Está en la página 1de 9

ÍNDICE

1. REDACCIONES FILOSÓFICAS (p. 1-6)


a. Condiciones del Conocimiento Científico (p. 1-2)
b. Concepción trascendental del “​a priori” ​(p. 3)
c. Análisis trascendental del conocimiento científico (p. 4-5)
d. El Giro Copernicano (p. 6)

2. VOCABULARIO (p. 7-8)


REDACCIONES FILOSÓFICAS KANT
Condiciones del conocimiento científico
El conocimiento científico busca establecer mediante leyes regulares y constantes, universales
y necesarias, una descripción veraz sobre la realidad, basándose en la experiencia y los hechos.
El conocimiento científico se expresa en “leyes de la naturaleza”: manifestación de la
racionalidad humana en forma de ideas y conceptos que vinculan determinados
acontecimientos entre sí y establecen una relación de proporcionalidad entre ellos. Éstas
tienen una doble componente:
● La existencia de un ​mundo exterior​: objetos, hechos y acontecimientos.
● El s​ er humano​: con su racionalidad, trata de comprender y explicar los hechos.
Dicho de otro modo, por una parte un s ​ oporte experimental​ (sensible) y, por otra, las
condiciones propias de la inteligibilidad​. Sus contenidos deben establecer una relación con
valía universal y una relación necesaria entre los acontecimientos, de forma que siempre que
ocurra el primero de ellos, aparecerá necesariamente el segundo.
Por lo tanto, la ciencia exige racionalidad, universalidad y necesariedad. Kant lo manifiesta así:
“​si en las ciencias hay inteligibilidad/racionalidad, algo se debe conocer de ellas a priori​”.
A priori: características intrínsecas (innatas) del ser humano
en el momento de conocer.
Todo conocimiento científico contiene un doble paquete de condiciones:
● Las ​naturales​, exteriores al ser humano.
● Las ​propias y exclusivas del ser humano​, que adaptan e interpretan lo recibido del
exterior a las exigencias de la comprensión humana.
En cuanto a las propiedades del conocimiento científico, figura que sea elaborado a partir de
los datos y las experiencias. Parece evidente que no hay posibilidad de conocimiento de seres
que no existen o que no supiéramos nada de ellos. Incluso no podríamos decir nada de cosas
que sólo ocurrieran una vez.
El conocimiento científico necesita de la acumulación de datos. Se basa en la experiencia. Es la
fusión de los informes de la experiencia y la organización y elaboración de la racionalidad
humana. No obstante, surge una contradicción.
De las experiencias sensibles no se puede extraer necesidad y universalidad, porque no
sabemos si en el futuro seguirá siendo igual. La experiencia da un conocimiento ​a posteriori​,
pero la racionalidad humana necesita que sea universal y necesario, es decir, a
​ priori​.
➢ En el racionalismo (Descartes, s. XVIII), decían que existían determinadas ideas innatas,
base y fundamento de nuestro conocer. La intuición de lo no-contradictorio era el principio
del conocimiento.
➢ En el empirismo (Locke, Hume), defendían que el conocimiento era consecuencia de las
impresiones sensibles anteriores: no existían las ideas innatas.
Ambas corrientes cometían un error: confundir el fundamento del conocimiento con el origen.
El saber el origen del conocimiento no quiere decir que se sepa cuál es su fundamento lógico o
racional. Kant afirma que el conocimiento está indudablemente basado en la experiencia y
elaborado bajo una serie de condiciones que impone el sujeto, que nada tiene que ver con el
objeto percibido, es decir a
​ priori.
Así mismo, una exigencia del conocimiento científico es que sea “universal” y “necesario” y, por
tanto, una vez enunciado se cumpla siempre de la misma manera. De no serlo, nunca
podríamos organizarnos ni saber qué y qué no podríamos hacer.

1
En resumen, las condiciones del conocimiento científico vienen sintetizadas en los j​ uicios
sintéticos a
​ priori​:
Un juicio es una expresión verbal que relaciona un sujeto con un predicado. En las leyes
científicas, sujeto y predicado quedan vinculadas de una manera universal y necesaria. Todas
las leyes científicas son juicios.
Tipos de juicios:

A PRIORI A POSTERIORI
JUICIOS (universal y necesario y no (casos particulares, dependen de
depende de la experiencia) la experiencia)

ANALÍTICOS El triángulo tiene 3 lados


(predicado incluido en el sujeto, - Ø
no aportan nueva información) La lógica

SINTÉTICOS El cielo está nublado.


