CONQUISTAR LA VANGUARDIA EN LA ESTRATEGIA DE LA

EMANCIPACIÓN DE LAS COMUNIDADES OPRIMIDAS

Históricamente, el relato de la emancipación sobre la comunidad humana asentada en el

archipiélago canario, ha estado en las manos de la ideología estatista nacionalista, tanto
en su versión liberal radical del nacionalismo anticolonialista, como de las diversas
corrientes de origen marxista. Hoy, existen condiciones históricas y de conciencia para
que esto deje de ser así. En el ensayo de pronta publicación NACIONALISMO Y
REVOLUCIÓN. El Estado nación y el paradigma de la Revolución Integral, se trata de
aportar aquellos elementos de reflexión y análisis para que este objetivo se produzca.
Justamente el Libro II de dicho ensayo se dedica al esclarecimiento de las cuestiones
esenciales que han caracterizado al nacionalismo anticolonialista en Canarias, bajo el
título: El nacionalismo anticolonialista en Canarias. Verdades y fantasías. Aquí se
reproduce únicamente un pequeño apartado de“Conclusiones políticas”.

Conclusiones políticas.

1. Las ideologías revolucionaristas de clase media (burguesía media y pequeño

burguesa) siempre han planteado sueños emancipatorios de corte social o patriótico, en
aquellos momentos críticos para el sistema de dominación, y Canarias no iba a ser
menos. Aquí sucedió para el sistema de poder del Estado imperialista español, con la
crisis finisecular del XIX, derivada de acontecimientos como la guerra inter-imperialista
España-EEUU de 1898, cuyo fruto es el Tratado de París con la definitiva “pérdida” de
Cuba y la “venta” de Filipinas a EEUU por 20 millones de dólares. Luego le siguen las
“independencias” de las colonias españoles de Puerto Rico, que junto a Guam quedan
como neocolonias norteamericanas hasta el presente. Finalmente las posesiones
españolas que quedaban en Oceanía se entregan a Alemania en virtud del Tratado
germano-español de 1898. De nada sirvió que el colonialismo español se centrara en sus
posesiones africanas, en competencia con la otra potencia imperial-colonialista rival,
Francia. De hecho, los restos coloniales españoles que quedaban en el XX (Marruecos,
Guinea Ecuatorial, Sahara y Canarias, esta última con rasgos muy peculiares, como
hemos visto) van cayendo en periodos diferentes, Marruecos en 1956, Guinea
Ecuatorial en 1968 y Sahara, entregado a Marruecos en virtud del Acuerdo Tripartitos
de Madrid, en 1975) y Canarias, en una relación neocolonial con España y la Unión
Europea.

Esta situación genera en Canarias el correspondiente movimiento patriótico-

independentista de clase media liderado por Secundino Delgado, de inspiración propia
del soberanismo latinoamericano. Igualmente, de forma similar, sucede a partir del
Acuerdo Tripartito de Madrid, y en el contexto de la lucha inter-imperialista USA-
URSS centrada en África, dónde Canarias, región fronteriza y apetecible para ambas
superpotencias, provoca una crisis de Estado que cuestiona la titularidad estatal de las
islas, creándose con ello el clima adecuado para que de nuevo sectores de las clases
medias, esta vez tomando como referencia los procesos de descolonización africanos de
los años 60 y 70, se lanzaran a protagonizar un nuevo intento de “conquistar” la
independencia de Canarias, con el monopolio del poder de un Estado propio, y cuyo
máximo representante fue sin duda Antonio Cubillo y el MPAIAC.

2. En ambos casos, el proyecto ideológico se basó en el nacionalismo de “colonia

oprimida por la metrópoli europea española”, desconsiderando el hecho crucial de que
el estatus de Canarias, primero como colonia, hasta el siglo XIX, y luego como
neocolonia española de tipo interior (“independiente” en lo económico, y “española”
en lo político-administrativo) fue producto de un acuerdo o pacto sostenido con España
por las clases dominantes de Canarias, fruto de una rapiña y genocida Conquista. Pacto
que tuvo su “justificación” esencial en la evaluación de la eficiencia productiva de
Canarias que aconsejaba la implantación y desarrollo de una economía, y por tanto, una
estructura de clases, vinculada al valor geoestratégico de Canarias.

