Calderas para

uso hospitalario
Presentado por:
Johan Sebastián Alfonso Maldonado
 ¿Qué es una caldera y cómo
funciona?
• Una caldera es un equipo que produce vapor
mediante la combustión de combustibles fósiles como
el gas o el petróleo.
• En los hospitales, las calderas se utilizan para calentar
agua con el fin de generar vapor, que se distribuye por
el hospital a través de un sistema de tuberías, para
usarse en calefacción, esterilización, cocina y agua
caliente.
• Para garantizar un funcionamiento seguro y eficiente,
es esencial realizar un mantenimiento preventivo
regular, ya que asegura su correcto funcionamiento y
reduce el riesgo de averías y accidentes.
 Funcionamient
o
• El calentamiento del agua se hace con ayuda de un combustible que
puede ser sólido, líquido o gaseoso.
• El combustible debe encenderse para lograr el calentamiento del agua. A
medida que la temperatura asciende, la presión de vapor generada por el
agua en estado gaseoso aumenta. Esta presión promueve la energía
cinética de dicho vapor, por lo cual se movilizará y transportará con mayor
eficacia por las tuberías, lugar donde se realizará la transmisión de calor.
• Los vapores se condensan como agua líquida al ceder todo su calor, por lo
que retornan de la tubería a la caldera, donde son calentados
nuevamente.
Partes de una caldera
• Hogar/Fogón: 
En este sector ocurre la combustión, por lo que también se la denomina cámara de combustión. El
fogón podrá ubicarse en el exterior o interior, podrá ser para combustibles sólidos, líquidos o
gaseosos, podrá ser de textura y construcción lisa o corrugada.
• Puerta hogar:
Es una pieza que se utiliza para la apertura y cierre del hogar cuando se requiere colocar
combustible, así como para limpieza. Es metálica, posee bisagra y está revestida en su interior por
ladrillo refractario o doble pared. Si se queman combustibles líquidos o gaseosos, la puerta se
cambia por un quemador.
• Parrilla/emparrillado:
Son rejas que van dentro del hogar, dando soporte al combustible. Debido a su forma permiten el
paso de aire y la caída de cenizas. Las parrillas pueden ser fijas o estacionarias; horizontales,
escalonadas o inclinadas, móviles o rotativas.
• Cenicero:
Está debajo de la parrilla y recibe las cenizas de la combustión. Debe limpiarse
con periodicidad, por lo que tiene una puerta para facilitar dicho trabajo.
• Altar:
Es un muro de ladrillo refractario, ubicado en el extremo opuesto de la puerta
del hogar. Su función es impedir que al cargar o avivar el fuego se dispersen y
arrojen partículas de combustible.
• Mampostería:
Es la construcción que cubre la caldera, realizada en ladrillo refractario para
evitar pérdidas de calor al exterior.
• Conductos de humos:
A través de ellos circulan los gases y humos calientes productos de la combustión y es donde se
realiza la transferencia de calor al agua.
• Cajas/cámaras de humo:
Son unas cámaras previas a la chimenea, donde se colectan los humos y gases que ya han
realizado la transmisión de calor.
• Chimenea:
Es el conducto a través del cual los gases van hacia la atmósfera.
• Cámara de agua:
Es el volumen de la caldera ocupado por agua.
• Cámara de vapor:
Es el volumen restante de la caldera, donde se va acumulando el vapor generado por el
calentamiento del agua.
 Tipos de calderas
• Calderas de gasoil:
Su uso se ha reducido debido al desarrollo de otros
modelos y la alta contaminación debida a la
quema de gasoil. Sin embargo, este tipo de caldera
se sigue usando en lugares alejados sin acceso a
gas natural o propano. En este tipo de caldera el
agua se calienta en las tuberías gracias a la
combustión de gasoil. Son económicas y eficientes,
pero, como mencionamos antes, son más
contaminantes que las calderas de gas natural.
 Calderas eléctricas

• Estas calderas cuentan con un termostato, el

cual se programa para elegir una temperatura
de calefacción y de calentamiento de agua. El
vapor de este tipo de caldera se logra a través
de energía eléctrica.
 Calderas de gas y gas natural

Son las más usadas a nivel global. Dentro de

este tipo de calderas encontramos los
siguientes modelos:
 Atmosféricas
 Estanca
 De bajo nox
 De condensación
 De micro acumulación
 Mixtas
 • Son aquellas cuyos gases proceden de la combustión del propio
combustible y circulan por el interior de los tubos.
Calderas de • El combustible se quema en la cámara de combustión, en donde
vapor tiene lugar la transmisión de calor por radiación.
pirotubulares • Los gases resultantes circulan a través de los tubos que forman el
haz tubular donde tiene lugar el intercambio de calor.
• Una vez realizado el intercambio térmico, los humos se expulsan al
exterior a través de la chimenea.
 Calderas acuotubulares

• Su funcionamiento es contrario al de las

pirotubulares, ya que en estas el agua
circula dentro de las tuberías y los gases
de combustión fuera de los tubos,
llevándose a cabo la transferencia de
calor hacia el interior de los tubos que
transportan el agua dentro de la caldera.
 Calderas utilizadas
en hospitales

