Está en la página 1de 24

Budismo Theravada

Theravada, vocablo en lengua Pali que significa "Doctrina de los ancianos" (thera: ancianos y vada: doctrina o
palabra), cuyo fundamento aparece en el Canon Pali, que es considerado el registro más antiguo y fiel de las
enseñanzas del Buda Sakyamuni (Siddhattha Gotama). De la tradición Theravada emanan la Meditación Samatha y
la Meditación Vipassana.

1. Meditación

En las enseñanzas del Buda al hablar de meditación se habla de bhavana, que significa "cultivo" o "desarrollo". Se
identifica con precisión como el cultivar y desarrollar las propias capacidades psicomentales para superar la
insatisfactoriedad de las circunstancias internas y externas. Insatisfactoriedad que a su vez, es consecuencia de una
expectativa basada en una percepción incorrecta de la realidad. Este cultivo o desarrollo tiene esencialmente por
objeto corregir esa percepción incorrecta, y su práctica comprende dos grandes ramas denominadas
respectivamente Samatha y Vipassana.

1.1. Meditación Samatha

Samatha significa "serenidad", "calma", "sosiego", "tranquilidad". La meditación Samatha, o meditación de


serenidad, persigue la realización de estados de conciencia que se caracterizan por un grado cada vez más elevado
de serenidad y sosiego de la mente.

Comprende dos factores: la consecución de un máximo grado de concentración mental y el apaciguamiento de los
procesos psicomentales. Esto se realiza mediante una concentración progresiva de la atención en la que la mente,
replegándose sobre sí misma, va excluyendo todos los estímulos sensoriales y los procesos mentales de la
consciencia.

En la meditación Samatha se distinguen ocho grados progresivos de abstracción o absorción mental, llamados
Jhanas, que en pali significa literalmente "meditaciones" o "contemplaciones".

1.2. Meditación Vipassana

Vipassana está compuesta del prefijo vi, "varias", y passana, "ver"; significa literalmente, "ver del todo", "ver a la
perfección", o ver las cosas integralmente, cabalmente, tal y como son. Vipassana nos lleva a la percepción de las
tres características de todos los fenómenos: impermanencia (anicca), insatisfactoriedad (dukkha), e insustancialidad
(anatta). Vipassana a diferencia de la meditación de tranquilidad (samatha) conduce a la penetración de estas tres
características de todos los fenómenos, a la verdadera característica del mundo condicionado y al Nibbana
(Nirvana).

La mente del ser humano está empañada, hay muchas impurezas, trabas, engaños, e impedimentos en la mente, que
la visión que surge de la misma es inevitablemente condicionada y, por lo tanto, distorsiona aquello que ve y
percibe. Lo visto no es apreciado como tal y mucho menos en su modo final de ser. Lo visto es falseado por una
percepción turbia, la interpretación y la imaginación. Los condicionamientos de la mente perturban la percepción,
oscurecen la visión y traban la comprensión real. Una visión oscurecida encadena en lugar de liberar y
retroalimenta en la mente las llamadas tres raíces de lo perverso: avidez (lobha), odio (dosa) y ofuscación (moha),
impidiendo que se desplieguen las tres raíces de lo provechoso: no-avidez o desprendimiento (alobha), no-odio o
amor y compasión (adosa), y sabiduría o claridad (amoha).

El oscurecimiento mental aviva los autoengaños, las tensiones, los venenos y los obstáculos mentales. Una mente
en estas condiciones no es provechosa ni para la vida cotidiana ni para la búsqueda de lo incondicionado, se anega
en sus propias contradicciones sin conciliar, y una mente así ve lo permanente donde sólo hay transitoriedad, lo
sustancial en lo insustancial y lo placentero en lo insatisfactorio. Es una mente incapacitada para ver, captar y
comprender cómo surgen y se desvanecen los fenómenos existenciales. Se extravía en las dualidades y se instala en

1
los impedimentos mentales como: la ilusión de un ego permanente, la duda escéptica, el apego a los ritos, la
malevolencia, la concupiscencia y otros.

Porque la mente no dispone de una visión clara, no es capaz de captar las tres características de la existencia, esas
características básicas de todos los fenómenos según las enseñanzas del Buda: la insatisfacción o sufrimiento en su
más amplio sentido (dolor, pena, aflicción, tribulación, etcétera), la impermanencia o transitoriedad, y la
insustancialidad o ausencia de una entidad permanente o estable. En el universo de lo condicionado todos los
fenómenos, según apreció el Buda, son insatisfactorios, impermanentes y sin entidad. La sabiduría liberadora,
capaz de poner término al sufrimiento, sólo puede emerger desde la pureza de la mente, que permite apreciar las
cosas tal y como son, sin enmascararse con juicios y prejuicios, condicionamientos, e interpretaciones u opiniones.

En el Sayutta Nikaya, el Buda dice:

"No hay fenómeno, ni sensación, ni percepción, ni actividad mental ni especie ninguna de conciencia, que sean
permanentes, estables, eternos e inmutables. En esto concuerdan todos los sabios del mundo y esto es lo que yo
también enseño."

En el Aguttara Nikaya el Buda dice:

"Tanto si hay en el mundo Perfectos como si no los hay, los hechos son incontrovertibles y la ley de causa y efecto
es siempre la misma: todo lo constituido es impermanente, todo lo constituido entraña sufrimiento, todo es sin
entidad. Es decir, que todos los fenómenos materiales, todas las sensaciones, todas las percepciones, todas las
actividades mentales, todo lo que constituye la conciencia, todo es impermanente, todo entraña sufrimiento, nada
tiene entidad."

La práctica de meditación de la visión cabal Vipassana produce un cambio radical en nuestra vida privada y en
nuestra manera de vernos a nosotros mismos y a los demás. Se convierte en la herramienta idónea para despertar
nuestra mente y liberarla de contaminaciones.

La meditación Vipassana disuelve y al final elimina la tensión, la frustración y el sufrimiento que contaminan y
oscurecen nuestras vidas. Su práctica despeja la mente de contaminantes y va paso a paso aumentando las
condiciones para una completa salud mental, restituyendo así en nosotros el amor por todos los seres vivientes. De
manera directa y simple, la técnica se orienta a observar la actividad mental en forma natural, sin reacción, sin
juicio y sin apego a nada, con Atención Plena y Comprensión Clara de lo que está sucediendo en el presente.
Vipassana nos muestra el arte de vivir momento a momento.

Durante el proceso no se elimina ninguna actitud mental que surja en la conciencia; los fenómenos físicos y
mentales se observan tal cual son en su propia naturaleza, a diferencia de como reaccionaríamos en nuestra vida
diaria. Realizada con esfuerzo pero de manera suave y gentil, la práctica nos lleva paso a paso a aclarar el
funcionamiento de los procesos de nuestra mente, surgiendo en ella de manera espontánea el conocimiento.

Vipassana nos enseña a ver cómo somos y cómo podríamos llegar a ser. Es la luz que ayuda a iluminar la sima
profunda y oscura de nuestra ignorancia; la barca segura para cruzar de la orilla de la ilusión a la de la realidad;
puente hacia la última verdad que es la única que nos proporciona el verdadero consuelo.

Cualquiera puede practicar este método de saneamiento mental, sin importar cual sea su credo.

1.3. Diferencias entre Meditación Samatha y Meditación Vipassana

La meditación es el método de purificación de la mente tal como fue enseñado por el Buda. En el Budismo existen
dos tipos de meditación: meditación Samatha (calma) y meditación Vipassana (introspección). Estos dos tipos de
meditación difieren entre si tanto en el método de la práctica como en el tipo de resultados obtenidos.

2
Esto es, la meditación samatha busca la paz mundana (lokiya) siguiendo las jhanas, a fin de obtener poderes
supernaturales mundanos (lokiya abhiñña). Tiene al mundo de Brahma como su último y más alto destino. En
cambio, la meditación Vipassana persigue una paz supramundana (lokuttara), que es la paz que está libre de este
mundo. Tiene al Nirvana como su más alto destino/objetivo.

La meditación Samatha toma un concepto (paññatti) como objeto de meditación; esto es, toma como objeto de
meditación a las cosas que el mundo supone y etiqueta como "es esto o aquello", tal como las 10 kasinas por
ejemplo. En contraste, la meditación Vipassana toma la última realidad (paramattha) como su objeto de meditación;
esto es, se concentra en rupa y nama (cuerpo y mente) o los 5 agregados, que son verdaderos y reales.

Al practicar la meditación Samatha, uno necesita considerar el temperamento predominante de uno mismo. Por
ejemplo, aquellos con un temperamento predominante lujurioso (raga-carita) deben desarrollar la meditación en la
totalidad de su cuerpo (asubha). Aquellos con un temperamento predominante de odio (dosa-carita) deben
desarrollar la meditación de amor-amistad (metta). Aquellos con un temperamento predominante frustrado (moha-
carita) deben desarrollar la atención en la respiración. Aquellos con un temperamento predominante fiel (saddha-
carita) deben reunir las virtudes del Buda. En cambio, la meditación Vipassana, es conveniente para todo tipo de
individuos, independientemente de su temperamento.

La meditación Samatha sólo puede purificar la mente de manera temporal, en cambio la meditación Vipassana
puede purificarla permanentemente. La meditación Samatha no es capaz de guiar a sus practicantes a la realización
de los caminos, las fruiciones y el Nirvana, pero sí puede guiarlos a la obtención de poderes supernaturales
mundanos (lokiya abhiñña), como el iddhividhi (la habilidad de desarrollar poderes psíquicos, volar, caminar sobre
las aguas, volverse invisible, acortar distancias y sumergirse en la tierra), el oído divino, el ojo divino, la habilidad
para leer las mentes de otros (cetopariyañana), y la habilidad para poder recordar vidas pasadas
(pubbenivasanussati-ñana). Aunque la meditación Vipassana no orienta a la obtención de estos poderes
supernaturales mundanos, si puede guiar a sus practicantes a la realización de sus caminos, fruiciones y Nirvana.

En cualquiera de los casos, a fin de lograr la realización de los caminos, fruiciones y Nirvana, que es la más alta
meta en el Budismo, los meditadores pueden practicar solamente la meditación Vipassana sin realizar ninguna
meditación Samatha, o bien, pueden practicar primero la meditación Samatha, siguiendo los jhanas, y
posteriormente utilizarla como base para practicar continuamente la meditación Vipassana hasta lograr la
realización de los caminos, fruiciones y Nirvana. Sin embargo, es poco probable que un meditador que sólo
practica Samatha pueda llegar a la realización de los caminos, fruiciones y Nirvana.

1. Kayanupassana Satipatthana: El Fundamento de la Atención Completa en el Cuerpo

¿Qué es la Atención Completa en el Cuerpo?

La Atención Completa en el Cuerpo es el proceso de contemplar atentamente las diversas condiciones que surgen
en todo el cuerpo o Rupa Khandha , el agregado físico.

La Atención Completa en el Cuerpo incluye dirigir la atención hacia observar y notar mentalmente (o hacer
consciente) los movimientos del pie durante la meditación caminando, y hacer las anotaciones correspondientes
como: "Derecha, Izquierda".

La persona contempla el movimiento de cada paso en el momento en que estos ocurren, sincronizando el
movimiento (Cuerpo) con el reconocimiento (la Mente).