3. La experiencia de este modo de economía y sociedad, en sus dos grandes fases, con la
Conquista colonial europea y con la revolución burguesa liberal españolista, ha
significado una destrucción casi irrecuperable del medio físico de Canarias1, hoy ya
caótico, y de muy difícil supervivencia, incluso humana, ante una crisis internacional
que afectará con toda seguridad a sus elementos claves: el turismo, las comunicaciones,
los suministros alimentarios y la energía, junto al abandono progresivo de las tareas
agrícolas, el incremento del uso de la energía por razones de población y turismo, así
como de las infraestructuras de comunicaciones, hace que la dependencia externa de la
población actual de Canarias para sobrevivir sea casi absoluta. Desde el agua, que ya se
suministra desde potabilizadores a base de agua marina, los productos alimenticios
naturales como frutas, verduras, carne, leche, de primera necesidad, son casi todos
importados del mercado peninsular y europeo, y hasta de Latinoamérica, monopolizadas
la mayoría por las multinacionales de la alimentación y consumo (superficies
comerciales) francesas, españolas y alemanas. Las infraestructuras viarias relacionadas
con las comunicaciones (carreteras, puertos y aeropuertos) devastan los terrenos útiles
cuando no zonas vírgenes del medio ambiente (Puerto de Granadilla, anillo insular de
Tenerife, anillos de acceso a Las Palmas de Gran Canaria, etc.). En definitiva, todas
estas infraestructuras relacionadas con el modelo neocolonial interno de explotación de
Canarias, hace que la inmensa mayoría de las empresas presentes en las islas ni siquiera

1
Superpoblación, externalización productiva del consumo básico (Canarias depende de la importación de
alimentos básicos en un 92%), explotación inconmensurable de los recursos turísticos y comerciales por
parte de todas las potencias imperialistas, desde los EEUU, la UE, Rusia y China. La realidad es que
Canarias viene conociendo un incremento brutal -insostenible- de sus variables vitales, en el sentido más
negativo, que afectan a la propia supervivencia de las comunidades humanas asentadas en las islas, con la
destrucción misma del entorno físico, ya casi irrecuperable. Factor población: Canarias tiene 2.108.121
habitantes, para un territorio de 7.493 km2, lo que hace que tenga un índice superior a la población
peninsular en más de 3 veces, alcanzando niveles muy altos, incluso en el plano mundial (Padrón oficial
2017), si tenemos en cuenta que la inmensa mayoría de la población se concentra en las dos grandes
capitales de Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife, y que la orografía hace que las más
amplias zonas no sean habitables (montañas o desiertos), y si a esto añadimos la invasión turística que
duplica a la población residente habitual, (datos de 2016 dieron la cifra de visitantes en ese año de
12.890.000), resultan aglomeraciones humanas que viven en un caos cotidiano de tráfico y hacinamiento.
Por supuesto que el efecto sobre el medio natural fue devastador.
estén radicadas en Canarias, siendo esencialmente del gran capital español, como las
constructoras, o del resto de Europa, como las aéreas o los tour operadores, que
monopolizan el expolio de Canarias. Todo lo cual define un contexto de una situación
social muy degradada: mayores índices del Estado en superpoblación, parados y fracaso
escolar2.

