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CICLO: X SECCIÓN: A
ICA-PERÚ
2023
INTRODUCCÓN
El término clonación describe una variedad de procesos que pueden usarse para
producir copias genéticamente idénticas de un ente biológico. El material copiado,
que tiene la misma composición genética que el original, se conoce como clon. Los
investigadores han clonado una gran variedad de materiales biológicos, entre ellos
genes, células, tejidos e incluso organismos enteros, tales como una oveja.
Dolly nació en el Instituto Roslin de Escocia el 5 de julio de 1996. Como suele ocurrir
en ciencia, el nacimiento del primer animal clonado a partir de una célula adulta no
fue casual, sino fruto del trabajo de decenas de investigadores a lo largo de los
años. Un gran logro cimentado por el conocimiento que habían generado
previamente otros científicos.
Dolly se creó mediante transferencia nuclear. A grandes rasgos, esta técnica tiene
dos pasos. En el primero, se toma un óvulo no fecundado y se le extrae el núcleo,
donde se encuentra el material hereditario. A continuación, se toma el núcleo de
otra célula y se introduce en el óvulo enucleado. Esta nueva célula contiene el
potencial de un óvulo fecundado para generar un nuevo individuo, pero las
instrucciones (el material hereditario, o su mayor parte, porque recordemos que las
mitocondrias también tienen ADN) de la célula donante.
La clave con Dolly, lo que la hacía realmente especial, es que el núcleo que se utilizó
era el de una célula adulta (concretamente, de una célula de glándula mamaria), lo
que se pensaba que no era posible ¿Por qué se pensaba así? Porque se trataba de
una célula diferenciada, lo que viene a ser una célula que ha tomado una serie de
decisiones moleculares dirigidas a hacerla más especializada. En aquel momento,
se pensaba que la toma de esas decisiones era irreversible.
Pero no penséis que fue fácil. Dolly fue el único embrión superviviente de 277
transferencias nucleares. Como dije antes, fue extraordinaria.
2.2.- Dolly y el envejecimiento
Cuando Dolly nació, aparentemente sana, una de las principales cuestiones para
los científicos fue si envejecería de forma normal. ¿Se habría reprogramado el
material hereditario de Dolly para olvidar completamente su estatus de adulto?
¿Podría haber algún efecto en el desarrollo y madurez de Dolly como consecuencia
de haber nacido de un núcleo celular de seis años de edad?
Una de las técnicas más antiguas y más simples es la inseminación artificial (IA).
Este procedimiento reemplaza la relación sexual en la pareja como medio para
lograr el embarazo y se utiliza, especialmente, para superar algunos casos leves de
infertilidad masculina y femenina. La inseminación artificial se puede realizar con el
esperma de la pareja (homóloga) o con el de un donante (IAD), también denominada
heteróloga Inseminación artificial homóloga y heteróloga Una de las técnicas más
antiguas y más simples es la inseminación artificial (IA). Este procedimiento
reemplaza la relación sexual en la pareja como medio para lograr el embarazo y se
utiliza, especialmente, para superar algunos casos leves de infertilidad masculina y
femenina. La inseminación artificial se puede realizar con el esperma de la pareja
(homóloga) o con el de un donante (IAD), también denominada heteróloga.
3.1 La inseminación artificial homóloga
María Victoria Famá sostiene que: “La inseminación homóloga se practica en los
casos en que, a pesar de ser ambos progenitores fértiles, la fecundación no es
posible a través del acto sexual, por diversas causas, tales como la impotencia del
hombre o el vaginismo de la mujer, trastornos endocrinos o del metabolismo,
secesiones vaginales que neutralizan los espermatozoides, alteraciones del cuello
del útero”.
Se realiza con gametos de ajenos a los cónyuges, i.e. de terceros, cedentes ―mal
llamados donantes―. El matrimonio es una institución cerrada en la cual se
consagra los fines de la familia y donde nacen los hijos. Cuando un cónyuge es
infértil, se recurre a un tercero para que ceda sus gametos, con lo cual surgen
diversos problemas, de orden personal, de pareja y, principalmente, de nexo filial.
