La frecuencia de las sesiones depende de cada caso, como norma general, las primeras sesiones de la terapia suelen tener una frecuencia de visitas semanal. ¿Porqué una frecuencia semanal?, ¿porqué no más sesiones a la semana?
El proceso de tratamiento requiere que el
paciente pueda reflexionar y aplicar los aprendizajes realizados en las diferentes situaciones diarias. Una mayor frecuencia de las sesiones, por encima de una a la semana, no implica una mayor velocidad en el proceso terapéutico.
La duración de las sesiones suele
estar comprendida entre los 45 y los 50 minutos ASPECTOS QUE DEBE INCLUIR EN EL PLAN TERAPEUTICO
•I TEORIAS QUE EXPLICAN EL
DIAGNOSTICO PROBLEMA CLINICO OBJETIVO GENERAL OBJETIVOS ESPECIFICOS ESTRATEGIAS ACTIVIDADES
•II PERSPECTIVA TERAPEUTICA
•III TIEMPO ESTIMADO
•IV PRESENTACION DEL PLAN
TERAPEUTICO PLAN TERAPÉUTICO
I. TEORÍAS QUE EXPLICAN EL DIAGNÓTICO La Perspectiva de Condicionamiento Operante, se basa en que el aprendizaje a partir de las consecuencias interactúa con el mundo y es el principal mecanismo de modificación de la conducta. Tanto los seres humanos como los animales estamos realizando siempre todo tipo de acciones, por insignificantes que sean, y estas tienen siempre una consecuencia para nosotros, que recibimos en forma de estímulos. Esta asociación entre lo que hacemos y lo que notamos que son las consecuencias de nuestras acciones son el fundamento del condicionamiento operante, que según Skinner era la forma básica de aprendizaje en buena parte de las formas de vida. El objeto de estudio de la psicología es la conducta; disminuyendo conductas a través de castigos y aumentando estas a través de reforzamientos. • La Perspectiva Cognitiva Postula que poseemos una capacidad de aprendizaje cognitivo, caracterizado por la adquisición de una forma de interpretar y procesar la realidad, en la que cabe la posibilidad de introducir errores o sesgos cognitivos (atención, interpretación, memoria, atribuciones causales, etc.) •Desde el punto de vista neurológico, es un trastorno de la función cerebral, caracterizado por la presencia de síntomas comportamentales.
•La Gestalt, considera que la raíz del trastorno podría estar en la incapacidad de la persona de integrar exitosa y acertadamente las partes de su personalidad en un todo saludable. Oklander, considera que el niño debe aprender a utilizar todos sus sentidos, primero para sobrevivir y después para aprender acerca de su mundo
II Perspectiva Terapéutica
Se utilizara la terapia Gestalt, para que el niño logre integrar su personalidad, desarrollar sus sentidos y así logre expresar sus sentimientos con congruencia. Se incluirá también condicionamiento operante, para poder motivar al niño; pues muchas veces no encuentra motivo del porque realizar acciones que se le piden, y también hacerlo consciente de que consecuencias pueden traer sus actos. Se trabajara con los padres en una terapia filial, para que los padres sirvan como agentes de cambio primarios de sus propios hijos La terapia integrativa proporciona diferentes elementos útiles que se pueden aplicar mediante la terapia de juego con diferentes enfoques. Seleccionan aspectos de diversos modelos, en la terapia integrativa se seleccionan diferentes aspectos de diversos modelos integrándolos en una terapia de juego. III. TIEMPO ESTIMADO El tiempo estimado de la terapia es de 3 meses, aproximadamente 10 sesiones, teniendo una sesión por semana de 30 minutos.
TRATAMIENTO
Intervención con la familia
Es el primer paso, sobre todo si la conducta agresiva es emitida por un niño pequeño que no es consciente de su comportamiento. Los pasos en la intervención detallan a continuación: 1. PSICOEDUCACIÓN Explicación y entrenamiento en los fundamentos del aprendizaje. Instrucción muy precisa y clara acerca de los mecanismos de aprendizaje y manejo de la conducta. Básico para que los padres entiendan bien el funcionamiento de la conducta de su hijo y la propia, para poder reforzar o castigar ciertas conductas a través de diferentes técnicas: • Refuerzo positivo: instruir a los padres en facilitar refuerzos ante la emisión de conductas adecuadas. Los refuerzos deben ser inmediatos a la conducta deseada e importantes para el niño. La técnica de economía de fichas puede incluirse en la intervención. • Extinción: Es importante que aprendan a no prestar atención a ciertas conductas indeseables, para que no obtenga las consecuencias esperadas y recibidas hasta entonces.
