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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA GABRIEL RENE MORENO

FACULTAD INTEGRAL CHIQUITANA


CARRERA DE INGENIERIA AGROPECUARIA

ALOJAMIENTO DEL TERNERO, EN SISTEMA INTENCIVO, VENATAJAS Y


DESVENTAJAS DE ESTE METODO, MANEJO DE ESOS SISTEMAS, BIOSEGURIDAD.

ESTUDIANTE : ANAYELY LANGUIDEY NUÑEZ


SEMESTRE: 4TO
DOCENTE: DR. EUGENIO VACA PARDO
Nº REGISTRO: 222119535
FECHA: - 11 - 2023

SAN IGNACIO DE VELASCO


ALOJAMIENTO DEL TERNERO, EN SISTEMA INTENCIVO, VENATAJAS Y DESVENTAJAS DE
ESTE METODO, MANEJO DE ESOS SISTEMAS, BIOSEGURIDAD.

Introducción. – el sistema inmunológico de las terneras durante las primeras semanas de vida no está
totalmente desarrollado y depende durante gran parte del periodo de cría del suministro de calostro en
cantidad y calidad, asegurándose el suministro en el momento adecuado luego del nacimiento
(sistemas intensivos en los cuales la ternera es separada de la madre de inmediato con el
nacimiento). Es por esta razón que factores ambientales que estén fuera de los limites normativos
pueden tener fuerte influencia en la salud y el desarrollo de la ternera.

Es de hacer notar, que independientemente del sistema de alojamiento, el productor se deberá


asegurar de la limpieza general de la vivienda y cada uno de sus componentes/utensilios a saber:
bebederos, comederos, baldes o utensilios similares para suplir alimentos, etc. Estos factores son
parte de las normas vigentes para el bienestar animal

Las posibilidades de diseño son diversas y en la elección de la solución más adecuada pesan un buen
número de factores condicionantes que hay que considerar detenidamente. Quizá sean los terneros el
grupo de animales de una explotación bovina al que se le ha prestado una menor atención, en razón,
quizá, de no tratarse de una fase productiva, en el sentido monetario del término. Es evidente que
terneros criados en ambientes poco favorables puede que no lleguen nunca a expresar todo su
potencial genético, bien se trate de producción de leche o de producción de carne. Aún más, los datos
recogidos en muchísimas granjas nos dicen que se mueren demasiados terneros, con las pérdidas
económicas que ello supone. Una de las principales razones de los altos índices de mortalidad
es el inadecuado alojamiento en el que se coloca a los terneros durante esta fase crítica que son sus
2-3 primeros meses de vida.

Existen muchas formas de alojamiento para terneros lecheros – cobertizos, jaulas, hatos o partidas,
pastizales, o becerros amarrados a un poste. Existen casi tantas formas de alojamiento para terneros
como hay granjas. Los alojamientos para terneros son únicos para la mayoría de las granjas.

es fundamental garantizar cada uno de los demás pilares de la producción animal: alimentación,
manejo, higiene, sanidad y calidad genética de los propios animales

Condiciones generales de los alojamientos

Con independencia del tipo de alojamiento que se adopte, hay una serie de condiciones que debemos
tener siempre presentes en su elección

1. Protección contra temperaturas y otros agentes climáticos extremos

2. Medio ambiente libre de estrés: seco, ausencia de corrientes de aire, con suficiente espacio vital
(descanso, ejercicio, alimentación), limpio y aire fresco

3. Fácil acceso a agua limpia y alimento fresco

4. Buenas condiciones sanitarias e higiénicas

5. Facilidades para agrupar a los animales por tamaño o edad

6. Facilidad para el manejo y separación de animales

En segundo lugar, no debemos obviar la normativa urbanística y medioambiental, sobre todo a la hora
de decidir el emplazamiento del alojamiento, procurando que el impacto ambiental sea tolerable y
adoptando, en cualquier caso, medidas correctoras para minimizarlo.

en tercer lugar, la cada vez mayor exigencia de respeto al bienestar de los animales, procurando
proporcionar el mayor grado de confort posible, lo que, a su vez, redundará en una mayor expresión de
su potencial productivo, tal y como señalábamos en la introducción.

Por último, los alojamientos deben ser funcionales y versátiles, que permitan aprovechar al máximo la
mano de obra y la maquinaria, de forma que la inversión realizada sea rentable y los gastos de
funcionamiento y mantenimiento sean los mínimos posibles. Lo más barato no suele ser lo mejor, pero
tampoco lo es lo más caro.
Temperatura

Cuando un ternero está seco y no hay corrientes de aire que aumenten las pérdidas de calor, el calor
producido por un animal sano y bien alimentado es, generalmente, suficiente para mantener la
temperatura corporal, aun si las temperaturas ambientales son bajas

se muestran unas necesidades térmicas elevadas, también hemos encontrado otros datos que
consideramos más realistas

vientos fuertes y fríos, cambios bruscos de temperatura y niveles altos de humedad originan una
temperatura crítica inferior más elevada y potencian la aparición de patologías digestivas y
respiratorias, sobre todo en los terneros de menos de 3-4 semanas, período en el cual aún no han
desarrollado su sistema inmunitario.

También el grado de aislamiento que proporciona el suelo donde esté echado el ternero condiciona la
temperatura crítica inferior

En las condiciones climáticas españolas (excepto zonas de montaña), suelen ser más problemáticas
las temperaturas elevadas (sobre todo con humedad relativa también alta), disminuyendo la velocidad
de crecimiento y aumentando el índice de conversión.

Por tanto, en general, no será necesario instalar calefacción en los alojamientos de cría de terneros,
siendo suficiente para conseguir una temperatura óptima un aislamiento térmico correcto, una cama
adecuada y ausencia de corrientes de aire.

Ventilación

Una ventilación correcta es esencial para el bienestar de los animales alojados: además de
proporcionar el oxígeno necesario para la respiración, permite controlar los niveles de gases tóxicos
(CO2, SH2, NH3), de humedad y de polvo en la atmósfera de los alojamientos. Además, es un eficaz
mecanismo para regular la temperatura ambiente y eliminar olores.

El principio de la ventilación es simple. El aire exterior, más o menos frío, se calienta en contacto con
los animales y con la cama, se vuelve más ligero y asciende. En este trayecto, el aire se carga de
humedad, de gases y de polvo, por lo que es necesario dirigirlo hacia el exterior.
El caudal de aire a evacuar (en m3 /hora) está, a su vez, condicionado por:

1. La diferencia de temperatura entre el interior y el exterior

2. La diferencia de altura entre la entrada y la salida del aire

3. La diferencia de superficie entre las entradas y las salidas de aire.

Cuando se trata de edificios cerrados es conveniente situar adecuadamente las entradas y salidas de
aire, de modo que la velocidad de renovación del mismo se produzca sin superar 0.5 m/s al nivel de
los animales (en verano) y 0,2 m/s en invierno.