La Atención Completa en el Cuerpo, también incluye notar atentamente durante la Meditación Sentado (a) los
movimientos naturales del abdomen mientras se respira normalmente. La persona deberá reconoce atentamente y
notar cada movimiento en el abdomen mientras éstos suceden como: "Afuera, Adentro, Afuera, Adentro"

La Atención Completa en el Cuerpo consiste en la Atención Completa aplicada a los movimientos, posiciones
mayores y menores del cuerpo, Iriyapatha, los cuales incluyen todas las actividades y funciones del cuerpo. La
3
persona deberá así contemplar atentamente y hacer las anotaciones mentales correspondientes a las posiciones
mayores, que son: Parado, caminando, sentado y recostado.

Y las posiciones menores, que son: Agachado, estirando, volteando, levantando, bajando, etc. y todas las demás
posiciones, movimientos y actividades del cuerpo.

Durante la práctica de la meditación, uno debe realizar la meditación comenzando por la postración en Atención
Completa y moviéndose lentamente reconocer los movimientos de las manos y el cuerpo.

Durante la meditación caminando uno debe contemplar los movimientos del pie

Y durante la meditación sentado (a) uno debe observar y notar mentalmente el movimiento del abdomen en la
respiración como; Afuera y Adentro.

Ejercicio de Meditación Número Uno

Postración en Atención Completa

Al comenzar:

Comience arrodillándose (de ser posible) colocando ambas manos sobre sus muslos, la mano derecha en el muslo
derecho y la mano izquierda en el muslo izquierdo, con los dedos juntos y los hombros derechos, pero relajados.
(Tradicionalmente en Tailandia, los hombres se sientan sobre sus talones con los dedos de los pies flexionados
hacia el suelo y las mujeres se sientan sobre sus caderas y con las puntas de los pies hacia atrás. De cualquier
manera, si no es posible sentarse de la manera descrita, cualquier forma estará bien. Una silla o cojín puede
utilizarse si es necesario.)

1. Ponga Atención Completa (Atención) en observar su postura sentado y note mentalmente: "Sentado(a),
sentado(a), sentado(a)", en cada ocasión mantenga un conocimiento claro de la posición sentado.

2. Después, dirija su atención completa a su mano derecha, lentamente gire su mano en una ángulo de 90° mientras
nota mentalmente: "Volteando, volteando, volteando", manteniendo conciencia de los movimientos de la mano
derecha.

3. Después, lentamente levante su mano derecha con el pulgar a la altura de su pecho, notando: "Subiendo,
subiendo, subiendo".

4. Después, con el pulgar de su mano derecha toque el centro de su pecho, notando: "Tocando, tocando, tocando".

5. Después lleve su atención a la mano izquierda y gírela en un ángulo de 90°, notando mentalmente: "Volteando,
volteando, volteando".

6. Levante su mano izquierda hacia su pecho, notando: "Subiendo, subiendo, subiendo".

7. Junte sus manos y toque con ambas manos al mismo tiempo el centro de su pecho (anjali), notando: "Tocando,
tocando, tocando".

8. Levante ambas manos y diríjalas hacia su frente, notando: "Subiendo, subiendo, subiendo".

9. Con ambas manos toque el entrecejo con los nudillos de los pulgares, notando: "Tocando, tocando, tocando".

10. Baje ambas manos a la altura de su pecho, notando: "Bajando, bajando, bajando".

11. Toque con ambas manos el centro de su pecho, notando: "Tocando, tocando, tocando".

12. Inclínese en un ángulo de 45° (solo la parte superior del cuerpo), notando: "Inclinando, inclinando, inclinando".

4
13. Bajando la mano derecha hacia el piso, note: "Bajando, bajando, bajando".

14. Tocando suelo con la orilla de la mano derecha (el dedo meñique), note: "Tocando, tocando, tocando".

15. Volteando la mano de manera que la palma cubra el suelo, notando: "Cubriendo, cubriendo, cubriendo".

(Su brazo debe estar estirado, algo de su peso puede ser soportado por su mano derecha.)

16. Después baje su mano izquierda y note: "Bajando, bajando, bajando".

17. Tocando el piso con la orilla de la mano izquierda (el dedo meñique), note: "Tocando, tocando, tocando".

18. Volteando la mano izquierda de manera que la palma cubra el piso, note: "Cubriendo, cubriendo, cubriendo".

(Ambos brazos deben estar flexionados, con los codos tocando el piso y ambos pulgares deben estar juntos, con los
dedos apuntando hacia el frente, de manera que exista un espacio aproximado de 5 cm entre sus dedos índices.)

19. Inclínese hacia el frente hasta que sus codos toquen el piso y su frente quede a dos centímetros de sus pulgares,
notando: "Inclinando, inclinando, inclinando".

20. Tocando con su entrecejo los nudillos de sus pulgares, note: "Tocando, tocando, tocando".

21. Después, lentamente levante la parte superior de su cuerpo, hasta que sus brazos estén estirados de nuevo,
notando: "Subiendo, subiendo, subiendo".

22. Volteando su mano derecha de nuevo en un ángulo de 90°, note: "Volteando, volteando, volteando.

23. Levante su mano derecha y llévela hacia su pecho, notando: "Subiendo, subiendo, subiendo".

24. Tocando con el nudillo del dedo pulgar el centro de su pecho, note: "Tocando, tocando, tocando".

25. Después, gire su mano izquierda en un ángulo de 90°, notando: "Volteando, volteando, volteando".

26. Levante su mano izquierda hasta la altura de su pecho enderezando la parte superior de su cuerpo al mismo
tiempo y notando: "Subiendo, subiendo, subiendo".

27. Lleve sus manos juntas al centro de su pecho (anjali), notando: "Tocando, tocando, tocando".

28. Eleve sus manos juntas hasta la altura de su frente, notando: "Subiendo, subiendo, subiendo".

29. Toque su frente con las manos juntas, notando: "Tocando, tocando, tocando".

30. Baje sus manos hasta la altura de su pecho, notando: "Bajando, bajando, bajando".

31. Con las manos juntas, toque el centro de su pecho, notando: "Tocando, tocando, tocando".

32. Repita de los pasos 12 al 31, dos veces más.

33. Baje su mano derecha hacia la parte superior de su muslo derecho, notando: "Bajando, bajando, bajando".

34. Toque con la orilla de la mano derecha (dedo meñique), la parte superior del muslo derecho, notando:
"Tocando, tocando, tocando".

35. Voltee su mano derecha de manera que la palma cubra su muslo derecho, notando: "Cubriendo, cubriendo,
cubriendo".

36. Baje su mano izquierda hacia la parte superior del muslo izquierdo, notando: "Bajando, bajando, bajando".

5
37. Tocando con la orilla de la mano izquierda la parte superior del muslo izquierdo, note: "Tocando, tocando,
tocando".

38. Gire su mano izquierda de manera que su palma cubra su muslo izquierdo, notando: "Cubriendo, cubriendo,
cubriendo".

39. Ahora usted ha regresado a la posición original, en la que comenzó el ejercicio. Note: "Sentado (a), sentado(a),
sentado(a)".

NOTA: Este ejercicio llamado; Meditación en Postración debe ser realizado lentamente y con moderación. Llevar a
cabo esta meditación debe tomarle de 5 a 8 minutos, dependiendo de cada persona. Los movimientos deben ser lo
suficientemente lentos, para permitir la Atención Completa y la Comprensión, sin exagerar en la lentitud, para
evitar que la mente comience a divagar. De ninguna manera los movimientos deben ser acelerados, con la atención
precipitándose a los objetos futuros. (Recuerde que la Atención Completa debe estar presente en todo momento.)

De Pie

Continúe el ejercicio de meditación levantándose lentamente y notando cuidadosamente cada movimiento al estar
cambiando su postura de la posición de rodillas (Postrado) hasta incorporarse completamente.

(Nota: Sea extremadamente cuidadoso, si es que sus piernas o pies están "dormidos" o entumidos. Es mejor esperar
hasta recuperar la sensación en estas partes antes de ponerse de pie, simplemente hágalo consciente: "Esperando,
esperando, esperando" o "Entumido, entumido, entumido", así notando atentamente las sensaciones.)

Cuando esté listo, póngase de pie lenta y cuidadosamente, aislando y reconociendo cada movimiento o acción tanto
como le sea posible. Trate de no crear algún tipo de movimiento artificial. Al momento de ponerse de pie, note
cuidadosamente cada movimiento: Por ejemplo, "inclinando, inclinando, inclinando", "tocando, tocando, tocando",
o "subiendo, subiendo, subiendo", "parando, parando, parando", de acuerdo con su manera natural de ponerse de
pie.

Una vez que se haya puesto de pie, asegúrese de que sus hombros, cuello y cabeza estén erguidos, pero relajados.

Baje su mirada, aproximadamente en un ángulo de 45° frente usted.

Lentamente ponga ambos pies casi juntos, de manera que los pulgares de sus pies apunten hacia el frente, mientras
nota mentalmente: "Parado, parado, parado", después tome sus manos y colóquelas ya sea al frente o atrás de usted,
notando, "Moviendo, moviendo, moviendo", después "tocando, tocando, tocando". La mano derecha debe sostener
a la izquierda de forma relajada.

Ejercicio de Meditación Número Dos

Meditación Caminando

Contemple su posición actual de pie, notando: "Parado, parado, parado".

Después lleve su Atención Completa a su pie derecho y dé un paso hacia delante, aproximadamente entre 20 a 30
cm de distancia. Mientras realice el movimiento del pie, comience cuidadosamente a notar y a hacer consciente el
movimiento con las diferentes sílabas: "De-re-cha".

El pie debe levantarse, moverse hacia el frente y pisar, al apoyar el pie deberá ser en un solo movimiento. Al
momento de hacer contacto con el suelo, su atención debe estar en el término del movimiento y su reconocimiento
debe ser la sílaba "Cha" de la palabra derecha. En otras palabras, mientras usted sigue el movimiento del pie, debe
notar las sílabas como sigue: "De" - ( en la palabra "Derecha") cuando usted dé el paso, usted debe notar "re"- (en
la palabra "Derecha"), cuando usted da la pisada, usted debe notar "cha"- (en la palabra "Derecha"), en el momento
presente con el movimiento natural.
6
Después de completar el paso del pie derecho, no se mueva todavía. Detenga la posición con ambos pies sobre el
suelo por un segundo mientras trae su atención al pie izquierdo y comienza el movimiento: "Iz-quier-da".

Cuidadosamente note cada paso: "De-re-cha", "Iz-quier-da", "De-re-cha", "Iz-quier-da", "De-re-cha", "Iz-quier-da",
uno a la vez.

Al final del tramo que asignó para hacer el ejercicio deténgase. Junte sus pies, mientras nota: "Parando, parando,
parando".

Después note la posición de pie: "Parado, parado, parado".

Gire su pie derecho en un ángulo de 90° paralelo al piso mientras nota en un solo reconocimiento: "Girando".
Después gire el pie izquierdo igualmente en un ángulo de 90° paralelo al piso mientras nota girando y luego gire de
nuevo el pie derecho y el pie izquierdo en otros 90° paralelos al piso y notando: "girando".

Ahora ha dado usted una vuelta de 180° y está listo para continuar caminando en la otra dirección.

Contemple su postura "Parado(a) " de nuevo, notando mentalmente: "Parado, parado, parado".

Continúe la Meditación Caminando, mientras nota: "Derecha, Izquierda, Derecha, Izquierda, Derecha, Izquierda",
etc., en el momento presente, para cada paso.

