Valadez R y col.

Perros, maíz, el México prehispánico

ARTÍCULO DE REVISIÓN AMMVEPE
AMMVEPE
Vol. 2005; 16(2):
16, No. 63-70
2 • Marzo-Abril 2005
63
pp 63-70

Perros, maíz, el México prehispánico

Dogs, corn and the pre-Hispanic Mexico

Raúl Valadez,* Alicia Blanco**

RESUMEN ABSTRACT

El estudio de documentos etnohistóricos e iconográficos del México precolombino
indica que la civilización mesoamericana vinculaba al perro con el agua y el ciclo
agrícola. La comparación del ciclo reproductivo del perro, el pluvial y el del cultivo del
maíz, para el centro y sur de México, demuestran que esta asociación parte
del sobrelapamiento de los tres ciclos, llevando a un esquema en el cual los
diferentes momentos de la reproducción del perro se relacionaban con momentos
clave dentro del esquema de lluvias y la labor agrícola; así, el primer momento de
celo (febrero-marzo) coincidía con el momento de preparar la tierra, la gestación
(marzo-mayo) con la época de siembra del maíz, y los tiempos de crianza (mediados
de julio, inicios de diciembre) con fiestas posteriores al periodo de siembra y cosecha
del maíz.
The study of etnohistoric and iconographic documents of the pre-Colombian Mexico
indicates that the Mesoamerican civilization linked the dog with the water and the
agricultural cycle. The comparison of the reproductive cycle of the dog, the rain and
the cultivation of the corn, for the center and south of Mexico, shows that this
association starts from the overlapment of the three cycles, leading to a plan in
which the different moments of the reproduction of the dog related to key moments
inside the plan of rains and the agricultural work; thus, the moment to prepare
the land, the heat (February-March), the gestation (March-May) with the epoch of
sows of the corn, and the times of breeding (the middle of July, starts of December)
with subsequent festivals at period of sows and harvests of the corn.

Palabras clave: Perros prehispánicos, ciclo reproductivo, maíz, Mesoamérica, Key words: Pre-Hispanic dogs, reproductive cycle, corn, Mesoamerica, pre-Hispa-
México prehispánico. nic Mexico.

