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Carrera Medicina
Asignatura Patología General
Grupo Grupo B
Docente Dr. Carlos Mark Trujillo Morales
Periodo Académico 5to Semestre
Subsede La Paz – Bolivia
Título: Inmunoterapia del Cancer
Autor/es: Guina Lizbeth Amachi Maquera
RESUMEN:
contrarrestar los mecanismos que poseen las células tumorales para escapar de la acción del
particularmente CTLA4, PD-1 y PD-L1. De esta forma, se postula como una estrategia
combinada ha ganado protagonismo entre los enfoques terapéuticos indicados a pacientes con
ABSTRACT
The therapeutic approach to cancer has been expanded thanks to immunotherapy, it is based
on counteracting the mechanisms that tumor cells have to escape the action of the immune
system. Immunotherapy is based on the use of monoclonal antibodies, which act by blocking the
inhibitory coreceptors on the surface of immune cells, particularly CTLA4, PD-1 and PD-L1. In
this way, it is postulated as a novel treatment strategy for different types of poor prognosis
tumors. Objective: To describe the current situation of immunotherapy in cancer treatment.
Method: The research will be descriptive, with a non-experimental research design. Conclusion:
Combined immunotherapy has gained prominence among the therapeutic approaches indicated
for cancer patients. The design and testing of combinations does not consist in the mere direct
addition of different agents, but must take into account the complexity of the tumor biology, its
microenvironment and the responsiveness of each agent.
INDICE
INTRODUCCIÓN.......................................................................................................................................5
CAPÍTULO 1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA............................................................................7
1.1 Formulación del Problema.....................................................................................................................7
1.2 Objetivos...........................................................................................................................................7
1.2.1 Objetivo general.............................................................................................................................7
1.2.2.Objetivos específicos......................................................................................................................7
1.3 Justificación......................................................................................................................................8
CAPÍTULO 2. MARCO TEÓRICO............................................................................................................9
2.1. Inmunoterapia del cancer:................................................................................................................9
2.2. Vacunas..........................................................................................................................................10
2.3. Terapia Celular Adaptativa.............................................................................................................12
2.4. Fuentes de estrés laboral.................................................................................................................14
2.5. Linfocitos T con receptores quimericos..........................................................................................15
CAPÍTULO 3. MÉTODO.........................................................................................................................23
3.1 Tipo de Investigación......................................................................................................................24
3.2 Operacionalización de variables......................................................................................................24
3.3 Técnicas de Investigación................................................................................................................25
3.4 Cronograma de actividades por realizar..........................................................................................25
CAPÍTULO 4. RESULTADOS Y DISCUSIÓN.......................................................................................26
4.1 Resultados………………………………………………………………………………...............26
4.2 Discusión …………………………………………………………………………………………..30
CAPÍTULO 5. CONCLUSIONES............................................................................................................31
Introducción
Se define cáncer como un conjunto de enfermedades con características comunes, las cuales se
originan por la acumulación de modificaciones genéticas en una célula que pierde los
mecanismos de control de la proliferación y sobrevivencia. Se han descrito más de 200 tipos
diferentes de cáncer, los que afectan a cualquier órgano del cuerpo, con síntomas y tratamientos
distintos. Estas desregulaciones se deben a factores genéticos heredados, o factores externos
como: tabaco, alcohol, obesidad, exposición a radiación, etc.
La inmunoterapia ha significado un gran avance científico en el tratamiento del cáncer en los
últimos años, siendo considerada como la piedra angular terapéutica de algunas neoplasias. Sin
embargo, en algunos tipos de cáncer sólo una fracción de pacientes alcanza beneficio, planteando
los desafíos y limitantes que nos llevan a la necesidad de entender la complejidad de la biología
tumoral, el microambiente tumoral y la capacidad de respuesta de cada agente. Los resultados
superan actualmente lo alcanzado por la quimioterapia convencional, aunque aún no se puede
precisar si estas respuestas son duraderas o representan curación.