Continúe este método de la Meditación de Atención Completa caminando por un período de tiempo
predeterminado o por aproximadamente 10 a 15 minutos si es usted un principiante.

Ejercicio de Meditación Número Tres

Meditación Sentado

Al final de la Meditación Caminando, lenta y atentamente adopte la posición sentado, notando cuidadosamente
cada movimiento, igual que como lo hizo con el proceso de ponerse de pie.

Es recomendable sentarse en posición de loto, medio loto o posición Birmana (de ser posible) con la pierna derecha
siempre arriba o enfrente de la pierna izquierda y con la mano derecha colocada sobre la mano izquierda,
descansando a la altura del vientre.

Las puntas de ambos pulgares deben apenas tocarse.

La posición del cuerpo debe ser erguida, con la cabeza, el cuello y los hombros derechos, pero relajados.

Cierre sus ojos y respire normalmente a través de su nariz.

Mientras respira normalmente y de una manera relajada, ponga atención en el área del abdomen.

Observe que cuando usted inhala, el abdomen se expande o se mueve hacia afuera. Cuando usted exhala, el
abdomen se contrae o se mueve hacia adentro.

Observe los movimientos del "Afuera" y el "Adentro" del abdomen.

Note con Atención Completa: "Afuera" cuando usted inhala y el "Adentro" cuando usted exhala, al tiempo que
suceden estos movimientos naturales del abdomen.

Continúe notando , "Afuera, Adentro, Afuera, Adentro, Afuera, Adentro", etc., a lo largo del período sentado.
(Aproximadamente 10 a 15 minutos, para principiantes).

7
Nota: Usualmente la Postración, la Meditación Caminando y la Meditación Sentado deben ser realizadas en un
mismo lugar, el área de meditación no necesita ser muy amplia. Un cuarto pequeño o mediano, con el espacio
necesario para caminar de ida y vuelta, y que sea lo suficientemente silencioso, es adecuado. Se recomienda
caminar descalzo. Si no es posible sentarse en el piso, un cojín(es) o una silla pueden utilizarse. La posición de
sentado debe ser relajada, pero estable. (No debes recargar tu espalda sobre ninguna superficie.)

Reclinado y Durmiendo

Cuando se disponga a dormir durante la noche o a descansar durante el día, recueste su cuerpo poniendo atención,
mientras nota: "Recostando, recostando, recostando" o "Acostado, acostado, acostado".

Mientras esté acostado descansando, note mentalmente: "Afuera, adentro", hasta que se quede dormido.

Una vez que usted se despierte, trate de observar y notar el "Afuera y el Adentro" tan pronto como se dé cuenta de
estos movimientos.

Posiciones Menores del Cuerpo

Todos los demás movimientos y posiciones del cuerpo deben ser contemplados atentamente, desde el momento en
que se despierta hasta el momento en que se va a dormir. Esto significa notar atentamente cada acción que tiene
lugar durante el día. Por ejemplo: La persona debe notar: "Levantando, Bajando, Inclinando, Estirando, Rascando,
Alcanzando, Volteando, Poniendo", etc., tanto como sea posible. Y recuerde que cada acción deberá ser notada en
el momento presente.

La contemplación atenta de estas Posiciones Mayores y Menores, así como todos los movimientos del cuerpo
durante los ejercicios de meditación y en las actividades diarias están incluidas como parte de la Base de la
Atención Completa en el Cuerpo.

2: Vedanupassana Satipatthana: El Fundamento de la Atención Completa en las Sensaciones

¿Qué es la Atención Completa en las Sensaciones?

El Fundamento de la Atención Completa en las Sensaciones incluye el conocimiento y la contemplación de las


diferentes condiciones que surgen a través del cuerpo y de la mente. Esto abarca los tres tipos de sensaciones;
felicidad, Sukha Vedana, infelicidad o sufrimiento, Dukkha y neutral, Upekkha Vedana.

Así uno debería notar con clara comprensión, "Dolor, dolor, dolor", etc., cuando surgen sentimientos de dolor o
sufrimiento, Dukkha Vedana.

Con clara comprensión y conocimiento uno debería realizar la anotación mental; "Placentero, placentero,
placentero" o "Feliz, feliz, feliz", cuando surgen los sentimientos de felicidad o placer, Sukha Vedana.

O cuando ocurren sensaciones que no son ni placenteras ni dolorosas, uno las reconoce y conscientemente hace la
anotación mental como; "Neutral, neutral, neutral" o "Indiferente, indiferente, indiferente". A estos sentimientos
neutrales se les llaman Upekkha Vedana.

3: Cittanupassana Satipatthana: El Fundamento de la Atención Completa en la Mente

¿Qué es la Atención Completa en la Mente?El Fundamento de la Atención Completa en la mente es la


contemplación de las diversas condiciones que surgen a través de la puerta de la Mente o de la conciencia mental.
Es decir, la contemplación de los estados de la mente, pensamientos o estados de conciencia, conforme estos
aparecen.¿Es una mente llena de deseo? ¿La mente tiene enojo? ¿Es una mente con ilusión? ¿Enfocada?
¿Desenfocada? ¿Calmada? o ¿Distraída?.

8
Es así que uno debe darse cuenta de estos estados mentales y notarlos con Atención Completa tan pronto, como
aparezcan como:

"Deseo, deseo, deseo", "Enojo, enojo, enojo", "Ilusión, ilusión, ilusión", "concentrado, concentrado, concentrado",
"desenfocado, desenfocado, desenfocado",

"Calmado, calmado, calmado", "Distraído, distraído, distraído" o "Pensando, pensando, pensando", etc.

4: Dhammanupassana Satipatthana: El Fundamento de la Atención Completa en los Objetos Mentales

¿Qué es la Atención Completa en los Objetos Mentales?Dentro de los Objetos de la Mente, tenemos varios grupos
uno de ellos llamado los 5 Impedimentos, o Nivarana 5, el cual abarca: Anhelos o deseos sensuales (kama chanda),
aversión, enojo o mala voluntad (byapada), pereza- somnolencia (thina-midha), preocupación o ansiedad
(uddhacca-kukkucca) y duda o escepticismo (vici-kiccha).Todos estos Objetos Mentales deben ser notados
precisamente y de acuerdo con su surgimiento en el momento presente. También sí durante la practica usted
experimenta el ver imágenes o visiones mentales (nimita) , llámense; destellos de luz, colores, árboles, imágenes,
montañas, etc., asegúrese de hacer la anotación mental correspondiente y en forma correcta, como por ejemplo:
"Viendo, viendo, viendo", tan pronto como le sea posible.No se emocione o se preocupe cuando estas visiones
surjan, simplemente dese cuenta de ellas, de acuerdo a lo que son y mentalmente note cualquiera de los Cinco
Impedimentos que puedan surgir. Después regrese al Afuera - Adentro del abdomen.Usted deberá hacer las
anotaciones mentales correspondientes de la misma manera que cualquier contacto a través de los sentidos, como
sigue:* Si usted ve un objeto visual, nótelo como: "Viendo, viendo, viendo".

* Si escucha un sonido, nótelo como: "Oyendo, oyendo, oyendo".

* Sí huele un aroma, agradable o desagradable, nótelo como: "Oliendo, oliendo, oliendo".

* Si saborea algo, dulce, salado, picante, amargo, etc., nótelo como: "Saboreando, saboreando, saboreando".

* Si toca algo, caliente, frío, suave, duro, mojado, comezón, etc., nótelo como: "Sintiendo, sintiendo, sintiendo".

* Si piensa algo, nótelo como: "Pensando, pensando, pensando".También los Objetos Mentales y las seis bases de
los Sentidos (los físicos y la mente), deben de ser notados tan pronto como estos surgen en el momento
presente.Recapitulando podríamos decir que la práctica de los Cuatro Fundamentos de la Atención Completa no es
más que aplicar Atención Completa al contemplar en Momento Presente cualquier condición que pueda surgir, a
través del cuerpo y de la mente.

¿Qué es lo que hacemos?, ¿Qué es lo que sentimos?, ¿Qué es lo que pensamos?, ¿Cómo reaccionamos? De ésta
forma es que nosotros contemplamos solamente lo que sucede en momento presente y no ponemos atención en el
pasado, ni en el futuro, ni siquiera un segundo después de que alguna condición ha surgido.

Condiciones de Soporte

Así como cuando uno desea hacer crecer un árbol o una planta, uno debiera de fertilizar y cultivar la tierra, nosotros
también podemos fertilizar y cultivar nuestra práctica por medio de aplicar Atención Completa sostenida, a las
posiciones del cuerpo tanto a las posiciones menores como a las mayores, Iriyapatha.Nosotros debemos estar con
Atención Completa en todo momento y aplicándola a todas las posiciones del cuerpo. Ya sea caminando, sentados,
parados ó acostados nosotros debemos hacer conscientes todas nuestras posturas y actividades, sin romper o dejar
espacios entre momentos de reconocimiento. El Buda enseñó que hay cinco beneficios que resultan de la
meditación caminando.1. La meditación caminando provee la fuerza que capacita a la persona para caminar largas
distancias.

2. La meditación caminando desarrolla la paciencia, la tolerancia y la perseverancia.

3. La meditación caminando ayuda a la digestión y a la asimilación de la comida.


9
4. La meditación caminando elimina enfermedades mentales y enfermedades del cuerpo.

5. La meditación caminando incrementa el poder de la concentración.

El reconocimiento del Adentro - Afuera así como el de Derecha - Izquierda, es la forma en que el poder de la
concentración momentánea, Khanika Samadhi se incrementa. Esta forma de hacer anotaciones mentales desarrolla
el poder de la Atención Completa de forma que uno pueda realizar los varios estados de introspección. Esto faculta
la mente para que perciba claramente el cuerpo y la mente así como las tres características.

Nosotros no debemos de menospreciar el reconocimiento de las seis bases de los sentidos. Cada condición que
surge a través de las puertas de los sentidos, Ayatana 6, el ojo, el oído, el olfato, el gusto, el cuerpo y la mente
deben de ser notadas, como: Viendo, oyendo, oliendo, saboreando, tocando, o pensando. Uno debe de estar alerta y
atento a las seis puertas de los sentidos, así como a todos los estados buenos y malos que penetran en la mente a
través de las puertas de los sentidos. Uno también debe de notar los pensamientos sin importar si éstos son
pensamientos buenos o malos. Así las seis facultades de los sentidos, Indriya, se purificarán.

1.4. Lo Esencial de la Práctica

En la práctica de Satipatthana Vipassanã es muy importante el aplicar los siguientes elementos fundamentales:

1. Momento presente - Paccuppanna Dhamma: Es muy importante estar en el momento presente. Ya sea que uno
esté haciendo consciente o notando mentalmente, el Afuera - Adentro o el Derecha-Izquierda, es esencial hacer
anotaciones mentales en momento presente, justo en el momento en el que surgen como objeto de meditación.La
mente que nota Afuera y el abdomen que sale debe de ocurrir en el mismo momento no antes, ni después. La mente
que nota el movimiento - Adentro - y el abdomen que entra debe de ocurrir en el mismo momento - no antes, ni
después.En el momento que uno comienza a hacer consciente la sílaba "De"- (en Derecha)…. el movimiento debe
de empezar, sincronizando la nota mental con el movimiento.En el momento que uno hace consciente la siguiente
sílaba - re- (en Derecha) uno debe inmediatamente continuar con el movimiento del pie derecho.

