Está en la página 1de 12

Santiago, trece de octubre de dos mil veinte.

Vistos:
En autos número de RIT xxxxxx, caratulados “Rioseco con Ramos”,
seguidos ante el Juzgado de Familia de Viña del Mar, por sentencia de seis de
abril de dos mil diecinueve, se acogió la demanda y se confió al padre el cuidado
personal del niño de iniciales F. S. R. R., nacido el 4 de mayo de 2016,
ordenándose que la sentencia deberá anotarse al margen de la inscripción de
nacimiento del niño. Además, se dispuso un régimen comunicacional respecto de
la madre, sin costas.
Dicha sentencia fue confirmada por mayoría, el veinte de junio de dos mil
diecinueve, por una sala de la Corte de Apelaciones de Valparaíso.
En contra de dicha decisión la parte demandada dedujo recurso de
casación en el fondo solicitando que se lo acoja y se dicte la sentencia de
reemplazo que rechace la demanda de autos.
Se trajeron los autos en relación.
Considerando:
PRIMERO: Que la recurrente declara infringidos los artículos 32 de la Ley
N°19.968; los artículos 242 inciso 2do y 225-2 letras d y h del Código Civil, y los
artículos 2 d) y 5 a) de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas
de Discriminación en contra de la Mujer (CEDAW) relacionados estos últimos con
el artículo 5 inciso 2 de la Constitución Política de la República.
En el primer capítulo de nulidad, la recurrente sostiene que se vulnera el
artículo 32 de la ley de tribunales de familia, en cuanto a que la valoración de la
prueba debe hacerse de acuerdo a las reglas de la sana crítica, sin embargo, a
este respecto sostiene que se contradicen 1°) los principios científicamente
afianzados en el sentido que la opinión de la Consejera Técnica, fue el
fundamento utilizado por la sentenciadora de primera instancia y por el voto de
mayoría de segunda instancia, para entregarle el cuidado personal al padre, y al
efecto ella señala que la prueba pericial de la siquiatra Dresdner arrojaba
conclusiones concordantes y complementarias con las emanadas por el psicólogo
Avsolomovich, lo cual no es del todo efectivo ya que la doctora Dresdner no da
cuenta de este tipo de rasgos en el padre ni en la madre en la cual observa
defensas narcisistas; en cambio el psicólogo Avsolomovich sí los detecta, pero
solo en el padre, lo cual también es informado por la psicóloga Paula Mena, la cual
había sido contratada por el padre, lo contradictorio se encuentra en la conclusión

FQJWRQTVGX
referente a este punto en cuanto sostiene que la madre del niño presenta un
diagnóstico de trastorno de ansiedad generalizado crónico, asociado a ciertos
rasgos de personalidad narcisistas. Con relación a este punto la recurrente
sostiene que contradice estos principios el hecho que el perito Avsolomovich solo
tuviera una sesión de 15 minutos con la madre y 20 minutos con el padre para
evaluar los vínculos con el hijo, lo cual resulta del todo insuficiente.
2°) Que en lo atingente a las reglas de la lógica también entiende que se
vulneran por el hecho que al estar basada en la opinión de la Consejera Técnica y
ésta en la de la perito Dredsner, sin embargo la perito le pide a otra colega que
haga la evaluación, la psicóloga León, la cual no fue evaluada en la audiencia
preparatoria en cuanto a su seriedad y profesionalismo.
3°) Que en lo concerniente a las máximas de experiencia, establece que la
sentenciadora de primera y el voto de mayoría de segunda instancia, deciden
validar las conclusiones de las pericias ofrecidas por el padre, pese a las
contradicciones y a los problemas metodológicos observados y al sesgo que se
analizará, prescindiendo de la manera cómo el psiquiatra tratante de la madre
alude a ella, luego de conocerla por más de 10 años.
En el segundo capítulo de nulidad la recurrente sostiene que hay infracción
del artículo 242 inciso 2 en relación con el artículo 225-2 letras d y h, todos del
Código Civil, los parámetros en cuestión aluden a la actitud de cada uno de los
padres para cooperar con el otro, a fin de asegurar la máxima estabilidad al hijo y
garantizar la vinculación directa y regular y en consonancia con la letra h) los
acuerdos de los padres antes y durante el respectivo juicio. Pues bien, la
recurrente indica que cuando el niño tenía un año y medio, el 22 de septiembre de
2017, en un proceso de mediación accedieron a ejercer de manera compartida el
cuidado personal de su hijo. Cuatro meses después, el padre presenta un
requerimiento de una medida proteccional en Viña del Mar, siendo que el Juzgado
competente era el de Santiago, reclamando el padre una entrega inmediata por
abandono emocional y un conjunto de otros daños efectuados por la madre en el
niño, el juicio termina por acuerdo, debiendo el padre dar disculpas públicas por
las acusaciones vertidas en su requerimiento. A los 6 meses de este episodio, en
plena terapia para ser padres separados, el progenitor presenta ante tribunal
incompetente la demanda de cuidado personal invocando los mismos hechos del
requerimiento. Además señala, que consta en el expediente la denuncia
presentada por el Señor Rioseco en contra de la recurrente por omisión de

