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SOCIOLOGIA

Como primera instancia de comprensión, imaginemos la siguiente situación en la cual coinciden en un mismo
encuentro cuatro personalidades. Entre ellas reconocemos a:

1 una persona preocupada por los problemas sociales y políticos,

2 un sacerdote cristiano,

3 un representante de pueblos originarios, y por último,

4 un científico.

El punto de coincidencia entre los cuatro radica en algo muy recurrente en muchas reuniones sociales: Argentina y
sus históricos problemas.

Los cuatro personajes argumentan, desde su punto de vista, los hechos que se describen a continuación.
Para comprender la sociología, recurriremos a uno de sus padres fundadores. Auguste Comte (1798-1857) intenta
aclarar los diversos tipos de pensamiento a alcanzar o de aproximarse a la verdad. Es quien acuña el término de
sociología, en 1824 en su trabajo de “Curso de la filosofía positiva”. A su vez, Comte propone tres niveles o estadios
de conocimiento, entendidos como formas con las cuales las personas explican la organización de las sociedades. La
clasificación propuesta es, a saber.

Teológico: la explicación se basa en poderes sobrenaturales que influyen en los hechos cotidianos. También
asociado al fetichismo, al politeísmo o al monoteísmo.

Metafísico: a diferencia de la anterior, los dioses serán reemplazados por un modelo centrado en causas y esencias
abstractas que operan como principios de la realidad concebidos por la razón. Así, las cuestiones de la realidad se
explican a partir de entidades tales como la soberanía o la ley.

Positivo: en el último estadio, la explicación de los hechos se invoca desde un entramado de leyes basadas en la
evidencia empírica (observación, comparación, experimentación). Es la etapa de la ciencia y el industrialismo y este
estadio daría lugar a un desarrollo infinito.

Por tanto, para Comte, existe una evolución del conocimiento desde formas rudimentarias a otras más refinadas y
sofisticadas.

¿Te acuerdas de los negativos? En la figura 1 se muestra la cinta de los rollos fotográficos. Esas cintas plásticas nos
permitían duplicar las fotos de las cámaras analógicas, tenían negativo donde incidía la luz y su reverso, entendido
como “positivo”, quedaba plasmado en el papel. De allí el nombre del positivismo, es decir aquello que se encuentra
de acuerdo a la luz o iluminada, susceptible al instrumento con el cual vemos los hechos.

ANTECEDENTES

Si bien la historia de la humanidad indagó y desarrolló conceptos y teorías sobre el hombre como un ser social, no es
sino hasta dos hitos trascendentales, sobre todo en el siglo XIX, que no surgirá una disciplina que, desde la ciencia,
intente describir, explicar y evaluar el comportamiento de lo social.

Cabe entonces preguntar ¿cuándo surge esta disciplina? ¿Qué factores desencadenantes influyeron para que la
sociología se posicione como ciencia, como conocimiento autorizado para analizar, explicar y predecir fenómenos
sociales? ¿Cómo explicaron los autores clásicos estos cambios sociales?

La sociología surge como ciencia, es decir, como conocimiento autorizado a mediados del siglo XIX, y principios del
siglo XX. Ello, como consecuencia de dos revoluciones burguesas: la Revolución Francesa (en la Francia de 1789) y la
Revolución Industrial (originada en Inglaterra en el siglo XVII). Los cambios sociales productos de dichas revoluciones
modificaron abruptamente la manera en la que las personas interactuaban entre ellas y las maneras de organizarse.

Los principales ejes donde se producen los cambios sociales son, a saber.

 El paso del teocentrismo al antropocentrismo: el avance de la ciencia y la tecnología que no toma a Dios
como centro del mundo y de las explicaciones, sino que ubica al hombre en ese centro.
 El desarrollo de una economía industrial con producción fabril, que deja atrás la vida en el campo y su
producción manufacturera y artesanal.
 Y la gran masa migratoria de los campos a las ciudades que comenzaron a reflexionar sobre los derechos
políticos, laborales y la idea de democracia.
Surge el capitalismo como sistema económico, provocado por el auge de la Revolución Industrial. Deja atrás la Edad
Media, donde las personas se dedicaban al cultivo de la tierra o la producción de manufactura a pequeña escala. Era
una economía familiar, donde los vínculos eran afectivos, los hombres trabajaban la tierra y las mujeres realizaban
las tareas hogareñas.

