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La empresa no debería tener ningún inventario, si fuera posible, porque mientras los
productos se encuentran en el almacén no generan rendimientos y deben ser financiados.
Sin embargo, la mayoría de las empresas consideran necesario mantener algún tipo de
inventario porque: 1) la demanda no se puede pronosticar con certeza, y 2) se requiere de
cierto tiempo para convertir un producto de tal forma que se pueda vender.
Además, del mismo modo que los inventarios excesivos son costosos para la empresa,
también lo son los inventarios insuficientes, porque los clientes podrían dirigirse a los
competidores si los productos no están disponibles cuando los demandan, y podrían perderse
algunos negocios.
Una gestión adecuada del inventario requiere de una coordinación entre los departamentos de
ventas, compras, producción y finanzas. Una falta de coordinación entre estos departamentos,
la existencia de pronósticos de ventas deficientes, pueden conducir a un fracaso financiero.
TIPO DE INVENTARIO
Los conceptos que forman al inventario pueden agruparse en una de las siguientes categorías:
1. La materia prima incluye los nuevos artículos de inventarios que se les compra a los
proveedores; es el material que compra una empresa para transformarlo en productos
terminados destinados a ser vendidos. En la medida en que la empresa tenga un
inventario de materia prima, las demoras en la colocación de órdenes y en las entregas
de los proveedores no afectaran el proceso de producción.
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NIVEL OPTIMO DE INVENTARIO
COSTOS DEL INVENTARIO: Por lo general, clasificamos los costos de inventario en dos
categorías: las que están asociadas con el mantenimiento del inventario, y las relacionadas
con el ordenamiento y la recepción del inventario.
1. Los costos de mantenimiento incluyen todos los gastos asociados con el hecho de
tener un inventario, tales como el alquiler del almacén donde se guarda y los seguros
que se contratan sobre ellos; asimismo, dichos gastos aumentan en proporción directa
a la cantidad promedio de inventarios que se lleve.
Para simplificar el contexto, trataremos a todos los costos de mantenimiento como variables y
a todos los de ordenamiento como fijos.
Si suponemos que la empresa conoce la cantidad total de inventario que necesita y si las
ventas se distribuyen uniformemente durante cada periodo, podemos combinar los costos
totales de mantenimiento (CTM) y de ordenamiento (CTO) para determinar el costo total del
inventario (CTI), como se describe a continuación:
Q T
CTI = {(C ∗ PC) ∗ ( )} + {(O) ∗ ( )}
2 Q
En donde:
C = Costos de mantenimiento como porcentaje del precio de compra de cada artículo del inventario.
PC = Precio de compra o costo por unidad.
Q = Número de unidades compradas en cada pedido.
O = Costos fijos por orden.
T = Demanda total, o número de unidades vendidas, por periodo.
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De acuerdo con esta ecuación, la inversión promedio en inventarios depende de la frecuencia
con la cual se coloquen las órdenes y de su tamaño.
Si ordenamos todos los días, el inventario promedio será mucho más pequeño que si
ordenamos una vez al año y, en ese caso los costos de mantenimiento del inventario serán
bajos; pero el número de órdenes será muy grande y los costos de ordenamiento serán altos.
Podemos reducir los costos de ordenamiento colocando pedidos por mayores cantidades y con
menor frecuencia, pero entonces el inventario promedio, y por lo tanto los costos totales de
mantenimiento, serán altos.
2∗O∗T
CEO = √
C ∗ PC
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Suponga que la empresa Pinta S.A., un distribuidor de camisetas diseñadas por los
mismos clientes dispone de la siguiente información:
Si Pinta S.A ordena 6.500 camisetas cada vez que necesite inventario, colocará
78.000/6.500=12 ordenes por año, y llevara un inventario promedio de 6.500/2 = 3.250
unidades.
Por lo tanto, en el nivel de la cantidad económica de la orden, los costos totales del inventario
de Pinta S.A. serian iguales a 6.240 dólares:
Q T 6500 78000
CTI = {(C ∗ PC) ∗ ( )} + {O ∗ ( )} = {(0,25 ∗ $3,84) ∗ ( )} + {($260) ∗ ( )} = $6,240
2 Q 2 6500
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El cuadro superior contiene los costos totales del inventario en los cuales incurriría Pinta S.A
según diversas cantidades de ordenamiento, incluyendo el nivel de la cantidad económica de
la orden.
Observe que: 1) a medida que la cantidad ordenada aumenta, los costos totales de
mantenimiento también lo hacen, mientras que los de ordenamiento disminuyen, y viceversa;
2) si se ordena una cantidad inferior a la cantidad económica de la orden, los costos de
ordenamiento son mayores a los costos de mantenimiento. Y 3) si se ordena una cantidad
superior a la cantidad económica de la orden, los costos de mantenimiento son mayores a los
costos de ordenamiento.
$45,000
COSTOS TOTALES DE MANTENIMIENTO
$40,000 COSTOS TOTALES DE ORDENAMIENTO
COSTOS TOTALES DEL INVENTARIO
$35,000
$30,000
COSTOS TOTALES
$25,000 DEL INVENTARIO
$20,000
$15,000
PUNTO DE REORDEN
Nivel de inventario en el que debe colocarse una nueva orden. Suponga que existe una
demora entre la fecha en la que se ordena el inventario y la que se recibe, la empresa deberá
reordenar antes de quedarse sin inventario. Por ejemplo, si normalmente se requieren de dos
semanas para recibir órdenes, Pinta S.A. debería reordenar cuando queden dos semanas de
inventario. Pinta S.A. vende 78.000/52 = 1.500 camisetas por semana, en consecuencia, su
punto de reorden aparece cuando el inventario disminuye a 3.000 camisetas.
Aun si Pinta S.A. ordena un inventario adicional del punto de reorden apropiado, una demanda
inesperada podría ocasionar que se quedara sin inventario antes de que se entregara el
nuevo. Para evitar este inconveniente, la empresa puede mantener un inventario de
seguridad, es decir, inventarios adicionales que le ayudan a protegerse de las demandas
inesperadas.
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Por lo general, la cantidad del inventario de seguridad que una empresa mantiene
aumenta debido a: 1) la incertidumbre de los pronósticos de demanda; 2) los costos (en
términos de las ventas perdidas y del crédito comercial perdido) generados por los faltantes
del inventario, y 3) la probabilidad de que ocurran demoras en la recepción de los embarques.
En los casos en que es poco realista suponer que la demanda del inventario es uniforme todo
el año, no debería aplicarse anualmente el modelo de la CEO. En lugar de ello, es más
adecuado dividir el año en estaciones en que las ventas son relativamente constantes,
digamos, verano, primavera, otoño y el invierno; de este modo, el modelo de la cantidad
económica de la orden podrá aplicarse en forma independiente en cada periodo.