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Editado por
Theodore Eliades
DDS, MS, Dr Med Sci, PhD, DSc, FIMMM, FRSC, FInstP, FDS
RCS(Ed) Profesor y director, Clínica de Ortodoncia y
Odontología Pediátrica, Centro de Medicina Dental,
Universidad de Zurich, Suiza
Christos Katsaros
DDS, Dr med dent, Dr hc, Odont Dr/PhD
Profesor y Presidente, Departamento de Ortodoncia y Ortopedia
Dentofacial, Facultad de Medicina Dental/Facultad de Medicina,
Universidad de Berna, Suiza
Esta edición se publicó por primera vez
en 2024 © 2024 John Wiley & Sons Ltd.
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Contenido
Lista de contribuyentesxiii
Prefacioxvii
Sección A Despegue1
2 Protocolos de desunión28
Eser Tüfekçi y William Brantley
2.1 Introducción28
2.2 Lugares de falla de la unión durante el desprendimiento 29
2.3 Protocolos para la extracción de brackets 30
2.4 Despegue ultrasónico33
2.5 Desunimiento electrotérmico 33
2.6 Uso de láseres para despegar 34
2.7 Directrices de los fabricantes 36
2.A Apéndice: Unidades para la tensión de desunión y consideración
de la fuerza de desunión37 Referencias38
instrumentos rotatorios116
Referencias221
XContenido
11.1 Introducción248
11.2 BPA y retenedores fijos: consideraciones clínicas 250
11.3 In VitroInvestigación252
11.4 Adhesivos de ortodoncia sin BPA 253
11.5 Conclusiones 255
Referencias 255
Índice296
xiii
Lista de contribuyentes
Georgios N. Belibasakis
Clínica de Ortodoncia y
Departamento de Medicina Dental
Odontopediatría
Instituto Karolinska
Centro de Medicina Dental
Andreas Karamouzos
Effimia Koumpia
Departamento de Ortodoncia
Departamento de Ortodoncia
Facultad de Odontología
Facultad de Odontología
Facultad de Ciencias de la Salud
Facultad de Ciencias de la Salud
Universidad Aristóteles de
Universidad Aristóteles de
Tesalónica
Tesalónica
Salónica, Grecia
Salónica, Grecia
Christos Katsaros
Departamento de Ortodoncia y Thaleia Kouskoura
Ortopedia Dentofacial, Departamento de Salud Bucal
Facultad de Medicina Dental/ Pediátrica y Ortodoncia Centro
Facultad de Medicina Universitario de Medicina
Universidad de Berna Dental, Universidad de Basilea
Berna, Suiza Basilea, Suiza
Lista de contribuyentesxvi
Berna, Suiza
Anastasios A. Zafeiriadis
Andreu Puigdollers
Departamento de Ortodoncia
Departamento de Ortodoncia
Facultad de Odontología
Facultad de Odontología
Facultad de Ciencias de la Salud
Universidad Internacional de
Universidad Aristóteles de
Cataluña
Tesalónica
Sant Cugat del Vallès
Salónica, Grecia
Barcelona, España
Jonathan R. Sandy
Departamento de Ortodoncia Escuela
de Odontología de Bristol
Universidad de Bristol
Brístol, Reino Unido
xvii
Prefacio
Theodore Eliades
Christos Katsaros
1
Sección a
Despegue
3
1.1 Introducción
(a) (b)
Figura 1.1(a) Diente natural; (b) rectificado de dientes con una fresa de carburo.
(a) (b)
Figura 1.2(a) Diente natural; (b) diente rectificado con una fresa de diamante.
Esta reducción de la eficiencia de corte está asociada con factores tales como (i)
desgaste de las fresas debido al uso y la fricción, (ii) residuos que obstruyen la
superficie de la fresa y (iii) los procedimientos para limpiar, desinfectar y esterilizar las
fresas. Algunos estudios han determinado que la eficiencia de corte disminuye entre el
primer y el sexto ciclo de esterilización (Bae et al. 2014; Emir et al. 2018; Regev et al.
2010). Firoozmand et al. (2008) determinaron que la vida útil de una fresa es de cinco
usos, ya que después de ellos es difícil garantizar un corte adecuado y eficiente. Estos
resultados fueron confirmados por Emir et al. (2018).
(a) (b)
500 micras
500 micras
Figura 1.3(a) Fresa de diamante antes de su uso; (b) fresa de diamante después de su uso.
8Descementado y Retención Fija en Ortodoncia
(a)
(b)
Figura 1.4Acción de rectificado mediante fresas de diamante. (a) Durante el primer paso del
proceso de pulido, la fresa comienza a eliminar tejido. (b) Cada movimiento de la fresa en
ambas direcciones elimina tejido por acción abrasiva.
Instrumentos giratorios y eficiencia de corte de las fresas9
(a) (b)
500 micras
500 micras
Figura 1.5(a) Fresa de carburo antes de su uso; (b) fresa de carburo después de su uso.
(a)
(b)
Figura 1.6(a) Acción de corte en el sentido de las agujas del reloj; (b) acción de pulido
en sentido antihorario.
fresas, como las de grano medio; luego, cuando los estudios analizan las fresas
con un SEM y miden las virutas de diamante, se observa que los diamantes son
más grandes y corresponden más estrechamente al tamaño grueso descrito por
la norma ISO (Bae et al. 2014; Prithviraj et al. 2017). En general, estas diferencias
entre las clasificaciones de los fabricantes y los análisis durante los estudios
pueden deberse a que los filtros utilizados en el proceso de fabricación para
estandarizar la arena permiten el paso de distintos tamaños, por lo que en
ocasiones se introducen partículas de mayor diámetro.
La eficiencia de corte se ve comprometida cuando las virutas de diamante se extraen del aglutinante con el que están
unidas al eje de la fresa en lugar de por el desgaste del filo de corte del diamante (Bae et al. 2014; Ben-Hanan et al. 2008;
Emir et al. . 2018; Prithviraj et al. 2017). El grado en que se pueden extraer los diamantes está asociado con las propiedades
del metal utilizado como aglutinante (Bae et al. 2014) o el sistema utilizado para unir los diamantes a la fresa. Es menos
probable que las virutas se desprendan cuando el aglutinante es más potente y tiene mayores propiedades de adhesión, y
por tanto la fresa tiene mayor eficiencia de corte. También se ha observado que las fresas que utilizan galvanoplastia de
níquel tienen una menor eficiencia de corte que las fresas que utilizan un sistema de soldadura fuerte (PBS) patentado
(Prithviraj et al. 2017). Estudios SEM de fresas procesadas mediante electrodeposición con níquel han observado que
quedan espacios por virutas de diamante desprendidas; Además, algunas virutas de diamante están incrustadas
demasiado en la matriz metálica, lo que deja menos bordes cortantes expuestos y proporciona menos área para cortar
(Prithviraj et al. 2017). Otro factor que puede afectar la eficiencia del corte es el efecto secundario de los espacios que
dejan los diamantes cuando se obstruyen con escombros. Este efecto reduce el trabajo efectivo de las fresas, por lo que es
importante enfriarlas adecuadamente durante el esmerilado o el pulido para que el agua elimine estos residuos (Ben-
Hanan et al. 2008). 2017). Otro factor que puede afectar la eficiencia del corte es el efecto secundario de los espacios que
dejan los diamantes cuando se obstruyen con escombros. Este efecto reduce el trabajo efectivo de las fresas, por lo que es
importante enfriarlas adecuadamente durante el esmerilado o el pulido para que el agua elimine estos residuos (Ben-
Hanan et al. 2008). 2017). Otro factor que puede afectar la eficiencia del corte es el efecto secundario de los espacios que
dejan los diamantes cuando se obstruyen con escombros. Este efecto reduce el trabajo efectivo de las fresas, por lo que es
importante enfriarlas adecuadamente durante el esmerilado o el pulido para que el agua elimine estos residuos (Ben-
fresa, y también lograr una disipación de calor más rápida (Galindo et al. 2004), pero no se
observaron diferencias estadísticamente significativas en comparación con las fresas
convencionales (Ercoli et al. 2009).
También se ha estudiado el efecto de la limpieza, desinfección y esterilización sobre
la eficiencia de corte de las fresas, y algunos estudios concluyeron que estos
procedimientos no afectan directamente la eficiencia de corte (Bae et al. 2014). Sin
embargo, otros autores han observado que la limpieza y esterilización de las fresas que
se utilizan repetidamente mejoran su comportamiento de corte porque se eliminan los
residuos durante el procedimiento de limpieza (Rotella et al. 2014).
Algunos estudios han evaluado si el desgaste de las fresas afecta la SR que las
fresas causan en la estructura o los materiales del diente, así como en la eficiencia
de corte. Parece que cuanto más desgastada está la fresa, menor es la eficiencia
de corte y la SR. La pérdida de rugosidad puede ser heterogénea, pero puede
afectar el proceso de unión (Emir et al. 2018). Al estudiar diferentes materiales, se
observa que la eficiencia de corte de las fresas utilizadas para cortar circonio o
disilicato de litio o metales se reduce más rápidamente ya que esos materiales
tienen superficies más duras que la estructura del diente (Emir et al. 2018;
Galindo et al. 2004; Nakamura et al. 2015; Siegel y Von Fraunhofer 1996).
se aplica más fuerza (Choi et al. 2010; Eikenberg 2001; Ercoli et al. 2009; Rotella et
al. 2014). Choi et al. (2010) incluso agregan que la diferencia podría estar
relacionada con el aumento de peso de la pieza de mano con motor eléctrico, lo
que puede hacer que el dentista aplique un poco más de fuerza (sin darse
cuenta), haciendo que el instrumento sea más eficiente.
La pieza de mano con motor eléctrico no sólo es más eficiente que la turbina, sino que
también se obtiene una superficie más suave. Por el contrario, se pueden ver marcas rugosas
por el efecto de una turbina, que pueden estar relacionadas con la pérdida de velocidad y una
posible pérdida causada por un par bajo (Geminiani et al. 2014).
La mayoría de los estudios que han medido el efecto del flujo de agua
sobre la temperatura dentro de la cámara pulpar han observado que la
molienda no afecta la cámara pulpar porque el refrigerante del flujo de agua
ayuda a disminuir la temperatura y evita que la pulpa alcance temperaturas
críticas. El caudal de agua indicado en estos estudios para evitar el aumento
de la temperatura de la pulpa está entre 25 y 50ml/min,
independientemente de si la fresa es de diamante o de carburo. Siempre es
mejor más agua para enfriar la preparación dental (Ercoli et al. 2009; Galindo
et al. 2004; Siegel y von Fraunhofer 2000; Siegel y Patel 2016; Von Fraunhofer
y Siegel 2000).
La importancia del flujo de agua se basa en el número y distribución de las
salidas de agua en los instrumentos (Ercoli et al. 2009; Siegel y Von Fraunhofer
2002). Las turbinas anteriores (y algunas de las turbinas actuales) tenían solo un
puerto de agua en la base del cabezal, por lo que la fresa no se enfriaba por
completo. Hoy en día, las piezas de mano con motor eléctrico y las turbinas
modernas tienen tres o cuatro puertos de agua (Figura 1.9), lo que aumenta el
flujo de agua de toda la fresa. Esto permite controlar la temperatura, aumenta la
Instrumentos giratorios y eficiencia de corte de las fresas15
Figura 1.9(a) Turbina con un puerto de agua; (b) turbina con tres puertos de agua; (c) turbina
con cuatro puertos de agua; y (d) pieza de mano con motor eléctrico con tres puertos de
agua.
Figura 1.10Aspecto del esmalte después de despegar y pulir con piedra blanca utilizando
una pieza de mano de alta velocidad.
18Descementado y Retención Fija en Ortodoncia
velocidades (Figuras 1.11 y 1.12), con fresas de 15 hojas, y los resultados mostraron
menos daño del esmalte al usar una fresa de tungsteno a baja velocidad. Este protocolo
de fresa de tungsteno de baja velocidad y pulido posterior con copas de goma se aplicó
de acuerdo con otros estudios que analizaron parámetros similares después del
descementado del bracket (Ireland et al. 2005).
Figura 1.11Aspecto del esmalte después de despegar y pulir con una fresa de carburo de
tungsteno utilizando una pieza de mano de alta velocidad.
Figura 1.12Aspecto del esmalte después de despegar y pulir con una fresa de carburo de
tungsteno utilizando una pieza de mano de baja velocidad.
Instrumentos giratorios y eficiencia de corte de las fresas19
La pasta de dientes puede producir mejores resultados a largo plazo porque el barniz de flúor
solo está diseñado para usarse durante un año.
Kaga et al. (2014) informaron que el efecto amortiguador del relleno S-PRG
inhibe la desmineralización del esmalte. Una solución acuosa que contenía relleno
S-PRG mostró un rápido aumento del pH en un día, un aumento gradual durante
seis días y la concentración de iones Ca más baja entre las soluciones de
remineralización. Aunque la saliva humana puede endurecer la superficie del
esmalte, las soluciones calcificantes pueden tener un mayor potencial
remineralizante debido a sus mayores concentraciones de calcio y fosfato
(Reynolds 1997; Reynolds et al. 2003). El fosfato de calcio precipita en la superficie
del esmalte como un precursor amorfo que sufre una rápida transformación en
cristales de apatita (Shen et al. 2001). Lippert et al. (2004) no observaron ningún
endurecimiento del esmalte debido a la saliva.
Un estudio previo informó valores de SR más altos después de la remineralización
con 70% en peso de S-PRG en comparación con el esmalte no tratado. La mejora podría
haberse debido a un número cada vez mayor de partículas de relleno en la superficie
del esmalte (Hahnel et al. 2014). Según se informa, la pasta de dientes con flúor puede
restaurar la superficie de las lesiones (Gjorgievska et al. 2013; Mielczarek y Michalik
2014), lo que indica su utilidad potencial en casos con un riesgo elevado de caries, como
los pacientes con ortodoncia (Gjorgievska et al. 2013).
Referencias
46 (1): 84–88.
Galindo, DF, Ercoli, C., Funkenbusch, PD et al. (2004). Preparación de los dientes:
un estudio sobre el efecto de diferentes variables y una comparación entre fresas
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turbina en las superficies de preparación de los dientes.J. Prótesis. Mella.112 (1): 51–
58. Gjorgievska, ES, Nicholson, JW, Slipper, IJ y Stevanovic, MM (2013).
Remineralización del esmalte desmineralizado mediante pastas dentales: microscopía
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estereomicrográfico tridimensional.Microscopía. Microanal.19 (3): 587–595.
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Observación por microscopía de fuerza atómica de superficies de esmalte tratadas
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24Descementado y Retención Fija en Ortodoncia
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Siegel, SC y Von Fraunhofer, JA (2002). El efecto del spray para pieza de mano.
Protocolos de desunión
Eser Tüfekçi1y William Brantley2
1Departamento de Ortodoncia, Facultad de Odontología, Virginia Commonwealth University,
Richmond, VA, EE. UU.
2División de Odontología Restauradora y Protésica, Facultad de Odontología, Universidad Estatal de Ohio, Columbus,
OH, EE. UU.
2.1 Introducción
Al final del tratamiento de ortodoncia, se retiran los aparatos fijos y la resina residual, y
la superficie del esmalte se restaura lo más cerca posible a su condición previa al
tratamiento. Al retirar los aparatos fijos, los ortodoncistas deben seguir de cerca los
protocolos de descementado recomendados para minimizar posibles daños
iatrogénicos a la superficie del esmalte. Si no se realizan correctamente, los
procedimientos de extracción de brackets pueden provocar grietas y fracturas en el
esmalte (Fischer-Brandies et al. 1993; Naini y Gill 2008; Strobl et al. 1992).
Durante todo el tratamiento de ortodoncia, los aparatos fijos deben permanecer
adheridos a las superficies de los dientes. Según Reynolds (1975), una resistencia al
corte de 60 a 80 kg/cm2(6–8MPa) es apropiado para que los brackets resistan las fuerzas
oclusales y ortodóncicas y al mismo tiempo permitan una extracción segura del bracket
y de la resina. (Las unidades para la fuerza de unión y el uso alternativo de la fuerza de
descementación se analizan en el apéndice de este capítulo). De lo contrario, las fallas
frecuentes de los brackets pueden afectar la progresión y el resultado del tratamiento
de ortodoncia (Beckwith et al. 1999; Stasinopoulos et al. 2018).
En la literatura, se han informado niveles de resistencia al corte muy por
encima del rango óptimo recomendado de 6 a 8 MPa (Rix et al. 2001; Romano
et al. 2009). La alta fuerza de unión de los adhesivos de ortodoncia de nueva generación
se atribuye principalmente a los avances en los materiales dentales (Gange 2015; Zhang
et al. 2016). Estudios anteriores han demostrado que niveles de tensión superiores a 13
MPa pueden causar daños importantes en el esmalte durante el proceso de eliminación
(Retief 1974; Rix et al. 2001).
que el fallo adhesivo. Además, el uso prolongado de una fresa para eliminar la resina
puede afectar negativamente a la superficie del esmalte. Debido a estos inconvenientes
del fracaso de la resina cohesiva, otros médicos prefieren el fracaso adhesivo, que deja
menos resina en la superficie del diente.
la superficie del diente que los brackets cerámicos con retención química. Debido
a que la unión química entre la cerámica y el adhesivo es más fuerte que la unión
entre el bracket y el esmalte, la extracción de este tipo de brackets generalmente
no deja resina en la superficie del diente, lo que crea un riesgo de daño al
esmalte.
Debido a este problema, para facilitar la descementación de los brackets cerámicos,
los fabricantes han incorporado una pieza metálica en el diseño del bracket para
permitir que la base se flexione y se despegue durante la extracción. Se ha demostrado
que los brackets cerámicos modificados con una ranura metálica vertical o una base
esférica proporcionan una extracción fácil y segura (Bishara y Trulove 1990a,b;
Mundstock et al. 1999).
Los estudios que compararon la resistencia al corte de los brackets
metálicos y cerámicos mostraron que la unión es más fuerte entre la interfaz
cerámica-adhesivo que entre la interfaz metal-adhesivo (Mirzakouchaki et al.
2012; Ødegaard y Segner 1988). Además, ARI reveló que la ubicación del fallo
de la unión es principalmente entre el esmalte y el adhesivo con brackets
cerámicos. Por otro lado, con los brackets metálicos, la falla de unión se
localizó entre el bracket y el adhesivo. Por el contrario, Mirzakouchaki et al.
(2012) informaron que los dientes con brackets de cerámica tenían más
adhesivo en sus superficies que los dientes con brackets metálicos cuando se
examinaron ópticamente con un aumento de 10X.
Se ha demostrado que los brackets cerámicos modificados exhiben niveles de
resistencia al corte y puntuaciones ARI similares a los brackets metálicos (Bishara
y Trulove 1990a; Ødegaard y Segner 1988). Según anterior in vitroEn los estudios,
la puntuación ARI más común es 3, lo que indica que la falla de la unión ocurre
con frecuencia entre los brackets adhesivos y metálicos (Mundstock et al. 1999;
Ryf et al. 2012; Suliman et al. 2015). De manera similar, en unen vivoestudio,
Bonetti et al. (2011) observaron que la falla de la adhesión se producía con mayor
frecuencia en la interfaz entre el bracket metálico y el adhesivo, quedando el
100% de la resina en las superficies de los dientes. Ninguna de las muestras tuvo
una puntuación de 0, lo que indica una falla en la interfaz esmalte-adhesivo. Los
análisis se realizaron con un aumento de 35X.
Bishara y Fehr (1993) evaluaron las fuerzas de descementado durante la extracción
de brackets cerámicos. La fuerza de desunión se aplicó a ambos lados del adhesivo
colocando las hojas de los alicates cerca de la superficie del esmalte pero dentro de la
resina. Este método creó una grieta en la resina, y una vez que se inició la grieta, la
fuerza transmitida al esmalte se expresó en niveles mucho más bajos en comparación
con la carga en modo de corte aplicado en solo uno de los lados.
32Descementado y Retención Fija en Ortodoncia
lado (Gwinnett 1988; Maskeroni et al. 1990). El mismo estudio investigó el efecto del
ancho de la hoja del alicate sobre la fuerza de despegue generada durante la extracción
del bracket. Los hallazgos indicaron que las hojas estrechas produjeron una
disminución del 20% en los niveles de fuerza en comparación con las hojas más anchas.
Bishara y Fehr (1993) concluyeron que esta reducción significativa de la fuerza de
despegue minimiza el riesgo de daño al esmalte.
Sinha et al. (1995) informaron que despegar con alicates de bordes afilados que
aplican una fuerza bilateral en la interfaz base-adhesivo del bracket era el método
más efectivo para despegar brackets de ortodoncia de alúmina policristalina.
Los autores informaron que una falla en la unión adhesiva en la interfaz resina-
esmalte podría indicar una mayor posibilidad de daño al esmalte que los otros
métodos. Además, se observó que el instrumento de corte recto causaba el mayor
nivel de incomodidad, mientras que se descubrió que el alicate de despegue era
la herramienta de despegue más cómoda.
Otro método para retirar los brackets utiliza un dispositivo ultrasónico con puntas
especiales. Estudios anteriores han informado de fuerzas de descementado reducidas
con una punta de cincel empleada por ultrasonidos para la extracción de brackets
cerámicos (Bishara y Trulove 1990b; Boyer et al. 1995; Chen et al. 2015). Bishara y
Trulove (1990b) determinaron que se necesitaban entre 38 y 50 segundos de tiempo de
despegue con el método ultrasónico en lugar de 1 segundo con el método mecánico.
En un estudio similar, Boyer et al. (1995) determinaron que se necesitaban alrededor de
16 segundos para despegar los brackets por ultrasonidos. Los autores de ambos
estudios concluyeron que, aunque las fuerzas para despegar los brackets eran mucho
menores que para la descementación mecánica convencional, el largo tiempo de
extracción y la necesidad de niveles relativamente moderados de fuerzas de
descementación harían que este método fuera incómodo para los pacientes. El
desgaste excesivo y rápido de las costosas puntas ultrasónicas y la necesidad de
refrigeración con agua durante la desunión ultrasónica fueron desventajas adicionales
de este método (Bishara y Trulove 1990b). Por lo tanto, a pesar de los resultados
prometedores, la extracción ultrasónica de brackets nunca se ha convertido en el
método de elección para despegar.
falla del bracket cerámico, disminución del tiempo de descementado y daño potencial
mínimo al esmalte (Bishara y Trulove 1990a).
Una preocupación con la separación electrotérmica es el aumento de
temperatura en la cámara pulpar. Los estudios histológicos sobre cambios
celulares en las estructuras pulpares no mostraron patología ni otros hallazgos
anormales (Sheridan et al. 1986b). Este hallazgo fue confirmado posteriormente
por Kraut et al. (1991) en un estudio clínico que evaluó el nivel de comodidad del
paciente, los cambios histológicos en las células pulpares y el daño del esmalte. El
descementado se realizó en pacientes de ortodoncia cuyos premolares estaban
programados para extracción. Se informó que la desunión electrotérmica es
menos traumática en comparación con el método de desunión convencional.
