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Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 200795


Instancia: Segunda Sala
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: 2a. XLVI/95
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo I, Junio de 1995, página 228
Tipo: Aislada

COMPETENCIA. PARA CONOCER DE LAS DEMANDAS SOBRE REPARTO DE


UTILIDADES, DEBE DEFINIRSE ATENDIENDO A LA ACTIVIDAD DE LA EMPRESA.

Como el reparto de utilidades es un derecho de los trabajadores a tener una participación en las
ganancias de las empresas y correlativamente se traduce en una obligación de éstas, si la
participación ya está legalmente determinada, es exigible por medio de las Juntas de Conciliación y
Arbitraje, y dependerá de la naturaleza de la empresa a la que se le reclame dicha prestación, la
determinación de la competencia federal o local. Por tanto, si la demandada es una empresa que se
dedica a las industrias enumeradas en los artículos 123, apartado A, fracción XXXI, constitucional y
527 de la Ley Federal del Trabajo, el conocimiento de la demanda laboral tocará a la Junta Federal
de Conciliación y Arbitraje. En todos los demás casos, a las Juntas Locales de Conciliación o de
Conciliación y Arbitraje, según lo dispone el artículo 698 de la Ley Federal del Trabajo.

Competencia 57/95. Entre la Junta Especial Número Uno de la Local de Conciliación y Arbitraje en
el Estado de San Luis Potosí y la Junta Especial Número Treinta y Nueve de la Federal de
Conciliación y Arbitraje en el Estado de Tamaulipas. 12 de mayo de 1995. Cinco votos. Ponente:
Genaro David Góngora Pimentel. Secretaria: María Guadalupe Saucedo Zavala.

Registro digital: 201852


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: VI.2o. J/58
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo IV, Julio de 1996, página 348
Tipo: Jurisprudencia

REPARTO DE UTILIDADES. CONDENA AL PAGO DEL.

Para condenar a la empresa demandada a dicha prestación, el trabajador debe demostrar que
previamente al juicio laboral agotó el procedimiento contemplado en el artículo 125 de la Ley
Federal del Trabajo, o bien, que el monto que le corresponde se encuentra establecido en cantidad
líquida y determinada y en forma definitiva por las autoridades hacendarias, porque de lo contrario
la Junta se encuentra imposibilitada para laudar congruentemente.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO.

Amparo directo 394/90. Ignacio Carreón Lezama. 2 de octubre de 1990. Unanimidad de votos.
Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretario: Jorge Alberto González Alvarez.

Amparo directo 146/92. Hugo Zitle Torres. 12 de mayo de 1992. Unanimidad de votos. Ponente:
Gustavo Calvillo Rangel. Secretario: Jorge Alberto González Alvarez.

Amparo directo 492/95. Industrias Polimex, S.A. de C.V. 18 de octubre de 1995. Unanimidad de
votos. Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretario: Humberto Schettino Reyna.

Amparo directo 615/95. Evaristo Rojas Elizalde y otros. 17 de enero de 1996. Unanimidad de votos.
Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretario: Humberto Schettino Reyna.

Amparo directo 303/96. Celia Pastén Hernández. 12 de junio de 1996. Unanimidad de votos.
Ponente: María Eugenia Estela Martínez Cardiel. Secretario: Héctor Enrique Hernández Torres.

Registro digital: 190358


Instancia: Segunda Sala
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: 2a./J. 2/2001
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XIII, Enero de 2001, página 204
Tipo: Jurisprudencia

REPARTO DE UTILIDADES. MOMENTO A PARTIR DEL CUAL INICIA EL CÓMPUTO DEL


PLAZO DE UN AÑO, PARA QUE OPERE LA PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PARA
EXIGIRLO.
En virtud de que la acción ejercitada para reclamar el pago de participación de utilidades no está
comprendida dentro de las acciones de trabajo que prescriben en los plazos que establecen los
artículos 517, 518 y siguientes de la Ley Federal del Trabajo, dicho supuesto debe ubicarse en la
regla general de un año que prevé el numeral 516 de la propia ley. Ahora bien, de acuerdo con lo
dispuesto en el artículo 125 de ésta, los trabajadores individualmente pueden formular objeciones a
la resolución que dicte la comisión mixta o, en su caso, el inspector del trabajo, en la que se
determine la participación individual de cada uno de ellos en las utilidades de la empresa,
objeciones que serán resueltas por la citada comisión después de seguir el procedimiento previsto en
el propio precepto, y es a partir del dictado de la resolución respectiva cuando nace la obligación del
patrón de entregar a cada trabajador el reparto de utilidades; de ahí que el plazo de un año para que
prescriba la acción de mérito inicia a partir del día siguiente al que se notifique o haga saber
fehacientemente al interesado el pronunciamiento de la resolución mencionada, pues sólo hasta que
se precise en cantidad líquida la participación de cada trabajador en dichas utilidades, estará en
aptitud de reclamarla.

Contradicción de tesis 13/2000-SS. Entre las sustentadas por el Tribunal Colegiado del Segundo
Circuito y el Noveno Tribunal Colegiado del Primer Circuito, ambos en Materia de Trabajo. 30 de
noviembre del año 2000. Cinco votos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretario:
Alberto Miguel Ruiz Matías.

Tesis de jurisprudencia 2/2001. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión
privada del doce de enero de dos mil uno.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 192691


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: II.T.104 L
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo X, Diciembre de 1999, página 774
Tipo: Aislada

REPARTO DE UTILIDADES. INICIO DEL TÉRMINO PRESCRIPTIVO, PARA DEMANDAR


SU PAGO.
El artículo 122, primer párrafo, de la Ley Federal del Trabajo, dispone la obligación del patrón de
efectuar el pago de reparto de utilidades, dentro de los sesenta días siguientes a la fecha en que deba
cubrirse el impuesto anual, aun cuando esté en trámite la objeción de los trabajadores. De donde, si
durante el mes de marzo se puede legalmente cumplir con el pago de ese impuesto, es evidente que
a partir de la conclusión de ese periodo nace la diversa obligación de pagar dicha prestación a los
obreros, abarcando los meses de abril y mayo y sólo terminado éste, se puede estimar incumplida la
obligación del empleador y por ende, a partir del primero de junio inicia el derecho del actor para
demandar su cumplimiento y precisamente desde este momento es cuando empieza a correr el
término de un año para la prescripción y no a partir de la aprobación del porcentaje repartible.

TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL SEGUNDO CIRCUITO.

Amparo directo 177/99. María del Carmen Escobar Morales. 7 de mayo de 1999. Unanimidad de
votos. Ponente: Fernando Narváez Barker. Secretario: Nicolás Castillo Martínez.

Nota: Esta tesis contendió en la contradicción 13/2000-SS resuelta por la Segunda Sala, de la que
derivó la tesis 2a./J. 2/2001, que aparece publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su
Gaceta, Novena Época, Tomo XIII, enero de 2001, página 204, con el rubro: "REPARTO DE
UTILIDADES. MOMENTO A PARTIR DEL CUAL INICIA EL CÓMPUTO DEL PLAZO DE UN
AÑO, PARA QUE OPERE LA PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PARA EXIGIRLO."

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 197729


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: VI.2o. J/109
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo VI, Septiembre de 1997, página 635
Tipo: Jurisprudencia

UTILIDADES, PAGO DE REPARTO DE.

Tratándose del pago del reparto de utilidades, las Juntas carecen de elementos para condenar al
patrón a cubrirlo cuando no se ha fundado un derecho específico a determinada cantidad, después
de seguido el procedimiento que fija el capítulo VIII del título tercero de la Ley Federal del Trabajo
(artículos 117 a 131), y en especial lo dispuesto por el artículo 125 de ese ordenamiento, precepto
del que se desprende que el porcentaje conforme al cual deben fijarse las participaciones de
utilidades de las empresas, debe ser determinado por la Comisión Nacional para el Reparto de
Utilidades, previas las investigaciones y los estudios necesarios.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO.

Amparo directo 166/93. Gustavo Vázquez Sanabria. 6 de mayo de 1993. Unanimidad de votos.
Ponente: José Galván Rojas. Secretario: Armando Cortés Galván.

Amparo directo 492/95. Industrias Polimex, S.A. de C.V. 18 de octubre de 1995. Unanimidad de
votos. Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretario: Humberto Schettino Reyna.

Amparo directo 615/95. Evaristo Rojas Elizalde y otros. 17 de enero de 1996. Unanimidad de votos.
Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretario: Humberto Schettino Reyna.

Amparo directo 673/96. Luis Iván Macías Castillo y otra. 26 de febrero de 1997. Unanimidad de
votos. Ponente: Antonio Meza Alarcón. Secretario: Enrique Baigts Muñoz.

Amparo directo 496/97. Juan Zúñiga Álvarez. 13 de agosto de 1997. Unanimidad de votos.
Ponente: Antonio Meza Alarcón. Secretario: Enrique Baigts Muñoz.

Véase: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Epoca, Tomo XV, mayo de 2002,
página 1150, de rubro "UTILIDADES, PAGO DE REPARTO DE.".

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 204828


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Novena Época
Materias(s): Administrativa
Tesis: VI.2o.7 A
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo II, Julio de 1995, página 269
Tipo: Aislada
REPARTO DE UTILIDADES. AUNQUE LOS TRABAJADORES O SU REPRESENTANTE
LEGAL NO REALICEN OBJECIONES A LA DECLARACION ANUAL DE LA EMPRESA, ES
UNA FACULTAD POTESTATIVA DE LA AUTORIDAD FISCAL.

El artículo 121 de la Ley Federal del Trabajo, que se refiere al derecho de los trabajadores de
formular objeciones a la declaración anual del impuesto sobre la renta, que presenta el patrón ante
la Secretaría de Hacienda (para los efectos del reparto de utilidades); ya que en la fracción II de
dicho numeral establece el término "podrá" siendo una facultad potestativa para los trabajadores
hacer sus observaciones, pero ello no implica que aunque en el supuesto que los trabajadores o su
representante legal omitan realizarlas, la autoridad en uso de sus facultades pueda ejercer sus
atribuciones de comprobación fiscal a fin de cerciorarse de que los contribuyentes han cumplido
con las disposiciones fiscales a su cargo.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO.

Amparo directo 247/93. Gas Central de Apizaco, S.A. de C.V. 3 de mayo de 1995. Unanimidad de
votos. Ponente: María Eugenia Estela Martínez Cardiel. Secretario: José Luis González Marañón.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 193878


Instancia: Segunda Sala
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: 2a. LXXI/99
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo IX, Mayo de 1999, página 507
Tipo: Aislada

PARTICIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES EN LAS UTILIDADES DE LAS EMPRESAS. LA


RESOLUCIÓN DE LA TERCERA COMISIÓN NACIONAL RESPECTIVA, EN CUANTO
CUMPLE CON SUS FUNCIONES DE FIJAR EL PORCENTAJE QUE DEBE REPARTIRSE, Y
OTRAS RELACIONADAS CON ELLO, NO VIOLA EL ARTÍCULO 123, APARTADO A,
FRACCIÓN IX, DE LA CONSTITUCIÓN NI LOS ARTÍCULOS 117 A 122, 126 Y 128 DE LA
LEY FEDERAL DEL TRABAJO.

El artículo 123, apartado A, fracción IX, de la Constitución, consagra el derecho de los trabajadores
a percibir una participación en las utilidades de las empresas y determina que se establecerá una
comisión nacional integrada con representantes de los trabajadores, de los patrones y del gobierno,
encargada de fijar el porcentaje de utilidades que debe repartirse, para lo cual practicará las
investigaciones y realizará los estudios necesarios y apropiados para conocer las condiciones
generales de la economía nacional y considerará la necesidad de fomentar el desarrollo industrial
del país, el interés razonable que debe percibir el capital y la necesidad de reinversión de capitales;
así como que la comisión podrá revisar el porcentaje fijado cuando existan nuevos estudios e
investigaciones que lo justifiquen. Por su parte, los artículos 117 a 122, 126 y 128 de la Ley Federal
del Trabajo reiteran lo anterior y, además, determinan que se considerará como utilidad la renta
gravable de conformidad con la Ley del Impuesto sobre la Renta; los sujetos exceptuados de
cumplir con la obligación de repartir utilidades; los casos en que debe efectuarse reparto adicional;
la imposibilidad de hacerse compensaciones de los años de pérdidas con los de ganancia y de hacer
deducciones o establecer distinciones entre las empresas. Por tanto, la resolución de la Tercera
Comisión Nacional para la Participación de los Trabajadores en las Utilidades de las Empresas, en
cuanto se refiere a los aspectos antes mencionados, además de fijar el porcentaje en que deben
participar los trabajadores en las utilidades del patrón, no viola los artículos supremo y secundarios
citados, pues al hacerlo se limita la comisión a repetir disposiciones contenidas en la Constitución y
en la Ley Federal del Trabajo y a remitir a la Ley del Impuesto sobre la Renta, sin que ello implique
regular situaciones jurídicas apartándose de su competencia legal.

Amparo en revisión 297/99. Cítricos de Huimanguillo, S.A. de C.V. 16 de abril de 1999. Cinco
votos. Ponente: Mariano Azuela Güitrón. Secretaria: María Estela Ferrer Mac Gregor Poisot.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 203276


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: I.9o.T.44 L
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo III, Febrero de 1996, página 463
Tipo: Aislada

PRESCRIPCION. LA ACCION PARA RECLAMAR LA PARTICIPACION DE LAS


UTILIDADES DE UNA EMPRESA, SE RIGE POR LA FECHA EN QUE SE DETERMINA SU
PORCENTAJE Y EL DERECHO SE HACE EXIGIBLE, NO A PARTIR DEL DIA SIGUIENTE A
LA FECHA DE LA RUPTURA DE LA RELACION DE TRABAJO.

El derecho a recibir el pago de la participación de utilidades se genera a partir de que la Comisión


Nacional para la Participación de los Trabajadores en las Utilidades de las Empresas determina el
porcentaje correspondiente, cuyo reparto debe efectuarse dentro de los 60 días siguientes a la fecha
en que deba pagarse el impuesto anual; entonces, si un trabajador exige el pago de ese derecho
después de un año de haber dejado de prestar sus servicios, pero antes de que transcurra el año en
que se determine el porcentaje relativo, debe estimarse que la acción respectiva se ejercita
oportunamente, ya que el derecho se objetiva en la fecha en que se fija el reparto de las utilidades y
no en la de la separación.

NOVENO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER CIRCUITO.

Amparo directo 229/96. Guillermina Ling Macías. 1o. de febrero de 1996. Unanimidad de votos.
Ponente: F. Javier Mijangos Navarro. Secretario: Héctor Landa Razo.

Nota: Esta tesis contendió en la contradicción 13/2000-SS resuelta por la Segunda Sala, de la que
derivó la tesis 2a./J. 2/2001, que aparece publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su
Gaceta, Novena Época, Tomo XIII, enero de 2001, página 204, con el rubro: "REPARTO DE
UTILIDADES. MOMENTO A PARTIR DEL CUAL INICIA EL CÓMPUTO DEL PLAZO DE UN
AÑO, PARA QUE OPERE LA PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PARA EXIGIRLO."

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 193877


Instancia: Segunda Sala
Novena Época
Materias(s): Constitucional, Laboral
Tesis: 2a. LXXII/99
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo IX, Mayo de 1999, página 508
Tipo: Aislada

PARTICIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES EN LAS UTILIDADES. LOS ARTÍCULOS 7o.,


8o. Y 24 DEL REGLAMENTO DE LOS ARTÍCULOS 121 Y 122 DE LA LEY FEDERAL DEL
TRABAJO, EN CUANTO FIJAN REGLAS ESPECÍFICAS PARA CUMPLIR CON ESA
OBLIGACIÓN, NO VIOLAN EL ARTÍCULO 89, FRACCIÓN I, DE LA CONSTITUCIÓN.

El artículo 122 de la Ley Federal del Trabajo establece que el reparto de utilidades entre los
trabajadores deberá efectuarse dentro de los sesenta días siguientes a la fecha en que deba pagarse el
impuesto anual, aun cuando esté en trámite la objeción de los trabajadores, así como que cuando la
Secretaría de Hacienda y Crédito Público aumente el monto de la utilidad gravable, sin haber
mediado objeción de los trabajadores o haber sido ésta resuelta, el reparto adicional se hará dentro
de los sesenta días siguientes a la fecha en que se notifique la resolución y sólo en caso de que ésta
sea impugnada, se suspenderá el pago del reparto adicional hasta que la resolución quede firme,
garantizándose el interés de los trabajadores. Por su parte, los artículos 7o., 8o. y 24 del Reglamento
de los Artículos 121 y 122 de la Ley Federal del Trabajo, disponen que el reparto de utilidades
deberá efectuarse dentro de los sesenta días siguientes a la fecha en que corresponda pagar el
impuesto sobre la renta anual, aunque los trabajadores hayan objetado la declaración presentada por
el patrón; que si éste presenta con posterioridad una declaración anual complementaria en la que
aumente el ingreso gravable declarado inicialmente, debe hacer un reparto adicional dentro del
plazo señalado y, por último, que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, sin que medie
objeción de los trabajadores, podrá ejercer sus facultades de comprobación y de encontrar que el
ingreso gravable es mayor al declarado, ordenará las liquidaciones del impuesto omitido y notificará
al patrón y a los trabajadores sobre la procedencia del reparto adicional. Los preceptos
reglamentarios no violan el artículo 89, fracción I, de la Constitución, ya que se limitan a
complementar y desarrollar el artículo 122 de la Ley Federal del Trabajo que reglamentan, sin
excederlo, dado que sólo hacen referencia a los plazos en que debe pagarse el reparto de utilidades a
los trabajadores, a la facultad de la secretaría mencionada para ejercer sus atribuciones y a su
obligación de comunicar al patrón y a los trabajadores sobre la procedencia del reparto adicional de
utilidades.