En el siglo XVIII con el avance del conocimiento científico y tecnológico se producen las primeras máquinas
hidráulicas y la máquina a vapor que permitió la producción a gran escala. De esta manera, nace la producción fabril.
Ante este cambio, las personas comenzaron a abandonar la vida en el campo y migraron a las grandes ciudades en
busca de trabajo en estas nuevas fábricas, convirtiéndose en eslabones de la cadena de producción. Se rompe la idea
de familia tradicional y sus costumbres. Pero el abandono de las tierras, se produce también porque los propietarios
de los campos empiezan a cercarlas para producir ganado lanar y ensamblar este producto en la industria textil. Así,
se expulsaba a una gran masa de trabajadores a las grandes urbes que se formaban en los países europeos. Fue tan
vertiginoso el cambio y el crecimiento en las ciudades que comenzaron a surgir fenómenos nuevos como la
desocupación, el hacinamiento ante la falta de viviendas, enfermedades y pestes, delincuencia, entre otros.

Como ya se mencionó, en la Edad Media, Dios era el centro del mundo, y en lo que respecta a la política, la sociedad
era un reflejo de Dios en el que la monarquía gobernaba por derecho divino. Con los cambios producidos, se
empieza a abandonar el teocentrismo, no solo en la política, sino en todos los ámbitos sociales. Ya no era gracia de
Dios lo que sucedía en la tierra, sino el accionar del hombre con el desarrollo de la ciencia.

De esta manera, se entiende por sociología a la ciencia que estudia de manera sistemática y rigurosa a la sociedad y,
dentro de ella, a todas las organizaciones y grupos que la componen, como la familia, la escuela, las empresas,
sindicatos, partidos políticos, organizaciones no gubernamentales (ONG), etcétera. Ahora bien, una mirada
sistemática y rigurosa de la sociedad también puede llevarla a cabo la Psicología (psiquis humana) o la Antropología
(culturas). Variarán las diferentes miradas según el objeto de estudio, lo que diferencia a cada una de estas ciencias.
Desde esta perspectiva, la mirada sociológica atiende a las estructuras sociales, hecho que implica desnaturalizar
todo aquello que nos resulta familiar o damos por supuesto, sin que esto signifique una distancia con nuestro objeto
de estudio. Por ejemplo si en una organización, durante mucho tiempo, se trabajó de la siguiente manera: el mismo
uniforme, el aspecto edilicio sin modificar, la comida siempre igual y el modo de comunicación también. Por qué no
pensar y analizar en consultarles a los miembros que la integran (jefes/gerente y empleados de la planta) ¿qué le
modificarían para sentirse mejor en el lugar de trabajo? Otro ejemplo podría ser que en el día del trabajador, en vez
de quedarnos solo con el feriado no laborable, romper con esta norma y fomentar en nuestra organización un día
festivo, donde se realicen actividades recreativas, premios, invitación a cursos, etcétera.

Para llevar a cabo la desnaturalización de los fenómenos y situaciones que nos son naturales, una corriente
sociológica pertinente podría ser la mirada micro de la sociología. La misma nos permite indagar, analizar y
reconocer cómo las personas interaccionan entre ellas y el significado que las mismas le otorgan a sus acciones.
Podríamos pensar en una fábrica: ¿cómo interactúan los obreros durante la jornada laboral?, ¿qué significado tienen
estas conductas para ellos?; o ¿qué significado tiene para ellos la hora del almuerzo, el lugar donde lo hacen, la
comida que reciben (cuando la reciben)?, ¿qué significado le darían a la actitud de un superior de sentarse junto a
ellos una vez por semana para conversar o cómo y de qué manera interaccionan con sus superiores y qué significa
para ellos esta interacción? Ejemplos de la vida cotidiana y organizacional sobran, motivo por el cual, te invitamos
como futuro profesional a pensarte y pensar en este tipo de situaciones para un mejor desempeño. Podríamos
hablar de una organización, en vez de una sociedad y la idea es la misma, porque las organizaciones conforman a la
sociedad, y en ellas los tipos de interacción, los significados que las personas les dan a estas interacciones forjan
identidades. Por ejemplo, generalmente tendemos a decir “yo soy empleado de tal empresa” y no “yo soy Pedro de
45 años”. Es más, no solo la identidad se forma en esa empresa sino en el área en la que trabaja: “yo soy operario de
tal automotriz”; “yo soy la psicóloga de recursos humanos”; “yo soy el técnico en seguridad e higiene de tal fábrica”.

Así, encontramos además de Comte, tres autores denominados clásicos que nos ayudarán a comprender los
diferentes enfoques de la sociología impregnados con sus formas de comprender y analizar el cambio social.

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