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Proyecto

Sistema Óseo

8: A

Biología
Biología
En este proyecto mostraremos todo lo que tiene que
ver con el sistema óseo, ejercicio físico, hábitos
saludables y nutrición.

Integrantes:
 David Santiago Díaz Fernández
 Juan Diego Ulloque Peña
 Javier Eduardo Vargas Ardila

Sistema Óseo
¿Qué consecuencias o efectos generan la mala
nutrición y malos hábitos en el sistema óseo?

Al terminar esta cartilla podremos explicar las


consecuencias que puede tener no tener unos buenos
hábitos, no hacer ejercicio físico y tener una mala
nutrición.

Prueba Diagnostica
1. ¿Cuáles son las funciones principales de los
huesos del cuerpo humano?
a. Sostén del cuerpo y sus partes blandas
b. Transmisión de vibraciones
c. Almacén metabólico de sales y minerales
d. Armazón que protege y mantiene la mortologia
e. Efectuar el desplazamiento de la sangre
f. Todas las anteriores

2. ¿Cómo crees que afecta el no nutrirse bien al


sistema óseo?
3. ¿Cuál es el número de huesos en una persona
adulta?
a.200
b.400
c.152
d.206

4. ¿Cómo crees que afecta el no hacer ejercicio


físico al sistema óseo?
¿Qué es el sistema
óseo?
El sistema óseo es una estructura compuesta por los 206 huesos del
esqueleto humano, así como los cartílagos, ligamentos y tendones
que les permiten conectarse adecuadamente a la musculatura o a
otros huesos.

El sistema óseo, junto al muscular y al articular, constituye el


aparato locomotor del cuerpo humano, es decir, el que le permite
el movimiento preciso y coordinado.