Dar instrucciones claras y precisas al niño ayuda a
que éste comprenda el nuevo funcionamiento “si das patadas, no te voy a atender”. • Castigo: reprimendas, retirada de privilegios (tiempo de ver la tele, juguetes…) tiempo fuera o coste de respuesta. Deben ser inmediatos y suficientemente importantes para el niño. Es importante contar con estímulos discriminativos: avisos, normas… 2. ACTIVIDADES AGRADABLES Fomento de un clima familiar adecuado. Fomentar actividades agradables junto al niño, generar charlas y juegos. Con esto se logra mejor comunicación, habilidades de resolución de conflictos, uso de reglas y normas, límites. 3. ENTRENAMIENTO EN TÉCNICAS DE CONTROL DE LA ACTIVACIÓN En algunos casos es necesario el entrenamiento en respiración o relajación para generar alternativas ante la conducta del niño y formas de enfrentarse a esa conducta agresiva. 4. ENTRENAMIENTO EN TÉCNICAS DE AUTOCONTROL Instruirles a la hora de hacer frente a la conducta del niño y buscar opciones alternativas. Es necesario que, ante un episodio problemático, los padres no pierdan el control de la situación, estén tranquilos, calmados y puedan ejecutar el programa de intervención de forma adecuada. Puede ser habitual que los padres respondan a ciertos comportamientos del niño con un comportamiento agresivo (gritos, aspavientos, malas formas. Intervención con el niño
En ocasiones, la intervención con los padres es
suficiente para resolver el problema. En otros casos si el niño presenta déficits en habilidades sociales, bajo estado de ánimo o problemas de rendimiento escolar. • Los pasos en la intervención se detallan a continuación: 1. ENTRENAMIENTO EN LOS PRINCIPIOS DEL APRENDIZAJE OPERANTE • Moldeamiento o modelado de conducta deseada. Es necesario delimitar cuáles son las conductas que se quieren adquirir y qué reforzadores aplicar. • Economía de fichas / Refuerzo positivo. Con estas técnicas, el niño conoce qué le espera al cumplir ciertas conductas. Es un procedimiento temporal en la intervención, hasta que se usen adecuadamente los reforzadores naturales del entorno del niño. • Castigo: coste de respuesta y tiempo fuera. Se debe utilizar de manera paralela al fomento de repertorios alternativos de respuesta. • Puede ser el niño quien establezca qué reforzadores se retiran o ante qué situaciones se le aparta 2. REESTRUCTURACIÓN COGNITIVA Se utiliza ante ciertas ideas negativas o irracionales que puedan aparecer. También es útil para hacerle reflexionar acerca de los beneficios de la nueva forma de comportarse, de los pensamientos que surgen en los momentos en los que se comporta disruptiva o agresivamente. 3. PSICOEDUCACIÓN Y ENTRENAMIENTO EN AUTOCONTROL • Es importante que aprenda a identificar cuáles son esas “señales” que le avisan de un comportamiento disruptivo o agresivo. • Hay que instruirle para que discrimine los estímulos que aumentan la probabilidad de ocurrencia de la conducta , tanto externos como internos, y poder modificar su conducta, comportándose adecuadamente. Existen diferentes técnicas que se pueden utilizar: • Ejercicio del volcán: imaginarse como un volcán, donde el enfado sería la lava, que de repente sube de forma rápida (se gradúa previamente el nivel de enfado y se le pide al niño que ponga ejemplos de cada fase). El objetivo es controlar el volcán, que no entre en erupción o explote; el niño tiene que mencionar estrategias para poner barreras al volcán. • Entrenamiento en tolerancia a la frustración: proponer actividades que el niño perciba como complejas, pero que sepamos que puede superar con éxito, y, con autoinstrucciones y refuerzo externo para motivar y conseguir que se mantenga en la tarea, lograr que las supere • Entrenamiento en autoinstrucciones: para guiar el comportamiento del niño y evitar consecuencias aversivas tras el comportamiento desadaptativo. Intervención en el centro escolar La conducta disruptiva o agresiva también está presente de manera en el ambiente escolar. Es importante: Contar con la colaboración de los docentes para que apliquen las técnicas que también está aplicando la familia. Debe realizarse una correcta evaluación, a través de una entrevista o registros de conducta y observaciones. También hay que prestar atención a la relación que establece con sus compañeros y con sus profesores.