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Tu niña interior necesita nuevas reglas que le permitan crecer y florecer y es importante que

te conviertas en la adulta que provee a tu niña la educación que necesita para sentirse a salvo
y sanar.

Disciplina Nutriente

Una disciplina idónea implica reglas que permiten a una persona ser quien es y sentirse segura
de ser reconocida, aceptada y amada siendo quien es… Así tu niña interiro necesita que le des
ese marco referencial que le permita mostrarse y expandirse con seguridad.

Está bien sentir lo que sientas. Las sensaciones no son buenas o malas. Simplemente son lo
que son. Nadie puede decirte que debes sentir. Es bueno y necesario hablar de sensaciones.

Está bien querer lo que quieres. No hay nada que debas o no querer. Si estás en contacto con
tu energía vital, querrás expandirte, crecer. Es necesario satisfacer tus necesidades. Por tanto,
es correcto solicitar lo que desees.

Está bien escuchar lo que veas y oigas, lo que viste y escuchaste es lo que viste y escuchaste.

Satisfacemos nuestras necesidades de ser cuando permitimos jugar a nuestro niño interior. Es
muy importante dejar que tu niño interior juegue sexualmente.

Es esencial decir la verdad en todo momento. Esto reducirá el sufrimiento de la vida. Mentir
tergiversa la realidad.

Autocompasion y paciencia: deja de exigirte y criticarte.

Es importante que conozcas tus límites y demores el placer algunas veces. Esto reducirá el
sufrimiento de la vida.

Es crucial desarrollar un equilibrado sentido de responsabilidad. Esto significa aceptar las


consecuencias de lo que haces y aceptar las consecuencias de lo que hace otro.

Está bien cometer errores, los errores son nuestros maestros. Nos ayudan a aprender.

Los sentimientos, necesidades y carencias de otras personas han de ser apreciados y


respetados. La violación de esto en otras personas conduce a la culpa y a aceptar las
consecuencias.

Esta bien tener problemas. Estos necesitan ser resueltos. Está bien tener conflictos, requieren
ser solucionados.

Una buena noticia es que aunque el niño interior fue herido por descuido y por una educación
inadecuada, podemos aprender a satisfacer las necesidades de ese niño aún siendo adulto.
Podemos desarrollar habilidades en todas las áreas de interacción humana. No es cuestión de
desaprender; es cuestión de aprender cosas por primera vez. KIp Flock

Tomado del libro: “Volver a la niñez” De John Bradshaw

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