0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
5 vistas15 páginas
El documento describe varios elementos arquitectónicos y retablos de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, incluyendo la fachada, torres, Capilla de los Reyes, Retablo del Perdón y Altar de los Reyes. La fachada principal data de 1688 y presenta esculturas de santos y una imagen de la Asunción de María. La Capilla de los Reyes se construyó en 1737 para que los monarcas españoles pudieran escuchar misa. El Retablo del Perdón original se perdió en un incend
El documento describe varios elementos arquitectónicos y retablos de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, incluyendo la fachada, torres, Capilla de los Reyes, Retablo del Perdón y Altar de los Reyes. La fachada principal data de 1688 y presenta esculturas de santos y una imagen de la Asunción de María. La Capilla de los Reyes se construyó en 1737 para que los monarcas españoles pudieran escuchar misa. El Retablo del Perdón original se perdió en un incend
El documento describe varios elementos arquitectónicos y retablos de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, incluyendo la fachada, torres, Capilla de los Reyes, Retablo del Perdón y Altar de los Reyes. La fachada principal data de 1688 y presenta esculturas de santos y una imagen de la Asunción de María. La Capilla de los Reyes se construyó en 1737 para que los monarcas españoles pudieran escuchar misa. El Retablo del Perdón original se perdió en un incend
REYES, PORTADA Y TORRES. PROFESORA: ANDREA PÉREZ JUÁREZ. Fachada y Torres. Como todas las Catedrales del mundo la de México esta dedicada a María pues debe recordarse que simbólicamente ella es la madre de Dios, y pilar fundamental de la Iglesia, en este caso esta dedicada al misterio de su Asunción, es decir cuando ascendió al cielo después de la muerte. La fachada esta integrada por tres puertas, la principal fue concluida en 1688, la puerta central esta flanqueada por columnas y separadas por hornacinas en las que se encuentran las esculturas de San Pedro y San hablo, arriba en un alto relieve tallada en mármol se encuentra una imagen de la Asunción de María, inspirada en la obra del pintor Pedro Pablo Rubens y flanqueada por columnas y hornacinas donde se encuentran las esculturas de San Mateo y San Andrés. A continuación se encuentra el escudo de México y un águila con las alas extendidas, rematando con un reloj monumental y las esculturas de las tres virtudes teologales: Fe, esperanza y caridad realizados por el famoso Manuel Tolsa, en la parte de la cúpula mando derribar el cimborrio que se había colocado en el siglo XVII, era un elemento que se colocaba en el crucero de las iglesias y ayudaba a que entrada luz y hubiese ventilación. En sustitución se coloco la cúpula de tambor octagonal apoyada sobre cuatro columnas rematando en una linternilla que permite el paso de la luz al interior. Respecto a la fachada oeste se construyo en 1688 y se realizo una reconstrucción en 1804, esta dividida en tres secciones con imágenes de los cuatro evangelistas, y en un gran relieve se representa a Jesús entregando las llaves del Cielo a su principal discípulo San Pedro. Por su parte, la portada este es tiene a los con cuatro apóstoles ocupando las hornacinas, con san Pedro a la cabeza, y un relieve de la nave de la Iglesia navegando por los mares de la eternidad. La fachada norte fue construida en el siglo XVI, es la parte más antigua de la Catedral y la de menor altura Las torres comenzaron a construirse entre 1642 y 1672, elaborándose la base y el primer cuerpo de la oriental, y se concluyeron entre 1786 y 1791. Las obras estuvieron a cargo del arquitecto José Damián Ortiz de Castro, Las torres de la catedral presentan una altura de entre 64 y 67 metros cuyo acceso interior se realiza mediante unas escaleras elipsoidales construidas en madera. En la época en que Tolsa intervino en la construcción se colocaron bajo su supervisión balaustradas en todo el exterior. Estas rematadas en forma de Campana construida en piedra de Tezontle procedente de Chiluca, coronadas por un orbe y una cruz, la esfera oriental fue usada como capsula del tiempo, se encontró la inscripción «14 de mayo de 1791. Tibursio Cano», en el interior había una caja de plomo con medallas, monedas, un relicario, una cruz de palma, diversas estampas de Santos, y testimonios autorizados pro el Cabildo Catedralicio. Capilla de los Reyes, Se construyo con la finalidad de que los monarcas españoles escucharan misa si alguna