de abuso, la EPM 2005). Si el cuadro se acompaña de síntomas
secundaria a enfermedad médica, y la EPM psicóticos, los antipsicóticos estarían especí-
en el contexto de un trastorno psiquiátrico pri- ficamente indicados, solos o en combinación,
mario, punto en el cual nos explayaremos. aunque luego señalaremos algo respecto de
- EPM relacionada con sustancias de abuso: las benzodiazepinas.
Las benzodiazepinas serán de elección En nuestro medio los AT son los más utili-
cuando se sospechen abstinencia por benzo- zados, como lo prueba un estudio retrospecti-
diazepinas y/o alcohol, o intoxicación con es- vo de Mizrahi y Iannantuono (2000), que los
timulantes (cocaína, anfetaminas), por sus encontró en el 84% de las prescripciones,
beneficios específicos y su seguridad (Rodrí- generalmente en combinación, aunque sin un
guez Marañón y col, 2004; Elenitza, 2004; patrón regular. Los AA (especialmente rispe-
Allen y col, 2005). Deberán evitarse en el ridona, olanzapina y ziprasidona), restringidos
caso de que exista intoxicación por cualquier en nuestro medio por su alto costo, crecen en
sustancia sedativa, prefiriéndose en estos ca- uso en otros países, tal como lo prueban estu-
sos los AT (Elenitza, 2004). dios descriptivos (Pascual y col 2006), y las
El uso de AT para el tratamiento del deli- últimas revisiones y consensos (Allen y col,
rium tremens podría ser indicado, en combi- 2005; Yildiz y col 2003; Lukens y col 2006).
nación con BZD, para los casos severos que No obstante, las ventajas de los AA se ven
no respondan al tratamiento inicial, pero algu- con respecto a sus menores efectos adversos
tener en cuenta los efectos adversos de los 4- Paciente agitado con demencia: las al-
psicofármacos utilizados (Haloperidol gene- teraciones conductuales o síntomas neuropsi-
ralmente) siendo estos más frecuentes y más quiátricos son muy frecuentes en los pacien-
importantes, por lo que habría que ser más tes con demencia presentándose en el 90%
prudente en la dosis a utilizar e indicar la me- de los casos durante la evolución, siendo en-
nor dosis posible que pueda lograr la disminu- tre ellos muy frecuentes la agitación y la agre-
ción de la agitación del paciente, incluso cuan- sividad (60-80%). Son los responsables de una
do se use medicación sedativa para que el mala calidad de vida de los pacientes, familia
efecto sea menor y permita la evaluación clí- y/o cuidadores, y son en general, la causa de
nica evolutiva continúa, tan importante en este la institucionalización(10).
ámbito. En cuanto al tratamiento, como primer
3- Paciente agitado en la guardia del hos- punto debemos identificar y tratar las causas
pital general: en este ámbito es muy frecuen- reversibles de estos síntomas asociados a de-
te la consulta de pacientes con algún grado mencia. El cerebro humano en estos pacien-
de excitación psicomotriz, y plantea en éste tes es más vulnerable a los efectos de estre-
sentido un particular desafío para los médicos sores, ya sean psicológicos, físicos o cambios
y resto del personal de guardia por la gran en el entorno, por lo que es muy importante
movilidad que generan en el ambiente y por la realizar el diagnóstico diferencial con los cua-
carencia de recursos que se presentan para dros de delirium.
tratarlos en muchas oportunidades. Otro tipo Como segundo punto, la implementación
de desafío se genera a partir de que en los de "estrategias conductuales", muchas veces
servicios de guardia generales los cuadros de modificando pequeñas cosas del ambiente se
agitación pueden responder a las más varia- logran grandes beneficios que mejoran la ca-
das situaciones clínicas (enfermedades médi- lidad de vida, teniendo como ventaja princi-
cas, intoxicaciones, abstinencias, descompen- pal, la de evitar riesgos con la utilización de
saciones psiquiátricas psicóticas o no psicóti- medicamentos. Un entorno seguro, previsible,
cas, etcétera) con la implicancia terapéutica con una rutina marcada, son los mejores ele-
que esto presenta. mentos de prevención para evitar generar
Muchas veces se observa en este contex- aumentos innecesarios de estrés con la con-
to que, por la sintomatología florida y ruidosa secuente "desestabilización" del paciente.
