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Martha C.
Paidós
1 Nussbaum

7humanidad
Una defensa clásica de la reforma
en la educación liberal .

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EL CULTIVO DE LA HUMANIDAD EL AUTOEXAMEN E N SÓCRATES

frontación de intereses desinformados. Es porque compartimos con mo, la voz de los padres, de los amigos o de la moda. Es así porque es-
Sócrates una concepción más rica de la deliberación democrática tas personas nunca se han detenido a preguntarse a favor de qué están
-la que los Padres Fundadores obtuvieron de sus propias lecturas de realmente y qué están dispuestos a defender por sí mismos como algo
las antiguas fuentes griegas- que necesitamos tomarnos a pecho la propio. Son como instrumentos en los que la moda y el hábito tocan
exigencia de Sócrates. sus melodías, o como máscaras teatrales por donde habla la voz de un
actor. Los estoicos sostienen, junto con Sócrates, que esa vida no es
digna de la humanidad que hay en ellos, ni de la capacidad del pensa-
EL SOCRATISMO Y LA EDUCACIÓN LIBERAL: LOS ESTOICOS miento y de la opción moral que todos poseen.
Según los estoicos, la argumentación crítica conduce al poder in-
Sócrates describió «la vida examinada))como el objetivo educacio- telectual y a la libertad -por sí misma una notable transformación
nal central para la democracia. Sin embargo, dejó pocas indicaciones del propio yo, si antes el yo había sido indolente y perezoso-, y tam-
respecto de cómo este abstracto ideal podría materializarse en los pro- bién a una modificación de las motivaciones y deseos del alumno.
gramas educacionales formales. Es a partir de los escritos de los estoi- Este planteamiento, en un inicio sorprendente, tiene fuerza persuasi-
cos griegos y, especialmente, de los estoicos romanos, que empeza- va e importancia política. Los estoicos observan que el poder de sen-
mos a ver las implicaciones curriculares del ejemplo de Sócrates. El timientos como la rabia, el temor y la envidia frecuentemente tornan
estoicismo surgió en el siglo 111 a.c., en Atenas; siguió ejerciendo una irracional la vida pública. Dichos sentimientos, sin embargo, no son
enorme influencia en Roma y Grecia, al menos hasta el siglo 11 de simplemente impulsos biológicos: tienen una estrecha relación con el
nuestra era.16Sus principales representantes incorporaron figuras de pensamiento. Una persona que se enfada con alguien cree que la otra
enorme influencia política, incluyendo a Séneca, que era regente y persona, de forma deliberada o culposa, ha cometido una falta grave.
tutor del joven Nerón, y por lo mismo quien efectivamente gobernó el Su ira depende de esa creencia. Si llega a creer que el supuesto cul-
Imperio Romano durante ese tiempo; y, más tarde, el emperador pable es realmente inocente, o que la llamada falta fue en verdad una
Marco Aurelio, quien con agudeza razonó que, dado que era posible acción involuntaria, se puede esperar como consecuencia que ceda
filosofar en cualquier parte, también deberia ser posible hacerlo en su enojo. La ira también cederá si la persona cambia su apreciación
un palacio. Como estos pensadores dejaron numerosos escritos, cosa sobre la importancia de la falta cometida, considerándola una cues-
que Sócrates no hizo, y como estuvieron activamente comprometidos tión trivial. El argumento racional no puede hacer nada respecto de
en el diseño de las instituciones educacionales y otras, podemos sa- las cosas que otras personas nos hacen; la indagación socrática no
ber por ellos bastante sobre la realización práctica de los objetivos puede evitar que me insulten o critiquen. Pero me puede hacer pen-
socráticos. De sus escritos proviene nuestra concepción moderna de sar mucho sobre la importancia que asigno a tales actos de descorte-
la educación liberal o, más bien, dos ideas distintas de educación sía y la evidencia en que baso mis inculpaciones; y esto en sí afecta
liberal, que ellos distinguieron cuidadosamente, pero nosotros no las emociones.
siempre. Por lo general, observan los estoicos, las ideas que subyacen en
La tarea central de la educación, argumentan los estoicos siguien- emociones como el miedo y la ira provienen de los hábitos y conven-
do a Sócrates, es enfrentar la pasividad del alumno, exigiendo que la cionalismo~del medio social. Así, un romano promedio es probable
mente se haga cargo de sus propios pensamientos. Muy a menudo, las que se enfade de verdad si su anfitrión lo sienta en un lugar inferior
decisiones y opiniones de la gente no son propias. Las palabras brotan en la mesa de la cena." Desafíe usted la obsesión cultural por estos
de sus bocas y las acciones de sus cuerpos, pero lo que expresan esas signos externos de posición social y habrá tocado efectivamente las
palabras y acciones puede ser la voz de la tradición o convencionalis- bases sobre las que esa persona sustenta su ira. Si esta persona llega-
ra a creer que su lugar en la mesa no es motivo para preocuparse, ha-

16. Sobre el período, véase A. A. Long, Hellenistic Philosophy, Londres, Duck-


worth, 1974 (trad. cast.: La filosofía helenistica, Madrid, Alianza, 2001). 17. Séneca, criticándose a sí mismo en Sobre la ira, 3, 36.

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brá un poco menos de enojo que encauzar socialmente. Los estoicos traen la conclusión de que este tipo de educación es de esencial im-
afirman que las personas que han hecho un examen crítico de lo que portancia para todo ser humano. Dado que también sostienen que
creen que de verdad importa serán mejores ciudadanos, mejores en esta educación tiene prerrequisitos tales como el dominio de la lectu-
sus emociones y en sus pensamientos. ra y escritura, capacidad lógica y matemática básicas, y una gran
En resumen, la razón Construye la personalidad de un modo muy cantidad de conocimiento sobre el mundo, tienden a considerarla
profundo, modelando sus motivaciones así como su lógica. La argu- como un tipo de educación superior y defienden el punto de vista de
mentación no sólo proporciona a los estudiantes razones para hacer que la educación superior es una parte esencial de la realización per-
esto y lo otro; también ayuda a hacer más probable que actúen de sonal de todo ser humano. Considerando este enfoque en los estudios
cierta manera, y por ciertos motivos. En este muy radical sentido, avanzados o «superiores»,podemos valernos de sus intuiciones para
produce personas que son responsables por sí mismas, personas cu- enriquecer el cuadro de la educación superior de nuestra propia so-
yos razonamientos y emociones están bajo su control. ciedad, aunque sin pasar por alto las notables diferencias entre su
Es dificil, dentro de una cultura tradicional, concebir una educa- época y la nuestra.
ción que promueva la libertad racional. Séneca pone atención en este Efectivamente, Estados Unidos ha seguido esta línea socrática/es-
problema en su famosa carta sobre la educación liberal. La carta está toica más cabalmente que cualquier otra nación, y ha tratado de cons-
dirigida a su amigo y fiel corresponsal Lucilio, un político de edad truir una educación superior que combine la formación especializada
madura cuyas preguntas sobre diversos aspectos de la filosofía y de preprofesional con una educación liberal compartida por todos los es-
la vida dan pie a Séneca para desarrollar sus propios puntos de vista tudiantes. Las naciones de Europa no lo hacen de este modo. Los estu-
de una manera íntima y detallada, al tiempo que se embarca en el in- diantes en Europa entran en la universidad para estudiar una materia,
tercambio de argumentos. Lucilio ha pedido su opinión a Séneca so- sea derecho, medicina, filosofía, historia, quimica o los clásicos. No
bre los «estudios liberalesa tradicionales o studia liberalia. Ésta era existe el concepto, en los currículos europeos, de un núcleo de estudios
una educación por asimilación cultural de los valores y costumbres comunes que sea esencial para una vida provechosa de todas y cada
tradicionales de las clases superiores romanas; incluía gramática, una de las personas.
música y poesia, algo de matemática y ciencia, y también el uso de la Los griegos y los romanos tenían un ideal noble, que no siempre
retórica en la vida pública, todo enseñado de un modo que enfatiza- concretaron en la práctica. Sócrates dice que él interroga a «todosm
ba la asimilación incondicional de la tradición. La palabra liberalis los que encuentra, pero es sólo en su imagen mental de la vida en el
en esa locución tradicional significaba «apropiado para el caballero otro mundo que puede interrogar a las mujeres. Filósofos posteriores
nacido libre». Séneca comienza su carta anunciando que pondrá en ampliaron el alcance de este <todos»,dando instrucción a las muje-
tela de juicio la interpretación del término. Puesto que el único tipo res e incluso, en el caso de los estoicos romanos, argumentando a fa-
de educación que realmente merece el nombre de liberalis o, como li- vor de una igual educación para ellas. La ampliación de la educación
teralmente podríamos traducir, «libre»,es la que hace a sus alumnos a las mujeres, y también a los esclavos y los pobres, fue consecuencia
libres, capaces de hacerse cargo de sus propios pensamientos y de directa de la noción socrática de la importancia de la educación para
desarrollar un examen crítico de las normas y tradiciones de la socie- todos los seres humanos, combinada con el reconocimiento de un sim-
dad. Luego, procede a examinar esta noción. Combinando lo expues- ple hecho: que estas personas también son seres humanos, dignos de
to aquí con material tomado de los escritos estoicos, podemos resu- respeto y de atenciÓn.l8
mir la educación socrática en cinco enunciados. En nuestra propia sociedad, el noble ideal de que la educación so-
crática es para todos no se ha realizado completamente en la práctica.
1 . La educación socrática es para todos los seres humanos. De la Debemos recordar cuántas personas estaban excluidas de los benefi-
idea socrática de que para un ser humano no vale la pena vivir la vida
sin examen, junto con la propia creencia de que un cierto tipo de edu-
cación crítica y filosófica es necesario y (bien administrado) sufi- 18. Vease al estoico romano Musonio Rufo: *Que las mujeres también debieran
ciente para una vida examinada al modo socrático, los estoicos ex- hacer filosofía..