INTRODUCCIÓN Para todos aquellos interesados en el Sin duda una de estas asociaciones re-
tema del perro y la civilización mesoameri- ligiosas poco entendibles sería la que unía
“Cuando había falta de agua y hacía cana es fácil encontrar datos y comenta- al perro con la lluvia, tales como el relato
grande seca y no llovía, hacían grandes rios relacionados con el uso de este animal anterior nos permiten ver que realmente
procesiones y ayunos y penitencias, y sa- dentro de actividades religiosas:2 era ani- había un aspecto simbólico que relaciona-
caban en procesión gran cantidad de pe- mal de sacrificio en diversos ritos, su carne ba a este animal con dicho elemento y, aun-
rros pelones, que son de su naturaleza se utilizaba en la elaboración de guisos que que la información disponible no es tan
pelados sin ningún género de pelo, de los se comían en fiestas, se empleaba como común e impactante como la que le asocia
cuales había antiguamente en su gentili- ofrenda en eventos funerarios e incluso con la muerte, es lo bastante clara como
dad muchos que los tenían para comer, y aparece en la iconografía relacionado con para ser motivo de una investigación cien-
los comían. Yo tengo al presente casta de dioses o el calendario. tífica.
ellos que son por cierto muy extraños y Dentro de todo el universo de asocia-
muy de ver, y de éste género de perros ciones que podemos establecer, hay algu- OBJETIVOS
como referido tenemos, sacaban en pro- nas que son bastante lógicas para quienes
cesión y andas muy adornadas, y los fuimos educados dentro del pensamiento El estudio que se realizó alrededor de este
llevaban a sacrificar al templo que les te- occidental, por ejemplo ser compañero de tema tuvo los siguientes objetivos:
nían dedicado que lo llaman Xoloteupan; difuntos, pero, asimismo, hay otras con las
y llegados ahí los sacrificaban, y les sa- cuales su relación nos parece mucho me- 1. Comparar el ciclo de lluvias anual que
caban los corazones y los ofrecían al dios nos clara, aunque la existencia de informa- se da en el centro y sur de México (área
de las aguas (...) y después de muertos los ción nos obliga a considerar que dichos en la cual estaba incluido el territorio
perros se los comían”.1 vínculos realmente existieron. conocido como Mesoamérica) con la
biología del perro.
2. Reconocer hasta dónde el punto ante-
* Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM. Circuito Exterior, C. U. Delegación Coyoacán.
C.P. 04510. México, D.F. rior pudo dar pie a que la gente del Méxi-
** Sección de Biología, Dirección de Salvamento Arqueológico del INAH. co antiguo asociara al perro con la lluvia
Sobretiros: Dr. Raúl Valadez y con actividades humanas ligadas a
Puente de Tecamachalco 17. C.P. 39300. Naucalpan de Juárez, Estado de México. ésta, principalmente la agricultura.
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3. Comparar los resultados obtenidos con
la información etnohistórica y arqueo-
lógica disponible.
METODOLOGÍA
Un aspecto que se buscó enfatizar en este
estudio es, primero, analizar todos los da-
tos relativos a los fenómenos naturales
considerados: biología del perro, ciclo
anual de lluvias; después se revisó la in-
formación de actividades humanas involu-
cradas con la lluvia, sobre todo la agricul-
tura y, finalmente, la relacionada con la
religión mesoamericana.
Es importante considerar esto porque,
en estudios donde se manejan simultá-
neamente datos biológicos y arqueoló-
gicos o etnohistóricos, es normal que se
tome la información antropológica como
irrefutable y el resto sólo se emplee para
darle más fundamento. En este caso se
decidió trabajar en sentido opuesto, es
decir, reconocer primero si existían ba-
ses reales y concretas que permitieran
enlazar al perro con la lluvia y, después,
complementar la imagen creada con la
información restante.
Las fases incluidas dentro de la investi-
gación fueron:
1. Distinguir fases de la biología del perro
que se mueven de forma estacional, lo
cual derivó en el análisis del ciclo re-
productivo.
2. Reconocer la forma en como se mueve
el ciclo anual de lluvia en México.3,4
3. Examinar la forma en que funcionan los
ciclos agrícolas tradicionales en el cen-
tro y sur de México.5,6
4. Integrar la información relacionada con
estos tres rubros.
5. Comparar los resultados con la infor-
mación de las fuentes históricas y con
datos arqueológicos e iconográficos.
6. Si era adecuado, construir un modelo
que sustentara la asociación observa-
da.
El ciclo anual de lluvias en México
Todo mexicano sabe que en el país existen
periodos de intensas lluvias y de sequía
que se mueven de forma regular a lo largo
del año. Aunque en el sur y sureste la llu-
via se da de manera casi continua durante
los doce meses, y en el Norte apenas se
limita a unas pocas semanas o días, en todo
el país, salvo una pequeña esquina en el
noroeste de Baja California Norte, se pre-
senta una temporada de lluvias que se ma-
nifiesta fundamentalmente de mayo a oc-
tubre, y otra de sequía en la otra mitad del
año (Figura 1A). La cantidad de lluvia por
región varía enormemente, desde menos
de 500 milímetros al año en sitios como el
valle de Tehuacán, hasta casi 5,000 en cier-
tas partes de Chiapas, pero invariablemen-
te habrá un tiempo de lluvia más evidente
concentrado en el verano y otro más seco,
que se observa con más claridad en diciem-
bre, enero y febrero.3
Un dato que puede parecer superfluo,
pero que vale destacar, es que este esque-
ma pluvial no es algo normal en todos los
continentes. Los vientos húmedos, las tor-
mentas tropicales, las masas de aire frío,
los vientos secos, los vientos fríos o los
cálidos, todos ellos influyen en el compor-
tamiento de las lluvias al interior de cada
porción de tierra firme,4 por lo que la ima-
gen mostrada, aunque no es exclusiva de
México, tampoco es general en el resto del
mundo.

El ciclo reproductivo del perro

A. Régimen pluvial en centro y sur del territorio mexicano.

Alta 120 Las actividades relacionadas con la repro-

ducción del perro son, indudablemente, las
100 que más ligadas se encuentran con las cir-
cunstancias ambientales y, por lo tanto, las
Cantidad de lluvia

