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Obstetricia y
*Las Guías de Asistencia Práctica de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia pretenden contribuir al buen quehacer profesional de todos los
ginecólogos, especialmente los más alejados de los grandes hospitales y clínicas universitarias. Presentan métodos y técnicas de atención clínica acep-
tadas y utilizadas por especialistas en cada tema. Estas guías no deben interpretarse de forma rígida ni excluyente, sino que deben servir de guía para
la atención individualizada a las pacientes. No agotan todas las posibilidades ni pretenden sustituir a los protocolos ya existentes en departamentos y
servicios hospitalarios.
Correspondencia:
Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia
Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia. Gestación precoz. Pérdida gestacional Paseo de la Habana, 190. 28036 Madrid
temprana. Gestación de localización no conocida. Prog Obstet Ginecol 2023;66:22-41. e-mail: progresos@sego.es
GESTACIÓN PRECOZ. PÉRDIDA GESTACIONAL TEMPRANA. GESTACIÓN DE LOCALIZACIÓN NO CONOCIDA 23
Existe un amplio consenso en que el uso del modo-B Realizar diagnóstico temprano de gestación extrauterina.
y modo-M en la ecografía prenatal parecen ser seguros
para todas las etapas del embarazo (5). En general, se Determinar el número de embriones.
recomienda reducir al mínimo los tiempos de exposi- Evaluar la corionicidad y la amnionicidad en presencia de una
ción fetal, acortando los tiempos de evaluación junto a gestación múltiple.
la menor exposición acústica posible para obtener infor-
mación diagnóstica necesaria utilizando el principio ALA- Diagnosticar patología útero-anexial asociada.
RA (as low as reasonably achievable: tan bajo como sea
Detectar precozmente complicaciones gestacionales.
razonablemente posible).
Sin embargo, la ecografía Doppler está asociada con una
Diagnosticar patología malformativa embrionaria.
mayor producción de energía y, por lo tanto, con más efec-
la quinta semana de gestación como un pequeño anillo Puede visualizarse a partir de las 5-6 SG, cuando el
hiperecogénico con centro anecoico, de contorno liso y DMVG es de 5-6 mm (12) (siempre se visualiza con diáme-
fino, de localización excéntrica en el interior de la VG (Fig. tro medio de la vesícula gestacional ≥ 10 mm, aumentan-
4). La medición suele realizarse desde la parte interna del do su tamaño de forma lineal (0,4 mm/semana) (13) hasta
mismo hasta la parte interna de la cara opuesta (10,11). las 10 SG, momento en el que la VV puede alcanzar los 6
Si la vesícula no es completamente esférica, se toman las mm, para posteriormente disminuir su tamaño. La VV se
3 medidas y se obtiene la media. incorpora al embrión para formar el intestino primitivo y
se mantiene unida al cordón por el conducto vitelino. Se
han descrito nomogramas de crecimiento desde la 5.a a la
10.a SG. No se suele visualizar a las 12-13 SG. Su presencia
confirma la existencia de una gestación intrauterina con
un valor predictivo positivo del 100%. En las gestaciones
gemelares bicoriales-biamnióticas el número de VV coin-
cide con el número de cavidades amnióticas, mientras que
en las monocoriales esto sucede entre el 85-90% de los
casos, por lo que, si bien resulta orientativo, no es predic-
tivo de amnionicidad (14) por lo que se debe visualizar la
membrana amniótica, sobre todo en aquellos casos de
gestación multifetal (Fig. 5)
3.2.3. Amnios
Figura 4. Corte coronal. VG y vesícula vitelina visible en su interior (fle- 3.2.4. Cavidad coriónica
cha).
a
celoma Figura 7. Gestación de 8 semanas. Ecografía tridimensional. La flecha
muestra el conducto onfalomesentérico.
Tabla II.
Cronología ecográfica de la gestación precoz.
Movimiento cardiaco fetal (MCF).
Semanas Hallazgos ecográficos relevantes
posmenstruales
VG
4
Figura 12. Semana 7. a: LCR. b: rombencéfalo (RE). Prosencéfalo (PE). Cavidad amniótica (CA). Cavidad coriónica (CC). Cordón umbilical (CU). Vesícula
vitelina (VV). c: conducto vitelino (CV) conectando VV y CU. d: raquis (RQ).