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cios de la educación superior hasta hace muy poco. En la actualidad que ese alumno alcance la introspección y la libertad intelectual.
nuestras facultades tratan de cumplir con la misión socrática origi- Para esto, Sócrates interroga a las personas una por una. Los estoi-
nal, cuestionando realmente a todos y reconociendo la humanidad de cos, preocupados por hacer extensiva la educación a todos, no siem-
todos. Estados Unidos tieRe una proporción de ciudadanos inscritos pre son capaces de llevarlo a cabo. Sin embargo, insisten en que la
en las escuelas superiores mayor que la de cualquier otra nación (si instrucción individualizada siempre es, en principio, el objetivo. La
bien muchas otras naciones subvencionan en mayor medida la edu- educación es para el alma lo que es el arte de la medicina para el
cación superior para los estudiantes calificados). No es sorprendente cuerpo. Así como los mCdicos se desempeñan bien sólo si son sensi-
que esta simple idea haya generado tantos cambios y muchas exigen- bles a las verdaderas condiciones y síntomas de sus pacientes, lo mis-
cias de otros nuevos. mo ocurre con el profesor. Esto lo demuestran en la práctica de mu-
Existe una estrecha conexión entre la concepción de lo que impli- chas maneras; entre ellas, rehusar recomendar un currículo universal
ca la educación liberal y la conclusión de que debe extenderse a to- y escribir trabajos filosóficos que ilustran la atención socrática a la
dos los ciudadanos. Puesto que si la educación superior se concibiera situación particular del estudiante.
como la llamada de unos pocos elegidos a una vida de contemplación En debates recientes sobre la educación superior, la tendencia ha
teórica - c o m o a veces se concibe, y lo hace Platón, por ejemplo-, sido preguntar si un currículo de «obras maestras» o ciertos tipos de
sería imposible, como de hecho argumenta Platón, extenderla. Ten- requisitos y ordenamientos esenciales son, en general, cosas buenas.
dríamos que buscar una élite con especiales poderes mentales, y sólo Muy rara vez alguien pregunta sobre las circunstancias y el historial
ella sería admitida en el currículo superior. En realidad, tratar de ad- de los estudiantes para quienes se diseñan los requisitos. Si pensa-
mitir a todos de esta forma de estudio conduciría a grandes proble- mos en una meta general compartida, pero, como los estoicos, reco-
mas sociales, porque la vida contemplativa, tal como Platón la imagi- nocemos que nuestros estudiantes se dirigen hacia ella desde muchos
na, no es compatible con una activa dedicación cotidiana a las tareas y distintos puntos de partida, naturalmente concluiremos que se re-
políticas y familiares. Porque entonces ¿quién quedaría para ocupar- quieren muchos y diferentes enfoques curriculares.
se de las cosas prácticas de la vida? De modo que la idea de Platón 3. La educación socrática debe ser pluralista, es decir, atenta a una
sobre la contemplación implica elitismo político en más de un senti- diversidad de normas y tradiciones. No hay una manera más eficaz de
do. La concepción socrática/estoica, en cambio, apoya la democracia despertar a los alumnos que enfrentarlos a modos diferentes de hacer
y a la vez es apoyada por ésta. La educación superior puede generali- las cosas en un área donde ellos creían que sus propios procedimien-
zarse porque es el desarrollo de los poderes de razonamiento práctico tos eran neutrales, necesarios y naturales. Explorar el modo en que
que cree atributo de todos los ciudadanos; y puesto que está íntima- otra sociedad ha organizado los asuntos del bienestar humano, o de
mente relacionada con la ciudadanía y la familia, su generalización género, o de raza y religión, hará que el alumno vea que otras perso-
no amenaza, sino que promete fortalecer la comunidad política demo- nas de sociedades viables han hecho las cosas de modo muy diferen-
crática.lg te. En nuestro complejo mundo, la indagación socrática impone el
2 . La educación socrática debe adaptarse a las circunstancias y al pluralismo.
contexto del alumno. Si se entiende la educación de Forma socrática Hay un temor extendido -reflejado, por ejemplo, en el argumento
como el hacer aflorar la actividad del alma de cada uno, resulta na- de Allan Bloom en The Closing of the American Mind- de que someter
tural concluir, al igual que lo hizo Sócrates, que la educación debe a juicio crítico las propias tradiciones automáticamente acarreará una
ser muy personal. Debe preocuparse de la situación real del alumno, forma de relativismo cultural según la cual todas las formas de vida
del estado de sus conocimientos y creencias, de los obstáculos para son igualmente buenas para los seres humanos, con lo cual se debilita
la fidelidad hacia la propia. Éste fue también el profundo temor que
19. No todos los estoicos eran demócratas, aunque el estoicismo romano estaba a llevó a los atenienses á acusar a Sócrates de corrupción de los jóvenes,
menudo asociado con los movimientos republicanos y antiimperialistas, y las ideas es- y que llevó a Aristófanes a vincularlo con el ataque al padre. Pero, na-
toicas de libertad han sido invocadas en la historia en justificación de actos antiimpe- turalmente, no es lo que el examen socrático implica. Más bien, im-
rialistas, tambiCn en la revolución de Estados Unidos. plica que debemos adherir a aquello que podamos defender racional-