Todos los mamíferos cuentan con un sistema óseo interno; es decir,


con un endoesqueleto. Los huesos en estas especies se hallan en el
interior del cuerpo. Los artrópodos, en cambio, tienen un sistema
óseo externo o exoesqueleto: sus piezas duras se hallan fuera del
cuerpo y protegen los órganos que sí están en el interior del
organismo.
EL sistema óseo está
conformado por:
 Huesos. Estructuras rígidas, mineralizadas a partir de calcio
y otros metales, son las partes más duras y resistentes del
cuerpo humano y de los animales vertebrados. En su interior,
además, se halla la médula que cumple con funciones
hematopoyéticas (se crean los glóbulos rojos sanguíneos).
 Cartílagos. Los cartílagos se encuentran en los extremos de
los huesos, protegiéndolos al servirles de amortiguación, para
que uno no choque con otro, evitando así el desgaste. Se
trata de estructuras flexibles y gruesas, compuestas
principalmente de colágeno.
 Ligamentos. Tejidos fibrosos muy resistentes, densos y
elásticos, que unen los huesos entre sí en los puntos de
rotación que son las articulaciones. Así, es vital para el
movimiento, pero también para evitar que los huesos se
salgan de su lugar o se muevan antinaturalmente.
 Tendones. Así como los ligamentos, se trata de tejidos
fibrosos gruesos y elásticos, que unen la musculatura a las
piezas rígidas de los huesos, permitiendo que la fuerza de las
células musculares se transmita a los huesos y posibilitando
así el movimiento voluntario.
¿Qué es la nutrición?
La nutrición es el proceso mediante el cual nuestro cuerpo obtiene,
asimila y utiliza los nutrientes necesarios para su correcto
funcionamiento, crecimiento y desarrollo. Es un aspecto
fundamental para mantener una buena salud y bienestar a lo largo
de la vida.
Los nutrientes son sustancias que se encuentran en los alimentos y
que nuestro organismo necesita para llevar a cabo diversas
funciones vitales. Los principales grupos de nutrientes son:
1. Carbohidratos: Son la principal fuente de energía para el cuerpo.
Se encuentran en alimentos como cereales, pan, arroz, pasta, frutas
y verduras.
2. Proteínas: Son esenciales para el crecimiento, reparación y
mantenimiento de los tejidos del cuerpo, como los músculos y
órganos. Se encuentran en alimentos como carnes, pescados,
huevos, legumbres y productos lácteos.
3. Grasas: Proporcionan energía y son esenciales para la absorción
de algunas vitaminas y la protección de órganos vitales. Se
encuentran en alimentos como aceites, mantequilla, frutos secos y
aguacates.
4. Vitaminas: Son compuestos orgánicos que regulan diversas
funciones metabólicas y son esenciales para el crecimiento y
desarrollo adecuado del cuerpo. Se encuentran en una variedad de
alimentos.
5. Minerales: Son elementos inorgánicos necesarios para funciones
como la formación de huesos, la contracción muscular y la
regulación de la presión arterial. Se encuentran en alimentos como
frutas, verduras, carne y lácteos.
6. Agua: Es esencial para mantener la hidratación del cuerpo y para
que se lleven a cabo numerosas reacciones químicas en el
organismo. Se encuentra en bebidas y en una gran cantidad de
alimentos.
Una alimentación equilibrada y variada es clave para asegurar que
nuestro cuerpo reciba todos los nutrientes necesarios. Además, la