Figura 13. Semana 8. a: LCR. III ventrículo (III V). Acueducto de Silvio (AS). IV ventrículo (IV V). Cordón umbilical (CU). b: cavidad amniótica (CA). Cavidad
coriónica (CC). Miembro superior (MS). Miembro inferior (MI). Cordón umbilical (CU). Vesícula vitelina (VV). Conducto vitelino (CV). c: miembros supe-
riores (MS). d: Miembros inferiores (MI). e: Raquis (RQ). f: Raquis (RQ). Miembros inferiores (MI).
Figura 14. Semana 9. a: LCR. b: línea media (LM). Ventrículos laterales (VL). Plexos coroideos (PC). c: tronco del encéfalo (TE). IV ventrículo (IVV). Cisterna
magna (CM). d: *Detalle de la comunicación entre IVV y CM. e: corte de 4 cámaras: ventrículos derecho e izquierdo (VD, VI) y tabique interventricular
e interauricular (TIV y TIA). f: detalle miembros superiores: 3 segmentos y dedos. g: detalle miembros inferiores: 3 segmentos. h: hernia umbilical fisio-
lógica. i: imagen 3D.
3.4.1. Gestación bicorial biamniótica La ecografía en fase embrionaria, aunque tiene un papel
limitado, nos permitirá sospechar o diagnosticar algunas
Se visualizan dos VG. Cada uno tiene su propio corion y malformaciones severas precozmente: secuencia anence-
en su interior se localiza el embrión, la cavidad amniótica falia-exencefalia, holoprosencefalia, encefaloceles gran-
y su espacio extracelómico con la VV (Fig. 17). des, hidrops, higroma quístico, ectopia cordis, anomalías
Figura 16. Semana 10. a: sagital. Diencéfalo (DI). Tronco del encéfalo (TE). IV ventrículo (IVV). Cisterna magna (CM). Translucencia nucal (TN). b: axial.
Línea media (LM). Ventrículos laterales (VL). Plexos coroideos (PC). c: coronal. Tronco del encéfalo (TE). IV ventrículo (IV). Cisterna magna (CM). d: órbitas
ocupadas por cristalinos (O-Cr). e: corte de 4 cámaras: líneas discontinuas: eje cardiaco. Aurícula derecha (AD). Ventrículo derecho (VD). Aurícula izquier-
da (AI). Ventrículo izquierdo (VI). *Crux cordis (CCo). f: corte de 3 vasos en mediastino: arteria pulmonar (APu). Aorta (Ao). Vena cava superior (VCS). g:
línea diafragmática (LD). h: imagen 3D. i: costillas (COST) y raquis (RQ). j: riñones (RI). k: hernia umbilical fisiológica (HU). l: detalle miembros superiores:
3 segmentos y dedos. m: detalle miembros inferiores: 3 segmentos. n: mano-dedos. o: pie-dedos.
Figura 17. Gestación bicorial biamniótica. Semana 6 de gestación. Vesículas gestacionales completamente separadas. A mayor precocidad de la gestación,
mejor diferenciación de la corionicidad.
a b
Figura 18. Gestación monocorial biamniótica. a: octava semana. b: décima semana. VG única con dos cavidades amnióticas cada una con su embrión y
un espacio extracelómico único con dos vesículas vitelinas
Figura 19. Gestación monocorial monoamniótica. Semana 8 de gestación. VG única con una única cavidad amniótica (flecha amarilla) y dos embriones
en su interior con un espacio extracelómico único y habitualmente con una VV. Flecha blanca, rombencéfalo.
reduccionales de miembros, defectos complejos de pared traste (38) (gadolinio) salvo casos excepcionales ya que se
abdominal como limb body wall complex. ha relacionado con diversos trastornos reumatológicos,
inflamatorios y cutáneos en el neonato (39). El marcador
Ca 125 está fisiológicamente elevado durante la gestación
3.7. Exploración de región anexial (útero y ovarios) y salvo niveles muy elevados, no aporta información discri-
minatoria. El manejo debe individualizarse en función de
La exploración ecográfica durante la gestación precoz la EG (por debajo o por encima de las 20-23 SG), caracte-
nos permite valorar los anejos mejor que en cualquier rísticas de la paciente y riesgos en cada circunstancia para
otro momento. Conforme avance el embarazo la explo- la madre y para el feto (40).
ración se hace más difícil y por ello ante una sospecha
clínica (fundamentalmente dolor abdominal) es recomen-
dable realizar la exploración lo antes posible. La mayor 3.7.2. Torsión
parte de patologías ginecológicas suelen ser trastornos
benignos y en su mayoría transitorios. Sin embargo, en La torsión anexial (41) se define como la rotación de
ocasiones pueden existir complicaciones (torsión, tumora- las estructuras de soporte ovárico (ligamento infundibu-
ciones malignas) que pueden condicionar el seguimiento, lopélvico y tubovárico) alrededor de su pedículo vascular,
manejo y pronóstico de la gestación. No está demostrado produciendo un dolor pélvico agudo y una obstrucción
el beneficio de la exploración anexial sistemática durante al paso de flujo variable en función del número de giros
el primer trimestre. Sin embargo, muchas veces las lesio- y del grado de constricción (42). La compresión venosa y
nes pueden apreciarse de forma incidental. Por otro lado, linfática produce edema ovárico y la compresión arterial
la edad de las gestantes es cada vez mayor, y las lesiones producirá diversos grados de isquemia o necrosis. La tor-
borderline ováricas suelen presentarse por lo general en sión constituye una urgencia quirúrgica. La gran mayoría
la 4.a década de la vida (30). de casos afectan al ovario solo o también con la trompa,
La incidencia estimada de tumoraciones anexiales siendo menos frecuente la torsión de la trompa (9%) o
durante la gestación es variable según algunos estudios de un quiste de paraovario (4,8%) (42). La incidencia de
(31,32) y oscila entre el 2-10%, siendo mayor en etapas torsión en las masas anexiales durante la gestación es
tempranas (5% por debajo de las 10 SG frente al 1,5% variable, pudiendo alcanzar cifras medias cercanas al 10%
entre las 12-14 SG y la gran mayoría –4 de cada 5– se (1 de cada 5.000 gestantes en cifras globales [43,44]). El
resolverán de forma espontánea. Únicamente el 2-2,5% embarazo favorece la torsión de esta al desplazarse cra-
del total serán lesiones neoplásicas, borderline o invasi- nealmente ambos ovarios a consecuencia del crecimiento
vas). uterino. La torsión es más frecuente durante el primer
En su descripción ecográfica se recomienda emplear los trimestre (61%) (45), en grandes cuerpos lúteos y en el
criterios ecográficos validados por la International Ovarian ovario derecho, probablemente porque en el lado izquier-
Tumor Analysis Group (IOTA) (33), evitando en la medida do el espacio que ocupa el colon sigmoide “protege” al
de lo posible los términos “masa anexial simple” o “com- ovario de la torsión (46).
pleja”. Solo el 50% de las indicaciones quirúrgicas por sospe-
La mayor parte de las masas anexiales corresponden a cha de torsión se confirman (47). Esto puede explicarse
persistencias del cuerpo lúteo gestacional, que en ocasio- porque la no intervención o el retraso en ella puede hacer
nes alcanzan gran tamaño. que el ovario no sea recuperable. Sin embargo, la ciru-
gía durante el embarazo acarrea riesgos, por lo que si la
sospecha de torsión es baja puede planearse un periodo
3.7.1. Decidualización de un endometrioma breve de observación con reevaluación posterior (46). El
tratamiento es quirúrgico, mediante laparoscopia y detor-
A la hora de la toma de decisiones durante la gesta- sión en la gran mayoría de los casos. Hay descritos varios
ción, la decidualización de un endometrioma constituye signos de torsión ovárica:
un caso particular ya que su aspecto ecográfico a menudo • Whirlpool sign o signo del remolino (48), que consis-
con la presencia de formaciones papilares redondeadas te en observar los vasos del pedículo enrollados, en
puede imitar a tumoraciones borderline e invasivas (34). espiral, en torno a un eje central (Fig. 20).