Además, los análisis histológicos y de la superficie del esmalte de los dientes
extraídos no mostraron anomalías pulpares ni daños en el esmalte. Por tanto, el
estudio concluyó que el desprendimiento electrotérmico es una buena alternativa
al desprendimiento mecánico.
Stratman et al. (1996) compararon los métodos convencionales de descementado
mecánico y térmico para la extracción de brackets cerámicos. Estos autores informaron
que el uso de una unidad de descementado térmico para calentar las ranuras de los
brackets cerámicos proporcionó un medio eficiente para retirar los brackets. El sitio de
falla de la unión generalmente fue en la interfaz resina-bracket en lugar de la interfaz
resina-esmalte que se encuentra con el método de descementación mecánica. Se
informó que el tiempo de despegue fue de 2 ± 1 segundos por bracket.
Un estudio clínico realizado por Dovgan et al. (1995) evaluaron el tiempo que
llevó despegar los brackets con descementado electrotérmico junto con la
aceptación del paciente y los cambios pulpares. Se tardaron unos dos segundos
en quitar los brackets y los pacientes informaron una experiencia positiva.
Además, los exámenes histológicos no revelaron necrosis pulpar pero sí una
ligera alteración odontoblástica. Estudios posteriores sobre el efecto del calor en
la pulpa indicaron que la separación electrotérmica no aumenta
significativamente las temperaturas intrapulpales y, por lo tanto, es segura de
usar (Jost-Brinkmann et al. 1997; Kailasam et al. 2014).
que los del grupo de control. Por lo tanto, la alta retención del adhesivo en el grupo
láser resultó en menos o ningún daño al esmalte. Mundethu et al. (2014) también
demostraron que los brackets se pueden quitar de forma segura con un láser pulsado.
Alakus-Sabuncuoglu y Ersahan (2016) también informaron sobre un método seguro
para retirar brackets cerámicos utilizando el láser Er:YAG.
Oztoprak et al. (2010) informaron que el láser Er:YAG tiene menos efecto
térmico sobre el agente adhesivo, con poca conducción de calor a la pulpa. De
manera similar, otros estudios sobre los efectos del láser del calentamiento
intrapulpar y el daño pulpar indicaron que, si se controlan bien, Er:YAG y CO2
Los láseres se pueden utilizar de forma segura (Nalbantgil et al. 2011, 2014). De lo
contrario, la fuente de calor puede ser perjudicial para la pulpa debido a las altas
temperaturas generadas por dichos láseres (Ma et al. 1997; Wigdor et al. 1993). Yassaei
et al. (2015) investigaron la eficiencia del láser de diodo en la descementación de
brackets cerámicos. Estos autores concluyeron que con sus propiedades de bajo voltaje
y baja corriente, un láser de diodo ofrece una excelente alternativa a otros tipos de
láser sin riesgo para el esmalte o la pulpa. En la práctica diaria de la ortodoncia, el
elevado coste de los láseres es el principal inconveniente.
Hayakawa (2005) informó que el uso de un láser Nd:YAG de alta potencia
despegaba eficazmente los brackets cerámicos monocristalinos y policristalinos
con niveles de fuerza significativamente más bajos que el método convencional.
Por el contrario, Nasiri et al. (2019) observaron que el láser Nd:YAG no disminuyó
la resistencia al corte al retirar los brackets metálicos. También se pensaba que el
láser era perjudicial, ya que podía aumentar significativamente la temperatura
pulpar. Por tanto, se concluyó que el láser no era adecuado para retirar brackets
metálicos.
En general, cuando se utilizan láseres para descementar brackets, el tiempo
dedicado a retirar los brackets cerámicos, los niveles de fuerza y el riesgo de daño al
esmalte son menores que con la descementación mecánica convencional utilizando
alicates (Ghazanfari et al. 2016).
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Strobl, K., Bahns, TL, Wiliham, L. et al. (1992). Despegado asistido por láser de
3.1 Introducción
Dadas las interacciones del agente grabador con la estructura del esmalte
(Buonocore 1981), se ha informado una pérdida de capas superficiales de tejido que
varía entre 20 y 50 μm después del acondicionamiento, lo que al mismo tiempo permite
que las etiquetas de resina del adhesivo de la superficie de la base del bracket durante
la unión a penetrar las capas de esmalte (Silverstone et al. 1975). Por tanto, se prevé
una fuerza de unión suficiente entre los brackets, de forma análoga a la unión del
esmalte con materiales restauradores. Sin embargo, este proceso habitualmente
estándar de preparación del esmalte, que se lleva a cabo de forma relativamente
Consideraciones de adhesión y descementación en pacientes de ortodoncia45
(Lagarde et al. 2020; Sönmez y Saat 2017). La investigación sobre otros defectos del
desarrollo, como los dientes afectados por la IA, también respalda un efecto beneficioso
de la desproteinización (Ahmed et al. 2019), y la evidencia de efectos nulos del agente
desproteinizante proviene de estudios experimentales con animales (Pugach et al.
2014).
Sin embargo, las estrategias de descementación para proteger la integridad y la
estructura de la estructura del esmalte comprometida no se han estudiado
ampliamente y la evidencia es escasa hasta la fecha. El potencial destructivo y los
efectos de la desunión junto con los inevitables efectos secundarios de la etapa de
grabado antes de la unión se han reconocido desde hace mucho tiempo con respecto al
esmalte previamente intacto (Eliades 2006). Sin embargo, hay evidencia de que la
conformación estructural y las propiedades ópticas del esmalte se ven afectadas incluso
en uniones sin grabado, es decir, tras la utilización de cemento adhesivo de ionómero
de vidrio (Eliades et al. 2004). Se ha especulado que el proceso de descementado
impone la mayor carga de daño al sustrato del esmalte, en lugar de los procedimientos
involucrados en la preparación del tejido para la unión (Eliades 2006; Øgaard et al.
2004). Además, También se ha investigado el tipo de aparatos fijos y el uso de brackets
para determinar el mayor riesgo de daño a la superficie del esmalte, siendo los brackets
cerámicos un 20 % más propensos a producir grietas en el esmalte y daños a la
estructura del esmalte después de despegarlos (Dumbryte et al. 2015). Como tal, se
debe tener precaución al tratar dientes afectados con defectos de desarrollo, y las
modalidades de tratamiento y los complementos deben seleccionarse cuidadosamente.
Actualmente no existe ningún informe empírico sobre la estrategia más eficaz para la
limpieza del adhesivo-resina después de la desunión cuando existe un defecto en el
esmalte. El conocimiento en este campo puede recuperarse de la evidencia clásica
relacionada con la instrumentación de corte en la práctica (Siegel y von Frauhofer
1999a,b). A este respecto, puede preferirse la selección de una fresa de tungsteno
frente a una fresa de corte de diamante debido al modo de acción: la fresa de
tungsteno sigue un proceso de corte de flujo plástico y es más adecuada para cortar
eficazmente sustratos dúctiles como compuestos, teniendo mucho cuidado al la interfaz
entre el esmalte defectuoso y los restos de adhesivo. Por otro lado, las fresas de
diamante generan importantes tensiones de tracción y formación de astillas, lo que
provoca la propagación de grietas en el material que pueden continuar dentro del
esmalte (Eliades y Koletsi 2020).
Actualmente, se están investigando nuevos materiales de instrumentación de corte (fresas
de fibra de vidrio o de composite reforzadas con fibra) para lograr una eliminación más suave
del composite. Después de la limpieza de la resina, estos materiales tienen
Consideraciones de adhesión y descementación en pacientes de ortodoncia47
Se ha informado que produce superficies de esmalte con una rugosidad mínima que se
asemejan al esmalte natural intacto (Shah et al. 2019).
Amelogénesis imperfecta (AI)representa un grupo de condiciones del desarrollo, de origen genómico, que
afectan la estructura y la apariencia clínica del esmalte y pueden estar asociadas con cambios morfológicos o
bioquímicos en otras partes del cuerpo, afectando el estado de salud general. La prevalencia de la IA varía de 1:
700 a 1: 14.000 (condicional a la población en estudio) y se presenta con cuatro fenotipos distintos del esmalte
(Witkop 1989), como se ve en la Tabla 3.1. El esmalte puede presentarse como hipoplásico (HPAI),
afectados pueden estar descoloridos, sensibles o propensos a la desintegración (Pires Dos Santos et al. 2008;
Seow 2014). El diagnóstico se basa en los antecedentes familiares, el trazado del pedigrí y la observación clínica
detallada del fenotipo. Los patrones de herencia pueden ser autosómicos dominantes, autosómica recesiva,
ligada al sexo y esporádica. La evidencia reciente muestra mutaciones en uno de los genes AMEL, ENAM,
FAM83H, WDR72, KLK4 y MMP20 que se sabe que afectan la formación del esmalte y están asociados con la
mitad de los fenotipos de IA. En la otra mitad, los genes implicados se desconocen actualmente (Seow 2014).
Con respecto a las consideraciones de ortodoncia, los niños con AI pueden exhibir una mayor prevalencia de
maloclusión de mordida abierta anterior y erupción dental acelerada que la población no afectada (Chen et al.
2013). También se ha informado que la falla del bracket es una situación frecuente. Con respecto a las
consideraciones de ortodoncia, los niños con AI pueden exhibir una mayor prevalencia de maloclusión de
mordida abierta anterior y erupción dental acelerada que la población no afectada (Chen et al. 2013). También
se ha informado que la falla del bracket es una situación frecuente. Con respecto a las consideraciones de
ortodoncia, los niños con AI pueden exhibir una mayor prevalencia de maloclusión de mordida abierta anterior
y erupción dental acelerada que la población no afectada (Chen et al. 2013). También se ha informado que la
Fenotipo oral de IA Hallazgos del esmalte Hallazgos radiográficos defecto desarrollo consideraciones
amelogénesis Hipoplásico (IAAP) Esmalte de reducido Contrastes de esmalte Cuantitativo Una posición Liso -
imperfecta (AI) 60-73% de la IA espesor. Superficie normalmente de la dentina.
Deshuesado +
áspero liso,
(Witkop 1989)
picado o ranurado Preocupaciones por la separación
La prevalencia es
1: 700 a
1: 14000
Dependiendo de
la población
estudió.
Hipomaturación (HMAI) Espesor normal de El esmalte tiene lo mismo. Cualitativo Pre-eruptivo Vinculación y
20-40% de la IA esmalte, mudado radiopacidad como la dentina. maduración preocupaciones de desunión
apariencia, suave,
Alternativa
chips de distancia
metodos de ortodoncia
formación de cálculo
Hipocalcificado (HCAI) Espesor normal de Esmalte menos radiopaco Cualitativo Calcificación NaOCl 5%
7% de la IA esmalte, friable, suave, que la dentina desproteinización
desintegrándose rápidamente, de color (Ahmed et al. 2019;
amarillo anaranjado en Saroğlu et al. 2006;
erupción Venezie et al. 1994)
tinción y
formación de cálculo
hipoplásico y El esmalte ha mudado Esmalte con el mismo Cuantitativo Una posición Preocupaciones por la separación
suaves
50Descementado y Retención Fija en Ortodoncia
Esmalte Capa más fina de esmalte. Cuantitativo Una posición Restauración del esmalte antes
hipoplasia de la colocación del bracket.
(Continuado)
Tabla 3.2(Continuado)
fluorosis Leve Esmalte Cualitativo Calcificación La fuerza de unión del bracket puede
hipomineralización con porosidades verse afectada negativamente.
subsuperficiales debido al exceso de
Promotores de adherencia
fluoruro en los ameloblastos durante la
(Baherimoghadam
formación del esmalte, lo que resulta
et al. 2016)
en opacidades blancas que se
presentan como estrías que afectan Desproteinización
Moderado (Sharma et al.2017)
dientes homólogos
Con respecto a la adhesión del material restaurador a los dientes MIH, los hallazgos de
estudios clínicos y de laboratorio destacan la disminución de la fuerza de unión al esmalte
afectado, atribuida a un patrón de grabado desigual, la reducción de las microetiquetas dentro
de la varilla del prisma, la capacidad del prisma para retener la humedad y el aumento del
contenido de proteínas (Lagarde et al.2020).
Se ha introducido la desproteinización del esmalte con NaOCl para mejorar la
fuerza de unión y la adhesión. Los resultados de un estudio clínico durante un
período de dos años revelaron una tasa de supervivencia significativamente
mayor de los composites de resina (Sönmez y Saat 2017). Sin embargo, los
resultados dein vitro Los estudios no están en línea con el uso de NaOCl (Lagarde
et al. 2020). También se podría considerar reforzar el esmalte poroso con una
aplicación infiltrante como Icon antes de la adhesión para aumentar la fuerza de
la unión y disminuir aún más las grietas del esmalte al despegar; sin embargo,
Icon muestra una penetración inconsistente en el esmalte afectado por MIH
(Marouane y Manton 2021). La evidencia ha revelado una penetración errática o
deficiente de Icon en el esmalte afectado por MIH, independientemente de si el
grabado se realizó con ácido fosfórico o clorhídrico. El uso combinado de
infiltrantes y la aplicación adicional de NaOCl en el esmalte MIH afectado no
mejoró significativamente los agentes adhesivos (Krämer et al. 2018).
3.3.3 Fluorosis
fluorosis dentalse refiere a defectos del desarrollo del esmalte inducidos
por el fluoruro. La fluorosis dental se presenta como una
hipomineralización del esmalte inducida por una ingestión excesiva de
fluoruro, es decir >0,05 mg/kg, que se deposita en el diente en
desarrollo durante la etapa de formación del esmalte y específicamente
durante las fases secretora y de maduración de la amelogénesis
(DenBesten 1999). En la fluorosis, la presencia y el efecto del exceso de
fluoruro en los ameloblastos durante la formación del esmalte dan
como resultado porosidades superficiales y subsuperficiales. La
prevalencia de niños y adolescentes con fluorosis dental oscila entre el 4
y el 70%, siendo las formas más leves las más comunes. Los dientes
levemente fluorados se caracterizan por un esmalte estrecho, difuso y
mal delimitado, líneas blancas bilaterales y una mayor porosidad
subsuperficial. Las formas más graves pueden incluir una coloración
amarilla/marrón,
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4.1 Introducción
aparatos e impedir el fácil acceso a las superficies de los dientes para su limpieza
(Øgaard 2008). Los efectos de descementado sobre el esmalte pueden afectar los
atributos ópticos del diente en diversos grados, ya que la capa superior del diente
puede modificarse del orden de 10 μm mediante grabado ácido, descementado,
limpieza y pulido (Boncuk et al. 2014; Zhu et al. 2014). ).
Se ha demostrado que los compuestos de resina para pulido influyen en la rugosidad
de la superficie (SR) y el brillo, y también se encontraron correlaciones significativas
limitadas entre el color y los parámetros SR y brillo. El efecto difiere según el compuesto
y el tono (Hosoya et al. 2011). También se ha demostrado que los procedimientos de
descementado de ortodonciain vitropara alterar las características de la superficie de
dos tipos de sistemas de porcelana comúnmente utilizados en odontología protésica. Si
bien el pegado y despegado aumentaron todos los parámetros de rugosidad, también
alteraron significativamente los índices de brillo y color. El pulido posterior a la
separación no restauró la superficie al estado previo a la adhesión,
independientemente del método de pulido (fresa de carburo de 12 acanaladuras/discos
Sof-Lex además de la fresa). Se propone informar a los pacientes que las restauraciones
pueden dañarse en el momento de retirar los brackets (Jarvis et al. 2006).
L*
100 Blanco
Amarillo (+)
b*
a*
Azul (-)
0 Negro
Hay dos métodos comunes para analizaren vivoEl color aparente del diente:
determinación visual y medición instrumental (Billmeyer y Saltzman 1981). La
determinación visual mediante la comparación de dientes y guías de colores se
considera muy subjetiva, pero sigue siendo el método más frecuentemente
aplicado en odontología para la comunicación del color (van der Burgt et al. 1990).
Sin embargo, varios factores como las condiciones de luz externa, la experiencia,
la edad y la fatiga del ojo humano y las limitaciones inherentes de las guías de
colores contemporáneas pueden influir en la consistencia de la selección y
especificación visual del color (Billmeyer y Saltzman 1981; Preston 1985; Rubino et
al. 1994). La demanda de igualación objetiva de colores en odontología, junto con
los rápidos avances en sensores ópticos electrónicos y tecnología informática, ha
hecho de los dispositivos de medición instrumental un complemento a la
evaluación visual del color de los dientes (Paravina y Powers 2004). Hoy en día, los
sistemas comerciales, incluidos los colorímetros triestímulo, los
espectrorradiómetros, los espectrofotómetros y los analizadores de color
digitales, se utilizan en entornos clínicos y de investigación para la especificación
objetiva del color (Joiner 2004) (Figura 4.3).
Alteraciones relacionadas con el tratamiento de ortodoncia. Por lo tanto, esta sección describe
los resultados de los estudios de investigación contemporáneos sobre el efecto del
tratamiento de ortodoncia en el color de los dientes.
Varios factores etiológicos que afectan negativamente las variables de color de los
dientes naturales al alterar su superficie y características estructurales probablemente
estén asociados con alteraciones del color de los dientes relacionadas con el
tratamiento de ortodoncia. Disolución de cristalitos de apatita durante latécnica de
grabado ácidoaumenta la rugosidad microscópica del esmalte expuesto (Retief et al.
1986) y, por tanto, las características de dispersión de la luz de la superficie del diente
(ten Bosch y Coops 1995).Lesiones de manchas blancas, que se encuentran
frecuentemente durante el tratamiento de ortodoncia (Ǻrtun y Thylstrup 1986; Øgaard
et al. 1988), pueden curarse o remineralizarse si se mantienen libres de placa (Al-
Khateeb et al. 1998), pero es dudoso que los minerales en estas lesiones sean
depositado de la misma manera que en el esmalte sano (Øgaard et al. 2004). Además,
los métodos actuales dedescementado de bracketsyeliminación de adhesivoLos
protocolos típicamente resultan en alteraciones en la morfología del esmalte y
modificaciones de la textura (Zachrisson 2000; Zarrinnia et al. 1995), que no pueden
restaurarse con el uso de medios de pulido en las etapas posteriores al acabado
(Eliades et al. 2004a; Piacentini y Sfondrini 1996). . Estos cambios irreversibles pueden
afectar las propiedades ópticas de las superficies del esmalte, como el brillo y el lustre,
influyendo en consecuencia en los parámetros de color de los dientes naturales.
Ocasionalmente, las fracturas en la superficie del esmalte después de la extracción de
brackets de ortodoncia (Dumbryte et al. 2013) pueden proporcionar áreas de
estancamiento para el desarrollo de caries o decoloración (Zachrisson et al. 1980).
Las alteraciones del color del esmalte después del despegue también pueden
derivar de la penetración irreversible a largo plazo deetiquetas de resinaen la
superficie del esmalte (Eliades et al. 2001). Este fenómeno afecta el componente
de luz reflejada especularmente, influyendo así en los valores L* del sustrato del
diente (Chung 1994; Leibrock et al. 1997). Además, la decoloración del esmalte
infiltrado con resina puede surgir como resultado de la inestabilidad del color de
los compuestos de resina, atribuida a cambios endógenos de reacciones
fisicoquímicas dentro del material (Ferracane 1985), cambios exógenos de la
absorción superficial de colorantes alimentarios (Inokoshi et al. 1996), exposición
prolongada a materiales colorantes (Erdemir et al. 2012; Faltermeier
Correo-
Karamouzos AJODO pNRS 26 pacientes CC y LC fresa de carburo Preadherencia 2,12–3,61 ΔE Curado químicamente
et al. (2010) Máx./ adhesivos (baja velocidad) Correo- unidades la resina estaba asociada
Al-Maaitah AJODO ECA 34 pacientes Imprimación autograbante Espiral Preadherencia La media ortodoncia fija
et al. (2013) Máx./ y convencional 12 estriados 1 semana
color de dientes electrodomésticos causados
Mand. 3–3 grabado ácido tungsteno correo- diferencia después cambios de color de los dientes;
Kaya et al. AJODO pNRS 20 pacientes 3, 6, 12 meses 12 palas Correo- Media ΔΕ En el primer trimestre
(2018) 3–3 máx. seguimientos durante tungsteno despegue los valores fueron hubo un aumento
la retención fresa de carburo 3, 6 y 1,52–3,57 unidades. significativo en el
(baja velocidad) 12 meses después Claridad del color del
despegue diente.
(Continuado)
Tabla 4.1(continúa)
Correo-
Gorucu- Ángulo pNRS 59 pacientes Imprimación autograbante 12-, Preadherencia Media ΔΕ ortodoncia
Coskuner ortodoncia. 3–3 máx. y convencional 24 palas Correo- los valores fueron el tratamiento resultó en
et al. (2018) grabado ácido tungsteno despegue 4,2-4,8 unidades. visible y clínicamente
12, 24 palas carburo diente inaceptable
Después
fresas alteraciones de color
carburo de tungsteno pulido
fresas Sof-Lex a pesar de
pulido preparación del esmalte
Discos Sof-Lex XT
discos y limpieza
técnicas. Pulido
redujo el efecto de las fresas de
carburo de tungsteno
pero no afectó la
influencia total de
tratamiento de ortodoncia
en el color del diente.
Ratzman cara de la cabeza pNRS 15 pacientes Cuerpo y gingival N/A Preadherencia Media ΔΕ Dentro de las limitaciones
et al. (2018) Medicina.
14, 24 segmentos de dientes Correo- los valores estaban arriba de este estudio, el tratamiento
del pulido con alta velocidad) antes y 1,4 a 2,1 unidades. en los que alta velocidad
el largo plazo.
Pinzan- AJODO ECA 6 pacientes Discos Soft-Lex/ 12 hojas Antes Total ΔΕ La ortodoncia fija
Vercelino dientes 4, Espiral Sof-Lex tungsteno vinculación diferencias aparato alteró el
et al. (2021) 5, 6 Ruedas fresa de carburo despues del diente osciló entre color esmalte.
(baja velocidad) pulido 10,88 a Discos Sof-Lex y
Máx./
14,1 unidades. Ruedas en espiral Sof-Lex
Mand. 30 días después
(Continuado)
Tabla 4.1(continúa)
Correo-
Tunca y J. Orofac. pNRS 25 pacientes Cuatro LC diferentes N/A Preadherencia Los valores de ∆E Aunque estadísticamente
Kaya (2021) ortopédico. 3–3 máx./ adhesivos Correo- eran 1,83–2,18 menos color de esmalte
Malekpour J. Orofac. pNRS 20 pacientes Fresa de carburo/carburo Carburo Inmediatamente la media total el aplicado
et al. (2022) ortopédico. fresa y disco Sof-Lex fresa/carburo 2 y 4 meses cambio de color concentraciones de
Aplicación de 10 días fresa y después
fue clínicamente nanohidroxiapatita
de nanohidroxiapatita. disco soft-lex despegue perceptible no lo hizo significativamente
reducir significativamente
cambios de color de los dientes
en breve.
CC, adhesivo curado químicamente; LC, adhesivo fotopolimerizable; NA, no aplicable; pNRS: estudio prospectivo no aleatorizado; ECA, ensayo clínico aleatorizado.
Cambios en el esmalte después del descementado79
Variosen vivoSe han realizado estudios para evaluar prospectivamente las alteraciones del
color de los dientes naturales asociadas con el tratamiento de ortodoncia fija (Tabla 4.1). Los
resultados de estos estudios indicaron que el tratamiento de ortodoncia provocó un cambio
de color promedio que oscilaba entre 1,12 y 4,95 ΔΕ unidades, excepto en un estudio (Pinzan-
Vercelino et al. 2021) donde las diferencias ΔΕ oscilaron entre 10,88 y 14,1 unidades. La
mayoría de los estudios concluyeron que el tratamiento de ortodoncia resultó en alteraciones
visibles y clínicamente aceptables y/o inaceptables del color de los dientes,
independientemente de la preparación del esmalte y las técnicas de unión/descementación y
limpieza. Los estudios de seguimiento a largo plazo encontraron que los mayores cambios se
presentaron durante los primeros tres meses después de la extracción de los aparatos de
ortodoncia (Karamouzos et al. 2019; Kaya et al. 2018). Diferencias en los valores de ΔΕ entre los
en vivo Los estudios se explicaron por las características del estudio, como el diseño del
estudio, el entorno, el dispositivo de medición del color, el número de pacientes, la edad, los
aparatos, la duración del tratamiento, los procedimientos clínicos durante la adhesión y la
descementación, el resultado medido, la unidad de medición y el momento.
no significativo después del tratamiento con aparatos fijos (Tunca y Kaya 2023).
Otro estudio no informó ningún efecto del tipo de diente sobre el cambio de color
inducido por el tratamiento (Al Maaitah et al. 2013).
En cuanto a la superficie vestibular de los dientes anterosuperiores, el tercio
medio presentó valores de ΔΕ significativamente mayores que los tercios incisal y
gingival. Una posible explicación es que el tercio medio del diente no queda
expuesto a los fluidos orales ni al cepillado dental ya que está cubierto por el
bracket (Al-Laban 2015). Sin embargo, en otro estudio clínico, los segmentos del
cuerpo y de las encías presentaron ligeras diferencias de color (Ratzmann et al.
2018).
4.2.12 Adhesivos
in vitroLas investigaciones sobre los efectos de diferentes materiales adhesivos de
ortodoncia sobre la alteración del color del esmalte indicaron que los adhesivos
probados estaban asociados con cambios en los parámetros de color CIELAB de los
dientes adheridos (Boncuk et al. 2014; Haghighi et al. 2020; Trakyali et al. 2009). El
cemento de ionómero de vidrio modificado con resina mostró la menor diferencia de
color y los grupos de resina curada químicamente mostraron los valores ΔΕ más altos
entre todos los adhesivos de ortodoncia probados.in vitro(Wu et al. 2018; Ye et al. 2013).
Chen et al. BMC oral Sistemático Aleatorizado Cinco estudios: tres Cuatro ensayos fueron No hay pruebas sólidas de
(2015) Salud revisar Pruebas controladas aleatorio evaluado como siendo esta revisión de que
y prospectivo Pruebas controladas poco claro respecto El tratamiento de ortodoncia
revisado y dos prospectivos el riesgo de sesgo. con aparatos fijos altera el
estudios clínicos estudios (cuatroin uno fue evaluado color original del esmalte.
vitro y unoen vivo) como en alto Más bien diseñado y
riesgo de sesgo. - realizado de forma aleatoria
Se requieren ensayos controlados
para facilitar las comparaciones de
resultados.
cámara J. Orofac. Sistemático Aleatorizado cuatroen vivo Muy bajo debido a La evidencia existente de baja calidad
et al. (2018) ortopédico. revisión y ensayos clínicos y estudios: tres no la inclusión de indica que el tratamiento de ortodoncia
metanálisis futuro aleatorio y uno no aleatorio puede estar asociado con alteraciones
no aleatorio aleatorio estudios, sesgos y del color de los dientes que no son
controlado o imprecisión consistentemente clínicamente
sin control discernibles.
escuadrón de estudio Las alteraciones de color inducidas
por el tratamiento pueden
depender del material de unión y
del tipo de diente, pero la evidencia
que respalda esto es débil.
86Descementado y Retención Fija en Ortodoncia
Se encontró que muchos de los estudios tenían un riesgo de sesgo alto o grave. Los
problemas más problemáticos fueron los tamaños de muestra pequeños que pueden afectar
la determinación de una diferencia estadísticamente significativa entre las intervenciones, la
asignación al azar poco clara, la confusión debido a variables no controladas, la falta de
cegamiento y de informes selectivos o los datos faltantes.
Finalmente, aunque las evaluaciones del color con el protocolo CIELAB son más
objetivas y consistentes que las inspecciones visuales subjetivas del color, todavía
son propensas a errores sistemáticos y aleatorios (Douglas 1997; Russell et al.
2000). Los errores sistemáticos son inherentes a todos los instrumentos y resultan
de técnicas de calibración, fluorescencia, metamerismo de instrumentos y
variaciones en la geometría de medición (Seghi et al. 1989). Estos errores son
difíciles de gestionar y se puede esperar que afecten negativamente a la precisión
del instrumento independientemente del grado de precisión o control del entorno
(Berns 2000). La incertidumbre durante el proceso de medición se asocia
principalmente con errores aleatorios.
Se han sugerido varios métodos para reducir el efecto perjudicial de la
variabilidad de las mediciones de color, incluido el uso de mediciones
múltiples y el promedio o un mejor control de los factores
metodológicos y ambientales (Seghi et al. 1989).
4.2.15 Conclusiones
En las últimas dos décadas, los pacientes y los ortodoncistas han comenzado a poner
más énfasis en la estética como motivo de tratamiento, y la ortodoncia se ha convertido
en parte de una explosión mucho mayor en los procedimientos de 'odontología
cosmética' que incluyen blanqueamiento dental y carillas (Micu y Carstairs 2018). ). Un
alto porcentaje de ortodoncistas de práctica privada en los EE. UU. (88,8%) tuvo
pacientes que solicitaron blanqueamiento dental y habían recomendado
procedimientos de blanqueamiento (76,2%) (Slack et al. 2013), lo que refleja una
tendencia en constante aumento dentro de la especialidad (Micu y Carstairs 2018).
Hasta el momento, cuatroin vitroestudios y dosen vivoLos estudios han probado el
efecto del blanqueamiento post-tratamiento de ortodoncia (Gomes Lde et al. 2013;
Hintz et al. 2001; Jadad et al. 2011; Koumpia et al. 2022; Lunardi et al. 2014; Wriedt et al.
2008). En un estudio de incisivos bovinos, se encontró que la respuesta al proceso de
blanqueamiento era independiente de las alteraciones del esmalte causadas por los
procedimientos de unión/descementación. Pero no se consideraron los efectos del
fotoenvejecimiento y la decoloración general, y las mediciones espectrofotométricas
finales se registraron dos semanas después de la separación (Wriedt et al. 2008).
(Shah et al. 2019) y microscopía de fuerza atómica (AFM) (Kubínek et al. 2007). La
perfilometría, rugosimetría y AFM proporcionan datos numéricos
tridimensionales (3D) del SR para su posterior evaluación. SEM proporciona
información bidimensional (2D); por lo tanto, se requieren índices de evaluación
visual del esmalte para realizar análisis estadísticos (Sugsompian et al. 2020).
Índices que incluyen el índice de superficie del esmalte (ESI) (Pont et al. 2010), el
índice de daño del esmalte (EDI) (Alessandri Bonetti et al. 2011; Baumann et al.
2011) y el sistema de clasificación de la superficie del esmalte (ESRS) (Schiefelbein
y Rowland 2011 ) han sido empleados en estudios SEM. Aunque el SEM se aplica
ampliamente, se considera un método subjetivo (Winchester 1991).
El análisis de perfiles, los modos láser de diamante de contacto y sin contacto,
además de los sistemas de medición de la reflectividad láser, se aplican con
frecuencia para mediciones de perfiles de superficies (Joniot et al. 2000;
Whitehead et al. 1999). Se han descrito limitaciones de la perfilometría de
superficie con respecto a la sensibilidad del método (Whitehead et al. 1995, 1996).
AFM utiliza alta resolución, a nivel de nanómetro, y múltiples escaneos mecánicos
3D para analizar las irregularidades de la superficie (Binnig et al. 1986) y ofrece
varias ventajas (Kakaboura et al. 2007; Karan et al. 2010; Tholt de Vasconcellos et
al. 2006).
Al finalizar el tratamiento de ortodoncia activo, el descementado del bracket y la
eliminación del adhesivo contribuyen a la formación de áreas o surcos prominentes en
la superficie del diente, lo que provoca manchas en el esmalte (Joo et al. 2011). La
rugosidad de la superficie puede estar asociada con la acumulación de placa y la
retención bacteriana (Bollen et al. 1997; Joo et al. 2011), lo que genera preocupaciones
estéticas. Aunque la cicatrización de la superficie del esmalte después de la ortodoncia
parece inevitable, se han introducido varias técnicas que tienen como objetivo afectar
mínimamente la microestructura del esmalte. Estos incluyen instrumentos manuales
(alicates, raspadores), dispositivos ultrasónicos, diversas fresas, discos de óxido de
aluminio, unidades de abrasión por aire y láseres de diodo de la familia de erbio.
El esmalte SR ha sido ampliamente evaluado cualitativamente (Brauchli et al.
2011; Campbell 1995; Caspersen 1977; Faria-Júnior et al. 2015; Fitzpatrick and Way
1977; Radlanski 2001; Retief and Denys 1979; Shah et al. 2019; Smith et al. . 1999;
Vieira et al. 1993; Zachrisson 1977) y cuantitativamente (Eichenberger et al. 2019;
Eliades et al. 2004a; Hong y Lew 1995; Hosein et al. 2004; Ireland et al. 2005;
Pinzan-Vercelino et al. 2021; Pont et al. 2010; Roush et al. 1997; Shah et al. 2019;
Tüfekçi et al. 2004). En uno de los primeros estudios SEM, los autores concluyeron
que una rueda de goma verde era más eficaz y menos destructiva para el esmalte
que una fresa de carburo de tungsteno.
(Gwinnett y Gorelick 1977). Los resultados de este estudio contradicen los de Zachrisson y
Arthun (1979), donde las fresas de carburo de tungsteno obtuvieron mejores resultados que
las ruedas de caucho verde, pero los dos estudios emplearon métodos diferentes de
evaluación de la superficie del esmalte.
Zarrinia et al. (1995) compararon siete procedimientos diferentes de eliminación de adhesivos. Se descubrió que las fresas de
diamante eran extremadamente destructivas, mientras que las fresas de carburo de tungsteno eran más eficientes para eliminar el
adhesivo, seguidas de los discos Sof-Lex y una copa de goma con pasta Zircate. En estudios SEM que utilizan evaluación visual subjetiva,
una fresa de carburo de tungsteno demostró ser el método más rápido (Eminkahyagil et al. 2006), pero bastante agresivo, para eliminar
el adhesivo. La superficie más rugosa se observó después de la eliminación del adhesivo con piedra de Arkansas (Osorio et al. 1998) y la
más suave con discos de óxido de aluminio Sof-Lex (Eminkahyagil et al. 2006) y micropulidores PoGo (Ulusoy 2009), aunque ambas
técnicas consumieron mucho tiempo (Eminkahyagil et al. 2006; Ulusoy 2009; Zarrinnia et al. 1995). Hong y Lew (1995), utilizando el índice
de rugosidad superficial (SRI), Llegó a la conclusión de que el diamante ultrafino producía la superficie más rugosa y las fresas de
carburo de tungsteno proporcionaban la mejor suavidad superficial. EDI tras el uso de una fresa de carburo de tungsteno puntuada
como grado 0 en 8 dientes, grado 1 (superficie aceptable, rayones finos dispersos) en 13 dientes y grado 2 (superficie rugosa,
numerosos rayones gruesos o ligeros surcos) en 3 dientes (Alessandri Bonetti et al. 2011). Otro estudio SEM comparó la eficacia de
fresas de carburo de tungsteno, fibra de vidrio y polímero y una fresa de polímero con un pretratamiento con etanol al 75%. Las fresas
de polímero fueron menos efectivas y requirieron más tiempo para eliminar la resina restante que las fresas de carburo y fibra de vidrio
(Soares Tenório et al. 2020). grado 1 (superficie aceptable, rayones finos dispersos) en 13 dientes y grado 2 (superficie rugosa,
numerosos rayones gruesos o surcos leves) en 3 dientes (Alessandri Bonetti et al. 2011). Otro estudio SEM comparó la eficacia de fresas
de carburo de tungsteno, fibra de vidrio y polímero y una fresa de polímero con un pretratamiento con etanol al 75%. Las fresas de
polímero fueron menos efectivas y requirieron más tiempo para eliminar la resina restante que las fresas de carburo y fibra de vidrio
(Soares Tenório et al. 2020). grado 1 (superficie aceptable, rayones finos dispersos) en 13 dientes y grado 2 (superficie rugosa,
numerosos rayones gruesos o surcos leves) en 3 dientes (Alessandri Bonetti et al. 2011). Otro estudio SEM comparó la eficacia de fresas
de carburo de tungsteno, fibra de vidrio y polímero y una fresa de polímero con un pretratamiento con etanol al 75%. Las fresas de
polímero fueron menos efectivas y requirieron más tiempo para eliminar la resina restante que las fresas de carburo y fibra de vidrio
tenían una altura reducida (Eliades et al. 2004a). Este hallazgo concuerda con
otras investigaciones que indican cambios irreversibles en el esmalte después del
descementado (Ahrari et al. 2013; Al Shamsi et al. 2007; Banerjee et al. 2008;
Karan et al. 2010; Piacentini y Sfondrini 1996; Ryf et al. 2012).
Karan et al. (2010) compararon los efectos de una fresa de carburo de tungsteno y
una fresa de composite sobre la SR del esmalte después de la descementación. La fresa
de composite proporcionó una superficie de esmalte más suave, pero el tiempo
necesario para la eliminación de la resina fue mayor que con la fresa de carburo (Karan
et al. 2010). En un estudio en el que se probaron discos Sof-Lex y fresas de fibra de
vidrio, se concluyó que ningún procedimiento de limpieza restauró el esmalte a su
rugosidad original, pero los discos Sof-Lex demostraron ser la técnica más exitosa (Ozer
et al. 2010).
Se ha sugerido que una pulidora, un acabado y un eliminador de residuos de
adhesivo de un solo paso pueden lograr una superficie de esmalte más suave que una
fresa de carburo de tungsteno (Janiszewska-Olszowska et al. 2016). Basado en los
resultados de Fan et al. (2017), al evaluar tres técnicas de eliminación de resina, una
pulidora OneGloss dejó las superficies del esmalte más cercanas al esmalte intacto; Los
discos Super-Snap proporcionaron superficies aceptables, aunque dejaron varios
rayones profundos; y una fresa de diamante no era adecuada para eliminar restos de
adhesivo (Fan et al. 2017).
Se ha propuesto que el uso de una lupa dental por parte del profesional puede
afectar la calidad del procedimiento de descementado, causando menos daño al
esmalte y una mejor eliminación de la resina (Baumann et al. 2011). En un estudio de
AFM, se compararon los valores de SR del esmalte después de la eliminación de la
resina con una fresa de piedra blanca, una fresa de carburo de tungsteno y una fresa de
carburo de tungsteno con lupa. La fresa de piedra blanca fue la técnica que requirió
más tiempo para la eliminación del adhesivo. Los tiempos medios necesarios para la
eliminación de resina con la fresa de carburo sola y la fresa de carburo con una lupa
dental fueron similares (Mohebi et al. 2017).
La morfología de la superficie del esmalte también se ha evaluado después de
la retirada del bracket lingual mediante perfilometría interferométrica óptica 3D
(Eichenberger et al. 2019). Las mediciones se realizaron antes y después del
descementado de los brackets linguales, luego del acabado del esmalte con
diamante fino y pulido con fresas de carburo de 12 y 20 aletas. Se probaron
cuatro parámetros de rugosidad y se calcularon las diferencias de parámetros. La
descementación de los brackets linguales del esmalte dio como resultado un
aumento en todos los parámetros de rugosidad. El parámetro más afectado fue el
parámetro híbrido Sdr, que mide la relación del área interfacial desarrollada,
(a) (b)
El brillo de la superficie dental afecta la apariencia y la vitalidad de los dientes (Terry et al.
2002). En la superficie labial de los dientes anteriores, la luz reflejada desde la anatomía
terciaria aumenta la vitalidad, mientras que cuando esta anatomía se desgasta con la edad, se
evidencia menos vitalidad (Figura 4.7). La morfología de la superficie del esmalte afecta la
cantidad y el tipo de reflejo. Una superficie rugosa permite una reflexión más difusa, mientras
que una superficie plana y más lisa permite una reflexión más especular: por ejemplo, la
cantidad de reflexión de la luz en las superficies del esmalte. en vivodespués del cepillado de
dientes se puede mejorar significativamente (Redmalm et al. 1985).
Figura 4.7Desgaste del esmalte de los incisivos inferiores (SpecroShade Micro; MHT,
Zurich, Suiza).
Estandarización de la técnica de despegue. Los diferentes hallazgos de los estudios pueden ser
específicos de los protocolos de unión/desunión utilizados, lo que podría conducir a resultados
diferentes para distintos protocolos de desunión.
También se pueden encontrar efectos en la superficie del esmalte al
unir con un ionómero de vidrio reforzado con resina sin grabado ácido
previo. Con este método, después del descementado y la limpieza, las
características superficiales predominantes del diente son las del
esmalte alterado. Esto se puede atribuir al hecho de que la retención
mecánica con estos materiales se limita a las características de flujo del
cemento, que permiten una adecuada humectación del esmalte y la
formación de un mecanismo de enlace molecular hidrolítico reversible
entre el calcio del esmalte y los grupos carboxilo del ionómero de vidrio
ionizado (Eliades et al. 2001). SEM también ha demostrado que el
acondicionamiento del esmalte con ácido poliacrílico al 10% antes de
unirlo con un cemento de ionómero de vidrio reforzado con resina
fotopolimerizable no altera la configuración fundamental de la
superficie del esmalte (Shinya et al. 2008).
Es difícil establecer la relación entre la percepción del brillo, resaltar las
disparidades y la aspereza (Methven y Chantler 2012). El aumento de la rugosidad
se correlaciona con un brillo reducido y una reflectancia difusa mejorada, lo que
conduce a una mayor luminosidad (L*) en el sistema Munsell; sin embargo, no
existen datos claros sobre la relación entre rugosidad y brillo. Se ha demostrado
que las superficies con SR nominal de la mitad de la longitud de onda de la luz
azul (aproximadamente 0,2 μm) aparecen muy brillantes. Además, la SR dental
facilita la acumulación de pigmentos orales, como el café, el té y el tabaco, que
pueden afectar la apariencia óptica del esmalte (Chung 1994; Davis et al. 1995;
Eliades et al. 2001).
También se sabe que la presencia de humedad puede influir en las mediciones
de brillo. La fina capa de agua que se forma sobre la superficie del diente tiene un
índice de refracción más bajo en relación con el esmalte u otros materiales
adhesivos debido al desarrollo de tensión superficial en la interfaz agua-aire. En
estas condiciones, la reflectancia de la superficie puede aumentar a medida que
disminuye la reflectancia difusa, un efecto conocido como "rugosidad húmeda",
que se ha demostrado que aumenta la suavidad de las superficies en el entorno
bucal. Esto también puede ser clínicamente útil para eliminar el material adhesivo
restante, ya que el secado al aire de la superficie adhesiva puede facilitar la
diferenciación del esmalte de los restos de adhesivo que parecen ser
relativamente blanquecinos (Sifakakis et al. 2018).
Patil et al. (2016) utilizaron un reflectómetro hecho a medida para estudiarin vitro el
efecto de diversos procedimientos durante el tratamiento de ortodoncia sobre el brillo
del esmalte. La reflectividad de los dientes se midió antes y después de la adhesión,
descementación y pulido con tres métodos (fresas de carburo de tungsteno, discos
Astropol y Sof-Lex). Ninguno de los métodos probados restauró la reflectividad original
del esmalte. Las fresas de carburo de tungsteno proporcionaron la menor reflectividad
de todos los sistemas evaluados, mientras que la reproducción más cercana de la
reflectividad del esmalte se logró utilizando discos Sof-Lex.
La limitada literatura disponible sugiere que los protocolos de descementado
comunes provocan cambios en el brillo del esmalte y sus efectos posiblemente se
minimicen al pulir con discos Sof-Lex. Sin embargo, se necesita más investigación
para investigar el efecto de varios factores, como los adhesivos de unión, las
modalidades de descementado y pulido y su importancia clínica, y/o examinar
posibles formas de minimizar los efectos perjudiciales de la desunión sobre el
brillo dental utilizando varios tipos de dentífricos.
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Departamento de Ortodoncia, Facultad de Odontología de Bristol, Universidad de Bristol, Bristol, Reino Unido
5.1 Introducción
Figura 5.1Una imagen de microscopio electrónico de barrido de las diversas formas y tamaños de
partículas producidas durante la limpieza del esmalte después del descementado de ortodoncia.
Figura 5.2Las partículas en el aire producidas durante la limpieza del esmalte aterrizan en los
labios del paciente y en los guantes del operador.
(PM = partículas), ya que es más probable que sean inhaladas y depositadas en el sistema
respiratorio humano. Los pulmones actúan como un filtro en serie, de modo que las PM más
grandes10Es probable que las partículas solo lleguen a la faringe, mientras que las partículas
con diámetros aerodinámicos más pequeños pueden depositarse más profundamente en el
sistema respiratorio. Las partículas grandes se depositan principalmente dentro del
revestimiento epitelial del tracto respiratorio superior mediante impactación inercial,
particularmente cuando el flujo de aire cambia de dirección abruptamente, por ejemplo en la
bifurcación de la tráquea o los bronquios, o por gravedad.
Figura 5.4Un esquema del sistema respiratorio humano y dónde se pueden depositar
las partículas con respecto a su diámetro aerodinámico medio de masa (MMAD) y cómo
se relacionan con las etapas del impactador en cascada Marple. Las partículas
inhalables ingresan por la nariz y la boca, la subfracción torácica de las partículas
inhalables penetra más allá de la laringe y la subfracción respirable llega a los alvéolos
de los pulmones.
Otros tamaños de clave que se describen a menudo son PM2.5(MMAD menos de 2,5
μm), que pueden llegar a los bronquios terminales, y ultrafinos (MMAD menos de 0,1
μm), que pueden llegar hasta los alvéolos de los pulmones. Al disminuir la velocidad del
aire en las partes más profundas de los pulmones, estas pequeñas partículas pueden
sedimentarse en las paredes de los bronquiolos y alvéolos (Möller et al. 2004). Incluso si
no se inhalan inmediatamente después de su producción, estas pequeñas partículas
pueden permanecer en el aire casi indefinidamente dentro de una modesta turbulencia
de aire y seguir planteando un riesgo de inhalación durante un tiempo considerable
después de su producción (Hext et al. 1999). La Figura 5.4 ilustra dónde se pueden
depositar partículas con diferentes MMAD en el sistema respiratorio humano.
