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SEMESTRE: DÉCIMO
ASIGNATURA: SÍNTESIS FILOSÓFICA- TEOLÓGICA
DOCENTES: CARLOS JULIO ROZO – ÁNGELA RINCÓN
ALUMNO: JOHN JAIRO MORA MEDINA
TRABAJO N° 1: SÍNTESIS DE LA FILOSOFÍA ANTIGUA
FECHA: VIERNES, 3 DE AGOSTO DE 2014
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Por la expansión del imperio y la invasión a otros pueblos los griegos entran en
contacto con nuevas culturas, nuevas formas de pensamiento y de entender el
mundo, y así se plantean nuevos retos, nuevas metas y a estructurar la forma de
vida y los valores para llevarla a cabo, por ello en el siglo VI A.C, en Mileto,
comienza a desarrollarse el pensamiento racional. Este momento es el que se
conoce como el paso del “mito”1 al “logos”.
Para los griegos, los dioses daban sentido al mundo, de aquí la gran importancia e
influencia de la mitología griega para todo el mundo occidental. Homero y Hesíodo
ejemplifican cómo eran los mitos, la forma de explicación religiosa. Homero
narraba los mitos en forma de arte poético y a su vez Hesíodo realizaba su obra
en prosa.
Por medio del diálogo mediante la palabra, comenzará el origen del pensamiento.
Tras el contacto que los griegos mantienen con otras culturas, la forma de ver la
vida cambia.
De esta manera, la filosofía se independizó de la religión. Los filósofos de la
naturaleza dieron los primeros pasos hacia una manera científica de pensar,
desencadenando todas las ciencias naturales posteriores.
FILÓSOFOS DE LA NATURALEZA
Opinaba que el origen de todo era el AIRE o la niebla. Quizás fuera de la opinión
de que aquello de lo que se ha creado todo, precisamente tiene que ser distinto a
lo creado. En ese caso, la materia primaria no podía ser algo tan normal como el
agua, sino algo “indefinido” conociendo la teoría de Tales sobre el agua, decía
que el agua tenía que ser aire condensado, el agua surge del aire cuando llueve.
Y cuando el agua se condensa aún más, se convierte en tierra, pensaba él.
Quizás había observado cómo la tierra y la arena provenían del hielo que se
derretía. Asimismo pensaba que el fuego tenía que ser aire diluido. Según
Anaxímenes, tanto la tierra como el agua y el fuego, tenían como origen el aire.
Pensaba que para que surgiera vida, tendría que haber tierra, aire, fuego y agua.
Compartía con Tales la idea de que tiene que haber una materia primaria, que
constituye la base de todos los cambios que suceden en la naturaleza.
2
FERNANDEZ, Clemente. Los filósofos antiguos. Ed BAC. 1974
la materia primaria no podía ser algo tan normal como el agua, sino algo
“indefinido”.
4. CIENCIA DE LA MEDICINA
4. 2 HIPÓCRATES
Se dice que Hipócrates, quien nació en Cos hacia el año 460 a. de C., fue el
fundador de la ciencia griega de la medicina.
La protección más importante contra la enfermedad era, según la tradición médica
hipocrática, la moderación y una vida sana.
Lo natural en una persona es estar sana. Cuando surge una enfermedad, es
porque la naturaleza ha “descarrilado” a causa de un desequilibrio físico o
psíquico. La receta para estar sano era la moderación, la armonía y “una mente
sana en un cuerpo sano”.
Las reglas de la medicina moderna tienen sus raíces en Hipócrates, que exigió a
sus discípulos que prestasen el juramento que aún se utiliza hoy en día.
5. “NADA PUEDE SURGÍR DE LA NADA…”
Los tres filósofos de Mileto pensaban que tenía que haber una y quizás sólo una-
materia primaria de la que estaba hecho todo lo demás. A la pregunta: ¿cómo era
posible que una materia se alterara de repente para convertirse en algo
completamente distinto? A este problema lo podemos llamar problema del cambio.