80
que consideramos como las más viables a
interactuar con cambios estacionales. Nu-
60
merosas son las citas que describen el ci-
40 clo reproductivo del perro como un proce-
so determinado por factores ambientales,
20 principalmente el fotoperiodo, aunque la
temperatura ambiente y la condición nutri-
Baja 0 cional tienen un peso que debe conside-
E F M A M J J A S O N D E F rarse.
Meses
B. Ciclo reproductivo del perro en México. Al margen de cuanto varíe este pro-
ceso en las diversas partes del mundo,
Fase del ciclo Primer periodo Segundo periodo dentro de territorio mexicano, sobre todo
en la provincia, este ciclo se manifiesta
Celo Mediados de febrero-inicios de abril Mediados de agosto-inicios de octubre de la siguiente forma (Figura 1B): en el
Gestación Final de febrero-inicios de junio Final de agosto-inicios de diciembre primer periodo reproductivo se inicia la
Nacimiento Límite abril-mayo–inicios de junio Límite octubre-noviembre-inicios de diciembre época de celo, a mediados de febrero y
Lactancia Final de abril–mediados de julio Final de octubre–mediados de enero
continúa hasta inicios de abril, puede ha-
ber hembras gestantes desde finales de
Figura 1. Ciclo anual de lluvia (A) y reproductivo de Canis familiaris (B) en el centro y sur de México. febrero y continuar hasta inicios de ju-
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nio y, por último, cachorros lactantes se
ven desde inicios de mayo hasta media-
dos de julio. El segundo periodo repro-
ductivo empieza a mediados de agosto y
concluye a mediados de enero. Cierta-
mente y a pesar de los amplios periodos
considerados, es obvio que este cálculo
no es 100% exacto, pero incluye a la in-
mensa mayoría de los perros que uno
encuentra en el país.
El ciclo agrícola
Al momento de ver de qué forma se aco-
moda en México el ciclo agrícola con la
lluvia, rápidamente pudimos constatar que
el cultivo del maíz es el más dependiente
del régimen pluvial, aspecto que nos pare-
ció sumamente relevante si consideramos
la enorme dependencia alimenticia y cultu-
ral que han tenido todos los pobladores de
México a este cereal. En obras recapitulati-
vas,5,6 en las cuales se muestran las tradi-
ciones agrícolas del México rural (Cuadro 1),

Cuadro 1. Fases del cultivo del maíz en 30 localidades de México.5,6 El tiempo de inicio de la siembra depende de las características ambientales de cada sitio, pues
depende fuertemente del momento en el cual se iniciarán las lluvias. La cosecha se da cinco a siete meses después, cuando las lluvias concluyeron y la mazorca se
ha secado.