Ciliados pseudoestratificados
célula epitelial columnar
células caliciformes
Figura 5.5Escalera mecánica mucociliar que recubre las vías respiratorias conductoras
del árbol respiratorio. La flecha grande indica la dirección de eliminación de las
partículas hacia la faringe.
5.1.2.3 Bioaerosoles
Los bioaerosoles pueden consistir en biomoléculas no viables (por ejemplo,
endotoxinas bacterianas), microorganismos no viables o microorganismos viables
(Boreson et al. 2004). Los bioaerosoles respirables pueden contener virus con un
tamaño de 0,001 a 0,025 μm (BožiCet al. 2013), bacterias en el rango de 0,25 a 20
μm y hongos en el rango de 1 a 30 μm (Gregory 1973). Por tanto, la probabilidad
de que una partícula (o gota) transporte un microorganismo aumenta a mayor
diámetro aerodinámico.
El efecto de la inhalación de bioaerosoles se ha descrito como infeccioso o
alergénico (Griffiths 1994), y la infectividad está relacionada con el diámetro
aerodinámico, la concentración de partículas, la viabilidad del organismo, la
patogenicidad, el flujo de aire, el clima y la resistencia del huésped (Cole y Cook
1998). Ejemplos de problemas de salud asociados con los bioaerosoles incluyen
enfermedades respiratorias específicas como el asma y el síndrome de dificultad
respiratoria aguda, e infecciones del tracto respiratorio menos específicas,
incluida la congestión nasal (Chew et al. 1999; Husman 1996; Skulberg et al. 2004;
Teeuw et al. (1994; Wallace 1996; Wyon et al. 2000).
Además de las bacterias, se ha implicado a los hongos en la etiología de las
respuestas alérgicas y los episodios infecciosos (Gravesen 1979), que provocan dolores
de cabeza y síntomas en los ojos, la nariz, los senos nasales y la garganta (Kuhn y
penetrar en las regiones más profundas de los pulmones. Más allá de la escalera
mecánica mucociliar, su tamaño geométrico, forma y naturaleza inerte significan
que a los macrófagos alveolares y las células mesoteliales de la pleura les resulta
difícil eliminarlos de los tejidos pulmonares (Feder et al. 2017), y su presencia está
asociada con el largo plazo. desarrollo de asbestosis y/o mesotelioma. No se
conocen niveles seguros de exposición a las fibras de amianto.
Los macrófagos alveolares también ingieren las partículas de sílice cristalina
que llegan a las zonas más profundas de los pulmones, más allá de la escalera
mecánica mucociliar. Como resultado, estas células secretan citoquinas
inflamatorias, lo que lleva a una proliferación de fibroblastos, que a su vez
producen colágeno para rodear las partículas de sílice. Esto da como resultado
fibrosis nodular y destrucción del tejido pulmonar circundante (Leung et al. 2012),
lo que eventualmente puede conducir a silicosis (neumoconiosis), para la cual no
existe cura conocida. La silicosis suele asociarse a trabajadores de industrias
como la minería, la construcción y la cantería, donde se producen grandes
cantidades de polvo de sílice.
Como resultado de las implicaciones para la salud de estas y otras partículas,
existen límites estrictos de exposición en el lugar de trabajo para muchos
materiales, incluida la sílice (HSE 2018). La siguiente sección analiza cómo estos
límites pueden aplicarse a la ortodoncia, basándose en la evidencia de que se
crean partículas en el aire durante la extracción de aparatos de ortodoncia con
instrumentos rotatorios.
Aunque las partículas pueden alcanzar diferentes niveles dentro del sistema respiratorio y, por
lo tanto, pueden eliminarse rápidamente o permanecer en su lugar indefinidamente, ¿existe
alguna evidencia dentro de la odontología de que esto cause algún riesgo para la salud?
Antes de describir la evidencia disponible, vale la pena revisar lo que sucede durante la
descementación ortodóncica. En el caso de brackets metálicos, se utilizan alicates de
descementado para retirar el bracket de la superficie del diente promoviendo la
iniciación y propagación de grietas (Figuras 5.6 y 5.7), generalmente en la región del
adhesivo de unión. Sin embargo, la falla de cohesión dentro de la resina es sólo uno de
los posibles modos de falla de la unión. Los otros incluyen
Soporte
Adhesivo
Esmalte
Figura 5.7Esquema de un bracket adherido a la superficie del esmalte. Las hojas de los
alicates de descementado generalmente se aplican en los márgenes del adhesivo para
iniciar y promover la propagación de grietas y el descementado del bracket.
De estos modos de fracaso, el fracaso del esmalte cohesivo y del bracket son,
afortunadamente, los menos comunes. La falla en la interfaz esmalte-resina es
mucho más común y casi inevitablemente implica cierta pérdida de esmalte, ya
sea durante la separación o durante la limpieza posterior del esmalte. Esto se
debe a la naturaleza de la unión mecánica entre la resina adhesiva y el esmalte
(Figura 5.8).
Los brackets cerámicos pueden fracturarse durante el tratamiento o en el momento
de despegarse y pueden implicar una falla cohesiva enteramente cerámica o ser parte
de una falla de modo mixto. En ambos casos, es posible que sea necesario retirar el
resto de la cerámica del diente utilizando una fresa de diamante en una pieza de mano
de alta velocidad bajo un rociador de agua refrigerante. Esto tiene el potencial de
resina adhesiva
Superficie de esmalte
Figura 5.8Esquema de la base del bracket y la resina adhesiva penetrando la superficie del
esmalte previamente grabada. La línea discontinua indica un posible lugar de falla de la
adhesión en el momento de despegar el bracket, que macroscópicamente puede parecer
estar en la interfaz entre el esmalte y el adhesivo. En cambio, es probable que se pierda algo
de esmalte a medida que la mayor parte del adhesivo se elimina durante la limpieza y algo
de resina adhesiva quedará dentro de la superficie del esmalte.
Principalmente SW y SD
MMAD decreciente
Principalmente FD
Principalmente FW
por ejemplo, a los ojos. Los WEL son el nivel máximo de partículas inhalables o
respirables al que debe estar expuesto un trabajador, y actualmente hay más de
500 sustancias a las que se aplican estos límites. En el Reino Unido, en 2018 se
publicó la última lista de orientación del Ejecutivo de Salud y Seguridad (HSE)
sobre estos materiales y sus límites (HSE 2018).
Quizás los de mayor relevancia para la ortodoncia sean los WEL para sílice, un
componente de relleno de muchos agentes adhesivos de resina. Aunque no existen
límites de exposición a corto plazo publicados, existen WEL publicados por HSE para
una exposición a largo plazo de 8 horas a sílice que van desde 6 mg/m3para partículas
inhalables entre 2,4 y 0,08 mg/m3para partículas respirables. En Estados Unidos, Collins
et al. (2005) examinaron un gran número de estudios que informaban sobre silicosis en
trabajadores mineros para determinar un REL crónico, que es la concentración en o por
debajo de la cual no se esperarían efectos adversos para la salud por exposición a largo
plazo (de por vida) en el población general (OEHHA 2000). Los REL crónicos se basan en
los efectos adversos para la salud informados que ocurren con la dosis más baja: para
la sílice respirable, esto es 3 μg/m3(Collins et al. 2005; OEHHA 2000), que es mucho más
bajo que el WEL del Reino Unido de 0,1 mg/m3asesorado por el HSE. Finkelstein (2000)
sugirió que 30 años de exposición a sílice a 0,1 mg/m3conduciría a un riesgo de por vida
de silicosis del 25% y a una exposición de por vida de 0,1 mg/m3
que partículas tan pequeñas pueden permanecer en el aire durante muchas horas en
aire no turbulento (Hext et al. 1999).
Figura 5.11La configuración experimental utilizada por Johnston et al. (2009) para probar el efecto de
la succión de alto volumen o una mascarilla en los niveles de partículas. En este caso, el muestreador
de aire está en una bolsa sellada detrás de una cabeza de maniquí de plástico transparente con una
mascarilla de papel sobre la nariz y la boca.
Esto implicó la eliminación de rebabas con una fresa de carburo de tungsteno en una pieza de
mano de baja velocidad sin agua refrigerante antes de la retirada normal del bracket y la
limpieza del esmalte. También simuló la extracción de brackets cerámicos fracturados
utilizando una fresa de diamante en una pieza de mano de alta velocidad con refrigeración por
agua, seguida de una limpieza del esmalte convencional utilizando una fresa de carburo de
tungsteno de baja velocidad sin agua refrigerante.
Se utilizó un impactador personal en cascada Marple para el análisis cualitativo
de las partículas producidas, que incluía la composición química y el posible nivel
que podrían alcanzar en los pulmones. También se llevó a cabo un análisis
cuantitativo utilizando un muestreador de aire activo en tiempo real pDr-1200
para determinar la concentración de partículas (mg/m3) producido con un MMAD
de 5 μm o menos.
Los resultados mostraron que el uso de HVE condujo a una reducción
del 43,5 % en la concentración de partículas respirables producidas
durante el descementado de los brackets metálicos y la posterior
limpieza del esmalte utilizando una fresa de carburo de tungsteno en
una pieza de mano de baja velocidad sin refrigeración por agua. En el
caso de los brackets cerámicos y HVE, la concentración de partículas se
redujo en un 25% cuando la limpieza del esmalte se realizó con una
fresa de carburo de tungsteno en una pieza de mano de alta velocidad
con refrigeración por agua. Trabajos anteriores sobre dispositivos de
succión también han demostrado que son capaces de reducir el nivel de
partículas en el aire, siendo el HVE más efectivo que la succión con
evacuador de bajo volumen (LVE) (Jacks 2002). Sin embargo, a diferencia
del estudio de Johnston et al. (2009), Nimmo et al.
Enfriamiento por agua, se produce una gran cantidad de partículas en el aire. Una vez
más, la mascarilla en el estudio de Johnston et al. (2009) redujeron la concentración de
partículas en el aire a niveles comparables con los que se obtienen después de un
descementado normal de brackets cerámicos y una limpieza del esmalte con una fresa
de carburo de tungsteno de baja velocidad en condiciones secas y sin refrigeración por
agua.
1)Una pieza de mano de baja velocidad se seca con una fresa de carburo de tungsteno, pero sin
2)Se seca una pieza de mano de baja velocidad con una fresa de carburo de tungsteno después del
3)Una pieza de mano de baja velocidad se seca con una fresa de carburo de tungsteno después del
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6.1 Introducción
Publicado anteriormente como Koletsi, D., Belibasakis, GN y Eliades, T. (2020). Intervenciones para
reducir los microbios en aerosol en la práctica dental: una revisión sistemática con metanálisis en red
de ensayos controlados aleatorios.J. Dent. res. 99 (11): 1228-1238.
Comparador
ID del estudio Participantes Intervención (una o > 1) (uno o > 1) Resultado
Dawson et al. 2016 nRS, 18 pacientes endescementado de brackets 1)velocidad lenta Velocidad lenta Carga bacteriana en UFC
3 brazos paralelos de ortodoncia; edad RN; muestreo de aire pieza de mano, 0,2% pieza de mano, no (cultivo anaeróbico), con
Lugar: hospital
durante 15 minutos durante el CHX gluconato PMR PMR PCR y DGGE, a 30 cm de
desprendimiento 2)velocidad lenta distancia de muestreo [no
ortodoncia
(incluido el aspirador de alto pieza de mano, estéril enjuague bucal realizado
departamento
volumen en el sillón) PMR de agua mejor]
Duración del enjuague: 1min
Devker et al. 2012 90 pacientes; 18 a 45 años; muestreo 1)0,2% CHX antes del Combinación de Carga bacteriana en UFC
nRS, brazo paralelo 3 de aire durante 10 minutos durante el escalado 0,2% CHX más (cultivo aeróbico), con placas de
(más dentro del grupo escalado ultrasónico Duración del enjuague: 2min Accesorio HVE agar sangre y colonia.
contadores, a 15, 30, 90 cm de
control)Configuración: NR Controles de boca dividida 2)Accesorio HVE Duración del enjuague:
escalado ultrasónico
(140 mmHg)
dos Santos et al. 2014 23 pacientes durante 0,2% CHX PMR Sin PMR Carga bacteriana (cultivo
nRS, cruzado tratamiento de ortodoncia( Duración del enjuague: 1 min. aeróbico) en UFC, con placas de
en profilaxis dental agar sangre y colonia
Entorno: universidad
procedimiento con bicarbonato de contadores, a una distancia de
sodio en aerosol); edad: 10 a 40 años; muestreo no mensurable
muestreo de aire durante 4 minutos (informes: cara del médico, 10 cm
durante el procedimiento de profilaxis por debajo de la boca, región
torácica del paciente)
Feres et al. ECA de 2010, 4 60 pacientes (no periodontitis 1)0,05 % de CPC antes del 1)PMR de agua Carga bacteriana en UFC (cultivo
brazos paralelos avanzada); entre 30 y 70 años; escalado 2)2. sin PMR anaeróbico), a 30 cm de distancia de
muestreo de aire durante 10 minutos 2)0,12% CHX antes del muestreo. Además, muestras de 39
Entorno: universidad
durante el escalado ultrasónico escalado pruebas orales/
Las especies de bacterias periodontales se
Duración del enjuague: 1min
analizaron utilizando el tablero de ajedrez
ADN-ADN.
técnica de hibridación (% medio de
recuento de sondas de ADN)
Bien y col. ECA de 18 pacientes (ADA enjuague bucal antiséptico 5% hidroalcohol Carga bacteriana (cultivo
1992, cruzado caso periodontal tipo I, II); (no especificado) PMR enjuague de control aeróbico) en UFC, a 5 cm de
edad: NR (adultos); aire Duración del enjuague: 30 s distancia de muestreo
Entorno: universidad
muestreo durante 10 minutos durante el
escalado ultrasónico
Gupta y cols. ECA de 2014, 24 pacientes (crónicos 1)0,2% CHX PMR PMR de agua Carga bacteriana (cultivo
paralelo de 3 brazos periodontitis); 25 a 55 años; muestreo 2)HRB PMR aeróbico) en UFC, a 30 cm de
de aire durante 30 minutos durante el distancia de muestreo
Entorno: universidad Duración del enjuague: 1min
escalado ultrasónico más 30 minutos
después
Holloman et al. ECA de 52 pacientes; edad media 45 Isolite (sistema de aislamiento eyector de saliva Carga bacteriana (cultivo
2015, paralelo de 2 brazos (grupo de intervención), media dental acoplado a (adjunto a anaeróbico) en UFC, a 15 cm
40 (control); muestreo de aire succión de alto volumen volumen bajo de distancia de muestreo
Entorno: universidad
(duración NR) durante manguera) manguera de succión)
(Continuado)
Tabla 6.1(Continuado)
Comparador
ID del estudio Participantes Intervención (una o > 1) (uno o > 1) Resultado
Jawade et al. ECA de 2016, 30 pacientes (crónicos 1)Líquido ultrasónico Agua destilada Carga bacteriana (cultivo NR)
paralelo de 3 brazos periodontitis); 22 a 55 años; muestreo refrigerante: 2% PI más (refrigerante) en UFC, de 40 cm a 2 m
de aire durante 20 minutos durante el agua destilada
Configuración; universidad
escalado ultrasónico más 20 minutos 2)Líquido ultrasónico
después refrigerante: 0,12% CHX
más agua destilada
Joshi y cols. ECA de 2017, 40 pacientes (crónicos 1)0,05% CPC PMR (47°) 1)0,05% CPC Carga bacteriana (cultivo
paralelo de 4 brazos gingivitis); media de edad 32,4; 2)0,2% CHX PMR (47°) PMR (18°) aeróbico) en UFC, a 30 cm de
muestreo de aire durante 30 2)0,2% CHX distancia de muestreo
Entorno: universidad Duración del enjuague: 1 min
minutos durante el escalado PMR (18°)
ultrasónico más 30 minutos después
Duración del enjuague:
1 minuto
Kaur et al. ECA de 2014, 60 pacientes; entre 20 y 50 años; 1)0,2% CHX PMR riego por onza Carga bacteriana (cultivo aeróbico
paralelo de 3 brazos muestreo de aire durante 10 minutos 2)1% PI PMR y anaeróbico) en UFC, a una
durante el escalado ultrasónico más distancia de muestreo de 22 a 275
Entorno: universidad Duración del aclarado: NR
30 minutos después, tanto antes cm
como después de la PMR
Rey y col. ECA de 12 pacientes; edad de 21 a 63 Escalador ultrasónico con Escalador ultrasónico Carga bacteriana (cultivo
1997, boca dividida años (media 39); muestreo dispositivo de reducción de aerosoles sin aerosol aeróbico) en UFC, a 15 cm de
durante 5 min durante el (es decir, alto volumen dispositivo reductor distancia de muestreo
Entorno: universidad
escalado ultrasónico más 25 min tubo de succión conectado al
después de eso escalador)
Logotetis y 18 pacientes; edad de 25 a 54 años, 1)0,12 % CHX PMR Agua destilada Carga bacteriana (cultivo aeróbico) en
Martínez-Welles 1995 media 38; muestreo durante 30 2)Antiséptico Duración del enjuague: UFC, a una distancia de muestreo de 60
ECA, paralelo de 3 brazos minutos durante el pulido con aire enjuague bucal con 30 segundos
a 275 cm
más 30 minutos después aceites esenciales PMR
Entorno: universidad
Duración del enjuague: 30 s
Mamajiwala et al. ECA 2018, 60 pacientes (gingivitis moderada a 1)CHX añadido en agua destilada en Carga bacteriana en UFC
paralelo de 3 brazos grave); entre 15 y 55 años; muestreo DUWL DUWL (aeróbicas y anaeróbicas)
durante 20 minutos durante el 2)CIN añadido en DUWL cultivo), dentro del rango de 30
Entorno: universidad
escalado ultrasónico cm de distancia de muestreo
Mohán y 20 pacientes; entre 25 y 40 años; 0,2% CHX PMR Solución salina normal Carga bacteriana (cultivo NR) en
Jagannathan 2016 muestreo durante el escalado Duración del enjuague: 1min PMR UFC, a 90 cm de distancia de
ECA, paralelo de 2 brazos ultrasónico/duración NR Duración del enjuague: muestreo
Narayana et al. 2016 45 pacientes; edad RN; muestreo de 1)0,12 % CHX PMR Combinación de Carga bacteriana (cultivo aeróbico)
nRS, paralelo de 3 brazos aire durante el escalado ultrasónico 2)HVE 0,12% CHX y en UFC, con placas de agar sangre
(más dentro del grupo durante 5 minutos
Duración del enjuague: 30 s
HVE y contadores de colonias;
control) Duración del enjuague: muestreo
distancia NR
Ajuste: NR 30 segundos
Pablo y col. 2020 nRS, 3 60 pacientes; entre 18 y 55 años 1)0,2% CHX PMR 94,5% AV PMR Carga bacteriana (cultivo
brazos paralelos (media 37,4, DE 10,3); muestreo de 2)1% PI PMR Duración del enjuague: aeróbico) en UFC, a 30 cm de
aire durante el escalado ultrasónico distancia de muestreo
Entorno: universidad Duración del enjuague: 1min 1 minuto
durante 20 minutos
(Continuado)
Tabla 6.1(Continuado)
Comparador
ID del estudio Participantes Intervención (una o > 1) (uno o > 1) Resultado
Purohit et al. 2009 20 pacientes; edad RN; 1)Escalado ultrasónico 1. Ultrasónico Carga bacteriana (cultivo aeróbico) en
nRS, paralelo de 2 brazos muestreo de aire durante (a) con 0,12% CHX escalando sin UFC, a una distancia de muestreo de
(más dentro del grupo raspado ultrasónico (profilaxis PMR 0,12 % CHX PMR 15 a 60 cm
control) oral) y (b) restauración dental 2)Diente de turbina de aire 2. Diente de turbina de
mediante de alta velocidad aire de alta velocidad
Entorno: universidad
turbina de aire de alta velocidad restauración con restauracion
pieza de mano 0,12 % CHX PMR sin 0,12%
Duración del enjuague: 30 s CHX PMR
Duración del enjuague:
30 segundos
Rajachandrasekaran 50 pacientes; entre 20 y 50 años; 0,12 % CHX PMR HRB PMR Carga bacteriana (cultivo aeróbico) en
et al. 2019 muestreo de aire durante el escalado Duración del enjuague: 1min Duración del enjuague: UFC, a una distancia de muestreo de
nRS, paralelo de 2 brazos ultrasónico durante 30 minutos 1 minuto 60 a 275 cm (aislamiento selectivo de
Entorno: universidad
cepas de bacterias)
Rani y col. ECA de 2014, 36 pacientes; 18 a 35 años; muestreo de 1)0,2% CHX PMR PMR de agua Carga bacteriana (cultivo NR) en
paralelo de 3 brazos aire durante el escalado ultrasónico 2)HRB PMR Duración del enjuague: 30 s UFC, en el tórax del paciente y
durante 10 minutos del operador (30 cm)
Lugar: hospital Duración del enjuague: 30 s
Reddy et al. ECA de 2012, 30 pacientes; edad RN; 1)0,2% CHX templado Agua esteralizada Carga bacteriana (cultivo NR) en
paralelo de 3 brazos muestreo durante el escalado (47 °C) PMR PMR UFC, a 10 cm de distancia de
ultrasónico/duración NR 2)0,2% sin templar muestreo
Lugar: hospital Duración del enjuague:
orales/periodontales.