Desde aproximadamente el año 500 a. de C. vivieron unos filósofos en la colonia
griega de Elea en el sur de Italia, y estos eleatos se preocuparon por cuestiones
de ese tipo. Los más conocidos fueron:
Él pensaba que precisamente los cambios constantes eran los rasgos más
básicos de la naturaleza. “Todo fluye», dijo Heráclito. Todo está en movimiento y
nada dura eternamente.
Por eso no podemos “descender dos veces al mismo río, pues cuando desciendo
al río por segunda vez, ni yo ni el río somos los mismos” 3. Heráclito también
señaló el hecho de que el mundo está caracterizado por constantes
contradicciones. Si no estuviéramos nunca enfermos, no entenderíamos lo que
significa estar sano. Si no tuviéramos nunca hambre, no sabríamos apreciar estar
saciados. Si no hubiera nunca guerra, no sabríamos valorar la paz, y si no hubiera
nunca invierno, no nos daríamos cuenta de la primavera.
Tanto el bien como el mal tienen un lugar necesario en el Todo, decía Heráclito. Y
si no hubiera un constante juego entre los contrastes, el mundo dejaría de existir.
«Dios es día y noche, invierno y verano, guerra y paz, hambre y saciedad», decía.
En lugar de la palabra «Dios», emplea a menudo la palabra griega logos, que
significa razón. Esta «razón universal» -o “ley natural”, es algo común para todos
y por la cual todos tienen que guiarse. Y, sin embargo, la mayoría vive según su
propia razón, decía Heráclito. No tenía, en general, muy buena opinión de su
prójimo. “Las opiniones de la mayor parte de la gente pueden compararse con los
juegos infantiles”, decía. En medio de todos esos cambios y contradicciones en la
naturaleza, Heráclito veía, pues, una unidad o un todo. Este “algo”, que era la
base de todo, él lo llamaba “Dios” o “logos”. Creador de la dialéctica.
Parménides pensaba que todo lo que hay ha existido siempre, lo que era una idea
muy corriente entre los griegos. Daban más o menos por sentado que todo lo que
existe en el mundo es eterno.
“Nada puede surgir de la nada”, pensaba Parménides. Y algo que existe, tampoco
se puede convertir en nada. Pero Parménides fue más lejos que la mayoría.
Pensaba que ningún verdadero cambio era posible.
No hay nada que se pueda convertir en algo diferente a lo que es exactamente.
3
FERNÁNDEZ, Clemente. Los filósofos antiguos, textos. Ed BAC. Madrid. 1974. Pag. 23
Como filósofo, consideraba que era su obligación descubrir toda clase de
«ilusiones». Esta fuerte fe en la razón humana es lo que conocemos como
racionalismo.
Parménides se había negado a aceptar cualquier forma de cambio a diferencia de
Heráclito. Llegó a la conclusión de que, en realidad, la filosofía no es algo que se
puede aprender, sino que quizás uno pueda aprender a pensar filosóficamente.
(460-370 a.C.) Estaba de acuerdo con sus predecesores en que los cambios en la
naturaleza no se debían a que las cosas realmente «cambiaran». Suponía, por lo
tanto, que todo tenía que estar construido por unas piececitas pequeñas
e invisibles, cada una de ellas eterna e inalterable. A estas piezas más pequeñas
Demócrito las llamó átomos. La palabra “átomo” significa “indivisible”. Ante todo
son indivisibles. Tienen formas y tamaños diferentes, son macizas e
impenetrables. Estas conexiones pueden deshacerse para poder dar lugar a
nuevos objetos con las mismas piezas.
Ya que no creía en nada más que en lo material, su filosofía es “materialista”.
Demócrito puso temporalmente fin a la filosofía griega de la naturaleza.
7. LOS SOFISTAS
Del griego sophi, “experto”, “maestro”, “hombre de sabiduría”, nombre aplicado por
los antiguos griegos a los hombres eruditos, tales como los Siete Sabios de
Grecia; en el siglo V a.C. Los griegos pensaban que los seres humanos podían
enterarse de su destino a través del famoso oráculo de Delfos. Así los griegos
podían aprovecharse de la sabiduría de Apolo, ya que creían que Apolo sabía todo
sobre el pasado y el futuro. Muchos jefes de Estado no se atrevían a declarar la
guerra, o a tomar otras decisiones importantes, antes de haber consultado el
oráculo de Delfos. Así pues, los sacerdotes de Apolo funcionaban prácticamente
como una especie de diplomáticos y asesores, con muy amplios conocimientos
sobre gentes y países. Encima del templo de Delfos había una famosa
inscripción: ¡CONÓCETE A TI MISMO!, que será retomado por Sócrates en su
discurso filosófico.