Amparo en revisión 297/99. Cítricos de Huimanguillo, S.A. de C.V. 16 de abril de 1999. Cinco
votos. Ponente: Mariano Azuela Güitrón. Secretaria: María Estela Ferrer Mac Gregor Poisot.
Registro digital: 2013053
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Décima Época
Materias(s): Laboral
Tesis: VII.2o.T.84 L (10a.)
Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación. Libro 36, Noviembre de 2016, Tomo IV,
página 2516
Tipo: Aislada

REPARTO DE UTILIDADES. REQUISITO PARA QUE INICIE EL CÓMPUTO DEL TÉRMINO


PARA QUE PRESCRIBA LA ACCIÓN PARA DEMANDAR SU PAGO.

La prestación de reparto de utilidades no prescribe de la misma manera que el aguinaldo, las


vacaciones y la prima vacacional, aun cuando para su cómputo deba considerarse el término
genérico de un año previsto en el artículo 516 de la Ley Federal del Trabajo, y ser inaplicables los
casos específicos de prescripción previstos en los artículos 517 a 519. Ahora bien, el cómputo del
plazo de un año para que prescriba la acción para demandar el pago del reparto de utilidades, inicia
a partir del día siguiente al en que se notifique fehacientemente al trabajador, o a su beneficiario, la
resolución de la comisión mixta o, en su caso, del inspector del trabajo, en la que se determine la
participación individual distribuible, pues sólo hasta que ello se determine en cantidad líquida,
podrá reclamarse, o bien, a partir de la declaración anual del impuesto sobre la renta presentada por
el patrón ante las autoridades tributarias, ya que el reparto de utilidades no es una prestación
derivada de los servicios prestados, sino que constituye la cantidad a que tienen derecho los
trabajadores por concepto de utilidades de la empresa, las cuales pueden determinarse a partir de
dos orígenes independientes: a) el primero es de carácter laboral, pues surge de la declaración anual
del impuesto sobre la renta presentada por el patrón ante las autoridades tributarias, específicamente
cuando la comisión mixta dentro de cada empresa, en términos del artículo 125 de la ley invocada,
determina la participación individual de cada trabajador en el reparto de utilidades después del
procedimiento correspondiente, sin que obste que los integrantes de la mencionada comisión no
lleguen a un acuerdo pues, en ese caso, será un inspector del trabajo quien fijará el monto a repartir;
y, b) el segundo deriva del ejercicio de la facultad de comprobación de las autoridades hacendarias
que prevé el artículo 42 del Código Fiscal de la Federación, y la renta gravable o utilidad fiscal que
resulte servirá para determinar el monto del impuesto relativo y la participación de los trabajadores
en las utilidades. En esta última hipótesis, como su origen deriva del ejercicio de la facultad de
comprobación que prevé el referido numeral, en tanto la renta gravable o utilidad fiscal que resulte
servirá para determinar el monto del impuesto relativo y la participación de los trabajadores en las
utilidades, es inaplicable el plazo de prescripción previsto en el artículo 516 invocado, toda vez que
la determinación del reparto de utilidades surge del ejercicio de las atribuciones de las autoridades
hacendarias encargadas de verificar el cumplimiento de obligaciones tributarias y no de la decisión
adoptada por la comisión mixta o por algún inspector del trabajo. De manera que, si en el juicio no
hay dato objetivo que demuestre que al trabajador, o a su beneficiario, en caso de fallecimiento de
aquél, le fue notificada la resolución que dicte la comisión mixta o, en su caso, el inspector del
trabajo, en la que se determine la participación individual del trabajador en las utilidades de la
empresa, no puede considerarse que prescribió la acción para reclamar el pago relativo, pues no se
trata de una prestación convencional que se establece entre el patrón y su trabajador, sino que su
generación depende de las utilidades habidas en el año fiscal y del cumplimiento de las obligaciones
fiscales del patrón. Bajo ese escenario, la autoridad responsable debe dejar a salvo los derechos del
trabajador o sus beneficiarios, según el caso, y no absolver del reclamo, en virtud de que la acción
puede ejercerse nuevamente en otra oportunidad, una vez reunidos los elementos necesarios, pues
de no estimarlo así, su ejercicio pudiese verse en riesgo, ante la eventual oposición de la excepción
perentoria de cosa juzgada.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL SÉPTIMO


CIRCUITO.

Amparo directo 1124/2015. Rosa Isela Pastor Méndez. 30 de junio de 2016. Unanimidad de votos.
Ponente: Jorge Toss Capistrán. Secretario: Renato de Jesús Martínez Lemus.
Esta tesis se publicó el viernes 11 de noviembre de 2016 a las 10:22 horas en el Semanario Judicial
de la Federación.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 2004782


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Décima Época
Materias(s): Laboral
Tesis: I.13o.T.64 L (10a.)
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Libro XXV, Octubre de 2013, Tomo 3,
página 1887
Tipo: Aislada

REPARTO DE UTILIDADES. LA OMISIÓN DEL PATRÓN EN DESIGNAR A SUS


REPRESENTANTES PARA INTEGRAR LA COMISIÓN MIXTA QUE DETERMINARÁ LA
PARTICIPACIÓN INDIVIDUAL DE CADA TRABAJADOR EN AQUÉL, DEBE
DEMANDARSE ANTE LA JUNTA DE CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE.
La cantidad a que tienen derecho los trabajadores por concepto de reparto de utilidades de la
empresa, puede determinarse a partir de dos orígenes independientes y regulados por disposiciones
distintas conforme al elemento generador de la obligación patronal; el primero deriva de los
artículos 117 a 131 de la Ley Federal del Trabajo; y 1o., 3o., 4o., 7o., 8o., 10, 11, 14 a 19, 22 a 26 y
30 del Reglamento de los Artículos 121 y 122 de la Ley Federal del Trabajo; y, el segundo, del
artículo 42 del Código Fiscal de la Federación. El primer origen es de carácter laboral, pues surge
de la declaración anual del impuesto sobre la renta presentada por el patrón a las autoridades
tributarias, específicamente cuando la comisión mixta dentro de cada empresa, en términos del
artículo 125 de la ley invocada, determina la participación individual de cada trabajador en el
reparto de utilidades después del procedimiento correspondiente, sin que obste que los integrantes
de la mencionada comisión no lleguen a un acuerdo pues, en ese caso, será un inspector del trabajo
quien fijará el monto a repartir. En cambio, el segundo deriva del ejercicio de la facultad de
comprobación que prevé el referido artículo 42, pues la renta gravable o utilidad fiscal que resulte
servirá para determinar el monto del impuesto relativo y la participación de los trabajadores en las
utilidades, el cual surge del ejercicio de las atribuciones de las autoridades hacendarias encargadas
de verificar el cumplimiento de las obligaciones tributarias. A partir de esas bases, la integración de
la comisión constituye un conflicto en el que sólo tienen intervención el patrón y sus trabajadores,
derivado del vínculo jurídico laboral que los une, por lo que, en términos del numeral 604 de la
citada ley, corresponde a la Junta de Conciliación y Arbitraje su conocimiento y resolución; de esta
manera, cuando el patrón no designa a sus representantes para integrar la comisión mixta en que se
determine la participación individual de cada trabajador en el reparto de utilidades, tal omisión debe
demandarse ante la Junta de Conciliación y Arbitraje.