nutrición también se relaciona con otros aspectos como la elección
de alimentos, el tamaño de las porciones, los horarios de comida y
la forma en que se preparan los alimentos.
Una buena nutrición no solo se trata de consumir alimentos
nutritivos, sino también de mantener una dieta adecuada a
nuestras necesidades individuales y hábitos de vida. Es importante
consultar con un profesional de la salud, como un nutricionista,
para recibir asesoramiento personalizado y mantener una dieta
equilibrada y saludable.
Clasificación de nutrición
La nutrición puede clasificarse de diversas formas según los
criterios que se utilicen. A continuación, te presento algunas de las
clasificaciones más comunes:
1. Nutrición según el origen de los nutrientes:
- Nutrición autótrofa: Es propia de los seres vivos capaces de
producir su propio alimento mediante la fotosíntesis o la quimio
síntesis. Es típica de las plantas y algunas bacterias.
- Nutrición heterótrofa: Es característica de los seres vivos que no
pueden producir su propio alimento y deben obtener los nutrientes
consumiendo otros organismos. Incluye a los animales, hongos y la
mayoría de las bacterias.
2. Nutrición según el tipo de alimentos consumidos:
- Nutrición herbívora: Se basa en el consumo de plantas y
vegetales.
- Nutrición carnívora: Se basa en el consumo de carne y tejidos
animales.
- Nutrición omnívora: Implica el consumo de una amplia variedad
de alimentos, tanto vegetales como animales.
3. Nutrición según la función de los nutrientes:
- Nutrición energética: Se refiere a los nutrientes que
proporcionan energía, como los carbohidratos, grasas y proteínas.
- Nutrición reguladora: Incluye los nutrientes que intervienen en
procesos metabólicos y regulan funciones del organismo, como las
vitaminas y minerales.
- Nutrición estructural: Se relaciona con los nutrientes que
forman parte de los tejidos y estructuras corporales, como las
proteínas.
4. Nutrición según los requerimientos en la dieta:
- Nutrición básica: Hace referencia a los nutrientes esenciales que
deben estar presentes en la dieta para mantener la salud.
- Nutrición complementaria: Incluye aquellos nutrientes que no
son esenciales pero que aportan beneficios adicionales para la
salud.
5. Nutrición según el momento del ciclo de vida:
- Nutrición prenatal: Se enfoca en los nutrientes necesarios
durante el embarazo para el desarrollo adecuado del feto.
- Nutrición infantil: Considera los requerimientos nutricionales en
los bebés y niños pequeños para un crecimiento y desarrollo
óptimos.
- Nutrición en la tercera edad: Se refiere a las necesidades
nutricionales de las personas mayores para mantener una buena
salud y prevenir enfermedades.
Estas son solo algunas de las clasificaciones más comunes de la
nutrición. Cabe mencionar que la nutrición es un campo amplio y
complejo, y la clasificación puede variar según el enfoque y
contexto específico que se esté considerando.
¿Cómo afecta la nutrición
al sistema óseo?
La nutrición desempeña un papel fundamental en la salud y el
mantenimiento del sistema óseo. Los huesos son tejidos vivos que
están en constante renovación y requieren una variedad de
nutrientes para mantenerse fuertes y saludables. Algunos de los
nutrientes más importantes para el sistema óseo son:

1. Calcio: El calcio es esencial para la formación y el mantenimiento


de huesos fuertes. Una ingesta adecuada de calcio durante la
infancia y la adolescencia es especialmente importante para
alcanzar una masa ósea óptima y reducir el riesgo de osteoporosis
en la edad adulta.
2. Vitamina D: La vitamina D ayuda al cuerpo a absorber el calcio
de los alimentos y contribuye a la mineralización del hueso. Una
deficiencia de vitamina D puede conducir a una absorción
deficiente de calcio y aumentar el riesgo de debilidad ósea.
3. Fósforo: Junto con el calcio, el fósforo es un componente clave
de la estructura mineral de los huesos. Ambos nutrientes trabajan
en conjunto para mantener la integridad ósea.
4. Magnesio: El magnesio es esencial para la síntesis de proteínas y
para la activación de enzimas que están involucradas en la
formación ósea.
5. Vitamina K: La vitamina K es necesaria para la síntesis de
proteínas que regulan la mineralización del hueso.
6. Proteínas: Las proteínas son componentes estructurales
fundamentales del hueso y contribuyen a su fortaleza y resistencia.
Para mantener un sistema óseo saludable, es importante llevar una
dieta equilibrada que incluya una variedad de alimentos ricos en
calcio, vitamina D y otros nutrientes esenciales para la salud ósea.
Además, mantener un estilo de vida activo y realizar ejercicio con
carga de peso también es beneficioso para estimular la formación y
fortaleza de los huesos. Si esto no es realizado así y hay mala
nutrición podría llegar a tener efectos negativos en el cuerpo
incluyendo EL SISTEMA OSEO.
¿Qué son los hábitos
saludables?
Los hábitos saludables son comportamientos y prácticas que
contribuyen a mantener una buena salud física y mental. Estos
hábitos tienen un impacto positivo en el bienestar general y
pueden ayudar a prevenir enfermedades crónicas y mejorar la
calidad de vida. Algunos ejemplos de hábitos saludables incluyen:
Es importante recordar que cada persona es única, por lo que los
hábitos saludables pueden variar según las necesidades y
preferencias individuales. Consultar con un profesional de la salud
puede ser útil para obtener orientación personalizada y apoyo en la
adopción de hábitos saludables.
Enumera los hábitos
saludables
1. Alimentación equilibrada: Consumir una dieta variada y nutritiva
que incluya una amplia gama de alimentos, como frutas, verduras,
granos integrales, proteínas magras y grasas saludables.
2. Actividad física regular: Mantener una rutina de ejercicio que
incluya actividades cardiovasculares, ejercicios de fuerza y
flexibilidad para mantener el cuerpo activo y en buena forma.
3. Descanso adecuado: Dormir lo suficiente y tener un horario
regular de sueño para permitir que el cuerpo y la mente se
recuperen y funcionen de manera óptima.
4. Evitar el tabaco y el consumo excesivo de alcohol: Ambos
hábitos están asociados con una serie de problemas de salud y
reducir o eliminar su consumo puede tener un impacto positivo
significativo.
5. Manejo del estrés: Aprender técnicas de relajación, como la
meditación, el yoga o la respiración profunda, para reducir los
niveles de estrés y mejorar el bienestar emocional.
6. Mantenerse hidratado: Beber suficiente agua durante el día para
mantener una buena hidratación.
7. Prácticas de higiene adecuadas: Lavado de manos regular,
cepillado y uso de hilo dental para mantener una buena higiene
oral, y prácticas de higiene personal para prevenir infecciones y
enfermedades.
8. Mantener relaciones sociales y apoyo emocional: Mantener
conexiones sociales y una red de apoyo puede tener un impacto
positivo en la salud mental y emocional.
9. Realizar exámenes médicos regulares: Acudir a chequeos
médicos periódicos para detectar posibles problemas de salud de
manera temprana y prevenir complicaciones.
10. Evitar el sedentarismo: Reducir el tiempo sedentario y buscar
oportunidades para moverse durante el día, especialmente si se
tiene un trabajo o estilo de vida sedentario.
Consecuencias de los
hábitos saludables
Los hábitos saludables tienen una serie de consecuencias positivas
y beneficiosas para la salud física, mental y emocional de las
personas. Al no tener hábitos saludables estamos afectando a
nuestra salud y a nuestro cuerpo, al adoptar hábitos saludables,
podemos experimentar lo siguiente:
1. Mejora en la salud cardiovascular: Los hábitos saludables, como
seguir una dieta equilibrada y hacer ejercicio regularmente, pueden
reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como la
hipertensión arterial, enfermedades cardíacas y accidentes
cerebrovasculares.
2. Fortalecimiento del sistema inmunológico: Una alimentación
adecuada, ejercicio regular y descanso adecuado contribuyen a
fortalecer el sistema inmunológico, lo que nos ayuda a defendernos
de infecciones y enfermedades.
3. Control del peso: Los hábitos saludables pueden ayudar a
mantener un peso corporal saludable, lo que reduce el riesgo de
obesidad y problemas de salud relacionados.
4. Mayor energía y vitalidad: Una alimentación adecuada y el
ejercicio regular nos proporcionan la energía necesaria para
afrontar el día a día con vitalidad y mejorar nuestro rendimiento
físico y mental.
5. Mejora en la salud mental y emocional: El ejercicio físico, la
relajación y la gestión del estrés tienen un impacto positivo en la
salud mental, reduciendo la ansiedad, el estrés y la depresión.
6. Mejora en la calidad del sueño: Adoptar hábitos saludables
puede ayudar a mejorar la calidad del sueño, lo que se traduce en
un descanso más reparador y una mayor sensación de bienestar.
7. Reducción del riesgo de enfermedades crónicas: Los hábitos
saludables, como evitar el tabaco, reducir el consumo de alcohol y
llevar una dieta equilibrada, están asociados con una menor
incidencia de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2,
ciertos tipos de cáncer y enfermedades respiratorias.
8. Mejora en la función cognitiva: Una dieta saludable y el ejercicio
pueden tener efectos positivos en la función cerebral, mejorando la
memoria, el enfoque y el rendimiento mental.
9. Mayor longevidad y calidad de vida: Adoptar hábitos saludables
puede contribuir a una mayor esperanza de vida y una mejor
calidad de vida a medida que envejecemos.
Tipos de huesos
Los huesos son órganos rígidos y resistentes que forman el
esqueleto del cuerpo humano. El esqueleto proporciona soporte
estructural, protege órganos vitales, permite el movimiento y
participa en la producción de células sanguíneas en la médula ósea.
Los huesos también actúan como reservorios de minerales, como
calcio y fósforo.

