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HISTORIA DE LA EDUCACION.
Podemos esbozar ya una noción de educación concebida como un proceso de socialización sistemática. En este sentido,
encontramos en ella un proceso intencional que busca lograr algo del hombre al interior de una sociedad establecida,
pero la educación no se puede comprender aislada sino al interior de una realidad histórica y una cultura determinada.
Es decir, los hechos educativos se desarrollan en un tiempo y el espacio geográfico, haciendo que estos hechos se
entiendan y se organicen de acuerdo a las características propias de cada cultura. Esta realidad histórica y cultural nos
muestra mundos distintos a lo largo del tiempo y del espacio. Al cambiar las coordenadas espacio temporal, y siendo la
educación un fenómeno social, también cambia.
Las sociedades cambian y lo que demandan de sus integrantes cambia también. Por consiguiente, la educación cambia
para poder atender esas demandas. La educación no es la misma a lo largo del tiempo y del espacio geográfico.
La historia de la educación es una de las disciplinas de la educación que estudia y critica reflexivamente la gestación y
la evolución de las concepciones, doctrinas e instituciones educativas.
Existe la tendencia a denominarla como historia de la educación y pedagogía, partiendo de considerar a la educación
como el proceso internacional, perfectivo y sistemático sobre el educando con la finalidad de formarlo y desarrollarlo
armónicamente en todas sus dimensiones. Este proceso intencionado se relaciona estrechamente con las condiciones
históricas y culturales del tiempo que fomentan una determinada visión del hombre.
TEXTO 2
PEDAGOGÍA
Deriva de dos griegas: país, paidos, que significa niños; agoo, conducir. En su origen griego se refería a la acción de
conducir al niño del hogar a la escuela y viceversa. El conductor, pedagogo, era un esclavo viejo e inservible.
En la actualidad hay una gran cantidad de conceptos sobre pedagogía. Anotemos solo dos. Para Dilthey, es la teoría de
la educación y para Luzuriaga, la pedagogía es la ciencia de la educación. En todo caso, la naturaleza de la pedagogía es
teorética, mientras que la de la educación es práctica aplicativa; es proceso de formar la personalidad de los educandos.
En este sentido la pedagogía es la reflexión sistemática sobre la educación humana, estudia los fundamentos teóricos del
hacer educativo y el pedagogo vendría a ser el teórico de la educación. Sin embargo, salvo el caso de Rousseau, en la
historia de la educación, los grandes pedagogos han sido excelentes maestros y, al revés muchos distinguimos maestros
han devenido en pedagogos cuando empezaron a reflexionar, a estudiar los fundamentos teóricos de su hacer educativo
cotidiano.
CONCEPCIONES EQUIVOCADAS DE LA PEDAGOGÍA.
Tener la idea que la pedagogía, es el arte, es la técnica, es la metodología que se utiliza en educación, no es correcto. Un
gran estudioso y filosofo como Luis Piscoya, considera a la pedagogía como tecnología, es para reflexionar. No
podemos en la actualidad asumir a la pedagogía desde la palabra etimológica, sería un graso error. Luzuriaga hace
referencia sobre la pedagogía, en unos de sus escritos expresa “En realidad, la pedagogía es de todo, según el punto de
vista desde que se la contemplen ... tiene una parte artística, una parte teórica y una parte filosófica y estudia a la
educación desde el punto descriptivo como el normativo.
Efectivamente, no es correcto considerar a la pedagogía como arte, como disciplina normativa, ni como técnica.
La pedagogía normativa tendría, según esta versión, la finalidad de generar normas y reglas de
hechos.
LA NATURALEZA CIENTÍFICA DE LA PEDAGOGÍA
La pedagogía cumple con la totalidad de las características señaladas para alcanzar el nivel de disciplina científica.
Veamos:
a) Tiene su objeto de estudio: los hechos y fenómenos educativos.
b) Posee métodos de investigación para incrementar su contenido científico.
c) Constituye un saber teórico, sistemático.