DÉCIMO TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER


CIRCUITO.

Amparo directo 285/2013. 27 de junio de 2013. Mayoría de votos. Disidente y Ponente: José
Manuel Hernández Saldaña. Encargada del engrose: María del Rosario Mota Cienfuegos.
Secretario: Armando Guadarrama Bautista.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 2004781


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Décima Época
Materias(s): Laboral
Tesis: I.13o.T.63 L (10a.)
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Libro XXV, Octubre de 2013, Tomo 3,
página 1886
Tipo: Aislada

REPARTO DE UTILIDADES. AL SER UN DERECHO LABORAL, LA OMISIÓN DEL PATRÓN


DE ENTREGAR A LOS TRABAJADORES LA DECLARACIÓN ANUAL DE IMPUESTOS O,
EN SU CASO, DE SU DECLARACIÓN COMPLEMENTARIA Y SUS ANEXOS, PARA
DETERMINAR LA RENTA GRAVABLE, DEBE DEMANDARSE ANTE LA JUNTA DE
CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE.

De conformidad con el artículo 121 de la Ley Federal del Trabajo, los trabajadores tienen derecho a
formular objeciones a la declaración anual de impuestos que presente el patrón a la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público, para lo cual, como requisito previo, se requiere que el patrón, dentro
del término de diez días contados a partir de la fecha de la presentación de aquélla, les entregue
copia de la misma. También precisa que los anexos que de conformidad con las disposiciones
fiscales debe presentar a la citada secretaría quedarán a disposición de los trabajadores durante un
término de treinta días en las oficinas de la empresa y en la propia secretaría. Una vez que
acontezca lo anterior, el sindicato titular del contrato colectivo, o la mayoría de los trabajadores de
la empresa, podrá formular las observaciones que juzgue conveniente y, por último, dicha
dependencia dictará la resolución definitiva, la cual no podrá ser recurrida por los trabajadores. Por
otro lado, el artículo 15 del Reglamento de los Artículos 121 y 122 de la Ley Federal del Trabajo
establece que en tanto no se haya proporcionado copia de la declaración a los trabajadores en
términos del artículo 10 del mismo ordenamiento, o no quedaran a su disposición los anexos
correspondientes, de acuerdo con el artículo 11, no podrá iniciar el plazo de 30 días para formular
las objeciones a la referida declaración anual. De esta manera, antes de acudir ante la citada
secretaría, se requiere que el patrón otorgue a los trabajadores copia de dicha declaración anual y, en
su caso, de su declaración complementaria, así como de sus anexos, pues sin la entrega de tales
documentales no podrá iniciarse el procedimiento relativo. En congruencia con lo anterior, si la
obligación de los patrones de entregar las citadas documentales para que sus empleados conozcan si
existe un beneficio económico que pueda fincarse por concepto de utilidades constituye un derecho
laboral, en términos del numeral 604 de la invocada ley, corresponde a la Junta de Conciliación y
Arbitraje su conocimiento y resolución, por tratarse de un conflicto de trabajo que se suscita entre
trabajadores y patrones; por tanto, la omisión de entregar a los trabajadores la declaración anual de
impuestos, o su declaración complementaria y sus anexos, para determinar la renta gravable y, por
tanto, el reparto de utilidades, debe demandarse ante la Junta de Conciliación y Arbitraje.

DÉCIMO TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER


CIRCUITO.

Amparo directo 285/2013. 27 de junio de 2013. Mayoría de votos. Disidente y Ponente: José
Manuel Hernández Saldaña. Encargada del engrose: María del Rosario Mota Cienfuegos.
Secretario: Armando Guadarrama Bautista.
Nota: Esta tesis es objeto de la denuncia relativa a la contradicción de criterios 33/2024, pendiente
de resolverse por el Pleno Regional en Materias Penal y de Trabajo de la Región Centro-Sur, con
residencia en la Ciudad de México.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 2002897


Instancia: Primera Sala
Décima Época
Materias(s): Administrativa
Tesis: 1a. XXXIII/2013 (10a.)
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Libro XVII, Febrero de 2013, Tomo 1,
página 840
Tipo: Aislada

REPARTO DE UTILIDADES. EL PLAZO DE PRESCRIPCIÓN PREVISTO EN EL ARTÍCULO


516 DE LA LEY FEDERAL DEL TRABAJO ES INAPLICABLE PARA RECLAMAR DICHA
PRESTACIÓN, CUANDO LA OBLIGACIÓN DERIVA DEL EJERCICIO DE LAS
FACULTADES DE COMPROBACIÓN DE LA AUTORIDAD TRIBUTARIA.

