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15/02/2024

Profesora: María del Rosario Acevedo Martínez.

Gabriela Castillo Pérez

Ciencias de la Educación

8° Cuatrimestre
Programa Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las
Personas con Discapacidad 2014-2018

Dicho decreto tiene como objetivo asegurar un entorno social equitativo e


incluyente, para que las personas con discapacidad puedan ejercer sus derechos.
Mediante este se pretende contribuir a su desarrollo integral, por medio de acciones
que promuevan sus derechos, el establecimiento de espacios para el facil acceso
de las personas con discapacidad, destinando recursos en distintos organismos
gubernamentales, de la mano de organismos internacionales y nacionales que vean
por los derechos humanos, con el fin de asegurar la continuidad y cumplimiento de
dichas acciones.

El siguiente escrito contiene un análisis sobre este programa, que pretende impulsar
una cultura de dignidad y respeto hacia las personas con discapacidad, veremos el
panorama que toma en cuenta y cómo se llevaran a cabo las acciones antes
mencionadas.

Es importante estar conscientes que, para entrar en contexto, las cifras que ha
arrojado la Encuesta mundial de Salud, que indica el 15 % de la población mundial,
que equivale a un aproximado de 200 millones de personas viven o ha vivido con
una discapacidad, ya sea motriz, intelectual o sensorial, esto debido mayormente al
envejecimiento de la población que se ve afectada por problemas de salud.

En cuanto a la discapacidad en infantes, llama a atención que la ideología de género


irónicamente, no hace distinción entre las mujeres de cualquier contexto, ya que las
niñas que sufren alguna discapacidad, al tener limitaciones para cumplir con el rol
de genero establecido por la sociedad, sufren de doblemente exclusión. Y que los
niños con alguna discapacidad motriz tienen más oportunidades en comparación de
los que sufren alguna discapacidad intelectual y/o sensorial.
Existen diferentes factores que originan la exclusión por parte del estado, las
políticas publicas no toman en cuenta a las personas con discapacidad, la sociedad
aún tiene prejuicios y creencias que impiden la atención adecuada a sus
necesidades, en general el entorno aún no cuenta con infraestructura necesaria y
esto limita las actividades cotidianas.

A lo largo de los años se han creado diversos organismos que atienden en cierta
medida las necesidades de las personas con discapacidad desde centros
hospitalarios, de rehabilitación, de asistencia social y de protección social, así como
programas de acción, con la intención de facilitar la integración familiar y social, que
comparada con la realidad en la que vivimos, apenas se dan abasto para atender a
una parte de la población con discapacidad.

Ya que, en nuestro país, se estima que 7.7 millones son personas con algún tipo
discapacidad, por otro lado, de este conjunto de personas un gran porcentaje/3.5
millones viven en pobreza, algunos (1.7 millones) viven en la línea de bienestar
mínimo, 3.9 millones viven con un ingreso inferior a la línea de bienestar. En nuestro
México la gran mayoría de las personas con alguna limitación son ya adultos entre
los 30 y 59 años o adultos mayores arriba de los 60 años.

Entre los problemas más frecuentes podemos mencionar de mayor a menor medida
en que se presentan, el primer la dificultad para caminar, para ver, oír, hablar o
comunicarse y mental. Generalmente causados por enfermedades, edad avanzada,
factores genéticos o desde el nacimiento. En 19 de cada 100 hogares habita una
persona con discapacidad, de todas estas personas, solamente el 68% tiene acceso
a atención en instituciones que brindan servicios de salud, el 62.1% que ronda de
los 3 a 29 años asisten a la escuela, pero el 27.9% no cuenta algún nivel de
escolaridad. Es mayor el número de personas que tiene por lo menos un año de
primaria, en comparación con aquellas que logran tener una carrera o profesión. Lo
que significa que aún queda un largo camino por recorrer en cuanto a salud y
educación respectivamente.
En México la gran mayoría de las personas con discapacidad aún enfrentan severas
condiciones de marginación y pobreza, a causa de la discriminación, principalmente
debido a su condición de discapacidad les excluye de la posibilidad de incluirse a
una actividad laboral que les permita buscar y obtener una mejor calidad de vida.
Ante esta situación miles de personas enfrentan la necesidad de vivir de la caridad
pública, de sus familiares o amigos, de programas de asistencia, de empleos
informales, o lastimosamente explotados laboralmente.

Esto evidencia que una de las necesidades principales de las personas con
discapacidad es la capacitación para obtener un empleo digno, y la obtención de un
trabajo decente. Por consecuencia el gobierno desarrollo este decreto, para hacer
cumplir y aplicar la convención sobre los derechos de las personas con
discapacidad de la ONU; donde el tema principal es que sociedad y el gobierno
dejemos de tratar a las personas con discapacidad como personas enfermas y
tratarlas como personas con derechos, con dignidad y respeto.

