LAS PLANTAS ADAPTOGÉNAS

Las plantas adaptógenas son aquellas capaces de incrementar la resistencia del

cuerpo a las influencias adversas del estrés físico y emocional.
En otras palabras, las plantas adaptógenas ayudan a normalizar o “equilibrar” las
respuestas energéticas del cuerpo y ayudan a que pueda resistir situaciones de
estrés que normalmente afectarían el funcionamiento de forma negativa.
Las plantas adaptógenas no son sustancias estimulantes como la cafeína, guaraná o
efedrina. Las plantas adaptógenas ayudan al organismo a conseguir un balance
óptimo de las energías internas.
Por ejemplo, una sustancia adaptógena puede bajar la presión arterial si la persona
que la toma padece de presión alta. Pero, esa misma planta adaptógena también
podría subir la presión arterial si la persona que la toma padece de baja presión
arterial.
Es decir, las plantas adaptógenas “se adaptan” al organismo y lo conducen a un
estado más equilibrado.
Es por ello, que se dice que las plantas adaptógenas son “bidireccionales” porque
actúan en diferentes direcciones según sea la necesidad para lograr un equilibrio
interno.
Son muy recomendadas para ayudar a sobrellevar cualquier situación estresante como
por ejemplo sobrepeso, debilidad física, cansancio, estrés emocional, etc.
Plantas con propiedades adaptógenas
Ginseng
Hay 3 tipos principales de ginseng comercializados y cualquiera de ellos ofrece una
gran variedad de beneficios en común cuando son tomados en las cantidades
adecuadas.
Los tres tipos de Ginseng son Ginseng Americano, Ginseng Siberiano, y el más
conocido, Ginseng Coreano. Como plantas adaptógenas los ginsengs en general,
ayudan a mejor la tolerancia frente a diferentes aspectos del estrés sea mental,
físico, ambiental… etc. Regulan la síntesis y secreción de las hormonas
suprarrenales relacionados con las reacciones producidas por el estrés.
Aumentan la resistencia física durante el ejercicio además de su capacidad
adaptogenica. Varios estudios demuestran que el Ginseng aumenta los niveles en
sangre de los ácidos grasos libres, y ayuda a mantener niveles estables de glucosa
en sangre durante el ejercicio.
Schisandra Chinensis
Su acción adaptógena puede ayudar a mejorar el rendimiento físico y mental, aliviar
la fatiga y aumentar la fuerza.
Schisandra también se ha usado para normalizar la glicemia y la presión sanguínea.
Rhodiola Rosea
rhodiola-roseaRhodiola Rosea tiene efectos adaptogénicos que ayudan a combatir el
estrés, aumentar la resistencia a actividades físicas y mentales de alto desempeño
y tiene efecto antioxidante.
Mientras que el ginseng mejora la salida de ciertas hormonas de las glándulas
suprarenales, la rhodila actúa en varios neurotransmisores como la dopamina, la
norepinefrina y la serotonina.
Como planta adaptógena, para ayudar a soportar el estrés físico y el estrés
relacionado como enfermedades de hipertensión y baja protección inmunológica.
Maca
La maca ayuda a reforzar el sistema inmune, regular el equilibrio hormonal y
aumenta la capacidad cerebral, incidiendo de forma positiva en el estado general
del organismo.
Otras plantas adaptógenas
Raíz de Equinácea
Raíz de Withania = Ashwaganda
Raíz de Astrágalo
Raíz y corteza de Aralia
Planta entera de Andrographis paniculata
Planta entera de Hopea dichotoma
Planta entera Tulsi albahaca
Schisandra
Rodhiola
Eleutherococcus o ginseng siberiano
Genus epidemium
Hojas de moringa
Ginseng panax
Ortiga
Pau de arco
Tribulus terrestris
Jiaogulan o gymnostemma pentaphyllum
Mucuna pruriens
ALEXANDRA PROKOUDINE HIGIENISTA NATURÓPATA
Fuente José Torres