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FORMULA DENUNCIA

AL EXCELENTÍSIMO TRIBUNAL DE ÉTICA DEL

COLEGIO DE ABOGADOS DE SAN RAFAEL:

LEONARDO PASCCON, abogado de la matrícula


5674, constituyendo domicilio legal en Blas Parera 1220 de la Ciudad de San Rafael,
domicilio electrónico en lpasccon@gmail.com, ante Ud me presento y digo:

Que vengo a realizar formal denuncia con graves


conductas éticas cometidas por la abogada Maria José Hernandez, matriculada en
vuestra circunscripción, las cuales son aún más relevantes institucionalmente ya
que la susodicha es representante ante la Federación de Colegios de Abogados de
la Provincia de Mendoza, y Consejera titular ante el Consejo de la Magistratura de
Mendoza.

En mérito a la brevedad reproduzco la carta documento


remitida a la misma que detalla los hechos y faltas éticas cometidas:

“Atento que Ud ha referido falsamente a un miembro de la Federación de Colegios


de Abogados de Mendoza que por Ética profesional (que UD claramente no tiene)
omito nombrar en esta instancia; de que Ud habría sido víctima de algún tipo de
maltrato de mi parte; refiriéndole que me bloqueaba de las redes de mensajería para
evitar que siga; lo cual no solo es falaz si no que es una tentativa de coacción en mi
contra utilizando a un colega como autor mediato de dicha coacción y de su
inescrupulosidad es que le notifico que Ud ha incurrido en las siguientes acciones
que podrían constituir graves faltas al Código de Ética, al Código Penal y al
Reglamento de la Federación conforme las razones que paso a exponer:

No sólo que es falso que haya tenido ningún tipo de maltrato de mi parte; si no todo
lo contrario; UD ha realizado dicha acción para evitar que yo plantee su remoción
del Consejo de la Magistratura y Federación de Colegios de Abogados en virtud de
sus graves e inescrupulosas acciones; a saber: utilizar un cargo como es ser
Consejera titular del Consejo de la Magistratura en representación del Colegio de
Abogados de San Rafael, que como cargo electivo la torna en representante de
todos los abogados matriculados en la provincia con el sólo fin de obtener un cargo
político rentado; lo cual me manifestó numerosas veces en varios mensajes como
a UD le consta.

Cuestión que intentó hacer y fue denunciado por un colegiado ante la Junta Electoral
de la Federación de Colegios de Abogados de Mendoza como ante el Asesor de
Gobierno de la Provincia; circunstancia que sabía iba a poner en consideración en
la Reunión de Federación del día 07 de julio del corriente año. Asimismo Ud incurrió
en faltas éticas gravísimas al votar la remoción de mi persona y del Dr. Miguel
Bondino en el Consejo de la Magistratura por faltas al reglamento el día 04 de julio
del corriente año de manera clandestina e inconsulta; para luego votar mi ratificación
en el cargo el día 07 de julio pudiendo hacerla incursa en el delito de falsedad
ideológica al mentir en dicha reunión y manifestar que la orden del día se había
pasado a un cuarto intermedio para resolver y allí se votó mi ratificación en el cargo
junto con la del Dr. Miguel Bondino, como así también una reforma en el Reglamento
del Consejo que ya había sido resuelto y no notificado; para luego irse corriendo de
la reunión cuando evidentemente le informaron que me iban a notificar la resolución
del día 04 de julio que Ud. votó como así también que la misma sea presentada
suscripta por los cuatro presidentes de los colegios que la integran y los cuatro
Consejeros de la Magistratura; notificación que efectivamente sucedió 1 hora
después (13,30 hs).. Pero por si esto fuera poco; Ud el día 04 de julio me realizó
una llamada mientras estaba reunida con la Dra Teresa Day (cuestión innegable y
publica ya que estaban todos los Ministros de la Corte presente al estar tratando la
denuncia por los exámenes de ingreso al Poder Judicial)) para decirme si yo podía
garantizar que el Dr. Marcelo Gutierrez del Barrio preguntara de determinada
manera en los exámenes; cuestión que ante mi asombro por tal comportamiento
cortó la llamada. Me sorprendió dicha conducta por qué el día 01 de junio del
corriente año UD se reunió personalmente en su despacho en el Polo Judicial, para
que le explique cómo funcionaba un examen del Consejo porque lo desconocía
(acreditado en video de audiencia de debate). Esto no sólo es irregular si no que
vulnera el reglamento del Consejo que establece que las resoluciones se toman por
el voto de cada estamento representado en sesión fijada al efecto y cuyo contenido
es secreto.