que presentan estos pacientes, el personal de En cuanto a las intervenciones farmacoló-
atención (enfermeros, seguridad, incluso los gicas debemos priorizar un uso racional de
propios médicos) menosprecia la situación, no psicofármacos, teniendo en cuenta que hasta
haciendo una adecuada lectura semiológica el día de hoy la FDA no aprobó ningún fárma-
("la agitación como síntoma"). co para tratar la agitación, agresividad o psi-
Las cuestiones relacionadas estrictamen- cosis asociada a demencia.
te con el tratamiento no varían de lo presen- Dentro de las posibilidades medicamento-
tado en el abordaje general poniendo especial sas debemos remarcar que los síntomas de
importancia en ésta primera impresión clínica agitación y/o agresividad pueden responder a
para evitar la utilización de fármacos que pue- los Inhibidores de la Acetilcolinesterasa con o
dan resultar perjudiciales en casos particula- sin memantine, siendo drogas muy bien tole-
res. radas por esta población de pacientes, aun-
que no se sabe aún si la mejoría conductual el feto, los médicos deben priorizar las estra-
se da al disminuir el déficit cognitivo o es pro- tegias de contención verbal como primera lí-
ducto de mecanismos independientes. nea de tratamiento para el abordaje de dichos
Como segundo grupo farmacológico, y ante cuadros. Sólo cuando estas estrategias no far-
la falta de respuesta a los anteriores se utili- macológicas resulten insuficientes se debería
zarán los antipsicóticos, entre éstos los atípi- recurrir a los psicofármacos, tratando de utili-
cos (risperidona, olanzapina y quetiapina prin- zarlos en la menor dosis y por el período más
cipalmente), ya que los típicos empeorarían la breve posible.
función cognitiva, y para los cuales, estos pa- Los dos grupos farmacológicos que cuen-
cientes son más proclives a desarrollar efec- tan con la mayor aceptación son los antipsi-
tos adversos extrapiramidales. Tanto típicos cóticos y las benzodiacepinas, ya sean solos o
como atípicos han demostrado en estudios un combinados. Dentro de los AT, el haloperidol
aumento de la mortalidad (1,6-1,7) en rela- es el que posee el nivel de evidencia más alto
ción a personas que no recibían estos fárma- por lo que suele ser el más utilizado en los
cos (aunque no se pudo demostrar si era por servicios de urgencia. Un reciente estudio
la medicación o por mayor vulnerabilidad de determino la seguridad del haloperidol en 215
los pacientes medicados), por lo que la elec- embarazadas y encontró porcentajes de mal-
ción se hará evaluando riesgo-beneficio, to- formaciones que no diferían entre el grupo
davía a favor de los AA en agitación severa y expuesto y el grupo control. Además, cuenta
con riesgo para pacientes y/o cuidadores. con la ventaja de poder ser administrado por
Siempre informar sobre el riesgo a la familia vía intramuscular. Otra alternativa válida es
(consentimiento informado) y medicar con la la prometazina, por su gran efecto sedante.
menor dosis posible (olanzapina 2,5 mg/d, ris- En relación a los AA, al ser agentes más nue-
peridona 1mg/d y quetiapina 50mg/d) por corto vos, poseen menos datos disponibles sobre su
tiempo. seguridad durante el embarazo. Teniendo en
Las benzodiazepinas deberán ser usadas cuenta estas reservas, la clozapina, la risperi-
con precaución en ésta población, especial- dona y la olanzapina no se vincularon clara-
mente por el empeoramiento cognitivo, riesgo mente con la aparición de ninguna anomalía
de caídas y reacciones paradojales que pro- congénita. Si bien la clozapina parece ser una
ducen. De usarlas, elegir aquellas de vida droga bastante segura (Categoría B) su em-
media corta o intermedia, siendo la más estu- pleo no sería recomendable por el riesgo aso-
diada el lorazepam tanto por vía oral como ciado de agranulocitosis. El aumento de peso
intramuscular, limitándose a crisis extremas que suele generar la olanzapina podría com-
de agitación y/o agresividad. plicar el desarrollo del embarazo. Se publicó
5- Paciente embarazada con agitación un informe de un caso de agenesia del cuerpo
Los cuadros de excitación psicomotriz que calloso en un bebé expuesto intraútero a ris-
se presentan durante un embarazo suelen pro- peridona(15).