Sitio Tiempo de siembra Tiempo de cosecha

CHIHUAHUA
Sierra Tarahumara Marzo Octubre-noviembre
DURANGO
San Bernardino de Milpillas Junio Noviembre-diciembre
GUANAJUATO
Maravatío Abril-junio Noviembre-diciembre
ESTADO DE MEXICO
San Miguel del Progreso Desde el 10 de marzo y en abril Noviembre-diciembre
El Carmen Ocotepec Marzo-abril Octubre-diciembre
San Felipe del Progreso Marzo-abril Septiembre-mediados noviembre
Ixtlahuaca Marzo-abril Octubre-diciembre
MORELOS
Jumiltepec (zona fría) Inicios de abril Enero
Jumiltepec (zona cálida) Después de abril Enero
MICHOACÁN
San Diego Curucupatzeo Desde el 15 de mayo y en junio Enero
GUERRERO
Chilapan A partir del 10 de junio Noviembre
OAXACA
Mixteca Baja mayo y hasta mediados de junio Noviembre
Villa Alta Desde abril, más en mayo y junio Septiembre-octubre
Yojovi Desde febrero y hasta junio Noviembre
Ixpantepec Mayo Diciembre
Tamazulapan (zona alta) Desde febrero Diciembre-enero
Tamazulapan (zona media) Marzo-abril Noviembre
Tamazulapan (zona baja) Mayo Noviembre
San Pedro Ixcatlán Final de abril Septiembre-octubre
VERACRUZ
Cacahuatengo A partir del 15 de mayo Noviembre
Papantla A partir del 15 de mayo Octubre-noviembre
Zongolica A partir del 15 de mayo Septiembre-noviembre
SAN LUIS POTOSÍ
Huasteca (1) Marzo y abril Julio
Huasteca (2) Junio-julio Octubre
YUCATÁN
Chacsinkin Mayo e inicios de junio Enero-marzo
Mucel Mayo Enero-febrero
Tixmehuac Junio Febrero
CHIAPAS
Oxchuc (zona fría) Febrero-marzo Octubre-noviembre
Oxchuc (zona cálida) Mayo-junio Octubre-noviembre
Ejido Sonora Desde febrero hasta abril Septiembre-octubre
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es posible reconocer cómo la fase de siem- junto con el maíz, pero se coseche tres das van apareciendo una tras otra, el es-
bra se da poco antes de que empiece la meses después. fuerzo dedicado a la siembra del maíz está
temporada de lluvia, a veces desde febrero en su punto máximo. En la otra mitad del
en ciertas zonas de Oaxaca, y termina has- RESULTADOS año las fases de celo y gestación ocurren
ta junio, justo en el momento en el que las al tiempo en que la cosecha del maíz va en
aguas ya están presentes. Como podemos ver en la figura 2, la rela- aumento y las camadas llegan justo cuan-
El tiempo que tarda la planta en crecer y ción entre régimen pluvial y ciclo de culti- do los costales de mazorcas recién corta-
dar fruto varía en función de la zona y la vo del maíz es sumamente clara, pues la das son parte usual del paisaje.
raza del maíz, pero en varias regiones, por primera parte (siembra) se realiza poco an- Por último, durante el tiempo en que no
ejemplo el centro de México, la siembra se tes del inicio de la temporada de lluvias y la hay actividad sexual o de crianza, tenemos,
da en abril, y cinco meses después, en sep- segunda (cosecha) entre seis y nueve me- en un caso (julio-agosto), las lluvias en su
tiembre, en plena temporada de lluvia, ya ses después, cuando el inicio de la tempo- pleno apogeo y la gente rezando para que
están los maizales llenos de elotes tiernos. rada de sequía empieza a manifestarse. éstas les sean propicias, y en el otro mo-
En este momento se realiza un primer pe- Los elementos ambientales que deter- mento (enero-febrero) no hay lluvias, la tie-
riodo de cosecha y unas semanas después, minan el inicio del ciclo reproductivo en el rra está descansando y la gente dedicada
