Está en la página 1de 4

Efectos sobre el sistema inmunológico

Acciones
Doble componente:
1. Directas: dependen de la estimulación de receptores opioides localizados en las células
del sistema Inmune.
2. Indirectas: mediadas por la regulación de mecanismos neuronales
Consumo crónico de opioides reduce la respuesta inmunológica y facilita infecciones
(VIH, hepatitis, etc).
Capacidad para desarrollar adicción, tolerancia y dependencia
Adicción
 Deseo compulsivo de consumir la sustancia es frecuente por la relación del
sistema opioide con el control de los circuitos dopaminérgicos de recompensa.
Tolerancia
 Hay reducción del efecto analgésico, es necesario incrementar la dosis.
 Se relaciona con sistemas reguladores de la neurotransmisión: -glutamato -óxido
nítrico
 Síndrome de abstinencia por interrumpir consumo crónico, por morfina, inicia de
6-8 horas después de la última toma.
Otros efectos
- Rigidez muscular: a efectos a las vías respiratorias.
- Hipotermia: por desequilibrio hipotalámico en el control de la temperatura.
Consumo crónica causa leve hipertermia.
- Alteraciones neuroendocrinas: hay reducción de hormonas liberadoras
hipotalámicas (corticotropa, gonadotropa), disminuyen las hormonas periféricas
y aumenta la liberación de la hormona de crecimiento.
- Miosis: es patognomónico a intoxicación opioide, se caracteriza: pupilas
puntiformes, depresión respiratoria y coma.
- Convulsiones: por dosis altas de opioides y responde mal al tratamiento con
anticonvulsivantes tradicionales.
Reacciones adversas del uso de opioides
 De acuerdo a sus reacciones farmacológicas y su relación con las concentraciones
que alcanza en SNC, los opioides más liposolubles presentan reacciones adversas
graves, por la velocidad de paso a la barrera hematoencefalica.
- Alteraciones psicomiméticas:
Disforia: común en consumidores de drogas por estimulación de receptores K.
Somnolencia y estado de ensoñación: se reduce la capacidad de relación
paciente - medio.
- Alteraciones respiratorias.
Depresión respiratoria: más temido al utilizar opioides en el tratamiento del
dolor. Tiene componentes centrales y periféricos y afecta a todos los parámetros
de la función respiratoria.
- Alteraciones cardiovasculares: no son importantes.
Hipotensión ortostática leve: por inhibición de reflejos vasopresores y por la
vasodilatación inducida por histamina.
Urticaria y prurito: no son graves, pero si frecuentes.
Aumento de la presión intracraneal: por vasodilatación. Se recomienda no
utilizar opioides en traumatismos craneales hasta descartar hemorragias o
hematomas.
- Alteraciones gastrointestinales:
Estreñimiento pertinaz: aparece en forma temprana. Conviene utilizar
simultáneamente opioides con laxantes para evitar cuadros graves.
Náuseas y vómitos: en raras ocasiones impide el uso de opioides.
No utilizar opioides para tratar dolores por cólico biliar ya que aumentan el tono
de la fibra lisa.
Otras alteraciones.
 Contraindicado su uso en dolores de origen ureteral, ya que aumentan el tono de
los sistemas genitourinario y gastrointestinal.
 Su consumo prolongado provoca ligera inmunodepresión.
 Problemas reales como: adicción, tolerancia, dependencia y depresión
respiratoria.
 Dosis altas en el SNC puede causar convulsiones, mayormente en niños.
Toxicidad aguda
Urgencia médica importante, pone en peligro la vida, puede ser causada por sobredosis
errónea o accidental y por intento de suicidio.
Síntomas:
- Depresión central generalizada: puede llevar al coma por hipoxia y si se
prolonga aparece midriasis (se acompaña de miosis bilateral y simétrica con
pupila puntiforme) e incluso a la muerte.
- Falta de tono muscular, cianosis, anuria y convulsiones en niños.
Tratamiento: Administrar naloxona
Características diferenciales de los fármacos opioides. Indicaciones terapéuticas.
Morfina y análogos
Morfina
Actúa preferentemente en los receptores µ, δ y κ. Analgésico opioide más usado,