7.1 SÓCRATES (470-. 399 a.C.)
Tal vez la mayor personalidad filosófica haya sido Sócrates. Práctico
un dialogo continuo hasta que fue sentenciado a muerte, condena que cumplió
bebiendo cicuta. Sócrates no dejó ningún escrito, pero sus enseñanzas fueron
preservadas para generaciones posteriores en los diálogos de su famoso discípulo
Platón y también aparecen en los escritos de Jenofonte. Sócrates enseño que
cada persona tiene conocimiento de la verdad última dentro de su alma y que sólo
necesita llevarlo a la reflexión consciente para darse cuenta. Su contribución a la
historia de la filosofía no fue una doctrina sistemática, sino un método de reflexión,
la MAYÉUTICA, y un tipo de existencia. Hizo hincapié en la necesidad de un
examen analítico de las creencias de cada uno, de definiciones claras de los
conceptos básicos y de un planteamiento racional y crítico de los problemas
éticos. Y sobre todo no dando solución el mismo a los problemas planteados, sino
dando herramientas para que el interlocutor buscara sus propias soluciones al
problema o despejara sus dudas. Este método pedagógico de bpusqueda del
conocimiento se llamó la ironía.
8. PLATÓN (S. IV a.C.)
No se encuentra formulada como tal en ninguna de sus obras, sino tratada, desde
diferentes aspectos, en varias de sus obras de madurez como "La República",
"Fedón" y "Fedro". Por lo general se considera que la teoría de las Ideas es
propiamente una teoría platónica, pese a que varios estudiosos de Platón, como
Burnet o Taylor, hayan defendido la tesis de que Platón la había tomado
directamente de Sócrates.
Tradicionalmente se ha interpretado la teoría de las Ideas de la siguiente manera:
Platón distingue dos modos de realidad, una, a la que llama inteligible, y otra a la
que llama sensible. La realidad inteligible, a la que denomina "Idea", tiene las
características de ser inmaterial, eterna, (ingenerada e indestructible), pues
siendo, por lo tanto, ajena al cambio, y constituye el modelo o arquetipo de la otra
realidad, la sensible o visible, constituida por lo que ordinariamente llamamos
"cosas", y que tiene las características de ser material, corruptible, (sometida al
cambio, esto es, a la generación y a la destrucción), y que resulta no ser más que
una copia de la realidad inteligible.
El dualismo sensible/inteligible
Una de las primeras consecuencias que se ha extraído de esta presentación
tradicional de la teoría de las Ideas es, pues, la "separación" entre la realidad
inteligible, llamada también “mundo inteligible” y la realidad sensible o “mundo
visible” que aboca a la filosofía platónica a un dualismo que será fuente de
numerosos problemas y rechazos.
Lo inteligible: En cuanto a las Ideas, en la medida en que son el término de la
definición universal representan las "esencias" de los objetos de conocimiento, es
decir, aquello que está comprendido en el concepto; pero con la particularidad de
que no se puede confundir con el concepto, por lo que las Ideas platónicas no son
contenidos mentales, sino objetos a los que se refieren los contenidos mentales
designados por el concepto, y que expresamos a través del lenguaje. Las Ideas
son únicas, eternas e inmutables y no pueden ser objeto de conocimiento
sensible, sino solamente cognoscibles por la razón. No siendo objeto de la
sensibilidad, no pueden ser materiales. Además, las Ideas son el modelo o el
arquetipo de las cosas, por lo que la realidad sensible es el resultado de la copia o
imitación de las Ideas. Esa relación es explicada como imitación o como
participación: las cosas imitan a las Ideas, o participan de las Ideas.