FQJWRQTVGX
declaración y no pago de impuesto al IVA, al poseer ésta un departamento que
arrienda vía “Air B&B” sin cumplir con esas cargas y la presentación de la abogada
del señor Rioseco ante la Ministra Visitadora del tercer Juzgado de Garantía de
Santiago en el que la recurrente es administradora, denunciando las
irregularidades financieras, contractuales y el estado de deuda en el sistema
financiero de la demandada. Por lo cual, la parte demandada sostiene que no
existe indicio de colaboración alguna en el padre, su empeño en denostar a la
madre y en perjudicarla, lo cual no es bueno en ningún caso para el niño.
En su tercer capítulo de nulidad, denuncia la infracción a los artículos 2 letra
d) y 5 letra a) de la Convención sobre Eliminación de Todas las formas de
discriminación contra la mujer (CEDAW). Sostiene que en el trato de los peritos y
de la Consejera Técnica, asimismo de la Corte al confirmar el considerando
séptimo se infringe la normativa que no permite el trato discriminatorio contra la
mujer, se refleja lo anterior en lo siguiente, a) se cuestiona a la madre por el lugar
en que duerme la asesora del hogar del niño en la casa de ella, lo mismo ocurría
en la casa del padre y esto no se cuestiona; b) se discute la veracidad de las
acusaciones de violencia psicológica que esgrime la recurrente en contra del
demandante, en cambio no se duda de la veracidad de las palabras del
demandante al aludir a los buenos deseos que tiene para con su representada, ni
sus motivaciones para presentar la demanda y por último lo que la recurrente
considera más grave es que mientras respecto de la madre se objeta la relación
de ésta con su hijo Patricio de 19 años, aludiendo al vínculo de amistad que
existiría entre ellos, ninguno de los peritos cuestiona la ausencia de vínculo del
señor Rioseco con su hijo mayor Javier de 17 años.
Termina señalando como estos errores han influido sustancialmente en lo
dispositivo del fallo.
SEGUNDO: Que son hechos acreditados los siguientes:
1) Las partes son padres del niño de iniciales F. S. R. R., nacido el 4 de mayo
de 2016.
2) El demandante es padre de otro hijo llamado Javier, nacido el 18 de abril de
2001.
3) La demandada principal es madre de otro hijo llamado Patricio, nacido el 20
de abril de 1999, cuyo cambio de apellidos se encuentra en trámite.
4) Las partes con fecha 22 de septiembre de 2017 regularon un cuidado
personal compartido y alimentos respecto del hijo de autos, por la suma de

FQJWRQTVGX
mensual de $ 500.000, más el 50% de los gastos de salud extraordinarios y
el 15% de los incrementos remuneracionales que tuvieran ambas partes
(causa RIT M-4499-2017 del Segundo Juzgado de Familia de Santiago).
5) Existencia de una causa por medida de protección tramitada respecto del
niño de autos, RIT P-161-2018 de este Tribunal de Familia, en que con
fecha 30 de abril de 2018 se adoptó una cautelar consistente en una
derivación de las partes a una terapia sicológica, asociada a causa de
cumplimiento RIT X-284-2018 de este mismo Tribunal.
6) La parte demandante ejerce el cargo de Juez Titular del Tribunal Oral Penal
de San Antonio, y actualmente está en comisión de servicios como Relator
en la Corte Suprema. La madre es Administradora del Tercer Juzgado de
Garantía de Santiago.
7) El demandante estando en una pasantía profesional en España entre el 8
de mayo de 2018 y el 20 de junio de 2018, viajó a Chile a visitar a su hijo
entre los días 1 de junio de 2018 y 4 de junio de 2018 ambas incluidas, días
entre los cuales se coordinó las visitas con los abuelos paternos en relación
al niño.
8) El demandante cofinanció los costos de la tramitación del reclamo
interpuesto por la demandada ante la Superintendencia de Salud, para
adecuar el precio de su plan en razón de los 2 años de edad que cumplía el
menor de autos.
9) La demandada es propietaria de los inmuebles ubicados en calle Mapocho
N°1450, departamentos N°1009 y N°1010, Santiago Centro.
10)El demandante se encuentra divorciado de una relación matrimonial previa,
sentencia de 16 de octubre de 2007, causa en que se regularon alimentos
en favor de su hijo Javier, en la suma de $600.000 mensuales.
11)La demandada tiene un vehículo marca Peugeot, año 2018, modelo TP
Allure y el demandante un vehículo marca Audi, modelo Q2, año 2017.
12)Ambos padres son hábiles para ejercer la parentalidad, ninguno padece de
patologías siquiátricas o trastornos de personalidad que interfieran de
manera grave o invalidante en su ejercicio parental.
13)Ambos padres poseen condiciones habitacionales suficientes, apropiadas y
seguras para vivir y cuidar a su hijo.

FQJWRQTVGX
14) Oída la curadora ad litem, concluye que en su opinión el cuidado personal
lo debe ejercer la madre con un régimen de relación directa y regular con el
padre.
TERCERO: Que la judicatura del fondo de acuerdo a los hechos
establecidos y a la prueba rendida sostiene que resulta necesario en esta etapa de
su desarrollo integral, definir un cuidado personal que permita su ingreso al
sistema educativo de manera formal y estable, lo que será posible sólo en la
medida que resida, al menos durante los lapsos escolares, de manera estable
junto a uno de sus progenitores, lo que no sería una necesidad, de vivir éstos en la
misma ciudad, a continuación sostiene que en relación a aspectos de desarrollo
vincular entre el niño y su padre y madre, surgen diferencias que permitirán tomar
una decisión en materia de cuidado personal. En opinión de la Consejera Técnica,
si bien ambos presentan rasgos de personalidad que pueden favorecer a uno y
perjudicar a otro, la madre presenta un diagnóstico de trastorno de ansiedad
generalizado crónico, asociado a ciertos rasgos de personalidad narcisistas,
infantiles y obsesivos, de superficialidad e impulsividad, lo que redundan en un
vínculo con su hijo de tipo más lúdico, pero por ende más superficial; en tanto el
padre que también presenta rasgos narcisistas y obsesivos en su personalidad es
capaz de ejercer un apego más seguro para su hijo. Las mejores aptitudes
parentales del demandante expuestas sumado al hecho que el niño cuenta en la
ciudad de Viña del Mar con una red familiar extensa compuesta especialmente por
sus abuelos, que permitieron a la judicatura del fondo “inclinar la balanza hacia la
pretensión del actor, quien por el momento surge como la mejor alternativa para
cuidar a su hijo, por lo cual se hace lugar a la demanda de cuidado personal del
padre y se fija un régimen directo y regular con la madre en la forma descrita en la
sentencia, sin costas.”
CUARTO: Que, en primer lugar, cabe señalar que los jueces del grado, en
uso de las facultades que son de su exclusiva competencia –la ponderación de la
prueba y el establecimiento de los hechos- asentaron los elementos sobre la base
de los cuales arribaron a la decisión consignada en el motivo anterior.
De conformidad a lo que prevé el artículo 32 de la ley N°19.968, los jueces
de familia apreciarán la prueba de acuerdo a las reglas de la sana crítica.
Siguiendo a la doctrina, y como reiteradamente lo ha resuelto este Tribunal, este
sistema conduce al descubrimiento de la verdad por los medios que aconsejan la
razón y el criterio racional puesto en juicio. Las reglas que la constituyen no están

