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DESASTRES NATURALES:

Más de 450 colegios a nivel nacional han sido afectados por las lluvias en
lo que va del año y más de 20 mil instituciones educativas se encuentran
en riesgo alto ante el pronóstico de precipitaciones en los próximos tres
meses. Aunque la mayoría de los casi 5 millones de estudiantes de
colegios públicos ya inició el año escolar, aún hay cientos de alumnos que
no han retornado a clases o han debido dejar de asistir a la escuela. Sus
instituciones educativas han sufrido daños, son usadas como albergues
para los damnificados o ya se encontraban en pésimas condiciones antes
de la última emergencia.
Las lluvias, huaicos, inundaciones y otros fenómenos climatológicos han
afectado a más de 450 colegios de 23 regiones en el Perú, en lo que va del
año, de acuerdo con los reportes oficiales. La mayoría de estas escuelas se
encuentran en Ayacucho, Piura y Cajamarca. Y aunque el personal
educativo y los padres de los estudiantes están haciendo todo lo posible
para que las clases comiencen o continúen, muchos de estos planteles
requieren reparaciones urgentes.
Como las lluvias intensas se mantienen en la mayoría de estas regiones,
siguen reportándose más colegios afectados, algunos nuevamente y otros
por primera vez. Hasta el 28 de marzo, el Instituto Nacional de Defensa
Civil (Indeci) registraba 452 instituciones educativas afectadas y 36
destruidas. En detalle, se reportaron 2.612 aulas afectadas, 242 destruidas
y 990 inhabitables.

“Los fenómenos climatológicos hacen lo propio, pero hay que acordarse


de que el gobierno tiene una deuda en infraestructura. Hace seis años
fue anunciada [una brecha] de como 100 mil millones de soles y ahora el
Minedu informó que es de alrededor de 130 mil millones de soles, sin
tomar en cuenta los daños provocados por las lluvias”,
dijo a Convoca.pe Eugenia Fernán-Zegarra, de la Adjuntía para la
Administración Estatal de la Defensoría del Pueblo.
De los 54 mil 35 locales educativos que se han evaluado, 25 mil
464 requieren una nueva edificación, explica Fernán-Zegarra. De los 28 mil
571 colegios restantes, 3 mil 714 (13%) necesitan una sustitución parcial y
2 mil 571 (9%), un reforzamiento de su estructura.
La funcionaria defensorial resaltó que el Programa Nacional de
Infraestructura Educativa (Pronied) del Minedu no puede mejorar los
colegios de manera autónoma y que debe trabajar de manera coordinada
y concertada con los gobiernos regionales y locales.
A los gobiernos regionales les corresponde evaluar periódicamente las
necesidades que tienen los locales escolares, con la participación
efectiva y el mantenimiento que deben darle las Direcciones Regionales
de Educación y las Unidades de Gestión Educativa Local (UGEL), para
elaborar proyectos y presentarlos al Pronied, recuerda Fernán-Zegarra.

22/03/2023 El ministro de Educación, Óscar Becerra, informó que el


próximo lunes 27 de marzo el 95% de los colegios públicos a nivel nacional
estarán en condiciones de iniciar el ciclo escolar 2023.
"Solamente hay 275 locales escolares que no podrán iniciar clases este 27
de marzo, de más de 100 000 mil que hay a nivel nacional. Estos (locales)
permanecen con problemas de infraestructura debido a los fenómenos
naturales que estamos pasando", indicó en entrevista con Tv Perú.
por Laura Urbina Saldaña
23 de Marzo del 2023 2:05 PM · Actualizado el 23 de Marzo del 2023 2:10
PM
Las lluvias intensas, desbordes de ríos y quebradas golpearon a
las regiones del norte y los estragos llegaron a los colegios, situación que
ha generado que miles de estudiantes no vuelvan a sus clases presenciales
en pleno inicio del año escolar.
En el Perú, el 75 % de los estudiantes ya ha retornado a sus colegios para
el inicio de clases escolares, según el Ministerio de Educación, sin
embargo, los estudiantes de la zona norte del país tienen dificultades
para hacerlo debido a las lluvias extremas, desbordes de ríos y huaicos
que inundaron centros educativos y viviendas.

En la región Lambayeque más de 126 mil alumnos no pudieron iniciar


clases presenciales a causa de los daños colaterales que dejaron las
precipitaciones. Además, 1596 escuelas no se encuentran aptas para
iniciar las clases escolares, informó el gobernador regional Jorge Pérez
Flores.
En realidad, los 38 distritos están totalmente afectados, Íllimo, Pacora,
Jayanca, Motupe, Olmos, realmente han sido muy afectados, por eso que
le di los datos de más de 1500 instituciones educativas que no están aptas
en este momento para recibir alumnos, pero no podemos dejar la
educación, la virtualidad nos va a ayudar un poquito, pero no es como
darles clases de manera presencial", dijo.