Las necesidades de ventilación que indican las distintas fuentes bibliográficas no son coincidentes
aunque se mueven en niveles muy próximos entre sí. Podemos cifrar estas necesidades en 0,370
m3 /hora y kilo de peso vivo, durante el invierno, y entre 0,935 y 1,900 m3 /hora y kilo de Peso vivo, en
verano.

En lugares donde los veranos son largos y calurosos, la ventilación natural puede no ser suficiente. En
estos casos, será necesario recurrir a la ventilación dinámica, mejorando así las condiciones
ambientales y, por tanto, el grado de confort y de salud de los animales.

Alojamientos para la cría de terneros

La cría de terneros puede ser una actividad colateral en las explotaciones lecheras o principal en las
explotaciones de cebo que adquieren lotes de terneros de primera edad. En uno y otro caso, los
animales se alimentan con leche maternizada o lactoreemplazante, habitualmente hasta las 6-8
semanas, o incluso más.

Los terneros lactantes pueden alojarse en:

a) Jaulas individuales

b) Corrales colectivos

Ambos tipos de instalaciones pueden situarse al aire libre o en locales cerrados; cada modelo
presenta ventajas e inconvenientes.

La legislación mencionada define al ternero como "un animal bovino hasta 6 meses de edad" y
determina, específicamente, que:
1) "No se mantendrá encerrado ningún ternero de más de ocho semanas de edad en recintos
individuales, amenos que exista prescripción veterinaria"

2) "La anchura del recinto deberá ser, por lo menos, igual a la altura del animal a la cruz, estando de
pie, y su longitud deberá ser, por lo menos, igual a la longitud del ternero y multiplicada por 1,1"

3) "Ningún alojamiento individual para terneros (con excepción de aquéllos en que se aísla a los
animales enfermos) deberá disponer de muros sólidos, sino de tabiques perforados que permitan un
contacto visual y táctil directo entre terneros".

4) "En caso de terneros criados en grupos, el espacio libre de que disponga cada animal deberá ser
igual, por lo menos, a 1,5 m2 por ternero de peso vivo inferior a 150 kg, de 1,7 m2 por ternero de peso
vivo entre 150 y 220 kg y, de 1,8 m2 por ternero de peso vivo superior a 220 kg".

5) "No se deberá atar a los terneros, con excepción de los alojados en grupo, que podrán ser atados
durante períodos de no más de una hora, en el momento de la lactancia".

Las principales normas de alojamiento que debemos considerar son las siguientes:

a) Una ventilación adecuada

b) Una buena iluminación

c) Una higiene rigurosa

d) Espacio suficiente para cada animal

Del nacimiento hasta las 4 semanas de vida

Durante este período hay que proporcionar todos los medios para evitar cualquier fuente de
contaminación microbiana grave y el eventual contagio de un animal a otro. Nosotros somos
partidarios del alojamiento individual de los terneros durante las tres primeras semanas, por las
siguientes razones:

a) Se evitan contagios entre animales

b) Se evita la competencia entre animales de diferente edad

c) Se evita el reflejo de chuparse entre ellos

La caseta o corral donde se aloja el ternero debe estar bien orientado, evitando su exposición a los
vientos fríos. Es suficiente que la caseta tenga unas dimensiones de 1,70 x 1 m, aunque
recomendamos añadir un pequeño corral donde el animal pueda exponerse al sol, sobre todo en días
frescos

En el caso de que estén situadas al aire libre (lo que, a nuestro juicio, es perfectamente viable en
nuestras condiciones climáticas, incluso las más severas), los terneros deben disponer de abundante
cama de paja. Es conveniente que estos boxes tengan una zona cubierta y que vayan situados sobre
una solera de grava, para mantener el suelo seco. También es aconsejable que las hileras de jaulas se
desplacen tras cada período de utilización para efectuar la limpieza y descanso del suelo sobre el que
se situaron, para permitir su utilización en una ocupación posterior. Estas jaulas deben disponer de un
pequeño corral sin cubrir y adecuadamente orientado según la época del año. En invierno su
orientación al Sur permite la entrada de los rayos solares

El material con el que se fabrican estas jaulas es diverso. Aunque resultan bastante caros, los boxes
prefabricados de poliéster reforzados con fibra de vidrio, cubiertos, dan un excelente resultado.
Disponen de una abertura que comunica con un pequeño parque, delimitado con vallas metálicas. La
valla frontal lleva portacubos, uno para la leche y otro para el agua, un pequeño rastrillo y/o comedero
para concentrado. El ternero está suelto y los boxes, individuales, son desplazables.

Pueden confeccionarse en madera, también individuales. Poseen un entramado frontal por el que el
ternero accede al pienso (en comederos), al agua y a la leche (cubos). Los restantes cerramientos
verticales son compactos, sobre todo los que delimitan la zona cubierta, protegiendo así al ternero
frente al viento.

La cubierta del box, que sólo cubre la mitad posterior del mismo, está formada por placas onduladas
de fibrocemento. Es preferible que la cubierta esté aislada. Para ello, frecuentemente se colocan pacas
de paja sobre ella. Estas jaula pueden construirse aisladas o adosadas entre sí. Las dimensiones de
estos boxes individuales, o de los anteriores, son del orden de 2,80 x 1,40 m.

A pesar de que estos dos materiales son los más frecuentes, no son los únicos que cabe utilizar.
Hemos visto magníficos boxes individuales para terneros construidos con tableros de camión y tubo
cuadrado de acero, convenientemente protegido. O cubos de agua y pienso confeccionados a partir de
las garrafas vacías del detergente con que se limpia la instalación de ordeño. Las múltiples soluciones,
pues, descansan sobre el material disponible y la mayor o menor habilidad del ganadero en tareas de
“bricolaje”

Cuando las jaulas se colocan en el interior de un alojamiento cerrado, no se suele utilizar cama de paja
sino que se colocan elevadas sobre el suelo (25-30 cm). Generalmente son de madera, aunque
pueden ser de tubos metálicos. Preferiblemente serán desmontables, para facilitar la limpieza, tanto de
la jaula como, sobre todo, del local. El suelo debe ser enrejillado, de listones de madera1 , de barras
de hormigón armado, de perfiles de acero o de chapa perforada. Es interesante que los listones de
este enrejillado tengan poca o ninguna separación en la zona delantera de la jaula y aumente en la
parte trasera. Así, el animal tiene menos corriente de aire por el fondo de la zona pectoral y las
deyecciones se eliminan más fácilmente por la parte posterior

Las dimensiones variarán en función de la edad a que los terneros abandonen las jaulas; puede darse
una cifra orientativa de 0,75/1,00 x 1,40/1,80. Si los terneros van a ser alimentados con algo de forraje
y concentrados en esta fase, o se va a alargar la misma por razones productivas, es preciso disponer
de pesebre y de un rastrillo para heno.