Además, la elaboración de una teoría supone la concurrencia de tres elementos, que se dan en la pedagogía.
I. La existencia de hechos y fenómenos objetivos y observables.
II. La percepción de las relaciones entre esos hechos y fenómenos que nos permiten su reducción a categorías; y
III. La construcción de una teoría en la que se condensa el contenido de lo que se extiende como explicación.
Se trata de una disciplina científica en proceso de formación, una ciencia joven. Negar la posibilidad a la pedagogía de
alcanzar el status de disciplina científica seria condenarla aun simple hacer, a una suerte de artesanía o a iluminar sus
pasos con las luces científicas de otras disciplinas y no la propia, a continuar bajo el tutelaje.
TEXTO 3
HUMANIZACIÓN, NUESTRA POST-HOMINIZACIÓN.
El hombre primitivo después de la hominización, busca la humanización (ser humano), entendida, ésta, como el proceso
de evolución cultural que conlleva a la adquisición de rasgos característicos de nuestra especie. Este proceso es social
donde el hombre llega a “humanizarse”
La humanización es la emergencia de la inteligencia operativa, producto de su socialización. Es la adquisición de la
capacidad de pensar sobre nuestra inteligencia, de entender el proceso de la vida y de adaptarse al entorno través del
conocimiento, la tecnología y el pensamiento. La humanización está representada en la historia de nuestra humanidad a
través de las diferentes formaciones sociales que, de manera arborescente, han ido evolucionando en los diversos
ecosistemas terrestres y caracterizando el comportamiento de la especie hasta llegar hoy en día. La humanización tiene
una concreción en las diferentes formas como se estructuran las poblaciones y la manera en que las adquisiciones se
aplican a la adaptación y a la supervivencia.
El concepto de humanización es lo bastante amplio e inclusivo como para abrirnos la puerta a una reflexión crítica,
difícil de abordar, pero necesaria.
CONCLUSIÓN
En el proceso de singularidad humana y su sustrato evolutivo, hominización y humanización son las dos caras de una
misma moneda. Sin hominización no puede haber humanización; sin humanización no puede haber conciencia de
nosotros mismos desde la perspectiva de interrogación de quiénes somos y hacia dónde vamos. Hominización y
humanización están integradas, aunque la última cabalga sobre la primera por orden de aparición.
Para Reflexionar
La educación como proceso de perfeccionamiento del hombre, como proceso social, se pone en evidencia durante el
proceso de la humanización. En su inicio fue de manera informal motivados por la supervivencia. A través de la
historia evolutiva de la humanización, se evidencia que lo primero que tuvo que hacer el hombre, es procurarse de
alimentos, del vestido, de la habitación, etc.
A diferencia de los otros animales, el animal humano elabora instrumentos que le permiten transformar la naturaleza y
de este modo producir las cosas que requiere para sobrevivir. Así, por ejemplo, en los primeros momentos de la
humanidad, el hombre fabrica una tosca hacha de piedra con la que puede golpear y cazar un venado y de este modo
alimentarse.
Este proceso de intercambio hombre - naturaleza, en el que el hombre modifica su entorno natural, constituye una
novedad en el mundo animal. Cumple un papel fundamental en el desarrollo de la especie humana.
Mediante el trabajo, principalmente de los instrumentos utilizados en él, el hombre modifica la naturaleza, la naturaleza
deja de ser una cosa en sí, para convertirse en una naturaleza a la que el hombre añade algo. Cuando el hombre cultiva
los campos o desvía el curso de los ríos, la naturaleza se convierte en una naturaleza humanizada.
Aparece de este modo un nuevo orden de realidad, una realidad creada por el hombre mediante su actividad laboral.
Esta realidad creada por el hombre se llama cultura. Cultura es, por tanto, toda obra humana, desde el hacha de piedra
hasta la máquina más compleja, desde la caverna hasta el moderno rascacielos, desde la pintura rupestre hasta el arte
abstracto, etc.
