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Audios Clases 2 y 3 Paradigamas de La Infancia
Audios Clases 2 y 3 Paradigamas de La Infancia
Ley de Patronato de Menores 10.903 (Ley Agote). En 1919 esta ley concede al Estado el poder
de intervenir en el destino de un menor considerado en “situación irregular”, otorgándole una
función tutelar en sentido de “protección” y lo correccional se entendía en sentido de
“curación” esto constituía una suerte de andamiaje sobre el que se montarían todas las
políticas dirigidas hacia aquellos que se identificarían y clasificarían como "desviados",
"delincuentes", "abandonados", "desamparados", "maltratados". Surgieron dos figuras
dominantes en cuanto a la definición de niño en "situación de peligro moral y material": el
"niño abandonado" y el "niño delincuente" . En el discurso de los "empresarios morales" de
aquellos años, no había diferencia entre ellos, el niño abandonado seguramente terminaría
delincuente, y el niño delincuente seguramente fue primero un niño abandonado.
2 Con el surgimiento del paradigma tutelar las autoras hablan de “niños, objetos
privilegiados de intervención" que había que "tutelar y corregir" ¿se refiere a todos los niños
o a algunos niños? en tal caso ¿a qué niños se refiere?
No había escapatoria para algunos niños, estos niños eran los hijos de los pobres, inmigrantes
y obreros que irrumpían e instalaban por primera vez el tema de la pauperización en la agenda
política de los representantes del orden social dominante. A esos niños, "objetos privilegiados
de intervención", había que "tutelar y corregir", esos niños eran los que "posibilitarían" que las
políticas de control dominantes en aquellos años, es decir, el régimen de tutelas y el naciente
modelo correccional, se articularan para abordarlos y "tratarlos"
3 Bajo el paradigma tutelar para las autoras ¿a partir de qué momento los niños se
convierten en menores? ¿Qué características tenían esos menores?
Esos niños dejaban de serlo a partir del momento preciso que eran "elegidos" para ser
tutelados, “protegidos" por el Estado o por instituciones de beneficencia y filantrópicas. Por
efecto de esta selección, se convertían en "menores" Es así que se crean en Argentina las
primeras instituciones para menores y los Tribunales de Menores que dejan a discrecionalidad
del Juez la decisión acerca del destino del menor. Cabe mencionar que en este paradigma
tutelar no hablamos de niño, sino que hablamos de menor que es objeto de restricciones y
privaciones, ya que el Juez puede tomar decisiones sobre su institucionalización por
motivos que hacen a su situación irregular (peligro material o moral) que no son claramente
definibles y demostrables sino que quedan a criterio del Juez.
Es así que los "menores" para constituirse como tales debían poseer determinadas
características que eran asociadas a su identidad; ello retrotrae a la naturaleza inapelable y no
la construcción social interpelable pero no siempre interpelada. Dentro de estas
características, la atribución de "riesgo o peligro moral o material" fue una constante cada vez
que se quiso habilitar una intervención "social". Pero ¿qué es lo se pretendía expresar y
trasmitir cuando se hablaba de "situación de riesgo o peligro moral y material"?' Exactamente
lo mismo que cuando se hablaba —aún se habla- de "situación irregular", es decir, complejos y
amplios vocablos que en su difusa conceptualización permitían y posibilitaban englobar una
serie de prácticas y discursos por parte de aquellos que "ejercían el Patronato" fundadas en la
discrecionalidad y la selectividad. En el II Congreso Panamericano del Niño de 1956, se definía
el abandono de la siguiente forma, "Reputase abandonado todo niño cuya subsistencia y
educación no es atendible convenientemente por los padres por carencia de medios
materiales, sea a causa del ambiente en que se desarrolla, sea por razón de la idiosincrasia del
menor" De un lado, las "víctimas" eran los niños y niñas pobres, entonces devenidos
"menores". Por el otro, eran las familias de esos menores las señaladas como responsables de
omitir obligaciones de protección y tutela respecto de ellos.
4 Paradigma tutelar. En cuanto a los "menores en riesgo" las autoras señalan que para todos
ellos la solución era la misma: ¿Cuál?
5 García Méndez señala que puede decirse que en América Latina ha habido dos grandes
etapas de reformas jurídicas en lo que se refiere al Derecho de la Infancia ¿Cuáles son?
"En realidad, puede decirse que en América Latina ha habido dos grandes etapas de reformas
jurídicas en los se refiere al Derecho de la Infancia. Una primera etapa, de 1919 a 1939, que
introduce la especificidad del derecho de menores y crea un nuevo tipo de institucionalidad: la
justicia de menores. Y una segunda etapa, que comienza a partir de 1990 y continúa abierta"
El primer periodo se correspondió a las sancione de las leyes pioneras en materias de infancia:
la ley de patronato de menores o ley agote (10.903) esta sustenta en el paradigma tutelar.
Segundo periodo reconoceremos políticas de desarrollo social que mejoraron la situación de la
infancia, también producción legislativa (régimen penal de la minoridad) y reforma judicial en
el ámbito de la capital federal pero todas y cada una de estos “acontecimientos”, estarán
signados por la continuidad ideológica/ política de la figura patronato, que fundado a principio
de siglo conservara su carácter hegemónico, aun con posterioridad a la ratificación de la
convención de los derechos del niño.
Guemureman, Silvia (2015) Encuadre normativo del tratamiento de la
niñez y la adolescencia en la Argentina siglo XXI en Politicas penales y de
seguridad dirigidas hacia adolescentes y jóvenes. Rubinzal-Culzoni
Editores-
¿Cómo se denominan los paradigmas de la infancia? ¿Referencias legislativas de cada
paradigma y el contexto socio político en que entra en vigencia?
Paradigma tutelar que abarca desde 1919 a 1990. El modelo tutelar responde a una política
digitada que es una política representada por el orden social dominante. Las referencias
legislativas son: LEY 10.903 Ley Nacional de Patronato de Menores (Ley Agote) y la sanción del
REGIMEN PENAL DE MINORIDAD donde tenían lugar las leyes Ley 22.278 que fijaba la edad de
punibilidad a los 14 años y fue luego modificada en 1983 restableciendo el limite a los 16 años
con la Ley 22.803.
El surgimiento en argentina del llamado "complejo tutelar" para menores estaba enmarcado
en las diferentes políticas que emanaron de los sectores dominantes referidas al desarrollo de
un modelo económico orientado hacia la inserción del país en el capitalismo internacional,
privilegiando al sector agroexportador. También promover estrategias vinculadas al estímulo
de la inmigración en correspondencia con el objetivo de "poblar el país", o lo que es más
acertado, contar con mano de obra abundante y barata para sostener y desarrollar un modelo
agro-exportador que debía responder a las exigencias de producción del mercado europeo.
Es a partir de esta etapa inmigratoria -de 1880 en adelante-, que se constituye un nuevo
colectivo social que podemos tipificar como extranjero-obrero-anarquista. Los inmigrantes y
movimiento obrero (Rock, D., 1977) fueron casi sinónimos, el movimiento obrero y sus luchas,
los derechos conquistados y los derechos a conquistar. En nuestro país, se selló el inicio de
luchas y enfrentamientos que posicionaron a un nuevo colectivo social contra un orden social
dominante, sumándose así, a las largas y consecuentes luchas de la clase trabajadora como tal
en el sistema capitalista.