a partir de finales de octubre, la segunda, perro no están ligados con la llegada de la a otras labores.
durante la cual lo que se busca es la mazorca lluvia; sin embargo, al compararlo con los
ya seca. Este segundo periodo de labor se otros dos es notoria la forma como se so- ANÁLISIS
realiza cuando las lluvias han concluido y brelapan (Figura 2); el primer periodo re-
puede prolongarse hasta diciembre o ini- productivo abarca todo el tiempo de siem- Aunque en un principio no existiría razón
cios de enero. bra, por tanto es el periodo previo al inicio para ver relación directa entre cultivo del
Todos los mexicanos sabemos que en de la temporada de lluvia, mientras que el maíz y perros, de hecho es fácil ver a los
los maizales se cultivan otras muchas plan- segundo periodo se realiza cuando se lle- dos procesos como entrelazados, pues año
tas, por ejemplo frijol, calabaza, jitomate, van a cabo las actividades de cosecha y el con año podemos ver la conducta de pe-
chile,6 pero los momentos de siembra va- agua va retirándose del territorio. rros, la siembra y cosecha del maíz y las
rían y, además, el desarrollo de estas plan- De manera más puntual podemos cons- lluvias dentro de un ritmo melodioso, don-
tas es mucho más rápido que el del maíz y tatar que el tiempo de preparación de la de cada uno tiene su momento de entrada,
diferente en sus requerimientos de agua, tierra y los primeros momentos de siembra su espacio y su cierre.
circunstancias que llevan a casos como que son coincidentes con las jaurías de perros Si este esquema es ya de por sí intere-
haya dos o tres cosechas de frijol dentro en celo y, posteriormente, con las hembras sante, lo es más si recordamos que se trata
de un mismo año o que se siembre el chile gestantes aquí o allá, y cuando las cama- de un evento que no funcionaría de la mis-
ma forma si alguna de sus partes fuera sus-
Alta
16 120 Figura 2. Comporta- tituida por otra.
miento del ciclo repro- Sabemos que en tiempos prehispánicos
14
100 ductivo de Canis fami- la gente tenía también al guajolote como
12
liaris y comparación animal doméstico, pero la reproducción de
con la labor agrícola y esta ave se da de forma continua, o sea
Intensidad de actividad agrícola

80
10 el ciclo de la lluvia. Las que no está sujeta a tiempos fijos a lo largo
Abundancia de lluvia

diferentes fases del pri- del año y, por lo tanto, es imposible ubicar-
8 60 mer periodo coinciden
lo dentro de un ritmo que se sincronice
con el inicio de las llu-
6
vias, sobrelapándose el
con la lluvia y el cultivo del maíz.
40
momento de crianza Por otro lado, otras plantas cultivadas,
4
con el final del tiempo como en mencionadas líneas atrás, tampo-
20
2 de siembra. La segun- co tienen ciclos de crecimiento tan depen-
da fase comprende la dientes de las lluvias y, por consiguiente,
Baja parte final del periodo
0 0 no hay forma de ver alguna interacción con
E F M A M J J A S O N D E F
de lluvia y, en este la reproducción de perros.
a a a a a a a a a a a a a a a a
a a a a a a a a a a a a a a a
a a a a a a a a a a a a a a a a
a a a a a a a a a a a a a a a
caso, el periodo de cui- Por último, en las regiones aledañas a
a a a a a a a a a a a a a a a a a

dado de las camadas

a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a
a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a a
a a a a a a a a a a a a a a a a