Existen varios tipos de huesos en el cuerpo humano, clasificados


según su forma y función:

Huesos largos: Son más largos que anchos y se encuentran en


extremidades como brazos y piernas. Su función principal es
facilitar el movimiento. Ejemplos de huesos largos son el húmero
en el brazo y el fémur en el muslo.

Huesos cortos: Tienen dimensiones casi iguales en sus tres ejes y


proporcionan estabilidad y soporte a las articulaciones. Se
encuentran en la muñeca y el tobillo, como los huesos del carpo y
los huesos del tarso.

Huesos planos: Son delgados y planos y se encuentran en áreas


como el cráneo, las costillas y la pelvis. Los huesos planos protegen
órganos internos y proporcionan superficies para la inserción de
músculos.
Huesos irregulares: No tienen una forma definida y presentan
diversas protuberancias y crestas. Algunos ejemplos incluyen las
vértebras de la columna vertebral y los huesos faciales.

Huesos sesamoideos: Son pequeños huesos redondeados que se


encuentran dentro de los tendones cerca de las articulaciones. El
ejemplo más común es la rótula, ubicada en el tendón del
cuádriceps en la rodilla.

Los huesos están compuestos principalmente de tejido óseo, que es


una matriz extracelular dura y mineralizada compuesta
principalmente de sales de calcio y fósforo. El tejido óseo contiene
células especializadas, como osteoblastos y osteoclastos, que
regulan el proceso de formación y reabsorción ósea, manteniendo
el equilibrio entre la construcción y degradación del hueso a lo
largo de la vida.

Además de brindar soporte y protección, el sistema óseo también


cumple otras funciones importantes para el cuerpo humano:

Movimiento: Los huesos, en conjunto con los músculos y las


articulaciones, permiten el movimiento del cuerpo y la locomoción.
Almacenamiento de minerales: Los huesos actúan como
reservorios de minerales, especialmente calcio y fósforo,
liberándolos según las necesidades del cuerpo.

Producción de células sanguíneas: En la médula ósea, que se


encuentra en el interior de ciertos huesos, se produce la formación
de células sanguíneas, incluyendo glóbulos rojos, glóbulos blancos y
plaquetas.

Protección de órganos vitales: Los huesos protegen órganos


delicados y vitales, como el cerebro (protegido por el cráneo) y los
pulmones y el corazón (protegidos por la caja torácica).

En resumen, los huesos son estructuras fundamentales para el


funcionamiento del cuerpo humano, proporcionando soporte,
protección y movimiento, además de participar en la homeostasis
mineral y la producción de células sanguíneas. Mantener la salud
ósea a lo largo de la vida es esencial para una vida activa y
saludable.
Enfermedades
El sistema óseo puede verse afectado por diversas enfermedades
que pueden tener diferentes causas, síntomas y formas de
prevención. A continuación, mencionaré algunas de las
enfermedades más comunes del sistema óseo:

Osteoporosis:
Causas: La osteoporosis es una enfermedad caracterizada por la
pérdida de masa ósea y la debilitación del tejido óseo. Puede
ocurrir debido a factores genéticos, edad avanzada, deficiencia de
calcio y vitamina D, menopausia en mujeres, inactividad física,
tabaquismo y consumo excesivo de alcohol.
Síntomas: La osteoporosis generalmente no presenta síntomas en
las etapas iniciales, pero con el tiempo, puede causar dolor óseo,
fracturas espontáneas, disminución de la estatura y una postura
encorvada.
Prevención: Para prevenir la osteoporosis, es esencial llevar una
dieta equilibrada rica en calcio y vitamina D, mantener una
actividad física regular, evitar el tabaquismo y el consumo excesivo
de alcohol, y realizar chequeos médicos periódicos para su
detección temprana.
Artritis:
Causas: La artritis es un término general que se refiere a la
inflamación de las articulaciones. Puede tener diversas causas,
incluyendo factores genéticos, envejecimiento, lesiones articulares,
infecciones o un sistema inmunitario hiperactivo que ataque el
tejido articular.
Síntomas: Los síntomas comunes incluyen dolor, hinchazón, rigidez
y dificultad para mover las articulaciones afectadas.
Prevención: Si bien no es posible prevenir completamente la
artritis, mantener un peso saludable, realizar ejercicios de bajo
impacto para mantener la flexibilidad y fortaleza de las
articulaciones, y evitar lesiones articulares pueden ayudar a reducir
el riesgo.

Fracturas óseas:
Causas: Las fracturas pueden ocurrir debido a lesiones traumáticas,
como caídas, accidentes automovilísticos o práctica de deportes de
alto impacto.
Síntomas: Los síntomas de una fractura incluyen dolor intenso,
hinchazón, deformidad visible, dificultad para mover la extremidad
y en algunos casos, pérdida de función.
Prevención: Algunas medidas para prevenir fracturas incluyen el
uso adecuado de equipo de protección en deportes y actividades
de riesgo, mantener el hogar seguro para evitar caídas, y seguir
prácticas de seguridad en el trabajo.
Enfermedad de Paget:
Causas: La enfermedad de Paget es una afección en la cual el tejido
óseo se descompone y se reemplaza por hueso nuevo, pero de
forma anormal y más grande. La causa exacta es desconocida, pero
factores genéticos y virales pueden estar involucrados.
Síntomas: Puede provocar dolor óseo, deformidades óseas,
fracturas, y en algunos casos, puede afectar el sistema nervioso si
comprime nervios cercanos.
Prevención: No hay una prevención específica para la enfermedad
de Paget, pero un diagnóstico temprano y un tratamiento
adecuado pueden ayudar a controlar los síntomas y prevenir
complicaciones.