La solera bajo estas jaulas de suelo enrejillado debe tener una pendiente del 10-20 % para facilitar la
limpieza de las deyecciones con agua a presión, y disponer de un canal a lo largo de la nave para la
recogida y conducción de dichas deyecciones.

La disposición de las jaulas se hace, habitualmente, en dos filas, dejando un pasillo central de
alimentación (de 1,20 a 1,50 m de anchura) y dos pasillos laterales de limpieza (0,90 m de anchura).

El número de jaulas o boxes con que debe contarse es de un 5 por 100 en relación al número de
vacas adultas si los partos se producen a lo largo del año, y de un 15 por 100 si los partos se agrupan
en tres meses. Se aumentará al doble si los machos no se venden tras el parto

De 2 a 6 meses

El alojamiento puede ser ya colectivo, con un máximo de 6 animales por corral, buscando siempre la
homogeneidad del lote para evitar competencias excesivas. Las necesidades de espacio se cifran en
2-3 m2 /ternera, según su edad. En la figura 6 se representa la planta de un corral para 6 terneras con
zona de alimentación hormigonada y área de reposo pajeada. En la figura 7 se representa la sección
del mismo corral.

La utilización de una cornadiza autobloqueante permite sujetar a los animales en el comedero mientras
se limpia la zona de reposo o se pone material de cama.

En cuanto al suelo, los corrales pueden ser con cama de paja o con enrejillado sobre foso de recogida
de deyecciones. Suele ser más frecuente la primera opción por ser más barata de construir y funcionar
mejor en naves de ventilación natural.
El suelo debe tener una pendiente del 5% para facilitar el drenaje. Si la pendiente es superior, el
drenaje es igualmente correcto, pero la cama de la paja, los terneros y todo lo que pueda moverse
tiende a terminar en la parte baja de la pendiente. Los canales de drenaje deben situarse debajo de los
cubos para la leche y el agua, en la parte frontal, drenando el pasillo y las filas de jaulas o corrales.

Si los canales de drenaje se encuentran en la parte posterior de los boxes, el agua y la leche que se
derraman, así como el agua para la limpieza del pasillo, han de correr a través de la cama y pasar a
través de otros boxes

Zona de almacenamiento y preparación de alimentos

En este local están instalados los equipos y elementos necesarios para la dosificación y mezcla de la
leche artificial, por lo que debe disponer de instalación de agua fría, equipo de calentamiento y
mezcladora. El local debe comunicarse directamente con los pasillos de alimentación de los terneros y
es suficiente con que tenga del orden de 10 m2 por cada 100 cabezas. La entrada y accesos serán
amplios para facilitar la llegada de alimentos y material.

Debe ser un local bien iluminado, dotado de enchufes eléctricos de fuerza y aptos para ambientes
húmedos, espacio para almacenar el sustitutivo lácteo (no directamente sobre el suelo), así como
estanterías y una alacena para material veterinario. El suelo debe ser de fácil limpieza (al igual que
todas las superficies interiores), con pendiente hacia un punto de desagüe cerca del sumidero. De este
modo, se evita que los líquidos derramados escurran por debajo de los alimentos.

Alojamiento grupal

En el caso de alojar a los animales en grupos, deberá tenerse en cuenta que la superficie mínima por
ternera será de 3 m2 del nacimiento al destete

En construcciones tipo corral, las paredes, el piso y desagües deben permitir fácil acceso y limpieza de
los mismos y desinfección de los mismos. Se recomienda la renovación de la cama cada 3-5 días de
acuerdo al material usado. Este material deberá garantizar buena absorción de líquidos (control de
humedad) y facilitar el drenaje de los excesos de los mismos. Paralelamente el material juega un
significativo papel en el aislamiento de frio o calor. La pendiente adecuada del corral deberá asegurar
el correcto drenaje (aproximadamente 2%).
Es recomendable asegurar la posibilidad de poder dejar libre de terneras cada uno de los corrales
luego de finalizado el periodo de cría (aproximadamente 60 días), aplicar cal viva y permitir su
exposición a la luz solar (radiación UV) para lograr la desinfección del sitio (de acuerdo al tipo de
construcción).

El diseño del corral garantizara el manejo de las terneras en grupos, permitiendo a los animales el libre
movimiento, echarse, etc. Además, permitirá la cómoda separación entre diferentes grupos de
animales, y de ser requerido la fácil separación y aislamientos de los animales. Deberá evitarse la
sobrepoblación de los corrales que pueda comprometer la salud, aumentos de peso esperado y el
bienestar animal

Comederos y bebederos deberán garantizar el fácil acceso a cada una de las terneras. En sistemas de
alojamiento grupal, se calcula que el largo de los comederos por cabeza (0-2 meses) deberá ser en
promedio de 35 cm, mientras que los bebederos deberán tener en cuenta un largo de 7-10 cm por
ternera
Los corrales contaran con iluminación artificial mínima que facilite el trabajo en horas en las que no hay
iluminación natural. . Existen trabajos en los cuales fue testeada la iluminación de corrales bajo
diferentes longitudes de onda. Los resultados muestran que existió influencia negativa en la eficiencia
de alimentación de terneros. Deberán realizarse otros ensayos que evalúen dicha influencia en
terneras de reemplazo.

En sistemas de alojamiento grupal deberá tenerse en cuenta la posibilidad de observar con comodidad
a cada animal dentro del grupo, para identificar rápidamente aquellas terneras débiles o enfermas y
permitir su rápida separación y aislamiento para minimizar la posible propagación de enfermedades.

Si bien el alimento liquido será suministrado en baldes individuales, el agua y los alimentos sólidos son
en general suministrados en forma grupal. De aquí la importancia de trabajar con grupos que sean
pequeños y homogéneos para lograr mayor control y evitar competencia entre terneras de diferentes
edades y tamaños.

Otro de los factores de importancia es la condición climática existente. En este aspecto deberá
señalarse la importancia de la orientación de los corrales en referencia a la ventilación del corral. La
buena ubicación del mismo podrá asegurar ventilación natural sin corrientes de aire excesivas que
puedan provocar el aumento en la incidencia de enfermedades respiratorias.

Otro de los factores climáticos a tener en cuenta son los efectos en el crecimiento de las terneras a
causa de estrés calórico o por bajas temperaturas.

Una alternativa al alojamiento individual de los terneros

Alojamiento NO individual

El alojamiento de terneros en grupos también puede tener una serie de ventajas en la crianza. En
primer lugar, realizado en buenas condiciones, contribuye a transmitir una imagen positiva de la
crianza de los terneros. Algunos criadores ven la cría de terneros en grupos como una forma de
racionalizar y optimizar el tiempo dedicado al cuidado de los terneros. Criar terneros en grupos
también permite obtener efectos beneficiosos sobre el bienestar (mental, emocional) y las capacidades
de aprendizaje de los terneros, lo que les permite desarrollar una mejor adaptabilidad a los contextos
ambientales que encontrarán, significativamente menos estrés y potencialmente un mejor crecimiento,
durante períodos sensibles como el destete.