Clases escolares: Situación en Piura y Tumbes


Más de 600 centros educativos públicos de la región Piura no iniciaron el
año escolar el último lunes debido a las lluvias extremas o a la deteriorada
infraestructura que ponen en riesgo la integridad de los estudiantes. Es el
caso de la I.E Hermanos Meléndez, ubicada en el distrito de La Unión. Su
directora Ruth Zapata explicó por qué se suspendieron las clases para los
1900 alumnos de primaria y secundaria.

Año escolar 2023: ¿En qué condiciones llegamos?


Informes RPP
El 20 de marzo se inician las clases escolares de manera oficial en todo el
país, pero esto no ocurre en las condiciones que las familias quisieran. La
falta de una adecuada infraestructura se convierte en una constante de
cada año. A esto se suman posibles retrasos como consecuencia de los
fenómenos naturales y de aquellos provocados por el mismo hombre,
como las protestas políticas.
Esta situación afecta a 33 mil estudiantes, pues pone en riesgo su vida,
salud y educación. Además, se ha identificado que los centros de estudios
carecen de servicios básicos, y sus infraestructuras están en estado crítico,
por lo que deben ser restituidas.
Más del 55% de los establecimientos de enseñanza pública en la región
Junín necesitan ser reemplazados en su totalidad debido al deterioro de
sus espacios. Ante la llegada del Fenómeno El Niño, se afectarían 1.928
escuelas, poniendo en riesgo la vida, salud y educación de miles de
estudiantes. Este dato sitúa al departamento como uno de los más
afectados a nivel nacional en términos de infraestructura educativa, según
informó el Ministerio de Educación (Minedu).
La vulnerabilidad de estos locales escolares ante dichos eventos naturales
demanda una atención prioritaria para garantizar la seguridad de los
estudiantes y la continuidad de la educación. El incremento del riesgo en
la región se debe al alto nivel de inundaciones que afectan a varios
distritos, como se ha identificado desde el Centro Nacional de Estimación,
Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred).
La entidad ha advertido que, durante el periodo de lluvias de noviembre
2023 a enero 2024, 36 distritos en la región de Junín,
incluyendo Chanchamayo, Satipo, Tarma, Morococha y Mariscal
Castilla, están en alto peligro de sufrir desbordes. El número de alumnos
afectados podría superar los 32 mil. Además, 81 distritos enfrentan un
riesgo muy alto de huaicos y deslizamientos, afectando a más de 33 mil
alumnos.
CONSECUENCIA DE LA PANDEMIA:

La pandemia trajo consigo la interrupción de los procesos de aprendizaje


de miles de estudiantes que se han visto afectados por la suspensión de
clases presenciales por más de un año.
Si bien al inicio del estado de emergencia se implementaron rápidamente
diferentes modalidades de educación a distancia, una gran parte de los
escolares no ha contado con las herramientas necesarias para simular en sus hogares el
entorno de aprendizaje que tenían en un salón de clases.
MENOR ASISTENCIA
Según cifras de la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO) del INEI, el
porcentaje de estudiantes que continuaron llevando clases en el 2020 a
través de cualquier modalidad se redujo cinco puntos porcentuales
respecto a los niveles de asistencia del 2019, al pasar de 92% a 87%. Esto
significa que más de 400 mil alumnos dejaron de plano de llevar clases
durante el año pasado a raíz de la pandemia. El mayor descenso ocurrió
en el nivel de educación inicial, en el que la proporción de niños que
recibieron clases cayó de 93% a 81%.
Si bien los datos muestran que la reducción de la asistencia escolar fue
un fenómeno generalizado para los alumnos de las familias de diferentes
niveles de ingresos, ello esconde la gran heterogeneidad entre la calidad
de educación virtual recibida. En el quintil de ingresos más bajo –20% de
hogares de menores ingresos–, los alumnos reportaron el uso de la radio
para acceder a las clases a distancia en mucha mayor proporción (30%)
que los alumnos pertenecientes al 20% de hogares con mayores ingresos
(3%). Por el contrario, en el 20% de hogares de ingresos más altos, el 59%
de los alumnos reportó haber empleado una plataforma virtual o página
web, en contraste con solo el 17% del quintil de ingresos más bajo.
DE LA ESCUELA AL TRABAJO
Los problemas de acceso podrían haber ocasionado que los adolescentes
de menores ingresos y zonas rurales opten por realizar otras actividades,
disminuyendo el tiempo destinado a su educación. Ello se evidencia, por
ejemplo, en el notable incremento del número de trabajadores de entre
14 y 18 años en las zonas rurales del país, desde el inicio del estado de
emergencia en el 2020. Así, el promedio de trabajadores adolescentes
en el ámbito rural se incrementó de 388 mil en el primer trimestre del
2020, a 485 mil en el primer trimestre del 2021.
PÉRDIDA DE CAPITAL HUMANO
La interrupción en la asistencia escolar de miles de estudiantes a clases
presenciales durante un período prolongado tendría efectos sobre los
aprendizajes y los ingresos laborales que podrían percibir en el futuro.
Según estimaciones realizadas por el Banco Mundial, si las escuelas
permanecen cerradas por 13 meses, en países como el Perú el porcentaje
de estudiantes por debajo del nivel mínimo de rendimiento en pruebas de
comprensión lectora y razonamiento matemático se incrementaría de
54% a 76%. Este resultado representaría un gran obstáculo para que la
generación actual de estudiantes pueda desarrollar habilidades básicas y
fundamentales que les permita insertarse posteriormente en el mercado
laboral a puestos de trabajo de calidad.
Cabe señalar que las pérdidas de aprendizaje serían más severas en los
hogares más vulnerables debido a factores como la capacidad para
participar efectivamente en modalidades de educación a distancia, el
apoyo que reciben en el interior de las familias, las dificultades
económicas, entre otros.
Con esta crisis en los aprendizajes, países como el Perú podrían
experimentar significativas pérdidas de productividad y capital humano.
Según el BID, con el cierre de las escuelas por 10 meses, un alumno
promedio en América Latina que asiste actualmente a la escuela podría
perder hasta US$1.313 –ajustados por paridad de poder adquisitivo del
2017– de ingresos anuales cuando