considerado de referencia para comparar la potencia con los nuevos fármacos. Para
tratamiento del dolor intenso: agudo y crónico de diversas etiologías. No es eficiente para
el síndrome doloroso regional complejo y el dolor neuropático.
Heroína
Estructura diacetilmorfina. Analgésico opioide con potencia superior a la morfina, de
utilización restringida porque tiene un elevado poder adictivo relacionado a la facilidad
de traspasar la BHE.
Codeína
Estructura original: metilmorfina. Poco activa, se metaboliza convirtiéndose en morfina.
De potencia 10 veces menor que la morfina. Se utiliza como potente antitusígeno de
acción central.
Con efectos adversos: depresión respiratoria y estreñimiento.
Hidromorfona.
Derivado semisintético de la morfina; tiene aproximadamente 10 veces más potencia que
la morfina y una buena biodisponibilidad en administración oral.
Levorfanol
Agonista de los receptores u y k, con semivida más prolongada (12-16 horas) a la morfina.
No presenta tolerancia cruzada con la morfina. Es un potente antitusígeno.
Buprenorfina
Derivado de la tebaína (alcaloide que se obtiene del opio). Agonista del receptor u y
antagonista del receptor k. Su potencia 30 veces superior a la morfina, de eficacia menor
por ser un agonista parcial y con semivida de 8 horas.
Efectos secundarios: iguales a la morfina, los más frecuentes; sedación y náuseas. Riesgo
de producir depresión respiratoria.
Oxicodona
Derivado semisintético de la tebaína. Agonista no selectivo de los receptores u, k y δ y
de biodisponibilidad por vía oral superior a la morfina. Semivida aproximadamente de 3
horas y con presentaciones farmacéuticas de liberación retardada.
Derivados fenilpiperidinicos
Meperidina (peptidina)
Agonista de los receptores u. Administración vía oral. Provoca menos depresión
respiratoria y alteración de la motilidad gastrointestinal que la morfina y tiene efectos
proconvulsivantes no reversibles por naloxona.
Difenoxilato
Derivado de la meperidina con potente acción antidiarreica. De administración solo oral
y en grandes dosis provoca efectos opioides centrales.
Loperamida
Derivado piperidínico de baja absorción oral, para tratamiento de procesos diarreicos
crónicos y agudos. Con efecto astringente por la interacción con receptores opioides del
aparato gastrointestinal, que provoca una modificación en la velocidad de tránsito y una
reducción de las secreciones.
Fentanilos
Es 100 veces más potente que la morfina. Con inicio de acción rápida (10 min), semivida
corta (90min) y la potente depresión respiratoria limitaban su utilización
extrahospitalario.
Metadona y análogos
Metadona
Agonista de los receptores u. Absorción buena por vía oral, semivida larga y variable (13-
100 horas) Analgésico ligeramente menor que la morfina. Uso frecuente en la
deshabituación y rehabilitación en los adictos a la heroína.
Propoxifeno
Se une a receptores u, de actividad analgésica baja (20 veces menor que la morfina). Se
combina con analgésicos antiinflamatorios.
Pentazocina
Antagonista a receptores u y agonista a receptores k, es 3-6 veces menos potente y eficaz
a la morfina y de semivida de 2-3 horas. Relativamente contraindicada en caso de
cardiopatía.
Antagonistas
Naloxona
Se une preferentemente a los receptores u, en concentraciones altas bloquea a todos los
receptores opioides. Tiene una corta duración de acción (30-45 min). Para tratamiento de
intoxicación opioide; revierte la depresión respiratoria y disminuye los efectos
periféricos (prurito, náuseas y vómitos) causados por la morfina.
Efectos secundarios: estimulación cardiovascular, con hipertensión, taquicardia, edema
pulmonar y trastornos del ritmo cardíaco, pues causa incremento del tono simpático.
Naltrexona
Estructuralmente se relaciona con la naloxona, pero más eficaz por vía oral. Con una
duración de acción mayor (24 horas) y el doble de potencia. Tratamiento de
mantenimiento a adictos a opioides.

También podría gustarte