Es decir que UD estuvo “negociando” al mediodía su voto con otro estamento contra
los intereses que representa. A su vez UD vulnera todas las normas éticas al votar
mi remoción por una causal individual como la que se me imputa en la resolución
(Artículo Nº 15: REMOCIÓN. El Consejo de la Magistratura podrá disponer la
remoción de cualquiera de los integrantes de las Comisiones Asesoras por
incumplimiento injustificado de las obligaciones a su cargo contenidas en el
presente Reglamento…) imputándome falazmente una falta a mi conducta y
deberes (ya que la Resolución refiere que: “…motivado en los sucesivos reclamos
informales que algunos de los Consejeros recibíamos por parte de los aspirantes y
conforme las facultades que dispone el Art. 32 del Reglamento..”), y ocultando
cuestiones de las que había tomado conocimiento con anterioridad y hasta simuló
conforme surge de lo ya relatado. Ténganse en cuenta que le imputa por ejemplo al
Dr. Miguel Bondino una falta en forma similar a mi cuando el mismo no participó en
el examen a Fiscal de Instrucción.

Asimismo en dicha resolución se me imputa que según lo resuelto por Ud con su


voto, lo siguiente: , “tuvimos la oportunidad de presenciar un examen oral a
aspirantes a Fiscal de Instrucción, advirtiendo que en el desarrollo del examen
mencionado no se daba cumplimiento a los parámetros establecidos por la
reglamentación vigente”. Lo cual justamente respecto a mi persona que es quien Ud
representa es manifiestamente falso. En primer término el Dr. Javier Pons;
Consejero Titular también por el mismo estamento tanto como yo no nos
encontrábamos en dicho examen. Llegamos a posteriori; testigo de ello es la Dra.
Avila, esposa del Dr. Fernando Guzzo que acababa de rendir unos minutos antes y
estaba en la planta baja del edificio. Por lo tanto ni el Dr Pons ni yo estábamos
presentes, ni Ud notificó de forma alguna dicha circunstancia.

Por lo expuesto, le explicaré en forma coloquial para que Ud entienda el contenido


de la presente y de sus acciones:

1.- Ante la gravedad de su accionar me veo en la obligación de denunciar sus faltas,


no puedo no hacerlo. No es una cuestión personal si no que hace a mi obligación
como abogado del Foro (Código de Ética: 61. De censurar la inconducta de los
colegas. Es deber del abogado denunciar sin vaci1ación ante el Colegio o ante los
magistrados según el caso, la notoria inconducta o deslealtad del colega, pues ello
afecta a la dignidad de la profesión, pero previamente agotará las instancias ante
dicho colega previniéndole de las medidas a adoptar.)

2. El cargo que Ud ostenta en el Consejo de la Magistratura, a diferencia del resto


de estamentos, es democrático: Ud fue elegida en un proceso electoral que le
concede derechos y obligaciones. A su vez, el cargo que yo encarno como el Dr.
Miguel Bondino es por elección de los miembros de la Federación de Colegios de
Abogados; no por Ud. Por lo tanto, así como yo no podría obligarla a renunciar si no
fuera por un proceso disciplinario, ya que Ud representa a un colectivo encarnado
por todos los colegiados de la Provincia, Ud no puede en forma incosulta resolver
sobre la destitución de un miembro propuesto por la Federación. Si esto no fuera
así, el equilibrio constitucional en el Consejo de la Magistratura al integrarse con
distintos estamentos no tendría razón de ser. Salvo que conforme lo prescribe el art.
150 en remisión al art. 109 de la Constitución Provincial, Ud haya tomado la decisión
como ciudadana y entiende que mi conducta es la descripta por la norma citada (Art.
109 - El gobernador de la Provincia y sus ministros, el vicegobernador, los miembros
de la Suprema Corte y el procurador de ésta, son acusables en juicio político ante
la Legislatura por mal desempeño, desorden de conducta, faltas o delitos en el
ejercicio de sus funciones o por crímenes comunes. Cualquier habitante de la
Provincia, en pleno goce de su capacidad civil, puede presentar su acusación a los
efectos de provocar el enjuiciamiento…); es decir que más grave aún sería su falta
ética no solo por una acusación infundada gravísima, si no por no brindarme el
derecho mínimo a defenderme como lo prevee la citada norma.