FQJWRQTVGX
establecidas en la ley, por ende, se trata de un proceso intelectual, interno y
subjetivo del que analiza. Es una materia esencialmente de apreciación y, por lo
mismo, de hecho, cuya estimación corresponde exclusiva y privativamente a los
jueces del fondo. La regla general es que la actividad de valoración o ponderación
de las probanzas y, con ello la fijación de los hechos en el proceso queda agotada
en las instancias del juicio, a menos que los sentenciadores del grado –al
determinar aquéllos- hayan desatendido las razones lógicas, científicas, técnicas o
de experiencia, en cuya virtud ha correspondido asignarles valor y fijar su eficacia.
QUINTO: Que las alegaciones en que sustenta la recurrente la vulneración
de las normas reguladoras de la prueba, no son constitutivas de verdaderos
atentados contra la sana crítica, sino que más bien corresponden a reproches al
proceso de valoración que han realizado los jueces del fondo en el análisis de la
prueba y sobre la base del cual arriban a la decisión que no comparte dicha parte.
En efecto, la recurrente alega la forma en que los jueces valoraron los diversos
informes periciales, y como le dieron mayor valor a unos que a otros para llegar a
la conclusión de ser el padre quien mejor garantiza el bienestar del niño, pero en
definitiva no establece la forma en que se habrían desatendido las razones
lógicas, científicas o de experiencia, por lo cual en este capítulo el recurso no
podrá prosperar.
SEXTO: Que el artículo 225 del Código Civil prescribe: “Si los padres viven
separados podrán determinar de común acuerdo que el cuidado personal de los
hijos corresponda al padre, a la madre o a ambos en forma compartida”. En el
caso de autos a través de un proceso de mediación, los padres, con fecha 22 de
septiembre de 2017 regularon un cuidado personal compartido respecto del hijo de
autos.
Sin embargo, de acuerdo al inciso tercero del mismo artículo “En
cualesquier de los casos establecidos en este artículo, cuando las circunstancias
lo requieran y el interés superior del hijo lo haga conveniente, el juez podrá atribuir
el cuidado personal del hijo al otro de los padres, o radicarlo en uno solo de ellos,
si por acuerdo existiere alguna forma de ejercicio compartido”. Que, conforme a
este inciso queda claro que se elimina toda alusión a causales de inhabilidad de
los progenitores, y el interés superior del niño, esto es, su bienestar, se erige como
único criterio de atribución judicial. El artículo 225-2 del Código Civil, por su parte,
establece un listado no taxativo de “criterios y circunstancias” que deben