En el momento que uno hace consciente la sílaba - cha - (en derecha) uno debe poner el pie en el piso, exactamente
en el mismo momento. Así cuando uno dice Derecha, uno debe practicar viendo el comienzo, el movimiento y el
fin del movimiento.2. Continuidad: Uno debe meditar con continuidad ininterrumpida aplicando la Atención
Completa a cada momento. Después de que uno ha practicado el ejercicio correspondiente a la postración con
Atención Completa, uno debería levantarse atenta y cuidadosamente y continuar con la meditación caminando en
Atención Completa y luego continuar con el ejercicio de meditación sentado, notando todos y cada uno de los
movimientos, sensaciones, pensamientos y condiciones que aparezcan durante la meditación.Cuando uno está
descansando, uno deberá de notar los movimientos o posiciones menores, como lo sería el lavarse la cara, bañarse,
comer, beber, descansar, estirarse, inclinarse y aún el acostarse continuar con Afuera - Adentro hasta que uno se
quede dormido. Uno debería notar todas estas actividades atentamente y tanto como sea posible.La Postración en
Atención Completa hace que surja la Atención Completa con los movimientos de la mano y el cuerpo. La
meditación caminando hace que surja la Atención Completa con los movimientos de cada pie. La meditación
sentado hace que progrese la Atención Completa con los movimientos del abdomen.3. Esfuerzo diligente, Atención
Completa y Clara Comprensión - Atapi, Satima, Sampajanno.Uno debe de tener y hacer un Esfuerzo diligente,
Atapi, para practicar entusiasta y sinceramente.Uno debe de tener la memoria y la recolección, Satima, para notar
precisamente todas las condiciones que surgen en el cuerpo y la mente en el momento presente.Uno debe de aplicar
Clara Comprensión, Sampajanno, en el momento de hacer consciente el cuerpo y la mente en cada momento,
protegiendo el objeto de meditación, de la misma manera que una persona que solo tiene un ojo, lo cuida, lo
conserva y lo protege en cada momento.4. Balancear las facultades/poderes: Uno debe de balancear las Cinco
Facultades (o Poderes) de forma pareja.Fe (Saddha) debe ser balanceada con Sabiduría (Pañña).Energía y Esfuerzo
(Viriya) debe estar balanceada con Concentración (Samadhi).

Atención Completa (Sati) es la facultad de control y balance. Por lo que entre más fuerte sea la Atención Completa
es mejor.
10
Si la Confianza es muy fuerte y la Sabiduría es débil, el deseo (Lobha) va a surgir.

Si la Sabiduría es fuerte y la Confianza es débil, la duda (Vicikiccha) va a surgir.

Si la Energía y el Esfuerzo son fuertes y la Concentración débil, la preocupación y la ansiedad (Uddhacca -


Kukkucca) van a surgir.

Sí la Concentración es Fuerte y la Energía y el Esfuerzo son débiles, la somnolencia y la pesadez (Thina-midha)


van a surgir.

El Momento Presente

¿ Porqué existe tal énfasis en que la Atención Completa debe de surgir en el momento presente?Esto es porque, sí
la Atención Completa no es desarrollada durante la práctica en el momento presente, no dará como resultado la
Sabiduría de Introspección. La concentración momentánea (Khanika Samadhi) solo puede surgir si uno es capaz de
hacer anotaciones mentales consistentemente en momento presente, notando así cada condición de una manera
precisa. La concentración momentánea surgirá y desarrollará las Cinco Facultades y los Cinco Poderes que a su vez
llevarán al progreso de la Sabiduría de Introspección.En cada estado de la práctica, la Atención Completa en
momento presente es esencial. Es la Atención Completa en el momento presente la que permite que Khanika
Samadhi surja y se enfoque, poniendo las bases para que la Sabiduría de Introspección surja. La Concentración
Momentánea sirve para enfocar el objeto de meditación, llevándonos a la introspección, que discierne sobre el
cuerpo y la mente claramente y gradualmente progresa a un estado superior de conocimiento intuitivo.Una vez que
uno ha alcanzado el 14avo, estado de introspección, Maggañana, hará surgir conjuntamente el conocimiento del
camino, la fortaleza de las Facultades y Poderes destruyendo las impurezas automáticamente, sin ningún tipo de
ayuda externa. Sólo es necesario practicar correctamente de acuerdo a los Cuatro Fundamentos de la Atención
Completa.Las anotaciones mentales o reconocimientos es el corazón de la práctica de la meditación Satipatthana
Vipassanã.

Es la función de Sati el observar, reconocer y estar consciente de lo que surge en momento presente. El proceso de
hacer anotaciones mentales previene a los estados mentales negativos de surgir. Sati le da forma y soporte a la
Concentración Momentánea y con reconocimientos continuos obstruye a los estados insanos de entrar en la mente.

La continuidad en los reconocimientos actúa como un escudo que previene a las impurezas de entrar en la mente.
Las facultades bien formadas y balanceadas actúan como el cuchillo que corta las impurezas que ya han surgido.

La introspección y la realización de la Verdad surgirán cuando uno contemple los Cuatro Fundamentos de la
Atención Completa. El verdadero valor de la vida sólo puede ser encontrado en el momento presente.

2. Beneficios de la práctica de la visión cabal Vipassana

* Se van transformando los antiguos modelos perceptivos y reactivos de la mente.

* Se va purificando el subconsciente, se van superando las coaguladas estructuras mentales y se va desencadenando


una percepción purificada que es en sí misma sabiduría.

* Va brotando la visión cabal y penetrativa que a su vez hace posible la comprensión clara, de enorme eficacia
tanto para la vida interior como para la vida cotidiana.

* La mente se va estabilizando en un estado de lucidez, es la claridad que deriva de la mente cuando se ha


desempañado y se han ido erradicando los innumerables condicionamientos, negatividades y corrupciones.

* Nos liberamos de la maraña de opiniones y puntos de vista, proyecciones y creaciones ilusorias de la mente.

* La sabiduría va disipando la ignorancia; la conciencia va iluminando el subconsciente; el ego se va disolviendo y


se obtiene la comprensión iluminadora de lo condicionado y lo interdependiente.
11
* El desapego creciente y el cultivo firme del camino medio.

* El fomento de la compasión y el amor por todos los seres vivientes.

* La habilidad para vivir el momento a la luz de la plena conciencia.

* El control de reacciones y actitudes y el arte de saber cuándo se debe o no proceder.

3. Preguntas Frecuentes

P: ¿Debo ser budista para practicar la meditación Vipassana?

R: En la meditación Vipassana no existe elemento alguno de religión. Ni tienes que renunciar a tu religión o credo
actual. Se trata de un auto examen durante el cual se observa con atención todo lo que está ocurriendo en el
momento presente en tu mente y en tu cuerpo.

P: ¿Cuál es el origen de la meditación Vipassana?

R: Es la práctica transmitida por los maestros de la tradición del budismo Theravada, la de más antiguo cuño y la
más cercana al Buda Histórico (Sidarta Gotama), expandida en los países del sur de Asia: Tailandia, Sri Lanka,
Birmania (Myanmar), Camboya y Laos.

P: ¿Está la enseñanza del Buda tan vigente hoy en día como hace 2500 años?

R: La enseñanza no fue sólo para su época si no para todas las épocas y no sólo para India y Oriente si no para
todos los países. Hoy que la gente está tan intranquila por que se ha despreocupado de su mundo interior y sólo se
ha dedicado al exterior, la tecnología y la ciencia, requiere más que nunca el mensaje del Buda que te insta a mirar
hacia dentro.

P: ¿Qué quiere decir Vipassana?

R: Es una palabra en lengua Pali que significa "ver cabalmente", "ver a través de"o "ver en diferentes formas".

P: ¿Para quién es necesaria la meditación Vipassana?

R: Para todo aquel que desee corregir sus impurezas mentales como el apego (avaricia), el enojo (ira) y la
ignorancia (oscuridad mental). Enfermedades que los humanos tenemos casi todo el tiempo. Para lograr por lo
menos tener control de ellas.

P: ¿Para qué me sirve meditar Vipassana?

R: Para ver las cosas como realmente son y no como aparentan ser. Para obtener beneficios inmediatos de paz y
tranquilidad mental. Para desarrollar la habilidad de aceptar la cosas como se presentan y recibirlas con menos
agitación y de manera más positiva. Las cosas aparentan ser permanentes, deseables y con sustancia, pero no lo son
en realidad. Te sirve para experimentar el surgir y cesar de todos los fenómenos físicos y mentales. Para entender
más claramente lo que está ocurriendo en tu cuerpo y en tu mente. En grados más elevados, para erradicar
completamente las impurezas mentales.

P: ¿Es difícil practicar la meditación Vipassana?

R: La meditación Vipassana es fácil de practicar ya que no incluye rituales a seguir ni mucho que aprender antes de
iniciar la práctica. Solamente se enfoca la mente a un objeto y se observa uno mismo. Así de simple. Sin embargo,
el mantener la mente en un mismo objeto requiere de mucho esfuerzo, ya que la mente no es fácil de controlar.

P: ¿Cuándo debo meditar?

12
R: Cualquier momento es bueno para practicar la meditación Vipassana, en la mañana, durante el día o en la noche.
Sin importar la edad, las impurezas de la mente están presentes con nosotros casi siempre, por lo que deberíamos
meditar casi todo el tiempo.

P: ¿Debo entonces meditar diariamente?

R: La mente debe ser cuidada y alimentada diariamente, como lo hacemos con nuestro cuerpo. Habituarnos a
practicar todos los días resulta benéfico para nuestras actividades cotidianas.

P: ¿Cuánto tiempo debo meditar diario?

R: Mientras más tiempo medites, los resultados serán mejores, pero todo depende del tiempo que dispongas. Es
recomendable iniciar con horarios de 20 a 30 minutos, e ir aumentando paulatinamente. También sería bueno
meditar más de una vez al día.

P: ¿Debo cumplir algún requisito antes practicar la meditación Vipassana?

R: La disposición y un deseo genuino de hacerlo, además de perseverancia y un buen grado de paciencia serían
suficientes. Los maestros insisten además en la purificación de la conducta ética para obtener una buena
concentración, ya que los pensamientos de haber realizado algo incorrecto nos aparecen recurrentemente al estar
meditando.

P: ¿Basta con practicar la meditación Vipassana o necesariamente hay que observar una conducta y modo de vida
adecuados?

R: La meditación Vipassana si se practica correctamente y con diligencia producirá automática e inevitablemente


cambios en la vida diaria del meditador. La purificación mental va produciendo, con toda naturalidad, una
purificación física y vocal, es decir de lo que uno hace y dice.

P: ¿De dónde viene la propensión de un individuo hacia un determinado tipo de conducta?

R: La repetición o práctica continuada de determinados tipos de voliciones crean tendencias. En una persona que
cultiva la codicia, que practica continuamente el aferrarse, el apego y el olvido, el factor de codicia se hace muy
fuerte en su mente. Pronto llega a expresarse en todas sus acciones. Cuando se cultiva la no-codicia y la no-ira,
entonces se convierte en la tendencia determinante y se expresa en su personalidad.

P: ¿Es importante la postura para practicar Vipassana?

R: Lo importante en la meditación Vipassana no es la postura, sino la observación. Ahora bien, nuestra práctica
comprende meditación caminando y meditación sentado, además de poner atención durante los movimientos de
sentarse e incorporarse, por lo que la meditación Vipassana debería practicarse en todas las posturas. Aunque en la
meditación sentado es recomendable hacerla en el suelo, con las piernas cruzadas, puede utilizarse un cojín o una
silla, dependiendo de las circunstancias de cada meditador.