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mente, y estar dispuestos a descubrir que ello puede o no calzar con vidar la actividad de la mente, que es el objetivo real de la educación,
la idea que tenfamos cuando comenzamos nuestro examen. Los es- enseñtindoles a confiar pasivamente en la palabra escrita. Tales alum-
".
toicos afirmaban que había una sola imagen de vida humana fructí- nos, habiendo asimilado un montón de material que culturalmente
hera que la razón podía defender como válida para todos los seres hu- lleva el signo de autoridad, podrían llegar a creer que son muy sabios.
manos de cualquier epoca y lugar. En la actualidad, muchas personas Y esta arrogancia socava todavía más las motivaciones que pueden
que reflexionan sobre la justicia internacional creen, del mismo llevar a la búsqueda verdadera. Este tipo de personas tienen incluso
modo, que ciertas normas de bienestar humano y respeto de los de- menos probabilidades que la gente ignorante de buscar por sí mismas
rechos resistirán el examen crítico en todas partes. La confrontación argumentos a favor y en contra de la manera en que su cultura hace
con lo diferente de ninguna manera supone que no existan estánda- las cosas. Por lo tanto, los libros, en educación, deben usarse para de-
res morales interculturales y que las únicas normas sean aquellas es- salentar este tipo de reverencia y pasividad.
tablecidas por cada tradición local. Si Bloom y otros piensan que las Además, los libros carecen de la capacidad de atención y sensibili-
tradiciones norteamericanas son tan frágiles que el mero conocimien- dad de la actividad filosófica real (la que, como recordamos. respeta
to de otras formas motivará a los jóvenes a apartarse de ellas, ¿por qué las circunstancias y el contexto particulares del alumno). Los libros
se obstinan en avalar y apuntalar estas frágiles tradiciones? Lo bueno .dan vueltas. por ahí con una suerte de rígida monotonía, dirigidn-
de nuestras tradiciones sobrevivird al escrutinio de la argumentación dose a personas muy diferentes siempre del mismo modo.'O La con-
socraitica. clusión, una vez mas, es que los libros, aunque valiosos como recor-
4. Lo educación socráiica requiere garantizar que los libros no se datorio~de la argumentación, puede ser dañinos si se usan como
transformen en autoridades. Es una ironía de las «guerras cultural es^ autoridades.
contemporáneas que los griegos sean frecuentemente sacados a la Los estoicos desarrollan el mismo punto mediante imagenes muy
luz como heroes en los currículos de (cobras maestras)) propuestos vividas. Epicteto cuenta la historia de una persona joven que va a él
por muchos conservadores, ya que en ninguna otra cosa los filósofos jactándose de que finalmente memorizó al dedillo los contenidos del
griegos fueron mais elocuentes y unanimes que en las limitaciones de tratado de Crisipo sobre los problemas 16gicos. Epicteto le dice que
tales currículos. La antigua cultura ateniense descrita por Aristófa- parece un atleta que llega diciendo jubilosamente: ((Mirad.tengo un
nes favoreciá una idea de la educación como asimilación cultural de nuevo conjunto de pesas de entrenamiento en mi habitación)>.Esta
los valores tradicionales. Esta educación se basaba en los textos ca- persona, prosigue. no obtendrá como respuesta: .Magnífico, lo has lo-
nónicos, que tenían autoridad moral. Los jóvenes que marchaban a grado)). La respuesta que recibirá es: rQu6 bien, muéstrame lo que
las esfuelas en fila cantando rAtenea, temible saqueadora de ciuda- puedes hacer con tus pesas,,, Así tambien con el estudiante: muestra
des%aprendieron bastante rápido que asimilar estas palabras e ideas que puedes usar lo que lees para pensar bien y para asumir tu propio
consagradas por el tiempo era el objetivo de su educación y que el ra~onamiento.~'
cuestionamiento crítico acarreaba una inmediata desaprobación. Pero Sdneca desarrolla aún mas la idea en una carta, previniendo al
fue precisamente contra esta idea de internalización incondicional alumno de confiar en la sabiduría contenida en los rlibros importan-
que la tradición filosófica se rebeló, clavando su estandarte en el tes» como si heran autoridades:
campo del razonamiento activo.
Sócrates no escribió nada. Si hemos de creer el relato de sus razo- *Estoes b que Zenón dijo.. Pem ¿que dices tú? &ta es la visidn de
nes en el Fedro de Plafón, el motivo de que no lo hiciera era que creía C1eantes.x ¿Cuál es la tuya? ¿Hasta cudndo seguirás marchando bajo las
que los libros podrían h s t a r la labor de un entendimiento crítico drdenes de otra persona? Toma el mando y di algo notable por ti mis-
activo, produciendo un alumno que tiene un nfalso concepto de la'sa- mo... Una cosa es recordar, otra saber. Recordar es guardar algo confia-
bidurían. Los libros no estan ((vivosn.En el mejor de los casos, son do a la memoria. oero saber es hacer propia cada cosa. no depender del
simples recordatorios de la excelencia del pensamiento, pero cierta-
mente no pueden pensar. A menudo. sin embargo. su prestigio resul-
20. Platón, Fedro, 275A-E.
ta tan grande que en verdad adormecen a los alumnos y les hacen ol- 21. Epicteto, Discursos,1, 4, 13-17.

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texto y siempre recordar al profesor. «Zen6n dijo esto, Cleantes dijo


esto.» Deja que haya una distancia entre tú y el 1ibroaz2

Ni Séneca ni Epicteto rechazan el texto escrito. La analogía de los No habremos engendrado ciudadanos verdaderamente libres en el
libros con las pesas tiene su lado positivo. Los libros, incluyendo al- sentido socrático a menos que formemos personas capaces de razo-
gunos de los grandes textos del pasado cultural propio, pueden en nar por sí mismas y argumentar correctamente. capaces de entender
efecto tonificar una mente perezosa, proporcionAndole la informa- la diferencia entre un razonamiento con validez lógica y otro lógica-
ción que necesita para razonar bien, así como ejemplos de una buena mente débil, de distinguir entre la estructura lógica de un discurso y
argumentación. El dominio de la lectura y escritura, incluyendo el. la verdad de sus prernisas. El razonamiento lógico, tal como el uso de la
conocimiento de textos culturales, confiere Fuerza e i n d e ~ e n d e n c i a , ~ ~ lengua materna, llega naturalmente a los seres humanos; sin duda
si se lo ve como una especie de preparación y nutrimento básicos, no forma parte de los medios para sobrevivir. El trabajo con niños pe-
como la meta en sí. Trabajar con los argumentos contenidos en las queños ha demostrado reiteradamente que. a través del uso de ejem-
obras maestras puede hacer más aguda la mente, más rigurosa, más plos simples, pueden dominar sin dificultad los elementos básicos de
activa. Esto garantiza que la mente cotejará un amplio abanico de la lógica. Pero, al igual que con el dominio de la lengua materna,
opciones sobre las cuestiones importantes, y las cotejará de una ma- para ello se requieren profesores, y en muy diversos niveles de la edu-
nera desafiante, incluso allí donde la cultura popular es difusa y su- cación. La mayoría de los estudiantes no detecta de inmediato las fa-
perficial. Todo esto, que ya lo sabían los estoicos, es más importante lacias del razonamiento en un texto complejo, y tampoco en una dis-
aún para nuestro tiempo. cusión politica escuchada en televisión. Por lo general, las personas
Pero el lado negativo de la imagen de Epicteto también es simple: arrastran una gran cantidad de material acumulado sin criterio algu-
es muy probable que los libros se conviertan en objetos de venera- no, creencias cuya coherencia lógica jamás han examinado, e infe-
ción y respeto, y que acaben instalándose en la mente sin fortalecer- rencia~cuya validez nunca han puesto a prueba.
la. Es más probable todavía que esto suceda si se los presenta como Ésta, de hecho, h e la contribución central que Sócrates consideró
autoridades culturales, como en los programas titulados «Civiliza- estar haciendo a la democracia. Si nuestro único punto de partida es
ción occidental» o «Las obras maestras». Si usáramos un título a lo lo que las personas creen, jcómo progresaremos? Pues haciendo que
Séneca, algunos libros útiles y sustanciosos que pueden ayudarle a las personas clarifiquen ordenadamente lo que creen que saben para
pensar por sí mismo,, o, siguiendo la idea de Epicteto, «Pesas de en- poner a prueba la solidez de sus creencias y la validez de sus inferen-
trenamiento para la menten, entonces estaríamos en buen camino. cias, del mismo modo que Polemarco progresó al advertir que las
Todos los interesados se darían cuenta de que no existe sustituto del creencias que compartía con su padre no eran coherentes. Al leer la
pensar las cosas a fondo, y ya no persistirá la esperanza de una solu- República, los estudiantes deberían ver cómo Sócrates declara a
ción rápida para problemas complicados. Y veríamos la verdad con Polemarco culpable de incoherencia, pero al mismo tiempo deberían
que finaliza la carta de Séneca sobre los fines de la educación liberal: preguntarse si Sócrates está argumentando bien y si sus conclusiones
que vivimos en un mundo desordenado, desconcertante y complica- realmente derivan de sus premisas. Ésta es la manera fundamental en
do, donde no existe nada que reemplace la activa búsqueda personal que Platón, en tanto escritor, supera el peligro de la pasividad inheren-
de cada cual. te a la palabra escrita: incitar al lector al análisis lógico y a la crítica.
El análisis lógico es central en la cultura política democrática.
Muchas veces, la causa de que obremos mal con los demás desde un
punto de vista político es un razonamiento viciado. Argumentamos
de la siguiente forma: ((Unagran proporcibn de los crímenes cometi-
22. Séneca, Carta 33. dos en mi comunidad es responsabilidad de gente de raza negra; aquí
23. Vease E. D. Hirsch, Jr.,Cultural Literacy, Boston, Houghton Mifflin, 1987, quien hay una persona negra; por lo tanto, es muy probable que sea un cri-
usa el término ualfabetizaci6n culturaln para denotar un domino basico de la inforrna-
ci6n cultural, que resulta ser necesario para descodificar otra inForrnaci6n.
m i n a l ~ «Todas
. las madres son mujeres. Esta persona es una mujer.
Por tanto, quedará embarazada y dejará el trabajo; en consecuencia,