FQJWRQTVGX
considerarse en su conjunto al momento de decidirse en qué padre quedará
radicado el cuidado personal del hijo.
En el segundo capítulo de nulidad la recurrente sostiene que se ha
infringido el artículo 242 inciso 2 en relación con el artículo 225-2 letras d y h,
todos del Código Civil, el primero de ellos, señala: “En todo caso, para adoptar sus
resoluciones el juez atenderá, como consideración primordial al interés superior
del hijo, y tendrá debidamente en cuenta sus opiniones, en función de su edad y
madurez” y el artículo 225-2 dispone que “En el establecimiento del régimen y
ejercicio del cuidado personal, se considerarán y ponderarán conjuntamente los
siguientes criterios y circunstancias: …d) La actitud de cada uno de los padres
para cooperar con el otro, a fin de asegurar la máxima estabilidad al hijo y
garantizar la relación directa y regular, para lo cual considerará especialmente lo
dispuesto en el inciso quinto del artículo 229. …h) Los acuerdos de los padres
antes y durante el respectivo juicio”.
Si bien en el mes de septiembre de 2017 las partes acordaron como
resultado de un proceso de mediación tener el cuidado compartido de su hijo, ya el
5 de febrero de 2018, el padre presentó una medida sobre vulneración de
derechos, acusando a la madre de abandono emocional y de padecer la madre
incapacidad psiquiátrica y emocional. Con fecha 30 de abril de 2018 se termina
esa causa decidiendo el juez no adoptar la medida de protección solicitada y
mantener el cuidado compartido y que las partes se incorporen a una terapia e
intervención sicológica particular en el Instituto Chile de Psicoterapia Integrativa.
Sin embargo, 3 meses después con fecha 1 de agosto el padre inicia la presente
causa de cuidado personal y alimentos, fundada en los mismos hechos que la
medida proteccional.
SÉPTIMO: Que a pesar de todos los hechos que el padre imputa a la
madre, la sentencia concluye que ninguno de los padres tiene alguna inhabilidad
que les impida ejercer su parentalidad, ni tampoco padecen de patologías
siquiátricas o trastornos de personalidad que interfieran de manera grave o
invalidante en su ejercicio parental. Asimismo, en lo que respecta a los aspectos
materiales y socio-habitacionales, cabe señalar asimismo que ambos padres
poseen condiciones habitacionales suficientes, apropiadas y seguras para vivir y
cuidar a su hijo. Pues bien, para determinar entonces si al aplicar los parámetros
del artículo 225-2 del Código Civil, específicamente en sus letras d) y h) que la
parte recurrente estima infringidas, se tuvo en cuenta el interés superior del niño

FQJWRQTVGX
debemos en primer término establecer que de acuerdo a la Observancia General
N°14 de las Naciones Unidas “se considera que las responsabilidades parentales
compartidas suelen ir en beneficio del interés superior del niño. Sin embargo, en
las decisiones relativas a la responsabilidad parental, el único criterio debe ser el
interés superior del niño en particular. Es contrario al interés superior que la ley
conceda automáticamente la responsabilidad parental a uno de los progenitores o
a ambos. Al evaluar el interés superior del niño, el juez debe tener en cuenta el
derecho del niño a conservar la relación con ambos progenitores, junto con los
demás elementos pertinentes para el caso.”
Al evaluar y determinar el interés superior de un niño o de los niños en
general, debe tenerse en cuenta la obligación del Estado de asegurar al niño la
protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar. Los términos
"protección" y "cuidado" también deben interpretarse en un sentido amplio, ya que
su objetivo no se expresa con una fórmula limitada o negativa, sino en relación
con el ideal amplio de garantizar el "bienestar" y el desarrollo del niño. El bienestar
del niño, en un sentido amplio, abarca sus necesidades materiales, físicas,
educativas y emocionales básicas, así como su necesidad de afecto y seguridad.
(Observancia General N°14)
El cuidado emocional es una necesidad básica de los niños, para lo cual es
indispensable al determinar quien será titular del cuidado personal del niño tener
en consideración la letra d) del artículo 225-2 del Código Civil, el que dispone “En
el establecimiento del régimen y ejercicio del cuidado personal, se considerarán y
ponderarán conjuntamente los siguientes criterios y circunstancias: d) La actitud
de cada uno de los padres para cooperar con el otro, a fin de asegurar la máxima
estabilidad al hijo y garantizar la relación directa y regular..”; pues bien en el caso
de autos es el padre el que constantemente ha denostado a la madre, no solo a
través de los escritos presentados durante el presente juicio, sino también al
momento de presentar la medida proteccional, donde no logró acreditar ninguno
de los hechos que le imputa a la madre, tanto así que la judicatura determinó en
ese entonces continuar con el cuidado compartido; el padre asimismo, denunció a
la madre al Servicio de Impuesto Internos por omisión de Declaración y el no Pago
del Impuesto al Valor Agregado y asimismo la abogada del padre envió una carta
denunciando a la madre ante la Ministra Visitadora del Tercer Juzgado de
Garantía de Santiago, lugar de trabajo de la madre, por supuestas irregularidades
financieras, contractuales y estado de deuda en el sistema financiero de la