vez llegaban a viajar a la Nueva España, esta dedicada a los Reyes magos y se consagro el 23 de septiembre de 1737. se sitúa en el Ábside, es decir la parte semicircular de la Iglesia que permite la instalación del altar y donde se realizan las ofrendas. El ábside, de planta poligonal o semicircular, se encuentra en la cabecera de la iglesia. Sus orígenes se remontan al Imperio Romano: en los templos de la época, se colocaban figuras de las deidades en hornacinas que funcionaban como ábsides. Luego, en las basílicas, comenzó a llamarse ábside al espacio con asientos, donde se instalaba el sillón del magistrado frente al altar. En la Nueva España existen diversas catedrales que contaban con este espacio: Puebla, Guadalajara y Oaxaca. La idea de construir esta Capilla se tomo de la Catedral de Sevilla donde hubo un espacio similar destinado a oratorio y panteón de los reyes. En España no existen retablos dedicados a los reyes magos, por lo que esto es una novedad en América, así el primero en construirse fue el de la Catedral de Puebla. En la década de los años 30 del siglo XVII se había ya asignado el lugar que ocuparía la Capilla Real y el retablo, pero su construcción se pospuso hasta los primeros años del siglo XVIII (1706-1708) en que se destinaron recursos de la fabrica para su elaboración, se recibieron cinco proyectos que se pospusieron por falta de recursos y solo ocho años mas tarde se encargo a Gerónimo de Balbas su ejecución. En 1719 Balbas avanzaba ya en la construcción y se habían encargado las pinturas centrales a Juan Rodríguez Juarez, que representan la Adoración de los Reyes y la Asunción de la Virgen, misterio al que esta dedicada la Catedral, complementando la composición óvalos con la imagen de San José, Santa Teresa y los escudos con los monogramas de Jesús y María. El retablo consta de un solo cuerpo con un remate que llega a la cúpula y columnas estípites, tres calles verticales, las columnas recorren todo el cuerpo y descendiendo sobre un elevado pedestal compuestos de bancos y sotabancos. En el remate se ubica una imagen del Padre eterno que recibe a la Virgen que asciende a los pies de la pintura se observa su sepulcro vacío rodeado por los apóstoles, y en torno los reyes que son testigos materiales de su ascenso, María es la unión entre a divinidad y los mortales, entre el cielo y la tierra. La adoración de los Reyes expresa la corte divina y celestial que acompaño al niño Jesús primero en su nacimiento y después en su vida en la Tierra, en el remate pueden observarse cuatro arcángeles que portan los símbolos de la letanía lauretana. Los muros laterales continuaron vacíos por casi medio siglo hasta que en la década de los setenta se encargo la construcción de los altares colaterales y se colocaron dieseis pinturas con escenas de la vida de la Virgen de autoría de Juan Rodríguez Juarez y que hasta hoy se ignora a donde pertenecían o de quien eran propiedad antes de colocarse en los retablos. El Altar del Perdón o de las indulgencias. El altar fue denominado de esta forma por que se encontraba frente a la puerta del perdón que obtuvo su nombre por ser el lugar por donde los acusados ante la Inquisición entraban a la Iglesia para reconciliarse con esta después de recibir su sentencia El altar original se perdió debió a un incendio en 1967 y el actual es una reconstrucción hecha a partir de fotografías que se tenían, en el incidente se perdió la pintura de Simon Pereyns llamada la Virgen del Perdón que se cree pinto durante su estancia en la Cárcel de la Inquisición. Durante la época novohispana existió una cofradía dedicada al culto de la Virgen del Perdón, y los días cinco de agosto realizaban fiesta en su honor, existió un primer altar entre 1665 y 1675 cuando Jerónimo de Balbas se encontraba trabajando en el Ciprés se el encargo que realizara un nuevo altar antes del incendio en el centro del retablo había dos esculturas una de San Esteban y otra de San Lorenzo, en medio de ellos había una pintura de San Esteban Martir en sustitución se colocaron dos esculturas de Santos Carmelitas sin identificar, así mismo en lugar de la Virgen del Perdón se coloco la imagen de la Sagrada Familia durante un descanso en su camino al huir a Egipto, se realizo a principio del siglo XVII y debajo se coloco una pintura del Sagrado Rostro en sustitución de una similar del Retablo anterior. Las esculturas carmelitas fueron quitadas por el padre Luis Ávila Blancas y coloco un San Juan Nepomuceno, un San Juan Evangelista y un cuadro de María Magdalena.