los precios ofrecidos por los compradores, dependen de compromisos
comerciales internacionales asociados a la disponibilidad del producto, lo que
genera importantes fluctuaciones en los precios”, señala un vocero del Min Agricultura. En 2017, Perú exportó US$ 9.221.000 de sacha inchi, y su principal comprador fue Corea del Sur, con una participación del 61%. Estados Unidos, Japón, Francia, Canadá y España ocuparon los siguientes lugares de representatividad de este producto en el comercio exterior del país sudamericano. Si bien Colombia lleva pocos años en la investigación sobre los beneficios del sacha inchi, ya hay una gran cantidad de empresas que se dedican a la producción, trasformación y comercialización de este fruto en sus diferentes presentaciones. Un ejemplo de ello es la Cooperativa Sacha Colombia, que cuenta con 232 unidades empresariales en 22 departamentos de Colombia, dedicadas al cultivo y la fabricación de productos alimenticios y cosméticos a base de sacha inchi. “El mercado es poco, pero ya hemos hecho algunos envíos de la nuez tostada a Corea del Sur y del aceite a Suiza y Estados Unidos”, destaca Viviana Aldana, vocera del área de biorrefinería de Sacha Colombia. Bahnsen sostiene que han invertido ya US$1,5 millones en todo el proceso de acopio y producción de derivados y que ya tienen de clientes a supermercados naturistas en Estados Unidos. Les gustaría llegar a Corea o Japón, donde este tipo de productos son muy apreciados. En 2018 exportaron 239 toneladas de sacha inchi colombiana, principalmente a Perú, Ecuador, Panamá, Dinamarca y Países Bajos. El modelo de negocio ha funcionado porque Agro solidaria garantiza la compra de la totalidad de la cosecha a los productores. Y luego lo procesa para producir el aceite, que ya cuenta con registro Invima, lo que facilita su exportación. Aunque el sacha inchi es una planta milenaria que cultivaban los incas, en Colombia apenas lo conocen, mientras que cadenas estadounidenses de comida natural como Whole Foods lo tienen en sus estanterías. Este alimento de moda tiene nueve aminoácidos, lo que para los expertos implica que puede remplazar la carne. Ayuda con la presión arterial al fortalecer el corazón; reduce los índices de colesterol en la sangre; agiliza las funciones cerebrales ligadas a la memoria, inteligencia y racionamiento; sirve como antioxidante y, lo más importante, desde el punto de vista de los negocios, es que le atribuyen propiedades adelgazantes. Según una investigación de la agencia de inteligencia de mercados estadounidense Mintel Global New Products Data base, el número de nuevos productos que contienen componentes denominados como superalimentos ha aumentado más de 200% entre 2011 y 2015. Además, prevé que sus ventas excedan los US$300.000 millones para 2020 solo en Estados Unidos.