Crea situaciones inseguras, puesto que no hay una relación jurídica reconocida para
exigirle al cedente el cumplimiento de obligaciones legales (alimentos), derechos
derivados (transmisión sucesoria), deberes naturales (reconocimiento), negación de
vínculos filiales (impugnación de paternidad), conculcación de derecho a la
identidad (origen biológico disociado), entre otros. Ello ocasiona una divergencia
entre el favor veritatis y el favor legitimatis, lo biológico se contrapone a lo legal. La
cesión de material genético implica tanto los productos biológicos del hombre
(espermatozoides) como de la mujer (óvulos) y encuentra su fundamento en la libre
disposición de los derechos de las personas, el derecho de fundar una familia, el
derecho a procrear, la igualdad y libertad
Una causa de preocupación relacionada con esta práctica y las nuevas técnicas
reproductivas que suponen la donación de material genético es la posible
implementación de programas eugenésicos, los cuales propondrían la utilización de
las técnicas con fines moralmente cuestionables, que no se vinculan con la
superación del problema de infertilidad. En este sentido, cabe hacer una distinción
entre fines terapéuticos y fines eugenésicos. Una técnica tiene un fin terapéutico
cuando se la utiliza para superar una enfermedad, un problema físico grave o una
malformación. Una técnica tiene un fin eugenésico, cuando se la utiliza para
controlar la “calidad” del niño que resulta, es decir, es un instrumento para elegir y
crear niños “a gusto del consumidor” (sexo, color de ojos, altura, coeficiente
intelectual, etcétera). Esta distinción es muy interesante porque, autorizadas estas
técnicas, permite discriminar entre ciertos casos más aceptables que otros. Por
ejemplo, una situación es recurrir a un donante para evitar transmitir al posible hijo
una terrible enfermedad genética, como la Corea de Huntington, y otra es buscar un
donante de determinado tipo físico o recurrir al banco de esperma de los premios
Nóbel con el fin de “mejorar” al niño o lograr una criatura de nivel superior.
La IA y la IAD son técnicas simples que no logran resolver gran parte de los
problemas de infertilidad, por ejemplo en los casos debidos a daños tubarios,
trompas dañadas, endometriosis severas hay que recurrir a la FIV. Además,
después de tres o cuatro intentos de inseminación59 se entra en una meseta y el
chance de lograr un embarazo es muy baja. Por ello la IA consiste en un primer
paso y sólo es utilizable cuando hay ciertos problemas leves de fertilidad.
Otro tipo de técnica más sofisticada es la fecundación in vitro (FIV). El primer bebé
que nació con esta técnica fue Louise Brown en 1978 (Inglaterra). Existen diferentes
variaciones de la misma.
Una de las primeras críticas que se dirigieron contra esta técnica apuntaba a sus
efectos, se cuestionaba si el uso de este método podía traer malformaciones en el
niño o problemas de salud en la mujer. Con respecto a los efectos en el niño, este
tipo de objeciones ha sido rebatida por la experiencia, dado que el porcentaje de
bebés que nace con anomalías es de un 3% (el mismo porcentaje de anomalías en
bebés concebidos naturalmente). En lo que concierne a los efectos en la salud de
la mujer, todavía no se han obtenido resultados concluyentes con respecto a los
efectos a largo plazo que puede traer el uso de drogas y hormonas para inducir la
ovulación, por ello es importante que las pacientes sean adecuadamente
informadas.
Una última cuestión relacionada con este procedimiento es que brinda la posibilidad
de hacer un diagnóstico genético pre-implantatorio (DGI), el cual permite detectar
las anormalidades y malformaciones de los embriones que se implantarán.
Este tipo de diagnóstico también ha sido cuestionado como eugenésico, dado que
implica una forma de selección. Sin embargo, parecería que transferir un embrión
sano no implica un acto eugenésico. Y, si se adopta la distinción entre fines
eugenésicos y fines terapéuticos, vemos que puede ser aceptable éticamente
transferir un embrión de determinado sexo –para evitar que herede una enfermedad
genética (un ejemplo de tal tipo de enfermedad es la distrofia muscular, que se
hereda en varones pero no en mujeres)– mientras que no lo es si se elige el sexo
por capricho o porque se considera que determinado sexo es mejor que otro.
4.3 La inyección intracitoplasmática del espermatozoide
Una técnica semejante a la FIV en la cual la fecundación del óvulo se realiza extra-
corporalmente es la inyección intracitoplasmática del espermatozoide (ICSI).
Esta técnica se utiliza en los casos en los cuales fundamentalmente hay ser los
problemas con los espermatozoides. De hecho, no se sabe bien la causa, pero han
aumentado los casos de infertilidad masculina en los últimos años. Se piensa que
algunos motivos están relacionados con el estrés, el consumo de tabaco y sobre
todo con contaminantes ambientales. Los casos que resultan problemáticos son
aquellos en los se utiliza esta técnica porque el semen del varón presenta graves
problemas como la ausencia de espermatozoides (azoospermia) o la muerte de los
espermatozoides en el eyaculado (necrozoospermia).