La compañía mutua es importante para los terneros porque son animales sociales. En parejas y en
grupos, los terneros aprenden a jugar con los otros terneros, tanto literal como figurativamente. En el
sentido literal, los terneros juegan más cuando se alojan con otros debido al contacto social y mayor
espacio disponible. En sentido figurado, el contacto social temprano ayuda a los terneros a aprender a
interactuar adecuadamente entre sí y mejora su capacidad de aprendizaje. Los terneros criados con
otros también muestran una mayor adaptabilidad al cambio. Están más dispuestos a probar nuevos
alimentos como pienso, heno y TMR. Esto se traduce en una mayor resiliencia al estrés y menos
bramidos durante el destete. Cuando se mueven a grupos más grandes después del destete, los
terneros previamente alojados en parejas o grupos comienzan a comer antes y no muestran la caída
del crecimiento que se observa a menudo en los terneros criados individualmente.

Alojamiento de terneros en parejas

consiste en agrupar 2 terneros tan pronto como se separan de la madre (generalmente dentro de las
12 a 24 horas posteriores al nacimiento) en un corral de, al menos, 1,5 m²/ternero

A priori, criar terneros en parejas es un compromiso interesante que permite un seguimiento más
sencillo de los terneros y un riesgo limitado de transmisión de patógenos en comparación con grupos
más grandes. Además, los riesgos para la salud potencialmente inducidos por el apareamiento de
terneros pueden controlarse adaptando las prácticas de alimentación y salud, como veremos
posteriormente. La enfermedad de los terneros generalmente es causada por una combinación de
factores, no solo por el tipo de alojamiento. La crianza de terneros sanos en parejas o grupos se puede
lograr perfectamente cuando se maneja bien.

Fuente.- https://www.todolecheria.com.ar
Recepción de terneros: clave en la crianza

Contenidos técnicos para el desarrollo de una crianza exitosa.

Dar las mejores condiciones posibles para la recepción del ternero al nacimiento es una de las claves
de la crianza. Y este es un tema donde se conjugan el bienestar animal con un manejo de detalles,
que comienzan en el preparto.

En este inicio de temporada de partos de otoño, desde el área de Producción de Leche del Consorcio
Lechero, te ponemos a disposición los contenidos técnicos que hemos desarrollado para que la
crianza sea exitosa.

Los objetivos son criar terneros saludables y obtener buenas ganancias de peso, en el cual el principal
es obtener un buen peso a edad de destete determinada. Para lograrlo, es clave trabajar en
prevención de enfermedades, que permitirá ahorrar esfuerzos y dinero en el logro del objetivo. La
prevención de enfermedades comienza al momento del parto. El primer paso es la recepción del
ternero, explica la médico veterinario de Cooprinsem y miembro del Comité de Bienestar Animal del
Consorcio Lechero, Paulina Campos.
Alojamiento individual

La principal ventaja de estos sistemas es evitar el contagio de enfermedades que existe en sistemas
grupales debido al contacto entre animales enfermos y sanos. Este sistema permite, además, dar
seguimiento individual a cada ternera en referencia a su desarrollo corporal, seguimiento del consumo.

En sistemas de alojamiento individual como las casetas, jaulas,se deberá tener en cuenta los altos
requerimientos en mano de obra exigidos que se expresan en la mayor frecuencia de tratamiento de
las camas, utensilios de comida y bebida dentro de cada caseta, deberá también, evaluarse su uso y
posible problemática en condiciones de extrema temperatura, vientos fuertes o lugares de alta
humedad. Durante los inviernos, por ejemplo, deberán elegirse sitios los cuales permitan el soleado y
rápido secado de las camas, mientras que durante los veranos es de importancia ubicar la caseta
individual en lugares sombreados o aquellos que permitan la colocación de mallas que proporcionen
sombras para la protección de las terneras y los trabajadores.

El diseño del alojamiento individual, deberá permitir buena ventilación, sombra y permitir el secado
rápido de la cama. La ubicación del alojamiento deberá ser en lugares con correcta pendiente que
permitan el flujo de los líquidos y su recolección. Es recomendable tener en cuenta el tipo de material
de relleno, y aptitudes que deberán asegurar buena absorción y filtrado, proporcionar aislamiento bajo
condiciones de estrés climático y no menos importante, proporcionar condiciones de bienestar a la
ternera durante todas las horas del día. El productor deberá evaluar cada uno de los materiales a su
disposición teniendo en cuenta también, la facilidad de manejo dentro de las casetas y sus costos.
En climas cálidos el material con el cual está construido el alojamiento deberá reflejar la luz de manera
que se evite el sobrecalentamiento de la cucheta, caseta, etc. Mientras que en el invierno deberá ser
un material que suministre aislamiento del frio y mantenga el calor en su interior. La construcción con
madera o materiales similares puede representar en muchas regiones un material de bajos costos y
sencillo de trabajar. La desventaja en el uso de madera se presenta en el momento de la limpieza y
desinfección del alojamiento.

En climas fríos el alojamiento deberá permitir la protección de la ternera de vientos directos, el material
deberá permitir también, el mantenimiento de la temperatura, protección del agua de bebida para que
no se congele (que pueda ser calentada) y el fácil acceso que permita fácilmente el agregado de
comida como medio para combatir el estrés por frio.

Todos los diseños deberán tener en cuenta el agregado de un “patio o corral" externo con sombra que
facilite a la ternera mayor movimiento. Mediciones realizadas en lugares cálidos demostraron una
mejor ventilación con temperaturas menores fuera que dentro de la caseta/cucheta.

Algunas ventajas

- Higiene. Facilidad de acceso al lugar para mantener el lugar limpio y desinfectado cuando esto
se necesite.
- Seco y ventilado. Facilidad de eliminación de los excesos de humedad y libre ventilación
- Protección de fenómenos climáticos extremos como altas o bajas temperaturas, vientos fuertes,
lluvias, exposición directa al sol, etc.

La desventaja de este agregado es el mayor espacio requerido, la necesidad de más trabajo que se
requerirá para el reemplazo de la cama que se genera por la mayor exposición de la misma a la
intemperie (en el patio externo), sobre todo en condiciones climáticas extremas.

Las instalaciones individuales deberán diseñarse teniendo en cuenta el fácil acceso de las terneras al
agua y los alimentos, el fácil acceso del encargado para tratamiento de la cría, limpiar los utensilios
usados para el suministro de los alimentos y para el recambio del material de la cama dentro de la
instalación y en su patio externo.