(El predicado no está incluido en Ciencias y conocimiento -
el sujeto y extiende la científico. Todos los de el pueblo X tienen
información) el pelo rubio

Kant es quien propone los ​juicios sintéticos​ a priori​,​ que reúnen las características de los
juicios sintéticos (la experiencia) y las de los a
​ priori (​ universales y necesarios). Es por ello que
los juicios sintéticos a priori son los principios de todas las ciencias.
Todo conocimiento se basa en la experiencia, pero no es ella la forma como conocemos las
cosas. El conocimiento es la conjunción de informes del mundo exterior y la forma humana de
adaptarlos para ser válidos e inteligibles.
Analicemos dicho concepto (​la explicación se halla en la “Introducción” de su obra C
​ rítica de la Razón Pura​)​:

- JUICIOS​: determinaciones de la mente sobre cualquier asunto. Afirmaciones que


vinculan entre sí varias cosas de diferentes maneras.
- Elaborados a partir de la ​sensibilidad​, incorporan impresiones sensibles (contingentes).
- SINTÉTICOS​: amplían conocimiento.
- Adquieren la ​universalidad y necesidad​ cuando el ser humano incorpora elementos
ajenos a los objetos. El ser humano adapta el objeto percibido a sus condiciones
naturales de percibir y pensar (​a priori​).
- A PRIORI​: los elementos ​a priori​ son: espacio-tiempo, en la formación de las intuiciones
sensibles, y las categorías, al establecer conocimiento.
Todas las ciencias que aspiren a expresar verdades son expuestas mediante ​juicios sintéticos a
priori​. Todo conocimiento posible siempre es la combinación de elementos que el sujeto
percibe del exterior y elementos que el sujeto aporta.

2
Concepción trascendental del “​a priori​”
Un juicio es una expresión verbal que relaciona un sujeto con un predicado. En las leyes
científicas, sujeto y predicado quedan vinculadas de una manera universal y necesaria, es decir,
a priori. ​No obstante, el término “​a priori​” tiene varios significados:
● Anterior a la experiencia​ (​a posteriori s​ ería derivado de ella).
● Independiente de la experiencia​.
● Necesidad​, no depende de los objetos.
Kant se decanta por la segunda. Algo ​a priori​ es independiente de la experiencia. El enfoque
kantiano consiste en averiguar qué es lo que puede hacer que un conocimiento con su apoyo
en la experiencia (contingente y cambiante), sea universal y necesario; ya que​ la ciencia es
experimental, universal y necesaria.
Ya que las características de “necesidad” y “universalidad” no puede otorgarlas la experiencia,
hay que buscarlas en las facultades cognitivas del ser humano, pues todo conocimiento cuenta
de 2 extremos:
● Objeto​: algo exterior que llega a ser conocido, explicado e interpretado.
● Sujeto​: expresa la verdad de lo conocido.
Tradicionalmente, se ha pensado que la solución procedía del lado de la experiencia. Sin
embargo, Kant propone cambiar la visión y que ésta llegue del sujeto que conoce. El sujeto
cognoscente posee unas determinadas condiciones previas al hecho del conocimiento
(facultades cognitivas) que son las que lo hacen posible.
Estas condiciones son ​a priori y​ son lo que aporta el sujeto en el hecho del conocimiento. Para
Kant, ​a priori​ en el conocimiento es el conjunto de condiciones innatas que el ser humano
impone a los objetos del mundo exterior que percibe.
Kant también habla de una concepción trascendental del a ​ priori. ​Trascendental hace
referencia a nuestra forma de conocer, en la que destaca el no tanto el contenido sino cómo ha
sido elaborado.
Trascendental equivale al conjunto de condiciones humanas previas al hecho del
reconocimiento de un objeto del mundo exterior​. Son condiciones anteriores, es decir, a ​
priori, trascendentales.​ Trascendental y ​a priori​ quedan igualados, aunque ​a priori​ hace
referencia a la experiencia y trascendental a las condiciones cognitivas del ser humano.
Gracias a esta concepción trascendental del ​a priori​, el conocimiento depende del sujeto
cognoscente, por lo que se puede hablar de conocimiento “universal” y “necesario”. Depende
de la forma cómo elaboramos el conocimiento, de nuestra forma de racionalidad.
Con anterioridad a Kant, se pensaba que el ser humano era un reproductor pasivo de
estímulos externos. Kant cambia dicha perspectiva y la convierte en trascendental: el ser
humano, al poseer las capacidades y facultades específicas de conocer, puede someter las
sensaciones que recibe del exterior para hacerlas inteligibles. El ser humano no es un agente
pasivo en el conocimiento, sino que es tremendamente activo.
Como hemos visto, las facultades cognitivas humanas son independientes de los objetos
percibidos. Pero, ¿qué implica esta afirmación?
- Que el conocimiento no es lo que los objetos externos nos dicen de sí mismos.
- Que conocer es algo propio del ser humano y tiene una forma específica de hacerlo.
- Que el conocimiento tiene unos elementos a ​ priori​, aportados por el ser humano, que lo
hacen posible