P: Para meditar ¿es indispensable un maestro o guía?

R: Siempre es mejor contar con una guía para aprender mejor y más rápido. La mente puede engañarnos
haciéndonos creer que progresamos o bien, que no lo estamos haciendo correctamente; sólo la intervención de una
maestro calificado puede determinar el grado de avance de cada meditador, orientarlo para corregir errores o
guiarlo si surge alguna dificultad durante su meditación.

P: ¿Meditar Vipassana me ayuda en la vida cotidiana?

13
R: Meditando con perseverancia, uno va desarrollando la conciencia para aplicar la técnica seguida durante la
meditación en cualquier actividad que realice, ya sea trabajando, platicando, caminando, comiendo, sentado, etc.
Los problemas de la vida diaria pueden abordarse de diferente manera, más efectivamente.

P: ¿Qué beneficio tiene asistir a un retiro de meditación?

R: Es la mejor oportunidad para profundizar en la práctica de meditación bajo la guía de un maestro


experimentado, observando el Noble Silencio y en un ambiente propicio. Se medita desarrollando atención
completa en todas las actividades del día, no sólo durante los períodos de meditación. Durante el retiro utilizamos
como objeto de meditación todo lo que hacemos. Esta práctica intensiva permite calmar la mente y desarrollar
buena concentración, esencial para que surja el conocimiento penetrativo, y poder así experimentar por uno mismo
la verdadera naturaleza de la realidad.

P: ¿Con un par de semanas de meditación, todos mis problemas desaparecerán?

R: La meditación no es un sanalotodo instantáneo. Empezará a ver cambios rápidamente, pero los efectos realmente
profundos toman años. Esa es la manera en que este universo está construido. Nada que valga la pena se logra de
un día para otro. La meditación es difícil en algunos aspectos. Requiere de una prolongada disciplina y algunas
veces un proceso de práctica que es doloroso. En cada sesión se logran ciertos resultados, pero estos son a menudo
muy sutiles. Ocurren en la profundidad de la mente y se manifiestan sólo más tarde.

P: ¿El meditar es tratar de evadir la realidad?

R: Esto es incorrecto. La meditación es entrar de lleno a la realidad. No nos aísla del sufrimiento en la vida. Lo que
sí nos permite hacer es ahondar en la vida y sus aspectos de manera que podamos penetrar la barrera del dolor e ir
más allá del sufrimiento. Vipassana es una práctica hecha con la intención específica de afrontar la realidad, de
experimentar la vida de lleno, tal como es y de poder responder adecuadamente con lo que nos encontremos. Nos
permite poner a un lado las ilusiones y todas aquellas pequeñas mentiras piadosas que nos decimos a nosotros
mismos todo el tiempo. Lo que está allí está allí. Nosotros somos lo que somos, y el mentirnos a nosotros mismos
acerca de nuestras debilidades y motivaciones solamente nos ata más a la rueda de la ilusión. La meditación
Vipassana no es un intento por olvidarnos de nosotros mismos y de esconder nuestros problemas. Es más bien
aprender a vernos exactamente como somos. Ver lo que hay y aceptarlo totalmente. Sólo así lo podemos cambiar.

P: ¿Pueden presentarse momentos de miedo o terror durante la meditación Vipassana? ¿Qué hacer?

R: Con la práctica de Vipassana todas las corrupciones mentales, todos los complejos escondidos en el inconsciente
surgirán necesariamente a la superficie de la mente. Alguien con complejo de miedo arraigado, no hay duda,
Vipassana lo sacará a la luz del día. A veces se desarraigará fácilmente, a veces no, lo que hay que hacer es aceptar
el hecho de que la mente en ese momento, está invadida por el miedo, hacer la nota mental de miedo y concentrarse
en el movimiento del abdomen hasta que pase la tormenta.

P: ¿Qué pasa cuando reconoces el miedo e intentas entender de dónde viene?

R: Querer analizar la causa es no soltar. Surgirá de nuevo una y otra vez, y cada vez tendrás que analizar las causas
nuevas. Cuando se desarrolla el conocimiento intuitivo, puedes ver el miedo y soltarlo. No tenemos que encontrar
las causas de nuestros problemas, tenemos que soltarnos de ellos. Ver las negatividades, reconocerlas, no
identificarse con ellas y dejar que se vayan. Es muy sencillo, sólo se necesita atención, conciencia de lo que está
sucediendo en el momento.

P: ¿Cuáles son los efectos de Vipassana en el subconsciente, es decir, en qué medida resuelve esta meditación
problemas y sanea factores, tendencias e impulsos malsanos del subconsciente?

R: La práctica de Vipassana permite al meditador enfrentarse con la mente no sólo al nivel consciente -que podría
purificarse por el simple conocimiento intelectual- sino también al nivel subconsciente. Vipassana desarraiga todas

14
las corrupciones y obsesiones que, profundamente enraizadas, dan lugar a las tendencias malsanas del
subconsciente.

P: ¿Ayuda la meditación Vipassana a enfrentar la muerte y la enfermedad?

R: La práctica de Vipassana desarrolla Upekka, o sea la ecuanimidad mental, lo cuál permite al meditador
enfrentarse serenamente con toda clase de sufrimientos, inclusive la enfermedad y la muerte.

P: ¿Habría que llevar hasta en el momento de la muerte la Atención Completa?

R: Sí, también hasta el momento de la muerte.

P: ¿La meditación Vipassana fomenta la capacidad creadora o frustra la inspiración?

R: Con la práctica de Vipassana, la mente gana en fuerza y en pureza, y se libera de los complejos que la inhiben.
El resultado de ello es un poderoso incremento de su capacidad creadora.

P: ¿Se puede vivir sin deseo?

R: El natural impulso de satisfacer necesidades físicas inmediatas es inevitable -por ejemplo querer agua para
satisfacer la sed-. Sin embargo, no hay que permitir que tales impulsos naturales se conviertan en obsesiones, en
deseo y apego, que desequilibran y agitan la mente, causando sufrimiento. Mediante la consciencia que adquiere de
las sensaciones, el meditador Vipassana tiene un conocimiento directo, vivencial, de la agitación, del sufrimiento
que brota en él cada vez que surgen en su mente el deseo y el apego.

P: ¿El desapego puede conducir al desinterés?

R: El desapego de la mente pura no tiene absolutamente nada en común con la insensibilidad o indiferencia de lo
que llamamos desinterés en el ámbito mundano. Una mente pura, sin apego, está por naturaleza llena de amor para
el prójimo, de compasión para con sus sufrimientos e imperfecciones, de alegría para con sus éxitos. Este puro
desapego, este brillante desinterés, es la más alta de las cualidades de la mente.

P: ¿Muchas personas temen establecerse en el desapego porque consideran que el desapego es desinterés, es así?

R: El problema con el apego es que cuando una persona se apega a algo deja de verlo tal y como es. El apego
desencadena toda clase de proyecciones que adultera la visión del objeto. Por anclar a las pasadas experiencias,
perturba las subsiguientes. Si una persona vio hace algunos días una hermosa puesta del sol, estará recordando la
anterior, comparando, proyectando y, por tanto, no viendo la actual puesta del sol tal y como es. Hay que
conquistar la Atención Completa y no permitir que la mente se enrede e implique con el asunto

P: ¿Qué es la ignorancia?

R: Desconocimiento de las Cuatro Nobles Verdades, no viendo y comprendiendo las cosas como verdaderamente
son. Es el desconocimiento de nosotros, de la naturaleza exacta del mundo y de la naturaleza exacta del hombre.

P: En mi meditación sentado me he visto a mí mismo visualizando mi respiración como agua fluyendo hacia
adentro y hacia fuera en un túnel. ¿No estaría más atento sin la visualización?

R: Sí. La esencia de la práctica consiste en llevar la mente a un nivel de experiencia más que a uno conceptual. La
visualización de la respiración es un concepto. Eso no es lo que está ocurriendo; eso es una proyección sobre ello.
La idea es estar en la experiencia de las sensaciones del movimiento del abdomen, no crear un concepto de ella.

P: ¿Qué debo hacer cuando me pongo muy tenso por forzarme demasiado?

R: Cuando sientas demasiada tensión o que te fuerzas en la práctica, sal afuera y mira los árboles, el cielo. Esto es
muy hermoso, muy expansivo. Sal y camina un poco de forma más relajada, pero también con consciencia de lo
15
que estás haciendo. En poco tiempo, el mismo lugar calmará la mente. El propio Buda recomendaba a menudo
estar en la naturaleza por la tranquilidad que proporciona a la mente.

P: A veces no puedo notar el proceso de la respiración. ¿Qué debo hacer?

R: Cuando la mente se calma la respiración se hace muy tenue. Si pierdes totalmente la consciencia de la
respiración, quédate con la consciencia de las sensaciones corporales, de la postura corporal, o sólo de la
consciencia del conocer, aunque no parezca que haya ningún objeto en particular. Cuando la concentración está
muy desarrollada, a veces se pierde algún sentido del cuerpo. Permanece atento a eso. También es transitorio. La
respiración volverá.

P: Sigo identificándome con los obstáculos. ¿Qué medios eficaces hay para remediar eso?

R: Hay quienes utilizan la imagen de un inmenso cielo claro comparándolo con la mente. Todos los fenómenos de
la mente y del cuerpo están sucediendo en ese cielo despejado. El cielo es claro y no está afectado por lo que
sucede. Las nubes vienen y se van, los vientos llegan y se van, la lluvia y la luz del sol vienen y se van, pero el
cielo sigue siendo claro. Haz de la mente un gran cielo despejado y deja que todo aparezca y se desvanezca por sí
mismo. Así la mente permanece equilibrada, relajada, observando el fluir.

P: ¿Cómo hacer comprender a las personas que no están de acuerdo con lo que estoy haciendo al seguir este
camino?

R: Hay muchas formas de comunicar y a menudo las palabras no son la mejor. Si estás con tus padres o con
cualquier otra persona y son personas muy tranquilas, que no juzgan, que aceptan llenas de amor y generosidad, no
necesitas decir una palabra. Tu propia apacibilidad crea un espacio. Esto lleva mucho tiempo. La gente está
apegada a su propia forma de ver las cosas. Tan pronto dices algo que las cuestiona de alguna forma, se ponen a la
defensiva. Así que la forma de hacerlo no es cuestionar, sino simplemente ser uno mismo, dejando que el Dharma
se revele. Una mente apacible produce un efecto en el ambiente que le rodea. Lleva tiempo y paciencia, y mucho
amor.

P: ¿Tenemos alguna elección en lo que hacemos en cada momento?

R: Mucho de lo que nos pasa está determinado por nuestro karma del pasado, pero el cómo reaccionemos ante eso
tiene mucho que ver con nuestra libertad del momento. Podemos cultivar la atención o no. No hay una necesidad
que nos obligue a reaccionar ante las cosas. La libertad descansa en cómo nos relacionemos con lo que ocurre en el
momento.

P: ¿El intentar ser siempre consciente del momento no disminuye la espontaneidad?

