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Capítulo 3

La psicología como cienciq social

Para rnnchos de sus críticos, la psicología es Lrna ciencia "antisocial",


que se enfoc¿r en l¿rs propiedades de inclividuos abstr¿ídos de l¿rs re-
laciones sociales, que reduce las problemátic¿s sociales a problemír-
ticas interpersc»¿les, t,que está ¿rl senicio de una sociecl¿rd desigual.
Aunque hav rluchos trspectos r-aliosos en estas críticas, si urirauros el
reverso de esta perspectivtr \'\.enlos a la psicologí¿r cor.no una ciencia
profundamelnte social.la subdisciplina de la "psicología social" podría
situarse en un¿l red lnás arnplia de relaciones que conectaría inclu-
so los aspectos más "individuahstas" de ltr psicologí¿r con el carnpo
cle lo social. Por ur-l lado, no es sólo que la verdad se¿ un fenórneno
constitutivar.nente social: como cualquier otro cueryo de saber que
refiere sus ¿rrgurnentos a la cornunidad científica, las verdades de l¿r
psicología se r,uelven tales sólo corno resultado de un complejo pro-
ceso de construcción y persuasión ernprendido en la aren¿r social. Por
otro lado, el nacimiento de l¿r psicologítr conlo una disciplina que se
clistingue de otras en cuanto a su vocación y su destino, está inextric¿r-
blernente ligado a la emergencia de lo "social" como un territorio de
ruuestro pensarniento y de nuestra realidad.

Gobernanclo la ukla social

No cabe duda que los hurnanos son animales sociales, pero el territo-
rio social es un logro liistórico, un terreno cambiante e incierto que
cornenzó a consolidarse en las sociedades occidentales durante el si-
qlo XIX (cf. Donzelot, 1979). Es el terreno irnplicado en términos

Capítulo 3. La psicología corno ciencia soci¿l - 131


t¿rles conro sc.guridacl soci¿l, bienestar social, trabajtrclores soci¿tles r' Este canrpo get
serwicios sociales. Lo soci¿tl es unA n¿rtdz de deliberaciól v ¿rcciórt, forma en la Enropir
el objeto cle ciertos tipos cle saberes, el Iugar cle ciertos tipos de llre- cipes v gobentantes
clic¿unentos, el ciutrpo deline¿clo por cierttts de dispositivos v
cl¿tses del poder del Estaclo
el bl¿rnco de ciert¿ts cl¿tses tle progr¿rrr¿rs r'¿unbiciones. La psicología ción de ejércitos r el
r:omo cliscipli¡¿1 ensautblaie heterogéneo cle problent¿rs, trté- ción de le-ves v clecre
-¡¡1
todos, abordajes v olrjetos- en este tloruinio de lo social ert
rt¿rcit'r ¿rargumentnrr" ,r,," ,

el siglo XIX, v sr-rs srtbsecuelttes ücisitucles son irtseparables de é1. ser el objeto por e\c.
Corno rnodo de corocer, h¿rblar y ctrlctrlar, la psicología ha jugatlo rrn Estado llegó a asociar
rol constitutivo en la fbnn¿rción cle lo soci¿rl. A nreclicla qtte el aLttrt las persorras. Ios lrierr
hunr¿ura se conrirtió en objeto cle tut¿r cienci¿r p«lsitiva, la sulletividad del poder político llt
v ltr intersubjetiviclacl ie conviftierorl en bl¿utc<ts dc' gobierno. procedirrriertos cle r..i
El gobierno, en el senticlcl utilizado rrtlttí, rto es lur¿l cttestiótt rin- dían clesarroll¿tr l r rétrr
culacl¿r a las n'rinuci¿rs cle la intriga política o ¿r l¿rs cornplejas rel¿rciones ciones, no sólo p¿r¿1 e'
entre políticos, funcionarios, lrurírcrtrtas, gntpos de presión t' ¿tfines, En el sislo \\'l I
ni ttunpoco clebe ser enterrdido en ténninos de "el Estatkt", coltto Lllt¿l c,iade la polir.ía" S
enticl¿d outnipotente v oluniscielt'e r¡re extientle srr control clescle el 1982), y las tres «lirrrt
centro h¿rci¿r todo el cuerpo social. Utilizo el tenuirtcl parrr referirnte interior del crral la tli
a aquello que Foucilult cletrominó "gubematltent¿lidacl": "c'l coltjrtn- ob¡etivos de la p,,lir.í,
to constituiclo por las institucioues, los proceclirnientos, ¿urítlisis v re- üolaciones a l¿r ler' .
flexioues, los cálculos v las thcticas que penniten cjercer est¿r fbntt¿t el aurnento de los lb¡
ttrn específica, tan conrpleja, de poder, rlue tieue colt-to rttet¿t pr"inciptrl como el aurnentr¡ cle I

la población" (Fotrc¿ult, 19794: 20). indiüduos. Esto ararr


La gubernanrent¿rliclad es urlA cornbinacitin de rzciormlidadcs rnientos para la recolt
¡tolíticas v tccnLtlogía,s ltttttmnus. Un¿t ftrntra de interpret¿r los rlledios benlando, de tc¡r[irs 1.,
v fines ¿rdecu¿tdos de l¿r ¿urtoridad política: ltts «rltjetos a los rlue tlelle de Ia poblacirin del ter
clirigirse l¿r dornin¿rcirin, el ¿rlc¿rnce cle la ¿rrtoridacl política, los Irré- de técnicas para la ac

toclos legítinos (¡le puecle utiliz¿rr. Es t¿unbién tuta fbnna cle busc¿rr regulaciones pare golr
operacionalizal t¿tles arubiciones, cle cliseñar técltir:¿ts v de constrttir ridad de l¿rs persorj¿rs (

¿rpar¿ttos par¿r actuar sobre I'conclttctas cle los sujetos, parir


l¿rs r,'idas Las tres clirtrensit
así nroldearkrs de las fbnn¿ts dese¿rdas (Fotrcault. 1979a, 1979b, l981; forrna que touraía la I

Miller & Rose, 1990; Rose & Millet: 1992). La policía intplica sier

l:12 - La ürvención del sí mismo


'sy Este cturpo general cle la gubem¿unelrt¿rlid¿cl conrenzó ¿ tomar
ón, forrn¿r en Ia Europa del siglo XVIII. Preri¿unente, el trabajo cle pín-
)re- cipes v gobernnntes había estaclo lilnit¿rdo ¿r I¿r nrantención r'¿lunrento
)sy del pocler clel Estaclo nrecliante Ia ¿rcurnul¿rción cle lrr rirlueztr. la fonn¿r-
rgía ción de ejércitos v el ejercicio cle l¿r sober¿uría ¿r trar'és cle la promulga-
ruré- ción cle leves r.'rlecretos. Sin embtrrgo. clurante este peíoclo. comenzó
Ien a arqrrnrent¿rrse que la poblacirin, rnírs r¡re un sinrple territrlrio, clebía
, é1. ser el objeto por ercelenci¿r cle l¿r donrinacirin política. L¿ firerz¿r del
) ull Est¿rclo llegó a asoci¿rrse con el lruen orclen r-l¿r correct¿r disposición cle

üura Itrs persontrs, los bienes v las fuerz¿rs dentro clel territorio. El ejercicio
idad clel pocler político llegó a ser risto corno algo que depenclía de los
proceclinrient«rs de círlculo v plzrnificación r¿rcion¿rl cle trr¡rellos que po-
rin- dí¿rn desarroll¿r métodos p¿rr¿r actuar sobre los indir.ichros v las pobla-
orles ciones, no sólo para eritar el rnal, sino t¿urbién pronrover el bien. p¿u'¿r

ines, En el siglo XYIII, est¿i conrbinación distintir.a fue llarnada "cien-


) ulla cia cle Ia policía" (Schun-rpeter, 1954; Prrsquino, 1978; Oestreich,
cle el 1982), v l¿rs tres clinrensiones cle l¿r policía clem¿rrc¿rron el espacio al
inne interior del cu¿il la disciplina de la psicología habría cle n¿rcer. Había
njun- objetivos de la policí¿r que no sólo telrían qlre ver con disnrinuir las
)' re- violaciones a la ley y otro tipo de d¿rños, sino simult¿irteamente col
bnn¿r el ¿runrento cle los fr¡ndos clel Estado t, la dqueza de la poblaciriu, ¿rsí

rcipal corno el aumelto de la tranquilidad priblica -v cle l¿s cu¿lid¿cles de los


indiüduos. Esto avanzó de I¿r m¿uro con l¿ elabor¿ción de procedi-
dades nrientos para la recolección de infonn¿rción ¿rcerc¿r clel reino a ser go-
redios bern¿urclo, cle tocl¿rs Ias capaciclucles t' recLrrsos cornprendiclos clentro
clebe cle la población clel territorio. Aclenrírs, estur.o vincul¿rclo ¿r I¿r invencirin
¡ lné- cle técnic¿rs para lir ¿rdurinistr¿rción cle la pobltición bajo la forma de
)uscar regulaciones p¿rrri goberntrr el buerr orden: educnción, hábitos v segu-
rstruir ridad cle ltrs persontrs en diversos pueblos y regiortes.
r. para L¿rs tres dimensir»res de la policía constituven un ditrgriuntr de la
. I981; forrn¿r r¡re tomaríir Ia qubemarnent¿lliciacl en los clos siglos sigrrientes.
La policía implica siempre fbnr¿rs de penstrr las pobltrciones, fonrrrs