Enfermedades reumáticas:
Causas: Las enfermedades reumáticas son un grupo de afecciones
autoinmunes que afectan el sistema musculoesquelético. Las
causas específicas varían según el tipo de enfermedad, pero se cree
que factores genéticos y ambientales desempeñan un papel
importante.
Síntomas: Los síntomas pueden incluir dolor, inflamación, rigidez y
pérdida de la función en articulaciones y músculos.
Prevención: La prevención de las enfermedades reumáticas implica
mantener un estilo de vida saludable, evitando el tabaquismo,
manteniendo un peso adecuado y realizando actividad física
regular.
Es importante recordar que, ante cualquier síntoma o problema en
el sistema óseo, se debe buscar atención médica para un
diagnóstico adecuado y un tratamiento oportuno. La prevención y
el cuidado adecuado del sistema óseo pueden ayudar a mantener
la salud y la movilidad a lo largo de la vida.
Contradicciones (del ejercicio físico)

Aunque el ejercicio físico es beneficioso para la mayoría de las


personas y tiene efectos positivos en la salud, también puede
presentar algunas contradicciones o riesgos para ciertos individuos
o situaciones específicas. Algunas de estas contradicciones
incluyen:

Lesiones: Realizar ejercicio físico puede aumentar el riesgo de


lesiones musculares, articulares o ligamentarias, especialmente si
se realiza de forma incorrecta, con una técnica inadecuada o en
exceso.

Enfermedades crónicas: Algunas personas con ciertas


enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas,
pulmonares o articulares avanzadas, pueden tener limitaciones
para realizar ciertos tipos de ejercicio. En estos casos, es
fundamental consultar a un médico antes de comenzar cualquier
programa de ejercicios.

Embarazo: El embarazo es una etapa en la que el ejercicio debe ser


abordado con precaución. Algunas actividades de alta intensidad o
con riesgo de caídas pueden no ser seguras durante el embarazo,
por lo que es importante buscar orientación médica antes de
realizar ejercicio.
Desnutrición: El ejercicio intenso o prolongado puede tener efectos
negativos en personas que están desnutridas o no tienen una
ingesta calórica adecuada para soportar las demandas energéticas
del ejercicio.

Sobre entrenamiento: El entrenamiento excesivo puede conducir a


problemas de salud y lesiones. Es importante permitir suficiente
tiempo de recuperación entre sesiones de ejercicio y variar las
actividades para evitar el sobre entrenamiento.

Factores ambientales: El ejercicio en condiciones climáticas


extremas o en entornos peligrosos puede aumentar el riesgo de
problemas de salud, como deshidratación, golpe de calor o
hipotermia.

Trastornos de la alimentación: Las personas con trastornos de la


alimentación pueden estar en riesgo de problemas de salud
adicionales si se ejercitan de manera excesiva o inapropiada.

Problemas cardíacos: En ciertos casos, el ejercicio físico puede


desencadenar problemas cardíacos en personas con afecciones
subyacentes, como arritmias o enfermedades del corazón no
diagnosticadas.
Beneficios (del ejercicio físico)

El ejercicio físico regular ofrece una amplia gama de beneficios para


la salud, tanto a nivel físico como mental. Algunos de los beneficios
más importantes incluyen:

Mejora de la salud cardiovascular: El ejercicio aeróbico fortalece el


corazón y los pulmones, mejora la circulación sanguínea y reduce el
riesgo de enfermedades cardiovasculares, como hipertensión,
enfermedades coronarias y accidentes cerebrovasculares.

Control del peso: El ejercicio ayuda a quemar calorías y a mantener


un peso corporal saludable. También puede ayudar en la pérdida de
peso cuando se combina con una dieta equilibrada.

Fortalecimiento muscular y óseo: El ejercicio con carga, como el


levantamiento de pesas o ejercicios de resistencia, fortalece los
músculos y mejora la densidad ósea, lo que ayuda a prevenir la
pérdida de masa muscular y la osteoporosis.