En los últimos años el abordaje terapéutico del cáncer se ha ampliado gracias a la inmunoterapia,
la cual se basa en contrarrestar los mecanismos que poseen las células tumorales para escapar de
la acción del sistema inmune. La inmunoterapia se basa principalmente en el uso de anticuerpos
monoclonales, que actúan bloqueando los correceptores inhibitorios de la superficie de las
células inmunitarias, particularmente CTLA4, PD-1 y PD-L1. De esta forma, se postula como
una estrategia novedosa de tratamiento de distintos tipos de tumores de mal pronóstico. Estudios
recientes en melanoma metastásico han demostrado mejores resultados en cuanto a
supervivencia en los pacientes tratados con combinación de fármacos inmunoterápicos frente a la
monoterapia. Asimismo, los estudios llevados a cabo en pacientes con cáncer de pulmón no
microcítico con Nivolumab demostraron beneficio clínico en términos de eficacia y tolerancia.
Recientemente se han aprobado varios fármacos inmunoterápicos para el tratamiento del cáncer
de vejiga metastásico, ampliando así el arsenal terapéutico para este tipo de tumor. La
inmunoterapia abre nuevas expectativas para pacientes con cáncer.
En el presente trabajo se propone un enfoque amplio sobre la inmunoterapia en cáncer.
1.2. Objetivos:
1.3. Justificación
Moléculas no específicas
Se refieren a citoquinas, que son proteínas solubles que median la comunicación entre
células. Nace de las potentes actividades antitumorales de varias citoquinas proinflamatorias
en modelos animales, la investigación clínica condujo a la aprobación de interleuquina-2 (IL-
2) e interferón (IFN) recombinante para el tratamiento de varias neoplasias malignas, incluso
si la eficacia era baja14. - Interleuquina-2 (IL-2) Generan señales que influyen sobre varios
subconjuntos de linfocitos durante la diferenciación, respuesta inmunitaria y homeostasis. La
estimulación con IL-2 es crucial para el mantenimiento de los linfocitos T reguladores y para
la diferenciación de linfocitos T CD4+. Para los linfocitos T CD8+, las señales de IL-2
optimizan tanto la generación de linfocitos T efectores como la diferenciación en linfocitos
Asignatura: Patología General
Carrera: Medicina Página 41 de 41
Título: Inmunoterapia del Cancer
Autor/es: Guina Lizbeth Amachi Maquera
Vacunas
El objetivo de las vacunas es provocar una respuesta inmune antitumoral, lo cual genera una
potente respuesta de células T específica para cada tumor, evitando que las células normales
sean afectadas. Existen principalmente dos tipos de vacunas para el cáncer: a) dirigida a
prevenir la aparición y atacar el factor gatillante y b) dirigida a tratarlo, incrementando la
respuesta del sistema inmunitario contra las células cancerosas. Principalmente, las vacunas
dirigidas al tratamiento se clasifican según el tipo de antígeno al que van dirigidas. Vacunas
alogénicas: Células inmunes tumorales aisladas del tumor de un paciente son tratadas y luego
administradas a otro paciente para estimular la respuesta inmune citotóxica en un tumor
similar. Vacunas peptídicas: Usan péptidos o proteínas como antígenos no específicos para
un tipo de tumor. Vacunas autólogas: Células inmunes aisladas de un paciente se cultivan y
se expone al tumor, generando presentación de antígeno en células dendríticas. Luego, estas
se inyectan al paciente, donde deberían activar respuesta inmune sobre las células cancerosas.
Vacunas de ADN: Usan ADN como antígeno, así se genera la expresión de un gen
específico. Vacunas de vectores: Estos vectores pueden ser de restos virales, bacterianos, de
levadura u otras estructuras que pueden usarse como antígenos en el anfitrión.
Cuando la vacuna para tratamiento está lista, se inyecta para aumentar la respuesta inmune
contra las células cancerosas. Debido a la estimulación del sistema inmune y a que este posee
células de memoria, se espera que la vacuna continúe funcionando después de la aplicación.
Pero, se ha observado que su utilidad es limitada y en la actualidad casi no se utilizan. Es el
caso del cáncer pulmonar de células no pequeñas, donde estudios de fase III mostraron un
buen nivel de toxicidad y tolerabilidad, sin embargo, no pudieron demostrar beneficios de
supervivencia a pesar de los resultados que se lograron en los ensayos preliminares de fase
II21. Sin embargo, para mejorar la efectividad de las vacunas, se han desarrollado varias
estrategias. Por ejemplo: administrar la vacuna junto con un adyuvante, lo cual aumenta la
respuesta inmune del huésped. Para evaluar la eficacia de combinar diferentes tratamientos
contra el cáncer con vacunas, ya existen varios ensayos clínicos en curso. Una de las pocas
vacunas que está aprobada en Estados Unidos de Norteamérica es sipuleucel-T, vacuna de
tipo autóloga, por lo que produciría una respuesta inmune específica contra este cáncer. Esta
vacuna actúa en cáncer de próstata en etapa avanzada y se esperó que sirviera en otras etapas
del mismo. Sin embargo, su utilidad fue muy limitada y actualmente casi no se utiliza.
Virus
Se basa en la capacidad oncolítica de los virus por replicación selectiva en el tejido tumoral,
lo que lleva a una potente respuesta inflamatoria en el microentorno tumoral. A medida que
el sistema inmunitario elimina el virus, los puntos de control inmunitarios funcionan para
suprimir la respuesta inflamatoria. Los virus oncolíticos son una plataforma altamente
versátil para tratamiento del cáncer. La actividad antitumoral de virus oncolíticos implica
múltiples mecanismos que abarcan las interacciones naturales entre los virus, células
tumorales y el sistema inmunológico. Los virus desarrollan mecanismos para evadir e
interactuar con el sistema inmunológico, esto se utilizó con fines terapéuticos para inducir
inmunidad antitumoral del huésped. La inyección local de virus oncolíticos en un solo sitio
tumoral puede inducir un efecto abscopal, en el cual los tumores distantes no infectados
también sufren un rechazo mediado por el sistema inmunitario. Este efecto abscopal ocurre a
través de actividad gradual de virus oncolíticos, lo que resulta en liberación de antígenos y
factores que promueven respuestas inmunitarias antitumorales innatas y adquiridas. Los virus
oncolíticos pueden modificarse genéticamente para expresar genes terapéuticos que pueden
mejorar aún más la actividad antitumoral. La expresión génica codificada por el virus en
ausencia de replicación viral permite la modulación inmune contra tumores, y retrasa la
respuesta inmune antiviral. Un ejemplo sería el uso de virus oncolíticos que expresan
citoquinas de activación inmune, los cuales podrían modificar de manera óptima el
microambiente y mejorar los efectos antitumorales.
Terapia celular adaptativa
Debemos considerar que los linfocitos desempeñan un papel importante en la respuesta
contra enfermedades, incluido el cáncer. Existen diferentes tipos de linfocitos, siendo los
linfocitos T los involucrados en estas terapias. Los linfocitos T se mueven hasta encontrar y
destruir células defectuosas. Por ejemplo: un individuo entra en contacto con una nueva
enfermedad, el cuerpo produce linfocitos T para combatirla. A continuación, mantiene una
reserva, por si se encuentra nuevamente con el antígeno y así el organismo reconoce y ataca
inmediatamente. La inmunoterapia que emerge a partir de este proceso se llama transferencia
de células adaptativas (TCA), la cual consiste en recolección y uso de células inmunitarias de
los pacientes para tratar el cáncer. Existen varios tipos de TCA.
Linfocitos infiltrantes de tumores
Esta terapia de transferencia (TIL; tumorinfiltrating lymphocyte) requiere aislamiento de
linfocitos T a partir de biopsia frescas del paciente y selección progresiva de linfocitos T
específicos del tumor ex vivo, utilizando altos niveles de IL-2 y diversos enfoques de cultivo
celular. Para estos tratamientos no se han informado efectos secundarios graves, solo náuseas
y vómitos. Todos los demás eventos adversos fueron de grado 1 o 2 y se relacionaron con las
inyecciones de IL-2 y no con TIL directamente.
Agonistas de receptores tipo Toll
Esta terapia de transferencia (TLR; Toll-Like Receptor) pueden desencadenar respuestas
inflamatorias que provocan una inmunidad innata rápida y promueven las actividades de
linfocitos, lo que potencialmente puede mejorar la inmunoterapia adaptativa en el entorno del
tumor. Cada infección tiene firmas moleculares únicas que son reconocidas por receptores
tipo Toll, lo que resulta en activación de APC o coestimulación de linfocitos T que inducen
inmunidad tanto innata como adquirida. Los TLR también participan en el desarrollo de
linfocitos T y pueden reprogramar los linfocitos T reguladoras en linfocitos T auxiliares.
