Está en la página 1de 11

EL CURRÍCULO OCULTO

Jurjo Torres

Jhon Jairo Vargas Pabón


CAPÍTULOS

• I: El curriculum y la ideología
• II: Legitimación y discurso científico en educación
• III: Prácticas tecnocráticas en la escuela y poder
• IV: Las teorías de la reproducción
• V: Las teorías de la producción y la posibilidad de
prácticas contrahegemónicas
• VI: La discriminación sexista en las instituciones
escolares: niños visibles y niñas invisibles
• VIl: La discriminación racista en el sistema educativo
• VIII: La descualificación y recualificación del
profesorado
• IX: El curriculum y la educación de los ciudadanos y
ciudadanas en una sociedad democrática
CAPITULO PRIMERO: El curriculum y la ideología

La política educativa no puede ser comprendida de manera aislada,


descontextualizada del marco socio-histórico concreto en el que cobra
auténtico significado. Las relaciones específicas de poder que existen
en cada sociedad tienen una prolongación en el sistema educativo.

En toda sociedad las clases sociales y/o grupos que detentan el poder
tratan de imponer y legitimar su dominio y de organizar su reproducción.
Uno de esos escenarios es la institución escolar, institución que Louis
ALTHUSSER ha denominado como Aparato Ideológico de Estado,
afirmando que «desempeña, en todos sus aspectos, la función
dominante», de entre los restantes Aparatos Ideológicos de Estado (el
religioso, familiar, jurídico, político, sindical, de la información y cultural).
CAPITULO II Legitimación y discurso científico en educación

El sistema educativo se pone de forma manifiesta al servicio de


un modelo de sociedad y de relaciones de producción, de
circulación e intercambio definitivo en los términos eficientitas.

Así, en 1927, SORO-KlN ya escribía: «... la escuela no cambia en


realidad a las personas; lo que hace es clasificar, etiquetar y
categorizar a los niños con vistas al mercado de trabajo.
CAPITULO III Prácticas tecnocráticas en la escuela y poder

El problema de la enseñanza, es lograr que niños y niñas aprendan las


definiciones correctas. Los procesos de pensamiento son definidos como
consistentes en manipulaciones de nociones abstractas; dando por
sentado que no importa cómo, ni dónde, ni cuándo, ni por quién se
generaron.

El conjunto del sistema escolar en su totalidad, con sus trabajos, pruebas,


exámenes, supervisión de los alumnos, así como las notas, la
categorización, evaluación, eliminación y promoción, es un 'cedazo' muy
complicado que hace una criba de los futuros 'buenos' y 'malos'
ciudadanos, los 'capaces' y los 'tontos', los aptos para puestos elevados' y
los 'no aptos'» (Cit. por HEATH, A., 1981, Pp. 25-26).
CAPITULO IV La teoría de la reproducción

La función de la institución escolar aparece sometida a las necesidades del


sistema productivo. Educar acaba resultando similar a preparar a alguien para
desempeñar un puesto de trabajo.

En este discurso eficientista y positivista existe una indiferencia teórica en cuanto


a todo lo relativo a proveer a los alumnos con los conocimientos y habilidades
necesarias para lograr una amplia comprensión de la dinámica de los procesos
socio-políticos y la ética que define a un Estado.
CAPITULO V Las teorías de la producción y la posibilidad de prácticas
contrahegemónicas

En este grupo de actividades podemos agrupar las siguientes: escribirse notas; tirar
cosas (clips, gomas, bolitas de papel, tizas, etc.).

Este tipo de actividades pueden ser interpretadas como reacciones ante la falta de
interés por las tareas educativas que se les proponen; vienen a ser formas de
resistencia ante imposiciones que no comprenden y, por consiguiente, no aceptan.
Durante el tiempo en que se manifiestan, se produce una apropiación del control
de lo que sucede en esa aula
CAPITULO VI La discriminación sexista en las instituciones escolares: niños
visibles y niñas invisibles

La escuela etiqueta lo que es la verdadera cultura, frente a lo que podemos llamar


la «cultura popular», la que se construye y reconstruye fuera del control de los
grupos sociales hegemónicos.

Los niños y niñas visibles son aquellos cuyas conductas en el interior de las
instituciones académicas no podemos dejar de notar; se hacen ver a través de
manifestaciones que el profesorado puede valorar positiva o negativamente, pero
que siempre recuerda. Podemos llegar a definir tres modelos de alumnado visible:
problemático o conflictivo, inmaduro y aplicado.

Es posible, también aquí, diferenciar tres modalidades de invisibilidad: alumnado


tímido, superviviente marginal, y ansioso.
CAPITULO VII La discriminación racista en el sistema educativo

Todos los seres humanos en el momento en que se encuentran ante otras personas
con rasgos físicos muy distintos o con otro idioma materno, o con costumbres muy
diferentes, adquieren algún grado de conciencia de su existencia como grupo
diferenciado, de que comparten una cierta visión del mundo con su grupo de
iguales y que, al mismo tiempo, existen otras maneras de pensar y de ser.

Desde las instituciones de enseñanza, no considerarse como problema la raza o el


color, tanto las autoridades políticas, como los profesores y profesoras, no facilitan
la reproducción y producción de comportamientos racistas. Sin embargo, cuando se
realizan análisis etnográficos en el interior de las aulas o se revisan los materiales
curriculares, muy pronto aparecen ante nuestros ojos conductas que invalidan las
autoimágenes de neutralidad que el sistema educativo ofrece.
CAPITULO VIII La descualificación y recualificación del profesorado

“La profesión docente es hoy, en casi todos los países, el foco de atención de los
más variados sectores sociales. Las quejas sobre lo mal que funciona la educación
pública los enfrentamientos entre familias, docentes acostumbrados a verse
reflejados en los medios de comunicación.

Las familias, día a día exigen mayor participación en los colegios, culpando con
excesiva prontitud y superficialidad al profesorado de todos los fracasos y
deficiencias que observan en el rendimiento y educación de sus hijas e hijos” (Jurjo
Torres 1996)
CAPITULO IX El curriculum y la educación de los ciudadanos y ciudadanas en una
sociedad democrática

La educación de las ciudadanas y ciudadanos en y para una sociedad democrática es


necesario llevarla a cabo en el marco de instituciones en las que sus estructuras
democráticas permitan la planificación y desarrollo de experiencias de enseñanza y
aprendizaje dirigidas a promover y ejercitar la capacidad de tomar decisiones de
modo reflexivo y de comprometerse en la realización de conductas responsables y
efectivas, dentro de una filosofía de respeto y apoyo de los valores y procesos
democráticos.

También podría gustarte