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Curso. Las mujeres en la Nueva España.

Educación y vida cotidiana


NEGRAS Y MULATAS.
 Historiografía nos dice que:
 Negros y mulatos como un grupo silenciado;
 Como mano de obra esclava en trapiches, haciendas azucareras, plantaciones de tabaco y estancias
de ganado, principalmente en Veracruz, Guerrero y la Ciudad de México;
 Como integrantes de los grupos de exploración y Conquista;
 Como parte de los primeros núcleos poblacionales.
Las personas de afrodescendientes eran:
 En su gran mayoría, hombres libres y sujetos a un jornal.
 Segundo grupo de población después de los indios.
 Descenso demográfico de la población india.
 Residían en espacios urbanos y rurales que les proveyeron de situaciones privilegiadas.
 Puertos
 Fronteras
 Oleadas de africanos a Nueva España entre 1580 y 1640.
 Contacto entre indios y negros produjo el intercambio cultural.
 Regiones de frontera propicios para:
 Delitos contra la fe,
 Desviación de las normas y
 Violación de las leyes.
 Susan Deeds, 2008, menciona que “la frontera ofrecía grandes espacios para evitar las condiciones
opresoras y realizar rituales y actividades para fomentar la salud y bienestar.”
 Negras y mulatas dedicadas a:
 Artes amatorias,
 Brujería y
 Parteras.
 Las mujeres afrodescendientes se involucran en actividades de la vida cotidiana, si eran libres
buscaban mezclarse con la población local, o buscaban ocupaciones que les permitieran sobrevivir,
aprendían de las otras mujeres con quienes generaban lazos o tenían contacto, particularmente con
indias, mestizas o criollas pobres.
La sociedad novohispana limitaba por el origen la
participación de sus miembros en algunas actividades así
los niños que nacían de madres negras o mulatas esclavas,
asumían la condición de su madre, solo podían dejar de
serlo si se pagaba por su libertad, así mismo a sus hijas no
se les permitía tener acceso a algunas instituciones donde
pudieran desarrollar su vida por ejemplo los Conventos,
mientras que los hombres a excepción de contadas
excepciones no podían dedicarse a la pintura.
Las vidas de aquellas mujeres que apenas
tuvieron voz en la Nueva España, y que hoy
resultan casi inexistentes, por que, ¿quien habla
de negros en le México actual? Se conservaron
durante siglos, y han llegado a nosotros para
hablarnos de como era su existencia y relaciones
hace tres o cuatro siglos, gracias a que sus ideas,
conductas y practicas transgredieron los
comportamientos permitidos siendo juzgadas y
castigadas por el Tribunal del Santo Oficio.

