Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Tomar una decisión parece algo simple y sencillo; sin embargo, es un proceso que implica
muchas etapas que no se pueden pasar por alto y así eliminar las probabilidades que signifiquen
riesgos de error, y que generalmente las personas realizan de manera intuitiva en su cotidianidad,
nuestros días están cargados de decisiones pequeñas o grandes: ¿Escoger el atuendo del día o tal
vez lo que vamos a comer? ¿Ir a un cajero o a la taquilla del banco? O tal vez ¿Decidir salir con
amigos o solo/a?, lo cierto es que rara vez nos percatamos realmente de dicha toma de decisiones
hasta que ocurre un error no previsto y la decisión tomada acarrea consecuencias de menor o
mayor relevancia para nuestro día a día, como encontrarnos algún peligro por salir solo y no
acompañado. Y si bien, salvando las diferencias con el ejemplo dado, la toma de decisiones en el
mundo empresarial suele ir acompañado de mayor mesura o menor grado de espontaneidad que
en la vida privada de las personas, ambos casos comparten algunos aspectos, como la
inevitabilidad de consecuencias y la exposición a riesgos o recompensas.
Así, la toma de decisiones resulta ser un proceso en mayor o menor medida gestionado por
las personas, en las que los individuos atraviesan etapas de estudio consiente de condicionantes y
variables, a fin de elegir entre distintas opciones, con distintos grados de caracterizaciones,
manifiestas en la vida personal, académica, social, o laboral de las personas, y que debe de
trascender el simple hecho de escoger la alternativa más adecuada, implicando también justificar
esa alternativa y comprender realmente por qué se ha elegido ese camino, a fin de al menos,
establecer repercusiones y subsecuentes decisiones en vista de que estas no suelen estar solas.
No esta demás decir que el proceso de la toma de decisiones se activa cuando se presentan
problemas a los que hay que dar la mejor solución posible, y que en este siempre hay un grado de
subjetividad ya que la psiquis humana toma un papel protagónico e inevitable, al tratarse de un
proceso de pensamiento, en el que idealmente se trata de generar la mayor objetividad posible,
ya que las personas no responden de igual forma a un problema debido a su personalidad,
desarrollo, madurez, experiencias u otros aspectos. Y en vista a ello, a continuación se procederá
a analizar la importancia y el cómo influye la toma de decisiones en las empresas.
IMPORTANCIA Y COMO INFLUYE LA TOMA DE DECISIONES EN LAS
EMPRESAS
En este aspecto, López (2023) también explica como las decisiones se convierten “en la
brújula que dirige día a día el rumbo de tu empresa” y es que si extrapola el diario acontecer de
las personas, implica parte del proceso constante y la necesidad sucesiva de toma de decisiones
en la vida personal, académica, profesional, y que también se aplica en las empresas, ya que,
dentro de una empresa, la toma de decisiones implica que un grupo de personas, en su posición
de gestión y administración de la organización, han de seleccionar opciones que sean
compatibles y alineadas para cumplir un propósito o un objetivo específico de la compañía, que
se orientan entre otras cosas de generar mayor valor para los clientes, utilidades para la empresa,
y asegurar mediante estrategias de diferenciación, que realcen las ventajas competitivas ofrecidas
en el mercado, respondiendo en tiempo y forma a las necesidades de la empresa.
Para lograr este objetivo de la empresa, baste decir, es necesario entender muy bien cómo
tomar decisiones acertadas, ya que resulta imprescindible para establecer vías eficientes que
afronten los retos del día a día en una empresa y colaboren con su crecimiento, dado que este
proceso se caracteriza dada: la certeza que implica la información para la toma de decisiones, la
incertidumbre que puede implicar la misma si no se cuenta con un conocimiento total de las
variables pertinentes, el riesgo que siempre se vincula a la toma de decisiones, y los posibles
conflictos devengados de presiones internas o externas a la empresa y sus agentes.
Debe aclararse además que una organización será más exitosa cuando sus dirigentes en
totalidad son más eficientes y capaces para tomar decisiones importantes, y la toma de decisiones
conjuga adecuadamente descentralización y centralización atendiendo a las características de la
empresa y su tamaño, dando relevancia a la toma de decisiones basadas en datos, dado que
contar con números que apoyen una hipótesis o idea permite fundamentar las medidas a
implementarse y optar por decisiones más objetivas y que atiendan a la realidad en la que se
contextualiza la problemática a resolver, por lo que las medidas derivadas serán evidentemente,
más realistas en consecuencia, y por ello, más oportunas y efectivas.
Cabe indicarse por otro lado, que si bien no hay una fórmula exacta en los procesos de
toma de decisiones ya que estos deben adecuarse a las particularidades de las organizaciones y su
administración, objetivos o sus propósitos, y es necesario ir avanzando a través de diversas
etapas o fases para poder tomar la decisión de manera más efectiva. No resulta extraño por eso
encontrar variaciones en estas fases dependiendo del escenario, o según si son decisiones
organizativas, preventivas o en respuesta a momentos de crisis, pero pueden de manera general
englobarse según Escalante (2023), aluden a ocho etapas.
Por supuesto, la aplicación de este proceso no excluye errores que pueden presentarse y
generar barreras de tomas de decisiones o derivar en toma de decisiones no acertadas, ello ya que
a fin de cuentas, este es u n proceso humano susceptible a rangos de error, y que incluyen desde
sesgos de pensamiento por prejuicios o falta de objetividad, carencias de profundización en las
evaluaciones de los problemas, sus soluciones, la realidad de la situación de la empresa y sus
recursos, la sobrestimación o subestimación de ciertos aspectos (confianza, recursos, tiempo,
relaciones, etc.) o incluso la desestimación o el aplazamiento del proceso de toma de decisiones
misma, incurren en situaciones en los que problemas pequeños pueden tornarse en insalvables.
De allí que el éxito de una compañía, de cualquier tipo, siempre está la toma de buenas
decisiones en lo macro y ello a su vez acarrea una serie de pequeñas decisiones que se suman
para generar los mejores escenarios de desenvolvimiento para la misma. Y por supuesto, si bien
debe admitirse que la mayor parte de la toma de una decisión empresarial se basa en la
experiencia de en quienes recae el proceso, y muchas veces estos también se guían de la
intuición, quien o quienes llevan la batuta en la gestión también dependen enormemente del
conocimiento y la información como los dos factores más importantes para obtener los
resultados esperados y el éxito de sus empresas.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS