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El sistema endocrino

A través del sistema nervioso, el cuerpo recibe, elabora y envía información de manera
rápida. Pero en nuestro organismo hay también otro sistema que controla y coordina las
funciones del organismo de manera más lenta el sistema endocrino El sistema endocrino
está formado por glándulas, que son órganos o tejidos especiales que elaboran sustancias
llamadas hormonas. Las hormonas se vuelcan desde su lugar de origen a la sangre y así
llegan a distintos órganos y regulan su funcionamiento. Solo los órganos que son los
destinatarios de una hormona en particular pueden reconocerla y modificar su
funcionamiento ante su presencia. Por ejemplo, los riñones producen y secretan la hormona
eritropoyetina, cuya función es aumentar la producción de glóbulos rojos. Su órgano de
acción es la médula ósea del interior de los huesos largos, donde se producen los glóbulos
rojos y blancos y las plaquetas. De esta manera, las hormonas regulan el funcionamiento
puntual de ciertos órganos. Aunque hay excepciones, como la hormona del crecimiento,
llamada somatotrofina, que es producida por la glándula hipófisis, ubicada en la base del
cerebro. Esta hormona es responsable del crecimiento de todo el cuerpo, es decir, no actúa
sobre un órgano específico sino en todo el cuerpo.

Etapas de la vida de los seres humanos

Desde que nacemos, vivimos varios períodos de crecimiento, que se reconocen como
etapas. Los primeros años de vida, hasta los cinco años aproximadamente, constituyen la
infancia. El siguiente período es la niñez, que termina alrededor de los 11 años.
A partir de esta edad, se producen cambios corporales vinculados con la madurez sexual,
es decir, con la capacidad biológica de tener hijos. Esta etapa, que se extiende
aproximadamente hasta los 14 años, se llama pubertad y forma parte de un período más
largo denominado adolescencia. La pubertad es una etapa de cambios corporales y de
maduración sexual por la cual pasan todos los seres humanos.
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En cambio, la adolescencia se vincula con aspectos sociales, culturales y familiares, y no


afecta a todos los jóvenes del mismo modo. En la juventud y en la etapa adulta, termina el
crecimiento. Entre los 20 y 30 años, el cuerpo es más fuerte y la mente más ágil que en
cualquier otra etapa. En la vejez, los huesos son más frágiles y la piel se arruga. Se reduce
la estatura y la resistencia a las enfermedades es menor. Como contrapartida, las personas
ancianas acumulan mucha experiencia de vida y conocimientos, que suelen ser valiosos
para ellos y pueden ser aprovechados por los más jóvenes.

Las características sexuales

Seguramente, si miran fotos o filmaciones de cuando eran bebés o niños pequeños,


encontrarán muchas diferencias de cómo son hoy.
A partir del nacimiento, todos los seres humanos transitan por diferentes etapas a lo largo
de su vida. En una primera etapa, los bebés, tanto los nenes como las nenas, se parecen y
la forma de diferenciar su sexo es a través de sus características sexuales pri- marias, es
decir, por el tipo de órganos reproductores con los que nacieron.
A partir de la pubertad se producen cambios que hacen más evidentes las diferencias entre
nenas y varones. Las características físicas que diferencian a varones de mujeres se
denominan características sexuales secundarias.

Pubertad y adolescencia
Alrededor de los 9 o 11 años comienzan a aparecer algunos cambios en el cuerpo, la piel
se torna más grasa y aparecen granitos, el sudor tiene un olor más fuerte, el cuerpo se
vuelve más torpe en los movimientos debido al crecimiento de las extremidades. Todo esto
puede producir cierta incomodidad o vergüenza. La aparición de la menstruación en las
mujeres y de las eyaculaciones en los varones, acompañados de la aparición de los
caracteres sexuales secundarios y de cambios psicológicos y sociales, entre otros, son
indicios de que se ha iniciado la pubertad. La adolescencia se caracteriza por la aparición
de impulsos de rebeldía y pensamientos y sentimientos contradictorios. Es una etapa en la
que comienza a formarse la propia identidad, termina de desarrollarse la sexualidad y la
identidad sexual.

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