Se han implementado diferentes programas y destinado múltiples recursos


económicos para lograr estos objetivos, que podemos apreciar en cifras, pero en la
realidad es de conocimiento general que no se cuenta con los recursos suficientes
en los centros de atención, a esto podemos agregar que los programas tampoco se
llevan a cabo como deberían.

Es sumamente relevante enforcar esfuerzo en el derecho al trabajo y al empleo,


concientizando a las personas a través de la cultural laboral incluyente, que consiste
en reconocer y promover, la igualdad de derechos de las personas, sus
capacidades, que son individuos totalmente competitivos, responsables y creativos.
Es indispensable que tengan acceso al trabajo para su desarrollo personal, su
empoderamiento, independencia económica y sobre todo para sentirse incluidos en
la sociedad; ya que mejora su autoconcepto, su autoestima, así como su relaciones
interpersonales y familiares, se rehabilitan y sobre todo logran su independencia.
Los beneficios también serán para el gobierno, la sociedad y las empresas que
contratan personas con discapacidad. Ya que los empresarios obtendrán beneficios
fiscales, al promover la inclusión y la no discriminación, por otro lado, al promover
la superación de sus compañeros y al ser ejemplo en el ámbito laborar, se promueve
la competitividad en empresas y gobierno, así como el crecimiento económico del
país.

A partir de la promulgación del decreto, en cuanto al empleo se ha logrado avanzar


paso a paso, hoy en día es común por lo menos ver a una persona en un restaurant
o tienda de autoservicio brindando apoyo, esto gracias al decreto que se promulgó,
y que otorga beneficios fiscales, pues es muy conveniente para las empresas.

Me permito agregar a manera de conclusión, que desde mi punto vista considero,


que estos programas realmente tienen información muy valiosa, están bien
estructurados, pero no tienen ensayo, no tienen el trabajo de campo suficiente para
lograr abordar, la diversidad de dificultades que afrontan las personas con
discapacidad, de distintos extractos, de otros contextos, que pertenecen a alguna
etnia o alguna comunidad, que en la realidad son la mayoría, como las cifras lo
reflejan.

Por otro lado, podríamos hablar de la falta de continuidad entre los gobiernos, que
proponen y ateniente diferentes causas y tienen otras prioridades, son situaciones
que por ahora no están en nuestras manos como profesionales de la educación.

Pero como miembros de la sociedad y ciudadanos mexicanos que tenemos accesos


a esta información, podemos darle difusión a estos decretos que suman a nuestro
conocimiento, nos hace más conscientes del entorno y las necesidades que
atraviesan las personas con discapacidad. En experiencia personal creo que como
sociedad no alcanzamos a entender las necesidades especiales, hasta que las
vivimos en casa, con nuestros seres queridos; pero sería de gran ayuda que una vez
que tengamos esta información difundirla en redes o los medios que tengamos a
mano. Y comenzar por uno mismo, poner el ejemplo a los demás, especialmente
como educadores debes poner atención, informarnos más, actualizarnos y sobre
todo capacitarnos.

Ya que en la actualidad, tan solo en el contexto escolar, los centros de estudios ya


están obligadas a aceptar alumnos con nuero divergencias y con alguna
discapacidad motor; pero la realidad es que el sistema, personal, los maestros no
nos encontramos lo suficiente preparados para atender estas necesidades, tampoco
se cuenta con la infraestructura adecuada en los centros, es un trabajo arduo, pero
que depende de nosotros el saber llevar y aprender de estas situaciones, como
mucho docentes lo han venido haciendo trabajar con lo que tenemos. Pero si dejar
de exigir que se lleven a cabo los decretos, programas y consejos que cuidan y velan
por los derechos de las personas con discapacidad.

La inclusión esta llegando, pero para recibirla debemos prepararnos, sociedad,


gobierno e instituciones educativas en conjunto.

Quiero agregar una opinión muy personal, es que me parece increíble que se tengan
que promulgar reformas, hacer un decreto y dar estímulos monetarios, para que
impulse a las empresas, instituciones y a la sociedad en general a hacer lo
naturalmente tendrían que hacer, ya sea por empatía o consciencia, pero basado en
esta desinformación, en la que vivimos como sociedad, se le debe recordar a la
ciudadanía, que las personas con discapacidad son tan humanos como cualquiera
y que deben ser digno de respeto.

Referencias
DECRETO por el que se aprueba el Programa Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las
Personas con Discapacidad 2014-2018.

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e/23604/Programa_Nacional_Desarrollo_Inclusi_n_PD_2014-2018.pdf

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