Crrpítulo 13. Lu psicokreía corno cienci¿ social - 133


I
\
de convertirltrs en objetos del discurso I'del c¿ilculo político. P¿u¿r ello. es peftinente: la
reqttiere fbnttas cle conocer a la poblaciórr, institnvenclo un¿r vasta eru- sentido r¡re trtiliz
presit cle investigacirill ¿lcerc¿t de su est¿rckl r.conclicirin, r,exige acletuírs tnettte collo una
l¿r cre¿rciórt cle nrecarrisuros que pennitan. ir at¡rellos (lue se encllen- reflexioltes en tor
tr¿ur en posiciones cle atrtodd¿rcl, ¿ctu¿rr sobre las ricl¿s v conductas 1991; Burchell. tr
tle sujetos. No c¡bst¿ttte, ltts ttspirnciones totaliz¿rdol'as v olnniscientes debía lirnitarse ¿

cle l¿s cloctrin¿rs de la policírr. Iror nruv significrrtivas que Itavan sirlo, autor.lorlrí¿r cle la "
fnex»r clesafi¿xl¿rs por clos clesarrollos correlatiros haci¿ fines clel siglo d¿uro libre". pese
X\¡III. Elr el cr»rterto de la erriergencia de concepciones cle l¿ econo- orden priblico. cle
ntía en los c'scritos cle econonristrrs políticos como Acl¿un Snrith, v rle nesto y próspero c

l¿rs rociones tle la poblacirin couro srrjeta a sus propiirs leves v regultr- berlrar (le rn¿ner¿r
ricl¿cles en los escritos cle ¿utores como Thonr¿s Maltllrs, eluergió url los peligros rle qol
nlle\'o tlorninio en el penstrmiento. Conro señal¿ Fotrcault (1984d: 242): lo suficiente (\Iill
grrurlas de gobierr-
La qtre se clesctrlrriri en lir época firc- uno cle los graudes
-r.
clescubrin'rientos del pensirrniento político cle fines rlel sigk¡
cual l¿rs ciencias ps
XVIII- es l¿ ide¿ rle sociecl¿cl. L¿r iclea, ¿ saber, de <¡re el gobierrro estas cienci¿rs estal
rlebe no sók¡ achnirristr¿r urr territrtrio, ult clontinio. \' ()cup¿l'se deseo de gobenriir
de sus sribditos, sillo t¿nlbién tratar con un¿t re¿rlirlacl conipleja descubrieron (llle.
e independiente. que tiene srrs propias ler,es I niecaltisltros cle
reacción, \'tiurto sus reglaurent¿cir»res colno sus posibiliclrrcles de
El,saber del gtúit
clesorclen. Es¿t nuer'¿r re¿licl¿rd es l¿ sociecl¿rcl. No bien se plturtezr
la rtecesiclacl de nranipular un¿ sociecl¿rcl. no puecle consicler¿rrse El gobierno rk perr
que Ia policía se¿ c¿rp¿rz de perretrtrrla pitr completo. Se tonr¿r que ha siclo ternati,
neces¿rrio reflexionar sobre ella, sr¡bre sus propiirs características,
cipc.s en Ia Antigiier
sus const¿urtes \¡ sus r,¿rri¿rbles.
¿Icerc¿l del cruupri,r
La psicología e.rnerged¿t, en su fbnn¿r uroclenl¿ r' disciplinacl¿r, en el de rnoclo r¡re pueclr
clrrso de tales reflexiones. L¿r :;ocicdod serír aquelkl rlue debe ser co- nostic¿cl¿s v slls re
llocitlo, itqtrello que clebe ser ¿rchtrinistr¿rcl<¡, aquell«r cur'o bienest¿r aspectos signific.atir
clebe ser gar¿urtiz¿rdo por ircciones calcul¿clas, l.ro como un espacio a objeto del gobierno
ser clespritic¿unerrte donrinaclo, sino corrro un doutinio rr ser gober- cacl¿r rrna cle est¿rs cli
nado en rel¿rción con sus propiirs leves, procesos v c¿rr¿tcterísticas. Es Los lengua.ies
aquí r¡re el segundo c¿unbio significatiro clel pensauriento político n¿rcir'»r o legitirrran t

i3.r - L¿r invenci<in dc.l sí misrno


es pertinente: l¿r emergenci¿r del "liber¿rlisnro". EI liberalisnr«r. en el
sentido que utilizo este térnriuo aquí. no clebe ser entendiclo sinrple-
nrente conro un¿I escuel¿r de filosofía política. silro cor.l.ro rur¿r serie rle
refleriorres en t«rnro al gobierno r¡re enfirtizó srrs línrites (cf. Gorrbn,
1991; Burchell, 1991). EI gobiento, en est¿rs fbrnras cle pensrrnriento,
clebía linrit¿Irse a sí nrisn'ro en rel¿rcií¡n ¿r l¿r necesirl¿d de respc.ttrr ltt
¿tutonr¡rrrí¿r cle la "socie,dacl ciril", "l¿t f'anrili¿", "el mercaclo", "el ciuda-
d¿no libre". Pese ¿r ello, el bienest¿rr rle Ia rr¿rción clependítr rlel buerr
or(len pírblico. cle regímenes fiunili¿rres ¿rrlecrrados. cle] c<lnrercio ho-
nesto v pr(lspero cle krs merc¿rclos, r'de cirrcl¿tcl¿uros l'esponsables. (ll-
bern¿rr cle naner¿t liber¿l er¿r intentar reconcili¿rr estos ckrs princil'li«rs:
los peligros de qobenrar denrirsiado, con krs pe.ligros cle no gobelnar
lo suficiente (¡vliller & Rose. 1990: Rose & N,Iiller: 1992). Los pro-
graln¿rs de gobierno liberal cle abrieron rrn esptrcio el.r el
l¿r socied¿rcl
crr¿l l¿rs cienci¿rs 1-rsicokigicas llegaron a jugar rut rol clave, puesto qrre
estas cienci¿rs est¿rb¿ur intríltsecalnente ligaclas a estrategias qlle, en slr
tleseo tle gobern¿l'srrjetos con.ro ciucl¿clanos responsables pero libres.
clescubrieron que, pfinrero. clebí¿ur llegar a cor.rocerlos.

El ,solxr dcl gtbiento


El qobienro tlepencle del saber. No sinrplenrerrte clel saber p«rlítico,
<¡rc ltu sicl«r tenratiz¿rkl en irurrrrner¿bles lillros cle c«ursej«r ptrrrt prírr-
[:: cipes ert la Arrtigiiedad Clírsica l la Edacl \lecli¿r. sino ru.l sirber positirrr
¿rcerc¿r del cantpo a ser qobem¿r(lo. ulr¿ nr¿uler¿r rle r'<llverkl inteligible
L ('I clt' lt.totlo r¡rc' prrctla st'r ¿uraliz¿rrl«r v evalu¿rkr; srrs elrf'errrrerlacles rli¿rg-

. !'( )-
u«rstic¿ulas v slls rellre(lios prescritos. Esta represerrtirci<in tit'ne cl«rs

.t ¡tt'
irspect«rs sigrrificativos: l¿r ¿rticul¿rcirin cle lergurrjes pirra rft:scribir t'l

- r) lt
objeto tlel g<lbierno v l¿t inverrcir'»l cle rlispositiros para irr,scril.rir lr¡. En

I ,,',t- carl¿r un¿ cle est¿s clirrrensiones, lir psicología te.rrclrÍr rur rol cl¿l'e.
_. I..s
Los le'lgu¿ries del gobic'nro rro lristific¿ur simplenrente l¿ douli-

tico naciórr o legitimtur el pocle,r: haceu (¡re nue\'os sectores rle la rcalirl¿rl

Oapítukr ,'i. La ¡rsic«rlogí¿r c<lnr«¡ cienci¿r soci¿rl - 1ll5


I se vueh/¿ul pensal)les t'transit¿bles. Los fines del gobierno srilo pue-
den ser fonnulaclos ¿ trar'és del lenguaje, retrat¿tndo su objeto como
teorías acerca de la pz
y de penstrmiento. El
un carlrpo inteligible con líntites identificables, al interior del cual precedió estas preocr
cieftas c¿rr¿rctelísticas estíur ligaclas entre sí de ntaner¿r sistertrírtica. \h trario. Fue elt trtnto a
se trate de gobernrrr lln¿l econor.ní¿, un¿r socied¿cl, u¡t¿ enrpres¿l, un¿l ción y achnitristr¿rcirin.
f¿unilia o uno nlismu, krs don'rinios en cuestión son realiz¿dos. lleva-
¿r rías ¿rcerca cle l¿ nonr
dos a la existenci¿r, a tr¿rr,és clel lenguaje que Ios "re-presenta" r'cle k¡s Ia psicologí¿r Ie ofl-ec.ir
clr.lculos, técnic¿ts y dispositivos que. estos lenguaies h¿rcen concebibles de sus lenguajes. roh-
(Braudel, 19ii5; Tribe, 1976; Forquet. 1980; Miller & O'Leant 1987; r.nuch¿rs rnaneras clistir
Rose, 198f1; Miller & Rose, 1990). manA, abriendo ¿rsí nrr,
Los vocabul¿rios cle l¿rs cienci¿rs psicológicas han hecho clos En el siglo XI\. el
contribucir¡nes distir"rtas pero rel¿rcionacl¿ls al ejercicio del gobielno en un lenguaje tortacl<
dur¿rnte c-l siglo XX. Prirnero, proporcir)nAron los ténlinos (llre per- lnoral 1, las nrrevrrs teo
rnitieron r¡re la subietiviclad firer¿r traducicla al nlrevo lenguale' clel Este vocabulario interl
gobierno cle las escuel¿rs, las prisiones, las fZrbricas, el mercado del por los efectos ¿cru.nrrl,
trabajo y lrr econorría. Segunclo, constituyeron la subjetiviclacl y l¿r in- üciosas en Ia irrfitrrr.i¿r.
tersubjetiviclad corno objetos posibles cle la ¿rdnrinistración racion¿rl, la constitucirin v el car
al sunrinistrar los lenguajes para hablar ¿rcercA cle la inteligenci¿, el generacioles. Por e.jel
des¿rrollo, la higiene urent¿rl, la aclaptación v la inaclaptacirin, las rela- n-ralos hi'tbitos a pttrtir c

ciones fáuriliares, las dinlunicas de gmpo, entre otras. Hicieron posi- el corazón de las grancle
ble pensar en alcanz¿rr objetivos clese¿rclos prodtrctiriclacl, a través de l¿r rentor¿liz
-f'eliciclacl,
s¿urid¿rcl, habihdad intelectual- ¿r tr¿rr'és clel gobic.rno sisternhtico dc.l e¡r el lbco de ilulr¡ruera
clominio psicolóeico (Rose, 1990). chester v otr'¿rs ciucl¿rci,
L¿r sucesi(ln cle vocabul¿rrios con los cu¿rles se ha ¿rticul¿rclo la que iban desde las carrrl_
psicokrgía tlurante este períorlo h¿t estaclo virtcul¿cl¿ ¿t un¿r secuencia nio, hast¿r los plouraln,r_,
de problenurti:acione,g. La sala de cl¿rses, el barrio pobre, e.l tribun¿rl, lo tanto, se sostu\I) taltl-
el ejército, l¿r filbrica, l¿r fiurili¿i, c¿rcl¿ nno constitur,ó supctficic,s dc ser refbnlado si era re
crncrgcncfu sobre las cu¿rles trlgunos probl.:mas, r¡re Itr psicología ha- y sus alrededores. r'er¿r
úa propios, torr¿rrí¿ur fbnrra: l¿r degeneracirin r¿cial, el retr¿tso intelec- donde los üejos h¿'rbitos
tu¿rl. l¿r delincuencia juvenil (r.f. Foucault, 1972a). En v alrecleckrr cle ser construidos. Las téc.r
estos Iugirres, la psicoklgí¿r encoltr¿rrítr sr.rs srrjetos, los ex¿n.rin¿u'í¿r v e"- los locos podían ser rer
tucli¿úa, brrsc¿urclo refrrnlar]os o cur¿rrlos r', en el proceso, elabor¿rrí¿ niños patológicos, Este I