La presencia de un endometrioma pregestacional puede • Edema del estroma, con desplazamiento de los folí-
orientar el diagnóstico. Además, las papilas en el endo- culos hacia la periferia.
metrioma presentan un contorno liso mientras que en las • Signo del anillo folicular (49) (follicular ring sign), que
tumoraciones borderline, las papilas adoptan un aspecto consiste en la presencia de un anillo hiperecogéni-
más espicular o irregular (35,36). Es recomendable reali- co de 1-2 mm alrededor de los pequeños folículos
zar una resonancia magnética (RM) complementaria (37) antrales del ovario en los casos de torsión. Este anillo
ante casos potencialmente quirúrgicos o dudosos, sin con- se debe a la presencia de edema y hemorragia peri-
férico a los folículos. Este signo aparece en las etapas Debemos tener en cuenta que la visualización de señales
más tempranas de torsión, mientras que en las más Doppler en el interior del ovario no excluye la torsión del
tardías, el edema y/o la necrosis generalizada afec- mismo ya que hasta casi un 50% de ovarios torsionados
ta también al estroma ovárico y hace menos visible pueden mostrar señales Doppler en su interior.
dichos anillos.
a b
gestación
Figura 20. Torsión ovárica. Las flechas huecas se sitúan a la derecha del 4. CRITERIOS ECOGRÁFICOS DE ABORTO
pedículo vascular, que forma un “remolino” o una espiral. a: imagen
prequirúrgica. b: imagen intraoperatoria.
La clínica más frecuente es el sangrado vaginal o el dolor estos criterios precisan de un control ecográfico en 7-10
abdominal, que son las causas más comunes de consulta (59). días para realizar un diagnóstico definitivo de aborto.
Hay que tener en cuenta que el valor de la LCR como
predictor del aborto precoz depende de la habilidad del
4.2. Criterios diagnósticos ecografista, del ecógrafo utilizado y la dificultad en la
medición que puede presentarse en gestaciones meno-
Las diferentes sociedades científicas internacionales res de 6 SG.
(National Institute for Health Care Excellence, Royal Colle- Por ello, al igual que ocurría con la medición del DMVG,
ge of Obstetricians and Gynecologists, American College inicialmente se consideraba que embriones con LCR > 5
of Radiology, US Society of Radiologists in Ultrasound) mm sin actividad cardiaca resultaban diagnósticos de abor-
llegaron a un consenso acerca de los criterios ecográficos to. Sin embargo, estudios posteriores objetivaron una tasa
diagnósticos de aborto (Tabla III) y aquellos sugestivos de de falsos positivos de un 8,3%, con las implicaciones que
aborto que precisarán confirmación posterior (Tabla IV): supondría considerar un aborto cuando en realidad se tra-
• Embrión de al menos 7 mm (LCR ≥ 7 mm) sin latido taba de una gestación incipiente. Ello obligó al cambio del
cardiaco fetal. punto de corte actual considerado en 7 mm (1) (Tabla I).
• Tamaño de la VG de al menos 25 mm (DMVG ≥ 25
mm) sin objetivarse embrión.
• Ausencia de embrión con latido cardiaco fetal al 4.3. Cómo comunicar el diagnóstico de pérdida
menos 2 semanas después de realizar ecografía don- gestacional
de se objetive VG SIN saco vitelino.
• Ausencia de embrión con latido cardiaco fetal al La pérdida gestacional temprana lleva asociado un
menos 11 días después de realizar ecografía donde fuerte componente emocional y de estrés postraumático
se objetive VG CON saco vitelino. tanto en el momento de recibir la noticia como poste-
En caso de duda es importante no precipitarse en el riormente durante el periodo de duelo. Hay subgrupos
diagnóstico y realizar una ecografía de control en 7-10 de pacientes especialmente vulnerables (antecedente de
días para confirmar hallazgos. infertilidad, entorno inadecuado social/familiar, pérdidas
Tal y como se apuntaba anteriormente, la presencia de gestacionales previas, no tener hijos, o patología psiquiá-
trica previa entre otras). Hasta un 16% presenta estrés,
Tabla III. un 17% ansiedad y un 5% depresión 9 meses después del
Criterios ecográficos diagnósticos de aborto diagnóstico (60,61).
Embrión de al menos 7 mm (LCR ≥ 7mm) sin latido Tanto el manejo clínico posterior al diagnóstico (ver GAP
cardiaco fetal. SEGO [61]) como el enfoque orientado a preservar el bien-
Tamaño de la VG de al menos 25 mm (DMVG ≥ 25 mm) estar psicológico de la paciente durante el proceso y en
sin objetivarse embrión. las semanas o meses posteriores queda fuera del objeto
Ausencia de embrión con latido cardiaco fetal al menos de esta GAP de diagnóstico ecográfico.