R: El no ser consciente no implica ser espontáneo. Si actuamos mecánicamente, muchas veces con respuestas
condicionadas a los fenómenos, eso no es espontaneidad, es ser un autómata. Cuando llega un estímulo, actuamos,
siempre sin consciencia, sin atención. Eso no es un estado espontáneo de la mente, es mecánico. La espontaneidad
se produce cuando la mente está tranquila, cuando está en un nivel intuitivo, dándose cuenta claramente en cada
momento. Cuando se desarrolla la atención no se detiene el fluir, no se rompe el ritmo natural. Al principio, nos
puede ayudar el enfocar cada proceso en particular, pero cuando se haya cultivado la mera atención, fluirá sin
esfuerzo.

P: ¿Qué significa estar conscientemente atento?

R: La atención es un factor mental que tiene como función recordar cuál es el objeto, sin dejar que la mente lo
olvide. La atención puede ponerse en un objeto o dirigirse hacia la consciencia, al conocimiento de la misma.
Generalmente es más fácil observar porque es más tangible. Cuando la mente está muy tranquila también puedes
observar cómo la facultad cognoscitiva va surgiendo y desapareciendo. Es fácil sentarse cómodamente y observar

16
el flujo de las cosas y aun tener la idea de un observador que lo hace. Pero, en realidad, no hay en absoluto
observador. Sólo hay conocer, que surge y desaparece en cada momento.

4. La meditación Vipassana, aprendiendo a vivir*

Vipassana es la más antigua de las tradiciones meditativas budistas. Su método proviene directamente del
Satipatthana Sutta, un discurso atribuido al Buda. Vipassana es el cultivo directo y gradual de la atención o
conciencia pura. Procede paso a paso a lo largo de los años. La atención del practicante se dirige cuidadosamente
hacia diversos aspectos de su propia existencia. El meditador se entrena para percibir cada vez más su flujo de
experiencia vital. Vipassana es una técnica apacible y al mismo tiempo completa, una antigua codificación de
entrenamiento en sensibilidad, un conjunto de ejercicios destinados a volvernos crecientemente receptivos hacia
nuestra vida concreta. Significa escuchar atentamente, ver totalmente y experimentar con cuidado. Con ella
logramos oler con agudeza, tocar con intensidad y atender sin reservas lo que sentimos. Aprendemos a escuchar
nuestros propios pensamientos sin involucrarnos en ellos.

El objetivo de la práctica Vipassana es aprender a vivirlo todo con atención. Creemos ya estarlo haciendo, pero eso
también es una ilusión: prestamos tan poca atención al continuo devenir de la experiencia que lo mismo daría el
estar dormidos. No ponemos suficiente atención para notar que no estamos atentos.

A través del proceso de atención gradualmente cobramos conciencia de lo que realmente somos por encima de
nuestra egoísta auto imagen personal. Despertamos a la vida como ésta es: no solamente un desfile ilusorio de
subidas y bajadas, premios y castigos, sino una textura mucho más profunda cuando nos tomamos la molestia de
mirarla correctamente.

Vipassana es una forma de entrenamiento mental que le enseñará a usted a experimentar el mundo de un modo
completamente diferente. Por primera vez aprenderá y sabrá lo que realmente le está sucediendo, lo que sucede a su
alrededor y lo que le sucede internamente. Es un proceso de autodescubrimiento, una investigación participatoria
en la que observamos nuestras propias experiencias mientras estamos en ellas. La práctica de este proceso debe
llevarse a cabo con la siguiente disposición: "No importa lo que se me haya enseñado. Olvido todo acerca de
teorías, prejuicios y estereotipos. Quiero entender la naturaleza real de la vida. Quiero saber lo que realmente
significa la experiencia de estar vivo. Quiero aprender las cualidades profundas y verdaderas de la vida por mí
mismo y no a través de la experiencia de otros." Si practicamos la meditación con esta actitud triunfaremos,
podremos ver las cosas objetivamente, tal y como son, fluyendo y cambiando de momento a momento. La vida
tomará entonces un cariz de riqueza increíble que no puede describirse, tiene que ser directamente experimentado.

Las palabras en pali para el término Meditación Introspectiva son Vipassana Bhavana. Bhavana surge de la raíz
bhu, que significa "crecer o transformarse en". Por lo tanto, Bhavana quiere decir "cultivar", y siempre se utiliza
con relación a la mente. Puede traducirse como "cultivo mental". Vipassana proviene de dos raíces: Passana, que
significa "ver o percibir", y Vi, un prefijo con un complejo conjunto de connotaciones. Su sentido básico es el de
"en forma especial", pero también supone las connotaciones de "dentro de" y "a través de". El significado global de
la palabra es el de ver algo con precisión y claridad, ver cada componente de ese algo de forma distinta y separada
y penetrar a fondo en la realidad fundamental de aquello que se observa. Vipassana Bhavana lleva
introspectivamente hacia la realidad básica de cualquier cosa que se inspeccione. En suma, el término designa el
cultivo de la mente enfocado a ver de una manera que conduce a la introspección y a un entendimiento completo de
lo que se ve.

En la meditación Vipassana cultivamos esta forma especial de ver la vida. Nos entrenamos para ver la realidad tal
cual es, y llamamos a este modo especial de percibir atención, conciencia pura o conocimiento. El proceso de
atención es aquí radicalmente distinto del que siempre acostumbramos. Por lo general nunca vemos dentro de lo
que está realmente ante nosotros. Miramos la vida a través de una densa cortina de pensamientos y conceptos, y
confundimos esos objetos mentales con la realidad. Nos involucramos tanto en esta interminable corriente de
pensamiento que la realidad fluye sin que la notemos. Dilapidamos el tiempo absortos en nuestras actividades,
presos en una imparable persecución del placer y la gratificación, en una constante huída del dolor y lo
17
desagradable. Gastamos todas nuestras energías en el intento de hacernos sentir mejor y enterrar nuestros temores,
Buscamos seguridad sin descanso, y mientras tanto el mundo de la experiencia real transcurre inadvertido a nuestro
lado. Vipassana nos capacita para superar nuestros poderosos y constantes impulsos hacia la comodidad y en su
lugar nos impulsa para penetrar en la verdadera realidad.

Lo paradójico es que la paz llega a nosotros sólo cuando dejamos de perseguirla.

Cuando suavizamos nuestro compulsivo deseo de comodidad aparece la satisfacción. Cuando dejamos de corretear
alocadamente detrás de las gratificaciones surge la verdadera belleza de la vida. Cuando buscamos conocer la
realidad sin ilusiones, cabalmente, con todo su dolor y su peligro, entonces nos hacemos dueños de la libertad y la
seguridad verdaderas. Esta nos es una doctrina que tratamos de imponerle, sino una realidad observable que puede
y debe comprobar por usted mismo.

Según el punto de vista del budismo los seres humanos vivimos de una manera peculiar. Creemos que las cosas
impermanentes son permanentes, a pesar de que todo en nuestro derredor cambia. El proceso de cambio es
constante, inalterable. A medida que usted lee estas palabras su cuerpo envejece, sin embargo no pone atención en
ello. El libro que tiene en sus manos se encuentra en un sutil proceso de deterioro, la impresión se está borrando y
sus páginas se destruyen lentamente. Las paredes que lo rodean se desgastan, las moléculas que las integran vibran
a elevadas frecuencias y todo cambia porque está descomponiéndose y disolviéndose paulatinamente. Usted
tampoco presta atención a ello. Pero un día reconocemos que nuestro cuerpo está enjuto y arrugado, que rechina y
nos duele, que el libro está amarillento y el edificio estropeado. Entonces suspiramos por la juventud perdida y
lloramos por nuestras posesiones perdidas. ¿De dónde viene este dolor? De nuestra propia falta de atención.
Fuimos incapaces para ver la vida de cerca, fracasamos al no poder observar el constante y cambiante flujo del
mundo mientras transcurría. Edificamos toda una serie de construcciones mentales: yo, el libro, el edificio, y
creímos que eran entidades sólidas y reales, supusimos que durarían para siempre. Aunque nunca lo hicieron ni lo
harán. Pero todavía podemos estar en sintonía con el constante cambio que sucede. Podemos aprender a percibir
nuestra vida como un movimiento fluido, algo de gran belleza como una danza o una sinfonía. Podemos aprender a
ser dichosos en medio de la eterna muerte de todos los fenómenos. Podemos aprender a vivir con el flujo de la
existencia en vez de movernos perpetuamente contra la corriente. Usted puede asimilarlo. Sólo es cuestión de
tiempo y entrenamiento.

Nuestros hábitos de percepción son extraordinariamente estúpidos en muchos aspectos. Bloqueamos el 99% de los
estímulos sensoriales que recibimos y el resto lo solidificamos en objetos mentales. Después reaccionamos ante
esos objetos de manera mecánica, programada. Un ejemplo: Estamos sentados solos en medio de la quietud de una
noche apacible y un perro ladra a lo lejos. Si nos tomamos la molestia de examinarla, la percepción en sí misma
puede ser indescriptiblemente hermosa. De la profundidad de un mar de silencio surgen ondas sonoras.
Escuchamos los bellos y complejos patrones de sonido transformados en centellantes estímulos electrónicos dentro
de nuestro sistema nervioso. Todo el proceso es encantador y satisfactorio en cuanto tal. Pero tenemos la tendencia
a ignorarlo por completo solidificando la percepción en un objeto mental. Le adherimos una imagen mental y nos
lanzamos a una serie de reacciones conceptuales y emocionales: "Ahí está ese perro otra vez, siempre ladra en la
noche, qué fastidio, cada noche la misma molestia, alguien debería hacer algo al respecto. Tal vez deba llamar a la
policía o a alguien que lo atrape y se lo lleve. No, mejor voy a escribir una carta de reclamo al dueño del perro. No,
eso es mucho trabajo, tal vez deba conseguirme unos tapones para los oídos". Estas reacciones no son otra cosa que
hábitos mentales y perceptivos. Uno aprende desde niño a responder de esa manera porque copia los hábitos
perceptuales de aquellos que nos rodean. Estas respuestas perceptuales no son inherentes a la estructura del sistema
nervioso. Los circuitos están ahí, pero ésta no es la única manera en que puede utilizarse nuestra maquinaria
nerviosa. Aquello que se ha aprendido se puede desaprender. El primer paso para lograrlo es darnos cuenta de lo
que hacemos al tiempo que lo hacemos, apartándonos y observándonos calladamente.

Según el budismo los seres humanos tenemos una visión de la vida equivocada. Las cosas que provocan
sufrimiento las vemos como si produjeran felicidad. La causa del sufrimiento es ese síndrome de deseo-aversión
que ya mencionamos. Cuando surge cualquier percepción -una hermosa muchacha, un hombre apuesto, un criminal
18
armado, un camión que amenaza atropellarnos, etcétera-, lo primero que hacemos es reaccionar ante el estímulo
con un sentimiento al respecto.

Tome como ejemplo la preocupación. Nos preocupamos mucho y constantemente, de tal modo que la preocupación
en sí misma es el problema. Como todo fenómeno mental, la preocupación es un proceso compuesto de pasos, no
es solamente un estado existencial sino un procedimiento. Lo que tenemos que hacer es ver el inicio de ese
procedimiento, sus etapas iniciales antes de que el proceso cobre inercia. El primer eslabón en la cadena de la
preocupación es la reacción de aferramiento-rechazo. Tan pronto como un pensamiento surge intentamos
mentalmente tomarlo o rechazarlo. Esto es lo que condiciona y pone en marcha el sentimiento de preocupación.
Afortunadamente existe una pequeña y útil herramienta, la meditación Vipassana, que puede utilizarse para crear
un corto circuito en ese mecanismo.