Mesoamérica, el esquema pluvial con llu-

Clave:
a a a a a a a a a a a a a
a a a a a a a a a a a a a
a a a a a a a a a a a a a
a a a a a a a a a a a a a
a a a a a a a a a a a a a
aaaaaaaaa aaaaaaaaa se ubica justo en el
aaaaaaaaa aaaaaaaaa vias en verano no es tan claro ni tan regu-
momento en que las llu-
vias cesan y se inicia lar, ya que en el Norte las lluvias son un
la cosecha del maíz en la evento más bien aislado y en el Sur se dan
Ciclo anual de lluvia
Fase de celo aa aaaaaaa
aaaaaaaaa Periodo de nacimiento Trabajo de cosecha mayor parte de Méxi- de manera casi continua a lo largo de los
Fase de gestación Periodo de crianza Trabajo de siembra co. doce meses, por lo que la conclusión obli-

gada es que sólo en el centro y sur de
México, donde se ubicó la mayor parte del
territorio mesoamericano, podemos ver
enlazados lluvias, perros y maíz en este
baile de tres.
INTERPRETACIÓN
Frente a tal panorama es fácil llegar a la
imagen en la cual el individuo prehispáni-
co veía esta relación con un nivel de inte-
rés y reflexión tan grande como se daría
con los ciclos astrales: “los perros están
en celo, esto indica que la lluvia aún tarda-
rá un poco, yo debo empezar a preparar la
tierra”, “las perras están dando a luz, hay
que iniciar la siembra de maíz para que el
campo esté listo cuando lleguen las
aguas”, “las perras están cargadas, las llu-
vias pronto se irán”.
Pero si esto no bastara para mantener a
la gente atenta a la reproducción del perro,
no dejemos a un lado el hecho de que cuan-
do el tiempo de siembra de maíz concluía y
la gente se daba un momento de reposo
(pidiendo simultáneamente a los dioses el
favor de la lluvia), a un lado de las casas
estaría una camada de perritos viables a
ser utilizados de alguna forma, y medio año
después la gente tendría disponibles de
manera simultánea el maíz de la cosecha y
a las crías de la nueva camada.
Para el hombre mesoamericano el culti-
vo del maíz era la base de su existencia,5 la
civilización mesoamericana dependía de
esta planta y, considerando la fuerte de-
pendencia al ciclo de lluvias, es fácil en-
tender la expectativa creada año tras año
respecto con su cultivo, así como la místi-
ca que existía a su alrededor.
La situación respecto con el perro no
sería muy diferente. Para el hombre prehis-
pánico este animal era su compañero per-
manente, fuertemente ligado a su vida dia-
ria y a su esquema de subsistencia. Por si
esto fuera poco, también estaba relaciona-
do con dos de los factores que determina-
ban la existencia de esta gente: la lluvia y el
maíz. Camadas de perros, cuando la siem-
bra concluye; camadas de perros, cuando
la cosecha termina. Tan clara y obvia sería
esta relación que no en balde podemos ver
representaciones iconográficas en las cua-
les están los dos elementos unidos (Figu-
Valadez R y col. Perros, maíz, el México prehispánico
Figura 3. Figura de perro en el códice Dresdensis,8
en el cual es interpretado como el animal que des-
ciende del cielo portando un tocado del dios del maíz,
como “el que trae el fruto del maíz” o el “dios del
maíz que desciende del cielo”.9
ra 3), así como datos que sugieren que el
perro era símbolo de la fertilidad (tanto la
propia como la de la tierra) y de la buena
fortuna.7
DISCUSIÓN
Elementos iconográficos que
asocian al perro con la lluvia y el maíz
Además de casos como la imagen de la
figura 3, hay otros en los cuales algunos
etnohistoriadores han llegado a ver esta re-
lación, por ejemplo Edward Seler, estudioso
alemán quien se interesó enormemente por
la iconografía mesoamericana en la primera
mitad del siglo XX, menciona en una de sus
obras8 que en los códices mayas9 se llega a
ver al perro asociado con Chac, el dios de la
lluvia, con el rayo y el maíz.
Restos arqueozoológicos
Aunque son numerosos los restos de pe-
rros depositados como entierros, no son
muchos los casos donde se pueda ver la
asociación con el maíz. En el sitio de Santa
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Cruz Atizapán, en el sureste del valle de
Toluca,10 se descubrió un entierro de perro
perteneciente a la segunda mitad del pri-
mer milenio de nuestra era, y como parte de
la ofrenda asociada apareció cerámica, líti-
ca y restos de maíz.
Fuentes históricas
Además del relato de Diego Muñoz Ca-
margo, hay otros en los cuales vemos la
relación perro-lluvia de forma clara; por
ejemplo en el área maya, de acuerdo con
Landa,11 en el mes de Muan (abril) los cul-
tivadores de cacahoa (cacao) sacrificaban
a un perro manchado, esto último para igua-
lar el color de este fruto, y en el mes de Pax
(mayo) sacrificaban un perro, le sacaban el
corazón y lo enviaban “al demonio entre
dos platos”, todo esto dentro de una fiesta
cuyo fin era que “el año fuese próspero de
mantenimientos”.
Otros casos de interés para el presente
estudio son las fiestas anuales que diver-
sos pueblos realizaban a mediados de ju-
lio, justo cuando las labores de siembra
concluían.
En el área maya existían fiestas en la pri-
mera mitad de julio que incluían el uso de
perros;11 así, en el capítulo “Fiestas de los
días aciagos-los sacrificios del principio del
año nuevo”, menciona que en ciertos años
(años de la letra Kan) “...mandábanles, pues,
hiciesen un ídolo que llaman Yzanakauil y
que le pusiesen en su templo [...] y que le
sacrificasen un perro o un hombre [...] ha-
cían en el patio del templo un gran mon-
tón de piedras y ponían al hombre o perro
que habían de sacrificar en alguna cosa
más alta que él, y echando atado al pa-
ciente de lo alto de las piedras, le arreba-
taban aquellos oficiales y con gran preste-
za le arrancaban el corazón...”.
Por otro lado, en el capítulo de sacrifi-
cios del año nuevo de la letra Muluc “Baile
de los zancos. Danzas de las viejas con
perros de barro” indica que entre los mu-
chos servicios que habían de pedir en el
año nuevo estaba: “...remedio para las
miserias que aquel año tenían, las cuales
eran tener poca agua y echar los maíces
muchos hijos y cosas de esta manera...”. Y
durante la fiesta en la cual se pedía el fa-
vor: “...habían de ofrecerle (también) pe-
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del 12 al 31 de julio en el caso de la fiesta de veinte o cuarenta (...) La carne de estos