Los testimonios reunidos por los Inquisidores y


las declaraciones de las acusadas nos acercan a
conocer diversos aspectos de su existencia, como
sus ideas, saberes, relaciones y practicas,
convirtiendo así a los Archivos Inquisitoriales en
ricas fuentes para conocer la vida cotidiana de las
mujeres novohispanas.
Veamos ahora como era la vida de esas otras mujeres las negras y
mulatas a las que se les asigno un papel menor en la sociedad , por lo
que debieron valerse de practicas que el cristianismo no toleraba y
había combatido sistemáticamente, para poder tener un lugar dentro
de los círculos sociales donde habitaban y hacerse de medios para
sobrevivir en estos espacio, ya fuera solas o con su familia
(regularmente hijos) particularmente la brujería, hechicería y
prostitución, fue este el caso de Mariana de la Candelaria, mulata, de
cincuenta años residente en la hacienda de San Juan Guanamé
cercana a Charcas, acusada por hechicería ante el Tribunal del Santo
Oficio, el expediente revela a una mujer independiente que tenía
conocimientos de medicina, herbolaria y otras prácticas mágicas de
los que se valía para vivir junto con sus hijos, y que fueron empleadas
para castigar a un hombre con quien había sostenido una relación
amorosa que al parecer termino abruptamente.
 Era una mujer de cincuenta años que al momento de la denuncia
ante el Tribunal no se encontraba casada, por lo que su
manutención y la de su familia dependía de su trabajo, al no contar
con una pareja estable había establecido relaciones amorosas con
varios indios residente en la Hacienda, uno de ellos de nombre
Domingo Segura, que la acusaba de haberlo hechizado, pues
estando enfermo y acudiendo a ella para remediarlo, no había
sanado.
 Segura creía que debido a que su relación había terminado Mariana
lo hechizo, y por ello no podía sanar, la denuncia fue hecha en
1760, iniciándose una investigación e interrogaron a varios
testigos, entre ellos a una hija de la mulata de tan solo once años,
que declaro que ella tenía un muñeco en un cantarito, objeto que
después se sabría que se había usado para el hechizo. Mariana fue
detenida y gracias a estas declaraciones su casa revisada en busca
del muñeco, pero al no encontrarse la estancia en prisión se
prolongó, el tiempo trajo consigo la desesperación y un intento de
suicidio, por lo que se le pusieron grilletes para evitar un nuevo
atentado contra su vida, más tarde buscando librarse de su prisión
termino por confesar que era curandera ante el Comisario del Santo
Oficio, y pidió hablar con el administrador de la hacienda, a quien
confesó que había usado el muñeco, le entrego otro pequeño que
llevaba con ella, y le indico donde podía encontrar el que habían
buscado en la casa y como debía romper el hechizo.
 El muñeco fue encontrado y el hechizo se rompió, más tarde la inculpada intento negar las declaraciones pero fue
tarde pues para los inquisidores su declaración y el hecho de que el encargado declarara que é había seguido sus
instrucciones para que Segura recuperara la salud bastaron para que fuera encarcelada por ocho años hasta recibir su
sentencia, fue condenada a salir en auto público con “insignias de maléfica, hechicera y bruja embustera”, adjurara de
Levi, es decir se retractara de sus actos, sufriera vergüenza publica, recibiera doscientos azotes y fuera desterrada del
lugar donde cometió los delitos para vivir por diez años en un contorno de veinte leguas de distancia y los primeros
seis los pasaría recluida en la “casa del Salvador” destinada al cuidado de mujeres dementes.
 Otro caso que ha llegado hasta nosotros es de la mulata Leonor de Isla, denunciada por la española Juana de
Valenzuela por practicar la magia, la acusación se presento ante el Tribunal, culpándola de valerse de esta para
retener a uno de sus amantes llamado Francisco Bonilla, pues durante un tiempo en que había vivido con la mulata
observo que había discutido con Bonilla, rompiéndose la relación, por lo que ella recurrió al rezo de una oración para
hacer que el volviera a su lado, aquello no tardo en suceder, mas tarde la mulata le confeso que lo había hechizado y
para someterle formaba una combinación de cenizas de vellos de su cuerpo quemados y sangre menstrual que revolvía
en el chocolate para dárselo a beber y que con el mismo fin, tostaba y molía un junquillo, “que es una yerba que se
diçe que es macho y hembra”, que vertía también en la bebida. A estos cargos se sumarian los de prostitución pues
todos los días sahumaba su casa con una palma bendita y un junquillo, rociándola con agua bendita, esto lo hacía,
según se lo había confesado “para que vinieran hombres a su casa y tener dineros”. A menudo, hacía el sortilegio de
las habas pues era conocido su talento para desentrañar los secretos del presente y del provenir.
 Leonor misma ‘había visto’ su porvenir, nada halagador por cierto, con las habas, éstas le habían pronosticado que
sería castigada con doscientos azotes por sus hechicerías. Juana de Valenzuela decía “que es cosa pública y notoria
que la dicha Leonor de Ysla, mulata libre, es única en el oficio de hechicera, y que en esta voz y opinión la tienen en
esta ciudad, y que es muy escándalo en esta materia”
Cuadro de castas donde
se observa la
preparación del
chocolate.
 Además de estas acusaciones se probó que enseñaba sus
conocimientos un grupo de mujeres para que los pusieran
en prácticas y se valía de la hechicería, los conjuros y la
adivinación para sostenerse, por lo que llego a representar
un peligro para la sociedad y fue condenada a ser procesada
en un auto de fe público, recibir 200 azotes y ser desterrada
del lugar donde vivía, valiéndose así la Inquisición de
ejemplo para advertir que aunque estas practicas llegaron a
ser comunes si eran denunciadas y probadas podrían derivar
en graves castigos.
 Si bien el chocolate fue solo uno de los varios elementos
que Leonor utilizaba en sus rituales de forma cotidiana, el
caso demuestra que el no solo se empleó como alimento, si
no que sus propiedades tuvieron siempre un fuerte carácter
simbólico tanto en la época prehispánica como en la
novohispana, atribuyéndosele múltiples efectos y que
siendo causa de confrontaciones y pasiones, y no solo
llenando los paladares de su sabor fuera amargo o dulce.
En las pinturas de castas puede
observarse que la preparación del
chocolate se representa relacionada con
la mujeres negras o mulatas.
Representan también utensilios
relacionados con la preparación
de la bebida y su consumo:

 Jarra Chocolatera.
 Molinillo.
 Mancerinas.
Molinillo

Jarra Chocolatera

Mancerina
La violencia también aparece representada
como una realidad en las relaciones entre
negras, mulatas y españoles.

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