2 semanas después de realizar ecografía donde se Sin embargo, conocer el impacto psicológico que aca-
visualice VG SIN VV. rrea la pérdida hace que sea relevante el modo en que
Ausencia de embrión con latido cardiaco fetal al menos comunicamos el diagnóstico a la paciente, una vez reali-
11 días después de realizar ecografía donde se visualice zada la valoración ecográfica (62,63). Suele ser inevitable
VG CON VV. en muchas ocasiones tener que comunicar el diagnóstico
durante la realización de la ecografía, en respuesta a la
Tabla IV. pregunta de la paciente. La información que damos una
Criterios ecográficos sugestivos de aborto vez finalizada la ecografía así como las dudas en cuanto
LCR < 7 mm con LCF negativo. al manejo o causas del mismo ya deben realizarse en un
DMVG 16-25 mm sin embrión. entorno lo más cuidado posible.
Comunicar una mala noticia debe enfocarse como algo
No visualización de embrión con LCF 7-13 días tras ver
VG SIN VV. esencial. No debe considerarse una destreza o conoci-
miento opcional o complementario. En general, la mayor
No visualización de embrión con LCF 7-10 días tras ver
parte de obstetras y ginecólogos coinciden en la escasa
VG CON VV.
formación que reciben durante su residencia y posterior-
No visualización de embrión ≥ 6 semanas tras FUR. mente. Dar malas noticias habitualmente constituye una
VV sin embrión. experiencia estresante para el profesional de salud.
VV > 7 mm. Los programas de aprendizaje basados en programas de
DMVG – LCR < 5 mm. simulación han resultado eficaces en distintas situaciones
(64,65).
Basado en (1).
Nuestro objetivo debe ser suministrar una información cador más precoz y de mayor relevancia en la predicción
veraz y clara, que sea comprendida por la paciente para de la gestación interrumpida (10) . Así, un tamaño de la
que, apoyada por el equipo médico, sea capaz de llegar VV superior a 6 mm antes de las 8-10 SG se relacionó
a la decisión más ventajosa para su salud, reduciendo al con mal pronóstico, mientras que a partir de las 10 SG
máximo el estrés asociado así como el del profesional/es embriones con VV de menor tamaño también presentaron
que suministra/n esa información. mayor riesgo de aborto precoz (Fig. 21). No hay acuerdo
Para ello es recomendable seguir una estrategia (66), en relación a las alteraciones en la morfología de la VV
habiendo algunas ya descritas en la literatura, en el (irregular, hiperecogénica, calcificada) como marcador de
entorno de paciente con cáncer. La estrategia SPIKES (67) mal pronóstico, encontrando en un estudio prospectivo
(Setting-Perception-Invitation-Knowledge-Empathy-Sum- (71) un valor predictivo positivo de 58,2% y negativo de
mary) se basa en primer lugar en planificar previamente el 96,8% mientras que otros autores (72) no encuentran
entorno (ambiente tranquilo, sin interrupciones, mirando dicha asociación.
al paciente y no al ordenador…) y repasar lo que queremos
decir para posteriormente comenzar conociendo qué sabe
la paciente sobre su enfermedad. A continuación, le sumi- 5.2. Diferencia entre el DMVG y la LCR
nistraremos la información adaptada a sus conocimientos
y capacidad de asimilación (evitando terminología médica Se ha descrito, en población FIV, que una diferencia
compleja) y finalmente le apoyaremos de forma empática DMVG-LCR < 5 mm cuadruplica el riesgo de aborto, con
en su toma de decisiones. un porcentaje próximo a la mitad (73) (43,7%) mientras
En el caso concreto de la pérdida gestacional temprana que a medida que se incrementa esta diferencia, la tasa de
existen algunas particularidades: aborto se reduce, siendo del 7% con una DMVG-LCR >15
• Derivadas del conocimiento de la paciente acerca de mm. Sin embargo, la tasa de pronóstico perinatal adverso
la pérdida gestacional y sus causas y/o tratamientos (trastornos hipertensivos, diabetes gestacional, prematu-
(más elevado por lo general cuando hay una pérdida ridad) y el peso al nacimiento no se ven afectados y la
gestacional recurrente o un largo historial de inferti- diferencia DMVG-LCR no predice mejor el resultado de
lidad). Por ello es importante preguntar y escuchar a aborto frente al valor predictivo de cada uno de los dos
la paciente antes de informar ya que una información parámetros por separado.