Mejora de la flexibilidad y la movilidad: El estiramiento y ejercicios


de flexibilidad pueden mejorar la amplitud de movimiento de las
articulaciones, reducir la rigidez y mejorar la postura.
Reducción del estrés y mejora del estado de ánimo: El ejercicio
libera endorfinas, neurotransmisores que reducen el estrés y la
ansiedad, mejorando el estado de ánimo y promoviendo la
sensación de bienestar.

Aumento de la energía y la resistencia: La práctica regular de


ejercicio puede aumentar los niveles de energía y resistencia física,
lo que facilita las actividades diarias.

Mejora del sueño: El ejercicio puede favorecer un sueño más


profundo y reparador, lo que contribuye a una mejor calidad de
descanso.

En cuanto a los deportes preferibles, la elección del deporte


depende de las preferencias individuales, objetivos personales y
nivel de condición física. Algunos deportes que se destacan por sus
beneficios en términos de acondicionamiento físico y salud
incluyen:

Caminar y correr: Son actividades de bajo costo y fáciles de realizar


que mejoran la salud cardiovascular y promueven la pérdida de
peso.

Natación: Es un deporte de bajo impacto que ejercita muchos


músculos al mismo tiempo y mejora la resistencia cardiovascular.
Ciclismo: Ayuda a fortalecer las piernas, mejora la salud
cardiovascular y es una forma eficiente de desplazarse.

Entrenamiento de fuerza: El levantamiento de pesas y ejercicios de


resistencia son excelentes para aumentar la fuerza muscular y el
metabolismo.

Yoga: Mejora la flexibilidad, el equilibrio, la fuerza y ayuda a reducir


el estrés.

Pilates: Fortalece el núcleo y mejora la postura y la flexibilidad.

Es importante destacar que la clave para obtener los beneficios del


ejercicio físico es la regularidad y la consistencia. Además, antes de
comenzar cualquier programa de ejercicios, es recomendable
consultar con un profesional de la salud para asegurarse de que el
tipo de ejercicio elegido sea seguro y adecuado para su condición
física y salud en general.
Características
El ejercicio físico es una actividad planificada y estructurada que
involucra el movimiento del cuerpo para mejorar la salud, el estado
físico y el bienestar general. A continuación, se presentan algunas
características clave del ejercicio físico:

Intencionalidad: El ejercicio físico es una actividad realizada de


manera intencional y planificada, con el propósito de mejorar la
condición física, la fuerza, la resistencia o alcanzar objetivos
específicos relacionados con la salud.

Repetición y regularidad: Para obtener resultados y beneficios


duraderos, el ejercicio físico debe realizarse de forma regular y
consistente, a lo largo del tiempo. La repetición de las sesiones de
ejercicio permite al cuerpo adaptarse y mejorar progresivamente.

Variedad: Un programa de ejercicio físico eficaz incluye una


variedad de actividades que trabajen diferentes grupos musculares
y sistemas corporales. Esto evita el aburrimiento y reduce el riesgo
de lesiones por el uso excesivo de ciertos músculos.

Progresión: A medida que el cuerpo se adapta al ejercicio, es


importante aumentar gradualmente la intensidad, la duración o la
dificultad de las actividades para continuar desafiando al cuerpo y
seguir obteniendo beneficios.
Individualización: El ejercicio físico debe adaptarse a las
necesidades y capacidades individuales de cada persona. Cada
individuo tiene diferentes niveles de aptitud física, salud y objetivos
específicos, por lo que es importante personalizar el programa de
ejercicios en consecuencia.

Seguridad: La práctica segura del ejercicio es fundamental para


evitar lesiones y problemas de salud. Esto incluye calentar
adecuadamente antes de la actividad, utilizar equipo de protección
cuando sea necesario y seguir una técnica adecuada.

Balance: Un programa de ejercicios bien diseñado incluye


actividades que trabajen diferentes aspectos del
acondicionamiento físico, como la resistencia cardiovascular, la
fuerza muscular, la flexibilidad y el equilibrio.