FQJWRQTVGX
demandada. Todos estos antecedentes no fueron discutidos por el padre y se
tuvieron a la vista al momento de efectuar los peritajes psicológicos de las partes.
Con relación a lo anterior, es claro que la imagen que tiene el padre de la madre
no es buena, y que no ha hecho esfuerzos por el bien de su hijo de no
perjudicarla, todo esto en cierta forma se transmitirá al hijo, lo cual no es adecuado
para su desarrollo y bienestar emocional, como lo pide las Naciones Unidas para
construir el interés superior de cada niño en particular.
OCTAVO: Que Fernán es un niño de 4 años, que tiene cubierta sus
necesidades materiales y socio-habitacionales con cualquiera de sus padres, y
que a su vez de acuerdo a los peritajes emitidos y lo concluido por la sentencia
que se impugna ambos padres son hábiles para ejercer su cuidado personal, por
lo cual es necesario asegurar el desarrollo y bienestar emocional del niño, ya que
la relación con ambos padres es de suma importancia para la estabilidad y para la
identidad del menor, los niños requieren de una figura materna y paterna en la
medida de lo posible, como señala la Convención de los Derechos del Niño, la
judicatura del fondo no se refirió a estos parámetros, ya que solo tuvo en
consideración que era necesario fijar el cuidado personal en uno de ellos debido a
la necesidad de empezar la colegiatura en una sola ciudad y los padres viven en
ciudades diferentes. Pues bien de acuerdo al artículo 242 y 225 letra d) es
necesario para determinar el interés superior del niño tener en consideración la
actitud de cada uno de los padres para cooperar con el otro, pero también
comprende ponderar cual es la imagen que cada uno de ellos le trasmitirá a su
hijo del otro progenitor, ya que ello contribuirá a un mejor desarrollo emocional del
niño, de acuerdo a lo anterior, todo esto no se valorizó al momento de ponderar el
interés superior del niño, por lo cual existe un error por parte de la judicatura del
fondo, al no tener en consideración los parámetros del artículo 225 letra d) del
Código Civil, al momento de decidir cuál de los padres ejercerá el cuidado
personal. A mayor abundamiento, la sentencia no se refiere a la opinión de quien
representa el interés del hijo, que en caso de ser una niño de corta edad y por lo
tanto no ser oído en juicio, toma una importancia aún mayor, la curadora ad litem
además de reconocer que ambos tienen una buena relación con el hijo, estima
que es el padre quien se ha negado a una solución colaborativa que planteó la
Consejera Técnica antes de la audiencia de juicio y opina que es la madre quien
debe ejercer el cuidado personal del niño con una relación directa y regular para el
padre.