Una vez deslechadas las terneras, las cuchetas, jaulas, etc., deberán ser de fácil limpieza y traslado.
El lavado se podrá realizar por intermedio de agua a presión y jabón. Se recomienda desinfectar las
mismas como así también el lugar en donde fueron ubicadas por intermedio de la dispersión de cal
viva y la exposición a la luz solar. Con la finalización del uso, es conveniente rotar la ubicación de las
cuchetas, jaulas, etc. para reducir posibles riesgos de contaminación.

La mayor ventaja que los sistemas de alojamiento individual presentan es la posibilidad del
seguimiento y control de cada ternera en referencia a su consumo, desarrollo y la posibilidad sencilla
de aislamiento en caso de enfermedades y su tratamiento, evitándose el contacto con otras terneras.

Alternativas para sistemas de alojamiento individual

Jaulas: Existen diferentes variantes en el diseño de las estructuras para el alojamiento individual de las
terneras.

Uno de los más populares son las conocidas como jaulas. Las jaulas son estructuras (marcos)
construidos de diferentes materiales colocados en placas enteras o en listones que pueden ser
depositadas sobre material de cama, relleno o directamente sobre el suelo o pasto. Se podrán ubicar
al aire libre (acorde al clima de la zona) con techo para la protección de la radiación solar directa y
paredes cerradas para la protección de las corrientes.

Las jaulas podrán ser ubicadas dentro de construcciones. Básicamente el ingreso de las jaulas al
interior de construcciones suministrara protección de las incidencias climáticas y paralelamente hace
las cuestiones de ventilación y drenaje criticas como lo son en alojamientos grupales. En muchos
casos los animales son alojados en jaulas elevadas del suelo (elevación mínima de 25 cm) con piso
enrejado que permitirá la fácil limpieza de las heces y orina, además de facilitar la ventilación de cada
animal en la jaula. En general las jaulas son ubicadas en líneas con distancias entre jaulas (evitar todo
tipo de contacto entre terneras) acorde al material utilizado y la necesidad que se genera en cuanto a
ventilación, limpieza, etc.
Deberá tenerse en cuenta que cada jaula posea sus utensilios para el suministro de alimentos líquidos
y sólidos, agua y en el caso de suministrarse forrajes se deberá asegurar espacio suficiente para ello.

En el caso que las jaulas no estén elevadas se podrá considerar el uso de camas con materiales
absorbentes y capacidad de aislamiento de calor o frio (de igual manera que en alojamientos
grupales). Cabe señalar que existe diferentes materiales de relleno. Su elección dependerá de las
aptitudes, precios y facilidad de manejo.

En cuanto a las características de las construcciones, variaran acorde al clima de la zona y en general
la tendencia es utilizar construcciones existentes y no la construcción de nuevas estructuras. Puede
evaluarse el uso de arcos de hierro galvanizado con plásticos (invernaderos) sobre todo en lugares
fríos en los cuales se usan cuchetas, casetas, jaulas, etc. y que durante los inviernos deben ser
protegidos de las bajas temperaturas, vientos fríos, lluvias, nieve, etc.

Construcciones de servicio

Independientemente del tipo de alojamiento de cada finca, existen diferentes construcciones que darán
servicio al proceso de cría

1. Sala de limpieza de utensilios y cocina.

Cuarto en el cual deberá existir una pileta de tamaño tal que permite el lavado de baldes,
biberones, etc. con acceso a agua caliente (calefón u otro sistema de calentamiento de agua y un
buen sistema de desagüe (canaletas o caños) que puedan conducir las aguas negras a piletas de
recolección para su posterior tratamiento. Esta sala deberá tener también un lugar que permita el
secado de los utensilios. En esta sala deberá existir un dispositivo que permita el preparado de
lacto reemplazantes (mezcla con agua a la temperatura relevante) y una balanza para el peso del
material previo a su mezcla con agua.

2. Banco de calostro.
El lugar deberá contar con acceso a electricidad que permita el funcionamiento de un
refrigerador y congelador (frezeer) que permita el almacenamiento de calostro por lapsos que
van de 3 días a un año aproximadamente. Deberá existir una mesa que permita el trabajo con
las raciones de calostro a descongelar (baño María-55 °C). Las normas existentes en Israel
exigen que el almacenamiento de calostro sea solo de calostro pasteurizado para evitar posible
transferencia de enfermedades por su intermedio.
3. Deposito.

En el caso de fincas que suministren lacto reemplazantes deberán contar con un lugar para el
almacenamiento del mismo que proteja a las bolsas de humedad, radiación solar directa, roedores,
etc. Es conveniente que exista también en el lugar una balanza en la medida que se deba pesar el
lacto reemplazante. La preparación del mismo se recomienda realizar en la cocina.

4. Enfermería.
En la medida que sea posible, deberá seleccionarse un área que permita el aislamiento y
tratamiento de las terneras enfermas. El lugar deberá contar con un espacio cerrado con llave
que permita el almacenamiento de medicinas, vacunas (si requieren su almacenamiento en frio,
podrá usarse uso de refrigerador que se encuentra en el banco de calostro), material de
desinfección, pomadas para el descorne, utensilios, etc.

5. Guardería (nursery).
Existen establecimiento en los cuales las terneras recién nacidas (0-7 días), son separadas y
alojadas en una guardería durante el periodo calostral. En general se usan alojamiento tipo
jaulas elevadas que permiten el tratamiento individual durante la primera semana de vida para
luego ser trasladadas a otro tipo de alojamiento. El objetivo es poder asegurarse el tratamiento
efectivo de actividades como son calostrado y desinfección umbilical.

- https://ganaderiasos.com/fundamentos-sobre-alojamientos-para-terneros/
#:~:text=Existen%20muchas%20formas%20de%20alojamiento,la%20mayor%C3%ADa
%20de%20las%20granjas.

- https://oa.upm.es/34292/1/INVE_MEM_2000_186670.pdf

- https://www.engormix.com/lecheria/cria-terneras-reemplazo/alojamiento-
terneras_a43564/

FUNDAMENTOS SOBRE ALOJAMIENTOS PARA TERNEROS

Existen muchas formas de alojamiento para terneros lecheros – cobertizos, jaulas, hatos o partidas,
pastizales, o becerros amarrados a un poste. Existen casi tantas formas de alojamiento para terneros
como hay granjas. Los alojamientos para terneros son únicos para la mayoría de las granjas.