Esta terapia de transferencia proviene del uso de linfocitos T con receptores antigénicos
quiméricos (CAR; Chimeric Antigen Receptor T cells), que consta de: porción extracelular,
transmembrana e intracitoplasmática. La porción extracelular reconoce al antígeno, mientras
que el dominio intracitoplasmático es responsable de transducir señales de activación a través
del receptor antigénico del linfocito T (TCR). Basado en la variación de los dominios
extracelulares, puede modificarse la especificidad del mismo, cambiando la especificidad de
linfocitos T, haciendo que sean específicos para la molécula que es reconocida por el
dominio extracelular del CAR31. En Estados Unidos de Norteamérica se aprobó un
tratamiento para niños con leucemia linfoblástica aguda (LLA) y otra para adultos con
linfomas avanzados, ambos centrados en utilización de CAR32. En la terapia se separan los
linfocitos T, luego, utilizando un virus desensamblado, los linfocitos T son rediseñados
genéticamente para producir receptores en superficie de tipo CAR.
requiere de dos señales para la activación de linfocitos T. En la primera señal, los linfocitos T
CD8+ reconocen los péptidos presentados por el complejo mayor de histocompatibilidad tipo
I (MHC-I) en la superficie de células cancerosas a través del receptor de linfocitos T (TCR).
La segunda señal, conocida como “señal coestimuladora” completa la activación de linfocitos
T primarios, que se logra mediante la unión del receptor CD28 coestimulador de linfocitos T
con los ligandos coestimulantes en células presentadoras de antígeno (APC): B7-1, B7-2 y
PD-L134. Esto conduce a la fase de señalización descendente y activación de linfocitos T,
por mayor diferenciación en CTL. Cabe destacar que los linfocitos T CD8+ requieren una
tercera señal, junto al antígeno y la coestimulación, para generar una respuesta productiva y
evitar la inducción de muerte o tolerancia. Tras la activación, los CTL expresan receptores
inhibitorios, CTLA-4 y PD-1 que funcionan como puntos de control inmunitarios. En
condiciones normales, la unión de CTLA-4 con B7-1/2 contrarresta los efectos
coestimulantes del CD28 en activación de células T, inhibiéndola. Los inhibidores del punto
de control inmunitario más comunes son: antígeno asociado a los linfocitos T citotóxicos 4
(CTLA-4) y muerte programada 1 (PD-1), este último interacciona con el ligando de muerte
programada 1 (PD-L1) en APC o células tumorales.
POSICIONAMIENTO DE LA INMUNOTERAPIA: DE LA MONOTERAPIA A LA
COMBINACIÓN
El uso combinado de anticuerpos para bloquear PD1/PDL1 y CTLA-4 tiene como
racionalidad que ambas señales se involucran en etapas diferentes de la actividad linfocitaria.
CTLA-4 funciona regulando la activación de las células T en el ganglio linfático, mientras
que PD-1 juega su papel regulador principalmente en los tejidos periféricos. Por tanto, esta
combinación permite bloquear señales inhibitorias de la respuesta inmune en diferentes
partes o puntos del ciclo de la inmunidad del cáncer, favoreciendo la infiltración de células T
en el tumor y promoviendo la actividad citotóxica de las células T antitumorales. La terapia
dual anti CTLA-4/PD-1 modifica el microambiente de un tumor supresor o relativamente no
inflamatorio a un tumor inflamatorio. Este efecto dual de los dos agentes permite que se
ejerzan mecanismos complementarios y no redundantes con el objetivo de aumentar la tasa
de respuesta. En la actualidad, los agentes de mayor trascendencia clínica son aquellos que
bloquean puntos de control de la inmunidad, como el ipilimumab (anti-CTLA-4), el
inmunoterapia. Dos importantes hechos confirman el rol del microbiota y la regulación del
sistema inmune ligado al control del cáncer: primero, la influencia de los antibióticos sobre la
efectividad de la inmunoterapia; segundo, el trasplante de microbiota fecal con Akkermansia
muciniphia aplicado a ratones con cáncer de pulmón de células no pequeñas incrementaría la
efectividad de la inmunoterapia. Lo anterior refleja la importancia de la microbiomata en la
regulación de la vigilancia inmunológica al cáncer y en la sensiblidad de los pacientes a la
inmunoterapia.