analizado utilizando el
tablero de ajedrez ADN–ADN
técnica de hibridación (% medio de
recuento de sondas de ADN)
Sainí 2015 120 pacientes (crónicos 1)CIO2PMR PMR de agua Carga bacteriana (cultivo NR) en UFC,
ECA, paralelo de 3 brazos periodontitis); 18 a 55 años; 2)0,2% CHX PMR Duración del enjuague: a una distancia de muestreo de
muestreo durante el escalado 30-245 cm (principalmente 30 cm)
Entorno: universidad Duración del enjuague: 1min 1 minuto
ultrasónico durante 10 minutos o
más 30 pausas, más 10 después
asignación a PMR
Swahney y cols. 2015 60 pacientes (gingivitis leve 1)CHX 0,2% PMR 1)CHX 0,2% PMR Distribución del crecimiento
ECA, paralelo de 3 brazos a moderada); 25 a 54 años; 2)Listerine PMR 2)Listerine PMR microbiano en porcentajes, a una
Sethi et al. ECA 2019, 60 pacientes (gingivitis 1)CHX como refrigerante agua destilada como Carga bacteriana (cultivo
paralelo de 3 brazos moderada a grave); entre 18 y ultrasónico ultrasónico aeróbico) en UFC, a 30 cm de
55 años (media 29,26; DE, 2)CIN PMR como refrigerante distancia de muestreo
Entorno: universidad
2,8); muestreo durante refrigerante ultrasónico
escalamiento ultrasónico para
20 minutos
(Continuado)
Tabla 6.1(Continuado)
Comparador
ID del estudio Participantes Intervención (una o > 1) (uno o > 1) Resultado
Shetty et al. ECA de 2013, 60 pacientes; edad RN; muestreo 1)0,2% CHX PMR Agua destilada Carga bacteriana (cultivo
paralelo de 3 brazos durante el escalado ultrasónico 2)Aceite de árbol de té PMR Duración del enjuague: aeróbico) en UFC, entre 15 y
Entorno: universidad
durante 10 minutos
Duración del aclarado: NR NR 30 cm
Swaminathan 30 pacientes; entre 18 y 50 años; muestreo 1)0,2% CHX PMR Solución salina normal Carga bacteriana (cultivo aeróbico)
et al. 2014 durante el escalado ultrasónico durante 30 2)HRB PMR PMR en UFC, a una distancia de
ECA, paralelo de 3 brazos minutos Duración del enjuague: muestreo de 30 a 90 cm
Duración del enjuague: 1min
Entorno: universidad 1 minuto
Toroglu et al. 2001 26 pacientes; edad Despegue/adhesivo Estándar Carga bacteriana (cultivo
nRS, paralelo de 2 brazos grupo de intervención 11-13; grupo eliminación, a través de la ortodoncia aeróbico) en UFC, a 30 cm o
(más dentro del grupo de control de edad de 10 a 15 años; uso de una pieza de mano de procedimientos que menos de muestreo
control) muestreo durante turbina de aire, con agua no requirió distancia; también pruebas
descementado de ortodoncia enfriamiento y evacuación a turbina específicas para Staphylococcus,
Ajuste: NR
procedimientos (5 min de tiempo de baja velocidad pieza de mano, con Actividad de estreptococos y
trabajo, más 25 min (0,2% CHX como dentro del velocidad lenta oxidasa.
después de eso) grupo de control) evacuador
1 minuto
Waghmare et al. ECA 60 pacientes; 20 a 28 años; muestreo 1)1% CIO2PMR Solución salina normal Carga bacteriana (cultivo
2018, paralelo de 3 brazos durante el escalado ultrasónico 2)0,2% CHX PMR PMR aeróbico) en UFC, a 30 cm de
durante 30 minutos distancia de muestreo
Ajuste: NR Duración del enjuague: 1min Duración del enjuague:
1 minuto
NCT02319668 2017 38 pacientes; edad de 18 a 64 0,2% CHX PMR Sin PMR Carga bacteriana (cultivo anaeróbico)
ECA, paralelo de 2 brazos años, media 27,9, DE 10,5; Duración del enjuague: 1min en UFC, en determinadas posiciones
muestreo durante dental alrededor de la unidad dental
Ajuste: NR
profilaxis (procedimiento no
especificado)
AV,Aloe vera; UFC, unidades formadoras de colonias; CHX, clorhexidina; CIN, canela; CIO2, dióxido de cloro; CPC: cloruro de cetilpiridinio; DGGE, electroforesis en gel con gradiente
desnaturalizante; DUWL, línea de flotación de la unidad dental; HRB: enjuague bucal a base de hierbas; HVE, evacuador de gran volumen; NR, no reportado; nRS: estudios prospectivos no
aleatorizados; OZ, ozono; PCR, reacción en cadena de la polimerasa; PMR, enjuague bucal previo al procedimiento; PI: povidona yodada; DE: desviación estándar; SF, fluoruro de sodio; Zn,
lactato de zinc.
Fuente:Según los hallazgos de Koletsi et al.J. Dent. res. 99 (11): 1228-1238.
154Descementado y Retención Fija en Ortodoncia
se utilizaron en todos los estudios para recolectar las bacterias en aerosol, mientras que
posteriormente se incubaron y analizaron aeróbicamente y/o anaeróbicamente en
contadores de colonias. La distancia de muestreo osciló entre 5 y 275 cm, lejos de la
cavidad bucal de los pacientes, y la mayoría de los ensayos investigaron distancias
cercanas, como la región torácica del paciente, la cara del médico u objetivos
específicos alrededor de la unidad dental, donde la presencia de la clínica el personal
podría estar en juego. Estos objetivos estaban dentro del rango de 15 a 90 cm.
Curiosamente, solo dos estudios informaron sobre especificaciones adicionales de
especies bacterianas, mediante técnicas de hibridación ADN-ADN de tablero de ajedrez,
midiendo el porcentaje medio de recuentos de sondas de ADN (Feres et al. 2010;
Retamal-Valdes et al. 2017). Sin embargo, estos incluían principalmente microbios
orales/periodontales, en lugar de especies que puedan causar infecciones oportunistas
no orales. El muestreo de aire en todos los estudios tuvo una duración de 5 minutos
durante el procedimiento dental hasta 35 minutos después de su finalización. La
variedad de intervenciones reportadas, independientemente del procedimiento dental
implementado en la práctica, fue la siguiente: enjuague bucal previo al procedimiento
(PMR) con clorhexidina (CHX) 0,2%, 0,12% o CHX templado 0,2%, cloruro de cetilpiridinio
PMR (CPC) 0,05% , uso de evacuador de alto volumen (HVE) junto con CHX o solo,
escalador ultrasónico con tubo de succión de alto volumen conectado, PMR a base de
hierbas (es decir, árbol de aceite,Aloe vera), ozono (OZ), povidona yodada PMR (PI), CHX
0,12% o PI utilizados como refrigerantes ultrasónicos, CHX o canela (CIN) utilizados en
líneas de agua de unidades dentales (DUWL), dióxido de cloro (CIO2), así como controlar
intervenciones no activas como agua, agua destilada, solución salina normal, simple
eyector de saliva o ninguna PMR. Para las intervenciones relacionadas con soluciones
PMR, la duración fue de 30 segundos a 2 minutos (Tabla 6.1).
HVE
CHX 0,12%
Pi
Control
Figura 6.1Gráfico de red, con todas las intervenciones contribuyentes y su matriz de comparación.
Los colores de los bordes indican el riesgo de sesgo (RoB) de los estudios que contribuyen a las
comparaciones relativas (azul oscuro: "bajo RoB"; amarillo: "algunas preocupaciones"). El tamaño de
los nodos de color azul claro es análogo a la contribución del tamaño de la muestra para cada
intervención en general.Fuente:Adaptado de Koletsi et al. 2020 / con permiso de SAGE.
0,50 0,03
CHX 0,12%
(-0,66, 1,66) (-1,01, 1,08)
Las comparaciones se indican mediante la columna frente a la fila que define la intervención antes del raspado ultrasónico. Las diferencias de medias negativas (-)
están a favor de lacolumna presentaron intervenciones, lo que indica una carga reducida de patógenos. Los resultados del metanálisis directo se presentan encima de
la diagonal de manera similar. Las diferencias de medias para comparaciones en la dirección opuesta se pueden obtener mediante la conversión de valores negativos
a positivos y viceversa.
158Descementado y Retención Fija en Ortodoncia
Figura 6.2Gráfico de intervalos, que permite la representación gráfica de los tamaños del
efecto (y los respectivos intervalos de confianza del 95 %), mediante comparaciones de
tratamientos en toda la red. [A, CHX 0,12%; B, CHX 0,2%; C, CIO2; D, PCC; E, HRB; F, HVE; G, OZ;
H, PI; Yo controlo; J, CHX templado 0,2%].Fuente:Adaptado de Koletsi et al. 2020 / con permiso
de SAGE.
1
.8
.8
.8
.8
.8
.6
.6
.6
.6
.6
.4
.4
.4
.4
.4
.2
.2
.2
.2
.2
Probabilidades
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
CHX 0,2% Partido Comunista de China HVE Pi temperatura CHX 0,2%
1
1
.8
.8
.8
.8
.8
.6
.6
.6
.6
.6
.4
.4
.4
.4
.4
.2
.2
.2
.2
.2
0
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Figura 6.3Rankogramas para las 10 intervenciones en competencia. El eje horizontal describe el orden de las clasificaciones, mientras
que el vertical muestra la probabilidad (escala 0-1) de que cada intervención se clasifique en primer, segundo lugar. . . Décimo, en
términos de efectividad para disminuir la carga de patógenos después del uso del escalador ultrasónico.Fuente:Adaptado de Koletsi et
al. 2020 / con permiso de SAGE.
Mejor (1º) 16,9 3,5 1,6 8,0 7.0 1,3 19,2 11,3 0,0 31.2
2do 11,2 11,3 8,0 11,8 8.7 2,2 12,9 10,6 0,0 23.3
3er 8,2 23,0 13,7 12,8 6,8 3,9 9,6 7,3 0.0 14.7
4to 6,2 25,9 23,0 11,6 7,9 4,2 6,4 5,3 0.0 9.5
SUCRA 53,0 66,4 59,0 55,9 44,4 31,5 57,8 44,2 9,1 78,6
valores (%)
CHX, clorhexidina; CIO2, dióxido de cloro, CPC, cloruro de cetilpiridinio; HRB, tratamiento
relacionado con sustancias herbarias; HVE, evacuador de gran volumen; OZ, ozono; PI: povidona
yodada; Control, cualquier intervención no activa (agua, solución salina normal, ningún
tratamiento); SUCRA, superficie bajo el valor de ranking acumulado; temp CHX, clorhexidina
templada (47 °C).
Procedimiento dental/
# ID del estudio Configuración Comparación DM (IC del 95 %)a valor p
1 dawson Limpieza del esmalte después CHX 0,2 % como PMR frente a PMR con 0 (-2,3, 2,3) 1.0
et al. 2016 ortodoncia fija agua esterilizada 2,5 (0,5, 4,5) 0,01
descementado de electrodomésticos CHX 0,2 % como PMR frente a sin
con velocidad lenta enjuague
pieza de mano y
fresa de carburo de tungsteno
(faringe simulada
nivel)
Limpieza del esmalte después CHX 0,2 % como PMR frente a PMR con 0,4 (-1,1, 1,9) 0,60
ortodoncia fija agua esterilizada 1,2 (-1,1, 3,5) 0,31
descementado de electrodomésticos CHX 0,2 % como PMR frente a sin
con velocidad lenta enjuague
pieza de mano y
fresa de carburo de tungsteno
(nivel de alvéolos
respiratorios simulado)
2 Jawadé Uso de refrigerantes durante el CHX 0,12 % frente al refrigerante PI − 33,3 (−55,3, −11,2) 0.003
et al. 2016 escalado ultrasónico. CHX 0,12 % frente a agua − 97,3 (−117,5, −77,1) <0,001
refrigerante − 64,1 (−91,9, −36,2) <0,001
PI versus agua refrigerante
3 Logotetis Pulido por aire CHX 0,12 % como PMR frente a HRB − 71,2 (−79,7, −62,7) <0,001
y como PMR − 69,5 (−80,2, −58,8) <0,001
Martínez- Agua como PMR frente a HRB como 1,7 (-11,2, 14,6) 0,80
Welles 1995 PMR
4 mamajiwala Uso de solución CHX frente a CIN en DUWL 32,5 (-15,7, 80,7) 0,19
et al. 2018 extractos en DUWL CHX frente a agua en DUWL − 814,0 (−872,1, −755,9) <0,001
durante ultrasonido
CIN frente a agua en DUWL − 846,5 (−906,1, −786,9) <0,001
escalamiento (aeróbico
cuenta)
Uso de solución CHX frente a CIN en DUWL − 57,1 (−69,1, −45,1) <0,001
extractos en DUWL CHX frente a agua en DUWL − 318,2 (−338,0, −298,4) <0,001
durante ultrasonido
CIN frente a agua en DUWL − 261,1 (−282,2, −240,0) <0,001
escalamiento (anaeróbico
cuenta)
5 purohit Comparación entre 2 Raspado ultrasónico versus 1,6 (-0,5, 3,7) 0,13
et al. 2009 procedimientos dentales en restauración dental mediante
la presencia de CHX pieza de mano de alta velocidad
0,12% PMR
Comparación entre 2 Raspado ultrasónico versus − 13,1 (−16,3, −9,9) <0,001
procedimientos dentales restauración dental mediante
sin PMR pieza de mano de alta velocidad
(Continuado)
Tabla 6.4(Continuado)
Procedimiento dental/
# ID del estudio Configuración Comparación DM (IC del 95 %)a valor p
6 sethi Uso de refrigerantes durante el CHX 0,2 % frente a refrigerante CIN CHX 0,2 51,5 (31,5, 71,5) <0,001
et al. 2019 escalado ultrasónico. % frente a refrigerante de agua CIN frente a − 768,8 (−864,2, −673,4) <0,001
refrigerante de agua − 820,3 (−915,4, −725,2) <0,001
7 Toroglu Comparación entre 2 Despegue/compuesto 49,2 (19,4, 79,0) 0.001
et al. 2001 ortodoncia eliminación (turbina de aire
procedimientos pieza de mano, con agua
enfriamiento y evacuación a baja
velocidad) versus prácticas de
ortodoncia de rutina
Sin pieza de mano, pero con
evacuación a baja velocidad.
El signo menos (-) muestra un mejor efecto para el primer grupo informado en la reducción de la carga de patógenos y viceversa. Las negritas indican comparaciones estadísticamente
significativas.
aEn UFC (unidades formadoras de colonias) según lo informado en estudios individuales (sin transformación logarítmica de los datos); CHX, enjuague bucal previo al procedimiento;
CIN, canela; DUWL, líneas de agua de unidades dentales; HRB, a base de hierbas; PI: povidona yodada; PMR, enjuague bucal previo al procedimiento.
Manejo de patógenos en el aire165
Durante mucho tiempo se ha considerado que las partículas son activadoras del sistema
respiratorio, llegando incluso a penetrar profundamente en los pulmones (Dawson et al. 2016;
Napierska et al. 2010; Oberdörster et al. 2005). Las preocupaciones antes mencionadas se ven
aumentadas por la conciencia más reciente sobre la propagación microbiana, la suspensión en
el aire y la estabilidad en aerosoles y superficies. Un informe actualizado, basado en
simulaciones inducidas experimentalmente, ha sugerido que la cinética de estabilidad de los
coronavirus relacionados con el síndrome respiratorio agudo severo (tanto el SARS-CoV-1
como el SARS-CoV-2) puede mantenerlos viables en aerosoles durante al menos al menos 3
horas, aunque con un título infeccioso reducido (van Doremalen et al. 2020). La presencia y
detectabilidad del SARS-CoV-2 en la saliva de pacientes infectados impone un riesgo adicional
por su suspensión en aire después de un procedimiento dental que genera aerosoles (Azzi et
al. 2020). A esta línea, La identificación de intervenciones con una dinámica refinada de
reducción de la carga microbiana detectada después de procedimientos generadores de
aerosoles en el ambiente de la práctica odontológica en general, se considera una
contribución importante a la base de evidencia clínica. Las implicaciones para la toma de
decisiones y las consideraciones de seguridad en entornos ocupacionales de alto riesgo, tanto
para los pacientes como para los profesionales de la salud, están indiscutiblemente en camino,
y su aplicación es particularmente necesaria debido a la existencia de pandemias estacionales.
limpieza del esmalte después del tratamiento de ortodoncia con aparatos fijos (Dawson
et al. 2016) o eliminación masiva del accesorio después del tratamiento con alineadores
(Iliadi et al. 2020). A este respecto, las recomendaciones fundacionales de los Centros
para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. (Informe CDC 2016)
implican una serie de consideraciones de seguridad, como lo documentan las
precauciones contra aerosoles y líneas de agua, el equipo de protección personal y la
gestión de la ventilación.
Referencias
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bacteriana en la saliva y el aerosol producido durante el raspado. Asiático J. Pharm. Clínico. Res.7:
71–74.
Parte de este texto apareció anteriormente en el capítulo correspondiente del libro Eliades T,
Brantley WA (Eds) Orthodontic Applications of Biomaterials A Clinical Guide 1st Edition,
Elsevier 2016.
La eliminación del adhesivo resinoso después de la desunión sigue siendo una cuestión
de interés. La masa de adhesivo que queda sobre el esmalte se puede controlar hasta
cierto punto alterando las características interfaciales adhesivo-bracket para mejorar la
resistencia interfacial variando el contenido de relleno y las características de retención
de la base del bracket. Sin embargo, el uso de fresas tiene un efecto desfavorable sobre
la integridad del esmalte de dos maneras: (i) la generación de aerosoles compuestos
por partículas en el rango de 2,5 mm, que pueden ser inhalados y (ii) la potencial acción
estrogénica de estas partículas adhesivas. , debido quizás a la gran relación superficie-
volumen y al efecto del choque térmico sobre el adhesivo, que libera bisfenol A (BPA) en
estas condiciones (como se analiza más adelante en este capítulo). Hay una discusión
extensa sobre el BPA en el Capítulo 11.
Otras lecturas
Una de las principales ventajas de la fase inicial de los alineadores fue la ausencia
de implicación del esmalte en el tratamiento de las maloclusiones. Aunque el
espectro de aplicación del tratamiento con alineadores se limitó a los casos de
apiñamiento de Clase I, el hecho de que el tratamiento de ortodoncia de estos
casos no implicara una unión mediada por grabado ácido ofreció una ventaja
debido al mantenimiento de la integridad estructural del esmalte (Brosh et al.
2005; Eliades et al. 2004; Ioannidis et al. 2018; Ireland et al. 2005; Janiszewska-
Olszowska et al. 2016; Mohebi et al. 2017), con resultados favorables sobre el
potencial de lesiones de manchas blancas, descalcificación (Ogaard et al. 1988),
evitar el uso de instrumentos rotatorios para moler los restos de adhesivos
después de despegarlos y, esencialmente, una falta de cambios a largo plazo en
las propiedades ópticas del esmalte (Joo et al. 2011; Karamouzos et al. 2010;
Sifakakis et al. 2018), porque la ausencia de etiquetas de resina garantiza que la
superficie esté intacta.
Ampliar el espectro de indicaciones de los alineadores para el movimiento de
los dientes en los 3 planos del espacio requirió el uso de agarres adheridos al
esmalte para generar movimiento bucolingual, mesiodistal e incisocervical, lo que
anuló la ventaja de una superficie de esmalte intacta. Estos aditamentos de
composite utilizados junto con alineadores tienen dimensiones que varían de 2
mm a 5 mm y un grosor que puede exceder bien 1 mm (Dasy et al. 2015) y se
adhieren con mayor frecuencia a la superficie vestibular de múltiples dientes.
Además, los aditamentos compuestos utilizados en el tratamiento con
alineadores poseen una alta relación superficie-volumen, lo que afecta su
interacción con el medio ambiente.
En ortodoncia, específicamente en la unión de brackets de ortodoncia, el modo
de aplicación del adhesivo altera efectivamente el patrón de exposición del
material a la cavidad bucal con un efecto potencial en la reducción de su
reactividad con líquidos y otros materiales. El patrón de aplicación en sándwich,
donde el adhesivo se adhiere tanto al esmalte como a la base del bracket, permite
Los alineadores recién entregados que no han tenido uso clínico tienen
superficies igualmente rugosas en ambos lados debido al proceso de fabricación
industrial reproducible de estereolitografía, fresado y pulido que no incluye
mucha interferencia humana. Se ha informado que el uso intraoral de alineadores
durante el tratamiento reduce la rugosidad de la superficie del alineador que
entra en contacto con los accesorios de composite (Papadopoulou et al. 2019).
Esto se puede observar ya en la primera semana de servicio y conduce a una
disminución del coeficiente de fricción (Kusy y Whitley 1990) y, posteriormente, a
una reducción micromecánica de la retención de los alineadores con el diente.
y sus anexos. Por el contrario, la menor rugosidad de los alineadores recuperados después de una
exposición de 1 o 2 semanas podría explicarse por el desgaste intraoral tanto del accesorio del
alineador como del área lingual, con composite y esmalte, respectivamente, lo que indica un efecto de
pulido por el contacto de los alineadores recuperados después de una exposición de 1 o 2 semanas. el
alineador con las superficies de fijación de esmalte o resina compuesta, mucho más duras.
Los accesorios utilizados para el tratamiento con alineadores suelen estar fabricados
con resinas compuestas con una dureza de 400 a 700 N/mm.2Dureza de Marten (HM)
(Tabla 8.2) (Hassan et al. 2019; Sifakakis et al. 2017), mientras que el esmalte humano
tiene una dureza de aproximadamente 2866 N/mm2(Ioannidis et al.2018). Esto se
traduce en un aumento de 6 veces en la dureza de la resina compuesta y un aumento
de 23 veces en el esmalte humano en comparación con los alineadores Invisalign. Por lo
tanto, se puede anticipar que los alineadores estarán sujetos a un desgaste severo por
su contacto con los accesorios o el esmalte labial y/o lingual, lo que dará lugar a
superficies más suaves de los alineadores recuperados. Además, al existir una gran
diferencia en el HM de los composites y del esmalte, las superficies linguales pueden
presentar un desgaste más intenso, pero la morfología superficial y
Los valores son artículos de fuentes indicativas que indican diferencias no estadísticamente
significativas entre materiales que poseen un módulo en el rango de 6,9 a 7,4 GPa.
aNocontiene 2,2-bis(4-[2-hidroxi-3-metacriloil-loxipropil]-fenil)propano (Bis-
GMA).
informaron que los materiales PETG tienen una mayor resistencia al desgaste en
comparación con los materiales de polipropileno (Gardner et al. 2003), pero no existe
una comparación similar entre el PETG y los materiales a base de poliuretano (como el
que usa Invisalign). Asimismo, existe una gran variabilidad en los módulos de
indentación de los alineadores, que oscilan entre 1500 MPa y 2700 MPa (Kohda et al.
2013). Generalmente, se prefiere un módulo de elasticidad más alto, porque aumenta la
capacidad de entrega de fuerza de los aparatos bajo tensión constante. De lo contrario,
se pueden construir alineadores de materiales con un módulo de elasticidad más alto
con un espesor menor para proporcionar fuerzas similares (Kohda et al. 2013). Los
alineadores Invisalign tienen un índice elástico significativamente más alto que otros
materiales (2467 MPa frente a 2112-2374 MPa) (Alexandropoulos et al. 2015), lo que
indica un material ligeramente más quebradizo. Al mismo tiempo, la mayor fluencia de
la indentación de los alineadores Invisalign implica que bajo fuerzas oclusales
constantes ejercidas por la oclusión, es más probable que se deformen y, por lo tanto,
atenúen las fuerzas ortodóncicas aplicadas. Sin embargo, en resumen, estos datos
indican que los alineadores Invisalign muestran una combinación preferida de mayor
dureza y mayor módulo, pero al mismo tiempo, mayor resistencia a la fluencia que
otros materiales de alineadores.