136 - L¿r invencií¡n clc'l -.í rnismo


teorí¿s ¿Icerca cle la partologítr urentnl v las norr.nas cle contport¿uniento
v de penstrmiento. El conociuriento psicolírsico cle la nonnaliclacl no
precedió estas preocrrpaciones por la alonnalid¿rcl, ruás bien ¿rl con-
trado. Frre en tonto a los problenr¿rs de la patología, de su iclentific¿r-
ci«in I'arhninistr¿rción, que la psicología cornenz¿rrí¿r a elabor¿r srrs teo-
rías ¿rcerca cle l¿ nonnaliclad psicológica (Rose, 19ái5a). Por su parte,
la psicologí¿r le ofreció al pensrunie¡tto social I'p<llítico la cliversicl¿cl
de sus lengrrajes, r,olriénclolos rln recrlrso fértil para tr¿rnsfbnn¿tr, de
lr.tttch¿ts nt¿lner¿ts clistint¿rs, lix problernatiz¿rciones cle la eristenci¿r hu-
llt¿tll¿t, ¿rltrieltdo ¿tsí nrter,os tlontinios prrra el pensruniento v la acci<'ru.
En el siglo XIX, elgobienro se dirigiri a un,:rrclen nror¿rl articul¿rclo
en un lengrraje touraclo cle la e¡ristemología ¿rsoci¿rcionist¿, la filosofí¿r
lnoral v l¿ls nuer,¿rs teorí¿ts psicolóeicas acerc¿r de Ia patologítr nrental.
,l Este voc¿rbulario interpret¿rba la conclncta indiridual conto uroclel¿tcl¿r
,l por los ef'ectos acunrulativos cle I¿r erposición a influenci¿rs virtrros¿ts o
vicios¿rs en l¿r inf¿rnci¿r, Ias ctrales tendrían nn efecto duraclero sobre
la constitucir'»l y el c¿trhcter, que inchrso sería tr¿ursnlisiltle a firturas
generaciones. Por ejemplo, el delincuente juvenil h¿brí¿ adqrririclo
malos hi'tbitos tr pttrtir cle la cormpción ntor¿l del lneclio (¡re \,¿ce en
el cor¿zón cle las grancles ciudacles. Dich¿r delincuencia era prer.enible
¿r trar'és cle lir relroralización del ¿mbiente cloméstico. el cu¿rl der.ino
el en el fbco de innumerables provectos fil¿ntr«ipicos en Lonclres, Man-
chester v otr¿ts ciud¿cles inclrstdales británicas v norte¿u'ueric¿Lr.l¿rs,

l¿ qtte ibru'r tlesde l¿rs carn'rptrñers par¿i que los pobres contraieran n'r¿rtlimo-
i¿t ni<1, hasta los progranr¿s par¿r refbnnar ltr arrluitectur¿r clorlréstica. Por
ú, lo t¿urto, se sostuvo t¿urrbién rlue el clelincuente p«rtencial o actrral porlítr
le ser refonn¿rdo si er¿r remordrlo cle las influenci¿ts corruptirs de'l hogar
a- v srrs alredeclores, v era reloc¿rlizaclo en rln entorno regulado v mor¿rl
clonde Ios r.iejos llírbitos podían ser clesb¿ratados v Lu'ros rllrevos poclían
le sel'constmickrs. L¿x técnic¿s invent¿rdas para el "tr¿rtauriento rnor¿rl" cle
S- los locos poclítur ser reutiliz¿rcl¿rs en un¿l nue\'¿l pedagogía rlorirl para
ía niños pat<llógic<ls. Este lenguaie, junto a kts ltorlos cle pensar \' ¿lctu¿lr

Capítulo ;3. La psicoloqí¿ conro cielrci¿r social I il7


a los que dio origen, se extendió más allá cle l¿r reforma de lo patológico emocional cle la
hacia el cles¿rrrollo de técnicas de moraliz¿ción de los niños en el hogar pele,u
-rnentir,
y la escuela. Así, los vocabularios psicológicos estaban llegando a jugar significatiros. nc
un papel cmcial en las lógicas y técnicas del gobiemo soci¿rl. ciales mavclres ¡
En l¿rs últimas décacl¿rs del siglo XIX, los juicios uror¿rles acerc¿r miliar y al conrp
de la üciosa, corrupta -v sociahnente peligrosa natur¿rleza de Ia cri- en ténliuos psi
minaliclad, la locura, la delincuencia, la prostitución v el libertinaje familiar en térn
fueron proüstos del fund¿irrento médico-psiquiátrico tr¿rnsr.nitido en de lirnpieza. alir
el lenguale de la "degener¿rción" (Foucault, 1979b; Pick, 1989). Ya no zar url írntltito ¡
se trat¿rba de las consecuencias rer-nediables de Ia inrlersióIl en ull experiencias terr
lneclio lnoral corrupto, sino que estos peligros soci¿les eran fonnas sentimientos cle
de expresión de una constitución heredit¿rria degenertrda. La degene- EI lengrrirjr
ración er¿r inherentenrente acumulativa, dado que la üda indecente una gamir cle nr
e inrnoral favorecid¿r por aquellos cuya constitución estaba üciada, infantil, conro pl
tendría como resultado una debilidad hereditaria aÍur lnavor al ser inspección v trirt
transrnitida a las nuevas generaciones, rula tendencia exacerbada por como "inaclaptac
la inclin¿rción de los degenerados a reproducirse entre ellos y tener existentes. clesclt
much¿r descendencia. El bieliestar nacional estaba amenazado por las de higiene nrenl
reproducciones libertinas de aquellos que poseían una constitución potencial par¿l I
degeneradtr, quieles la transrnitían de generación en generación. Los nuevo lengu¿rie I
nue\.os s¿rberes positivos ¿lcerca de lo patológico crimi- de la amplia diti
-antropología
nal, psicología indiüdu¿rl, psiquiatúa- interpretaron el estado r.nor¿rl en desarrollo int¡
de la población en estos ténninos y fueron articulados con prograrnas "público"
¡'"pdr
eugenésicos para rn¿rpe¿rrlos l, reducirlos, deiectando ¿r los degenera- eficienci¿r iltstitu
dos v limitando su reproducción. vocabulario para
En las décadas de 1920 v 1930, el vocabulario más benigno de la los problernas hr
higiene mental fue el que definió los ténninos para el gobierno de la crutinio y la regr
sub¡etir.iclad (Rose, 19ál6a; Miller & Rose, 1988). El lenguaje de la hi- en térruil.los rle r

giene mentrrl reconstruró fenórnenos que iban desde el cfir-nen hasta subjetiva e inter:
los ¿rccidentes en fábric¿Is, como síntornas de perturbaciones rnentales llueva lltAner¿1.
que tenían su origen en problernátic¿rs rnenores üncul¿rdas ¿r l¿ infan- Durante I¿r,

cia, Ias cuales er.nergían, ¿r su vez, de perturbaciones en la econornía de términos psir

138 - La invención clel sí mismo


emocional cle Ia firmili¿r. Así, los perlueños problerrtrs de la infancia
pelear, l¿r enuresis noctllnra, Ios berrinch volvieron
-111€'¡1ll¡,
significtrtivos, uo en sí nrisn.tos, sino en trrnto signos de problemas so-
ciales nravores lx)r1'erlir. Uu¿ nuer'¿r llrir¿cl¿r fue dirigida a ]¿r vicl¿r fir-
rlili¿rr \' ¿rl cou'lport¿uriento inf¿rntil, una mir¿rd¿l model¿rcl¿r v ecluc¿rd¿r
en ténninos psicológicos. no se trataba cle r-isualizar el réginren
Y¿r

fantili¿r en ténninos de sobfiedad. cliligencia r.frugalidad, tanrpoco


de linrpieza, ¿rliment¿rciril'l s¿rn¿r e higiene. Ahora ertr posible üsu¿rli-
z¿rr lur lunbito 1-lsicológico cle la intin"ridacl, conpuesto de tenores,
experiencias temprrrnas, ¿ursied¿rcles, actitucles, relaciones, conflictos,
sentinrientos cle persecucirÍr, cleseos, firntasí¿s r'' culpirs.
El lengutrje cle la higiele ment¿rl hizo posible conceptutrliztrr
ulla g¿ln'l¿r de rluer'¿rs instittrciones. como las clínicas cle orient¿ción
infantil, con.ro puntos cle apovo cle rur sistemtr comprehensivo ptrrrr la
inspección v tr¿rt¿rmiento rle tocl¿rs aquellas patologías ahor¿r descrit¿rs
cou"ro "inadaptación". Esto hizo posible reconceptutrliz¿rr instituciones
existentes, descle el tribtrn¿rl cle justicia hasta l¿r fábñca, en ténniuos
de higiene rnent¿rl, r- clefinir un futrrro para ellos en ténninos cle su
n potencial p¿rr¿r promover Ia salud, el bienestar y l¿ eficiencia. Este
')§
nuevo lenguale fire diserrin¿rdo ¿r l«rs r.riernbros cle la fiunilia a trar'és
rl- de la arnplia clifirsión cle escdtos populares cle psicólogos v expertos
¿l en cles¿rrrollo infiurtil. Ltr liigiene nrent¿rl er¿r un v¿rlor ¿rl rnislno tier-rpo
ils "pirblico" r'"privaclo", daclo que rinculiüa ltr tranquiliclad social v la
it- eficiencia institucional con el bieuest¿rr persontrl. Al proporcion¿rr el
rroc¿rl;rrl¿rrio para pens¿rr v lr¿blar acerca rlel tles¿rrrollo hurr¿rno v cle

le la los problen-r¿rs hum¿rnos en términos psicolriuicos, ul promover el es-


le la cmtinio v la regrrlación cle la r,'icla familiar r'' l¿r existenci¿r institucion¿rl
lhi- en ténlrinos cle nonnalidad urent¿rl, la psicología ünculó la existencia
¡LSta subjetir-a e ir-rterstrbjetir.¿r col-r los progranrtrs guberntrnent¿rles cle un¿r
nles lluev¿t llt¿lner¿I.
:ll- Durante l¿r guerr¿r v el períoclo tle postguerr¿r, Lur lllre\¡o cor-tjtrnto

, íit de ténninos psicológicos penetró eu el lengurrje de gobierno. Este

Capítrrkr 3. La ¡lsicokreí¿r conro cielci¿ soci¿l - 139


rlllevo lengurrje cle "el gnrpo" abriri la ricla rel¿ciollal cle l¿rs org¿uri- acciones. Vocabul
z¿tciones al peusanriento v la accirin cle una n¿lrler¿r nrlveclosa (Miller sr; r¿rcion¿rl cle la c

& Bose, 198Éi; Rose. 1989a; r'éase el Ca¡rítulo 6 cle este rrrlunren). El que depenclen cle
lenguaie rlel grupo hizo inteligibles un¿r iurplia rle fénrinrenos
g¿un¿r poderes p¿r¿l pres
problernítticos l¿s fábric¿rs inadnrinistrables h¿rst¿r el bat¿llíln de intereses ¡rolíti
-clesclt'
tlescontentr)- (llre no ptrrecían inteligibles en ténninos cle c¿rr¿rcterís- la persuasión: no ¿

tic¿s de los inclividuos. Anralgrrrnó clc.s¿rrrollos cr»rceptu¿rles cliversos de las tensiones gr

e inchrso ¿rp¿r'er)tenrente incourpatibles terlría cle l¿rs rel¿tcirtnes cuánto ntejrlr uno
-la
ol{etales, el concepto rle Bion clel gnrpo sin líder, Ia teorí¿r clel canrpo
tle Kurt Leu.in- crln l¿r nt¡cir'llr de sisternirs sor-.iotécnicos (Biolt, 1961; Inscribienrlo lo s

Leu.il, 19.18). Drrr¿urte Lt post$ren'¿r, se volviri centr¿rl para lir ¿rchni-


Para que ull clonri
tristr¿rcirin ck' la vid¿'ecorrrilnica abrir l¿rs ruinucias cle l¿ts rel¿ciones
que kr conviert¿r r
interperson¿rles tlentro cle ltr ernpresa ¿rl ¿urÍrlisis r'¿r las intertenciunes
ev¿rhr¿rr su condici
rlue pucliertur responcler', sinrrrltíure¿rmente. a Ios principios psicológi-
gar", l9B8). La inl
cos cle l¿r salucl v los prirrcipir¡s ¿rdn'rinistr¿rtivos cle la prochrctiridad. L¿
acontecirrlientos \.
ct¡tttf isc psicolóuica sería ru'r elernento nrerliador cnrci¿rl no sírlo entre
r¿lcteres del clornir
eurpleacl<l v enrpleaclor. sirro tanrltién entre el cleseo de krs políticos cle
nes y trabajos. ecl,r
increnrent¿r la proclucción v la propieclacl, r' el control privirdo de los
tasas de n¿rcinrien
procesos tle producciórr.
fbrn¿r calcul¿rble e
Estas ¿rsoci¿rciotres entre ¿unbiciones .qubenrarnent¿rles, clentan-
serhn tornaclas, la
tltrs orgartiz¿rcion¿rles, conocinriento cielttíficrt. cs¡tcttisc prof'esi«»al
nisterio cle econc-»
y ¿rspiraciortes inclivichr¿rles son fiuirlanrent¿rles para lu orgitniztrciór-r
partr el gobienro c
política cle las clen-rocraci¿s liberales. No es s«ilo r1uc, la regrrlacirin se
dispositivos para lr
ertiencl¿r lrlucho rnhs ¿ll¿ar clel coutrol cle lrrs personirs ptrtolóeicas. colr-
La est¿clístici
dicion¿rnclo e integranclo ur<trkl privilegiaclo cle operar- la
-conro n¿rhlente el ¡rr<»'e
protlucciórt tle la nonr-t¿lid¿td nrisnr¿r. De ur¿urer¿r cruci¿tl, lir regrrlacirlr
forrn¿rs qr-re puclie
no tonr¿ Ia fonna cle tnl¿r erteltsitir.l clel corttrol v el c.scnrtinio est¿rt¿rl
llen, 1975r H¿rckir
directo h¿ci¿r los ller¡reiros cletalles de I¿r vicl¿ soci¿rl. institucion¿rl v
licía inspirtu'or.r gril
persorral, sin«r rlue l¿rs ¿tutoriclacles polítictrs "actúan ¿ clistanci¿r" sobre
enr.i¿rclos rr recopili
las lret¿rs 1'aspiraciones cle los inrlivicluos, l¿ts f¿unili¿s r.' las organizi.r-
de personas. srr ñr
ciones. Est¿r ¿rccirir-r a tlist¿nci¿ es posible debiclo ¿r l¿r clisenrinación de
cimientos, enfenn
r«rcabttlarios p¿rra elrterxler e interprc.tar lu propia vicla v las propitrs
transportacl<)s v co

l,l0 - L¿r invención del sí mislno


acciones. \bcabularios que son autorizados porque clerir,¿ut del discur-
so racion¿rl de la cienci¿r v no cle los r'¿rlores arltitr¿rdos de la política,
que clependen cle l¿r ¿rcreclit¿rción de erpertos a los que son acord¿rclos
pocleres p¿rra prescribir nr¿ureras cle actuar luz de l¿ r'erdad I'no
¿r l¿r

cle intereses políticos. v que oper¿ut no ¿t trar'és cle la coerción sino cle
la persrrasión; no ¿r trar-és rlel teutor qrre proclucell sus ¿rntenazas, sitr<t
de las tensiones generacl¿rs en l¿ discrepttncia entre cónto es la ricla v
cuítnto nrejclr nno piensa que puede llegar tr ser.

I ns c rib i e n cl o h,x ú¡ et iu i d o d
Parir <¡re rrrr clonrinio sea gclbern¿rble, no sólo se necesit¿r el lengurrje
rlue lo cortrierta en pensanriento, sino tantbiélt la infcrnn¿rción para
er'¿rhrar su condicir'rn (Rose. 1988; L¿tour, 19861t; y' Lvlch & \\¡ool-
garl 19ii8). L¿r infornr¿rci(»r establece uu relevo elttre autoricl¿rcles,
acontecirlrientos v persoll¿rs, a clist¿urci¿r de ellos. Penlite rlue los ca-
r¿rctc,res del clominio trl qrre se le ha claclo pertinencia de bie-
-tipos
nes v trabajos. eclad cle las personrrs, prevtrlenci¿r de las enfen.neclacles,
t¿rs¿rs tle n¿rciltrielrto v cle rnortaliclacl- se¿lrl rellresentables er1 ull¿r
fbnna c¿lculable en el lugtrr cloncle las clecisiones que los conciernel'r
fltAn-
serlur tomaclas: l¿r oficila clel gerente, el carnrp¿rnrento nrilit¿rr, el rli-
nonal
nisterio cle econontía y otl'os centros rlc críluio ¿rfines. I-os proyectos
ación
para el gobierno tle la vida social h¿ur rlepenclido cle l¿l invención cle
óu se
clispositivos parrr la inscripci<in cle la subjetiiicl¿cl.
. cot-l-
'- La estadístic¿ l¿ cienci¿r del Estado- fue origi-
la -literahnente
n¿rhrelrte el provecto ptrrtr triurscribir los ¿l.tribrrtos cle la población elr
ación
fornr¿s rlue pucliereur entrar en Ios cíilcrrlos cle los gobenrrurtes (Crr-
statal
llen, 1975; Hacking, 1986). En el sislo X\¡III, los provectos de la po-
rnal y
licírr inspiraron gr¿ur cantid¿d de investiq¿rciones. Los ilspectores er¿ul
sobre
enri¿rclos a re.copilar infonn¿rción a lo largo del reino ¿lcerc¿l del uúrlero
tr uriza-
cle persr»rtrs, srr rir¡reza v las fbnnas dc' habitacirir.r y cornercio, sus n¿r-
: ón de
cillientos, enfennecl¿tdes v lnuertes. Descle est¿t c¿scad¿r cle ltúrmerc¡s,
opias
transpoftados I'cornunic¿dos clesde todos los rincones, se contpilaron

Capítrrkr 13. La psicokrgí¿r conro cienci¿r soci¿l - tll


t¿tblas, se tlillrjarou qrírficos. se c¿rlcrrlrrron t¿ts¿s. se ¿urot¿rron tenclen- brrsc¿u'l «rclificar.
ci¿rs, se corllp¿rraron prornt'clios v se clescublier<»r carnbios a tr¿tr'és clel cion¿unielrto cle I

tierrpo. Est¿ fire I¿ clinrensirin técnic¿r clel "descrrbrinrielrto de l¿r socie- del eje político clr
dacl" ¿ ]¿ cr¡¿l \'¿l lne he rel'elickr: en ¿xlel¿urte. estos l.lirnerrls selí¿n vis- r¡re pr"eriaruerrtr
tos cort'to irrtlispensrrbles llarit l¿r crrestir'»r clc.l ejercicio rlel qobierno por la noblez¿r. l«rs lic
l¿rs ¿rutorirlacles. r'¿r fuer¿ur éstas políticas. pr«rf'esion¿les «l filantrripicas. sobre t<lclo. ¿r c.firr
L¿r trartsfilnn¿rcirin de la poblacirin en nrirneros r¡re poclrítur ser Ar¡rí. el porl
rrtilizaclos c'r los cleb¿rtes v círlcrrlos políticos v arhninistr¿rtivos. se er- porcionar rlisp«rsit
tencliri la est¿tlísticalizacirin rle Ia rnor¿l v rle las patol«ruí¿rs de l¿r
¿r jetos problerIr¿itic.
poblacirin. L¿rs s«lcierlacles est¿ulístic¿rs e.n (lran Brt't¿ira conrpiltrron frrnua de tr¿z«rs c
t¿bl¿s v gr¿ificos de arregkrs clornésticos. ti1-l«rs cle empleo. diet¿rs, gra- ciórr cle c¿rtegoñas
rlos tle polrreza v c¿rrerrcia (Abriuns. l!l6tj). [,irs topografí¿rs rrorales cle coltstnryerol kt :r
Ia poblacirin fireror c«»rstnriclas metli¿urtc el nrape'<l del ¡liurpe'risnro, en cla"sific¿ici«rnes.
Ia cleliltcrrcrtcia. el crirllen r la klcrrr¿ a trar'és rlel esllacio v el tiernpo. lnero cle estos rlis
extr¿r'ertdo tod¿ se'ric cle conchrsir)rles ¿rcerc¿r dc' l¿rs tas¿rs c¿rmbi¿urtes ríz¿tciól hacerr cle
de patologíus, l¿rs c¿rrsas cle t¿les conrlicionr.s v las nrerlicl¿rs rec¡rericlas dif'erenci¿, ¡tennit
para aliviirrlas (Jones & \\'illi¿rrns«rn. 1979; Rose. 1979). A nreclirla r¡rt' cológico ltara dile
I¿s estaclístic¿rs ¿rcerca cle las ¡ratologías rk'l «rnlt'n rn«rr¿rl firc'ron l'eco- ruranejable r' ¿r rolr
piladas, éstas t¿nrbiért parccier«ru nr¿urif'est¿r' c'ar¿cterístic¿s ¿rc«rrcles a min¿rciones c«rntbi
le'1,es. ,\s- cornenzó ¿r sostt'rrerse rlrre lrabía regl¿rs del «lrclelr rnoral rltrt, inclir.,iduos en con(
rl¿rban lrrgtrr rr regularicliules en l¿r corcluct¿r inrlividrral (cf. Hackinu. y nonnrrtivrr. ltac.ir
1990). La c<lnrirunente n'petirla crrestirin cle Ia rel¿rcirin entre la so- 1977). De este nro
cir.tl¿tl r-el individrro corncrtzri ¿r torn¿rr l¿ firrnra r¡re sería reconocibk' des, se h¿r vuelto c
rhrraltte Ios sigrriclrtes cie.rr ¿ritos. de la indir.ichr¿lirl¿
Sin enrbarg<1. estas erarr ureclirlirs srrperficiirles rlt'la srrbjetiviclarl, el ejército, px)por(
r¡re rlescarrsall¿rr c.n collta(los casos rk' evitlelrte conduct¿r pat<llóei- intrdaptados. en \r
cir, clesprrés tle «¡re erart cortoc'irlos p«rr I¿s ¿utoritladt's. La psicología deben tolt¿rr rlec.is
reirinrlic¿rríir sll pret('nsirin rle ser'ur)¿r disciplirra soci¿rl efécti\'¿r en sll L¿t tr¿rchrc.ciór
capaciclacl rle irrrlivirhr¿rlizirr srrjetos cle rura n1¿ur('r'¿r rnhs fiurcl¿unent¿rl. posible goberriar I

Michel Frlrc¿rrlt sostrno r¡re torlas l¿s cienci¿rs r¡re llevan conro prefi- para sí un est¿rtutr:
j«r psi o psic«r ltrrrtdelr srrs r¿ríces (,lr lllr¿r tr¿lls{bnttacl¿ relacir'ln c'ntre el autoridacl erl lrn si
pocler sr¡cial v el cuerpo hrun¿no. err la crral krs sistern¿s regrrlat<»'ios brica, la prisión rt

112 La inlt'ncirirr del sí misulo


brrscan coclific¿r, calcrrlar. srrpenisar v rn¿uinriz¿rr los niveles rle fiur-
cion¿unient«r cle los incliridrros (Forrcatrlt, 1977). Err est¿ "reversión
del eje polític«r rle l¿ inrlividu¿rliz¿rcitir". krs tipos de ¿teución cle't¿llacla
r¡re preriarrrente se habían enfocacl«r en los pririlegi¿clos re¿rlez¿r,

Ia lroblez¿r. los ricos, kls ¿rtist¿rs- ¿lror¿ se cliri{Ían a los infirrnes


-la
r.,

solrre tod<1,¿t crilriillales, hurírticos. perl'ersos v esc«rlares.

Aquí, el pocler de la psicol<¡gía r¿rlical)a ell sll pronles¿l de pro-


\- porcionar rlis¡l<lsitivos rle irrscripcirirr r¡re inclividualizarí¿r.r ¿r estos su-
la jetos problerttítticos. ller'¿urckr el ¿lnt¿L lrrunan¿ trl pensirrniento llirjo Itt
)n firnrt¿l cle trazos c¿lcrrlablc.s. Su coltrilrucióu clescansó err Ia inven-
citilr de catcqorí¿ts cliagrr«isticas, evahraciones, r'akrracir)nes v tr.sts r¡re
it' ct¡nstruverorr kr srrbjetirrr rle ur.r rnorkl rltre pudiera ser representackr
, ).
en clasific¿ci«lrt,s, figrrrirs l cocierrtes. El test psic<ll<igico fue el pri-
r). rner«r tle est«rs rlispositiros. Coclific¿rcirirr. rnatenr¿tiz¿ción v estancl¿r-
.',S rizacirin hacen del test rrl rttini lab<lratorio para lu irscripci«irr cle la
t.Ls tlif'erencia. penritientl«r realiz¿ci<in rle casi cualr¡rier esr¡r,rna ¡lsi-
l¿r
I (' cológico para dif'erenciar irrrlivicluos ('n rrn tierupo breve, rrn t sptrcicr
r)- rttanejrtble v a rolunt¿cl del e-xperto (ll«rse, 198E). f,os tests v l¿s exa-
' it lnin¿rciones conrbin¿ur poder. r'erclacl v srrbjetivacirirr: conr-ierten a los
i(' indivich¡os elr corrocirrrielt<1. coruo olljetos cle rul¿ nriracl¿r jeríur¡rictr
'
v nclnnatir'¿r, hacienclo posillle c¿rlificar, cl¿rsific¿r v c¿rstig¿rr (Foucault,
.()_
1977). De c,ste nrodo, el ritual clel test, en tocl¿rs sus fi)nnas vvariecl¿r-
',lc
tles, se ha ruelto celttral ell nuestr¿rs técnic¿rs nr<lclern¿rs cle gollienr<r
cle Ia inclivichralicl¿cl hrulr¿rna. er-aluando ir potenciales reclutas prrra
,tl. el ejército, prolx)rcion¿ulclo "orient¿rcirin voc¿rciorr¿r1", er'¿rlualckr liños
1i- intrclaptatdos, en slulr¿I, el t<lclas las prírcticirs rklrcle las ¿trrtrlricl¿rcles
¡íir deben tonlar rlecisiones ¿rcerc¿r clel clestino cle los srrjetos.
\lt L¿r trachrccitin clel incliricluo ¿rl tlonrinio tlel conocimient«r l.racr.
t irl. posiblc' gobentar Ia srrbjetivicl¿rcl cle acuerclo ¿r uorrn¿rs que reclanrtur
, ii- ptril sí un estatuto científicr¡, por pr«rf'esionrrles r¡t' fiurcl¿rnrentan su
t'l arrtoricl¿rcl en lrr) s¿ber esotérico, pero objetivo. En la escr-rel¿, la fír-
:irls bfic¿, l¿r prisi<in v el ejército, los psicóloÍ{os se r.olverí¿rr-r expeftos en la

Oapítrrkr ;3. La psicokr[í¿ conro cienci¿ soci¿il l+il


t utilización r¿rcional clel f'actor ltru.lt¿rrro. Lrr psicoloeía conrenzó ¿r recl¿r- cas, plétora cle erper
nr¿lr sll ctrpaciclad cle no simplemente indiriclu¿lizar y clasificar, sino <1ue logías de gobierno r
t¿unbién cle aconsejtrr soble c¿rrl¿ firceta de l¿ rida institt¡cion¿rl, para ejercerr su pocler a I

¿rrnnerrt¿lr su eficienci¿ r' satisf'acción, sn prochrctiriclacl v bieuestar. ¿t ¿lctlrar lne(li¿urte rir

Fue aquí doncle se instal¿ron ltts psicologías socirrles, juganclo ofrecidos por los pr;
urr rol cl¿rve en hacer r¡re l¿rs rel¿rciones interperson¿rles fueran pe.n- est¿rs sociedacles est¿

s¿tltles e iltscrilribles (estos telnas sort discrrtidos cle r1r¿tner¿r nlírs clet¿r- legales y penales clel
llacl¿r en Rose, 1989¿r, incluirlo en este r.oluuren conto Capítrrlo 6). Las bierno es lograckr po
personas, rrpirrentertreltte, no er¿n autóllt¿rtas, sino rlre irctuaban eu ell sus roles prolesir
térn.lil.l«rs cle tur n.nutdo subjetivo cle signific¿clos y r'¿üores, elr sum¿I, guajes ¿r tr¿rr'és cle lo
de "actitucles". El c<¡ncepto cle actittrl iba de l¿t rnano cou un rrrétoclo con las cuales las er,
prtrit inscriltirla. La "enc'{rest¿I ¿ctittrrliu¿I" se couvirtiri en un clispositi- buscar mejoritrlas. S,

vo cetttr¿rl partt graficar el nrturclo strbjetir.o, perntitiendr¡ su tr¿usfitr- ztrs eclificios


-leyes,
nt¿rciólt elt ltiuneros v posillilitanclo sn rrtilizaciólr en l¿t firnlrrlacitiu sentacio¡res pirblicas
de irrgulnentos v estr¿rteqias pura Lt eltpresir, el particlo político o el a esos conjuDtos llri'r-.

ejército: cle hecho, etr cttrJr¡rier lugar cloncle los inclii-icluos er¿ur go- v fonnrrs de coltoc illi
bent¿rclos coll su propio cousentiuriento. Esta lnir¿cla psicolrigica sería nistración. r'icla liunil
dirisid¿ ¿l la n¿rcirin conro uu toclo ¿r trar,és cle dispositir,os como l¿ts en- El Estatlo n«r r
cuest¿ts de opitrión. La psic«rlogí¿t soci¿tl de las opiniones r.'l¿rs ¿rctitncles gobierno. Las iunor ¿

se presentó ¿r sí It-lisrtta coruo rul relerrcl continuo entre l¿rs ¿utoricl¿rcles zadas no en respuestr
y los ciud¿clanos. Si los ciudadanos cunrplir libremente sus
clebí¿ur tentos de gestionar p
obligtrciones sociales, el gobiemo debía ernprenclerse ¿r l¿r luz de, rur Los prograrr-l¿rs par¿r
sal)er los est¿idos sulrjetivos cle los ciud¿rdanos ¡- debía ¿lctu¿rr
¿rcerc¿r cle dades deberíiur pens
en función de clichos est¿rdos. A trar,és cle su captrcidad de inscribir r. surgido a veces clel ¿

traducir la sub;etividad, de proporcionar rrn¿t tecnulogía que r.illculara sido fonnultrclos por
el cleseo cle los ciucl¿td¿uros con ]as decisiones cle las ¿urtoricl¿rdes, esta trabajadores soci¿les
psicologíti social se presenttrría a sí lt'risu'l¿r n¿cla menos que couto ul)¿t estos prr-rgrarn¿is h¿r i

c'iencia tle l¿ cler¡rocraci¿r. nuevas r¿llll¿ts ell el ,

de grupos profesion
Tecnolo gías de la .y új et iDi¿ad trópicas o de caridacl
temente involucr¿i¡rc
En consecuenci¿r, llo es un ¿ccirlente' qrre ltr psicología cuanto
-en
lenguaje, conjunto cle norl'n¿rs, clleryo de valores, repertorio de técrri-
de rnarcos y técuicit-s
tr ningún lugar. han

144 - La invenciór.r del sí misrno


'ecl¿r- cirs, plétora cle erpertos- jue$re rrn rol tarr significirtir'o en l¿rs tecno-
:) qlle logías de gobienro cle las den.¡ocracias Iiber¿les. Estas socieclacles llo
eje.rceu str poder ¿ tr¿r'és de l¿ clonrin¿ción cle sujetos, ollligíurckrlos
P¿rr¿r
¿r ¿ctuar nrecliante auren¿rz¿rs uihs o urerlos erplícitas o lx)r illcer)ti\1)s
,ando ofi-ecickrs por krs pocleres cc'ntr¿rles (Miller: I987). Prlr el c'orrtr¿rio.
est¿s sociecl¿rcles est¿tbleceli un¿l clistalcia nc.cc.s¿ri¿r entre los pock,res
Pen-
ileta- legales v penirles clel Estackr, r' l¿rs actir.itl¿rrles rle krs iritlivithros. EI go-
. L¿ts bierno es lograrlo pclr rneclicl cle' l¿r ecluc¿cirin cle kls ciurl¿rcl¿uros, tanto
il) ell ell sus roles prclf'esionalc's como ell srrs vid¿s personak's; en krs len-
Il lll¿I, gurrjes ¿ tr¿r'és tle krs ctr¿rles irterpretttrt slls e\periellci¿rs, l¿rs l)onlras
itodo corr l¿rs cuales l¿x t'r'alr'ran v l¿rs técnic¿rs rlecliante las crr¿rles cleberí¿ul
ositi- busc¿rr nrejorrrrlirs.. Se ejerce a tr¿u'és del ens¿rrnbl¡e'de clivers¿s firer-

rsfor- zas eclificios, prof'esiones. tr<crric¿rs, pr'ocluctos básic«,1s, re'pre-


-leves.
¡rción sent¿lcioues públicas. celltros cle círlcukr r-tipos rle juici<l- r-iucrrl¿d¿rs

roel ¿l csos couilllrtos ur¿is o nrel)os c'stables rle persontrs, cos¿rs, dispositivos

n go- v fbnn¿s cle corocinrierrto r¡re Il¿un¿tnros edrrc¿ció1, psir¡riatría, ¿rdriri-


seí¿r r ristrirc'irin. rid¿r firr rrili¿rr.

rs en- El Est¿clo no es el origerr rri el titiritcro (le estos prourarnas cle

:r rcles qobiemo. L¿rs irnor'¿rciones en el gobierno han siclo usualnrentc- reali-.


l¿cles z¿rclas nr¡ en respuest¿r ¿r l¿rs grrrrrcles ¿llnenAz¿ls al Est¿ck¡, sil.l«r colno in-
e sus tentos cle qestion¿tr problerttas l<lc¿tles, pequeños e inchrso nrtrrginttles.
le' un Los progrttrn¿rs p¿rra mejorar o c¿ulbiar l¿s rt.t¿ner¿rs en (ple las ¿urtori-
l'tuar clades clebeñ¿rn pens¿lr sobre, o lidi¿r con, este o aqrrel problenrtr, han
bir y surgido ¿r veces del trpirrirto político centr¿I, pero lx)r kr general han
Lrl¿rr¿r sido forrlrul¿clos por abogmlos. psir¡uiatras, criminólogos, f'eminist¿ts,
est¿r tratbajatlores soci¿lles, jef'es, trabaj¿r(lores, paclres v urarlres. Ejecutar
| 1111¿t estos progriun¿rs ha inrplicarlo algtrnrm veces legislar \. L.rr otras cre¿rr
nue\'¿rs r¿ul'l¿ls eu el trptrrtrto político, pero también h¿r sido el trabalo
cle grupos profesionales clispersos, organizrrciones volrrntarias, filan-
trópicas o de c¿rridacl. L¿s inrror'¿ciones h¿lr sido esporírdicrrs, frecuen-
terlertte involucr¿urclo l¿r rrtilización, coltbitracitin l,extensir'rn ad lnc
anto
de m¿rrcos v técrricas explicativas r,¿r r.xistentes. Algturtrs r.lo h¿ur llegado
icni-
ir ningÍrn luq¿rr, han fl'ac¿rsado o h¿ur siclo ab¿urdonadas o superad¿s,

Capítulo ;3. La psicologí¿r ct.rrno cienci¿ soci¿l - 115


rrier)tr¿rs que otr'¿rs h¿n florecickr, se h¿n ertelrliclo ¿r otros lugirres v lidad entre polític,os. al>
probleuras, o se h¿ur est¿rblecirlo conro proceclirnientos clura.cleros cle hornbres de negocios v r

pensurniento v ¿rcci(ln. En los dispositiros 'u' rel¿ciones que se. h¿n so- y técnicas que pueclen :
liclificado, la realidacl n'rism¿r del Estackr, cle la política r cle la sociedacl entre sí. Y su cr¡.rof i:t,.
h¿ sitlo r¿rdicahlente tr¿ursfonn ¿rcl¿t. la exigencia de un¿r vercl,
La psicologí¿r no es siurplentente un espircio eu el qne se han to, perrnite establecer ur
jugaclo fuerz¿rs extenr¿rs, o una herranrient¿r ¿r ser utiliz¿rcla por clases los prograrnas gubeman
o gmpos cle ilrterés prestableciclos. En la rnedicla en (lue r'¿rri¿rs cle eficiencia industrial. anrr
sus teoías ltan siclo nrírs o nrenos eritos¿rs en conseguir alirrclos r¡re nes, con las esperanzrr.s.
l¿rs tlefiend¿rn, en prochrcir tr¿ursfonlaciones calculables en el munclo farnilias. Convenciclos cl

soci¿tl, en ligtrrse ¿r recles sociales cluraderas, h¿ur est¿rblecido nuer'¿rs en ténninos psicológic.o:
posibilidacles par¿r la acciólr 1' el control. Al constituir v c«»tsolicl¿tr es- nas relaciones, ¿rutorre¿rli
t¿rs recles, ¿rl fbrzar ¿r otros ¿l nroverse a tr¿tr'és de c¿urales ptrfticulares do "voluntariameute" a l
cle pensamiento r'¿rcción, los psicólou«rs han pafticipackr en l¿ firbri- prornesas de ¿rsistiruos e
c¿tcirin cle la re¿lidacl contenrporírnea. No se trrttit siutplernente r¡re ernprendernos "libreurer
rlue\'¿Is m ¿Ilr e r¿ts de in terpret¿r enticl¿rcles r- rel¿lciones esistentes h ¿n'¿ur

sido introdrrcid¿rs, sino que t¿ulbién, corro henros risto, halt siclo es- El alma del ciucluclono
t¿iblecid¿rs llue\'¿rs ¿rsoci¿rciones entre trn¿r r'¿uieclacl de agentes, cuvos
La psicología, entonces.
poderes pueden ser mejoraclos en l¿r nreclid¿r que. logren "traducir" Ios
ciudadano en la esfera cl,
argtunentos o ¿utef¿rctos en cuestión p¿u'¿r que puedan funciouar de
tema aparenternente'-pril
m¿rnerA ventaiostr en rel¿rción con sus preocnpttciones o ambiciones
fundarnentalrnente ri ltcu
ptrrticulares (rf Latour, 1984, 19864; Callon, 1986; Larv, 1986, 1987).
tión de cólno debenarrro
Esto rluiere decir que las tecnologías de gobierno touran la fonl-ra de
nuestra conducta. cónrr.r r
¿sociaciones la.ras que ligan ¿r cliversos rrgentes ¿r tra",és cle una serie
y el de los otros. Esta co
cle relevos, prlr medio de los crr¿rles los ob¡etivos 1, rrspirtrciones cle "externo", donde el gobie
aquellos qlle se encuelrtran en un lugrrr cle Estado,
-cleptrrttunentos lo contrario serían "libres
cornités expertos, profésionales, gerentes- pueclen ser tr¿rduciclos a
propia constitucióu contc
los círlculos v ¿tcciones de aquellos qlre se encuelltr¿ur en puntos es-
consecuencia de Ias técni
ptrcitrles v temporales dist¿urtes, tales cc¡n-ro prof'esores, trabajtrdores,
1982; Rose, 1993).
padres, rn¿rdres v ciucladanos.
Tan ternprano conto
La psicologí¿r se ha tr¿ursfbnnaclo erl un trspecto bi'rsico cle tales
plícita fue establecida ent
asociaciones. Proporcion¿r los lenguajes para establecer la tr¿ducibi-
de uno mismo. Debía en:

146 - L¿r invención del sí misnro


Iiclad entre políticos, trbogtrdos, gerentes, burócrat¿ts, profésiontrles,
holnbles de negocios v cad¿ uno de nosotros. Est¿iblece las nornras

[i v técnic¿rs que pueden ser aplicadas en varios contextos cliferentes


entre sí. Y xt eyteftise, bas¿rcla r1o en la parcialidad política sino er-l
la exigencitt de una verdad sustentada en el saber r. el entreualnien-
to, permite establecer una relación inclirecta entre las anrbiciones cle
los programas gubemamentales de salud ment¿rl, orden v justicia,
eficiencia industri¿l, an.noní¿r rnadtal, adaptación infantil, y otros afi-
nes, con las esperanz¿rs, deseos v ansiedades de los individuos v las
farnilias. Convencidos de que debernos interpretar nuestr¿rs vidas
en términos psicológicos tales corno adaptación, satisf¿cción, bue-
n¿s relaciones, autórre¿rlización, _v así sucesir.rrr.nente, nos her.nos at¿t-
do "r.'oluntariamente" a los s¿rberes profesados por expertos v a sus
promes¿rs de ¿rsistirnos en la búsqueda personal de la felicidad que
ue emprendemos "libreurente".
¿lll
,s-
El alnta clel ciudadono
)os
La psicologí¿r, entonces, ha est¿rdo ligada a l¿r entrada del ahna del
los
ciudadano en la esfera del gobierno (Gordon, 1987; Rose, 1990). El
de
tema aparentenente "público" de las r¿rcion¿rlid¿des del gobierno estir
IIES
fundarnentahnente ünculado tr la pretendidamente "privarclar" cues-
,7).
tión de córno deberíarnos comportarnos, córno deberíantos regultrr
I de
nuestra conducta, cómo deberíauros juzgar nuestro cornportatniento
! rie
y el de los otros. Esta conexión no ha sido un únculo simplernente
: cle
"externo", donde el gobierno h¿r buscaclo manipultrr indir.iduos que de
.lo,
^
lo contrario seían "libres", sino que ha sido "interno", donde nuestra
I SA
propia constitución cor-no indiüduos "libres" ha sido el objetivo y la
i es-
consecuencia de las técnicas v los prograuras regulatorios (Foucault,
: es.
1982; Rose, 1993).
Tan ternprano con-lo las doctfinas de la policía, una relación ex-
ples
plícita fue establecida entre el gobierno de un territorio y el gobierno
liui-
de uno rnisrno. Debía enseñársele al indiüduo "a controlar" su propia

Capítulo 3. La psicologÍa con.lo ciencia social - t4i


r'a suborclinirrse polítictr-
üd¿i ¿ tr¿u,és clel control cle sns ernociones, subjetiva a sí rr
mente sin resisteuci¿" (Oestreich. 1982: 164). Esto implicó uu entre- diclias nonllas.
namiento en las ¿rrtes minucios¿rs del ¿urtoescrtrtinio. la autcler-alu¿ciórr logía, sino rrnalr
v l¿r autorregulacitin. r'eldo clescle el control clel cuerpo, el habla v el gías del,sí tnistti
r.nor.iuriento ¿r tr¿rr'és clel ejerciciu nrent¿rl inculc¿do elr l¿ escuel¿r r'
1...1
"11
,,rr.
la uuir,el'sidad, h¿rsta las prhctictrs cristi¿uras de la autoillspeccióu v la
o con I¿
obeclienci¿r ¿r la r¿rzón dirina. Sólo en l¿r nreclida en que taies prhcticas crlerf)o \
regulrrtorias fueron inst¿rladas en sujetos, se volr.iri posible clesmante- cle ser. r¡

l¿rr l¿r mas¿r de detall¿d¿s prescripciones v prohibiciones concenlien- fin rle ,rl

tes a l¿rs minuci¿rs cle l¿r colrducta, nr¿urteniéndolas sólo c.n lirnit¿rd¿s innrort¿ilt

v especitrlizadas il'rstituciones: penitencitrrías, talleres, escuel¿rs, r'e-


Si la psicoloq'ra l
form¿rtorios v firbric¿rs. A tr¿n,és cle clichas prírcticas clel sí nrisrlr<1, krs
cen al strieto urc
individuos debí¿n ser sorlreticlcls no sólo por ur)¿r nrir¿da extenrzr, silo
sido lner¿unente
nedi¿rnte una hennenéutic¿r reflexiva.
conductist¿rs. Elt
El concepto cle sujeción prrecle sugerir rlue las personas estíur
gobierno. el cirr,
atrupadas en clispositi\¡os cllvos fines c'llas no contparten. Por suplles-
¿ctivarnente coll
to, h¿w ur.r irr.rportante senticlo eu el qrre este fire v sigue siendo el caso,
tu¿rndo con otror
conro eu lrrs nrtrquinrrri¿rs nror¿rliz¿urtes cle ltrs prisioles, el ejército, la
afectado por las
flibrica, l¿r escuela e incluso la f¿unilia. Pero hast¿r en la prisión del
relaciones sclci¿J,
siglo XIX, del aisl¿ulriento, l¿ entrega diari¿r cle rn¿urcl¿rtos
I¿rs met¿rs
farnilia, la fi'rbri c.¿
morales desde el púlpito \,' la le.ctur¿r de la biblia, debían pror,ocar Iir
sión, los voc¿rbtrl,
autorreflexión por parte del interno. L¿r r¿rcionalidacl r¡re había a ]¿r
las psicocliníurici
base trpuntaba a transform¿r ¿rl inclil'idur¡ no sinrplemeute a tr¿rvés de
torrectificación. l
la inculcación sin sentido de hírbitos cle obedienci¿r, sino a través cle
tes, trabajtrclores
la ei«rcación de concienci¿r ), del clese<l cle ernrencl¿rrse. En la s¿ll¿
l¿r
expertos en la pr
de clases, la {Trbrica v el ¿silo, el orden nroral clel niño, el trtrbajador
¿i l¿i fábdca cle nr
o el loco debí¿ ser reestructur¿rdo de t¿rl rr¿rner¿r rlue el inclir.'iduo se
insatisfacciones.
hicier¿ c¿rrgo Por sí rnismo del juicio cc¡nst¿rnte cle sus habilidades,
.

mismo, sollos qo
cle su prurtualiclad, conrporteuniento, Ieuguaje v cc»rducta, los cu¿rles
queda de un¿i for
estab¿ur incorporaclos en l¿ organización y las norur¿Is cle la institución.
y, al misrr-ro tientl-
Así, estos dispositivos lo buscaron upktstor la subjetiviclacl, sino
para el bienestar
producir inclir.iduos ({ue se atribuyer¿ur un cielto tipo de rnor¿rlid¿rd

148 - La invención del sí mismo


)lítica- subjetila a sí lnisnros v que se er'¿rltr¿rran v refomar¿n cle ¿rcuerdo a
elltre- clich¿s nonl-rAs. Esto no deberí¿r ser consicleraclo en términos de ideo-
r¿rción logía. sino ¿tn¿rliz¿ldo corno rrquello r¡re Fouc¿rult clenon-linó tecnolo-
1¿vel gía.s del ,sí tnistno.
ruel¿r v
[...] q,r" pc-rnriten ¿i los inclivirluos ef'ectu¿rr, por crreutir pt.opiir
iu v l¿r
o cotr la aurcl¿ cle otros. cierto núrner<¡ cle operaci«lnes sobre str
ictic¿rs clleryo v su ¿rllna, pensrrnrientos. colcluct¿r, o cualrluier fornta
rt¿utte- cle ser, obtenienclo ¿tsí urt¿t transfonlación cle sí misntos con eI
nlien- fin cle ¿rlcanz¿rr cierto estaclo de félicidrrcl, pureza, sabiclurí¿r o
ritadas inntortalid¿td (Forrc:rult, I988: 18).

¡s. re-
Si la psicología lrrr jugado un rol clave en l¿s tecnologías que proclu-
no, los
cen ¿rl sujeto uroclemo corr-lo ult "sí ntisl.rro" cle cierto tipo, esto no htr
¿. sino
siclo lner¿r.nente ¿r tr¿u,és cle sus l'Am¿rs individu¿rlisttrs, aclaPtativas v
condttctist¿ls. En Ias r¿rcion¿rlid¿lcles v tecnologíns conter.nporírnetrs de
; estlul
gobierno, el ciud¿rdano es interpretaclo v ¿ibordado conto un sujeto
uPues-
¿rctir,¿ulente contprouteticlo ell peltsar, dese¿rr, sentil'v h¿rcer, inter¿rc-
ll c¿rso,
tu¿urdo con otros c'n términos cle est¿rs firerz¿rs psicológicas 1, sienclo
crto, l¿
afect¿rdo por ltrs rel¿rciones rlue otros tienen con ell¿rs. Es sobre est¿rs
ón del
rel¿ciones soci¿rles v clinltmicas que el gobierno busc¿r actuar. En la
urdatos
f¿unilia, l¿ fr,'rbrica y los sistel.l¿s cle ¿rsesor¿uniento r. terirpirr en expan-
DC¿TT IA
sión, los de la higiene nental, las relaciones gnrpales y
lía a la 'ocabularios
las psicoclinítrnic¿rs son traducidos a técnicas de autoinspección y au-
rr és de
torrectific¿ción. Estas técnic¿rs son enseña.d¿rs por profesores, geren-
nés de
tes, trabajadores sociales y rnédicos. A través del pronturci¿u-niento de
l¿ sal¿r
expertos en la prensa, la teleúsión v Ia radio, éstos son introclucidos
qador
a Ia fírbric¿ cle nuestr¿r experiencia coticliana, nuestr¿rs trspiraciones e
rluo se
insatisfacciones. A trar,és de nuestro apego ¿ clich¿rs tecnologías clel sí
11¿des,
n.lisrno, sonlos goberntrdos por nuestro cor.npror.r-riso activo con la búrs-
crrales
queda de un¿r forrn¿l de existencia que se¿l personahrente s¿rtisfactori¿r
trción.
v, ¿l lrislno tiempo, beneficiosa ptrrn nuestras fántili¿s, comrrnidacles y
d. sino
ptrra el bienestar colectivo de la n¿rción.
:alidad