ingrese al mercado laboral.


Juan Francisco Castro
Decano de la Facultad de Economía y Finanzas de la Universidad del
Pacífico

Con el retorno a la presencialidad en marzo del 2022, hemos podido


identificar el “doble impacto” que han experimentado los estudiantes
escolares. Primero, la pérdida de aprendizajes y conocimientos. Segundo,
la afectación en sus habilidades socioemocionales, que ha ocasionado que
los alumnos tengan dificultades para reconectarse con sus compañeros y
maestros.
En cuanto al aspecto socioemocional, es clave el acompañamiento y
soporte de los profesores y psicólogos escolares. Sin embargo, resulta
alarmante que, de acuerdo con el Colegio de Psicólogos del Perú, más del
80% de colegios no cuente con un psicólogo, aun cuando la Ley N° 29719
establece, como mínimo, la designación de uno por colegio.
El 2022 fue el año del retorno a las clases presenciales, después de dos
años de educación remota. Este hecho, esperado por estudiantes, padres
de familia, docentes y directivos de colegios, no ha sido sencillo, pues
trajo como consecuencia una serie cambios, además de desconfianza y
dificultades, y mucha esperanza. El siguiente informe es el resultado de un
sondeo realizado entre cerca de 40 directores de colegios privados de
Lima y principales ciudades del Perú.
Principales dificultades
La primera consulta referida a las dificultades que han enfrentado los
colegios en el retorno a la presencialidad ha sido la siguiente:
Problemas de convivencia entre estudiantes, los problemas
socioemocionales que muchos estudiantes han presentado, producto del
largo encierro que generó angustia, ansiedad y hasta depresión.
La brecha de aprendizaje que han mostrado los estudiantes; las clases
virtuales fueron una estupenda opción para afrontar la crisis. Sin embargo,
los aprendizajes claramente fueron menores y, además, cada estudiante lo
afrontó de modo distinto, de acuerdo con su contexto familiar, lo que dio
como resultado una asimilación de aprendizajes variables, que se muestra
en una brecha que hay que corregir
Dificultades en la relación con los padres de familia, que en muchos casos
se han mostrado muy sensibles o permisivos.
La crisis económica que ha afectado a las familias, con ello la morosidad y
la dificultad en asumir los crecientes costos educativos.

El servicio educativo a distancia brindado durante la


emergencia sanitaria ha presentado problemas que requieren de
medidas urgentes y efectivas por parte de las autoridades locales,
regionales y nacionales, lo más preocupante es que más de 6 mil
estudiantes de escuelas públicas de Junín dejaron de estudiar o
abandonaron sus estudios.

En el año 2021, la Defensoría del Pueblo ejecutó una supervisión durante


los meses de julio y agosto a 179 unidades de gestión educativa local en el
país y detecto el fenómeno del abandono de estudios y la región Junín es
una de las regiones que presentaron los peores datos en esta variable con
6221 casos.
Población más vulnerable
El abandono escolar no es un problema nuevo, sin embargo, con la
pandemia este se ha agudizado constituyendo una amenaza a la
continuidad de la trayectoria educativa para miles de estudiantes.
Causas de la deserción escolar
En Junín hay cinco Unidades de Gestión Educativa Local (UGEL) con mayor
volumen de estudiantes de instituciones educativas públicas que
abandonaron estudios,(Tarma, Chanchamayo, Concepción, Huancayo,
Junín).
El fenómeno del abandono escolar es complejo porque responde a
múltiples causas y factores, como por ejemplo a la violencia intrafamiliar,
situaciones de abandono familiar de la niña, niño o adolescente, o
inclusive casos de trabajo infantil o realización de labores productivas y
económicas que impiden el proceso educativo.
Según el director de la Unidad de Gestión Educativa Local de Huancayo
(UGEL), Walter Oré, el nivel educativo con mayor número de alumnos
desertados en su jurisdicción fue del nivel secundario y esto se debe a la
pérdida de apoyo de los padres de familia o porque debido a la situación
económica se debieron poner a trabajar.

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