La Escolástica medieval fue un movimiento filosófico y teológico que se desarrolló
en Europa durante la Edad Media, aproximadamente desde el siglo IX hasta el
siglo XIV. La escolástica surgió en las escuelas y universidades medievales y se caracterizó por su enfoque sistemático y riguroso en la búsqueda de la verdad y la reconciliación de la fe y la razón.
Los escolásticos medievales, conocidos como escolásticos, intentaron combinar la
filosofía clásica, especialmente la filosofía de Aristóteles, con la teología cristiana. Consideraban que la razón y la fe no eran contradictorias, sino complementarias, y buscaban demostrar la existencia de Dios y desarrollar una comprensión racional de los dogmas religiosos.
Los escolásticos empleaban un método de argumentación lógica y dialéctica para
analizar y discutir temas teológicos y filosóficos. Utilizaban la lógica formal para establecer premisas y conclusiones, y empleaban la dialéctica para debatir y refutar argumentos. La escolástica se centraba en la resolución de aparentes contradicciones entre las enseñanzas de la Iglesia y las ideas filosóficas, buscando una síntesis armoniosa.
El término "escolástico" se refiere tanto a los seguidores de la escolástica como a las
características propias de este enfoque filosófico. Se caracteriza por su énfasis en la argumentación lógica, el análisis riguroso de textos y la aplicación sistemática del razonamiento a cuestiones teológicas y filosóficas.
la escolástica medieval fue un movimiento intelectual que buscaba conciliar la fe
y la razón a través de un enfoque lógico y sistemático. Los escolásticos eran los filósofos y teólogos que participaban en este movimiento y desarrollaban argumentos y tratados dentro de este marco 2. la filosofía- el hombre en la escolástica. Filosofía y teología: En la escolástica, la filosofía se consideraba una sierva de la teología. Los escolásticos creían que la razón y la fe no eran incompatibles, sino que la razón podía servir para comprender y profundizar en los misterios de la fe. La teología era considerada la reina de las ciencias, y la filosofía, especialmente la filosofía aristotélica, proporcionaba el marco lógico y racional para el análisis teológico. Racionalismo y fe: La escolástica buscaba armonizar la razón y la fe, reconociendo que algunos misterios religiosos trascendían la capacidad de la razón humana. Los escolásticos empleaban la razón para analizar y argumentar en cuestiones teológicas, pero también reconocían la necesidad de la fe para comprender completamente la verdad divina. Antropología: La escolástica tenía una visión antropológica basada en la creencia de que los seres humanos son una combinación de cuerpo y alma. Según la doctrina cristiana, el alma es inmortal y tiene una naturaleza racional y espiritual. Los escolásticos se interesaban por el estudio del alma humana, su relación con el cuerpo y su capacidad para conocer a Dios. Lugar de la razón: Aunque se consideraba que la fe era superior a la razón, la escolástica valoraba la capacidad de la razón humana para comprender y explorar el mundo. Los escolásticos confiaban en la lógica y la argumentación racional para establecer verdades teológicas y filosóficas. Método de estudio: La escolástica se basaba en un enfoque sistemático y riguroso de estudio y análisis. Los escolásticos se dedicaban al estudio de textos antiguos, especialmente las obras de Aristóteles, y desarrollaban argumentos basados en la lógica formal y la dialéctica. También se preocupaban por la exégesis de los textos religiosos y la reconciliación de las enseñanzas de la Iglesia con la filosofía clásica. En resumen, la filosofía en la escolástica medieval se orientaba hacia la reconciliación de la razón y la fe, reconociendo la superioridad de la fe pero utilizando la razón como herramienta para profundizar en la comprensión de los misterios divinos. El método escolástico se basaba en el estudio sistemático, la argumentación lógica y el análisis de textos. 3. Santo Tomás de Aquino (1225-1274) Síntesis entre fe y razón: Santo Tomás buscó armonizar la fe y la razón, considerando que ambas son fuentes de conocimiento válidas y complementarias. Sostenía que la razón podía iluminar la fe y que la fe podía elevar y ampliar la comprensión racional. Teología sistemática: Su obra más famosa es la "Summa Theologiae", una obra monumental que aborda la teología de manera sistemática y exhaustiva. En ella, Santo Tomás presenta argumentos racionales y teológicos sobre la existencia de Dios, la naturaleza divina, la creación, la moral y otros temas centrales de la teología cristiana. Argumento cosmológico: Santo Tomás formuló argumentos cosmológicos para demostrar la existencia de Dios. Su famoso argumento de las "cinco vías" se basa en la observación de la causalidad en el mundo y concluye que debe existir un primer motor inmóvil que es Dios. Distinción entre filosofía y teología consideraba que ambas eran complementarias y que la filosofía podía ayudar a comprender mejor los misterios de la fe. Sostenía que la filosofía natural podía conducir a la verdad de Dios, mientras que la teología revelada se basaba en la fe y la revelación divina. Ley natural y ética: Santo Tomás desarrolló la idea de la ley natural, que consideraba que hay principios morales objetivos arraigados en la naturaleza humana y que son accesibles a través de la razón. Además, propuso una ética basada en la búsqueda de la felicidad y la virtud, entendiendo que el fin último del ser humano es la unión con Dios. 4. Cinco Vías constituyen un intento de Santo Tomás de Aquino de proporcionar argumentos racionales para la existencia de Dios basados en la observación del mundo natural y en el uso de la razón. Vía del movimiento: Observamos que en el mundo hay cosas que se mueven. todo movimiento es causado por algo externo a sí mismo. Sin embargo, esto no puede continuar indefinidamente, ya que debe haber una causa inmóvil y no movida que sea el origen de todo movimiento. Esta causa inmóvil es Dios. Vía de la causa eficiente: Observamos que en el mundo hay una sucesión de causas y efectos. Cada efecto tiene una causa que lo precede, y esa causa a su vez es el efecto de otra causa anterior. Sin embargo, esta cadena causal no puede retroceder indefinidamente, ya que debe haber una causa primaria, una primera causa no causada que dio inicio a todas las demás causas. Esta causa primera es Dios. Vía de la contingencia y la necesidad: Observamos que en el mundo hay cosas que existen pero que también podrían no haber existido. Son contingentes, es decir, su existencia no es necesaria. Sin embargo, si todo en el mundo fuera contingente, en algún momento nada existiría, ya que lo contingente depende de algo para su existencia. Por lo tanto, debe haber un ser necesario, un ser cuya existencia no depende de nada más, y ese ser necesario es Dios. Vía de los grados de perfección: Observamos que en el mundo hay diferentes grados de perfección y excelencia en las cosas. Al comparar diferentes cualidades, como belleza, bondad o verdad, nos damos cuenta de que existe una medida objetiva de perfección. Esa medida máxima de perfección es lo que llamamos Dios, el ser supremo en el que todas las cualidades perfectas se encuentran en su grado máximo. Vía del orden y el diseño: Observamos que en el mundo hay un orden y una organización precisa en los seres y en las leyes naturales. Este orden no puede ser producto del azar, ya que implica una inteligencia y un propósito. Por lo tanto, debe haber un ser inteligente y supremo que ha diseñado y ordenado el universo de manera intencional. Ese ser es Dios. 5. Santo Tomás de Aquino utilizó argumentos deductivos se basan en la lógica y siguen una estructura lógica rigurosa. Aquí hay algunos ejemplos de argumentos deductivos utilizados por Santo Tomás de Aquino: Argumento de la inmortalidad del alma: Premisa 1: Todo ser que posee conocimiento es inmortal. Premisa 2: El alma humana posee conocimiento. Conclusión: Por lo tanto, el alma humana es inmortal. Argumento de la existencia de Dios: Premisa 1: Todo lo que se mueve es movido por algo más. Premisa 2: No puede haber una cadena infinita de seres que se muevan unos a otros. Premisa 3: Por lo tanto, debe haber un Primer Motor Inmóvil que inicie todo movimiento. Conclusión: Ese Primer Motor Inmóvil es Dios. Argumento del primer causante: Premisa 1: Todo efecto tiene una causa. Premisa 2: No puede haber una cadena infinita de causas y efectos. Premisa 3: Por lo tanto, debe haber una Causa Primera que no sea causada por nada más. Conclusión: Esa Causa Primera es Dios. Argumento de la finalidad y el orden: Premisa 1: En la naturaleza, se observa un orden y una finalidad en los seres. Premisa 2: Este orden y finalidad no pueden ser producto del azar. Conclusión: Por lo tanto, debe haber un Ser Inteligente y Supremo que ha diseñado y ordenado el universo de manera intencional. Ese ser es Dios. 6. Guillermo de Ockham, también conocido como Guillermo de Occam (c. 1287- 1347), fue un filósofo y teólogo franciscano inglés. conocido como la "Navaja de Ockham". Nominalismo: Guillermo de Ockham fue uno de los principales exponentes del nominalismo, una corriente filosófica que afirmaba que los universales (conceptos generales como "humanidad" o "belleza") no tienen existencia real en sí mismos, sino que son simplemente nombres o etiquetas que utilizamos para clasificar y agrupar objetos individuales. Ockham argumentaba que solo las cosas particulares tienen existencia real y que los universales son solo abstracciones mentales. Navaja de Ockham establece que, en igualdad de condiciones, la explicación más simple o la hipótesis que requiere menos supuestos es preferible. En otras palabras, si hay múltiples explicaciones posibles para un fenómeno, la más simple y que haga menos suposiciones innecesarias debe ser la preferida. Crítica a la metafísica aristotélica: Ockham cuestionó varios aspectos de la metafísica aristotélica y rechazó la idea de que las entidades abstractas o los universales tenían existencia real. También criticó la teoría aristotélica de la causalidad y propuso que los eventos no están necesariamente conectados por una relación causal, sino que pueden ser vistos simplemente como sucesiones regulares. Separación entre fe y razón: Ockham defendió una separación clara entre la fe y la razón. Sostenía que la fe y la revelación divina no pueden ser demostradas ni refutadas por la razón humana. Para él, la teología se basaba en la fe y la confianza en la autoridad divina, mientras que la filosofía se ocupaba de la razón y la investigación empírica.