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Este documento presenta un protocolo de señales de alerta del trastorno del espectro autista en niños de 0 a 5 años. El protocolo lista varias señales de alerta divididas por grupos etarios, como falta de contacto visual, no señalar objetos, no imitar gestos, problemas con el lenguaje y la sociabilidad. El propósito es ayudar a detectar posibles casos de autismo para que puedan ser evaluados de manera más exhaustiva, pero no sirve para hacer un diagnóstico.
Este documento presenta un protocolo de señales de alerta del trastorno del espectro autista en niños de 0 a 5 años. El protocolo lista varias señales de alerta divididas por grupos etarios, como falta de contacto visual, no señalar objetos, no imitar gestos, problemas con el lenguaje y la sociabilidad. El propósito es ayudar a detectar posibles casos de autismo para que puedan ser evaluados de manera más exhaustiva, pero no sirve para hacer un diagnóstico.
Este documento presenta un protocolo de señales de alerta del trastorno del espectro autista en niños de 0 a 5 años. El protocolo lista varias señales de alerta divididas por grupos etarios, como falta de contacto visual, no señalar objetos, no imitar gestos, problemas con el lenguaje y la sociabilidad. El propósito es ayudar a detectar posibles casos de autismo para que puedan ser evaluados de manera más exhaustiva, pero no sirve para hacer un diagnóstico.
(0-5 AÑOS) El siguiente protocolo te servirá para saber qué observar en los niños dependiendo de su edad. Cuando un niño presenta varias de estas señales de alerta, entonces es posible sospechar de autismo. PERO RECUERDA: este protocolo no es exhaustivo y no sirve para hacer un diagnóstico. Su función es exclusiva para detectar señales de alerta, y así saber si debes referir o no a una niño para una evaluación más exhaustiva.
Un inmenso abrazo y deseándote siempre lo mejor,
David Vásquez www.neuropsicologiard.com/alertaautismo
Señal de Alerta Presente:
¿sí o no? Antes de los 12 meses: El niño no dirige la mirada a sus familiares cercanos o cuidadores. No demuestra interés porque lo carguen o jueguen con él. No muestra reacción de interés frente a juegos sencillos. No siente la “ansiedad ante extraños” a partir de los 9 meses. A partir del 1er año: Sigue sin mantener el contacto ocular. No reacciona cuando se le llama por su nombre. No señala los objetos cuando los quiere. Muestra una respuesta “atípica” frente a estímulos auditivos (ej. Se tapa los oídos o se acerca mucho a las bocinas). No imita los gestos o acciones de los demás (ej. Decir adiós con las manos). Entre los 18 – 24 meses Sigue sin señalar objetos para pedir algo. No sigue las instrucciones o las miradas de los adultos para aprobación. Presenta un retraso en la adquisición del lenguaje expresivo y comprensivo. No tiene juego simbólico (ej. No fije que sus muñecos hablan entre sí). No tiene juego funcional (ej. No usa el juego para representar actividades diaria) No muestra interés por los chicos de su edad. No sabe expresar sus emociones por medio de palabras. A partir de los 36 meses Ausencia o dificultades en el lenguaje (receptivo y expresivo) Uso de ecolalia Problemas con la prosodia o ritmo alterado del lenguaje (ej. Habla robótica) Dificultades en el uso de la sonrisa social. Sigue sin mostrar interés por los chicos de su edad. Muestra una marcada insistencia por las rutinas y hacer siempre lo mismo. Movimientos extraños y repetitivos (ej. Aleteo con las manos, caminar en puntillas, etc.). Las normas sociales le producen confusión o se le dificulta seguirlas (ej. habla muy alto, dice cosas inapropiadas sin demostrar culpa, etc.). Rabieta ante los cambios de su rutina habitual.
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