3. Mucho más grave es si Ud tiene un mandato constitucional de representar a los


abogados de la matrícula, y en su lugar por intereses espúreos negociara su voto
con otro estamento. Le debe sonar a un delito penal que estudió en la facultad. Más
sabiendo al asumir (o debería haberlo sabido) que su cargo es ad honorem.
Cualquier interés particular en dicho cargo es inaceptable.

4. A su vez, el Código de Ética le impone que antes de tomar una acción contra un
colega debe intentar una vía conciliatoria e informarlo. Si Ud conocía que habían
denuncias y desconoce cómo funciona el Consejo de la Magistratura, debió
informarlo previamente. Como ejemplo, en la reunión anterior al del día 04 de julio,
casualmente cuando Ud no asistió y lo hizo la Dra. Atencio, fue solicitado antes de
reformar el Reglamento del Consejo por los representantes de los abogados que
sea citado quien suscribe a fin de dar una explicación de cuáles son las
características del examen en Materia Penal.

5. A fin de ser más gráfico: más allá de que consista o no un delito penal (cuyo dolo
no puede ocultar ya que es abogada, se supone que conoce las normas básicas),
su conducta al mentir poniéndose falsamente en una condición de víctima que es
inversa: Ud me acosa a mi y varios miembros de la Federación de Colegios de
Abogados para conseguirle un cargo desde el inicio de su mandato, intentó utilizar
a un colega que es amigo y referente de nuestro Colegio de Abogados de la Primera
Circunscripción, y así tratar de evitar que pueda dar cumplimiento a mi deber ético
de denunciar lo ocurrido, además de ser una conducta inmoral, es totalmente
contraria a la base del trato entre colegas (Código de Ëtica: 56. De la fraternidad,
lealtad, ayuda y respeto recíprocos “Entre los abogados debe haber fraternidad,
lealtad y respeto recíproco, que enaltezcan la profesión, sin que en ellos influyan el
encono o animadversión de las partes. Esto implica: 1) Evitar los personalismos.
respetar la dignidad del colega y hacer que se la respete…”)
Por lo expuesto, y conforme lo dispuesto por el art. 61 del Código de Ética ya citado,
es que le solicito cese con su conducta, y asuma las consecuencias de sus actos
con la lealtad y probidad que nos obliga nuestro juramento para ejercer el cargo de
abogado.”

Ofrece prueba:

A los fines de acreditar dichas faltas ofrece como prueba: Instrumental: copia de la
carta documento remitida a la misma y nota presentada en el mes de mayo del
corriente mes y año.

Asimismo se requiera a la federación de Colegios de abogados de Mendoza el acta


de fecha 7 de julio del corriente año, que acredita que la misma ha hecho incurrir en
falsedad ideológica a la misma en dicha reunión.

Se requiera informe a Asesoría de Gobierno de la Provincia a fin de que informe si


se inició los trámites para que la misma sea la delegada de asesoría de gobierno en
San Rafael, y si no le fuere remitidos expedientes para compulsar en dicha etapa
previa a su contratación.

Se ofrece como prueba testimonial al Dr. Javier Conrado Pons, a fin de acreditar los
hechos aquí relatados.

Atento la gravedad de los hechos relatados solicito sea tratado con Urgencia el
presente ya que la misma ocupa dos roles institucionales de suma importancia en
representación de vuestro colegio.

Saludo atte.

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