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Las interacciones de las personas, los grupos y las organizaciones casi siempre
involucran alguna especie de conflicto. Las personas nunca tienen objetivos e
intereses idénticos, y estas diferencias de objetivos y de intereses siempre producen
alguna forma de conflicto. El conflicto es inherente a la vida de todo individuo y es
parte inevitable de la naturaleza humana.
El conflicto existe cuando una de las partes trata de alcanzar sus propios objetivos,
que están relacionados con los de la otra parte, la cual interfiere con la que está
tratando de alcanzar sus objetivos. La interferencia puede ser activa con acciones
para interponer obstáculos, bloqueos o impedimentos o omitiendo una acción.
El conflicto involucra el uso del poder en la confrontación, es decir, en las disputas
en torno a intereses encontrados. Debe ser manejado ya que de lo contrario afectará
negativamente el comportamiento de la organización.
Niveles de gravedad del conflicto
Cada conflicto es un conflicto en sí mismo. Además de sus diferentes
características, también existen diferentes niveles de gravedad. El conflicto puede
ocurrir con tres niveles de gravedad: percibido, vivido y manifiesto.
La diferenciación.
Los recursos limitados y compartidos.
La interdependencia de las actividades.
Fases de salida y resolución del conflicto
El comportamiento conflictivo puede producir una reacción normal, y la salida del
conflicto está compuesta por tres fases: la espera, la tensión y la resolución.
Por otra parte, la resolución del conflicto puede ocurrir en razón de procesos como:
Negociación
La negociación es el proceso de tomar decisiones conjuntas cuando las partes
involucradas tienen preferencias diferentes. Gran parte de la comunicación que
ocurre en el interior de las organizaciones implica que las personas tengan la
suficiente habilidad para negociar. Las partes involucradas deben llegar a alguna
suerte de acuerdo o consenso respecto a cuestiones o circunstancias que las
afectan directa o indirectamente.
Para que exista una integración de los intereses en disputa, el proceso de
negociación debe incluir cinco pasos:
1. Preparación y planeación
Es la etapa preliminar de la negociación. Durante ésta se deben hacer preguntas
como: ¿De qué naturaleza es la negociación? ¿Quién está involucrado en ella?
¿Cómo percibe esa parte de la negociación? ¿Cuáles son las metas y los resultados
que debemos alcanzar? ¿Cuán es la forma de diseñar una estrategia para
alcanzarlos?
3. Aclaraciones y justificaciones
Después de presentar las propuestas iniciales, se inicia esta etapa en la que las dos
partes explican, amplían, esclarecen, refuerzan y justifican sus exigencias
originales. En lugar de una confrontación, es mejor que ambas partes se informen
y expliquen mutuamente cuáles son las cuestiones más importantes respecto a las
exigencias mutuas. Si fuera necesario, se deben presentar documentos y registros
al respecto.
5. Fechas y aplicación
Es la etapa final del proceso; en ella se formaliza el acuerdo que fue negociado.
Antes del cierre de la negociación es recomendable haber tratado todos los puntos
relacionados con la misma, para que, de ese modo, evitemos que la otra parte
pueda realizar demandas de último momento.
Bibliografía
Chiavenato, I. (2009). Comportamiento organizacional. México: Mc Graw Hill.