La meditación Vipassana nos enseña a examinar nuestro propio proceso perceptual con gran precisión. Gracias a
ella aprendemos a observar el inicio de los pensamientos y las percepciones con un sentimiento de serena
imparcialidad y desprendimiento. Aprendemos a ver con calma y claridad nuestras propias reacciones a los
estímulos, a verlas sin involucrarnos en las mismas. Entonces, la naturaleza obsesiva del pensamiento muere y se
produce una visión totalmente nueva de la realidad. Es todo un cambio de paradigma, una modificación total del
mecanismo perceptual que trae consigo un sentimiento de paz y rectitud, de entusiasmo por el vivir, y un sentido de
plenitud en cada actividad. Por eso el budismo considera esta forma de ver las cosas como una visión correcta de la
vida. Los textos budistas la llaman "ver las cosas como son en realidad".

La meditación Vipassana es un conjunto de procedimientos prácticos que nos sensibilizan gradualmente para esta
visión de la realidad tal cual es. Junto con esta nueva realidad surge también una nueva perspectiva de ese aspecto
tan central de la misma: el yo. Una inspección cuidadosa revela que hemos hecho con el yo lo mismo que con
nuestras otras percepciones: hemos solidificado en una construcción mental el vórtice dinámico de pensamiento,
sentimiento y sensación. Acto seguido le adherimos la etique del yo y lo consideramos una entidad estática y
perenne, ajena a todas las demás. Así nos separamos de todo ese proceso de cambio eterno que es el universo y
después lamentamos nuestro sentimiento de soledad. Ignoramos nuestra conexión concreta con todas las cosas y
decidimos que yo tengo que conseguir más para mí. Es sorprendente ver qué tan egoístas y poco sensibles son los
seres humanos. Cada acto malo, cada ejemplo de falta de corazón en el mundo nace directamente de ese falso
sentido del yo con algo distinto de todo lo que está fuera de mí.

Todo el universo cambia cuando se desmorona la ilusión de ese concepto. Sin embargo, no espere lograrlo de un
día para otro. Hemos gastado toda nuestra vida en la construcción de ese concepto, reforzándolo con cada
pensamiento, palabra y acción a lo largo de los años. No va a evaporarse instantáneamente, pero desaparecerá con
suficiente tiempo y atención. El proceso mediante el cual se disuelve es la meditación Vipassana. Poco a poco se
irá descascarando a medida que lo observamos.

El concepto del yo es un proceso, algo que hacemos. En Vipassana aprendemos a ver lo que estamos haciendo,
cuándo y cómo lo hacemos. Entonces se pone en movimiento y se esfuma, como una nube que pasa por un cielo
despejado. Alcanzamos un estado donde podemos o no emplear el concepto, según lo apropiado de la situación. La
compulsividad desaparece, podemos elegir.

Todas éstas son, desde luego, grandes introspecciones. Cada una de ellas es un entendimiento de largo alcance
sobre algún aspecto fundamental de la existencia humana. No ocurren rápidamente o sin esfuerzo considerable,
pero la recompensa es grande ya que conducen a una transformación total de nuestras vidas. Después de ello
cambia cada segundo de nuestra existencia. El meditador que se esfuerza hasta el final del camino logra una salud
mental perfecta, un amor puro hacia todo lo que vive y un cese completo del sufrimiento. No son objetivos
pequeños. Y sin embargo, no es necesario llegar hasta el final del camino para lograrlos porque su manifestación es
inmediata y con los años acumulativa. Es así porque mientras más nos sentemos a meditar más aprenderemos sobre
la naturaleza real de nuestra existencia y mayor será nuestra capacidad para observar serenamente cada impulso,
intención pensamiento o emoción que surjan en nuestra mente. El progreso hacia la liberación se mide en horas

19
cojín-hombre. Y podemos detenernos cuando hayamos tenido suficiente, ya que no hay nadie que nos obligue a
meditar excepto nuestros propios deseos para ver la calidad verdadera de la vida y enriquecer nuestra existencia y
la de los demás.

La meditación Vipassana es inherentemente vivencial y no teórica. Con su práctica nos sensibilizamos a la


verdadera experiencia del vivir. No se trata de sentarse a desarrollar pensamientos estéticos y sutiles acerca de la
vida, se trata de vivir. Antes que otra cosa, la meditación Vipassana es el aprendizaje de vivir.

* Artículo extraído del Capítulo 3 (¿Qué es la meditación?) del libro "El cultivo de la atención plena-La práctica de la meditación Vipassana"
del Venerable Henepola Gunaratana Mahatera, traducción del original en inglés "Mindefulness in plain English" por Bhikkhu Thitapuñño
(Miguel A. Romero), Editorial Pax México, 2002.

5. ¿Para qué practicar la meditación Vipassana?

 Para mantener nuestra Mente tan sana como nuestro cuerpo 1

La meditación no es únicamente algo extra para practicar en nuestro tiempo libre, sino algo esencial para nuestro
bienestar físico y mental.

Todos nosotros somos capaces y eficientes para cuidar nuestro cuerpo. Lo lavamos al menos una vez al día
probablemente más a menudo. Salimos a la calle con ropa limpia. Descansamos nuestro cuerpo por la noche. Cada
uno tiene su cama. No seríamos capaces de soportar la tensión de vivir si no descansáramos. Alimentamos el
cuerpo con una nutrición sana, no con algo que consideramos veneno. Le damos la comida que consideramos
buena para nosotros y hacemos ejercicio. Al menos caminamos. Si no lo hiciéramos, nuestras piernas se atrofiarían
y no podríamos usarlas más. Exactamente lo mismo se debe hacer con la mente.

En realidad, es incluso más importante, porque la mente es el amo y el cuerpo es el sirviente. El mejor de los
sirvientes, en perfectas condiciones, joven, fuerte y vigoroso, no puede trabajar satisfactoriamente si tiene un amo
débil y disoluto. El amo ha de dirigir al sirviente. Si el amo es eficiente y sabio, la casa estará en orden, aunque el
sirviente no sea muy fuerte y vigoroso.

Esta mente y este cuerpo son nuestra casa. Si el interior de esta casa no está en orden, tampoco el exterior puede
estarlo. La casa en que vivimos y trabajamos depende del orden que hayamos creado en nuestra casa interior. El
amo, el que manda, debe estar en la mejor condición posible.

En todo el universo nada es comparable a la mente ni puede sustituirla. Todo es producto de la mente. Sin embargo,
todos usamos la mente con desconsideración, lo que es otra contradicción. El cuerpo no lo descuida nadie. Cuando
el cuerpo tiene hambre, rápidamente lo alimentamos. Cuando el cuerpo se cansa, rápidamente lo descansamos. Pero
¿y la mente? Sólo el que medita cuida de ella.

Si la vida ha de crecer en visión y profundidad, es esencial cuidar de la mente. De otro modo, la vida permanece en
dos dimensiones distintas. Muchas vidas se viven en las realidades del ayer y del mañana, lo bueno y lo malo, me
gusta o no me gusta, lo quiero o no lo quiero, esto es mío y esto es tuyo. Sólo cuando la mente está entrenada
podemos ver otras dimensiones.

Lo primero que hemos de hacer con la mente es lavarla, limpiarla no sólo una o dos veces al día, como hacemos
con el cuerpo, sino en cada momento que estemos despiertos. Para poder hacer eso hemos de saber cómo. Con el
cuerpo es muy fácil: usamos jabón y agua. Aprendimos a hacerlo de muy pequeños. La mente sólo puede limpiarse
con la mente. Lo que la mente ha puesto allí, la mente puede quitarlo. Un segundo de concentración durante la
meditación es un segundo de purificación, porque la mente sólo puede hacer una cosa en cada instante. Aunque
según el Buda podemos tener tres mil momentos mentales en un abrir y cerrar de ojos, normalmente no tenemos
tantos, ni a la vez. Los momentos mentales se siguen uno a otro en rápida sucesión, pero sólo uno por instante.

20
Cuando nos concentramos, nuestras impurezas, no tienen posibilidades de aparecer, porque la mente sólo puede
hacer una cosa a la vez. Y mientras aprendamos a alargar nuestros periodos de concentración, la mente se va
limpiando de sus imperfecciones.

Nuestra mente, esa herramienta única en todo el universo, es la única que tenemos. Si poseyéramos una
herramienta delicada, evidentemente cuidaríamos de ella y le sacaríamos brillo. La afilaríamos, la engrasaríamos y
la dejaríamos reposar de vez en cuando. Nosotros tenemos aquí esta maravillosa herramienta con la que podemos
conseguirlo todo, incluida la iluminación, y a nosotros corresponde aprender a cuidarla. De otro modo no
funcionará adecuadamente.

Durante la meditación aprendemos a eliminar de la mente lo que no queremos conservar. Sólo queremos tener
presente nuestro objeto de meditación. A medida que desarrollamos esta habilidad, comenzamos a aplicarla en
nuestra vida cotidiana para ayudarnos a desprender de los pensamientos nocivos.

La fuerza del cuerpo nos permite conseguir lo que nos hemos propuesto hacer con él. La fuerza de la mente nos
permite lo mismo con respecto a ella. Una mente fuerte no sufre de aburrimiento, frustración, depresión ni tristeza;
ha aprendido a desprenderse de lo que no quiere. La práctica de la meditación le ha dado la musculatura necesaria
para ello.

 Para desarrollar Sabiduría 2

Meditamos para hallar la Sabiduría. Es la meditación el medio más válido para penetrar esa realidad que se oculta
tras la apariencia, para desarrollar una visión penetrante y directa más allá de los conceptos y las ideas. Meditamos
para purificar la mente, elevar nuestro nivel moral, potenciar la consciencia, superar las aflicciones, eliminar los
autoengaños, traspasar la ilusión y aprehender las cosas tal y como son. Meditamos para desarrollar la mente y el
corazón, para obtener calma profunda, para eliminar los factores negativos (odio, cólera, sensualidad, apatía, etc.) y
cultivar los positivos (amor, comprensión, esfuerzo, energía, etc.) para disipar los prejuicios, para saltar más allá
del ego (de todas las actitudes egocéntricas), para disponer de una mente libre que pueda percibir intuitivamente las
tres características básicas de la existencia: impermanencia, dolor e impersonalidad. Meditamos para cruzar de la
orilla del sufrimiento a la del bienestar, de la de la oscuridad a la de la luz. Meditamos para liberarnos de
contaminaciones, para encender nuestra propia lámpara, para trascender el razonamiento ordinario y rescatar uno
más elevado, para vivenciar de manera directa y sin filtros socioculturales y psicológicos, para que fluya la
comprensión profunda y podamos caminar hacia la libertad interior.

El conocimiento no es Sabiduría. El conocimiento es adquirido; la sabiduría está dentro de uno mismo. El


conocimiento puede adquirirse por lecturas, conversaciones y a través de cualquier medio que facilite información;
La Sabiduría sólo es posible obtenerla en uno mismo a través del trabajo interior y la meditación. El conocimiento
es como una moneda que va de mano en mano. La Sabiduría nadie puede dárnosla. Pueden entregarnos medios,
técnicas para hacerla posible, pero la Sabiduría no es traspasable. El conocimiento no conduce a la felicidad
interior; la Sabiduría, sí. El conocimiento no reporta comprensión verdadera, ni calma profunda; la Sabiduría, sí. El
conocimiento sólo permite la comunicación superficial; la Sabiduría hace posible la comunión profunda, la
vivenciación de todos los procesos. El conocimiento reporta un saber parcial y fragmentado; la Sabiduría un saber
total. El conocimiento no modifica las estructuras internas del individuo; la Sabiduría reorganiza toda la vida
interior y permite la visión clara. La reflexión proporciona conocimiento; la meditación, Sabiduría. A través del
conocimiento es posible enterarse de las tres características básicas de la vida, pero sólo mediante la Sabiduría es
posible penetrarlas y percibirlas.