3
Análisis trascendental del conocimiento científico
La metafísica comenzó a sufrir una situación de descrédito, por lo que se vio obligada a
abandonar el método tradicional para imitar al método científico. No obstante, no se trataba
de emprender el método hipotético-deductivo, sino tratar de acercarse a la ciencia en el
aspecto t​ rascendental​, con el que ha conseguido ser segura y fiable. Dicho de otro modo, en
saber si cuenta con con componentes tanto empíricos como ​a priori​.
Con el término “trascendental” queremos referirnos a “lo que el sujeto aporta”al conocimiento
independientemente de los estímulos exteriores. Decimos que el conocimiento científico es
trascendental porque en él se unen los estímulos exteriores con las especiales cualidades
cognitivas humanas, pues es un conocimiento sensible y ​a priori​ simultáneamente.
De igual manera, “trascendente” es el conocimiento más allá de lo sensible, sin ayuda
experimental. La metafísica tradicional suponía que los objetos eran los únicos que dictaban el
conocimiento (​Empirismo​), pero a su vez decía que era posible un conocimiento ​a priori s​ obre
ellos, como ideas innatas (​Racionalismo​). Este hecho es una contradicción, pues no es posible
saber algo a priori de un objeto si hemos de esperar a que éste dé su información.
Sin embargo, si tratamos de enfocar esta cuestión desde el ​sujeto​, es decir, desde nuestra
forma de conocer, y no desde el objeto, concordaría mucho mejor con la posibilidad de saber
algo ​a priori​ de ellos. Dicho a
​ priori​ sería nuestra forma de percibir los objetos: formas ajenas a
ellos y exclusivas del ser humano.
De esta forma, imitando a las matemáticas y la ciencia natural, los objetos han de someterse a
un plan previamente concebido, haciendo un análisis de la percepción y entendimiento
humano, las maneras de conocer previas e independientes a los objetos y obligar a éstos a
contestar lo que la racionalidad les pide que contesten.
Si los objetos deben ser conocidos por las condiciones sensibles y mentales del sujeto
cognoscente, entonces sí que se podrá saber a ​ priori​ sobre ellos. Las concepciones humanas
de la percepción y el pensamiento no son objetos, sino condiciones; así le ocurrió a Copérnico.
En la metafísica se puede intentar hacer lo mismo por lo que respecta a la percepción sensible
de los objetos. A esta propuesta se le conoce como el “giro copernicano” de Kant.
Según Kant, la formación del conocimiento tiene 2 estadios:
- La ​sensibilidad​. Los objetos son intuidos y es donde el sujeto elabora los fenómenos: la
percepción espacio-temporal de los objetos materiales. Los fenómenos son
trascendentales.
- El e
​ ntendimiento​. Los fenómenos son sometidos a las formas básicas y elementales del
pensar humano: las categorías. Éstas son la estructura de la racionalidad humana y
permiten que se puedan elaborar conceptos generales de las cosas y sus relaciones.
De todo objeto sensible se puede conocer algo a ​ priori​ si se reconoce la existencia de una
condiciones, independientes del objeto, propias del modo humano de conocer. Al dirigirnos al
objeto conociendo cuáles son dichas condiciones, sí que se puede saber algo ​a priori​ de él, que
es lo que aporta el ser humano. Es por ello que el conocimiento sensible de objetos es posible
porque éste está elaborado bajo unas condiciones que impone el sujeto cognoscente ​a priori​:
espacio​ y t​ iempo​.
Estas condiciones no son propiedades de los objetos sino del sujeto que percibe. Esto es el
“giro copernicano”: los objetos quedan sometidos y explicados por la forma de percibir del ser
humano, sin tener que quedar sometidos a lo que supongamos e imaginemos que los objetos
nos digan de sí mismos.

