EL «SISTEMA

MUNDO»: EUROPA
COMO CENTRO Y
SU PERIFERIA.
MÁS ALÁ DEL
EUROCENTRISMO
 DOS PARADIGMAS DE
MODERNIDAD
De acuerdo con Enrique Dussel, hay dos paradigmas de
modernidad:

1. Horizonte eurocéntrico: la Modernidad es

exclusivamente europea (desde la Italia renacentista a la
Alemania de la Reforma y la Francia de la Revolución
Francesa.

2. Horizonte mundial: la Modernidad es la cultura del centro

del sistema-mundo (incorporación de Amerindia). La
Modernidad es un fenómeno que se va mundializando.

3. La Conquista le otorgó a Europa “ventaja comparativa”

sobre el mundo musulmán, la India o China.
 DESPLIEGUE DEL
«SISTEMA MUNDO»
• El despliegue del «Sistema Mundo» lo originaría quien pudiera
anexarse Amerindia.

• En la historia normalmente se confunde la formulación del nuevo

paradigma teórico moderno con el origen de la Modernidad. La
revolución científica solamente pudo realizarse en una
Modernidad ya iniciada.

• El Renacimiento y la Revolución científica, desde esta

perspectiva, son acontecimientos diferentes.

• China y Portugal no se anexaron Amerindia, porque sus intereses

estaban en el Centro, representado por la India Occidental.

• Una vez que las Cruzadas fracasaron, la única manera para llegar
al centro del sistema era por vía del Océano Atlántico.

• España “tropieza”, sin buscar, a Amerindia, y con ella entra en

crisis todo el sistema mundo medieval. Representación de
la Quinta Cruzada
 LA PERSPECTIVA
DE DUSSEL
• La filosofía de la Liberación que plantea
Dussel pasa por considerar no solamente el
centro del sistema-mundo europeo (visión
provinciana), sino desde su periferia (visión
planetaria).

• El primero que sospechó un nuevo

continente fue Américo Vespucci desde
1503 (el primer “moderno”).

• Amerindia constituyó la estructura

fundamental de la primera Modernidad.

Vespucio despierta a
“América” (grabado de 1638)
• La centralidad de España fue manejada como dominio a través de la hegemonía de una cultura integral, una
lengua y una religión (proyecto «Imperio-mundo»).

• La Modernidad del centro de Europa (iniciada en Ámsterdam) pasa frecuentemente como la verdadera
Modernidad. No obstante, se ha dejado de lado la Modernidad hispánica.

• La primera Modernidad hispánica (renacentista y humanista) teorizó de manera importante temas que han
sido capitales para la constitución del sistema-mundo.

• El nuevo paradigma de la Modernidad centroeuropea significa también un proceso de simplificación por

racionalización.

• Esta simplificación moderna se despliega como negación de la corporalidad y de la vida humana.

• Dussel propone una superación no de la razón, sino del sistema-mundo.

LA MODERNIDAD COMO LA «GESTIÓN» DE LA

«CENTRALIDAD» MUNDIAL Y SU CRISIS ACTUAL
 René Descartes
LIBERACIÓN DE LA FILOSOFÍA (1596-1650)

De acuerdo con Dussel, “la Ética de la Liberación debe, en primer lugar,

reflexionar sobre la implantación geopolítica de la misma filosofía, en
cuanto se encuentra situada en el «centro» o «periferia».

La eticidad filosófica de Dussel se ubica en el mundo de los Otros (la

marginalidad, el no-ser).

¿En qué consiste el eurocentrismo? “En constituir como universalidad

abstracta humana en general momentos de la particularidad europea”.

El “Ego cogito” es antecedido por el “Ego conquiro”.

El contradiscurso (p. ej. el de la posmodernidad) es centro-europeo. A

ello Dussel contrapone un contradiscurso desde la periferia, desde la
Otredad.

El estudio de la filosofía, desde esta perspectiva, no debe ser algo

anecdótico (tradiciones y filosofía), sino que es una historia que rescata
el contradiscurso no hegemónico. Hernán Cortés
(1485-1547)
 Eboussi Boulaga
(1934-2018)
Dussel propone un ejemplo de esa
filosofía periférica: el horizonte de la
filosofía africana.

Eboussi Boulaga, como filósofo crítico

de la periferia, se sitúa en el horizonte
de la Modernidad (concepto del Muntu).

Desde la perspectiva que propone

Boulaga, el mundo y el universo vive en
la periodicidad y el ritmo.

La filosofía puede ser uno de los

símbolos y de las instituciones que el
Occidente ha trasportado a otros
lugares y ha asimilado a los otros; razón
por lo cual se hace necesaria una
“liberación de la filosofía”.