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me conviene contratar a un hombre.» Naturalmente, son inferencias 6 tras decisiones más personales al dictado de nuestra fe y aprender a
inválidas; pero nosotros apensamos. de esta forma todo el tiempo. El d
análisis lógico disipa estas confusiones. Desenmascara el prejuicio
L
1 argumentar a la manera socrhtica con nuestros conciudadanos. Efec-
a tivamente, nuestra democracia difiere de muchas otras en su protec-
que se enmascara como razón. No utilizarlo significaría desperdiciar ción de las opiniones religiosas privadas y la separación que establece
uno de los más poderosos instrumentos de que disponemos contra entre estas opciones y los debates contenciosos del ámbito público.
los abusos del poder político. Aunque la lógica no nos hará amarnos los NO es signo de falta de respeto hacia ninguna tradici6n religiosa pedir
unos a los otros, puede lograr que dejemos de aparentar que nuestra a sus miembros que usen en el ámbito público argumentos que pue-
intolerancia se sustenta en argumentos racionales. dan ser comprendidos por las personas de otras tradiciones, como
El análisis lógico, además, nos muestra sanos caminos para inte- tampoco es irrespetuoso alentar ese tipo de discusión en clase.
ractuar como ciudadanos. En lugar de argumentar y contraargumen- !i
Sin embargo, muy a menudo, los objetivos socráticos encuentran
tar, podemos intercambiar puntos de vista en forma crítica, exami- un tipo diferente de resistencia a los desafíos a la verdad y la razón
nando el razonamiento del otro. Billy Tucker encontró esclarecedor asociados con la teoría literaria posmoderna. Ni la lógica misma es
descubrir que uno podía pasar una semana entera pensando argu- inmune a los ataques. A menudo se plantea -y no lo hace s61o la
mentos en contra de la pena de muerte, la cual él aprobaba. Ello le gente intolerante o llena de prejuicios. sino también los adalides de
mostró una nueva forma de pensar en aquellos que sostenían una po- la igualdad entre las razas y los sexos- que el razonamiento lógico
sición contraria al respecto: no eran únicamente adversarios, eran no es para las mujeres ni para los afroamericanos. Algunos contrin-
personas pensantes, tal como él, y así llegó a entender sus puntos de cantes de Sócrates de ideas izquierdistas piensan que la lógica está
vista. Al mismo tiempo, llegó a advertir cuán diferente es el razona- muy bien en su lugar, pero que no sirve como instrumental crítico,
miento en muchos relatos periodísticos. Esta percepción lo hizo más aliada como está con las trincheras del poder. En ese sentido, no val-
cuidadoso. y esta nueva cautela alent6 a su vez un diálogo más h c - dría la pena perder el tiempo o poner esperanzas en ello. La mejor
tífero con quienes defendían un punto de vista opuesto al suyo. forma de refutar esta posición cínica, al igual que la de Trasímaco, es
La razón socrática no está libre de oposición en las actuales facul- mostrar lo que la razón puede hacer y ha hecho en la lucha por la in-
tades universitarias. De hecho, enfrenta dos tipos diferentes de anta- justicia, y señalar que si el juego es meramente de poder, el impoten-
gonismo. El primero es el propio de una oposición conservadora, te siempre perderá. La razón tiene una dignidad especial que se alza
conformada por quienes sospechan que la importancia que Sócrates por encima del juego de las fuerzas. y sólo en la medida en que se
concede a la discusión trastrocaría los valores tradicionales. Esta respeta la razón en una sociedad las minorías serán capaces de hacer
oposición es mhs fuerte fuera de las facultades que dentro de ellas, escuchar sus justas, pero impopulares, demandas. En la vívida ima-
pero también la podemos encontrar en algunas instituciones. Por gen de Platón, la razón es una suave cuerda dorada, en ocasiones
ejemplo, en Belmont, incluso la existencia separada del Departamen- movida por la cuerda de hierro de la avaricia, la envidia y el miedo
to de Filosofía fue en una época tema de controversia. Los estudiantes (al manejar la marioneta imaginaria que es el ser humano), pero que
que se especializaban en filosofía en Belmont debieron enfrentar el algunas veces prevalece, y que siempre brilla con una dignidad pro-
rechazo por su elección. .Humanismo secular%fue el término escogi- pia. Es dificil imaginar cómo los falsos argumentos en contra de la
do por sus compañeros de estudios para expresar una desconfianza igualdad de las mujeres o de las minorías Ctnicas, religiosas o racia-
básica en la razón filosófica. queriendo implicar que quienquiera que les podrían ser desenmascarados sin un apoyo en la distinción entre
hubiese elegido filosofía con toda seguridad había abandonado ya su prejuicio y razón: tal desenmascaramiento será vano a menos que
fe cristiana. toda la comunidad democrática comparta esta distinción. El cinismo
Como los mismos estudiantes advirtieron, fue una conclusión equi- del tipo de Trasímaco es la mejor receta para que quienes carecen de
vocada. Cualesquiera que sean nuestras creencias religiosas persona- poder sigan siendo eprimidos.
les. todos somos ciudadanos de una democracia, y debemos deliberar Hay, sin embargo, otros contrincantes de Sócrates, también de iz-
juntos. La educación filosófica desempeña una valiosa función en quierdas, cuyo ataque a la lógica es más hierte aún: le imputan a las
este tipo de deliberación. No hay contradicción entre someter nues- formas centrales de la argumentación lógica no adecuarse a las men-