4
Esa es la estructura del conocimiento humano: las cosas se hacen perceptibles e inteligibles
porque existe un modo específico de captarlas. La intuición es trascendental y esta es la
primera síntesis en el pensamiento kantiano, la ​Estética trascendental​.
Pero como buscamos conocimientos superiores y más generales (​conceptos​), se hace preciso
referir a estos fenómenos a un nivel superior: el del pensamiento (la conceptualización) y el
entendimiento.
El conocimiento versa sobre objetos generales, los conceptos, frente a la experiencia que es un
reflejo de objetos individuales. Hay que ascender al nivel en donde los fenómenos puedan
expresar conocimiento tras ser sometidos a las formas generales del pensar humano.
Al llegar a este segundo nivel aparecen 2 opciones: aceptar que todo conocimiento se origina
en la experiencia (imposibilidad de a
​ priori​) o se acepta que para conocer algo a ​ priori​ de él hay
que presuponer otras condiciones ajenas a la experiencia. Aquí es donde los fenómenos ya
elaborados en la sensibilidad se convierten en el objeto o materia de algo superior: las
facultades del entendimiento o los conceptos a ​ priori​. De esta forma, ante ellas se les
presentan los fenómenos y por su acción se convierten en conceptos generales.
Esta es la segunda síntesis del pensamiento kantiano, la A
​ nalítica trascendental​.
El ser humano tiene la facultad innata de pensar y la puede usar siempre, No obstante, solo
cuando lo haga con referencia a fenómenos elaborados en la experiencia, tendrá visos de
posibilidad y realidad: de ser conocimiento verdadero o ​ciencia.
El pensar también es independiente de los objetos que percibimos. De hecho, la superioridad
del entendimiento sobre la experiencia permite reglamentarla pero acoplándose a ella, siendo
éste el modo de proceder de las ciencias naturales.
No obstante, hay “objetos” que nunca se dan en la experiencia y sólo son pensados: libertad,
inmortalidad y Dios. De éstos sólo conocemos lo que nosotros mismos ponemos en ellos y
suponen una prueba definitiva de la valía de este método: reconocer que sólo se puede
conocer algo a
​ priori​ si el sujeto pone algo en ellos.
En conclusión, Kant defiende la necesidad de intervención del sujeto para que sea posible el
conocimiento. De este modo, sería imposible obtener conocimiento y, por tanto ciencia,
simplemente mediante la experiencia, ya que siempre deberíamos estar esperando que los
objetos nos diesen nueva información.