La cantidad a que tienen derecho los trabajadores por concepto de reparto de utilidades de la
empresa, puede determinarse a partir de dos orígenes independientes y regulados por disposiciones
distintas conforme al elemento generador de la obligación patronal; el primero deriva de los
artículos 117 a 131 de la Ley Federal del Trabajo; y 1o., 3o., 4o., 7o., 8o., 10, 11, 14 a 19, 22 a 26 y
30 del Reglamento de los Artículos 121 y 122 de la Ley Federal del Trabajo y, el segundo, del
artículo 42 del Código Fiscal de la Federación. Así, el primer origen es de carácter laboral, pues
surge de la declaración anual del impuesto sobre la renta presentada por el patrón a las autoridades
tributarias, específicamente cuando la comisión mixta dentro de cada empresa, en términos del
artículo 125 de la ley invocada, determina la participación individual de cada trabajador en el
reparto de utilidades después del procedimiento correspondiente, sin que obste que los integrantes
de dicha comisión no llegaran a un acuerdo, pues en ese caso será un inspector del trabajo quien
fijará el monto a repartir; de ahí que cualquiera de las referidas hipótesis conlleva el nacimiento de
la obligación del patrón de pagar a los trabajadores, en lo individual, el monto específico por ese
concepto y, por ende, el plazo de prescripción previsto en el artículo 516 de la Ley Federal del
Trabajo inicia a partir del día siguiente al que se notifiquen al trabajador las resoluciones
pronunciadas por la comisión mixta o por el inspector del trabajo o del que tuvo conocimiento
fehaciente de éstas, pues es entonces cuando está en aptitud de reclamarlo. Ahora bien, el segundo
origen deriva del ejercicio de la facultad de comprobación que prevé el referido artículo 42, pues la
renta gravable o utilidad fiscal que resulte servirá para determinar el monto del impuesto relativo y
la participación de los trabajadores en las utilidades, sin que para ello se requiera determinar un
crédito fiscal por concepto del impuesto sobre la renta; supuesto en el que resulta inaplicable el
plazo de prescripción previsto en el invocado artículo 516, toda vez que la determinación del
reparto de utilidades surge del ejercicio de las atribuciones de las autoridades hacendarias
encargadas de verificar el cumplimiento de obligaciones tributarias y no de la decisión adoptada por
la comisión mixta o por algún inspector del trabajo.

Amparo directo en revisión 1721/2012. Grupo Nacional Provincial, S.A.B. 5 de septiembre de


2012. Mayoría de tres votos. Disidentes: José Ramón Cossío Díaz y Olga Sánchez Cordero de
García Villegas. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Gustavo Naranjo Espinosa.

Nota: Esta tesis fue objeto de la denuncia relativa a la contradicción de tesis 194/2015 del Pleno de
la Suprema Corte de Justicia de la Nación, desechada por notoriamente improcedente, mediante
acuerdo de 9 de julio de 2015.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 162779


Instancia: Segunda Sala
Novena Época
Materias(s): Administrativa, Laboral
Tesis: 2a./J. 4/2011
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XXXIII, Febrero de 2011, página
774
Tipo: Jurisprudencia

PARTICIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES EN LAS UTILIDADES DE LAS EMPRESAS. LA


RESOLUCIÓN QUE DETERMINA VARIACIÓN EN LA RENTA GRAVABLE Y POR TANTO
UNA VARIACIÓN EN EL REPARTO DE UTILIDADES PRODUCE CONSECUENCIAS
TANTO FISCALES COMO LABORALES.

La resolución en la que se determina el cálculo de la renta gravable del patrón-contribuyente, así


como el reparto de las utilidades trasciende tanto al ámbito fiscal como al derecho de los
trabajadores, pues es a través de las facultades de revisión fiscal que la autoridad tributaria verifica
el cumplimiento de las obligaciones fiscales del contribuyente, pudiendo, en su caso, variar la renta
gravable y, por tanto, el derecho de sus trabajadores al reparto de utilidades. De lo anterior se sigue
que si la utilidad fiscal se calculó mal se determinará un crédito fiscal al contribuyente patrón, y a la
par se ordenará el reparto adicional de ese beneficio constitucional. Esto es, la autoridad tributaria
actúa al mismo tiempo como autoridad laboral y fiscal cuando constata que el reparto sea correcto,
en virtud de que el ejercicio de las facultades de comprobación fiscal fue diseñado para
inspeccionar que los particulares cumplan con sus obligaciones fiscales, y en atención al marco
constitucional y legal que rige a la participación de los trabajadores en las utilidades de las
empresas, no sólo es congruente con él, sino que es idóneo el procedimiento de revisión fiscal para
realizar esa atribución con efectos fiscales y laborales.

Contradicción de tesis 318/2010. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero en
Materias Administrativa y de Trabajo del Décimo Primer Circuito y Tercero en Materia
Administrativa del Primer Circuito. 8 de diciembre de 2010. Mayoría de tres votos. Disidentes:
Sergio A. Valls Hernández y Margarita Beatriz Luna Ramos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre
Anguiano. Secretaria: Armida Buenrostro Martínez.

Tesis de jurisprudencia 4/2011. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión
privada del doce de enero de dos mil once.

Nota: Esta tesis fue objeto de la denuncia relativa a la contradicción de tesis 194/2015 del Pleno de
la Suprema Corte de Justicia de la Nación, desechada por notoriamente improcedente, mediante
acuerdo de 9 de julio de 2015.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 165497


Instancia: Segunda Sala
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: 2a. II/2010
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XXXI, Enero de 2010, página 326
Tipo: Aislada

PARTICIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES EN LAS UTILIDADES DE LAS EMPRESAS. LA


SECRETARÍA DE HACIENDA Y CRÉDITO PÚBLICO, EN SU CALIDAD DE ÓRGANO
REVISOR, PUEDE AVERIGUAR TODO TIPO DE IRREGULARIDADES EN SU CÁLCULO.
Del artículo 123, apartado A, fracción IX, inciso e), de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, se advierte que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público interviene en el
reparto a los trabajadores de las utilidades de la empresa porque conoce la renta gravable
considerada por el patrón para efectos del pago del impuesto sobre la renta anual, por lo que posee
los datos indispensables para verificar, en los ámbitos laboral y fiscal, si fue correctamente
determinada dicha renta e, incluso, puede comprobar oficiosamente que el porcentaje aplicado por
la empresa haya sido el fijado por la Comisión Nacional para la Participación de los Trabajadores en
las Utilidades de las Empresas y, en general, cualquier otro aspecto que haya afectado a la debida
participación. Lo anterior es así, porque si la Secretaría se limitara a responder las objeciones
formuladas por los trabajadores o a revisar el cálculo de la renta gravable declarada por el
empleador, en términos de los artículos 122 y 985 de la Ley Federal del Trabajo, no se tutelaría
adecuadamente ese derecho constitucional, antes bien, podría disminuirse indebidamente, ya que
basta que el patrón, por descuido o desconocimiento, aplique en el reparto de utilidades un
porcentaje menor al fijado por la Comisión Nacional o que en la utilidad fiscal se introduzcan
elementos ajenos, para afectar a los trabajadores, lo cual debe verificarse y corregirse. Luego, la
Secretaría de Hacienda y Crédito Público puede averiguar irregularidades en el cálculo de la renta
gravable, por inexactitudes en los ingresos gravables o en las deducciones efectuadas; en la
aplicación del porcentaje fijado por la Comisión Nacional o al introducirse en la mecánica un factor
que no puede tomarse en cuenta para determinar el monto final de la utilidad que será distribuida a
los trabajadores.