FQJWRQTVGX
Por lo reflexionado, se debe concluir que los jueces han cometido los
errores de derecho denunciados al aplicar los parámetros del artículo 225-2 del
Código Civil, lo que influyó sustantivamente en lo dispositivo del fallo, razón por la
cual el presente recurso de casación será acogido.
Por estas consideraciones y de conformidad, además, con lo dispuesto en
los artículos 767 y siguientes del Código de Procedimiento Civil, se acoge el
recurso de casación en el fondo deducido en contra de la sentencia de veinte de
junio de dos mil diecinueve, dictada por una sala de la Corte de Apelaciones de
Valparaíso, la que se anula y se reemplaza por la que se dicta a continuación, sin
nueva vista y separadamente.
Acordada con el voto en contra de los Ministros señores Silva y Zepeda,
quienes fueron del parecer de rechazar el recurso de casación en atención a las
siguientes consideraciones:
1° Que, tal como se consignó en los motivos cuarto y quinto del fallo que
antecede, el recurso impugna la ponderación probatoria efectuada por la
judicatura del fondo atribuyéndoles el quebrantamiento del artículo 32 de la Ley
Nº19.968. A este respecto, cabe reiterar que, como esta Corte ha sostenido
reiteradamente, los hechos establecidos por los sentenciadores del fondo resultan
inamovibles en sede de casación, a menos que se denuncie y acredite la
infracción a las leyes del régimen probatorio que, en el ámbito del derecho de
familia, implica la vulneración de las reglas y principios en que se sustenta la sana
crítica, lo que no ocurre, desde que, si bien se alude a la conculcación de diversas
reglas que componen el sistema valorativo en análisis, lo cierto es que los
argumentos que plantea cuestionan el valor que se otorgó a diversos
antecedentes y a las conclusiones a que se arribó. Sin embargo, este sistema
entrega, precisamente, al juez del fondo la tarea de precisar el valor que asignará
a cada probanza, que no se encuentra previamente regulado por la legislación, por
lo que, en definitiva, se trata de una labor que, en la medida que se efectúe con
apego a las reglas de la lógica, máximas de la experiencia y conocimientos
científicamente afianzado, cuyo quebrantamiento no se advierte en el caso,
escapa al control de casación, razón por la que los hechos establecidos como
producto del tal proceso, no son susceptibles de control por medio de este
mecanismo extraordinario y de derecho estricto.
2° Que, en consecuencia, desestimada la infracción a las normas
reguladoras de la prueba, y atendido que el recurso contraviene los hechos

FQJWRQTVGX
asentados por los sentenciadores, debe concluirse la correcta aplicación de las
restantes normas cuya conculcación se acusa, razón por la que el arbitrio debió
ser desestimado.
Redactada por la abogada integrante Leonor Etcheberry C. y el voto en
contra, de sus autores.
Regístrese.
Rol 21.299-19
Pronunciado por la Cuarta Sala de la Corte Suprema integrada por los Ministros
señor Ricardo Blanco H., señora Andrea Muñoz S., señor Mauricio Silva C.,
ministro suplente señor Jorge Zepeda A., y la abogada integrante señora Leonor
Etcheberry C. No firma el Ministro Suplente señor Zepeda, no obstante haber
concurrido a la vista y al acuerdo de la causa, por haber terminado su periodo de
suplencia. Santiago, trece de octubre de dos mil veinte.

RICARDO LUIS HERNAN BLANCO ANDREA MARIA MERCEDES MUÑOZ


HERRERA SANCHEZ
MINISTRO MINISTRA
Fecha: 13/10/2020 16:09:50 Fecha: 13/10/2020 16:09:51

MAURICIO ALONSO SILVA CANCINO ROSA MARIA LEONOR ETCHEBERRY


MINISTRO COURT
Fecha: 13/10/2020 16:09:51 ABOGADO INTEGRANTE
Fecha: 13/10/2020 16:09:52

FQJWRQTVGX
En Santiago, a trece de octubre de dos mil veinte, se incluyó en el Estado
Diario la resolución precedente.

Este documento tiene firma electrónica y su original puede ser


validado en http://verificadoc.pjud.cl o en la tramitación de la causa.
En aquellos documentos en que se visualiza la hora, esta
corresponde al horario establecido para Chile Continental. FQJWRQTVGX

También podría gustarte