Tlaxochimaco. perrillos iba entrepuesta con la carne de
Estudios recientes13,14 han mostrado que las gallinas; cuando daban la comida
las fechas proporcionadas no correspon- ponían debajo la carne de los perrillos y
den a las del calendario que empleamos en encima la carne de las gallinas, para ha-
el presente, debido a que la obra de Saha- cer bulto...”
gún se realizó en la primera mitad del siglo Como puede verse, en estas fiestas anua-
XVI, época en la cual el Occidente se regía les tenemos el uso intenso de perros, y
por el calendario Juliano, y a partir de 1582 aunque no todas tienen por motivo la llu-
se empezó a utilizar el Gregoriano, lo cual via (las fiestas mexicas mencionadas se re-
exigió en un momento dado recorrer 10 días lacionaban con la guerra), es importante
las fechas, operación realizada del 5 al 14 analizarlas.
de octubre de 1582; así, el dato de Saha- Las fiestas de inicio del año y la de
Figura 4. Cría de perro descubierta en el sitio de
gún de que la noche anterior a la fiesta de Tlaxochimaco eran fiestas fijas que se rea-
Chac Mool, en Punta Pájaros, Quintana Roo.14 La inicio del mes se mataban perritos, no co- lizaban a mediados de julio, donde se em-
colección incluyó un total de 37 individuos que apa- rrespondería al día 12, como él señala, sino pleaban perros de manera abundante, jus-
recieron enterrados en la plaza principal, y dos ter- al 22 de julio. to cuando las labores agrícolas han
cios de ellos tenían menos de un año de vida cuando Por último, tenemos la fiesta de Pan- concluido y la temporada de lluvia ya ha
murieron, lo cual permitió determinar que se les uti- quetzaliztli, también dedicado a la guerra, empezado.
lizó dentro de un evento realizado a mediados de durante la cual se hacía uso extenso En la segunda fiesta mexica, Panque-
julio, durante las fiestas de año nuevo de la letra de perritos.7 Esta fiesta se realizaba del 19 de tzaliztli, se enfatiza la idea de emplear gran
Muluc que se realizaban en el área maya.
noviembre al 8 de diciembre13,14 y según cantidad de perritos, entre veinte y cua-
relató, en los últimos cuatro días del mes renta por cada mercader que hacía su fies-
rros hechos de barro con pan en las es- los mercaderes llevaban a cabo sacrificios ta y, curiosamente, estas comidas se lleva-
palda, y las viejas habían de bailar con masivos de esclavos y además ofrecían ban a cabo a inicios de diciembre, cuando
ellos en las manos y sacrífícanle un perri- enormes y abundantes comidas para las las lluvias ya terminaron, así como el tiem-
to que tuviera las espaldas negras y fuera cuales: “...también se proveía de las galli- po de cosecha.
virgen, y los devotos habían de derramar nas, hasta ciento u ochenta; también se Pero aún hay más. Las fiestas de media-
su sangre y untar con ella la piedra del proveían de perrillos para comer, hasta dos de julio se realizaban cuando recién
demonio Chacacantún...”
En años pasados, los autores tuvieron
la oportunidad de estudiar una colección Ciclo Ciclo Régimen
Meses Actividades
reproductivo del del cultivo pluvial
de perros descubierta en el sitio de Chac humanas del maíz
perro
Mool, en Punta Pájaros, Quintana Roo,12
Febrero
la cual, se concluyó, podía corresponder a Celo
Barbecho
uno de los eventos de año nuevo de la Marzo
letra Muluc. En total se identificaron 37 Gestación Sacrificios para
Abril
individuos, 60% de ellos con menos de un pedir buen año
Siembra
año de edad (Figura 4). Mayo
Otra festividad en la cual se involucra- Sacrificios para pedir
Crianza Plántulas
Junio fin de sequías
ba a los perros la encontramos en la cultu- de maíz
Fiestas de año nuevo,
ra Mexica. Sahagún menciona que en el mes Julio
de Tlaxochimaco Floración
Tlaxochimaco, el cual se celebraba del 12
Agosto
al 31 de julio:7 “El primero día de este mes Celo
hacían fiesta a honra del dios de la gue- Cosecha de Aparición
Septiembre
elote tierno de frutos
rra, llamado Huitzilopochtli; ofrecíanle Gestación
en ella las primeras flores de aquel Octubre
año...La noche antes de esta fiesta ocupá- Noviembre Cosecha
banse todos en matar gallinas y perros Crianza Fiesta de
para comer, en hacer tamales y otras co- Diciembre
Panquetzaliztli
sas concernientes a la comida...”. Tanto Enero
en ésta como en las restantes fiestas mexi-
cas que Sahagún cita, también señala el Figura 5. Actividades humanas rituales y agrícolas relacionadas con los ciclos anuales de lluvia, del maíz y
día de inicio y el del término de cada una, de la reproducción del perro.