Identificación de blancos moleculares en el microambiente tumoral: Es reconocida la
influencia del microambiente tumoral inmunosupresor en la actividad inmune. Diferentes
tipos celulares del inmunocontexto en el microambiente tumoral contribuyen a la progresión
del cáncer, como es el caso de los macrófagos M2, los neutrófilos N2, las MDSCs, entre
otros. Recientemente un estudio clínico Fase I-b, demostró que el bloqueo de la señal
negativa mediada por la molécula CD47 en macrófagos incrementa la fagocitosis de células
tumorales, con resultados impresionantes en pacientes con linfoma de células grandes B
difuso y linfoma folicular, multitratados. Otra estrategia en desarrollo es el uso de inhibidores
farmacológicos de la enzima IDO en tumores. La actividad de esta enzima deprime o
disminuye la disponibilidad de triptófano e incrementa la liberación de la molécula kineurina,
ambas condiciones nocivas para la actividad linfocitaria (
Capítulo 3. Método
Se realizó una búsqueda bibliográfica entre los meses de Setiembre y Noviembre de 2021,
buscando principalmente tratamiento de inmunoterapia en cáncer y el papel de enfermería en la
inmunoterapia y el cáncer. Se utilizaron las siguientes bases de datos: Scielo, ScienceDirect,
Google Académico y Pubmed. Y los siguientes descriptores MeSH y DeCS: Inmunoterapia /
Immunotherapy, Sistema Inmunológico / Immune System, Cuidados de Enfermería / Nursing
Care, Enfermería/ Nursing, Cáncer/Cancer y Neoplasia/ Neoplasms. También se utilizó la web
de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Operacionalización de
x x x x
bibliografía
Consolidación de información x x x
Revisión de trabajo x x x x x
Presentación de trabajo X
Exposición x
Se realizó una revisión bibliográfica donde se muestra diferentes tipos de cáncer y el uso de la
inmunoterapia en ellos.
El primer artículo revisado habla sobre el cáncer de mama y el uso de la inmunoterapia en él. El
cáncer de mama no es considerado inmunogénico porque la mayoría de los subtipos tienen una
baja cantidad de linfocitos infiltrantes de tumores. Debido a ello, al principio no era considerado
para el tratamiento de la inmunoterapia. La evidencia sobre que esos linfocitos era un signo de
buen pronóstico y los estudios histológicos con estos tipos de cáncer hicieron cambiar la opinión
y empezar a utilizarse la inmunoterapia como tratamiento para este cáncer.
En el artículo se menciona un estudio en fase Ib, Keynote-012, donde se observan resultados
sobre la efectividad del uso de anticuerpos monoclonales en el cáncer de mama. Evaluaron la
seguridad y la eficacia del pembrolizumab en tumores sólidos avanzados.
En el estudio utilizaron una cohorte de 32 pacientes con cáncer de mama triple negativo (CMTN)
metastásicos tratados previamente con tratamientos convencionales y positivos a PD-1/PD-L1.
La positividad de PD-L1 se definió como la expresión de PD-L1 en las células tumorales mayor
o igual a un 1.
La tasa de respuesta objetiva (TRO) fue del 18,5%, la mediana de supervivencia global (SG) de
10,2 meses y la de supervivencia libre de progresión (SLP) de 1,9 meses. En la tasa de control de
la enfermedad (TCE) se incluyó la estabilización de la enfermedad y fue del 25,9%. Se consideró
que tres de cada cinco tenían un beneficio duradero a pembrolizumab. Las reacciones adversas
fueron leves y similares a los observados en otras cohortes.
En resumen, este estudio mostró que el pembrolizumab puede dar una respuesta duradera como
tratamiento único en mujeres con CMTN metastásico previamente tratado, con el 22% de
pacientes vivos a los 2 años del inicio del estudio.
En otro artículo se puede observar el uso de las citoquinas, un tipo de inmunoterapia. Hicieron
un estudio con la Interleucina II (IL-2) cuyos efectos dependen parcialmente de la dosis y el
momento de la administración. A dosis altas, la IL-2 promueve la actividad citolítica de las
células T efectoras CD8+ y de las Natural Killer (NK). También favorece la diferenciación de las
células CD4+ en las subclases T helper Th1 y Th2.
A dosis bajas de IL-2, parece expandir las poblaciones de Treg, probablemente por la mayor
afinidad que tiene por el receptor IL-2 trimérico (IL-2R), también denominado CD25 de estas
células y lo que hace es inhibir la formación de células Th17 implicadas en la autoinmunidad.