Lo sensible: Por su parte la realidad sensible se caracteriza por estar sometida al
cambio, a la movilidad, a la generación y a la corrupción. El llamado problema del
cambio conduce a Platón a buscar una solución que guarda paralelismos
importantes con la propuesta por los filósofos pluralistas: siguiendo a Parménides
hay que reconocer la necesaria inmutabilidad del ser, pero la realidad sensible no
se puede ver reducida a una mera ilusión. Aunque su grado de realidad no pueda
compararse al de las Ideas ha de tener alguna consistencia, y no puede ser
asimilado simplemente a la nada. La teoría de las Ideas pretende solucionar, entre
otros, el problema de la unidad en la diversidad, y explicar de qué forma un
elemento común a todos los objetos de la misma clase, su esencia, puede ser
real; la afirmación de la realidad de las Ideas no puede pasar por la negación de
toda realidad a las cosas. De esta doctrina también se desprende la concepción
de que el ser humano tiene un “alma” y un “cuerpo”
4
DIÓGENES VI, 13 (GIONA, Cárdenas; FALLAS, Luis A. En diálogo con los griegos. Ed San Pablo. Bogotá. 2003)
raíces Por su nombre, reflejan su manera de comportarse, ya que hacían en
público aquellos actos que la gente por pudor suele hacer sólo en privado.
El perro era, en el lenguaje coloquial, el símbolo de la desvergüenza extrema Los
cínicos proponían un retorno a la naturaleza, y un rechazo de las convenciones y
artificios de la civilización, tomaron como ejemplo de comportamiento a los
animales. Rechazan la ley “nomos”, particular de cada ciudad, para defender lo
universal de la “Physis”.
El epicureísmo fue fundado en las enseñanzas del filósofo griego Epicuro y busca
garantizar la “tranquilidad del espíritu”. La verdadera felicidad consiste en la
serenidad que resulta del dominio del miedo, es decir, de los dioses, de la
muerte y de la vida futura.
Las virtudes cardinales del sistema de ética epicúreo son la justicia,
la honestidad y la prudencia, o el equilibrio entre el placer y el sufrimiento.
SENSUALISMO: La sensualidad es el criterio de la verdad y del bien por tanto el
placer constituye el bien supremo y la meta más importante de la vida. Se
prefieren los placeres intelectuales a los sensuales, que tienden a perturbar la paz
del espíritu.
ATOMISMO: La física epicúrea atomista cree que la forma y cambio de las cosas
se da por la unión y desunión de los átomos que la componen.
SEMIATEÍSMO: En su concepción deísta, consideran que los dioses existen pero
no tienen papel en la formación y gobierno del mundo.5
El epicureísmo fue desacreditado por su confusión con el hedonismo sensual
proclamado con anterioridad por los cirenaicos.
5
ABBAGNANO, Nicola. Diccionario de filosofía. Ed. Torinense. Turín. 1961
La base de la ética estoica es el principio, proclamado antes por los cínicos, de
que el bien no está en los objetos externos, sino en la condición del alma en sí
misma, en la sabiduría y dominio mediante los que una persona se libera de las
pasiones y deseos que perturban la vida corriente. Las cuatro virtudes cardinales
de la filosofía estoica son la sabiduría, el valor, la justicia y la templanza, una
clasificación derivada de las enseñanzas de Platón.
Un rasgo distintivo del estoicismo es su vocación cosmopolita. Todas las personas
son manifestaciones de un espíritu universal y deben, según los estoicos, vivir en
amor fraternal y ayudarse de buena gana unos a otros. Mantenían que diferencias
externas, como la clase y la riqueza, no tienen ninguna importancia en las
relaciones sociales.
6
Cf. http://es.wikipedia.org/wiki/Escepticismo_filos%C3%B3fico
BIBLIOGRAFÍA
12. http://www.paginasobrefilosofia.com/html/presocra.html.
13. http://www.monografias.com/trabajos/filosofanti/filosofanti.shtml.
14. http://es.wikiversity.org/wiki/Filosof%C3%ADa_antigua
15. http://es.wikipedia.org/wiki/Escepticismo_filos%C3%B3fico