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tes de las mujeres, de las minorías o de los nos occidentales. Aun También deberíamos concordar en que los análisis modernos de la
cuando quienes sostienen estos puntos de vista en ocasiones desean verdad y del conocimiento ponen en tela de juicio una noción tradi-
negar una completa igualdad política a las minorías o a las mujeres, cional: específicamente, la idea de que podemos tener acceso al modo
su influencia en el mundo acadkmico obedece a que tales ideas apare- en que son las cosas en el universo, con total independencia del Eun-
cen envueltas en un halo progresista, como si no pudiéramos facilitar cionamiento de nuestras mentes. El trabajo técnico en la filosoffa de
el progreso de los grupos desaventajados a menos que reconozcamos el la mecánica cuántica y en la filosofía del lenguaje ha hecho que mu-
«hecho» de que la lógica en sí es patriarcal o una herramienta de chos filósofos concuerden con Kant en pensar que el mundo es cog-
opresión colonial. Pero no respetamos la humanidad de ningún ser noscible para los seres humanos, y verdaderamente descriptible por
humano a menos que asumamos que esa persona es capaz de com- ellos, sólo en la medida en que es configurado por nuestros concep-
prender los conceptos básicos de coherencia y validez, y las formas tos y nuestras facultades mentales. Incluso la observación parecería
básicas de inferencia. Subestimamos a esa persona como ser huma- estar cargada de teoría, al usar las categorías dominantes que deri-
no si no nos esforzamos en transformar en una realidad activa la po- van de nuestro propio esquema conceptual. (No todos los filósofos
tencialidad de esa persona para el pensamiento lógico. Típicamente, concuerdan en que estos puntos estén establecidos más allá de toda
semejantes críticas muestran ignorancia de las tradiciones lógicas de duda; algunos todavía defienden la tan atacada representación «rea-
los pueblos no occidentales y una actitud condescendiente hacia las listan.) En este punto encontramos enormes desacuerdos: algunos fi-
habilidades lógicas de las mujeres y de las minorías raciales.24No hay lósofos sostienen, al igual que Kant, que todavía podemos defender
ninguna evidencia sólida que respalde tales afirmaciones y es contra- un esquema conceptual único como el más adecuado a la realidad;
producente para los pensadores supuestamente progresistas hablar otros plantean que hay una pequeña cantidad de esquemas adecua-
como si la hubiera. dos, comandados por rigurosos criterios de realidad; y hay quienes
Pero ¿qué pasa con las metas del argumento lógico? Sócrates no adoptar un pluralismo más elástico todavía. Filósofos como Hilary
argumentaba sólo por diversión; tenía un proyecto: encontrar una ex- Putnam, Nelson Goodman, Donald Davidson, W. V. O. Quine y Richard
plicación que fuera objetiva, en el sentido de que no fuera sesgada ni Rorty adoptan distintas posiciones en este espectro.25Todos, con la
producto de prejuicios, y que pudiera resistir el examen crítico. Otro posible excepción de Rorty, todavía piensan que podemos establecer
postulado pernicioso formulado por los oponentes posmodernos de algunas afirmaciones como verdaderas mediante razonamientos
Sócrates es que los objetivos normales del argumento socrático, la que merecidamente reclaman para sí objetividad y libertad de pre-
verdad y la objetividad, no son alcanzables. La búsqueda de estos fi- juicios.
nes, suponen, no puede ser sino una máscara de una imposición del Además de todo esto, deberíamos estar de acuerdo en que uno de
poder o de intereses particulares. los factores que se debe considerar al evaluar una aseveración es la
Es importante separar lo que es plausible en estas ideas de lo que función que ha tenido el poder social y político en la configuración
es ingenuo y peligroso. Todos deberíamos estar de acuerdo en que las de los conceptos que ella contiene. Los filósofos ya citados, centrados
personas que afirman estar en la búsqueda de la verdad o razonando en el análisis del conocimiento científico y de la referencia lingüísti-
objetivamente (lo que en general interpretamos como libres de prejui- ca, no siempre han reflexionado lo suficiente sobre las influencias
cios ilegítimos) no siempre actúan así. A menudo, ya sea consciente o políticas en la búsqueda del conocimiento. Por ende, no siempre han
inconscientemente, bajo la apariencia de una búsqueda de la verdad, consagrado la atención necesaria al modo en que el deseo de un gru-
persiguen sus propios intereses o hacen valer la sabiduría adquirida po dominante de retener el poder puede formar parte de la articula-
de la costumbre, tal como Sócrates a menudo demostró al desenmas- ción misma de las categorías éticas y sociales bAsicas. Esto ya ha sido
carar pseudorrazonamientos. Esta imperfecta manera de indagar, sin captado por los personajes platónicos Trasímaco y Calicles, cuando
embargo, tiene escasa relación con la búsqueda de la verdad en sí. demostraron que los,grupos poderosos frecuentemente pueden defi-

24. Para un argumento relacionado, vtase Randall L. Kennedy, racial Critiques 25. Putnam y Davidson son los más cercanos a Kant; Quine y Goodman están en
of Legal Academian, Harvard Law Review, no 102, 1989, págs. 1.745-1.819. el medio y Rorty en el otro extremo.

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EL CULTIVO DE LA HUMANIDAD EL AUTOEXAMEN EN S ~ C R A T E S

nir las normas morales de forma que perpetúan su propia superiori- Lo que resulta profundamente pernicioso en el actual modo aca-
dad; definen «justicia»,por ejemplo, para incluir la obediencia al go- démico, por lo tanto, es la tendencia a descartar por completo la idea
bernante, de modo que el gobernado se mantenga en su lugar. Michel de la búsqueda de la verdad y la objetividad, como si tales objetivos
Foucault desarrolló más estas ideas. Aunque se podría discrepar en ya no pudieran guiarnos. Y no son nuevos estos ataques a la verdad:
muchos aspectos del trabajo de Foucault, desde su insuficiencia his- los encontramos; por ejemplo, en Trasímaco y en los antiguos escép-
tórica hasta su falta de claridad conceptual, hay en él valiosas per- ticos griego^.^' Pero son formas de sofismo cuya influencia estropea
cepciones acerca de la naturaleza de las cosas, y perdura como la la que, por otra parte, sería una prometedora travesía hacia las metas
única obra verdaderamente importante que se haya abierto camino socráticas en nuestras universidades. Los posmodernos no justifican
hacia la filosofía bajo el estandarte de «posmodernismo». de manera convincente sus conclusiones más extremas. Ni siquiera
Deberíamos, por lo tanto, estar de acuerdo con varias aseveracio- abordan los aspectos técnicos de la física y el lenguaje que todo estu-
nes importantes que los pensadores posmodernos han puesto recien- dio moderno de estas materias debe confrontar. Por esta razón, su in-
temente en el tapete. La búsqueda de la verdad es una actividad hu- fluencia ha sido relativamente superficial en filosofía, donde abun-
mana, llevada a cabo con facultades humanas en un mundo en que dan interpretaciones mucho más sutiles de estas materias. Lo que
los seres humanos luchan, a menudo codiciosamente, por el poder. Derrida plantea sobre la verdad simplemente carece de valor para al-
Sin embargo, no deberíamos concordar en que estos factores socavan guien que ha estado estudiando a Quine y Putnam y Davidson. No
el proyecto mismo de la búsqueda de la verdad y la objetividad. Las obstante, los posmodernos ejercen gran influencia en otras áreas de
concepciones de la tradición kantiana -y de sus modernos herede- las ciencias humanas (en parte porque su trabajo es comprensible,
ros, como Putnam, Quine y Davidson- no significan una agresión mientras que las obras técnicas de los filósofos suelen no serlo), lle-
radical a la verdad y la razón, sino una nueva articulación de estos vando a los estudiantes a pensar que los «iniciados»desdeñan a S6-
objetivos. El reconocimiento de las contribuciones del lenguaje y de crates y sus objetivos. Ésta es una razón adicional para insistir en
la mente humana quita toda validez a un tipo de empirismo ingenuo, que la filosofía constituye una parte importante del currículo de los
pero deja a Sócrates de pie. No necesitamos renunciar a la aspiración alumnos de pregrado: porque este campo proporciona una real capa-
a la verdad y la objetividad; sólo necesitamos concebir estas metas de cidad de discernir en los debates sobre otros temas, y desenmascara
un modo que admita mayores matices, tomando en cuenta el papel de modo verdaderamente socrático las pretensiones de las autorida-
formador de nuestras categorías. El mismo Sócrates no pretendió des de moda. Es socrático formular preguntas críticas sobre los méto-
verdades que trascendieran la experiencia humana y, sin embargo, dos y objetivos de Sócrates, y debemos continuar haciéndolo. Pero, a
sostuvo que la búsqueda de la verdad ética es esencial para la plena medida que lo hacemos, deberíamos seguir consagrados al ideal so-
humanidad. En la filosofía ética ha habido muchos otros intentos de crático de distinguir entre las cosas y encontrar una manera de pre-
delinear una búsqueda no trascendente de la verdad, entre ellos los sentarlas capaz de resistir el examen crítico.
de figuras como Kant y los pragmatistas norteamericanos.
El reconomiento del papel que cumplen el poder y los intereses en
la formación de los conceptos tampoco es razón suficiente para que
perdamos la esperanza de liberarnos de los prejuicios: tan sólo nos
advierte de la necesidad de discriminar entre los intereses legítimos y ¿De qué forma podría seguirse el ejemplo de Sócrates en los estu-
los ilegítimos, incluso mientras nos enfrentamos a otros aspectos de dios universitarios básicos del ámbito humanista? El componente más
una indagación conceptual. Esta discriminación hace la vida socráti- importante del aula socrática es, obviamente, el maestro. Ninguna
ca más complicada, pero en ningún sentido la torna imp~sible.'~
.
fórmula curricular podrá reemplazar la enseñanza estimulante e in-
27. VBase Martha C. Nussbaum. uskepticism About Practica1 Reason in Literature
26. Véase Louise B. Antony, ~ Q u i n as
e Feministr, en Louise B. Antony y Charlotte and the Law», Harward Law Review, no 107, 1994, págs. 714-744; y ~Sophistryabout
Witt (comps.), A Mind o f OneS Own: Feminist Essays on Reason and Objectivity, Boul- Conventions», en Lovek Knowledge: Essays in Philosophy and Literature, Nueva York,
der. Colorado, Westview Press, 1993. Oxford University Press, 1990, págs. 220-229.