Dr. Jim Quigley

de las características únicas de cada granja, incluyendo topografía, disponibilidad de terreno, edificios
o construcciones en la granja, número de vacas y terneros, agua disponible, praderas, etc.
Los alojamientos para terneros son también dinámicos. Es necesario ir adaptandolos con los cambios
en el tamaño de la manada, la programación de los terneros, la programación del destete, etc.De
acuerdo con

Sin importar la forma en que son alojados los terneros, existen cuatro elementos fundamentales que
son necesarios para el éxito de cualquier sistema de alojamiento de terneros. Estos son:

• Ventilación • Aislamiento • Comodidad • Economía

Ventilación es esencial para reducir la transmisión de patógenos de ternero a ternero. Ventilación


adecuada también elimina olores nocivos – los cuales pueden dañar directamente al ternero o
aumentar el estrés y con esto disminuir la resistencia del animal a enfermedades. Ventilación significa
movimiento de aire – ya sea de forma natural por medio de ventanas, puertas y ventilas (como en los
encamados para terneros) o artificial por medio de ventiladores, intercambiadores de calor, y otras
formas similares.

Ventilación adecuada significa que el aire adentro de las instalaciones para terneros es similar al aire
del exterior. Las nececidades de cada sistema individual de alojamiento dependen de cada estación
del año, temperatura, humedad, número de terneros, cantidad de aire en el área, etc. Una «regla de
pulgar» que yo utilizo para esto es: si puedo oler amonia en mi ropa después de abandonar el establo,
es muy probable que la ventilación en el mismo es inadecuada.

Aislamiento significa que los terneros estaran separados fisicamente uno de otro. Este concepto
fundamental asume que los terneros no deben de tener contacto físico con otro animal. Esto es
importante. Los terneros nacen con sus sistemas inmunológicos inmaduros. Se encuentran
especialmente en riesgo cuando no consumen suficiente calostro. Muchas de las enfermedades que
sufren los terneros son causadas por patógenos entericos que infectan a los terneros vía materia fecal-
oral o contacto animal-animal. Naturalmente, si los terneros tienen contacto directo con otros terneros
(o animales adultos), el riesgo de transmisión se incrementa.

https://ganaderiasos.com/fundamentos-sobre-alojamientos-para-terneros/#:~:text=Existen%20muchas
%20formas%20de%20alojamiento,la%20mayor%C3%ADa%20de%20las%20granjas

MANEJO Y ALOJAMIENTO DE TERNEROS


Son numerosos los factores que contribuyen al bienestar de los animales de reposición de las granjas
de vacuno de leche. Podríamos citar el aloja- miento y el ambiente en el que viven, los programas
sanitarios y alimenticios, su manejo y su interacción con la mano de obra, o prácticas habituales como
el transporte, el descornado o la eliminación de pe- zones supernumerarios.

Asegurar y evaluar dicho bienestar es una cuestión compleja, sobre todo porque la terminología y los
factores que contribuyen a esta valoración del bienestar animal no han sido claramente definidos.

Tengamos en cuenta que el bienestar es un estado dinámico, no estático, puesto que procesos

fisiológicos como la edad, las respuestas hormonal e inmune, el crecimiento o el estrés exhiben
fluctuaciones de frecuencia diversa.
También están en constante variación los factores ambientales (temperatura y humedad), la
alimentación o las interacciones sociales y conductuales con los otros animales del rebaño o con el
personal que les atiende.

Se han propuesto diversos métodos e indicadores para evaluar el bienestar que incluyen parámetros
patológicos, fisiológicos, productivos y conductuales, incluyendo la valoración del sufrimiento o del
dolor.

El conocimiento del comportamiento habitual del ternero ayuda a evaluar su bienestar bajo siste- mas
comerciales de explotación. Este comportamiento incluye conductas básicas como descansar,
levantarse, comer, beber, rumiar, andar y jugar. La duración y frecuencia de estas conductas varían
con la edad y están determinadas por factores como el tipo de suelo, la calidad de la cama o la
superficie disponible.

Quizá sean los terneros el grupo de animales de una explotación bovina al que se le ha prestado una
menor atención; quizá por tratarse de una fase improductiva, en el sentido monetario del término. Los
datos recogidos en muchísimas granjas nos dicen que se mueren demasiados terneros, con las
pérdidas económicas que ello supone.

Una de las principales razones de los altos índices de mortalidad (aunque no la única) es el
inadecuado alojamiento en el que se coloca a los terneros durante esta fase crítica que son sus 2-3
primeros meses de vida. Frecuentemente, tampoco el manejo que reciben durante las primeras
semanas parece ser el más adecuado.

La cría de terneros antes del destete constituye, pues, una de las tareas más complejas para las ga-
naderías de vacuno de leche, pues estos jóvenes animales son muy vulnerables a las enfermedades.
Los aspectos que inciden en el bienestar de los terneros y, por consiguiente , en los resultados
productivos de éstos, son muy diversos, y los iremos exponiendo a lo largo del presente trabajo.

2. Manejo del ternero hasta el destete

En la mayoría de las explotaciones el ternero es separado de la vaca en las primeras 24 horas de vida
y, posteriormente, alimentado con leche o lacto reemplazante en cubo o mediante botella (o cubo con
tetina), habitualmente dos veces al día

Cuando los animales toman la leche de cubos abiertos (es decir, beben, no “maman” de una te- tina)
terminan en apenas un par de minutos, empezando posteriormente a lamer y succionar lo que
encuentran a su alcance: diferentes partes del cuerpo de otro ternero cercano (ombligo1, prepucio,
pezones, orejas, …) o el propio cubo o diversas partes del corral o jaula donde esté ubicado. Esta
conducta es intensa durante los primeros seis minu- tos, desapareciendo casi completamente
transcurrido un cuarto de hora.

También es problemática la conducta de suc- cionar los pequeños pezones de las terneras por parte
de otras. Algunos ganaderos han observado secreción de leche en estas pequeñas terneras como
respuesta a una intensa succión. Asimismo, si son alimentadas con leche procedente de vacas con
matitis, y estas terneras succionan los pezones de otras, existe el riesgo de que las bacterias
causantes de la matitis puedan quedar retenidas en los pezones y en la ubre hasta el día en que

dichas terneras empiecen a producir leche.

2.1. Ingestión de calostro

La ingestión temprana de calostro de alta calidad tras el nacimiento se ha demostrado como el factor
más importante de protección del ternero. Éste nace con un sistema inmune incompleto por la falta de
anticuerpos en sangre. Esto es debido a que la placenta bovina no permite el paso de moléculas
grandes como son las inmunoglobulinas. El primer calostro debe ser ingerido entre los 30 minutos y las
8 horas tras el parto, debido a que:

 Tras el nacimiento, la absorción intestinal de estas macromoléculas sólo es posible durante los
primeros días de vida, capacidad que va disminuyendo a lo largo de esos días hasta anularse
completamente.

 También el nivel de inmunoglobulinas en el calostro disminuye rápidamente: a las 16 horas,


sólo contiene el 60% de la concentración inicial.

