Contenidos prioritarios

Bloque 1

Principales características de los seres vivos. Niveles de organización ecológica. Componentes

del ecosistema. Factores bióticos y abióticos.

La célula: concepto. Tipos de célula: procariota y eucariota, vegetal y animal. La nutrición de

los seres vivos: autótrofos y heterótrofos.

Bloque 2

El cuerpo humano, características y funciones. Los sistemas que participan en la nutrición.

La materia: concepto, composición. Sus propiedades y estados. La energía: concepto, fuentes

de energía.

Bloque 1:

1. Exploración sensorial del ecosistema: Organizar una actividad en la que el estudiante pueda
experimentar los componentes del ecosistema utilizando sus sentidos. Por ejemplo, puede
tocar diferentes tipos de suelo (arena, tierra, arcilla) para entender la diversidad de hábitats.

2. Construcción de modelos de células: Proporcionar materiales como plastilina, cartón,

pintura y otros elementos simples para que el estudiante construya modelos de células. Puede
representar células animales y vegetales de manera tridimensional, ayudándolo a comprender
las diferencias entre ellas.

3. Juegos de clasificación: Preparar tarjetas con imágenes de factores bióticos y abióticos, así
como diferentes organismos. Pedir al estudiante que clasifique las tarjetas en dos grupos
según corresponda, ayudándole a comprender la diferencia entre los componentes vivos y no
vivos de un ecosistema.

Bloque 2:

1. Circuito de habilidades motoras: Diseñar un circuito de actividades que representen los

sistemas del cuerpo humano involucrados en la nutrición. Por ejemplo, puede ser "el
estómago" donde el estudiante mueva objetos de un contenedor a otro (simulando la
digestión).

2. Exploración táctil de materiales: Proporcionar una variedad de materiales con diferentes

texturas (rugosos, lisos, ásperos, etc.) y propiedades físicas (flexibles, rígidos, etc.). El
estudiante puede explorar estos materiales a través del tacto y describir sus características.

3. Juego de asociación de energía: Preparar cartas con imágenes de diferentes fuentes de

energía (sol, viento, agua, petróleo, etc.) y sus aplicaciones (por ejemplo, una lámpara
encendida para la electricidad). El estudiante puede emparejar las cartas correspondientes,
ayudándole a comprender de dónde proviene la energía y cómo se utiliza.
Estas actividades están diseñadas para ser inclusivas y adaptadas a las necesidades específicas
del niño con discapacidad, fomentando la participación activa y el aprendizaje significativo. Es
importante ajustar el nivel de apoyo según las habilidades individuales de cada niño.