5
El Giro Copernicano
Kant plantea un nuevo método a la hora de tratar las cuestiones epistemológicas. El filósofo
alemán propuso cambiar el enfoque de antaño y hacer que el sujeto cognoscente tuviera un
papel activo en la construcción del conocimiento. Este cambio que invierte la relación entre
objeto-sujeto ha sido llamada el “​giro copernicano​” dada su similitud.
Con este enfoque a la hora de proceder, pretende hacer entender que, aun teniendo que partir
de la experiencia, el conocimiento necesita de elementos independientes a los objetos, a
​ priori​,
que los aporta el sujeto y son ​trascendentales​.
Por ello, los objetos son los que tienen que someterse a las exigencias de la racionalidad
humana. De lo contrario no se podría conocer algo a ​ priori​ de ellos, solo lo sería posible un
conocimiento ​a posteriori​.
Como vemos, Kant prioriza al ser humano como activo y constructivo en la función cognitiva.
Por tanto, el conocimiento es una elaboración compartida mutua entre el objeto y el sujeto
que lo entiende. El objeto es ajeno al sujeto y es la materia que afecta a los sentidos, siendo
ésta imprescindible. Por otra parte las condiciones que aporta el sujeto y que sólo por él se
puede hacer inteligible el objeto percibido. De esto último surge el ​a priori​.
Ahora bien, por sí solos objeto o sujeto no son suficiente para que exista el conocimiento. Si se
le otorga el protagonismo únicamente al objeto solamente contaremos con datos sensibles y,
por tanto, caeremos en el escepticismo de los empiristas. Por el contrario, si únicamente
tomamos al sujeto, estaremos acercándonos a la metafísica dogmática y el racionalismo.
Gracias al componente a​ priori​ se puede dar el paso de la contingencia de lo sensible y
experimental a lo universal y necesario; ya que estas características no puede otorgarlas la
experiencia, hay que buscarlas en las facultades cognitivas del ser humano.
El proceso del conocimiento se basa en que no hay conocimiento sin experiencia, sin embargo,
la experiencia por sí sola no logra que éste sea universal ni necesario. En cambio, la ciencia sí
que es universal y necesaria, por lo que si en el conocimiento han 2 componentes y dichas
características no radican en la experiencia, la universalidad y necesariedad se desarrollan por
lo que aporta el sujeto. Por tanto, sólo en el sujeto se encuentra la posibilidad de convertir la
ciencia en lo que es.
El proceso nombrado en el párrafo anterior se conoce como el m ​ étodo crítico​, con el que se
pretende construir conocimiento. De él deriva la filosofía crítica.
De la dualidad del conocimiento (objeto-sujeto), Kant se centra en la parte totalmente ajena a
la experiencia, la estrictamente pura. Es decir, saber cuáles son y cómo funcionan las
condiciones ​a priori​ del conocimiento, independientes del objeto y aportadas por la manera de
construir el conocimiento por parte del sujeto. Esto es el significado de Ya que las
características de “necesidad” y “universalidad” no puede otorgarlas la experiencia, hay que
buscarlas en las facultades cognitivas del ser humano de c ​ onocimiento trascendental.
En conclusión, conocemos el “giro copernicano” de Kant al cambio del enfoque a la hora de
obtener conocimiento. Encontró las características de universal y necesario en las facultades
humanas mientras que defendía la necesidad de experiencias sensibles.

6
VOCABULARIO
Condiciones del conocimiento científico

JUICIO

Cuando hablamos de juicio nos referimos a aquello que el ser humano formula, basado en su
opinión o criterio, sobre un asunto. Es algo específico de los humanos y radica en su
entendimiento y uso de la razón y, si nos referimos a Kant, de las categorías. Gracias a los
juicios se enlazan sujeto y predicado y existen dos tipos de juicios.

Cuando se tratan de juicios en los que el predicado no amplía la información del sujeto
hablamos de ​juicios anaíticos​. De por sí la información se encuentra incluida en el sujeto por
lo que son obligatoriamente verdaderos. Ejemplos de ellos son: u ​ n triángulo tiene 3 ángulos,
todos los objetos son materia, etc.

Por el contrario, al hablar de juicios que sí que amplían la información contenida en el sujeto y,
por tanto, tal idea no se encuentra contenida en él, hablamos de ​juicios sintéticos​. Éstos son
basados en la experiencia y aspiran a ser necesarios y universales, pero cuentan con un gran
problema: las excepciones. Ejemplos de este tipo de juicios: e ​ l cielo está nublado, los de 2do A
son inteligentes, etc.

Kant relaciona la ciencia con los j​ uicios sintéticos a priori​. Los juicios sintéticos pueden ser a
priori, si son universales y se pueden anticipar sin comprobarlos (gravitación universal de
Newton), o a posteriori, los cuales requieren esperar a que el objeto nos aporte nueva
información y no son universales (experimentar los gases producidos en una combustión).
Para el filósofo alemán el conocimiento científico es el conjunto de los juicios sintéticos a priori,
juicios los cuales han sido elaborados de tal forma que el vínculo que se establece entre el
sujeto y el predicado resulta ser universal y necesario y nace de una base sensible.