vocar gran ansiedad en el médico clínico. Las benzodiazepinas solas o combinadas
Debido a que no contamos con estudios con- con antipsicóticos también se usan para los
trolados que evalúen la eficacia y la seguri- episodios de excitación psicomotriz. Algunos
dad de los psicofármacos durante el embara- estudios reportaron una asociación entre el uso
zo y las posibles consecuencias negativas para de benzodiazepinas en el primer trimestre del
embarazo y la aparición de labio leporino y tuar con mucha prudencia, y que en general
paladar hendido. A pesar de que estos datos no suele ser efectiva, menos aún cuando es-
fueron cuestionados, es preferible evitar su tos cuadros son secundarios a Delirium, como
empleo durante el primer trimestre, por lo en general ocurre en el Hospital General.
menos hasta la décima semana que es cuan- De no haber funcionado la contención ver-
do se produce el cierre del paladar. También bal se continuará con la contención física la
se deberían indicar con precaución en los cual consta de una serie de pasos que debe-
momentos cercanos al parto ya que pueden rán respetarse a fin de evitar complicaciones
generar un cuadro neonatal conocido como y/o lesiones secundarias a esta indicación re-
Floppy Infant Síndrome(7). gistrándose la misma en historia clínica.
Las restricciones físicas, reservadas para A la hora de hablar del tratamiento medi-
los casos más severos, pueden generar ries- camentoso, podemos concluir que el mismo
gos significativos para el embarazo por lo que se instalará cuando la situación lo permita,
se desaconseja su uso. siendo necesario en la mayoría de los casos,
Otra situación que se debe tener en cuen- y constando en general de la aplicación de
ta al momento de abordar dichos cuadros, es antipsicóticos típicos, sobretodo haloperidol en
la posibilidad de que la paciente desconozca cuadros asociados a enfermedad orgánica,
que está embarazada. Por esto, creemos que antipsicóticos atípicos, menos frecuentemen-
toda mujer en edad fértil que presente un cua- te y en formulaciones de rápida acción, y de
dro de excitación psicomotriz debe ser consi- benzodiazepinas, solas o asociadas a los an-
derada como posible embarazada a la hora teriores, en especial en cuadros relacionados
de ser medicada, previniendo de esta forma con abuso o abstinencia de sustancias.
posibles consecuencias negativas. Como vimos éstas situaciones de emer-
gencia pueden presentarse en diferentes con-
Conclusiones textos, ya sea guardia general, guardia psi-
quiátrica, sala general, unidad de cuidados in-
La excitación psicomotriz se constituye tensivos, consultorio externo, etcétera, y en
como uno de los principales síndromes que se diferentes tipos de paciente, respecto de la
presentan en todos los ámbitos médicos y que edad, enfermedades orgánicas comórbidas,
plantea en general un dilema para el médico abuso de sustancias, antecedente de trata-
tratante que debe obrar con rapidez debido al miento psiquiátrico, enfermedad psiquiátrica
riesgo que conlleva la tardanza en la imple- primaria, etcétera, por lo que el médico o equi-
mentación de un tratamiento adecuado. po tratante, deberá realizar, conjuntamente con
Como medida básica y primordial en di- su accionar terapéutico, una aproximación
cho tratamiento se encuentra la de preservar diagnóstica que permita una mejor implemen-
la seguridad tanto del personal tratante como tación de dicho tratamiento y que a la vez sir-
la del paciente o terceros que pudieran inter- va como punta pie inicial para la secuencia de
venir en el episodio, como por ejemplo pacien- operaciones que lleven a un diagnóstico cer-
tes contiguos en sala general. tero una vez cedido el cuadro agudo, ya que,
Una vez tomados los recaudos desde el recordemos, la excitación psicomotriz no cons-
punto de vista de la seguridad se intentará una tituye una enfermedad en sí misma.
contención verbal para la cual se deberá ac-