Como regla general, la acción estrogénica se limita a moléculas con un doble anillo
benzoico, y su primera implicación con el material dental se informó en la saliva de
pacientes con selladores dentales (Olea et al. 1996), lo cual, sin embargo, sigue siendo
controvertido (Nathanson et al. 1997; Zampeli et al. 2012). Estudios realizados a finales
de la década de 1990 informaron un aumento del peso de la próstata y otros efectos
sobre el sistema reproductivo masculino en ratones expuestos a niveles de BPA por
debajo del estándar de seguridad (2 y 20 mg/kg) (Soto et al. 1986; Vom Saal et al. 1997).
Posteriormente se informó sobre una amplia gama de otros efectos, incluido el
aumento de tumores de glándula mamaria (Muñoz-de-Toro et al. 2005), lesiones
precancerosas en próstatas de animales expuestos neonatalmente (Timms et al. 2005),
desarrollo de hiperglucemia y tolerancia a la insulina ( Alonso-Magdalena et al. 2006),
elevación de especies reactivas de oxígeno (Ooe et al. 2005) y estrés oxidativo. La
confusión resultante sobre los disruptores endocrinológicos hormonales provocó la
investigación de la acción estrogénica de todo el espectro de materiales poliméricos
utilizados en las actividades cotidianas, incluidos utensilios de plástico y biomateriales
para aplicaciones médicas y dentales.
Como regla empírica, el potencial de liberación de BPA se limita a
materiales que contienen BPA como precursor durante el proceso
de fabricación. Cualquier polímero sin un anillo aromático en su
estructura está libre de esta preocupación; por lo tanto, los
retenedores acrílicos y otros polímeros de cadenas de carbono
lineales no tienen ningún riesgo conocido de liberación de BPA. Los
materiales de ortodoncia utilizados en el tratamiento de alineadores
que podrían ser propensos a la liberación de BPA incluyen
alineadores termoformados y resinas compuestas utilizadas para la
fabricación de aditamentos. Aunque, según se informa, muchos
fabricantes han abandonado los procesos que incluyen 2,2-bis(4-[2-
hidroxi-3-metacriloil-loxipropil]-fenil]propano) o BPA, los ensayos
han encontrado rastros de estos compuestos. Además,
dentro de los pulmones por masa determinada que las partículas más grandes (Borm et al.
2006; Napierska et al. 2010; Oberdörster 2001; Oberdörster et al. 2005).
Tras la retirada de brackets metálicos, bandas y adhesivo residual, se sabe
que tanto PM10y PM2.5Las partículas se producen en el aire del entorno
clínico (Ireland et al. 2003). Un estudio de laboratorio que investigó las
partículas producidas al retirar adhesivos de ortodoncia mostró que se
produjeron partículas de menos de 0,75 μm en MMAD, independientemente
de si se utilizó un instrumento rotatorio lento o de alta velocidad, ya sea en
seco o bajo refrigeración por agua. Sin embargo, la mayor cantidad de estas
partículas más pequeñas se produjo con el instrumento rotatorio de alta
velocidad utilizado en combinación con refrigeración por agua (Day et al.
2008). Lo mismo ocurrirá después del uso de múltiples accesorios de
composite con alineadores transparentes, pero potencialmente en un grado
aún mayor debido al volumen de composite que requiere extracción.
Se ha demostrado que las partículas respirables producidas durante la eliminación
del composite incluyen las siguientes: calcio y fósforo, muy probablemente del esmalte
dental; carbono y oxígeno muy probablemente de la resina aglutinante; tungsteno de la
fresa de desunión de carburo de tungsteno (Ireland et al. 2003) y hierro, muy
probablemente del cabezal y los cojinetes de la pieza de mano giratoria. El hierro es un
metal de transición altamente tóxico y en el PM2.5
La fracción se depositará en las regiones más profundas del pulmón. Las partículas
detectadas con mayor frecuencia estaban compuestas de sílice de la resina adhesiva
compuesta (Day et al. 2008). Aunque no se han reportado casos de silicosis entre los
ortodoncistas, existen límites estrictos de exposición a la sílice en el lugar de trabajo
(WEL).
En una investigación clínica y de laboratorio combinada sobre la producción de
partículas en la limpieza del esmalte después del uso de brackets metálicos
convencionales y de cerámica sin flash, se identificó sílice dentro de la fracción
respirable (MMAD\5 μm) de los aerosoles generados en todos los casos (Vig et
al.2019). Aunque no se superó el WEL para polvo, el WEL para sílice (0,1 mg/m3) se
superó en todos los experimentos, pero este sólo sería el caso si todas las
partículas producidas estuvieran compuestas de sílice, lo cual es poco probable.
No fue posible determinar qué fracción comprendía sílice sola. El WEL para sílice
es el promedio ponderado en el tiempo durante 8 horas. Aunque es poco
probable que un solo operador retire el composite continuamente durante 8
horas, la persistencia de partículas en el aire generadas previamente por el
mismo o por diferentes operadores, o cuando los médicos trabajan en entornos
clínicos de múltiples cirugías, podría
contribuir a que dicha exposición supere el WEL. Una vez más, lo mismo se
aplicaría a la extracción del implante de composite al finalizar el tratamiento con
alineadores transparentes, pero posiblemente en mayor grado, dependiendo del
número y tamaño de los implantes de composite utilizados.
Además de las partículas descritas hasta ahora, la eliminación del
compuesto adhesivo residual al finalizar el tratamiento también
conducirá a la generación de un bioaerosol. Se sabe que tan solo 5
minutos después de retirar los aparatos fijos y limpiar el esmalte,
hay un aumento significativo en la concentración de bioaerosol en
comparación con los niveles preoperatorios de la sala de descanso,
con microorganismos derivados de la cavidad bucal del paciente
(Dawson et al. 2016 ; Toroğlu et al. 2001). Es probable que esta
concentración se vea influenciada, en igualdad de condiciones, por
el tiempo necesario para la eliminación del composite y la superficie
del composite previamente expuesta al entorno bucal y que, por lo
tanto, podría estar contaminada con microorganismos bucales. En
ambos casos,
Al igual que con la extracción de composite con aparatos fijos convencionales, al
retirar los accesorios de composite después del tratamiento con alineadores
transparentes, el operador debe hacer todo lo posible para minimizar el riesgo de
inhalación utilizando una pieza de mano giratoria de baja velocidad y una fresa de
carburo de tungsteno con estrías en espiral (Johnston et al. 2009). De esta manera
también se minimizará el riesgo de daño al esmalte durante la extracción del composite
(Ireland et al. 2005). El operador también debe usar una mascarilla, complementada
con el uso de un evacuador de gran volumen mantenido cerca de la boca del paciente.
Además, la eliminación del composite no debe realizarse utilizando un rociador de agua
refrigerante, ya que esto aumenta aún más el riesgo de aerosol (Johnston et al. 2009).
Referencias
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Sección B
9.1 Introducción
9.2 Dureza
Transbond LR (3M Unitek) 17,3 ± 0,3 (Iliadi et al. 2017) 33,6 ± 1,1 (Iliadi 71,6 ± 2MPa (MH) (Iliadi et al. 2017)
22.3 (Hassan et al.2019) et al. 2017) 62,8 antes y 79,6 después del envejecimiento (Ramoglu
32,8 (Hassan et al.2019) et al. 2008)
(Continuado)
Tabla 9.1(Continuado)
Retenedor de fotopolimerización 40,3 antes y 58,3 después del envejecimiento (Ramoglu et al.
(Dependencia) 2008) 39–42 (diferentes fuentes de luz) (Usümez et al. 2003)
Galardonado (Danville Materials) 6,6 ± 0,3 38,1 ± 1,0 35 (Sifakakis et al. 2017)
ZNano (Danville Materials) 9,7 ± 0,3 49,2 ± 0,5 88 (Sifakakis et al. 2017)
Resinas compuestas utilizadas para unir retenedores211
Figura 9.1Desgaste abrasivo del composite y microfiltraciones seis años después del
despegue.
alambres de acero inoxidable de tres y cinco hilos) en una décima parte de la muestra.
Los pacientes con sobremordida reducida o tendencia a mordida abierta anterior
mostraron un desgaste reducido del composite; sin embargo, a menudo se encontró
una marcada abrasión del composite entre los retenedores mandibulares. Los factores
mecánicos, como la masticación y el cepillado de los dientes, pueden contribuir a esta
abrasión, y los autores recomiendan agregar una capa relativamente gruesa de resina
compuesta sobre el alambre mandibular o usar composites posteriores y
fotopolimerizables, que pueden tener una mejor resistencia al desgaste que el
composite curado químicamente. utilizado en este estudio (Dahl y Zachrisson 1991). Un
compuesto de ortodoncia común Bis-GMA diluido con resina sin relleno demostró
mejores propiedades de manipulación para la unión ortodóncica; sin embargo, mostró
una disminución significativa en la resistencia a la abrasión.in vitro (Bearn et al. 1997).
Los compuestos reforzados con fibra (CRF) cubiertos por compuestos de resina fluida
mostraron algunos signos de desgaste del compuesto (con un microscopio electrónico
de barrido [SEM]) despuésin vitrocepillado de dientes, pero los FRC adheridos por
puntos, es decir, sin la cubierta de un compuesto de resina fluida, mostraron signos de
desgaste en el FRC y fibras de vidrio expuestas de la matriz polimérica. Las muestras de
metal (alambre trenzado aplanado de ocho hilos) no se vieron afectadas visualmente
después del cepillado de los dientes (Scribante et al. 2019; Sfondrini et al. 2020). La
resistencia al desgaste abrasivo de un composite híbrido dental fotopolimerizable que
contiene una resina Bis-GMA/TEGDMA y un 62% en volumen de vidrio de estroncio se
mejoró aumentando el grado de conversión (Ferracane et al. 1997).
Una revisión sistemática no encontró evidencia que respalde el uso del arenado antes
del grabado sobre el grabado solo con respecto al SBS de los brackets de ortodoncia
adheridos.in vitroa las superficies del esmalte lingual de premolares extraídos
(Baumgartner et al. 2017).
Otro entorno de laboratorio para evaluar la fuerza de unión de una pieza de
retenedor fijo adherida a dos dientes utiliza una máquina de prueba universal
para dirigir la aplicación de fuerza a lo largo del eje oclusoapical de los incisivos
hasta que el alambre se retira de la almohadilla de composite (Aldrees et al. 2010;
Bryan y Sherriff 1995; Cooke y Sherriff 2010; Reicheneder et al. 2014). Los
alambres trenzados dieron mejores resultados en los ensayos de tracción, y los
valores más altos se registraron en alambres trenzados rectangulares. Se
registraron valores más bajos para los composites microhíbridos no diseñados
para la unión de retenedores (Paolone et al. 2015). Otra prueba de laboratorio
evaluó la resistencia a la tracción de diferentes combinaciones de composite/
alambre midiendo la fuerza horizontal requerida para retirar un trozo de alambre
adherido a dientes humanos (Radlanski y Zain 2004). Sin embargo,
Los adhesivos de dimetacrilato de uretano con alto contenido de relleno ofrecen una
mayor fuerza de unión entre los brackets de esmalte y acero inoxidable que las resinas
con o sin relleno. Las mejores propiedades mecánicas se lograron incorporando altas
concentraciones de partículas de relleno de varios tamaños en la resina (Faltermeier et
al. 2007) (Tabla 9.2).
9.5 Microfiltración
Transbond XT (adhesivo para brackets) 11.5 5 hilos 74,7 3 hilos 0,0175 pulgadas 41,4
Trenzado 0,010 × 0,028 6,5 (8,0 si 8 hilos 37,9 0,016 × 0,022 pulgadas. muerto suave
está arenado) coaxiales 35.0 8-trenzado 37.7
Flow Tain (adhesivo de ortodoncia 14.7 24.0 Con cadena de oro 33,4.
fluido)
Tetric Flow (compuesto 16.8 33,8 Alambre de 3 hilos de 0,0195
restaurador fluido) 0,016 × 0,022 3 trenzados 13–14 pulg. sin arenado 44,8 y con
(Foek et al. 2009) arenado 73,3
Con FRC (después del envejecimiento) 0,016 × 0,022 pulg. muy blando 8
6,5–7,2 (Brauchli et al. 2009) trenzados sin chorro de arena 33,5 y
con chorro de arena 106,5
Filtek Supreme XT (compuesto 22.4 26.3
restaurador fluido)
Grandio Flow, Flujo de Sinergia Con retenedor FRC (después del envejecimiento)
8,2–8,5 (Brauchli et al. 2009)
218Descementado y Retención Fija en Ortodoncia
9.7 Envejecimiento
(a)
(b)
(a)
(b)
Referencias
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10
10.1 Introducción
La mayoría de los retenedores fijos se construyen a partir de una pieza de alambre que se
extiende sobre dos o más dientes, adherida a las superficies lingual o labial de los dientes
anteriores o posteriores. Hoy en día, el retenedor canino a canino inferior, adherido a los seis
dientes anteriores inferiores, es ampliamente aceptado por pacientes y ortodoncistas después
del tratamiento.
Las primeras publicaciones aparecieron en la literatura sobre ortodoncia en los años
1970 (Kneirim 1973; Rubenstein 1976). Estos retenedores se construyeron a partir de
alambres de ortodoncia redondos (0,032 a 0,036 pulgadas de diámetro) o rectangulares
con bucles de retención en cada extremo. Zachrisson prefirió un alambre
multifilamento de 0,0175 pulgadas de diámetro, adherido a los seis dientes anteriores,
para evitar la recaída en "situaciones de retención difíciles", incluido el cierre de
espacios después de un diastema mediano o diastemas múltiples, así como la torsión
de dientes individuales (Zachrisson 1977). Estos alambres se han convertido en el
"estándar de oro" ya que ofrecen una mayor retención del adhesivo.
Karaman et al. 2002; Tacken et al. 2010). Estos materiales se mezclan con el color del
diente y, por lo tanto, se pueden adherir a las superficies labiales de los dientes. Sus
propiedades dictan la unión de todos los dientes anteriores adyacentes al retenedor
(canino a canino/lateral a lateral). Estos retenedores tienen la desventaja de crear una
férula rígida, lo que limita el movimiento fisiológico de los dientes, y varios autores
afirman que estas características dan como resultado una mayor tasa de fracaso (Bearn
1995; Rose et al. 2002; Tacken et al. 2010). En una revisión sistemática reciente, los
retenedores reforzados con fibra de vidrio demostraron una gama más amplia de fallas
de adhesión que los retenedores con cinta de polietileno. Este hecho puede atribuirse a
la amplia variación en las propiedades de sus materiales (Iliadi et al. 2015). Una revisión
sistemática adicional no encontró evidencia de una diferencia en las tasas de fracaso
entre los retenedores adheridos con cinta de polietileno versus los retenedores
convencionales de múltiples hebras en el arco inferior o superior (Littlewood et al.
2016). La figura 10.1 presenta ejemplos del uso clínico de retenedores fijos.
(a)
(b)
Figura 10.1Ejemplos del uso clínico de retenedores fijos. (a) Alambre retenedor lingual de
múltiples hebras adherido a los incisivos para evitar la recaída. (b) Caso con diastemas
medianos; después del tratamiento, estos diastemas se cerraron.
10.2.1 Rigidez
Las propiedades elásticas del alambre de retención son importantes si se
quiere describir completamente su desempeño. La rigidez es una medida de
la resistencia a la deformación elástica, es decir, de la fuerza necesaria para
doblar el alambre una distancia definitiva en el rango elástico de la aleación
del alambre, pero no tiene nada que ver con hasta qué punto se puede
doblar la viga de alambre. La facilidad de flexión permanente depende del
límite elástico del alambre de retención junto con su capacidad para
endurecerse durante la manipulación. Una rigidez alta (módulo de
elasticidad alto) implica una alta resistencia a la deformación y es deseable
para áreas donde no se prefiere ninguna deflexión. La rigidez elástica
general de un alambre es función del módulo elástico (rigidez del material) y
de las dimensiones de la viga (rigidez geométrica). En la literatura de
ortodoncia,
(a) (b)
(a)
(b)
10.2.2 Fuerza
La resistencia es otra propiedad básica de los materiales elásticos. Caracteriza la
fuerza máxima posible que el material puede soportar/entregar. Esta propiedad
es importante en la resistencia a la flexión por fuerzas de masticación de los
alambres utilizados para la retención fija. Varios años después de la separación se
producen movimientos inesperados que implican una deformación plástica del
alambre. La resistencia a la torsión y flexión de un alambre redondo es
proporcional al cubo del diámetro. La longitud de la viga no afecta la resistencia a
la torsión; sin embargo, la resistencia a la flexión es inversamente proporcional a
la longitud. Los alambres multicordones con baja rigidez generalmente también
tienen baja resistencia (Rucker y Kusy 2002).
10.2.3 Alcance
determinante de las fuerzas medidas en este experimento, que variaron entre 0,5
y 1,5 N. Esta magnitud es lo suficientemente alta como para producir
movimientos dentales no deseados durante la retención. Sin embargo, esto sólo
es posible en casos de deformación del alambre, y las diferencias en los valores
medios de las fuerzas generadas entre los diferentes tipos de alambre podrían no
tener un efecto clínico definitivo (Sifakakis et al. nd; Sifakakis et al. 2011).
Másin vitroLos experimentos con un modelo de dos o tres dientes demostraron que
un diente unido mediante un alambre de retención a un solo diente vecino es menos
resistente al torque que un diente conectado a dos dientes vecinos. Las diferencias en
la resistencia al torque registradas entre diferentes retenedores son bastante grandes;
sin embargo, se puede lograr un alto nivel de control de torsión con un cable de acero
inoxidable liso de 0,016 × 0,016 pulgadas o trenzado de 0,016 × 0,022 pulgadas (Arnold
et al. 2016).
Las aleaciones SS utilizadas en ortodoncia pertenecen a la serie 300 de SS
austeníticos y pueden endurecerse mediante trabajo en frío y no mediante tratamiento
térmico. Sin embargo, los efectos del trabajo en frío pueden eliminarse mediante el
recocido a altas temperaturas, y el alambre vuelve a un estado más suave y trabajable
(Littlewood et al. 2016). Este es el objetivo principal del tratamiento térmico de los arcos
de acero inoxidable en ortodoncia: minimizar la rotura eliminando tensiones residuales
en el material en lugar de lograr disminuciones significativas en el límite elástico
(Brantley 2001). No se recomienda el tratamiento térmico de alambres de acero
inoxidable austeníticos por encima de 650 °C ya que la degradación de sus propiedades
mecánicas es inevitable debido a la pérdida de su microestructura forjada (Alapati
2012).
Algunos arcos recomendados para retenedores fijos se entregan recocidos. El
recocido es el proceso de calentar la aleación a una temperatura particularmente alta
(por debajo de su punto de fusión) durante un período prolongado. El grado de
recocido difiere entre los aparatos de ortodoncia según su uso. Un alambre con un alto
grado de recocido a menudo se describe en la literatura comomuy suave. Los
fabricantes afirman que estos alambres se adaptan fácilmente y minimizan el
movimiento de los dientes asociado con los alambres de fuerza activa. Sin embargo, el
aumento en el grado de recocido mejora la conformabilidad a expensas del límite
elástico (Brantley 2001). Los arcos muy blandos se pueden doblar fácilmente con niveles
de fuerza más bajos, pero se comportan de manera idéntica por debajo del punto en el
que adquieren un fraguado permanente, en comparación con los arcos más duros de la
misma aleación. Desafortunadamente, en estos arcos, la facilidad deseable de
formación se convierte en una facilidad indeseable de deformación (Baysal et al. 2012;
Brantley y Alapati 2012; Kucera y Marek 2016).
(a)
(b)
que el alambre SS de cinco hilos (Dahl y Zachrisson 1991). Los alambres en espiral
demuestran tasas de falla más bajas. Se sugiere aplicar un alambre de cinco hilos para
aumentar la tasa de éxito en comparación con un alambre de tres hilos (Dahl y
Zachrisson 1991). Zachrisson recomienda un cable de cinco hilos de 0,0215 pulgadas
(Zachrisson 2015).
Un estudio prospectivo aleatorizado evaluó retenedores canino a canino de seis
hebras muy blandos de 0,0195 pulgadas frente a 0,0215 pulgadas (no recocidos) y
encontró que estos últimos exhibían una mayor tasa de desprendimiento que el
retenedor muy blando de 0,0195 pulgadas. Este hallazgo se atribuyó a mayores
fuerzas de corte en los sitios de unión (Störmann y Ehmer 2002). Esto contrasta
con los hallazgos de unen vivoestudio, que demostró menores tasas de falla
cuando se usaron alambres de mayor diámetro y sugirió que la flexibilidad
limitada del retenedor puede ser una ventaja (Andrén et al. 1998).
Una investigación sistemática reciente concluyó que la tendencia a fallar de los
retenedores multicordones disminuye al aumentar el diámetro del alambre,
aunque es posible que no exista una correlación real (Iliadi et al. 2015).
Comparación directa de los resultados deen vivoLos estudios pueden ser
engañosos. El sesgo puede explicar estas inconsistencias debido a diferencias en
la construcción del retenedor/eficacia clínica: el alambre puede no estar
adecuadamente sostenido por las superficies de los dientes durante la
masticación si no está estrechamente adaptado a los contornos linguales de los
dientes. Además, la distancia entre los puntos de unión y la cantidad de adhesivo
determina la longitud del alambre libre y sus propiedades mecánicas.
Varios médicos prefieren arcos rectangulares unidos solo en los caninos o en los seis
dientes anteriores, incluso en una configuración en forma de cinta (Katsaros et al. 2007;
Kocher et al. 2019; Lie Sam Foek et al. 2008; Renkema et al. 2008). . Pueden ser
superiores a otras formas de retenedores linguales a largo plazo; sin embargo,
lamentablemente la evidencia sobre estos alambres de retención es escasa. Lee
concluyó que se recomienda el uso de arcos de cinta rectangulares para controlar las
rotaciones corregidas (Lee 1981). No se observaron cambios de torsión adversos
durante 10 a 15 años de retención si se utilizaron retenedores canino a canino SS
trenzados de ocho hebras de 0,016 × 0,022 pulgadas (o caninos y caninos β-Ti redondos
sólidos de 0,027 pulgadas). Los alambres rectangulares son probablemente más
resistentes a la deformación/activación posterior al tratamiento que los alambres
flexibles redondos. sin embargo, pueden demostrar mayores tasas de fracaso. Además,
es posible que un alambre más rígido no siga los movimientos fisiológicos de los
dientes como un alambre de múltiples hilos. Se demostró que este último disminuye la
movilidad de los dientes dependiendo del número
de los dientes a los que está adherido el retenedor, pero la movilidad permanece
dentro del rango fisiológico (Watted et al. 2001). De hecho, estas preocupaciones
pueden no tener fundamento cuando consideramos la salud a largo plazo de múltiples
unidades protésicas ferulizadas; sin embargo, se necesita más investigación sobre este
tema (Speck 2008).