La cultura no se limita a las obras materiales sino también a las obras no materiales, como por ejemplo los
conocimientos, las costumbres, las modas sociales, etc.
Todas esas creencias las elabora el hombre no en forma individual sino en forma colectiva. El hombre es un ser social,
se desenvuelve dentro de un grupo. Llamaremos sociedad a un conjunto de individuos que interactúan entre sí en tanto
comparten una cultura común. La sociedad es solo posible cuando los individuos pueden interactuar entre ellos.
Interactúan cuando comparten la misma cultura. Por ejemplo, cuando comparten la misma lengua, las mismas
costumbres, obedecen a las mismas reglas sociales, etc.
Una característica esencial de la realidad sociocultural es su carácter histórico al cambiar las sociedades en el tiempo y
en el espacio geográfico. Las sociedades cambian y se desarrollan, no son estáticas.
Si la educación es un proceso de enseñanza – aprendizaje para desarrollar las potencialidades de las personas, la misma
que se desarrolla durante toda la vida en cualquier espacio; asimismo que es, para el perfeccionamiento del hombre, que
vaya en beneficio de la sociedad y que es un proceso social; entonces es de reflexionar ¿si la educación tuvo sus
orígenes desde la etapa post hominización?
Referencia Bibliográfica.
Carbonell, E y Hortolà, P (2013). Hominización y humanización, dos conceptos clave para entender
nuestra especie. Revista Atlántica-Mediterránea 15, pp. 7-11. Recuperado de
https://rodin.uca.es/xmlui/bitstream/handle/10498/17009/007_011.pdf
TEXTO 4
La educación en los Pueblo primitivos
Para encuadrar la información que se proporciona, el autor, hace un referente temporal y geográfico , partiendo desde el
momento que aparece y se desarrolla la agricultura y el pastoreo, actividades que estimulan el desarrollo de nuevas
actividades productivas para satisfacer sus nuevas necesidades que lleva a una creciente división del trabajo.
Entre las características del hombre primitivo en el momento evolutivo de su humanización, era el más indefenso de los
seres vivos que existían, con una inteligencia y mentalidad uniforme que solamente los llevaba a satisfacer sus
necesidades vitales, limitada por el animismo al creer en espíritus que controlaba las funciones de su cuerpo y los
fenómenos naturales. Otra característica que hay que resaltar, es la formación de las tribus, donde grupos sociales
adoraban el mismo tótem (objeto o animal en la que creían tener estrecha relación de parentesco o solidaridad)
En el desarrollo del pensamiento educativo en los pueblos primitivos, marcada por el animismo y el totemismo
(organización social basada en el tótem), se dio inicio al paso de una educación espontánea a una educación intencional.
La preparación intelectual
La mentalidad primitiva hace suponer un escaso desarrollo de las facultades superiores en el hombre; sin embargo, el
aspecto intelectual no está tan atrasado como parecen indicar sus groseras costumbres. La inteligencia toma sus
elementos de lo que le ofrece los sentidos. Pues bien, la percepción sensorial del primitivo es de gran penetración y
delicadeza; su vista y su oído aprecian sensaciones que pasan inadvertidas a los hombres de nuestro tiempo. Su
educación es concreta, carece de ideas, se instruye por los hechos y consecuencias naturales de ellos. Está tan sujeto a
las necesidades biológicas, que están pendientes de ellas todas sus facultades; de ahí que no se ocupen de las
aspiraciones de alma y no tengan elevación.
Algunas facultades están muy desarrolladas a pesar de todo. El propietario de animales, en los pueblos que se dedican a
la cría del ganado, con pasar la vista sobre ellos, es capaz de darse cuenta de los que faltan e identificarlos con sus
nombres, aunque se trate de militares. No es capaz de decir su número, pero tiene la intuición de cada individuo aislado.
La memoria, que ejerce un gran papel en el comercio y en otras relaciones de la vida, suple de alguna manera la falta de
lectura y escritura. También se conservan en la memoria los cantos de la guerra y religiosos.