Adaptabilidad: El ejercicio físico puede adaptarse a diferentes


entornos y condiciones. Puede realizarse en un gimnasio, al aire
libre, en casa o en grupo, según las preferencias y la disponibilidad
de cada individuo.

Beneficios para la salud: El ejercicio físico proporciona numerosos


beneficios para la salud, incluida la mejora de la salud
cardiovascular, la fuerza muscular, la flexibilidad, la función
pulmonar, la densidad ósea y la salud mental.
Componente mental: El ejercicio físico también puede tener un
impacto positivo en la salud mental, reduciendo el estrés, la
ansiedad y la depresión, mejorando el estado de ánimo y
aumentando la autoestima.

En resumen, el ejercicio físico es una actividad intencional y


planificada que se adapta a las necesidades individuales y se lleva a
cabo de manera regular para mejorar la salud y el bienestar
general. Es esencial practicar el ejercicio de forma segura y variada
para obtener los máximos beneficios y mantener la motivación a lo
largo del tiempo.
Evaluación Final:

1. Nombra 3 enfermedades del sistema óseo

_________________________________________________________________________

2. ¿Cuál de estos es un nutriente importante para el sistema óseo?

A. Calcio
B. Osteoclasto
C. Hierro
D. Fémur

3. Responde marcando V si es verdadero y F si es falso

A._____El esqueleto proporciona soporte y estabilidad a tu cuerpo y protege órganos


importantes.

B._____Solo los seres humanos tienen sistema óseo.

C._____El sistema óseo esta conformado por 206 huesos aproximadamente.


D._____El ejercicio físico es bueno en exceso.
4. Busca las siguientes palabras en la sopa de letras:

 Huesos
 Calcio
 Artritis
 Balance
 Minerales

A V G S B H J B U L S A
H U E S O S A U Ñ E Z S
V L Ñ J P L R H L M A D
L U V I A U T A G C E F
N O L N J Q R N H A R G
G M C L O E I A J L T H
Y E A E N A T S K C Y J
R Ñ G I V O I G K I U K
E T M A S H S T Z O P L

5. Explica ¿Qué pasaría si además de tener una mala nutrición tienes un mal
desempeño físico?
_________________________________________________________________________
_________________________________________________________________________

6. ¿Cuál de estos NO es un habito saludable?

A. Manejo del estrés


B. Dormir menos de 5 horas
C. Mantenerse hidratado
D. Alimentación equilibrada
7. Une las palabras según su relación

HABITO SALUDABLE FRACTURA OSEA


TIPO DE HUESO MAGNESIO
ENFERMEDAD ARAÑA
NUTRIENTE IMPORTANTE HUESO IRREGULAR
ARTROPODO DESCANSO ADECUADO

8. Complete las siguientes frases con estas palabras

 RIGIDOS
 SALUDABLES
 NUTRIENTES
 LIGAMENTOS

Los hábitos ________ tienen una serie de consecuencias buenas y beneficiosas para la
salud física, mental y emocional.

Los huesos son órganos ________ y resistentes que forman el esqueleto humano.

Los ________ son tejidos fibrosos muy resistentes y elásticos.

Una alimentación equilibrada y variada es clave para asegurar que nuestro cuerpo
reciba todos los ________ necesarios.

9. Encierra la opción que define los huesos irregulares

A. No tienen una forma definida y presentan diversas protuberancias y crestas.


B. Son delgados y planos y se encuentran en áreas como el cráneo, las costillas y la
pelvis.

C. Tienen dimensiones casi iguales en sus tres ejes y proporcionan estabilidad y


soporte a las articulaciones.

D. Son pequeños huesos redondeados que se encuentran dentro de los tendones


cerca de las articulaciones.

Y HASTA AQUÍ LLEGAMOS AL FIN DE


ESTA CARTILLA, ESPERO QUE ALLAN
ALCANZO EL OBJETIVO DE ESTA EL
CUAL ES APRENDER MAS SOBRE EL
SISTEMA OSEO DE NUESTRO CUERPO,
COMO CUIDARLO Y QUE PASA SI NO LO
HACEMOS.

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