Amparo directo en revisión 2056/2009. ING (México), S.A. de C.V., Casa de Bolsa, ING Grupo
Financiero. 9 de diciembre de 2009. Cinco votos. Ponente: José Fernando Franco González Salas.
Secretario: Israel Flores Rodríguez.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 173188


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: II.T.302 L
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XXV, Febrero de 2007, página
1884
Tipo: Aislada
REPARTO DE UTILIDADES. LA CONFESIÓN EXPRESA DEL PATRÓN DE QUE AL
TRABAJADOR LE CORRESPONDE DETERMINADA CANTIDAD LÍQUIDA POR TAL
CONCEPTO, PRESUPONE QUE SE AGOTÓ EL PROCEDIMIENTO RESPECTIVO.

La confesión expresa del patrón de que al trabajador le corresponde cierta cantidad de dinero por
concepto de utilidades relativo a determinado ejercicio fiscal, presupone que se agotó el
procedimiento respectivo, y a través de él se llegó a esa suma. Sin que obste a lo anterior el criterio
establecido por la entonces Cuarta Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en la
jurisprudencia 4a./J. 52/94, derivada de la contradicción de tesis 49/93, publicada en la Gaceta del
Semanario Judicial de la Federación, Octava Época, Número 85, enero de 1995, página 50, de
rubro: "PARTICIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES EN LAS UTILIDADES DE LAS
EMPRESAS. CARGA DE LA PRUEBA.", en el sentido de que al patrón no puede atribuírsele la
carga de probar la determinación de la cantidad líquida y definitiva del monto que le corresponde al
trabajador por concepto de participación de utilidades, porque en el procedimiento para llegar a tal
determinación no todos los aspectos se rigen por disposiciones laborales, ni en todos los trámites
interviene el patrón con facultades autónomas y decisorias; y, por consiguiente, es al trabajador a
quien corresponde dicha carga, sin que baste para satisfacerla su mero dicho. En esta tesitura, si la
patronal manifiesta que al empleado "le corresponde" la cantidad líquida que reclama por concepto
de utilidades, no puede considerarse insatisfecha la carga del trabajador de demostrar su aserto, pues
esa confesión presupone o lleva implícito el agotamiento del procedimiento legal que culminó con
la determinación de esa cantidad por el referido concepto; procedimiento en el cual, si bien el
patrón no tiene facultades decisorias, sí interviene con sus representantes en la comisión que la
determina; y para el caso de que la hubiera realizado el inspector del trabajo (ante la imposibilidad
de los integrantes de la comisión de ponerse de acuerdo), se asume que tal cantidad le fue notificada
al empleador, y por ello acepta que le corresponde al empleado; en tal virtud, no existe obstáculo
para que a partir de la confesión del patrón, en los términos apuntados, se tenga por acreditado que
se agotó el procedimiento para llegar a determinar el monto que por el referido concepto le
corresponde al trabajador y, a la vez, tener por cierto el que indica éste en su demanda.

TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL SEGUNDO CIRCUITO.

Amparo directo 629/2005. Justino Moreno González. 8 de diciembre de 2005. Unanimidad de


votos. Ponente: Alejandro Sosa Ortiz. Secretaria: Gloria Burgos Ortega.

Amparo directo 831/2005. Ismael Díaz Hernández. 15 de febrero de 2006. Unanimidad de votos.
Ponente: Arturo García Torres. Secretaria: Yolanda Leyva Zetina.
Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 181866


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: IV.2o.T.79 L
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XIX, Marzo de 2004, página 1612
Tipo: Aislada

REPARTO DE UTILIDADES. CUANDO EL TRABAJADOR RECLAMA DETERMINADA


CANTIDAD Y SE TIENE POR CONTESTADA LA DEMANDA EN SENTIDO AFIRMATIVO,
ESTO ES SUFICIENTE PARA CONDENAR A SU PAGO.

Si el trabajador sostiene que una vez efectuado el procedimiento a que aluden los artículos 117 al
125 de la Ley Federal del Trabajo se determinó que le correspondía cierta cantidad líquida por
concepto de pago de reparto de utilidades, en términos de la lista fijada en los tableros de la
empresa demandada, corresponde a aquél demostrar con algún medio de prueba que efectivamente
se llevó a cabo el procedimiento establecido en los numerales 120 al 125 de la Ley Federal del
Trabajo, siendo suficiente para ello la sanción procesal impuesta a la demandada de tener por
contestada la demanda en sentido afirmativo, pues es inconcuso que la consecuencia de esa sanción
conlleva la presunción de ser ciertos los hechos atinentes tanto del nacimiento del derecho de la
actora como de la obligación de la patronal de pagar el importe reclamado, si no existe prueba que
desvirtúe que se llevó a cabo el procedimiento referido, ni lo argumentado por el trabajador en el
sentido de que dicha cantidad derivaba de la lista publicada en los tableros de la empresa.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL CUARTO


CIRCUITO.

Amparo directo 763/2003. María Esther Hernández Enríquez. 5 de noviembre de 2003. Mayoría de
votos. Disidente: Alfredo Gómez Molina. Ponente: Victorino Rojas Rivera. Secretario: Reynaldo
Piñón Rangel.