había concluido el periodo de crianza del
primer ciclo reproductivo del perro, y la
de Panquetzaliztli cuando la temporada de
crianza del segundo periodo reproductivo
estaba en su apogeo (Figuras 2 y 5). Lle-
var a cabo grandes comidas o ceremonias,
en las cuales se hacía un uso intenso de
perros, es por demás lógico pues había crías
disponibles en todas partes, era el momen-
to en el cual la gente podía aprovechar este
recurso (alimentarse con una parte de las
crías) y, aunque no sepamos si era parte o
no del pensamiento de la gente, era el tiem-
po exacto para controlar las poblaciones
de perros, pues dejar que las camadas se
conservaran íntegras era correr el riesgo
de que aumentara el número de ejempla-
res, de tal forma que fácilmente podían cons-
tituirse en una plaga, pues estas personas
no podrían cuidar a tantos animales, y aque-
llos que se quedaran sin hogar se conver-
tirían en animales ferales, alimentándose de
cultivos y de los recursos del monte, y con
ello poco a poco entrarían en conflicto
con la gente.
Otro aspecto que podemos derivar de
esta imagen se relaciona con la idea que
tenemos acerca de qué perros se utiliza-
ban en la alimentación. Todos los intere-
sados en el tema han escuchado alguna
vez la idea de que esta gente cebaba pe-
rritos para comerlos, incluso hasta se ha
llegado a suponer que sólo las crías eran
empleadas con este fin. Los restos arqueo-
zoológicos rechazan por completo esta
idea,2 pero aún así queda la duda de cómo
se creó esta imagen y una posible respues-
ta es que las narraciones de los cronistas
españoles, relacionadas con el consumo
de crías de perros, se correspondan bási-
camente con momentos en los cuales se
llevaban a cabo estas fiestas y se hacía
un uso extenso de las crías como alimen-
to.
Por último, en diversas ocasiones los
autores hemos conversado acerca de has-
ta donde existieron en tiempos prehispáni-
cos prácticas zootécnicas relacionadas con
los perros, es decir, trabajos de selección
de ejemplares con el objetivo de crear lí-
neas donde se destacaran tales o cuales
características.15 Aunque las evidencias
arqueozoológicas ofrecen una imagen muy
limitada al respecto, la reconstrucción he-
Valadez R y col. Perros, maíz, el México prehispánico
cha nos permite ver los banquetes y sacri-
ficios realizados en las épocas de crianza
como los momentos en que las personas
necesariamente realizaban un proceso de
selección, pues así como algunas de las
crías serían utilizadas como alimento o sa-
crificio, habría otras que se dejarían para
futuros eventos religiosos o para trabajo
doméstico, aquellas que se cuidarían más
tiempo y que muy probablemente eran las
que aparecen en los comentarios relacio-
nados con los tianguis de perros que exis-
tían en tiempos prehispánicos.16
CONCLUSIONES
El estudio del papel que jugó el perro en
el interior del México antiguo exige no
sólo acumular evidencias o afirmacio-
nes a favor de la importancia que tuvo,
sino de manera especial el desarrollo de
investigaciones cuyo objetivo es reco-
nocer las bases naturales a partir de las
cuales se derivó tal o cual asociación,
que posteriormente concluyó en un nexo
religioso. En este momento la interdisci-
plina es la mejor herramienta disponible
para cubrir este propósito dentro de un
marco científico, pues las limitaciones
que impone el estudio de elementos an-
tiguos (los cuales no pueden ser estu-
diados bajo un esquema experimental)
son contrarrestadas por la visión multi-
dimensional que se deriva al analizar un
evento histórico bajo diversos puntos
de vista.
Los resultados de este estudio interdis-
ciplinario demuestran que la imagen pro-
porcionada por las fuentes históricas, acer-
ca de que el perro era visto como símbolo
de la lluvia y asociado al cultivo del maíz,
derivó del sobrelapamiento que se da en el
centro y sur de México del ciclo reproduc-
tivo de Canis familiaris, el régimen pluvial
y el cultivo del maíz, fenómeno que para
esta gente dio lugar a una asociación rele-
vante y primordial que, posteriormente,
concluyó en un vínculo religioso.
La forma en cómo cada fase de la repro-
ducción del perro se ajusta a los periodos
de sequía y lluvia, los de preparación de la
tierra y los de la siembra y cosecha de esta
planta, fueron elementos que lo vincula-
ron de modo decisivo con su empleo den-
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AMMVEPE 2005; 16(2): 63-70
tro de ritos relacionados con la lluvia, con
la solicitud de buena fortuna, con el es-
fuerzo agrícola y la fertilidad.
La evidencia mostrada indica que esta
asociación no se limitó a eventos relacio-
nados estrictamente con la lluvia o el maíz,
pues además existieron diversas fiestas en
donde se empleaban perros de forma abun-
dante, circunstancia que se relacionaba con
el momento en que las hembras de edad
reproductiva tenían sus camadas y el nú-
mero de crías era suficientemente grande
para ser visto como un recurso viable a
utilizarse.
Aunque parece demasiado aventurado
pretender unir algo como el ciclo del maíz,
zootecnia canina, control de poblaciones,
fiestas anuales y régimen pluvial, la recons-
trucción realizada permite, como gota de
agua que cae del cielo, unir todos estos
elementos dentro de un modelo en el cual
comportamiento climático, humano, agrí-
cola y canino se enlazan y funcionan con
una sincronía sorprendente.
No perdamos de vista que los ejemplos
mostrados aprovechan los elementos et-
nohistóricos provenientes de circunstan-
cias culturales muy específicas: pueblos
mayas de la península de Yucatán y cultu-
ra Mexica en el centro de México, pero tam-
poco olvidemos que la civilización
mesoamericana tenía bases comunes y, por
tanto, el reto es ver en qué medida este
esquema existió en otros tiempos o cultu-
ras, con el fin de ubicar más y mejor el pa-
pel del perro en el México antiguo.
AGRADECIMIENTOS
A la Maestra Diana Martínez y a la Dra.
Cristina Adriano, por su apoyo y comenta-
rios respecto del cultivo del maíz en el
México rural y prehispánico.
Fotografía de figura 3 de Rafael Reyes.
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