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EL CULTIVO DE LA HUMANIDAD 67
E L AUTOEXAMEN EN S ~ C R A T E S
cisiva. r ~ c aen nuevas percepciones, capaz de despertar la mente. Y
un maestro dedicado puede aguijonear el pensamiento de los estu- . ~ n t o textos
s filosóficos impo'fantes. La base disciplinaria de tales
diantes en casi todos los marcos curriculares. La actividad socrfitica . ,: dsOs no debería desviarse demasiado de la filosofía. o se debilitará
puede darse en practicamente cualquier curso humanístico o de cien- : &;figor del tan importante para las virtudes socráticas de la
cias sociales, en relación con lecturas de muchos tipos. siempre que ..
mente.
el maestro tenga suficientes conocimientos sobre las características , m instituciones que tienen éxito en sus requerimientos de filoso-
particulares del cuerpo estudiantil a1 que deberá enseñar y procure m son aquellas que han estudiado muy bien las características de
desarrollar la capacidad de razonar de cada individiln. wSestudiantes. En Notre Dame, el cuerpo estudiantil es mayormen-
-
Aunque en principio cualquier curso de ciencias humanas podría te católico y muy bien preparado en lo acadkmico. Al igual que mu-
enseñar el razonamiento socrAtico. muchos no se enfocan de manera chas otras instituciones católicas, la universidad requiere dos semes-
intensiva en la argumentacidn crítica. Pero este enfoque, característi- tres de filosofía, ademhs de dos de teología. Este requisito deriva del
co del filósofo profesional. es necesario para enseñar a los estudian- he*e énfasis de la tradici6n católica en ser capaz de justificar con
tes cómo analizar los argumentos propios y los de otros. Debido a la razones las creencias religiosas y morales propias. El propósito ex-
gran importancia que tiene. para la ciudadanía y para la vida, la for- plícito de esos cursos -por ejemplo el dictado por el profesor Philip
mación de estudiantes capaces de pensar claramente y justificar sus ~ ~ i n.Ciencia
n , y valores humanosx- es producir católicos que no
puntos de vista. los cursos de filosofía desempeñan un papel vital en creen a ciegas, sino que pueden reflexionar sobre sus creencias y ra-
el currículo de las artes liberales en la universidad. Si la filosofía se zonar en torno a ellas con otros. incluidas las personas que difieren
presenta como una disciplina de elite. esotérica. preocupada por la en materia religiosa. Los cursos son variados, pero todos implican
notacidn formal y de asuntos de escaso interes humano evidente, no exigentes lecturas y se orientan en importante medida a la discusión
será capaz de cumplir esta función. Sin embargo, durante los últimos en clase y a la elaboración de artículos analíticos. E1 tamaño de la
veinte años. la filosofía profesional ha vuelto a centrarse cada vez clase raramente supera los veinte estudiantes. Estos expresan satis-
mas en los intereses humanos bbsicos que tuvo en la epoca de John facción respecto del modo en que las clases de Filosofía promueven
Dewey y de William ame s. Temas relacionados con la justicia y los objetivos más generales.
Otra institucibn muy diferente que se ha beneficiado del requisito
derechos, con el amor, el miedo y el dolor, con la 6tica médica. legal y
comercial. ya no estan en los márgenes de la profesión, sino en su de dos semestres de filosofla es Randolph-Macon, una universidad de
centro. La profesión esta una vez mbs, como S6crates, bajando la fi- tamaño mediano dedicada a las artes liberales. que difiere de Notre
losoffa desde los cielos a la tierra. Dame en varios aspectos: mayor diversidad religiosa. en alguna me-
Como ia filosofía suele ser intimidante para los estudiantes, que dida un promedio mas bajo de logros académicos previos, una mayor
piensan (como Billy Tucker) que es para una elite, no se puede espe- tendencia a centrarse en estudios semivocacionales preprofesionales
rar que opten por estos cursos por propia voluntad. En la mayoría menos vastos. Es muy probable que'estos estudiantes tomaran muy
de los casos, entonces. si una institución no confía en que sus estu- pocos cursos en las areas humanistas tradicionales y en las materias
diantes escogerfin dichos cursos por si mismos con el consejo de los de ciencias sociales si no hubiera obligatoriedad al respecto; mate-
docentes. se debería exigir a todos los estudiantes uno o varios cur- rias como comercio y ciencias inform6ticas los atraerían rnas. La ins-
sos de filosofia. Se puede hacer de distintas formas. Una podría ser titución se ha puesto como meta dar a estos estudiantes una educa-
que se exigiera directamente un curso de filosofía, ya sea escogido ción que no se centre en esos estrechos objetivos instrumentales, sino
dentro del currículo fijo de1 departamento o entre un grupo distinto que les dé algo que pueda impartir significado y disciplina a sus vi-
de cursos introductorios. Se podría, como se hace en Harvard, exigir das intelectuales de un modo general, enriquecikndolos como indivi-
un curso sobre arazonamiento moral*, que reúne a los docentes de duos y haciendo de ellos ciudadanos mejor informados. Su experien-
distintas disciplinas en una misión común. Tambien se podría in- cia ha sido que la fi6sofia. enseñada en pequeñas porciones de un
centivar el razonamiento y analisis filosófico en un curso basico de modo altamente socrático, desempeña un papel decisivo en el des-
humanidades, como, por ejemplo. uno dedicado a l a lectura de dis- pertar de estos estudiantes y en hacerlos responsables de su pensa-
miento y sus opciones. En estas clases, los estudiantes participan con