demasiado “básica” o demasiado “compleja de asi-
milar” para la paciente puede suponer una pérdida
de confianza. 5.3 Signo del “amnios vacío”
• Derivadas de la experiencia del médico que realiza
la ecografía (en la sala de urgencias o en una unidad El signo del amnios vacío (74) (Fig. 22) consiste en la
ecográfica especializada). Puede requerirse la pre- visualización del saco amniótico sin visualizarse embrión.
sencia de un compañero con más experiencia si no Si bien es un signo que per se no certifica en un único
somos capaces de resolver las dudas que nos plantea control la existencia de una pérdida gestacional, exis-
la paciente y pueden sobrepasarnos. No obstante, te un estudio reciente prospectivo amplio que otorga
debemos centrar la información en las opciones de a este signo un valor predictivo positivo del 100% en la
manejo y transmitir a la paciente que no es conve- predicción de pérdida gestacional temprana. El estudio
niente “cerrar” el caso hasta disponer del estudio está realizado en un centro terciario y los resultados, tal
histológico y analítico completo. y como reconocen los autores, deben aún validarse en
otros centros y por ecografistas con diferentes grados
de experiencia (74).
5. CRITERIOS ECOGRÁFICOS DE MAL PRONÓSTICO.
CRITERIOS DE AMENAZA DE ABORTO
6. GESTACIÓN DE LOCALIZACIÓN NO CONOCIDA
Existen signos ecográficos que pueden relacionarse con
un mal pronóstico de la gestación.
6.1. Definición
5.1. Vesícula vitelina secundaria
Se define gestación de localización no conocida (GELD)
La VV constituye el mejor predictor aislado de pérdi- (75) (del inglés pregnancy of unknown location [PUL]) a
da gestacional temprana (68,69,70). Un amplio trabajo aquella situación en la que coexiste una positividad en los
prospectivo realizado sobre población infértil mostró que niveles de β-hCG sérica y/o urinaria sin el hallazgo ecográ-
las variaciones del tamaño de la VV podrían ser el mar- fico de gestación intra o extrauterina.
Figura 21. Vesícula vitelina agrandada (flecha blanca) e hiperecogénica (flecha amarilla) en gestaciones que finalmente resultaron no evolutivas.
trayectos, si bien esto a menudo no es posible en todas • El modelo de predicción de riesgo M4 (88) es un
las pacientes. La presencia de líquido periovárico puede modelo de riesgo basado en la regresión logística
facilitar la visión de la porción ampular. Hay que describir multinomial logarítmica (logaritmo natural de β-hCG
detalladamente dicha exploración con el fin de valorar sérica basal + β-hCG sérica basales 48 h)/2. Dicho
posibles cambios sutiles en la misma al realizar ecografías modelo, descrito en 2013, es capaz de clasificar el
seriadas, que orienten tanto a GI como a GE. Cuando se 70% de las gestaciones como de “bajo riesgo de GE”
realizan ecografías seriadas, la sensibilidad y especificidad (el 97% serán GI o gestaciones bioquímicas) clasifi-
en el diagnóstico de GE son del 87-94% y 94-99% respec- cándose el 85% de las gestaciones ectópicas como
tivamente (82). de “alto riesgo”. Este modelo y, recientemente, el
La sensibilidad de la ecografía puede verse afectada por modelo M6 (89) permiten hacer un seguimiento más
varios factores (calidad del equipo, experiencia del ecogra- certero de estas gestaciones, racionalizando recursos
fista, presencia de miomas, posición uterina...). y minimizando los riesgos.
Si bien se han descrito un buen número de ellos, en la La progesterona se correlaciona bien con la viabilidad
práctica se emplea la β-hCG sérica y en menor medida, la de la gestación (< 5 nmol/l es indicativo de no viabilidad y
progesterona. > de 20 de viabilidad) pero no así con su localización (intra
o extrauterino). Únicamente el 1,7% de las gestaciones
con progesterona sérica < 2 nmol/l serían GE y ninguna
6.2.2.1. β-hcg sérica de ellas se accidentó siguiendo un esquema de manejo de
bajo riesgo (control en 2 semanas). Por tanto, este marca-
La β-hCG refleja la actividad del trofoblasto. A partir de dor ayuda a clasificar a la paciente como de bajo riesgo de
ahí se puede analizar el valor de una única determinación GE, pudiendo aplicar en estas pacientes un esquema de
de β-hCG sérica, seriada (cociente β-hCG sérica basal y a manejo menos intensivo (89). El empleo de suplementos
las 48 h) o bien a través de modelos predictivos: de progesterona puede distorsionar los resultados y debe
• “Nivel discriminatorio” de β-hCG sérica. Es el nivel ser tenido en cuenta (90).
umbral mínimo en el que debemos identificar VG.