Los arcos de acero inoxidable contienen cantidades sustanciales de níquel, lo que ha
generado cierta preocupación entre los ortodoncistas sobre su biocompatibilidad. No
se ha informado de evidencia de problemas de biocompatibilidad notables en pacientes
debido a la liberación de iones de níquel de los arcos SS (Brantley et al. 2017). Se
descubrió que dos alambres de acero inoxidable en espiral diferentes mantenían sus
propiedades mecánicas (dureza y módulo elástico) y composición elemental, por lo que
no muestran evidencia de liberación iónica detectable durante períodos de servicio de
hasta 14 años (Zinelis et al. 2018).
Los retenedores de β-Ti rara vez se utilizan, a pesar de su excelente
formabilidad. El daño por fatiga es un inconveniente clínico importante del
uso de aleaciones de β-Ti para retenedores fijos. La fractura de estos
alambres es causada por la degradación bajo tensión en el ambiente bucal,
múltiples dobleces o redoblamientos y fragilización por hidrógeno usando
productos que contienen fluoruro (Brantley 2001; Kaneko et al. 2003;
Murakami et al. 2015). Un estudio reciente fue el primero en evaluar
retenedores caninos y caninos fabricados con β-titanio redondo de 0,027
pulgadas para uso clínico a largo plazo (Kocher et al. 2019). No se
observaron cambios adversos en el torque durante los 10 a 15 años de
retención cuando se utilizaron estos retenedores. Estos arcos son
generalmente más caros que los fabricados con otras aleaciones populares;
sin embargo, no hay preocupación por su biocompatibilidad ya que no hay
níquel en la composición de la aleación.2) (Brantley 2001). La figura 10.5
muestra un retenedor de β-Ti en uso clínico.
Se deben evitar los alambres de NiTi preformados, ya que no se pueden colocar
fácilmente curvaturas permanentes en los alambres, lo que puede provocar el
movimiento de los dientes si el alambre no está adherido pasivamente a través de las
superficies de los dientes. Se cree además que la baja rigidez del NiTi proporciona una
estabilidad inadecuada después del tratamiento (Kapila y Sachdeva 1989). Además, la
esperanza de vida de los retenedores de NiTi puede estar asociada con una mayor
probabilidad de fractura por fatiga de estos alambres. Se descubrió que los cables de
NiTi recuperados se fracturaban en muchos menos ciclos que sus homólogos recibidos.
Se documentó una mayor probabilidad de falla para alambres de mayor diámetro en
comparación con alambres de menor diámetro y cuadrados/rectangulares.
(a)
(b) (C)
Figura 10.6(a) Diseño de retenedor lingual de circonio de diseño virtual asistido por computadora/
fabricación asistida por computadora (CAD/CAM); (b) conectores diseñados mediante un
procedimiento de anidamiento; (c) Retenedor lingual de circonio CAD/CAM colocado en un modelo
impreso en 3D.
apoyos oclusales en los lados mesiales de los primeros premolares, con un seguimiento de
dos años (Zreaqat et al. 2017).
Los retenedores de níquel-titanio CAD/CAM investigados por otro grupo no estaban
doblados, sino cortados de una lámina de níquel-titanio en dimensiones rectangulares
de 0,014 × 0,014 pulgadas (Knaup et al. 2019; Schumacher 2015; Wolf et al. 2015). Esto
dio como resultado un alambre cortado a medida con una curvatura suave y
presumiblemente un menor riesgo de fractura del alambre en comparación con los
retenedores construidos mediante flexión. Después de la construcción del alambre, se
electropulió para limpiar la aleación metálica mediante electrólisis. Este proceso dio
como resultado esquinas ligeramente redondeadas del alambre rectangular. Se
demostró que el posicionamiento intraoral de estos retenedores era preciso,
mostrando desviaciones de sus posiciones planificadas significativamente menos de 0,5
mm (Wolf et al. 2015).
Un estudio clínico controlado retrospectivo comparó los retenedores convencionales SS
twistflex de 0,0175 pulgadas y los retenedores fabricados por CAD/CAM de 0,014 × 0,014
pulgadas con respecto al impacto de los retenedores linguales en la salud bucal durante los
primeros siete meses después de la extracción. Los retenedores fabricados con CAD/CAM
mostraron índices de salud bucal significativamente mejores debido al ajuste óptimo del
alambre y al carácter resistente a las bacterias del alambre resultante de su superficie
electropulida. Además, se detectó una menor formación de biopelículas.in vitro y después de
la incubación intraoral (Knaup et al. 2019).
Un artículo reciente exploróin vitrola viabilidad de las barras de circonio estabilizado
con itrio (Y-TZP) en la retención lingual fija y concluyeron que se trata de un material
adecuado para la retención, que ofrece una alternativa estética a los retenedores de
acero inoxidable disponibles actualmente (Stout et al. 2017).
Referencias
Andrén, A., Asplund, J., Azarmidohkt, E. et al. (1998). Una evaluación clínica
de retención a largo plazo con retenedores adheridos hechos de alambres de
múltiples hilos.Sueco. Mella. J.22: 123–131.
100-109.
Lee, KD y Mills, CM (2009). Tasas de falla de unión para bucle en V versus recto
retenedores linguales de alambre.Soy. J. Ortodoncia. Ortopédico Dentofacial.135: 502–
506. Mentira Sam Foek, DJ, Ozcan, M., Verkerke, GJ et al. (2008). Supervivencia de
Retenedores linguales de acero inoxidable flexibles, trenzados y adheridos: un estudio de
10.1002/14651858.CD002283.pub4.
Murakami, T., Iijima, M., Muguruma, T. et al. (2015). Fatiga de ciclo alto
Comportamiento de los alambres de ortodoncia de beta-titanio.Mella. Madre. J.34:
189–195. Oltjen, JM, Duncanson, MG Jr., Ghosh, J. et al. (1997). Rigidez-deflexión
Comportamiento de alambres de ortodoncia seleccionados.Ortodoncia de ángulo.67:
11
11.1 Introducción
Figura 11.1Los retenedores fijos se utilizan comúnmente durante un período prolongado o incluso de
forma permanente. Las microfiltraciones pueden aumentar la degradación de la resina y la liberación de
BPA.
con la exposición de los bordes marginales del material cuando se utiliza como
adhesivo de brackets. Este hecho aumenta la reactividad del adhesivo con el
entorno circundante y favorece el envejecimiento y la degradación, con liberación
impredecible de BPA. Los retenedores adheridos sólo a dos dientes en lugar de
seis pueden reducir significativamente la cantidad de adhesivo utilizado. Una
revisión sistemática señaló que las cantidades de BPA liberadas por las resinas
adhesivas de ortodoncia estaban entre 0,85 y 20,88 ng por mililitro.en vivoy de
trazas a 65,67 ppmin vitro. Se han detectado cantidades mayores en la saliva una
hora después de su colocación (Kloukos et al. 2013, 2015). Al hacer que los
pacientes se enjuagaran bien después de la unión, los niveles de BPA en su saliva
o medio de enjuague volvieron a los niveles iniciales. Las diferentes soluciones de
enjuague, es decir, agua del grifo versus agua desionizada más etanol absoluto,
no afectaron los niveles de BPA (Kloukos et al. 2015).
Un estudio clínico evaluó la liberación inmediata de BPA en la saliva y el BPA
absorbido por el cuerpo en muestras de orina durante el primer mes después de
la colocación de retenedores fijos. Se utilizaron dos adhesivos Bis-GMA: un
restaurador universal y una resina fluida. El único nivel alto significativo de BPA se
observó en la saliva recogida justo después de la colocación del retenedor lingual,
pero su nivel máximo (20,9 ng/ml) fue mucho menor que la dosis de ingesta diaria
de referencia. Los sujetos del grupo de resina restauradora tenían niveles de BPA
más altos que aquellos con el adhesivo fluido. Se encontraron niveles reducidos
de BPA después de la profilaxis con piedra pómez en el primer grupo. El sexo y la
edad no afectaron los niveles de BPA. Los autores señalan la posibilidad de
subestimar la liberación de BPA de las muestras de orina del día siguiente debido
al BPA fijado a los órganos (Kang et al. 2011).
Algunos autores sugieren evitar la resina líquida cuando se utilizan materiales
adhesivos Bis-GMA que contienen tanto resina líquida como pasta para unir
retenedores fijos. Un estudio de seguimiento de cinco años demostró que la
longevidad clínica del retenedor no se ve comprometida si se adhiere sin resina
líquida. Los investigadores concluyeron que este es un enfoque más biológico
para unir retenedores fijos, considerando los peligros potenciales del BPA (Tang
et al. 2013).
Con este fin, la exposición del operador y del personal al BPA es mucho mayor
que la de los pacientes, ya que participan diariamente en muchos procedimientos
de unión y desvinculación. También se debe hacer hincapié en proteger al
personal de la exposición al BPA. Se debe tener especial cuidado con las
mascarillas, el acceso al aire fresco y la succión quirúrgica para minimizar la
propagación del aerosol en el consultorio.
11.3In VitroInvestigación
Los resultados dein vitroLos estudios que abordan la liberación de BPA de los
composites de unión de brackets y retenedores fijos son muy variables debido a la
diversidad de los protocolos de investigación y las diferencias en los métodos de
análisis, los medios de inmersión y el tiempo de inmersión. Además, un ensayo de
liberación de BPA puede no constituir evidencia concluyente para determinar el
potencial de un material para dar lugar a la formación de BPA debido al umbral de los
análisis cromatográficos utilizados. Por lo tanto, la cantidad liberada podría pasar
desapercibida mediante un análisis instrumental (Eliades 2017). Además, la importancia
clínica de algunos protocolos de investigación que evalúan la liberación de BPA es
cuestionable. Si las muestras se sumergen en medios inmediatamente después del
fotocurado, esto da como resultado un aumento técnico en la liberación de especies no
polimerizadas del material. Lo mismo ocurre cuando se investigan los niveles de BPA en
la saliva inmediatamente después de colocar aparatos de ortodoncia. En la realidad
clínica, el paciente enjuaga todo lo que luego se liberaría en los medios como parte del
protocolo de vinculación (Eliades 2017).
Una inicialin vitroEl estudio evaluó la liberación de BPA de retenedores de pequeño
diámetro adheridos a dientes humanos con un adhesivo de brackets común. Las
muestras (cada retenedor estaba adherido a seis dientes humanos) se sumergieron en
agua bidestilada y las concentraciones de BPA se midieron después de 10, 20 y 30 días
mediante análisis de cromatografía de gases y espectroscopía de masas. Se detectaron
cantidades mensurables de BPA en todos los momentos, y la mayor cantidad se
encontró en el grupo de un mes (2,9 mg/l), mientras que el control (solución de
almacenamiento de dientes) tenía solo 0,16 mg/l. Sin embargo, en el entorno clínico, la
liberación de BPA podría ser mayor que la informada en este estudio, debido a la vida
útil esperada sustancialmente más larga del retenedor, al envejecimiento mecánico
debido a las cargas masticatorias y a los factores químicos del envejecimiento (Eliades
et al. 2011).
Otroin vitrola evaluación del mismo adhesivo de brackets común con cromatografía
líquida de alto rendimiento detectó cantidades mensurables de BPA en todas las
muestras (a los 1, 7, 21 y 35 días); la cantidad máxima se registró en la muestra
fotopolimerizada con la mayor distancia entre las puntas de fotocurado y alcanzó 65,67
ppm a los siete días. Un hallazgo importante de esta investigación fue que la liberación
de BPA fue mayor en las muestras curadas con una mayor distancia entre las puntas de
fotocurado. El grado de conversión disminuyó al aumentar las distancias entre las
puntas de fotopolimerización. Se encontró una correlación negativa entre la liberación
de BPA y el grado de conversión (Sunitha et al. 2011).
C E1 E2
Los autores concluyeron que el material que contiene PCDMA, que presentó
mayores valores de dureza y módulo elástico, puede usarse como una alternativa
preferida en la unión clínica de retenedores (Iliadi et al. 2017; Papadogiannis et al.
2017). Se han realizado mayores esfuerzos para reemplazar Bis-GMA con UDMA
en adhesivos de ortodoncia. Este último carece de anillos benzoicos y por tanto
evita la posible liberación de BPA y, concomitantemente, su acción
xenoestrogénica (Papakonstantinou et al. 2013). Sin embargo, no se puede excluir
el efecto estrogénico de varios productos químicos sin BPA utilizados como
sustitutos de las resinas que contienen BPA (Bittner et al. 2014).
11.5 Conclusiones
La liberación de BPA está bien demostrada después de la unión del retenedor fijo y requiere
un manejo clínico especial y más investigación. En la mayoría de los estudios, la liberación de
BPA de los retenedores fijos es insignificante. Sin embargo, esta cantidad no debe pasarse por
alto ya que los problemas de salud generales atribuidos a la exposición al BPA son complejos,
controvertidos y no se comprenden completamente. Se deben implementar medidas
preventivas para los pacientes y el personal dental durante la unión/descementación de
retenedores fijos para reducir la liberación de BPA.
Referencias
Kang, YG, Kim, JY, Kim, J. et al. (2011). Liberación de bisfenol a de la resina.
Composite utilizado para unir retenedores linguales de ortodoncia.Soy. J.
Ortodoncia. Ortopédico Dentofacial.140 (6): 779–789. https://doi.org/10.1016/
j.ajodo.2011.04.022. PMID: 22133942.
Kloukos, D., Pandis, N. y Eliades, T. (2013). Bisfenol-a y residual
Lixiviación de monómeros de resinas adhesivas de ortodoncia y brackets de policarbonato:
una revisión sistemática.Soy. J. Ortodoncia. Ortopédico Dentofacial.143 (4 suplementos):
T104–12.e1-2. https://doi.org/10.1016/j.ajodo.2012.11.015. PMID: 23540625.
12
12.1 Introducción
Desde que se introdujeron por primera vez a principios de la década de 1970, los
retenedores adheridos se han convertido en un medio cada vez más común para la
estabilización posterior al tratamiento de la alineación de los dientes anteriores y se
utilizan más ampliamente en el arco mandibular (Lai et al. 2014; Meade y Dreyer 2019). ;
Pratt et al. 2011; Wong y Freer 2004). La variedad de tipos de retenedores mandibulares
fijos disponibles para el ortodoncista hoy en día es considerable, tanto en términos de
los materiales utilizados como del método de fijación (Diamond 1987; Kravitz et al. 2017;
Liou et al. 2001; Sachdeva 2001; Zachrisson 1995; Zachrisson 2015 ).
Para ayudar al médico a elegir el retenedor adherido más adecuado para sus
pacientes, la mejor evidencia disponible puede proporcionar información sobre la
eficacia clínica de los principales tipos de retenedores fijos. Factores como la
capacidad de un retenedor adherido para mantener la alineación a corto y largo
plazo, sus tasas de fracaso y sus efectos sobre el periodonto son determinantes
de su eficacia clínica y han sido objeto de estudios tanto prospectivos como
retrospectivos. Debido a la naturaleza de la investigación sobre
La retención de ortodoncia a largo plazo, los obstáculos como la tasa de deserción y los
costos y la logística asociados con dichos estudios han limitado el número de ensayos
controlados aleatorios (ECA) que comparan esos aspectos de diferentes retenedores
adheridos. Se conocen los méritos de los estudios prospectivos bien diseñados que
emplean aleatorización, y estos son los estudios que normalmente se examinan y
analizan y las conclusiones presentadas/resultados se combinan en revisiones
sistemáticas y metanálisis. Sin embargo, en el campo de la investigación sobre la
retención, algunos estudios de cohortes retrospectivos y prospectivos de buena calidad
con un gran número de muestras también pueden agregar información útil al conjunto
de niveles más altos de evidencia disponibles.
El principal resultado de interés, con respecto a la efectividad clínica,
es la capacidad de los diferentes tipos de retenedores adheridos para
mantener la alineación de los dientes anteriores lograda al finalizar el
tratamiento de ortodoncia y prevenir el cambio dental posterior al
tratamiento. La incidencia y los tipos de fallas de los retenedores
adheridos son importantes en términos tanto de la capacidad de los
retenedores para cumplir su función de retención como de la
satisfacción del paciente (costo de las reparaciones e inconvenientes
causados por citas dentales adicionales). Dada la creciente tendencia
entre los profesionales a recomendar la retención de por vida, también
existe interés en los posibles efectos negativos del uso prolongado de
retenedores fijos en los tejidos gingivales y dentales, que también son
determinantes importantes de su eficacia clínica. Otros factores,
Cuando se compararon los retenedores fijos adheridos sólo a los caninos con
los fijados a los seis dientes anteriores inferiores, un estudio encontró una
diferencia significativa entre los dos tipos de retenedores (Al-Nimri et al. 2009); el
retenedor adherido sólo en los caninos tuvo un peor desempeño, con una
diferencia de más de 1 mm (LII) después de 12 meses de retención. El retenedor
fijo canino tuvo un mejor rendimiento en un estudio (Krämer et al. 2020) en
comparación con un retenedor removible a los seis meses de retención, con un
aumento en la irregularidad de 0,3 mm, muy similar al retenedor removible.
Aunque las tasas de fracaso de los retenedores mandibulares adheridos alcanzan su
punto más alto durante el período inicial de retención, los niveles de aumento de la
irregularidad dental durante el mismo período son, según los estudios mencionados,
generalmente bajos y clínicamente no significativos. Una posible explicación puede ser
que durante un período inicial posterior al retiro de la aparatología fija, los pacientes
permanecen bajo evaluación por su ortodoncista, especialmente en estudios realizados
en ámbitos universitarios, y como resultado, cualquier falla del retenedor es detectada
y rectificada oportunamente antes de cualquier gran problema. Se producen cambios
en la alineación de los dientes.
(a)
(b)
Figura 12.1Los dos tipos de retenedores utilizados en los estudios de Renkema et al. (2008, 2011). (a)
Alambre rectangular redondeado de acero inoxidable de 0,0215 × 0,027 pulgadas unido únicamente a
los caninos mandibulares. (b) Alambre retorcido tratado térmicamente de tres hebras de 0,0195
pulgadas adherido a los seis dientes anteriores mandibulares.Fuente:Renkema et al. (2013).
(a)
(b)
Figura 12.2Los dos tipos de retenedores utilizados en los estudios de Kocher et al. (2019, 2020).
(a) Alambre TMA redondo de 0,027 pulgadas adherido únicamente a los caninos mandibulares. (b)
Alambre SS trenzado de ocho hebras de 0,016 x 0,022 pulgadas unido a los seis dientes anteriores
mandibulares.Fuente:Kocher et al. (2020).
No se puede llegar a una conclusión segura sobre qué tipo de retenedor funciona
mejor a largo plazo. Pero, en general, todos los retenedores examinados restringen los
cambios de irregularidad de manera efectiva, con una posible tendencia de los
retenedores de canino a canino a tener un mejor desempeño.
Existen mayores discrepancias entre los resultados de los estudios que utilizan
retenedores multifilamentos más delgados (ya sea 0,0175 pulgadas o 0,0195
pulgadas). Para los retenedores de 0,0175 pulgadas, el riesgo de falla fue del 31,5
% y del 38 % durante 18 meses en dos estudios ECA diferentes de alta calidad
(Nagani et al. 2020; Salehi et al. 2013), respectivamente. En los ECA con un mayor
potencial de introducción de sesgo, el resultado para el retenedor de 0,0175
pulgadas varió entre un 7 % y un 13 % de riesgo de fracaso a los 18 meses (Gunay
y Alper 2018; O'Rourke et al. 2016) y un 27 % a los 24 meses. meses (Sobouti et al.
2016). Una diferencia marcada entre los estudios fue el diferente material de
unión utilizado para fijar el retenedor y el alto desgaste en uno de los estudios
(O'Rourke et al. 2016), lo que podría explicar en parte la discrepancia. Además, en
un estudio (Gunay y Alper 2018), algunos retenedores llegaron hasta los primeros
premolares.
Cuando se utilizó un retenedor coaxial de 6 hilos de 0,0195 pulgadas en un ECA
de alta calidad, se observó un riesgo de falla del 4 % en 24 meses (Bazargani et al.
2012), mientras que en otro ECA de alta calidad, un riesgo de falla del 50 % en 12
meses. se registró para un alambre twistflex de tres hilos de 0,0195 pulgadas
(Forde et al. 2017). El material de unión, la estructura del alambre de retención y
la experiencia del operador en estos dos estudios difirieron, pero no está claro
hasta qué punto cada uno podría explicar la gran diferencia. Otro estudio
prospectivo (Gunay y Alper 2018) que utilizó un cable coaxial de seis hilos muy
blando de 0,0195 pulgadas encontró un 19 % de fallas en 12 meses de
seguimiento, incluidos los retenedores adheridos a los primeros premolares. En
un gran estudio retrospectivo (Renkema et al. 2011) de pacientes con un
dispositivo de tres hilos de 0,0195 pulgadas se registraron tasas de fracaso del 24
% en 24 meses y del 32 % en 60 meses.
Los alambres rectangulares se examinaron en un pequeño número de estudios. En
un ECA de alta calidad (Wegrodzka et al. 2021), se registró una tasa de falla del 48,5 %
en 24 meses para un retenedor de acero inoxidable trenzado de ocho hebras,
rectangular, de 0,0265 × 0,0106 pulgadas. Se encontró un riesgo de falla muy similar del
47% en un estudio prospectivo no aleatorizado de un alambre SS muy blando trenzado
de ocho hebras de 0,016 × 0,022 pulgadas con un período de seguimiento de seis
meses (Taner y Aksu 2012). Un gran estudio retrospectivo (Kocher et al. 2020)
proporcionó datos a largo plazo sobre el riesgo de falla del cable SS trenzado de 0,016 ×
0,022 pulgadas durante un período de seguimiento medio de 12,5 años. El riesgo de
fracaso fue del 50,5%. Otro gran estudio retrospectivo de alambre SS trenzado de 0,016
× 0,022 pulgadas con un seguimiento máximo de 3,5 años registró una tasa de fracaso
del 32% en el arco mandibular (Lie Sam Foek et al. 2008).
Los datos sobre las tasas de falla de los retenedores de NiTi fabricados con CAD/CAM
introducidos más recientemente son limitados. En principio, estos retenedores pueden
adaptarse muy estrechamente a las superficies de los dientes y a las zonas interproximales, y
para su fabricación se utiliza alambre de níquel-titanio (Kravitz et al. 2017). Se ha sugerido que
las tasas de fracaso de estos retenedores pueden ser menores debido a la estrecha
adaptación a los contornos de los dientes y al posicionamiento preciso de estos alambres con
respecto a los contactos oclusales. En estudios recientes, no se observaron diferencias
significativas en las tasas de fracaso entre los retenedores CAD/CAM NiTi y los retenedores SS
redondos convencionales (0,0175 pulgadas o 0,0215 pulgadas) a corto plazo (Gelin et al. 2020;
Kartal et al. 2021). Las tasas de fracaso reportadas para este nuevo tipo de retenedor fueron
del 23 al 32% en seis meses.