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EL CULTIVO DE LA HUMANIDAD 69
EL AUTOEXAMEN EN S ~ C R A T E S
gran interks. Debaten con emoción. por ejemplo, sobre el ataque a
los poetas en la República, relacionando los argumentos de Platón BU^ Tucker es el tipo de estudiante para quien Bentley ha diseña-
con temas como violencia y sexo en televisión y en las películas. Con requisito. Es muy inteligente, pero no tiene gran confianza en
posterioridad, un grupo mayor tom6 parte en una discusidn pública apacidad intelectual. Todavia vive con sus padres y sus puntos de
sobre el papel del amor dentro de una vida buena. tomando ejemplos a políticos dependen casi por completo de los de sus progenitores.
,
literarios y relacionándolos con sus vidas. Los mayores enemigos del .comunidady la prensa popular. Sin los cursos de filosofía obligato-
socratismo en Randolph-Macon son la indiferencia y el vocacionalis- , rio~,se habria concentrado en los cursos comerciales y dejado la acul-
mo (que estimula sólo el área hacia la que la persona se siente incli- h a x para otros. En el curso impartido por Krishna Mallick. típico
nada. descuidando otras materias). El requisito de los dos semestres entre los cursos que cumplen el requisito, los estudiantes comienzan
de filosofía y la dedicación de los docentes a cargo de los cursos sig- con varios diálogos de Platón, aprendiendo a pensar sobre los argu-
nifican al menos algún avance contra estos problemas. , mentos por medio del antilisis de los ejemplos que alli aparecen. Tuc-
La Universidad de Pittsburgh, que ofrece cursos de cuatro años, ker se ennisiasmó con el curso por e1 interés que despertaban en 4 es-
pertenece al sistema estatal de universidades, por lo que a menudo tas cuestiones, interfs que se intensificó al ver en clase una película
optan a ella estudiantes que viajan diariamente a la ciudad. La pre- mbre la vida y muerte de Sócrates. ¿Por qu6 rehusó Sbcrates escapar
paración y habilidades de estos estudiantes son muy variadas. La ins- de la prisi6n, cuando al hacerlo pudo haber salvado su vida? ¿Cómo
titución tambikn alberga uno de los departamentos de filosofía más vgumenta S6crates sobre nuestra obligación de obedecer La ley? Es-
notables de la nación, además de un programa igualmente extraordi- ? tas cosas lo atraparon, en parte por el activo estilo de enseñanza de
nario de historia y filosofía de la ciencia. El requisito de dos semes- Krishna Mallick, en parte por la manera en que ella había usado la pe-;
tres de filosofía. servido por una larga lista de pequeños cursos cen- . lfcula para dar vida a estos temas. Tucker lleg6 a ver todo esto c o m a
trados en la ktica y los valores, crea una experiencia de aprendizaje intemgantes sobre sí mismo y sobre su vida. algo que no habían lo;
común para los estudiantes y los pone en contacto con algunos de los grado los planteamientos de otros cursos obligatorios.
mejores maestros jóvenes de la nación (ya que muchos de los cursos El programa obligatorio de cursos de Harvard contiene un requisi;
son dictados por estudiantes graduados avanzados, que allí suelen to modificado de cursos de filosofía, materializado en un semestre d e
ser las estrellas de la generación siguiente en la profesión). Todos los rrazonamiento moral» y uno de ranáiisis social*. Los cursos de razof
involucrados parecen felices con la manera en que este requisito ha namiento moral fueron diseñados para hacer que los estudiantes pe#
evolucionado. Aunque los maestros expresan algo de frustación por saran socráticamente sobre temas Cticos y políticos centrales. S u s
la cantidad de trabajo de recuperación que necesitan hacer con sus propósitos son muy similares a los de Notre Dame. aunque de car6c-
alumnos en el ámbito de la expresión escrita, se sienten satisfechos ter secular: producir ciudadanos que puedan dar razones de lo que es--
de que están llegando a ellos lo bastante bien como para cumplir con cogen y pensar reflexivamente sobre polkmicas morales complejas.
el propósito socrático. Los estudiantes de Harvard están extremadamente bien preparados y
En el Bentley College, en Waltham, Massachusetts. una escuela tienden a un exceso de confianza. Una extraña combinación de arro-
comercial que no pretende proporcionar una educación general en gancia por estar en Harvard y temor de no pertenecer realmente a esa
las artes liberales, la administración ha decicido exigir filosofía a to- institución los hace renuentes a exponer su verdadero pensamiento en
dos los estudiantes por razones de ciudadanía y desarrollo mental ge- clase. Con frecuencia hacen frente al miedo recurriendo a una frágil
neral. Los estudiantes de Bentley tienen poca motivaci6n inicial para sofisticación, lo que dificulta descubrir en qué creen realmente. Parte
embarcarse en una educación liberal en el área humanista. Pero van de esta sofistificación bien puede ser una pose de relativismo cultural
a ser ciudadanos y votantes; por lo tanto, la institución juzga que ne- o posmodernismo, la que el maestro de razonamiento moral deberá
cesitan desarrollar la capacidad de razonar por sí mismos sobre asun- someter al examen s ~ r á t i c o .
tos importantes vinculados a la moral, la justicia y la ley. El requisito Muchos cursos del área se centran en los argumentos de los textos
de cumplir con cursos de filosofía tiene como fin alcanzar un buen históricos, aunque para cumplir el requisito los estudios históricos
razonamiento sobre esos temas. deben orientarse a desarrollar la capacidad de razonamiento socráti-
co. Otros investigan aspectos fundamentales de la teoría ktica, tales

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EL CULTIVO DE LA HUMANIDAD
EL AUTOEXAMEN EN SÓCRATES
como la naturaleza de la justicia. usando para ello textos históricos y
modernos. Unos pocos. finalmente, se centran en temas pol~micos miento. Un beneficio adicional de la exigencia de uno o mas cursos
contemporAneos, por ejemplo la etica mkdica. Todos estdn diseñados de filosofía, en efecto. es que dichos cursos proporcionan a los estu-
para involucrar activamente al estudiante en la elaboración y análisis diantes material que pueden usar para cuestionar los ataques al razo-
de argumentos y en la crítica de los argumentos de otros. Estos cur- namiento que encontrarán en otras partes del currículo humanista. Al
sos son dictados por un gmpo muy distinguido de docentes, inclui- involucrarse en un C U ~ S Ode filosofía. los estudiantes aprenderán
dos el fildsofo Thomas Scanlon. el teórico politico Michael Sandel, el c6mo pensar sobre lo que se les pide hacer, con una complejidad que
te6rico de la estetica y pensador polltico Stanley Cave11 y el filósofo y no siempre esta presente en los cursos ofrecidos por otros departa-
economista Amartya Sen. La desventaja del sistema de Harvard es mentos.
que las clases son muy numerosas: algunas tienen casi mil estudian-
tes. Por otra parte, los maestros suelen preocuparse mucho de la co- También se puede incorporar la reflexión filosófica a un curso o
municaei6n con los estudiantes y el programa está muy bien fundado, serie de cursos mas amplios del Area humanista, pero para tal efecto
de modo que las secciones de discusión dirigidas por los asistentes de es muy importante que participen filósofos en el diseño y enseñanza
los profesores no reúnen a m& de quince a veinte estudiantes. Al igual de estos cursos. Dos ejemplos prometedores de este tipo son el curso
que en Pittsburgh. los asistentes graduados son en sr un grupo muy modificado de tradiciones occidentales en la Universidad de Nevada
dedicado. los líderes de la siguiente generación en esta Area. en Reno, donde la filósofa Deborah Achtenberg ha conjugado la dis-
Todos estos cursos de las diversas instituciones combinan la ense- cusión filosófica (basada en Platón y otros autores antiguos) con lec-
ñanza de la argumentación socratica con temas morales de gran in- turas literarias e históricas; y el curso de humanidades relativamente
teres actual. mostrando a los estudiantes que el metodo socrático no nuevo de la Universidad de New Hampshire, donde la filósofa Char-'
es una herramienta esteril. sino que produce una diferencia en sus vi- lotte Witt ha trabajado junto a maestros de literatura y de historia de.
das. En las palabras con que Amartya s e n describe su objetivo: la ciencia para desarrollar una descripcidn del mundo antiguo que
aplica reflexión filosófica al estudio de la historia y la literatura, así
La palabra s0inscnta para filosofía d d y s a n a - tambien significa como a textos específicamente filosóficos. Ambos cursos esthn ade-.
'ver claramente*.La filosofía tiene mucho que ver con aclarar las cosas, cuadamente diseñados para un grupo numeroso de estudiantes con.
no por medio del conocimiento especializado. sino a travks del rarona- poca preparación en el área humanista. El diseño y la enseñanza d 8
miento. Es posible, por supuesto, ser maravillosamente lúcido y estar ambos son buenos, pero en cierto modo tienen la desventaja de im-
por completo equivocado. Sin embargo, la lucidez no ayuda a la super- partirse en clases demasiado numerosas, hecho que inhibe la discu-
"vencia de las creencias sin Fundamentos, las deducciones tontas, los sión y hace que sea dificil pedir suficientes trabajos escritos a los es-
prejuicios inhndados o la justificaci6n del sufrimiento innecesario. tudiantes.
Bueno, todo esto ya habla a favor de un razonamiento Iúcido, aun cuan- En St. Lawrence, una escuela de artes liberales con un buen nivel
do no resuelva todos nuestros problemas.28
de recursos, que atrae a grupos cada vez mayores de alumnos moti-
vados (el 70 % recibe ayuda financiera), el programa de Encuentros
El curso de razonamiento moral de Amartya Sen. que vincula el
estudio de diversas consideraciones sobre la racionalidad ética (en Culturales ha logrado incorporar la filosofía con un gran Cxito dentro
Aristóteles. Kant y los utiiitaristas, entre otros) con problemas urgen- de una variedad de cursos de pregrado en el área humanista, las cien-
tes de justicia social. ejemplifica estas ideas sobre el valor práctico de cias sociales y las ciencias naturales. El programa fue introducido,
la claridad. junto con un requisito de obligatoriedad de estudios no occidentales,
precisamente por esta raz6n. Puesto que el grupo de docentes que
Es muy probable que los estudiantes que siguen cursos de filoso-
fía se vean expuestos a ataques posmodernos a la verdad y el razona- maneja el programarrecibió una donación que apoyó amplios estu-
dios y un grupo de diwusi6n. todos han sido capaces de elaborar un
enfoque coordinado para la enseñanza del relativismo cultural, es de-
28. Amart~asen, en la coleccidn fotogrsfica de Steve Pyke, Philorophers, 2
. ed.,
Londres, zelda cheatle press, 1995. cir, el punto de vista según el cual cada grupo local debería ser el tri-
bunal de última instancia para sus propias prácticas morales. y para