• Existen varios tipos de calderas para uso

hospitalario en el mercado. Los más
comunes son las calderas de vapor y las de
agua caliente.
• Las calderas de vapor se utilizan para
esterilizar el equipo médico y la ropa de
cama.
• Las calderas de agua caliente se utilizan
para proporcionar agua caliente para
duchas y lavandería.
 Mantenimiento a calderas en
hospitales
• las calderas en hospitales necesitan un mantenimiento constante, ya
que la presión a la que es sometida esta máquina hace que siempre
este latente el peligro de explosión, con consecuencias fatales,
además de presentar diversos riesgos para la salud y la seguridad,
como la liberación de gases tóxicos.
• El mantenimiento preventivo de las calderas en hospitales reduce el
riesgo de accidentes, mejora la eficiencia energética, prolonga la vida
útil de las calderas y asegura la continuidad del servicio hospitalario.
Además, el mantenimiento preventivo es más económico que las
reparaciones de emergencia y las sustituciones de calderas
 Inspecciones a calderas

• Monitoreo de temperatura.
• Control de niveles de combustible, circulación
y presión.
• Verificación del funcionamiento de detectores
de humo.
• Comprobación de la alarma por bajo nivel de
combustible.
• Verificación de la alarma de nivel de presión.
• Limpieza de chimeneas, respiraderos y salidas
para una mejor productividad de la caldera.
• Calibración de instrumentos y equipos de control.
• Fase de cualificación/formación y prácticas del operador de la caldera.
• Desmontaje, inspección y calibración periódica de válvulas de
seguridad.
• Control de la calidad del agua mediante tratamientos.
• Informe de inspección interna y externa y, en su caso, prueba
hidrostática.
 Mantenimiento
diario
• Limpiar las boquillas del quemador de la caldera.
• Comprobar el nivel de lubricantes para el compresor en el tanque
aire-aceite.
• Purgar la caldera por lo menos cada ocho horas de trabajo.
• Comprobar que la presión indicada por los manómetros son las
fijadas en su Manual de Operación.
• Comprobar si la presión de aire de atomización es la correcta.
• Comprobar y registrar la temperatura de los gases de la chimenea.
• Tomar análisis de gases de combustión y registrar en bitácora.
 Mantenimiento cada ocho
dias
• Comprobar que no hay fugas de gases ni de aire en las juntas de ambas tapas y
mirilla trasera.
• Comprobar la tensión de la banda al compresor.
• Limpiar el filtro de lubricante, que está pegado al compresor.
• Lavar los filtros, tanto el de entrada a la bomba como el de entrada de agua al
tanque de condensados.
• Limpiar el electrodo del piloto de gas.
• Comprobar que los interruptores termostáticos del calentador de combustible
operen a la temperatura a que fueron calibrados al hacer la puesta en marcha.
Consulte su Manual de Operación.
• Inspeccione los prensa estopas de la bomba de alimentación de agua.
 Mantenimiento quincenal

• Hacer limpieza de todos los filtros de agua, aceite combustible y aceite

lubricante.
• Probar la operación por falla de flama.
• Revisión a las condiciones del quemador, presión, temperatura, etc.
• Revisar los niveles de entrada y paro de la bomba, haciendo uso de las
válvulas de purga de fondo de la caldera.
• Asegúrese de que la fotocelda esté limpia, así como el tubo en donde se
encuentra colocada.
 Mantenimiento trimestral
• Observe la temperatura del termómetro de salida de gases de la
chimenea de la caldera.
• Es conveniente también que se destapen varias tortugas o registros de
en medio y de la parte de abajo, para ver el estado de limpieza interior
por el lado del agua.
• Cada vez que se desholline es conveniente para la mejor conservación
del refractario, darle una lechada con mortero refractario, tanto a la
tapa trasera como al refractario del hogar. Cambie los empaques.
• Tirar ligeramente de las palancas de las válvulas de seguridad para que
escapen y evitar que peguen en su asiento.
 Mantenimiento semestral
• Comprobar el nivel de aceite del reductor de velocidad de la bomba de
combustible.
• Revisar los empaques del prensa-estopa de la bomba de alimentación
de agua. En caso de encontrarse secos, cámbielos por nuevos.
• Efectúe limpieza general a los contactos del programador de flama y los
arrancadores con un trozo de género limpio, humedecido con
tetracloruro de carbono.
• Inspeccione el material refractario del horno y la puerta trasera.
• Es conveniente lavar la caldera interiormente.
 Mantenimiento de caldera anual
• Limpiar el calentador eléctrico y el calentador de vapor para combustible, así como
asentar la válvula de alivio y las reguladoras de presión.
• Revisar el estado en que se encuentran todas las válvulas de 1 la caldera, asentarlas
si es necesario y si no se pueden asentar, cambiarlas por otras nuevas.
• Re engrasar los baleros de la bomba de agua de combustible.
• Re lubricar los baleros sellados de las transmisiones o motores que tengan este tipo
de baleros. Repónganse los sellos cuidadosamente, reemplácense los baleros
defectuosos o los que se tenga duda.
• Vacíe y lave con algún solvente apropiado el tanque aire-aceite, así como todas las
tuberías de aire y aceite que de él salgan, procurando que, al reponerlas, queden
debidamente apretadas.
• Desarme e inspeccione las válvulas de seguridad, así como las tuberías de drenaje
 Riesgos de una caldera mal
mantenida
• Una caldera mal mantenida puede causar una
serie de riesgos para los pacientes y el personal
médico.
• Fugas de gas, explosiones, incendios y emisiones
de gases tóxicos son algunos de los peligros
asociados con una caldera en mal estado.
• Estos riesgos pueden prevenirse mediante el
mantenimiento preventivo y la inspección
regular de las calderas.