4. Ninguna opción nacionalista-independentista puede dar alguna solución a esta

situación, en razón a su paradigma originario, puesto que tiene realmente por objetivo la
dotación de un Estado “canario” con la finalidad de situar en el poder a los sectores
burgueses que hoy no se sienten satisfechos con el actual reparto de ese poder entre las
élites dominantes de Canarias y las del Estado. Ese “pacto” hoy alcanza niveles de
profundidad nunca vistos en la historia, con la derrota y descrédito de las opciones
políticas nacionalistas y marxistas desde hace más de 30 años, los sectores oligárquicos
dominantes en Canarias, que cuentan en sus filas políticas con numerosos líderes de
ambas corrientes, que incluye hasta el mismo Presidente del Gobierno, con lo cual se
está dando rienda suelta a sus sueños no imaginados de hace solo una década: vía libre
para renovar la opción más destructiva para Canarias basada en el binomio turismo-
construcción, vía libre también al “pelotazo” descomunal con el cambio del modelo
energético canario, del petróleo a la gasificación, dicen, “previo a las renovables”, y el
“caramelo” envenenado de incluir en la Ley que se debate de modificación del REF de
la subvención del 75% de las tarifas aéreas para los residentes canarios. En síntesis:
potenciar hasta aquellos niveles ya casi insostenibles la explotación neocolonial de
Canarias con la destrucción irrecuperable de su ecosistema y la idiotización completa de
sus habitantes con las “sobras” de este “banquete” a base de consumo barato, asistencia
social para parados y marginados (con el índice más elevado del Estado de paro, además
de forma estructural, declarando un 22% de hombres y 24% de mujeres, cuando en el
Estado se encuentra en niveles de 14% en hombres y 16% mujeres (datos INI
noviembre 2019-octubre 2018), mientras a la pequeña burguesía y a la aristocracia
obrera se les “subvenciona” con rebajas en los billetes de avión para fomentar el
consumismo. Ello viene a implicar que el único cambio “posible” para ellos sea
renegociar ese pacto neocolonial con las potencias imperialistas mundiales dominantes
en las islas, empezando con el Estado español y la UE. Eso es ya una ley histórica.
Únicamente el pueblo, siempre y cuando sea capaz de autoconstruirse como tal, para
dejar de ser masa manipulada desde el consumo y la alienación, y por ello capaz de
acabar con el autoengaño en el actual sistema político de democracia dirigida y opte en

2
Las conclusiones del informe PISA (Informe del programa internacional para la Evaluación de
Estudiantes (por sus siglas en inglés: Programme for International Student Assessment, es un estudio
llevado a cabo por la OCDE a nivel mundial que mide el rendimiento académico de los alumnos en
matemáticas, ciencia y lectura), publicado el 3 de diciembre de 2019, (El País de 5/12/19), aporta unos
datos que, al menos, en una segunda lectura resultan muy interesantes: los índices de “repetición de
curso” es en Cataluña de un 16%. En Cauta y Melilla, sus índices son del 49,1%, la primera y del 45,6%
la segunda, como claramente corresponde con sociedades coloniales clásicas. Y en Canarias se sitúa en un
35,6%, esto es, la máxima del Estado, y similar a la de Albania. Es decir, que se aproxima mucho más
Canarias a los índices de estas dos plazas, o al peor modelo europeo. Pero es que tanto Extremadura como
Andalucía también tiene unos índices elevados. ¿Qué significa esto? Que en el desarrollo histórico de los
Estados, y del capitalismo en cada uno de ellos, en la división interna de la organización de los procesos
productivos, se atribuyen recursos a unos territorios para favorecer sociedades industriales y modernas, y
a otros, se les margina, asignándoles funciones de producción marginales o secundarias. Es lo que
algunos denominan como colonialismo interior (Extremadura), diferenciado del colonialismo exterior
(Cauta y Melilla), y el neocolonialismo interior (Canarias), todo ello en función del grado y tipo de
integración de sus economías e instituciones políticas en el seno del Estado nación capitalista central.
favor de un sistema verdaderamente democrático, asambleario y directo, revolucionario
y comunitarista, en el marco de una estrategia de una revolución verdadera e integral,
podrá iniciar el larguísimo camino de intentar cambiar la situación, de lo cual, tal y
como ha avanzado la destrucción de las conciencias y del medio físico, será solo una
posibilidad.