Capítulo :3. La psicologí¿r con'ro ciencia social 1,19


t Delttro cle las racion¿liclacles v tecrrologí¿s políticns contenrpo- que el trabajo sobr,
ríure¿rs cle gobiern«1, la libeft¿cl cle los sujetos es nrhs que llr)a sirnple rés para el clesarrol
itleología. Los srrjetos s<» oliligado.! a ser "libres", rr interpretar srr indiüdu¿il. Proporc
eristenci¿r colro el result¿clo de elecciones torn¿clas entre rrlra plurali- para la autoelalu¿l.c
dad cle altern¿tir'¿s (NIer-c'r, 1986). L¿ ricla {iunili¿r. l¿r cri¿rrz¿ e inclus«r llevan l¿r existenc'i¿r
el trabaio lnisnto \i¿l lx) sorl restricci«rnes a la libert¿xl v l¿r ¿trrtol'lonría: psicológico, r' h¿rc.en

son Ios ele'rnentos eseuciales en el carlrino haci¿ la autorrealiz¿rci(ln. nuestr¿r propia elecc
Los estilos cle vitl¿t tleben ser ens¿rnblarlos por elecciorres tour¿xl¿s incapaces cle confbr
dentro cle rrna r,¿rriecl¿rcl cle ¿rlterrt¿tir'¿ls. c¿rcl¿r rul¿r cle las cu¿les debe son inctrpaces rle ele
ser legitinrada en térruinos tle elecciones persontrles. El sí n.risnrrl nro- cisiones que han to
tlerno es itttpttlsackr ¿ h¿rcer cle su virla un¿ r'id¿ con sentickr ¿ tr¿tr'és tecnologías cle re{irrr
cle la brisr¡rerl¿ de la f'elicidad r' l¿r ¿rrtorrealizacirin err srr bi«lgr¿rlí¿r in- cos, deln¿urcl¿rs instit
cliviclu¿l: la ética cle la srrbjetir-idatl estír irrertricaltlernerrte ercerratla principahnente a l¿r I
eu los proceclinrierrtos del p«xler. en tén'uinos cle su r e
P«lr t¿rnto. los cirrcl¿rtl¿uros rrtoclernos n«r estíul sielld«¡ constante- y prometert rest¿lu rirr
rnente clonrinaclos, reprirrriclos o colonizados por el poclcr (aunr¡rc,. las ¿llnas moclelrr¿Ls s

por supuesto. l¿r rklrninación r-la represirin tengtut srr lrrgirr en prírc- de una red cle te,c'nol
tic¿s v sectores partictrl:rres), sino qlle son sultjetivackrs, ecluc¿rtk¡s v del ciud¿dano Rose. (

solicit¿rdos dentro de rur¿r ¿rli¿urz¿ lara r' flerible entre interpretttciones


personirles v ¿unl)iciones e iustituciones o nrodos sociahnelrte r'¿rlor¿r- Genealogía.s dd .xt-jt
clos tle ritl¿r. Los lenguajes v las técnicas cle la psicología ploporcionan
En el cornplejo cle po
relevos ütales entre el gobierno contenrporltneo v l¿rs tecnologías éti-
positivos tnotlenr«rs rl
c¿s llecliante las cu¿rles los illclirirltros nroclenlos llegtrn ¿r g«lbernar srrs
de nuestr¿ ¿rhrra. S«rn
propitrs r.icl¿rs. Estos lenguajes v técnic¿rs son crecientenrente pror,istos
s¿r infiltr¿rci(rn cle los s
no por interleuciorres rlror¿tles nrtírocas provenientes cle ¿rgencias so-
ex¡te rt ise en nllestr¿Ls
ciales, sino rlue a tr¿tr,és cle nrriltiples \'oces cle profesi«rn¿rles hurn¿r-
acerca de la libetad.
nistas Y preocrrpttclos, cuvo consejo erperto sobre las ¿rtes de l¿ exis-
ténlinos no es. silt e
tenci¿r es disenrilr¿rlo grrtcirts a los nreclios de colnunic¿rci<'ln nl¿sivos.
no busca revel¿rr la i¿,
Estos prreclen nruv bien ser nrultivoc¿les, pero ofi'ecen soluci«lnes ¿rl
dades. No preqrnta
I.ttismo problert'trt: cí»tro ririr ntrestras ricl¿s cle acuerclo con l¿r norul¿l
las jertrrquí¿rs
cle ¿ruton<¡mí¿r. Sus v¿ilores v proceclinrientc¡s Iiber¿n l¿rs técnicas cle -plrro
sus adrninistr¿rción. sr
rtutorregulzrción cle srrs resicü-ros clisciplinados v nror¿rles, enf'¿üiz¿r.nclo
Atiericle tr kr "nrrtrgir

t50 - L¿r inverrci<in del sí nrisnrcr


(lue el traltajo sttbre sí n'lisn'l<l v sus rel¿tcioltes con otrr¡s tiene iltte-
rle rés parra el des¿trrollrt pc'rsrtnal r, clelle sostenerse en un collpron'riso
sll incliviclu¿rl. Proporciontut lenguajes cle ¿rrrtoillterprettrción, critedos
pirra lrt arrtoer'¿thr¿rción r- tecnol<tqí¿s p¿r¿ l¿r ¿rutorrectificación, <1ue

llevan al penstrnriento corno rrn ¿rsrurto profuncltrnente


l¿t existeltci¿t

psicolrigico, r'lt¿cert cle nttestro ¿rutogobienro ull ¿rsultt<l vil'lculackr ¿r


nuestra pxrpia eleccirin v liltert¿rrl. Y para ar¡rellos sí n.lismos qlle sorl
itrcaptrces tle confbnn¿lrse cor) l¿s oblig¿ciones clel srrjeto libre. r|re
sr»r inctrpaces de elegil'o (llre se encrrerrtl'iur angrrstiaclos por l¿s cle-
cisiones r¡re htrl torratlo. lirs terirpias soci¿rles v cliniulicas ofl'ecen
teclol«rgí¿ts cle refonrt¿r. conson¿rntes con los nrisuros principios políti-
cos. dernald¿s iustitucion¿les e icleales ¡lersonales. Est¿rs se ofi'ecel
1a prirrcipahnente ¿ l¿r libre elc'cción en el nrercaclo. sienclo legitirrr¿xlas
en téntiir.tos cle srt verclacl o cle su efic¿rci¿ ¿uttes (llre por sll lnoralid¿d,
r'¡lronreten restarrr¿r al srrjeto su ¿lrrtonornía r'libert¿tcl. El qobienlo cle
l¿s aluras rnoden.r¿ts se ef'ectria. por tiurt<t. ¿r tr¿\'és de Ia coltstlrrcciril'l
cle tur¿t red cle tecnologías para fitbrictrr r- ln¿lntener el arrtogobierrro
clel ciucl¿clano (Rose. 1990r Nliller'& Rose. 1990).

Ge tt colo gío s cl alsu j cto


.l
En el con'r1-rlejo de pocleres sobre la sulletiviclarl inrplicaclo en krs clis-
:-
positivos moclern«rs cle regrrlircitin. "lo s<lcial" ha tr¿u¿xlo la topografía
.\
tle uttestra ¿hrt¿r. Solnos gobenraclos ¿r trar'és cle l¿ clelic¿rl¿r v rrinrrci«r-
-s
s¿t irtfiltr¿ci<iu clc' los suellos cle l¿rs ¿nrtoriclacles v rlel e.ntusi¿s¡n<¡ cle l¿t
.)-
cs1tt t'tisc ert nuestras realiclarles, rruestr«ls tleseos v nuestr¿s visi<ltes
t-
¿tcerc¿t tle la libertacl. Escribir rur¿ gene¿rkrgía de. lrr psicol«reíir en tales
térnrinos no es, silr erul¡argo, solneterl¿r a rur¿t crítica. Lrr genealogíir
no brrsca revelar l¿ f¿tlsedad sino descñbir la constitucirill dt, I¿s ver-
.,1
tl¿cles. No preeunta por r¡ré, sino crinto. No irnierte siltplernerrte
t¿l
las jertrrr¡rí¿ls \¡erslrs aplicackr. ¿rlln¿l versrrs cuel?o. (1tica ver-
le -pllro
pcrsonal-, sino «Ire las {l'¿glrrent¿.
sus ¿clurinistr¿rción, soci¿rl versrrs
lo
Atiencle a l«r "rn¿rrginal" r.nrrrestr¿t srr ctntr¿rlidad; cle l«r putokiuico

(Ja¡lítul«r 3. La psicologí¿r conlo ciencia soci¿l - l5l


¡
conro coudición cle lO uorm¿rl, de aquello consicler¿rdo innecesario. Capítulo 4
prrrrr mostrar cómo, a tr¿n.és de ello, lo esenci¿rl ha sido fabric¿clo. y
Expertise y téc
si la geneirkrgía ile la psicología pone en prinrer pla,o arluello que la
ortocl«rxi¿i consicler¿r inrpuro \' \'ergonz¿lnte, no 1o h¿rce pzrra clenun-
ciarlo sino (lue p¿r¿r cliagnosticar]o, como rln p¿rso prelinintir para ltr
prescripcióll cle ¿urtíckrtos.

Desde rnediaclos c

cas y capitalistas cl
la conduct¿r hum,u
psicológica. Erper
cas se han vuelto i
procesos electoralt
en la sexualiclacl. er

tivo legal y punitirr


ciudadanos de dic.l
cuando buscan co
la condición hunr¿
üüendo así sus ri
surgirniento cle "lo
siderable importar
que habitauros h¿rc

Ntunerosos ¿r'

psicológico r lo hr
1960; Bourclieu. I
Independienterner
estas representacic
los saberes v disg
de otros cantbios
mente, han tenclic
un rnalestar cu]tur

152 - La invención del sí misnro

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