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EL CULTIVO DE LA HUMANIDAD

el cual no hay modelos morales universales. Todos los cursos que tra- parte de la dedicación y conocimiento de los miembros de la facul-
tan temas interculturales se ven enriquecidos por el examen socráti- tad, y de la buena disposición del estudiante a aceptar consejos. Ade-
co de los valores relativistas con que los estudiantes suelen llegar al m a ~los
, procedimientos -socráticos en un cierto nivel- no garanti-
curso. Los alumnos enhentan difíciles materias vinculadas a la tole- zan de modo alguno una exposición cabal y rigurosa al filosofar
rancia a través de la reflexión sobre cómo deberíamos reaccionar ha- socráiti~o.Al dar a los estudiantes tanta independencia para pregun-
cia quienes son intolerantes; además, reflexionan sobre las diferen- tar e investigar desde el comienzo de su educación, a veces el sistema
cias entre la tolerancia y el relativismo, entre la aceptación de una termina por producir alumnos de último grado que, como conse-
práctica con la que se está en desacuerdo y la visión de que no exis- cuencia de su candidez y de la presión que sobre ellos ejercen sus pa-
ten criterios de evaluación moral que trasciendan a un grupo local. res, han caído presa de las modas intelectuales. y en realidad nunca
Los estudiantes de St. Lawrence son brillantes, pero relativamente han aprendido habitos rigurosos de indagación. Es mucho más difí-
poco motivados. La indagación socrática requiere trabajo para supe- cil hacer que estos estudiantes trabajen con ideas de una manera so-
rar su inercia. y lo ha logrado despertando el interés por la compara- crhtica de lo que sería trabajar con principiantes. Cuando se critican
ción y evaluación intercultural. He aquí un caso en que, sin curso de sus argumentos, tienden a reaccionar con resentimiento. como si la
filosofía obligatoria, la indagación socr6tica ha sido amplia y riguro- actividad de criticar un argumento fuera un ejercicio ilícito y un tan-
samente estimulada en muchos cursos. Las razones de este éxito son to pasado de moda. Algunas veces se ve a estos estudiantes en cursos
el enorme esfuerzo conjunto de los docentes y el dedicado liderazgo de filosofía,como el de ~Filosofiafeminista., que atraen a estudiantes
de sus dos coordinadores, Grant Cornwell. de Filosofía, y Eve Stod- ya fuertemente influenciados por los ataques al metodo argumentati-
dard, de Inglés. Sin embargo, no todos los estudiantes obtienen el be- vo. Estos estudiantes son una minoría. La mayor parte de los estu-+
neficio de este enfoque. diantes de Brown siguen una amplia variedad de cursos humanistas J$
Algunas facultades creen que pueden inculcar los valores socráti- de ciencias sociales, y una gran parte ha tenido al menos algún con*
cos a lo largo de todo el currículo, sin ningún tipo de curso obligato-
tacto con la filosofía. La mayoría de los estudiantes que no sigue%
rio. En ocasiones recomiendan que la acción de escoger uno mismo filosofía estdin en cursos en otras areas donde se enseña y respeta eL
SU propio currículo se convierta en escenario de actividad socrática,
razonamiento riguroso (como teoría política, estudios religiosos, eco-.
dado que dialogando con un orientador los estudiantes reflexionan nornía, historia y otros campos del hrea humanista). Sin embargo, n b
sobre sus metas y sobre los cursos que les permitirían alcanzarlas. deja de ser preocupante la posibilidad de que la opción de Brown por-
Tres instituciones han llevado a la práctica este enfoque, con mayor o la autonomía racional en la elección del currículo conduzca a una
menor éxito: el Grinnell College en Iowa, el Amherst College en Mas- ausencia de autonomía racional al terminar la educación de algunos
sachusetts y la Universidad de Brown en Providence, Rhode Island. estudiantes.
Todas están influidas por los fines estoicos del dominio de sí mismo
o de hacerse cargo de la propia vida por medio del razonamiento. No podemos ni deberíamos esperar producir una nación de estu-
(Ralph Waldo Emerson, que desarrolló sus propias ideas sobre la diantes que puedan escribir excelentes artículos sobre razonamien-
((confianza en si mismo. al reflexionar sobre los ideales estoicos, es tos socráticos, aunque esta es una meta que algunas instituciones si
una fuente capital en los programas de Brown.) Este enfoque funcio- pueden razonablemente proponerse. Creo que podemos producir una
na mejor con estudiantes muy bien preparados y docentes dedicados
nación llena de estudiantes como Billy Tucker, de Bentley, y como
a la enseñanza. Afortunadamente, estas tres instituciones cuentan con
muchos de los estudiantes semejantes a él en Reno y en St. Lawren-
esa combinación. Se requiere, además, un sistema de asesoría extre- ce, Harvard y Notre Dame; estudiantes que hasta cierto punto han
madamente bien apoyado y bien organizado. Todos los estudiantes
examinado socráticamente sus creencias y han llegado a dominar al-
de Brown estan asignados a un orientador que trabaja en conjunto
gunas t6cnicas que 6 s permitan llegar más lejos en ese camino, estu-
con un estudiante de último año; cada uno de estos equipos asesora
diantes cuyas creencias morales y políticas no son simplemente una
alrededor de diez estudiantes de prlmer año. en reuniones regulares función de los contenidos de 10s medios o de la presión que ejercen
que se realizan durante todo el año. El resultado depende en gran
sus compañeros, estudiantes que han aprendido a confiar en que sus

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14 EL CULTIVO DE LA HUMANIDAD

~rapiasmentes pueden afrontar las mas arduas materias tocantes a


la ciudadanía. Para producir esta independencia, necesitamos apo-
yams en la filosofía.
2
CAP~TULO
Mvhos, al igual que Sócrates. en una sociedad violenta que algu-
nnveces vuelca su ira en los intelectuales. Podemos estar aventudn-
danosen una nueva eta de antiintelectuales en la vida norteamerica-
pa, una era en que la furia del padre de Aristófanes es una fuerza
CIUDADANOS DEL MUNDO
demasiado real. Como respuesta, deberíamos defender el valor demo-
cd6m de la ciudadanía socratica y de los cursos en los que nuestros
estudiantes aprenden a razonar críticamente de un modo socrático.
Cuando alguien le preguntaba de dónde venía, él decía: .Soy
un ciudadano del mundo».
Debalarnos insistir, con Sócrates y los estoicos, en que al hacerlo DI~GENES LAERCIO,
nuestras universidades proporcionan un servicio democr6tico vital, Vida de Didgenes el Cínico
queen Reno, en South Bend y Waltham, al igual que en la antigua Ate-
nas, la vida no examinada amenaza las libertades democrdticas y la
vidaexaminada hace fuerte a una nación y libera la mente.
Anna había obtenido su especialización en ciencias políticas en
una gran universidad estatal del Medio Oeste de Estados Unidos. Tras
graduarse trabajó en el área comercial, donde obtuvo un prometedor
empleo en una importante empresa. Después de doce años, había al-
canzado un puesto de administración de nivel intermedio. Un día, su
empresa la asignó a una nueva oficina reciCn inaugurada en Pekín.'
¿Qué necesitaba saber y de qué modo su educación la preparó para
tener éxito en su nuevo papel? En un puesto de administración de ni-
vel intermedio, Anna trabaja con empleados chinos y norteamerica-
nos, de ambos sexos. Necesita saber qué piensan los chinos sobre el
trabajo (y no suponer que hay una sola postura al respecto); necesita
conocer el modo en que se forman los sistemas de cooperación y los
malentendidos que podrían surgir de las interacciones entre los tra-
bajadores chinos y los norteamericanos. Es importante conocer la
historia china actual, ya que las rupturas causadas por la Revolución
Cultural todavía moldean las actitudes de los trabajadores. Anna tam-
bién necesita sopesar su respuesta frente a la reciente política de im-
pulsar a las mujeres a volver al hogar, y frente a las practicas conco-
mitantes de despedir del trabajo primero a las mujeres. Esto significa
que ella debería saber algo sobre las relaciones de género en China,
tanto en la tradición de Confucio como en tiempos más recientes.
Probablemente sep? algo de los estudios académicos sobre la mujer
realizados en Estados Unidos, que han influido el movimiento de es-

1. Anna es una mujer que entreviste en China. He cambiado su nombre.

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