Cuando realizaron este estudio ya estaba disminuyendo el uso de citoquinas como el IL-2 por el
aumento de la utilización de los inhibidores de puntos de control, aun así, las citoquinas dieron
resultados objetivos y duraderos en una minoría de pacientes con melanoma y carcinoma renal.
El siguiente artículo se basó en la inmunoterapia a través de los virus oncolíticos, los cuáles
pueden diseñarse para infectar eficientemente a células cancerosas, para promover la
presentación de antígenos asociados a tumores y para activar señales de peligro haciendo que se
active el sistema inmune. Uno de los virus con los que más se está avanzando en el desarrollo
clínico es con el talimógeno laherparepvec (T-VEC), que utiliza un virus atenuado del virus de
herpes simple I. Este virus se ha estado utilizando y ha empezado a dar resultados favorables y
prometedores como tratamiento inmunoterápico del melanoma con recidiva local.
4.2 Discusión:
Las inmunoterapias, al ser tratamientos que estimulan las propias defensas del paciente con
cáncer, se han convertido en una alternativa real para enfrentar esta enfermedad. Estas técnicas
se están probando con éxito en distintos tumores. En este sentido, se están desarrollando ensayos
clínicos que se centran en diferentes enfoques terapéuticos sobre el sistema inmunológico.
Aunque en la actualidad, el porcentaje de pacientes que no responden y el número de pacientes
que presentan eventos adversos relacionados con el sistema inmunitario asociados con estos
tratamientos5 sigue siendo alta. Por lo tanto, los esfuerzos se centran en mejorar la eficacia del
tratamiento, haciéndolos más específicos o mediante uso de combinación de terapias o uso de
agentes específicos, dirigidos molecularmente. Actualmente, existen algunas terapias por
bloqueo de puntos de control que han comprobado ser efectivas contra el melanoma, cáncer de
pulmón de células pequeñas y no pequeñas, cáncer de cabeza y cuello, cáncer de mama triple
negativo, hepatocarcinoma, cáncer renal de células claras, cáncer de vejiga, tumores digestivos,
entre otros. Algunas de ellas son ipilimumab, que bloquea CTLA-4; pembrolizumab que bloquea
PD-1. O, Atezolizumab, bloquea PD-L1. Sin embargo, al ser un campo relativamente nuevo,
otros fármacos se van produciendo, van pasando las diferentes fases clínicas y llegan a ser
aprobados. Cabe mencionar que, dependiendo de la situación y aprobación oficial, los
tratamientos inmunoterapéuticos pueden ser usados solos, en combinación con otras
inmunoterapias o en combinación con algunos esquemas de quimioterapia citotóxica. Cuando
estos tratamientos son usados en adyuvancia, conceptualmente se busca eliminar la enfermedad
micrometastásica y así tener mayor sobrevida libre de recurrencia y sobrevida global. En casos
de enfermedad metastásica, ya existen protocolos en curso de neoadyuvancia de quimioterapia
citotóxica en combinación con inmunoterapia, los cuales están en fase de aprobación, buscando
mayor resecabilidad y sobrevida libre de recurrencia y global. En pacientes con cáncer avanzado
irresecable o que tienen metástasis se ha logrado aumento de sobrevida y calidad de vida,
muchas veces con resultados inesperadamente favorables. En conjunto, todos los datos
recopilados nos permiten sugerir a estas terapias como alternativa viable para ser utilizada, ya
sea por si solas o de manera complementaria. Sin embargo, en algunos casos se están
presentando indicaciones de ser tratamiento estándar, y ya no solo es considerado una
sugerencia, sobre todo si consideramos que algunas secuencias de terapias en cáncer basadas en
evidencia las incluyen en primera línea de tratamiento. Sin embargo, los costos siguen siendo
elevados, sobre todo si consideramos el costo beneficio final donde muchos de estos fármacos
son específicos no solo para el tipo de tumor, sino que, para variaciones específicas de cada
tumor, como para utilizarlos masivamente o para ser considerados como tratamiento de primera
línea en algunos tipos de neoplasias. Ante esto, se hace imperativo generar nuevos proyectos de
investigación que asocien ciencia básica, aplicada y estudios clínicos en inmunoterapia y cáncer,
formando equipos multidisciplinarios y generando colaboraciones inter e intrainstitucionales,
para resolver estas temáticas, y generar una disminución sustentable de los costos, privados y
públicos de estos tratamientos.
Capítulo 5. Conclusiones
Referencias
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