1 Texto tomado del libro "Siendo Nadie, Yendo a Ninguna Parte", de Ayya Khema, Ediciones Índigo, Barcelona, 1994 .

2 Texto tomado del libro "El Buda Viviente", de Ramiro A. Calle, Ediciones Cedel, Barcelona, 1984.

21
6. Mensaje del Ven. Ajahn Tong Sirimangalo a la Sangha mexicana

La virtud es el vehículo de la felicidad.

(SILENA SUGATIM YANTI)

La virtud es el vehículo del progreso.

(SILENA BHOGASAMPADA)

La virtud es el vehículo del Nibbana

(SILENA NIBBUTIM YANTI)

Los preceptos mantienen virtuosos a aquellos que los siguen con entendimiento.

¡Rindo homenaje al perfectamente iluminado, al Buddha!

Los saludo y mis mejores deseos a todos los discípulos budistas dedicados en México. Deseo presentar algunos
pensamientos e ideas para que sean considerados por todos los discípulos que viven en México. Estoy muy feliz y
encantado de que todos ustedes “discípulos”, hayan abierto sus mentes para recibir la bondad (beneficios- pakdi) de
las enseñanzas del Buddha, y en nombre de las tres gemas, quiero expresar mi aprecio (Anomudana) a todos
ustedes que dan la bienvenida a las enseñanzas del Buddha (el perfectamente iluminado) en sus corazones y en sus
vidas. Consideren que cuando ustedes se ayudan y favorecen a que otras personas practiquen las meditación
Vipassana basada en los cuatro fundamentos de la atención plena, esto es considerado como el tener el mas alto
respeto por las enseñanzas del Buddha. Si ustedes continúan practicando meditación, esto es considerado como un
honor a las enseñanzas del Buddha, y el camino más correcto de rendir homenaje es por medio de la práctica de
meditación. De acuerdo a las enseñanzas del Buddha, solamente hay dos formas de rendir homenaje (Puja), y estas
son: Amisa puja y Patipatti Puja.

Amisa Puja: es un arreglo con flores, incienso, velas, esencias y ofrendas y otros materiales.

Patipatti Puja: es cuando todos se juntan y organizan los retiros de meditación y cursos, y practican meditación de
vez en cuando y animan a otros a practicar meditación, este es el mejor modo de honrar al Buddha.

El Buddha practicaba meditación para enseñar un ejemplo de homenaje. Escucha Ananda: “Quien sea: monjes,
monjas, hombres y mujeres laicos que practican el Dhamma de acuerdo con el Dhamma, que practican el Dhamma
siendo dignos del Dhamma, ellos están realmente rindiendo homenaje y culto al Tathagatha”.

Esto decía El Buddha, el perfectamente iluminado. Por eso es que el Señor Buddha elogiaba tanto la práctica de
meditación y nos enseña que existe un objetivo o razón para la práctica de meditación. Y Buddha los enseñaba de
la siguiente manera: “Escuchen Monjes: Solamente existe un camino para la purificación de los seres, para
sobrepasar el pesar y la tristeza, para la liberación del dolor y sufrimiento, para realizar y alcanzar el Nibbana, es
decir, los cuatro fundamentos de la Atención Completa. “

La práctica de meditación Vipassana basada en los cuatro Satipatthana (Fundamentos de Atención Completa) es el
camino que nos lleva al más alto y mejor estado de la existencia humana. La palabra Vipassana significa ver
claramente, pero… ¿ver claramente qué? Ver claramente la impermanencia, ver que nuestras vidas son inciertas y
siempre están cambiando, ver claramente que nuestras vidas son insatisfactorias, estresantes o dolorosas, ver
claramente que nuestras vidas no nos pertenecen y que no existe un yo, que no podemos controlarnos por nosotros
mismos.

Cuando nosotros decidimos practicar las meditación podemos realizar el cambio de la naturaleza de nuestra mente
y de nuestro cuerpo, y podemos observar como las propiedades físicas y mentales cambian, y que este mundo es
incierto. Cuando nosotros podemos ver que nuestros cuerpos y mentes cambian, podemos ver que este mundo es
impermanente. Cuando nosotros conocemos el sufrimiento de nosotros mismos, también nos daremos cuenta de
22
que todas las formaciones mundanas son sufrimiento. Cuando nosotros vemos que no tenemos control de nuestro
ser y que nosotros en ultima instancia no podemos dictar un control sobre nosotros mismos, comprenderemos que
todo lo que nos rodea esta más allá de nuestro control y de nuestra voluntad. Cuando nosotros hemos realizado las
Tres Características: Impermanencia, Sufrimiento y No-ser (no control), esto es la visión Clara llamada Vipassana.

Para que Vipassana, la visión clara, surja necesitamos cultivar la atención completa (Sati) con respecto al cuerpo
(Kaya), atención completa con respecto a las sensaciones (Vedana), atención completa con respecto a la mente
(Citta) y atención completa con respecto a los objetos mentales (Dhamma). Es así como uno podrá ver el cambio o
la impermanencia, uno podrá ver el sufrimiento y uno podrá ver el no-ser o insubstancialidad.

Para realizar la impernanecia uno tiene que desarrollar la atención completa en el cuerpo, las sensaciones, la mente
y en los objetos mentales. Cuando nosotros practicamos la meditación empezamos a realizar atención completa en
la postración, después continuamos con la meditación caminado y ponemos atención al movimiento del pie derecho
y ponemos atención al movimiento del pie izquierdo, haciendo una anotación mental de-re-cha y luego haciendo
una anotación mental iz-quier-da.

Después de caminar por 10 o 15 minutos de esta manera, tomamos la postura de la meditación sentado y
conscientemente observamos la respiración, mientras se inhalan observen “el afuera o la expansión del abdomen”,
y después conscientemente al exhalar observamos, “la contracción o adentro del abdomen”. Entonces
conscientemente junto con la observación de los movimientos naturales de la respiración, “afuera como
inhalación” y “adentro como exhalación”, esto es llamado atención completa en el cuerpo.

Con la atención completa en las sensaciones, conforme continúen con la contemplación del “afuera” y el “adentro”,
ustedes podrán experimentar dolor, comezón o incomodidad y estas sensaciones desagradables son las sensaciones
de sufrimiento y uno debería conscientemente hacer la anotación mental como: “Dolor, dolor, dolor”. Cuando se
experimentan sensaciones agradables, de confort y para nada dolorosas, estas son sensaciones agradables o de
felicidad, y uno debería hacer la anotación mental diciendo: “Agradable, agradable, agradable”. Cuando se
presentan sensaciones que no son ni agradables ni desagradables, entonces son neutrales y uno debería reconocerlas
como “Neutral, neutral, neutral”. Habiendo contemplado ya las sensaciones, la mente comenzará a vagar, pensando
en el pasado o en el futuro, pensando en diferentes ideas o proyectos, pensando en la familia o en los amigos,
pensando en gente que conocemos, entonces nosotros debiéramos con atención completa hacer la anotación mental
“Pensando, pensando, pensando” no importa el tipo de pensamiento que surja. No podemos evitar que surjan
pensamientos en la mente, simplemente debemos hacer la anotación mental “Pensando, pensando, pensando”. La
atención completa en la mente, como objeto de meditación, los puede llevar a la realización de laVerdad.

La atención completa en los objetos mentales, consiste en la contemplación de los 5 impedimentos: Deseo, Enojo,
Pereza, Preocupación y Duda.

Uno debe contemplar con atención completa cualquiera de estos impedimentos en cuanto surjan: “deseando,
deseando, deseando”, “enojo, enojo, enojo,”, “sueño, sueño, sueño”, “duda, duda, duda”, después uno debería
regresar al “afuera y el adentro” manteniéndolo como el objeto principal de la meditación. Esto es el cultivo de la
introspección basado en los cuatro fundamentos de la atención completa.

La pureza surgirá en cada practicante y traerá consigo una transformación de la mente, desarrollándola y
purificándola. Con la transformación de la mente, la pena y la tristeza cesarán, y la realización de la verdad de la
vida surgirá. Así uno puede entender la verdadera naturaleza del cuerpo y la mente, realizando las 3 características:
Impermanencia, sufrimiento y no control, “uno podrá alcanzar el fin del sufrimiento”.

Uno puede “alcanzar el fin del sufrimiento” de tres maneras: El primero es a través del camino de la
Impermanencia, el segundo por el camino del sufrimiento y el tercero por el camino del “no-control” o la
insubstancialidad. Algunos practicantes tendrán una realización más clara de la impermanencia, otros la tendrán
más clara del sufrimiento y otros más a través de la insubstancialidad. Estos son los caminos para alcanzar el fin del
sufrimiento, que es el objetivo de la práctica, el Amata Dhamma, la verdad inmortal, el objetivo de Buddha, para
23
que todos los seres se liberen del sufrimiento. La realización del fin del sufrimiento es el propósito de las
enseñanzas de Buddha y la razón por la cual ustedes practican meditación.

Las enseñanzas de Buddha son innumerables, pero todas convergen en la verdad de liberación, tal como los
océanos que son inmensos e imposibles de medir, donde todas sus aguas llevan el mismo sabor salado. Todas las
numerosas enseñanzas de Buddha tienen el propósito de liberarnos de todo aquello que nos causa sufrimiento: del
nacimiento, del envejecimiento, de la enfermedad y la muerte, las cuales eventualmente llegarán a su fin y cesaran
y entonces el fin del sufrimiento se realizará a través de la practica y uno experimentará el estado sublime de dicha
(Nibbana).

Esta es la intención y meta de la práctica de la meditación, que todos ustedes puedan consolidarse en los 4
fundamentos de la atención completa contemplando el cuerpo, las sensaciones, la mente y los objetos mentales y
que entonces los estados especiales del Dhamma surjan comenzando con Nama Rupa Paricchedayana,
Paccayaparigghayana, Sammasannayana, Uddhayabhayayana, Bhanghayana, Bhayayana, Adhiavayana,
Nibbhidhayana, Munchitu-Kammayatayana, Patisankayana, Sankharupekkhayana y Anulomayana, Gotrabuyana,
Maggayana, Phalayana, Paccavekkhayana, en sus últimos estados. Para cada uno de los practicantes los estados de
conocimiento surgirán en un estado tan alto que los llevarán a la cima del conocimiento del camino, la fruición y la
reflexión final.

Por esta razón es que les pido que hagan la resolución de corazón de continuar con las practica de la meditación y
que puedan desarrollar el deseo ardiente de practicar y deleitarse con la práctica, sin dejarla de lado y mantengan en
sus mentes su intención clara de llevar la práctica de manera activa . Entonces la sabiduría de la introspección
surgirá y aquellos que llamamos Bhavanamayapanna o Sabiduría proveniente del desarrollo de la mente, surgirá de
acuerdo al propósito de Buddha.

Que cada uno de ustedes realice la felicidad y bienaventuranza del Dhamma a través del éxito en su práctica de
meditación.

¡Sadhu, Sadhu, Sadhu!

24

También podría gustarte