 Debe desarrollarse completamente el sistema inmune antes de que los microorganismos


patógenos puedan establecerse en el ternero. La presión de infección es muy alta en las
explotaciones intensivas.

https://ganaderiasos.com/manejo-alojamiento-terneros/
ALOJAMIENTO DE TERNERAS Y DE RECRIA

Asegurar y evaluar dicho bienestar es una cuestión compleja, sobre todo porque la terminología y los
factores que contribuyen a esta valoración del bienestar animal no han sido claramente definidos.
Tengamos en cuenta que el bienestar es un estado dinámico, no estático, puesto que procesos
fisiológicos como la edad, las respuestas hormonal e inmune, el crecimiento o el estrés exhiben
fluctuaciones de frecuencia diversa. También están en constante variación los factores ambientales
(tem- peratura y humedad), la alimentación o las interacciones sociales y conductuales con los otros
animales del rebaño o con el personal que les atiende. En el pasado número de Frisona Española (no
235) abordábamos los alojamientos de los terneros lactantes, y en el número anterior (no 234) lo
hicimos sobre el suministro de calostro a los terneros recién nacidos. En ambos trabajos resaltábamos
la importancia de un adecuado manejo y alojamiento de estos animales, entre 0 y 2 meses de edad,
para un adecuado crecimiento posterior.

Igualmente importante es que el crecimiento de estas terneras se produzca a un ritmo adecuado para
que puedan ser cubiertas a los 15-16 meses y puedan tener el primer parto, por tanto, al cumplir dos
años de vida. El alojamiento de las novillas de reposición debe aportar su parte en la consecución de
este objetivo, proporcionando al animal unas correctas condiciones de vida: buenas condiciones
ambientales, lugar de descanso confortable, agua, alimento. En suma, bienestar.

Alojamiento de los animales de reposición

Las terneras y las novillas en crecimiento deben disponer de un ambiente que les aporte el adecuado
confort térmico, físico, “psicológico” y conductual. No satisfacer alguna de estas necesidades supone
una fuente de estrés y la consiguiente pre- disposición a comprometer el sistema inmune, el ritmo de
crecimiento, la resistencia a la enfermedad y, en definitiva, el bienestar.

Por lo que respecta al confort térmico, en otros trabajos (Frisona Española no 196) ya se pusieron de
manifiesto las necesidades ambientales del ganado vacuno, por lo que no se va a insistir más en estas
cuestiones, salvo aquello que sea preciso destacar por su especificidad en estos animales más
jóvenes.

En efecto, el estrés térmico, sobre todo por frío, afecta mucho más a los animales jóvenes que a los
adultos, así como a los animales enfermos o lesionados más que a los que están sanos. Por ello se
debe extremar el cuidado en el manejo ambiental de los alojamientos de los animales de reposición,
sobre todo el de los más jóvenes. Debe tenerse en cuenta que la superficie corporal por unidad de
peso es mucho mayor en las terneras y novillas que en las vacas adultas, por lo que la pérdida o la
ganancia de calor es más elevada.

Las necesidades fisiológicas y conductuales en un determinado ambiente incluyen la ausencia de


frustración, la sensación de seguridad y la ausencia de elementos que puedan causar lesiones, así
como adecuadas interacciones sociales con el resto de los animales y con la mano de obra.

El confort físico incluye la disponibilidad de espacio, la calidad de este espacio, así como de las
superficies con las que entra en contacto el animal, principalmente el suelo. Este espacio disponible
debe ser suficiente para permitir a la ternera un comportamiento normal: comer, beber, descansar,
defecar y los movimientos y ejercicios habituales según su edad

Condiciones generales de los alojamientos

Del mismo modo que las vacas adultas, los animales de reposición (terneras y novillas) necesitan ver
satisfechas sus necesidades desde el primer día de vida. Deben crecer de forma saludable, vigorosa y
estar listas para tener su primer parto en torno a los dos años de vida. Además, los animales criados
en buenas condiciones (alimentación, sanidad, manejo, ambiente, etc.) soportan mejor las situaciones
de estrés que aquéllos cuyas condiciones de crianza no han sido las ideales. El tipo y calidad del
alojamiento afecta a todas estas variables de forma directa o indirecta.
El objetivo es diseñar un alojamiento teniendo en mente su efecto sobre la salud del animal, el coste
de alimentación, la necesidad de mano de obra y el impacto sobre el medio ambiente.
No obstante, no debemos perder nunca de vista la vertiente económica de la actividad ganadera. Por
ello, si la mejor solución no es la más rentable, ya deja de ser la mejor. En otras palabras, el coste de
implementar el bienestar del animal debe ser supe- rado por el beneficio conseguido por una mayor
productividad y rendimiento.

Con independencia del tipo de alojamiento que se adopte, hay una serie de condiciones que debemos
tener siempre presentes en su elección. Así, debemos recordar que las instalaciones deben
proporcionar:

1. Protección contra temperaturas y otros agentes climáticos extremos.

2. Medio ambiente libre de estrés: seco, ausencia de corrientes de aire, con suficiente espacio
vital (descanso, ejercicio, alimentación), limpio y aire fresco.

3. Fácil acceso a agua limpia y alimento fresco.

4. Buenas condiciones sanitarias e higiénicas.

5. Facilidades para agrupar a los animales por tamaño o edad.

6. Facilidad para el manejo y separación de animales.

Opciones de alojamiento para terneras y novillas

Elegir el sistema de alojamiento más adecuado casi nunca es fácil debido a que no siempre se conoce
cómo afectará al crecimiento, a la salud y a la productividad del animal.

Puesto que los animales de reposición tienen edades que varían desde recién nacidos hasta novillas
próximas al parto, es evidente la necesidad de establecer grupos o lotes de edades que permitan
manejarlos de forma homogénea en función de las necesidades comunes y generales de cada grupo,
sin perder de vista la necesaria atención individual que cada individuo puede requerir en algún
momento de su vida.

Aunque pueden variar ligeramente según el modelo de producción, de forma habitual se consideran
tres grandes grupos de animales de reposición:

¿Cuánto espacio necesita un ternero?


4 "En caso de terneros criados en grupos, el espacio libre de que disponga cada animal deberá ser
igual, por lo menos, a 1,5 m2 por ternero de peso vivo inferior a 150 kg, de 1,7 m2 por ternero de peso
vivo entre 150 y 220 kg y, de 1,8 m2 por ternero de peso vivo superior a 220 kg".

https://infortambo.cl/es/contenidos/recepcion-de-terneros-clave-en-la-crianza
Ingestión del calostro

La ingestión temprana de calostro de alta calidad tras el nacimiento se ha demostrado como el factor
más importante de protección del ternero. falta de anticuerpos en sangre. Esto es debido a que la
placenta bovina no permite el paso de moléculas grandes como son las inmunoglobulinas. El primer
calostro debe ser ingerido entre los 30 minutos y las 8 horas tras el parto, debido a que:

• Tras el nacimiento, la absorción intestinal de estas macromoléculas sólo es posible durante los
primeros días de vida, capacidad que va disminuyendo a lo largo de esos días hasta anularse
completamente.