Los retenedores mandibulares adheridos a los seis dientes anteriores se han comparado
con el diseño anterior de retenedores de alambre grueso adheridos a los caninos
mandibulares en algunos estudios prospectivos y retrospectivos más antiguos. Los
retenedores adheridos sólo para caninos mostraron tasas de fracaso significativamente más
bajas en un estudio prospectivo aleatorizado (Störmann y Ehmer 2002), con una tasa de
fracaso del 18% en 24 meses en comparación con el 29 y el 53% de los retenedores redondos
adheridos a los seis dientes mandibulares anteriores en el mismo estudio. . De manera similar,
en un estudio retrospectivo (Scheibe y Ruf 2010), los retenedores solo caninos mostraron tasas
de fracaso significativamente más bajas (22 vs. 35%) en comparación con los retenedores
canino a canino durante un período de observación de aproximadamente 10 a 50 meses. Un
estudio retrospectivo con un tiempo de observación mucho más largo, de 10 a 15 años
(Kocher et al. 2019) también encontró que las tasas de diferentes tipos de fallas (incluido el
desprendimiento, la pérdida de adhesivo o las roturas) también eran más bajas para el
retenedor adherido solo para caninos en comparación con el retenedor de canino a canino
(aproximadamente 40 frente a 60%), siendo el tipo de retenedor el único predictor significativo
de supervivencia. También se observó que el número promedio de fallas por paciente fue
mayor para los retenedores de canino a canino. No se informaron diferencias significativas
entre los retenedores de canino solo y de canino a canino en estudios prospectivos no
aleatorios, que registraron tasas de fracaso del 21% (frente al 27%) en tres años (Årtun et al.
1997) y del 13% ( vs. 29%) en uno a tres años (Al-Nimri et al. 2009) para retenedores adheridos
solo para caninos versus retenedores de canino a canino. En estos estudios, los retenedores
solo para caninos obtuvieron mejores resultados que los retenedores de canino a canino. Se
informó que las tasas de fracaso de los retenedores caninos exclusivos en estudios
retrospectivos a largo plazo fueron aproximadamente del 20,5% en 5 años (Renkema et al.
2008) y del 25% en 20 años (Booth et al. 2008). Sin embargo, hay que tener en cuenta que
debido a
Por su naturaleza, los estudios retrospectivos que examinan el fallo de los retenedores están
sujetos a varios factores (por ejemplo, abandono/pérdida de pacientes o registros
incompletos, diferentes operadores y diferentes materiales a medida que pasa el tiempo) que
probablemente afecten los resultados.
Es probable que una interacción de factores no relacionados con las
características del retenedor contribuya a la tasa general de falla de un retenedor
de alambre fijo. Los factores no relacionados con el paciente pueden tener que
ver con el desempeño clínico del operador, los materiales de unión utilizados y la
técnica de unión empleada. Hay algunos indicios de que los operadores con más
experiencia clínica pueden encontrar menos fracasos (Scheibe y Ruf 2010).in vitro
Los estudios también muestran que algunos materiales adhesivos funcionan
mejor que otros (Aldrees et al. 2010; Papadogiannis et al. 2017; Scribante et al.
2020). La relación entre las tasas de fracaso y el método de unión también ha sido
objeto de varios estudios comparativos. El método de cementación indirecta de
retenedores fijos se comparó con el método convencional de cementación directa
en un ECA pequeño y bien diseñado con bajo riesgo de sesgo (Bovali et al. 2014).
El mismo tipo de retenedor (redondo, coaxial de seis hilos de 0,0215 pulgadas SS)
se adhirió de canino a canino en el arco mandibular. En el breve período de
estudio inicial de 6 meses (Bovali et al. 2014) y en el estudio de seguimiento a más
largo plazo a los 12 y 24 meses (Egli et al. 2017), no hubo diferencias significativas
en el riesgo de fracaso entre los dos grupos. fue encontrado. Un seguimiento de
cinco años de la población inicial de un ECA publicado recientemente (Cornelis et
al. 2022) tampoco mostró diferencias en la tasa de supervivencia entre los
retenedores adheridos indirectamente y directamente. Un hallazgo interesante al
cabo de cinco años fue que la incidencia de descementado/fallo de múltiples sitios
fue dos veces más frecuente en los retenedores con cementación indirecta que en
los con cementación directa, lo que se atribuyó al mayor riesgo de contaminación
salival de múltiples sitios cuando Durante el pegado indirecto se utiliza una
bandeja de transferencia.
Dos estudios prospectivos no aleatorios (Gökce y Kaya 2019; Taner y Aksu 2012)
tampoco encontraron diferencias significativas en las tasas de fracaso entre las
dos técnicas de unión. El estudio de Taner y Aksu (2012) utilizó un alambre de
acero inoxidable aplanado de ocho hebras de diferentes dimensiones (0,016 ×
0,022 pulgadas), pero la misma técnica de unión y agentes adhesivos que los
estudios RCT y un período de seguimiento de seis meses, mientras que Gökce y
Kaya (2019) utilizaron alambres de diferentes dimensiones (0,0175 pulgadas y
0,0215 pulgadas multihebras) y diferentes agentes y técnicas de unión indirecta
que los estudios RCT con un tiempo de seguimiento de seis meses. Basado en el
Actualmente hay poca evidencia de que alguno de estos factores conduzca a cambios
significativos en la salud periodontal. Se demostró que los retenedores compuestos
reforzados con fibra provocan más placa y/o inflamación gingival que los retenedores
de alambre en dos de los estudios (Tacken et al. 2010, 2014), pero no se observaron
diferencias en los efectos perjudiciales sobre el periodonto en ninguno de los estudios.
estudios (Liu 2010; Torkan et al. 2014). De manera similar, las diferencias en el grosor y
la configuración de los retenedores de alambre no se asociaron con diferencias
significativas en los índices periodontales en ninguno de los estudios relevantes
(Adanur-Atmaca et al. 2021; Wegrodzka et al. 2021). Una revisión sistemática de
estudios no aleatorios (Buzatta et al. 2017) tampoco informó diferencias entre los
diseños de retenedores de alambre (ondulado versus liso) con respecto a los índices
evaluados de salud periodontal.
Aparte del fallo de los retenedores fijos por rotura, desprendimiento o pérdida,
está el movimiento no deseado de la(s) unidad(es) dentaria(s) retenida(s) a través
de la transferencia de fuerzas por un retenedor activo que permanece adherido y
clínicamente intacto. Estos cambios en la posición de los dientes retenidos son
distintos y no están relacionados con la maloclusión original y no pueden
caracterizarse como recaída. Se manifiestan con mayor frecuencia como cambios
de inclinación y torsión y son progresivos (Figura 12.3). El primero publicado
(a) (b)
Figura 12.3(a) Diferencia de torsión entre los incisivos centrales mandibulares en el control
postratamiento de dos años, debido a la activación del retenedor flexible giratorio de tres hebras
tratado térmicamente de 0,0195 pulgadas; el incisivo central izquierdo muestra un torque radicular
lingual excesivo, mientras que el incisivo central derecho muestra un torque radicular bucal. Esta
diferencia de torque también se expresa como una diferencia en la altura de las coronas clínicas.
Estos movimientos dentarios se produjeron a pesar de que el retenedor adherido estaba in situ. (b)
Inclinación bucal y rotación distovestibular del canino mandibular izquierdo en el seguimiento de un
año después del tratamiento, debido a la activación del retenedor flexible giratorio de tres hebras
tratado térmicamente de 0,0195 pulgadas.
Fuente:Adaptado de Katsaros et al. (2007).
informe de tales efectos no deseados del retenedor por Katsaros et al. (2007) fue
seguido por varios otros, y una revisión sistemática reciente de Charavet et al.
(2022) ha identificado 20 estudios, en su mayoría informes de casos y series de
casos, que describen dichos eventos. Aunque normalmente es posible repetir el
tratamiento en estos casos, no se pueden excluir daños permanentes como
dehiscencia ósea, recesión gingival o pérdida de vitalidad dental debido a
desplazamientos radiculares severos fuera de la envoltura ósea, particularmente
si las complicaciones no se detectan en una etapa temprana (Farret et al. 2015;
Pazera et al. 2012; Shaughnessy et al. 2016) (Figuras 12.4 y 12.5).
Varias series de casos y estudios retrospectivos y prospectivos han informado sobre
la prevalencia del movimiento dental relacionado con el retenedor en la mandíbula
anterior (Cornelis et al. 2022; Gera et al. 2022; Katsaros et al. 2007; Klaus et al. 2020;
Kucera y Marek 2016; Renkema et al. 2011). Informaron una prevalencia de entre 1,1% y
17%, con tiempos promedio posteriores a la retención de entre seis meses y cinco años.
El tamaño de la muestra, el tiempo de observación, las dimensiones del retenedor y los
métodos de evaluación difieren entre los estudios y podrían explicar en parte la amplia
variedad. Una única retrospectiva
(b)
Figura 12.5La recesión gingival labial profunda en el incisivo central mandibular izquierdo se
debió al movimiento no detectado de este diente debido a la activación del retenedor espiral
redondo flexible adherido.
Un estudio (Kocher et al. 2019) evaluó los cambios en los pacientes después de 10 a 15
años de retención y observó un número muy pequeño de casos (menos del 0,02 % de la
muestra de pacientes). A excepción del estudio de Kocher et al. (2019), los retenedores
utilizados fueron alambres SS redondos, multifilares y de pequeñas dimensiones
(0,0175 a 0,0215 pulgadas). En el estudio de Kocher et al. (2019), se utilizó un cable SS
trenzado de ocho hebras de 0,016 × 0,022 pulgadas.
La observación de estos eventos adversos del retenedor ha llevado a sugerir
una serie de causas, incluida la unión de un alambre ya activo, la deformación del
alambre durante la colocación, la distorsión del alambre durante la función o la
limpieza dental profesional, el cambio en las propiedades mecánicas del alambre.
o pérdida de material de unión con el tiempo y nueva unión de un cable activo
después de fallas en la unión.
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13
13.1 Introducción
et al. 2011), incluidas diferencias de torque entre los incisivos adyacentes y una
mayor inclinación y movimiento vestibular o lingual del canino. Sin embargo, lo
más probable es que la etiología sea multifactorial y, lamentablemente, no se
comprende bien. Los cambios probablemente puedan atribuirse a un
componente activo del alambre debido a una desviación elástica causada por el
médico o una deformación mecánica por fuerzas masticatorias. Incluso una
deformación mínima del alambre de 0,2 mm puede ejercer fuerzas de hasta 1 N
sobre los dientes (Sifakakis et al. 2011).
En un estudio retrospectivo reciente con una muestra grande se demostró una fuerte
asimetría en la inclinación del canino: es decir, en el 90% de los pacientes que presentaban
una inclinación inesperada de los caninos inferiores, el izquierdo estaba inclinado hacia
vestibular. Los sujetos en el grupo de movimientos inesperados eran significativamente más
jóvenes en el momento del despegue y tenían ángulos del plano mandibular más altos. Estos
hechos sugieren que se deben examinar las propiedades mecánicas y el tiempo de uso de los
alambres de retención (KuCera y Marek 2016). Dado que se identificó la divergencia facial
como un posible predictor, también deben examinarse los factores asociados con este patrón
de crecimiento.
Los movimientos dentales no deseados ocurrieron con mayor frecuencia con
retenedores maxilares que mandibulares. Las disfunciones o hábitos bucales antes del
tratamiento y la falta de contacto interincisal antes o después del tratamiento también
se asociaron con movimientos dentales no deseados (Klaus et al. 2020). Sin embargo,
esta última investigación no encontró ninguna asociación entre estos movimientos
dentales involuntarios y el ángulo del plano mandibular previo al tratamiento. Las
discrepancias de torsión entre incisivos adyacentes no fueron evidentes en los casos de
caninos de mayor diámetro y alambres caninos asegurados solo a los caninos
(Shaughnessy et al. 2016).
Investigaciones recientes demostraron que todos los pacientes con cambios en la
inclinación canina fueron unidos con el método de unión directa; esto puede apoyar la
hipótesis de que la técnica de unión indirecta permite una unión más pasiva del cable.
Se podría suponer que durante el procedimiento de unión directa se introdujo una
desviación marginal del alambre que resultó en una fuerza activa en el canino izquierdo
(Egli et al. 2017). Otro equipo de investigación recomendó encarecidamente la
fabricación de retenedores en un modelo funcional para evitar movimientos
inesperados (Shaughnessy et al. 2016). Sin embargo, esto es sólo una suposición. El
componente activo de un alambre de retención es independiente de la técnica de
fabricación del alambre, directa o indirecta. Es la técnica de unión la que puede
introducir una fuerza en el cable. Esto podría suceder al presionar el cable con un
instrumento manual o con los dedos.
rango parecen ser las más importantes para la eficacia clínica de los retenedores fijos. La rigidez es una medida de
resistencia a la deformación en flexión y torsión. Esto último es especialmente importante para evitar problemas de
torsión inesperados en los retenedores fijos. La rigidez depende del módulo de elasticidad y de la sección transversal del
alambre e indica cuánta fuerza se aplicará para una determinada deflexión. La rigidez es la misma para alambres de la
misma aleación, independientemente de su dureza. La variable más potente para controlar la rigidez de los retenedores
fijos es el tamaño (Thurow 1982); sin embargo, el número de hebras también afecta la rigidez de los arcos de múltiples
hebras (Oltjen et al. 1997). Los alambres sólidos de acero inoxidable ofrecen mayor rigidez que los arcos de múltiples hilos
(Ingram Jr et al. 1986; Kapila y Sachdeva 1989). Los cambios de longitud no modifican la rigidez tanto como los cambios de
diámetro. Aumentar la longitud de una viga en voladizo reduce la resistencia a la flexión para una deflexión determinada
(Thurow 1982). Investigaciones recientes demostraron que los movimientos dentales no deseados se producían con más
frecuencia con retenedores maxilares que mandibulares (Klaus et al. 2020). Los dientes anteriores superiores más anchos y
la mayor longitud libre del alambre interdental reducen la rigidez del alambre y pueden favorecer su deformación.
Investigaciones recientes demostraron que los movimientos dentales no deseados se producían con más frecuencia con
retenedores maxilares que mandibulares (Klaus et al. 2020). Los dientes anteriores superiores más anchos y la mayor
longitud libre del alambre interdental reducen la rigidez del alambre y pueden favorecer su deformación. Investigaciones
recientes demostraron que los movimientos dentales no deseados se producían con más frecuencia con retenedores
maxilares que mandibulares (Klaus et al. 2020). Los dientes anteriores superiores más anchos y la mayor longitud libre del
El límite elástico y el rango son medidas de la capacidad máxima del arco (Thurow
1982). Son determinantes importantes del desempeño clínico de los retenedores fijos
ya que un movimiento inesperado implica una deformación plástica del alambre. Un
retenedor fijo debe tener un límite elástico adecuado para preservar su forma de la
deformación plástica permanente durante la masticación. Para un alambre redondo, el
límite elástico en torsión es proporcional al cubo del diámetro, como en el caso de
flexión. Un alambre multifilamento con baja rigidez generalmente tiene baja resistencia
(Rucker y Kusy 2002).
El rango es la distancia máxima de trabajo si el arco se carga hasta su límite elástico,
es decir, la cantidad de desplazamiento soportado bajo tensión elástica máxima.
También se le conoce en la literatura de ortodoncia como rango de deflexión, rango de
trabajo o deflexión elástica máxima. Para los arcos redondos sólidos, se espera que el
alcance disminuya a medida que aumenta el tamaño. La gama de alambres multifilares
no se ve influenciada en la misma medida que los alambres macizos por el tamaño de la
sección transversal y permanece constante para un alambre en particular.
Tabla 13.1Resultados de las pruebas del módulo de Young y dureza Vickers (HV) para
tipos representativos de alambres de ortodoncia.
dientes anteriores (Sifakakis et al. 2015). OMSS registró las fuerzas y momentos
máximos y residuales después de lain vitrocargando. Se evaluaron cuatro tipos
diferentes de retenedores: alambre de acero (RMO) Tru-Chrome de 7 hebras retorcidas
de 5 pulgadas y 0,027 pulgadas (Andrén et al. 1998), cadena de oro Ortho FlexTech de
0,038 × 0,016 pulgadas (Reliance) (Arn et al. 2020), Wildcat de 0,0175 pulgadas (Gugger
et al. 2016) y alambre de acero twistflex (GAC) de 3 hebras de 0,0215 pulgadas (Zinelis et
al. 2018).
Curiosamente, las fuerzas y momentos después de la descarga del retenedor
no fueron cero. Estein vitroEl experimento demostró que los retenedores flexibles
fijos evaluados pueden no ser pasivos después de un uso clínico a corto o largo
plazo (Tabla 13.2).
Se registraron fuerzas residuales de mayor magnitud procedentes de los arcos retorcidos
en comparación con las ejercidas por la cadena de oro. Las fuerzas más altas se registraron en
el alambre de acero retorcido de siete hebras de 0,027 pulgadas. Además, los momentos
residuales registrados en este tipo de retenedor fueron mayores que en los otros tipos de
retenedor. Este alambre está construido a partir de un temple más suave y de alta
conformabilidad que los temples de arco. Estas fuerzas residuales son lo suficientemente altas
como para inducir el movimiento de los dientes; sin embargo, el retenedor fijo permite
principalmente el movimiento radicular de tercer orden y el movimiento de primer/segundo
orden del último diente adherido al retenedor. Estos
Tabla 13.2Sistema de fuerza durante la carga máxima intrusiva de los dientes anteriores y
después de la descarga por tipo de alambre; media (DE) (Sifakakis et al. 2015).
7 hilos 0,027 pulg. 4,4 (0,3) 0,8 (0,1) 13,8 (1,2) 2,2 (0,6)
Orto FlexTech 2,0 (0,4) 0,1 (0,1) 7,6 (1,5) 0,9 (0,2)
3 hilos 0,0195 pulgadas. 3,8 (0,3) 0,5 (0,1) 11,5 (1,1) 1,8 (0,4)
3 hilos de 0,0215 pulgadas. 4,8 (0,3) 0,6 (0,1) 15,1 (1,9) 1,8 (0,4)
Unin vitroEl estudio concluyó que un alambre de retención lingual retorcido de tres hebras de
0,036 pulgadas tenía una tasa de deflexión de carga relativamente mayor que una muestra de
acero inoxidable construida con alambres de ligadura retorcidos de tres hebras hechos a
medida de 0,010 pulgadas cada uno o 0,016 × 0,022 pulgadas. alambre de ocho trenzados.
Según los autores, este retenedor puede resistir la deformación causada por las fuerzas
oclusales, reduciendo así el movimiento dental involuntario y aún así permanecer lo
suficientemente flexible como para permitir el movimiento fisiológico de los dientes (Samson
et al. 2018). En conclusión, es recomendable utilizar arcos con mayor rigidez a flexión y torsión
para la retención fija.
Referencias
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Índice
síndrome, de despegue y
bioaerosoles 122 limpiar 133-135
ADA (American Dental evidencia de 125-129
Asociación) 144 peligros por desprendimiento y
Índice de restos de adhesivo molienda 194–197
(IRA) 5, 29 minimizar el riesgo de inhalación
SR 89-90 123–124
envejecimiento) reducir el ortodoncista
de resinas compuestas 219–221 exposición a 131-133
intraoral 190, 192 Al Maaitah, EF 74
color de los dientes y Alakus-Sabuncuoglu, F. 36
81 Ahrari, F. 35, 93 tratamiento con alineadores
eficacia clínica
b de 259–275
retención bacteriana, superficie tasas de fracaso 265–269
rugosidad y 90 alineación a largo plazo
Barreda, GJ 190 estabilización 262–265
Belleza Ortho Bond 210 efectos periodontales 269–271
Belleza Ortho Bond alineación a corto plazo
Salivatec 210 estabilización 260–262
Bergland, pág. 29 efectos secundarios de los bonos
electroforesis (DGGE), mi
para identificar especies EDI (índice de daño del esmalte) 90
microbianas 133–134 EFSA (European Food Safety Index)
123
bioaerosoles dentales Autoridad) 248
horno dental 236 Ehmer, U. 263
lupa dental 92 piezas de mano con motor 12-14
personal dental, riesgos por eléctrico descementado 33–34
inhalación de partículas 37, 91T.
electrotérmico Eliades,
124-125 Elías, K. 15
neumoconiosis del técnico dental Elkassas, D. 19
(DTP) 125 Emir, F.7
líneas de agua para unidades dentales (DUWL) esmalte
144, 154, 160–161, 169 color de
dentina 68 acerca de 63–66, 86–87
desproteinización 57–58 adhesivos 82–83
agente desproteinizante 46, Etiología de los cambios en 71–72
50–51, 53 la edad 81.
Johnston, Nueva Jersey, EE.UU. 131, 132, 133 Índice de irregularidad de Little (LII)
Joshi, AA 148 261, 263–264
ubicaciones, por falla de unión 29–
k 30 Logothetis, DD 149
Kaga, M. 20 estabilización de alineación a largo plazo
(LGN) 66 diámetro
Lew, KK 91 (MMAD) 117–120,
Enlace ligero 209, 216 127–128, 195
Retenedor de fotopolimerización 210 espectrometría de masas 253
fuente de luz, como factor fuerzas masticatorias y deformaciones
influir en la percepción alrededor de 283
hipomineralización) medidas 90
43, 52–56 nuevos que contienen fluoruro
Menores, C. 32 vidrio bioactivo 19
MMA (metilo
metacrilato) 124 oh
MMAD (mediana de masa aerodinámica objeto, como factor que influye
diámetro) 117–120, percepción del color 66
127–128, 195 combinación de colores objetiva,
Mohán, M. 149 demanda de 69
Humedad, brillo e hipomineralización de observador, como factor que influye
los incisivos de 97 molares. percepción del color 66
(MIH) 43, 52–56 límites de exposición ocupacional
monómeros, enjuague bucal sin BPA (OEL).Verlugar de trabajo
180–182, color de dientes y 83 límites de exposición (WEL)
turbinas 12-14 w
Tuvo, B. 169 Waghmare, Virginia, EE.UU. 153
TWA (promedio ponderado en el tiempo) refrigerante de agua 127
129-130 flujo de agua, como factor relacionado con
retenedores twistflex eficiencia de corte 14–15 sorción
240 Tynelius, GE 263 de agua, de material compuesto
resinas 219
tu Onda fluida 210
descementado ultrasónico 33
tener puesto
escalador ultrasónico
abrasivo 211–212
alrededor de 154
clínico 211–212
brillo y 99 resistencia a, de compuesto
Luz ultravioleta, brillo y unidades, 99 resinas 211–213
para despegar tensiones, 37 Alicates Weingart 32
movimientos dentales no deseados.
WEL (límites de exposición en el lugar de trabajo)
272–275, 284
alrededor de 129-131
modificado con uretano
para sílice 196–197
BisGMA 180 rugosidad húmeda 97
Centros para el Control y la Prevención de
Lesiones de manchas blancas de 125
Enfermedades de EE. UU.
asbesto blanco (crisotilo) 71
(CDC) 170 fresas de piedra blanca 92, 93
Toxicología Nacional de EE. UU.
Gato montés 290
Programa 248
interfaz compuesta de alambre, unión
fracaso en 213-214
v alambres
MENTO