Aparentemente los juicios sintéticos a priori pueden ser una contradicción. No obstante,
gracias a las capacidades cognitivas del ser humano, ese es capaz de relacionar de forma
universal y necesaria los hechos que ocurren en la naturaleza. En conclusión, todo juicio
considerado como base para la ciencia ha de ser sintético, en el sentido de que amplía
información y cuenta con base empírica, y ​a priori​, pues deben ser universales y necesarios,

TIEMPO

«El tiempo es, pues, dado a priori. En él tan sólo es posible toda la realidad de los fenómenos.
Todos ellos pueden desaparecer, pero el tiempo mismo (como la condición universal de su
posibilidad) no puede ser suprimido»​ - Kant.

Como vemos en la cita, según Kant el tiempo es una de las condiciones a ​ priori​ (junto al
espacio) que hacen posible la formación de la experiencia en forma de fenómenos. Espacio y
tiempo no son figuras empíricas: ​ «Nunca se puede tener la representación de que no hay
espacio, aunque puede perfectamente pensarse que no se encuentra en él ningún objeto».
Nos podemos imaginar un espacio vacío, no obstante no podemos imaginar un no-espacio, o
un mundo sin tiempo. Son estructuras ​a priori​ que están en el ser humano y que éste las
emplea para construir los fenómenos.

7
Análisis trascendental del conocimiento científico
FENÓMENO
Kant llama fenómeno a cuando el objeto (datos sensoriales del mundo exterior) es ordenado
bajo las condiciones estructurales espacio-temporales. Estas condiciones son independientes
del objeto y sin ellas sería imposible conocer nada. Es por ello que cuando el objeto se nos
muestra cómo organizado, con sentido y de forma inteligible, recibe el nombre de fenómeno.
Tal como se puede ver en la definición, el fenómeno se da gracias a la aportación del ser
humano. Éste es quien organiza la información externa mediante sus condiciones.

TRASCENDENTAL
Kant llama trascendental a todo conocimiento centrado en la forma de conocer humana sobre
los objetos y que hace que éste sea a
​ priori​. Trascendental hace referencia a nuestra forma de
conocer, en la que destaca el no tanto el contenido sino cómo ha sido elaborado, por lo que
equivale al conjunto de condiciones humanas previas al hecho del reconocimiento de un
objeto del mundo exterior.
El término se puede emplear de varias maneras. Para empezar, éste se puede ver como las
facultades inherentes al sujeto, que son ​a priori​ y hacen posible el conocimiento. Llevando este
concepto al siguiente nivel, el término trascendental se puede ver como las condiciones o
factores que, en cada nivel del conocimiento, se aplican para llegar a la síntesis (espacio y
tiempo - Estética trascendental; categorías - Analítica trascendental).
Por último, el término también se puede interpretar como la ciencia que estudia y organiza la
realidad y existencia de condiciones ​a priori​ en el conocimiento. En Kant equivaldría con su
propia F​ ilosofía crítica​, contenida en la ​Crítica a la razón pura​.

El Giro Copernicano
GIRO COPERNICANO
Cuando hablamos del Giro Copernicano nos referimos a una de las figuras literarias más
afamadas de la filosofía kantiana. Ésta pretende hacer ver que el punto de vista del análisis del
conocimiento ha de ser cambiado. Hasta entonces se había interpretado al objeto como
fuente principal de conocimiento y el sujeto simplemente un elemento pasivo. No obstante, el
giro copernicano se refiere al cambio de enfoque que le da Kant, proponiendo que fuese al
contrario: el conocimiento que se adquiera de los objetos es contrucción del ser humano al
aportar determinados condicionantes a ​ priori​.
A PRIORI
A priori​ es aquello independiente y previo a la experiencia. Para Kant, en el proceso de
formación del conocimiento no sólo intervienen elementos sensibles, sino que el sujeto, de
forma activa, lo construye aportando lo que la experiencia no puede. La información de los
sentidos se une junto con los elementos a ​ priori​ del sujeto. De esta forma surge la ciencia o el
conocimiento verdadero sobre las cosas.
En la Estética trascendental, serían ​a priori l​ as condiciones espacio-temporales. En lo que
respecta a la Analítica trascendental lo serían las categorías. Así mismo, son elementos
anteriores, es decir,, trascendentales. Trascendental y a priori quedan igualados y gracias a esta
concepción trascendental del a priori, el conocimiento depende del sujeto cognoscente, por lo
que se puede hablar de conocimiento “universal” y “necesario”.

También podría gustarte