• También el nivel de inmunoglobulinas en el calostro disminuye rápidamente: a las 16 horas, sólo


contiene el 60% de la concentración inicial.

• Debe desarrollarse completamente el sistema inmune antes de que los microorganismos patógenos
puedan establecerse en el ternero. La presión de infección es muy alta en las explotaciones intensiva.

Separación de a madre

habitualmente el ternero es separado de la madre en las primeras horas tras su nacimiento. Esta
separación temprana permite un mejor control de la ingestión de calostro y de leche y de alimentos
sólidos, además de provocar un reducido estrés a ambos animales

alimentación lácteo

puede deducirse que quizá la razón fundamental del mayor crecimiento de los terneros mantenidos
con la madre es que consumen una mayor cantidad de leche y a lo largo de todo el día, frente al
suministro de leche (10 % de su peso corporal) repartido en dos tomas diarias que se hace de forma
convencional.
Manejo y alojamientosde terneros

conveniente que los terneros permanezcan inmovilizados en la cornadiza durante 10-15 minutos tras la
toma de la leche, pues el reflejo de succión lo mantienen durante ese período de tiempo. La tetina
incrementa el tiempo de alimentación, especialmente si el orificio de salida es pequeño y permite un
bajo flujo de leche. Ello hace que los terneros tarden unos 45 minutos diarios en comer, frente a sólo
unos pocos cuando lo hacen desde un cubo. Desde el punto de vista del bienestar, la alimentación con
tetina presenta importantes ventajas frente a la alimentación con cubo, ya que el ternero puede
satisfacer su conducta natural de mamar.

Otras ventajas de la tetina son:

• Cuando el ternero mama aumenta la liberación de hormonas como la insulina, que favorece la
síntesis de proteína y de grasa, y como la colecistoquinina, que participa en la digestión, en especial
de las grasas.

• Reduce la incidencia de diarreas debido, entre otros factores, a que el hecho de mamar estimula el
cierre de la “gotera esofágica”, por lo que la leche va directamente al abomaso, evitando que llegue al
rumen y provoque fermentaciones anormales que pueden causar diarrea. No obstante, hay que tener
presente que es más laborioso mantener limpias las tetinas.

El hecho incuestionable del aumento del tamaño de las granjas lecheras y, por tanto, la necesidad de
manejar un elevado número de terneros, ha hecho que los ganaderos manifiesten un creciente interés
por la alimentación automática de aquéllos a través de máquinas nodrizasa

limentacion automática

El hecho incuestionable del aumento del tamaño de las granjas lecheras y, por tanto, la necesidad de
manejar un elevado número de terneros, ha hecho que los ganaderos manifiesten un creciente interés
por la alimentación automática de aquéllos a través de máquinas nodrizas
2.4. Destete

Momento del destete.

. Modo de destetar

. Estrés del destete

Descornado y otras operaciones dolorosas

Alojamiento de los terneros

La ternera recién nacida debe disponer de un ambiente que les aporte el adecuado confort térmico,
físico, “psicológico” y conductual. No satisfacer alguna de estas necesidades supone una fuente de
estrés y la consiguiente predisposición a comprometer el sistema inmune, el ritmo de crecimiento, la
resistencia a la enfermedad y, en definitiva, el BIENESTAR

Alojamiento en grupo frente a alojamiento individual

La habitual preferencia por el alojamiento individual de los terneros viene determinada por la idea de
que esto da lugar a una mayor ganancia de peso y una menor incidencia de patologías, además de
reducir problema

Los terneros alojados individualmente muestran una mayor incidencia de esterotipias que los alojados
en grupo. La más común, la de realizar movimientos con la lengua. Recordemos que las esterotipias
se consideran un indicador de falta de bienestar. A pesar de todas las afirmaciones anteriores, el
alojamiento individual durante las primeras semanas de vida es el sistema habitual.

La experiencia dice que es preciso manejar de forma muy exquisita tanto los terneros como su hábitat
para que el alojamiento en grupo a edades tempranas no suponga una fuente importante de
problemas patológicos, sobre todo diarreas y enfermedades respiratorias por transmisión de los
gérmenes entre los animales:

• Ingestión de grandes cantidades de calostro de buena calidad.

• Desinfección de los utensilios.

Opciones de alojamiento para terneras y novillas Elegir el sistema de alojamiento más adecuado casi
nunca es fácil debido a que no siempre se conoce cómo afectará al crecimiento, a la salud y a la
productividad del animal. se consideran tres grandes grupos de animales de reposición6:

• Grupo de recién nacidos: de 0 a 2 meses (10 días post-destete)

• Grupo de transición: de 2 a 6 meses de edad

• Grupo de novillas: de 6 meses hasta 2-3 semanas pre-parto. Dentro de cada uno de estos grupos
pueden hacerse subgrupos agrupando animales por rangos de edad más pequeños, sobre todo en el
grupo de novillas (tabla 1). El número de grupos, el rango y el número de animales en cada uno de
ellos dependerá de:

• El intervalo entre partos, la tasa de concepción


• La tasa de reposición

• Otras pr ácticas de manejo

Alternativas de alojamiento para los terneros de 0 a 2 meses


Casetas individuales en interior El mayor tamaño de las granjas (mayor número de terneros) y las
peores condiciones de trabajo hacen considerar a los ganaderos la posibilidad de colocar a los
terneros en el interior de estructuras cubiertas y más o menos cerradas según la climatología de la
zona (Figuras 18, 19 y 20). Cuando las jaulas se colocan en el interior de un alojamiento cerrado ese
tiene la opción de no utilizar cama de paja y colocarlas elevadas a 25-30 cm sobre el suelo

4 se muestra un esquema acotado. Pueden ser móviles o permanentes y deben diseñarse para
permitir su limpieza con un tractor u otra máquina de pequeño tamaño. Necesitan menor superficie de
terreno que las casetas individuales vistas anteriormente y proporcionan a los operarios protección en
días de lluvia o de vientos fríos. L os corrales están formados por particiones op acas a ambos lados

Guardería (nursery). Existen establecimiento en los cuales las terneras recién nacidas (0-7 días), son
separadas y alojadas en una guardería durante el periodo calostral. En general se usan alojamiento
tipo jaulas elevadas que permiten el tratamiento individual durante la primera semana de vida para
luego ser trasladadas a otro tipo de alojamiento. El objetivo es poder asegurarse el tratamiento efectivo
de actividades como son calostrado y desinfección umbilical

https://www.engormix.com/ganaderia-leche/articulos/alojamiento-ternerast43564.htm

https://www.revistafrisona.com/Portals/0/articulos/n200/Manejo%20terneros.pdf?ver=y0DqV6PbYK-
DjhlVp5AtNQ%3d%3d

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