En caso de no visualizarlo, el riesgo de GE aumenta
notablemente. El problema viene dado en el nivel en 6.3. Esquema de manejo
el que debe fijarse. La mayor parte de autores fijan
estos niveles entre 1.500-2.000 mUI/ml. Sin embar- No existe un consenso unánime de manejo. El protoco-
go, hay publicadas GI con actividad cardiaca positiva lo debe tener en cuenta datos clínicos (gestaciones tras
en casos con niveles iniciales > 2.000 mUI/ml y no TRA o pacientes con GE previa presentan mayor riesgo),
visualización de VG, e incluso de hasta 3.500 mUI/ml disponibilidad de recursos y posibilidad de seguimiento.
y mayores (83), sobre todo en gestaciones que poste- No debe tratarse en la primera visita. En caso de con-
riormente fueron múltiples (84). Por todo ello resulta siderar realizarlo debe informarse de la posibilidad muy
muy difícil establecer una recomendación sobre el baja de gestación evolutiva y discutir con la paciente pros
punto de corte por encima del cual debamos tratar y contras de realizar una conducta activa (91). En este caso
a la paciente por sospecha de GE ante la no visualiza- debiera establecerse un umbral de β-hCG elevado (92), (>
ción de VG intrauterina. Esto dependerá tanto de la 3.500 mUI/ml) (nivel de evidencia tipo B).
experiencia del ecografista, de la calidad del equipo, Un reciente metaanálisis sobre 43 estudios concluyó que
de las características de la paciente (miomas, obesi- el cociente β-hCG basal/β-hCG 48 h y la progesterona mues-
dad...) así como de la situación clínica (asintomática tran mejor capacidad predictiva de gestación intrauterina,
o no) y reproductiva (gestación espontánea o tras viable o no mientras que el modelo predictivo M4 sería el
transferencia de uno o varios embriones). Por tan- que mejor rendimiento ofrece en el diagnóstico de GE (80).
to, es importante no basar la decisión en una única Posteriormente se desarrolló el sistema de cribado utilizan-
determinación de β-hCG (85,86) y seriar las determi- do el modelo M6 (89)con similares conclusiones.
naciones analíticas y ecográficas, sobre todo en una Siempre deberemos realizar un seguimiento de la
paciente hemodinámicamente estable. paciente hasta llegar al diagnóstico final y será recomen-
• Cociente β-hCG sérica basal y a las 48 h: dable basarse en determinaciones seriadas de β-hCG (de
–– < 0,87 indica probable gestación bioquímica. manera opcional añadiendo progesterona) junto a ecogra-
–– ≥ 0,87 y ≤ 1,66 indica probable PGELD o GE. fía cada 48 h al menos en los casos de alto riesgo clínico
–– > 1,66 indica probable GI evolutiva (87). o analítico.
6.4. Manejo de la GELD persistente (PGELD) Kendall JL, Lyons EA, Porter MB, Pretorius DH, Timor-Tritsch IE. Diag-
nostic criteria for nonviable pregnancy early in the first trimester. N
Engl J Med 2013;369:1443-51.
Hasta el 50% de las PGELD serán GE. Sin embargo, la 2. Wilcox AJ, Harmon Q, Doody K, Wolf DP, Adashi EY. Preimplanta-
tion loss of fertilized human ova: Estimating the unobservable. Hum
posibilidad de ruptura en estos casos suele ser baja por Reprod 2020;35:743-50.
lo que no hay consenso en su manejo. En la actualidad 3. Wang X, Chen C, Wang L, Chen D, Guang W, French J. Conception,
está en marcha un ensayo clínico aleatorizado (93) del que early pregnancy loss, and time to clinical pregnancy: A population-
based prospective study. Fertil Steril 2003;79:577-84.
no disponemos aún de resultados, comparando manejo 4. Magnus MC, Wilcox AJ, Morken NH, Weinberg C, Haberg SE. Role
expectante con manejo activo (evacuación uterina segui- of maternal age and pregnancy history in risk of miscarriage: Pros-
da de tratamiento con metotrexate si no disminuyen los pective register based study. BMJ 2019;364:l869.