Nota: Esta tesis fue objeto de la denuncia relativa a la contradicción de tesis 149/2010, de la que
derivó la tesis jurisprudencial 2a./J. 140/2010 de rubro: "PARTICIPACIÓN DE LOS
TRABAJADORES EN LAS UTILIDADES DE LAS EMPRESAS. CUANDO EL TRABAJADOR
DEMANDA CANTIDADES LÍQUIDAS POR ESE CONCEPTO Y AFIRMA EN SU DEMANDA
QUE SE SIGUIÓ EL PROCEDIMIENTO LEGAL CORRESPONDIENTE, NO BASTA TENER
POR CONTESTADA LA DEMANDA EN SENTIDO AFIRMATIVO PARA QUE LA JUNTA DE
CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE ESTABLEZCA LA CONDENA RESPECTIVA."
Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 182147


Instancia: Primera Sala
Novena Época
Materias(s): Constitucional, Administrativa
Tesis: 1a. III/2004
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XIX, Febrero de 2004, página 89
Tipo: Aislada

PARTICIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES EN LAS UTILIDADES DE LAS EMPRESAS. EL


RÉGIMEN MEDIANTE EL CUAL SE GRAVA PREVISTO EN LA LEY DEL IMPUESTO
SOBRE LA RENTA, VIGENTE A PARTIR DEL 1o. DE ENERO DE 2002, NO VIOLA EL
PRINCIPIO DE PROPORCIONALIDAD TRIBUTARIA.

Si bien es cierto que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido que el principio de
proporcionalidad tributaria radica medularmente en que los sujetos pasivos deben contribuir al gasto
público en función de su respectiva capacidad contributiva, debiendo aportar una parte adecuada de
sus ingresos, utilidades, rendimientos, o la manifestación de riqueza gravada, por lo que para que un
gravamen sea proporcional debe existir congruencia entre éste y la capacidad contributiva de los
causantes -de manera que debe pagar más quien tenga mayor capacidad contributiva y menos el que
la tenga en menor proporción-, también lo es que la capacidad contributiva no se determina
únicamente por la cuantía de la renta, sino también por la fuente de la que ésta proviene o, incluso,
por las circunstancias especiales que rodean su obtención; de ahí que el legislador pueda
válidamente establecer diversas categorías de causantes, a los que conferirá un tratamiento distinto
en función de circunstancias objetivas que reflejen una diferente capacidad contributiva. En ese
tenor, el régimen previsto en la Ley del Impuesto sobre la Renta, vigente a partir del 1o. de enero de
2002, mediante el cual se grava la participación de utilidades de las empresas aplicable a los
trabajadores no contraviene el citado principio constitucional, al no permitir reconocer el impuesto
ya pagado por dichas utilidades a través de la empresa que las reparte. Lo anterior es así, pues se
trata de dos grupos de contribuyentes que por su naturaleza se ubican en distintas situaciones: por
un lado, las personas que participan en el capital social de las sociedades (accionistas), quienes
además de fomentar la inversión ponen en riesgo su capital al invertirlo y, por otro, las personas
sujetas a un trabajo personal subordinado (trabajadores), quienes no invierten capital alguno, sino
sólo aportan su fuerza de trabajo a cambio de una remuneración. Además, no puede estimarse que
existe doble tributación, porque la base del reparto de utilidades para los trabajadores es la renta
gravable, mientras que para los accionistas lo es la utilidad fiscal, por lo que no puede considerarse
que tengan su origen en la misma fuente, y porque el impuesto a que se refiere el artículo 10 de la
ley de referencia (que es el que en términos del numeral 165 puede el accionista acreditar), se aplica
a las personas morales; en tanto que el impuesto a que se refieren, en forma concreta, los artículos
110, 113, 115, 116 y 177 de la propia ley, señala como obligadas a su pago a las personas físicas que
prestan un trabajo personal subordinado, es decir, aluden a conceptos distintos y se exigen a
personas diferentes.

Amparo en revisión 770/2003. Elba Susana Abundis Espinoza y otros. 8 de octubre de 2003.
Unanimidad de cuatro votos. Ausente: Juan N. Silva Meza. Ponente: Olga Sánchez Cordero de
García Villegas. Secretario: Heriberto Pérez Reyes.

Suprema Corte de Justicia de la Nación

Registro digital: 186827


Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Novena Época
Materias(s): Laboral
Tesis: I.1o.T. J/41
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XV, Mayo de 2002, página 1150
Tipo: Jurisprudencia

UTILIDADES, PAGO DEL REPARTO DE.

Tratándose del pago del reparto de utilidades, las Juntas carecen de elementos para condenar al
patrón a cubrirlo, cuando no se ha fincado un derecho específico a determinada cantidad, después
de seguido el procedimiento que fija el capítulo VIII del título tercero de la Ley Federal del Trabajo
(artículos 117 a 131), y en especial lo dispuesto por el artículo 125 de ese ordenamiento.

PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER CIRCUITO.

Amparo directo 869/93. Francisco Tovar Hernández. 22 de abril de 1993. Unanimidad de votos.
Ponente: Roberto Gómez Argüello. Secretario: Ángel Salazar Torres.

Amparo directo 2771/93. Raúl Lara Sánchez. 1o. de julio de 1993. Unanimidad de votos. Ponente:
María Simona Ramos Ruvalcaba. Secretario: Jesús González Ruiz.
Amparo directo 1891/94. Lucía Muñoz Díaz. 17 de marzo de 1994. Unanimidad de votos. Ponente:
Roberto Gómez Argüello. Secretario: Jaime Allier Campuzano.

Amparo directo 11281/99. Genaro Cortez Palomera. 3 de junio de 1999. Unanimidad de votos.
Ponente: Horacio Cardoso Ugarte. Secretario: Francisco Javier Díaz Cuevas.

Amparo directo 2521/2002. Andrés Salvador Hernández Toledo. 14 de marzo de 2002. Unanimidad
de votos. Ponente: Jorge Rafael Olivera Toro y Alonso. Secretaria: María Hortensia Morales Alós.

Véase: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo VI, septiembre de
1997, página 635, tesis VI.2o. J/109, de rubro: "UTILIDADES, PAGO DE REPARTO DE.".

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