5. Rapid Response Group. Executive Board of the International Society
niveles de β-hCG). of Ultrasound in Obstetrics and Gynecology. Safety statement, 2000.
International Society of Ultrasound in Obstetrics and Gynecology
(ISUOG). Ultrasound Obstet Gynecol 2000;16:594-6.
6. Bhide A, Acharya G, Bilardo CM, Brezinka C, Cafici D, Hernandez-An-
7. ADAPTACIÓN DE LAS INDICACIONES DE drade E, et al. ISUOG practice guidelines: Use of Doppler ultraso-
ECOGRAFÍA TEMPRANA EN RELACIÓN A LA COVID nography in obstetrics. Ultrasound Obstet Gynecol 2013;41:233-9.
19 7. Calí G, Timor-Tritsch IE, Forlani F, Palacios-Jaraquemada J, Mon-
teagudo A, Agten AK, et al. Value of first-trimester ultrasound in
prediction of third-trimester sonographic stage of placenta accreta
La situación de pandemia obliga a revisar algunas de las spectrum disorder and surgical outcome. Ultrasound ObstetGynecol
indicaciones de gestación temprana, tanto por disponibi- 2020;55:450-9.
8. Phillips CH, Benson CB, Durfee SM, Heller HT, Doubilet PM. “Pseu-
lidad de recursos humanos y materiales como por seguri- dogestational sac” and other 1980s-era concepts in early first-tri-
dad de la paciente. En ese sentido, se han publicado guías mester ultrasound: Are they still relevant today? J Ultrasound Med
clínicas y recomendaciones acerca de las indicaciones de 2020;39:1547-51.
9. Doubilet PM, Benson CB, Bourne T, Blaivas M. Diagnostic criteria
la ecografía de la gestación temprana (94). Lógicamente, for nonviable pregnancy early in the first trimester. Ultrasound Q
dichas indicaciones van a verse sometidas a los cambios 2014;30:3-9.
que experimente la pandemia, así como a la vacunación 10. Detti L, Francillon L, Christiansen ME, Peregrin-Alvarez I, Goeske PJ,
Bursac Z, Roman RA. Early pregnancy ultrasound measurements and
masiva de la población, por lo que las recomendaciones prediction of first trimester pregnancy loss: A logistic model. Sci Rep
en el momento de publicación de esta GAP posiblemente 2020;10:1545.
ya “nazcan” obsoletas. En cualquier caso deben atenderse 11. Levi CS, Lyons EA. Yolk sac number, size and morphologic features
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• Situaciones urgentes se manejan sin cambios. 12. Schmidt-Hansen M, Cameron S, Lord J, Hasler E. Initiation of abor-
tion before there is definitive ultrasound evidence of intrauterine
• No debemos repetir ecografías para confirmar viabi- pregnancy: A systematic review with meta-analyses. Acta Obstet
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bilidad gestacional, si la ecografía muestra una gesta- 13. Detti L, Roman RA, Goedecke PJ, Christiansen ME, Peregrín-Álvarez
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ción intrauterina, debe esperarse hasta la ecografía of yolk sac growth during the first trimester of pregnancy. J Obstet
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• Favorecer el manejo médico de la paciente a la que 14. Park SY, Chung JH, Han YJ, Lee SW, Kim MY. Prediction of amnionicity
using the number of yolk sacs in monochorionic multifetal pregnan-
se le diagnostica una pérdida gestacional temprana. cy. J Korean Med Sci 2017;32:2016-2020.
• En las GELD emplear el modelo M6 junto a la eco- 15. Robinson HP. Sonar measurement of fetal crown-rump length as
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tes con antecedente previo de GE puede de nuevo 18. Von Versen-Höynck F, Petersen JS, Chi YY, Liu J, Baker VL. First tri-
repetirse dicha gestación ectópica (95). Además, hay mester pregnancy ultrasound findings as a function of method
of conception in an infertile population. J Assist Reprod Genet
descritas revisiones en las que durante el periodo de 2018;35:863-70.
pandemia los diagnósticos han sido más tardíos y con 19. Rizzo G, Aiello E, Pietrolucci ME, Arduini D. Are there differences in
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